Resumen Quinto Drabble: Hace más de diez años, en un pilar de rocas, Zeff se encontró con un tritón muy pequeño, que al parecer había encallado como él y no sabía cómo bajar de ese lugar.
Universo: Alter Universe (Universo Alterno), no tanto, es uno donde Sanji no está en la tripulación.
Número de palabras: 815
Comunidades: Retos a la carta y Reto diario.
Número y Nombre del reto: 01. Caridad
Categoría: PG-13
Dedicado a: LunaPiesce, que exige un desarrollo más elaborado de los drabble anteriores… que explique porqué Sanji estaba maldito.
Drabble Final de “El pirata y el tritón”
“Bajo de él.
En las profundidades,
Jugaba la sirenita
Con perlas y corales,
En libertad
Muy lejos de su alcance…”
—La sirenita— Cri Cri
Cuando Sanji fue con la bruja lo último que le había pasado por la cabeza era que tenía que hacer un trueque por la vida del viejo, la bruja —que era una sirena— vivía hasta las oscuras aguas de las profundidades del mar, cuando Sanji llegó, ella ya lo estaba esperando y lejos de ser una fea mujer, era tan hermosa. De cabellos rubios y piel pálida, la cola era de un pez ángel y la mujer no se dejaba ver el rostro, se vio entusiasmada al ver llegar al tritón.
—Mi señora, soy Sanji— inclinó la cabeza, no tenía tiempo de agasajarla a como siempre lo hacía con sirenas o humanas, tenía que darse prisa y salvar a Zeff, le debía tanto— y vine aquí para buscar una cura para la enfermedad de mi viejo.
—Sí—la voz de la mujer era tan dulce y parecía casi cantar—, sabía que vendrías—dijo y sacó una botella pequeña color turquesa—, pero tengo que recibir un pago, lo que el humano tiene no es una enfermedad común a como los médicos humanos te han dicho.
—¿Y con qué te tengo que pagar?—Sanji se mostró perturbado, no tenía ni un beli, todo se había ido en los medicamentos de Zeff y lo último que tenían eran víveres.
—No te preocupes, querido—la bruja sonrió, haciéndole una señal con el dedo índice para que se acercara—, tú quieres demasiado a ese hombre y tienes cosas que pueden balancear el valor de la cura.
—Si lo tengo—Sanji se acercó y se mostró decidido—, te lo doy.
—¿Seguro?—la bruja comenzó a escribir con tinta dorada en el aire—No hay marcha atrás y tú vida estará en juego.
—Claro—el tritón se mostró decidido.
*“Por tú padre
Hambre,
Aquí le hizo tragar una púa de erizo de mar.
Por tú voz,
El destino más atroz,
Con otra espina, escribió unas letras y le hizo tragarlas con prontitud.
Y de ti,
Unas ansias de vivir~
La bruja puso su mano derecha en el pecho pálido del tritón, y notó que tenía un corazón lleno de valentía y de ilusiones. Le dio dolor hacer aquello, pero lo quería a su lado.
En dos semanas
Una lanza en llamas
Tu corazón sentirá
Pero es el amor,
Del que nunca sabrás~”
En esta parte, cogió una bola de musgo y lo metió en su pecho, justo alado del corazón, si el tritón no hubiese pedido por su padre adoptivo, quizás su destino fuera vivir, pero ahora lo tenía por siempre.
—Si hablas—dijo al terminar, dándole la botella—, morirás y vendrás como espuma hacia mí, tú estómago no resistirá mucho si no te alimentas bien, pero solo puedes comer unas bolas de musgo que no se encuentran en estas aguas, se encuentran en el sur, donde el clima es cálido.
Sanji la miró horrorizado, pero no podía reprocharle, se despidió con la mano derecha y se dirigió a la superficie.
.
.
.
Cuando Zeff despertó, lo último que vio de aquella pequeña berenjena fue el color dorado de sus cabellos y no supo más de él. Algo le decía que ya no lo volvería a ver.
—Estúpida berenjena—dijo en un susurro el cocinero—, tanto luchar por tu vida, para que te dejes morir por un vejete como yo.
.
.
.
Hace más de diez años, en un pilar de rocas, Zeff se encontró con un tritón muy pequeño, que al parecer había encallado como él y no sabía cómo bajar de ese lugar.
—¿De dónde vienes?—preguntó el hombre— ¿Y cómo terminaste aquí?
—Del North Blue—respondió el pequeño, con la voz débil—, venía en un barco que fue asaltado por piratas, pero una tormenta hizo que se hundiera.
—Tu nombre—ordenó, dándose cuenta de que el barco que se hundió era el mismo que había asaltado con su tripulación.
—Sanji…
Cuando los habían rescatado, Zeff había tenido problemas con los tripulantes del barco de rescate, querían al pequeño tritón y le estaban ofreciendo una enorme suma de beli si lo entregaba. Zeff se negó, tuvo que mentir diciendo que le pertenecía, sabía el destino de aquellas criaturas.
Cuando el pequeño pudo volver a nadar, este se reusó a abandonar a Zeff, alegando que no tenía familia y que él quería ser un cocinero, su mayor sueño era encontrar el All Blue, cosa que emocionó a Zeff internamente.
Diez años le cuidó a su manera, le enseñó a pelear con sus aletas y a cortejar a las damas.
Pero ahora, viendo las oscuras aguas que reflejaban la noche, el mar lloraba junto con él, la pequeña berenjena había muerto.