Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Volverte a ver por NekoShiro2

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pos... disfruten la lectura y disculpen si tarde mucho, ojalá y les guste :3 

Después de prácticamente insultar a medio mundo en el bar, logré calmarme un poco para poder trabajar tranquilo y no desquitarme con los clientes. Kiri esa noche notando lo furioso que estaba ni siquiera consideraba preguntarme para sacar a los beodos, sin embargo, una que otra vez me ofrecí a hacerlo cuando notaba que alguno de mis compañeros tenía problemas, no por ser amable con ellos, sino para desahogarme un poco las frustraciones y mantener la paz en el lugar ya que me alteraba el hecho de que esos malditos borrachos hicieran un escándalo innecesario. En sí, aún no había tomado una decisión de qué hacer, en el trabajo Aiden se mostraba distante y sólo me dirigía palabras u oraciones cortas cuando era realmente necesario, yo intentaba hablar con él pero no lograba llegar a ningún lado, incluso creo que empeoré las cosas ya que en las últimas dos semanas ni siquiera se había presentado diciéndole al jefe que estaba enfermo. Mr. Krader empezó a sospechar a partir del cuarto día y me preguntó si había sucedido algo, pero no podía contarle la historia, simplemente le dije que hubieron un par de inconvenientes. La verdad es que lo extrañaba, era bastante diferente ir a trabajar y que Aiden no estuviera ahí, tratando de conversar e interrumpir mi trabajo, haciendo nuestras tontas escenas o incluso esos momentos en los descansos que nos tirábamos en el piso de la trastienda mirando las calcomanías fosforescentes que él me había obligado a pegar en el techo. Por otro lado, también estaba Dominic, quien no dejaba de enviarme mensajes desde el último accidente, del que por poco logré escapar diciéndole que tenía que comprar algo y pase la noche en una banca del parque, esperando a que sean las diez de la mañana suponiendo que él se había rendido y decidido a ir a casa, y así fue, como siempre dejó una de sus clásicas notas pegada en la puerta, sólo que esta vez era más sencilla y sólo decía “Lo lamento mucho, otra vez. Dominic R.” Pero desde entonces me traía loco, todo el día y toda la noche pensando en él, en su sonrisa infantil, en sus bellos ojos, en su suave cabello, en sus tiernos besos (y los no tan tiernos), es sus delicadas caricias, pero obviamente no sólo pensaba en lo físico, lo que más me gustaba de él era su personalidad, era simplemente tierno y adorable, parecía un niño pequeño tratando de actuar como un adulto, en serio no había cambiado en nada. Si tan sólo me dignara a responder alguno de sus millones de mensajes.

Mientras pensaba en las mil y un cosas que cruzaban mi mente, escuché una risa bastante conocida venir de una mesa de la esquina. Era Conor, quien esa noche más que nada atendía las mesas, vi que estaba con Kiri, a esos dos como les encantaba flojear y conversar con los clientes. Me acerqué porque habían varias otras mesas que requerían atención, entonces una vez atrás del rubio falso, le toqué el hombro y le sonreí sarcásticamente, él hizo la misma mueca pero estaba totalmente nervioso.

-          Eh… Trent… – retrocedió un poco levantando las manos para defenderse, Conor sabía que estaba de mal humor  y que eso no era nada bueno – ¿Qué te cuentas?

 

-          ¿Quieres saber qué me cuento? – mi sonrisa se hizo más grande – Pues que hay un par de vagos que no están trabajando… en especial uno que tiene un piercing en la ceja… ¿le conoces?

 

-          No, no me suena para nada… – rascó su cuello, fruncí el ceño y me acerqué a él, Kiri se paró y me sostuvo de los hombros

 

-          ¡Trent ya cálmate! – gritó ella – ¡No te desquites con Conor! ¿Es por lo de Aiden cierto?

 

-          No te incumbe – respondí cruzando los brazos

 

-          Por supuesto que me importa – se quejó – ¡Es mi hermano del que estamos…!

 

-          Relájate Kiri – dijo la última persona en la mesa sorprendiéndonos a ambos – después de todo apuesto a que su mal humor no tiene nada que ver conmigo sino con otra persona

 

-          ¡Aiden! – exclamé – ¿Qué haces aquí? Aún eres menor de edad

 

-          ¿Eso es lo que te preocupa ahora? – preguntó poniéndose de pie – ok, si tanto te molesta me voy ahora

 

-          ¡Aiden espera! – lo tomé del brazo dirigiéndome a la puerta de atrás – tenemos que hablar

 

-          ¡Trent! – gritaron Kiri y Conor al vernos desaparecer entre la gente

 

Una vez afuera, Aiden se negaba a mirarme y sólo estaba ahí parado apoyado contra la pared. Lo llamé varias veces por su nombre pero no respondía para nada, no quería que esto se quedara así, no quería que nuestra amistad se acabara por algo como eso.

-          ¿No entiendes que lo siento? – pregunté colocando mis manos a ambos lados de su cabeza

 

-          Es gracioso ¿sabes? – cuestionó soltando una pequeña risa burlona – lo más probable es que ni siquiera estés seguro del por qué te disculpas ¿es por no corresponder mis sentimientos?

 

-          No – respondí inmediatamente, por fin me miró a los ojos estupefacto – me disculpo por haberte dado las señales equivocadas, por haber arruinado nuestra amistad, porque te sientas tan mal. No aguanto verte así, eres una persona muy importante para mí, pero mis sentimientos de cariño hacia ti no son los mismos que tú tienes hacia mí

 

-          Tú – dijo plantando sus ojos en el cielo – haces que te odie

 

-          ¡! – me impactaron sus palabras al punto en el que no sabía qué decir, ¿lo había arruinado aún más? Intente articular alguna palabra pero él empezó a reír

 

-          Incluso aunque rompiste mi corazón, hiciste que entrara en una depresión maldita, que casi pierda mi trabajo y que mi hermana me acose todo el día para saber que me pasó… - miré al suelo sintiéndome culpable – no puedo no perdonarte, me gustas, es la verdad, y mucho pero también es genial que seas mi amigo y no quiero perderte del todo, incluso teniéndote sólo como eso creo que seré más feliz que sin ti

 

-          Aiden… – lo miré conmovido y él soltó otra risita – gracias, en serio, muchas gracias… - lo abracé, ahora mi mente estaba en un poco más de paz

 

-          ¡Oye! – me apartó sonrojándose – Todavía es muy temprano para regresar al cariñito

 

Me reí de su actitud a lo que él respondió sacándome la lengua y haciendo puchero al cruzar sus brazos, haciéndolo ver aún más infantil. Lo acompañé al paradero para que pudiera tomar un bus a casa y el prometió regresar al trabajo el lunes. Sintiéndome aliviado, regresé al bar.

 

Por enésima vez apagaba la pantalla de mi celular. No podía dejar de encender y apagar la pantalla, de la misma forma que mis ánimos aparecían y desaparecían. ¿Por qué queriéndolo ver tanto me rehusaba a buscarlo? Orgulloso no soy, si lo fuera, jamás le hubiera pedido disculpas a Aiden, así que esa opción estaba totalmente descartada.  ¿Algún tipo de fobia a los famosos? Lo dudo, nunca me había acercado a uno, ni tenía el más mínimo interés en ellos, y había pasado mucho tiempo desde que había escuchado tocar a Dominic, me llenaba de curiosidad saber si era posible tocar aún mejor de lo que ya lo hacía cuando niños, simplemente era un genio. No sabía entonces qué era, qué me alejaba de él, que me impedía poder llegar hasta él. Suspiré, tomé mucho aire y me decidí, tenía que hacerlo, dar el primer paso.

Trent: Hola

Una sola palabra fue la que pudo producir mi cerebro, todo estaba bloqueado, no podía pensar claramente, ni siquiera estaba seguro de qué era lo que quería o a dónde quería llegar con esto, sólo tenía en claro el hecho de que no quería dejarlo ir. Su respuesta fue inmediata.

Dominic: ¡Hola! ¿Por fin reparaste tu celular? Supuse que no estaba funcionando bien ya que no me respondías los mensajes ni las llamadas :)

Una vez más me llene de culpa, él inocentemente creía que no recibía sus mensajes cuando en realidad sí lo hacía y digería sus palabras y me daban vueltas en la cabeza a diario. Sólo pude seguirle el juego.

Trent: Sí, lo lamento. No pensé que intentarías comunicarte conmigo

Dominic: ¿Por qué no lo haría? #Confundido

Trent: Por el hecho de que la última vez que nos vimos te dejé de una manera muy brusca e insensible…

Dominic: …

Dominic: Eso… Eso fue mi culpa, yo… yo también intente apresurar las cosas… y… y… lo lamento tanto…

Trent: No es tu culpa solamente, mis actos también pudieron haberse interpretado como si te estuviera dando luz verde

Dominic: De hecho, lo hicieron. Pero ahora sé que sólo somos amigos… no haré más ese tipo de cosas

Trent: Mira no me malinterpretes, no es como si lo hubiera odiado y eso, es sólo que…

Dominic: ¿Sólo que qué?

Trent: Quiero hablar de esto contigo en persona, ¿cuándo estás libre?

Dominic: Pues todas esta semana estoy ocupado con la grabación de un video musical, tocare el piano para una canción de Cyrus Heart, pero el viernes acabo, ¿crees que puedas ir a recogerme al set?

Trent: ¿Dónde están grabando?

Dominic: Te paso la dirección mañana ¿vale? La verdad es que yo no la sé y no quiero molestar a mi agente ahora, si es que no puedes ir me avisas y acordamos un lugar ¿ok?

Trent: Está bien, entonces así quedamos. Hasta entonces

Dominic: ¡Nos vemos! No sabes lo mucho que espero verte :D

El viernes llegó, la semana se pasó lenta. Cada día se volvía más pesado y no podía dejar de pensar en cómo decirle lo que sentía, en lo que realmente opinaba de todo esto. Cerré mi casillero en la trastienda y noté a Aiden apoyado contra la pared de al lado.

-          Te siento nervioso, Trent – comentó – y la verdad es que me asusta mucho, es MUY raro verte así

 

-          ESTOY nervioso – aclaré poniéndome la chaqueta – recuerda que soy un ser humano

 

-          Por poco y se nota – sonrió en respuesta a mi mirada de enfado – ok, lo siento. ¿Pero qué pasa? Dime

 

-          No sé si esté bien hablar de esto contigo – contesté, el arqueó las cejas

 

-          ¿Es sobre el chico suertudo? – preguntó cruzando los brazos, su intuición me dejó sin palabras – di en el blanco ¿no?

 

-          Sí que lo hiciste – suspiré

 

-          Entonces te encontrarás con él – volvió a adivinar, esta vez sólo asentí – Ohh… pobre Trent… enfrentando sus sentimientos por primera vez, pero siendo tú apuesto a que te irá mucho mejor que a mí

 

-          ¿De qué hablas? – pregunté confundido

 

-          De que obviamente a ti nadie podría rechazarte – sonrió dando unos pasos hacia la puerta – puedes ser frio, un idiota, bastante cruel, amargado por la vida, insensible… – lo mire como pidiéndole que llegara al punto – pero… eres buena persona, sueles pensar más en los demás que en ti mismo, y todo lo haces con el corazón, si algo no te parece bien, lo dices, eres honesto, cosa que muy pocas personas en esta época son, y sobre todo, eres guapo

 

-          ¿En serio mi cara es lo más importante aquí? – cuestioné incrédulo un poco movido por todo lo que había dicho

 

-          ¡No sólo tu cara! – exclamó – también tienes un cuerpo asombroso

 

-          No hay remedio para ti – salí del lugar con él detrás de mí – pero gracias por darme ánimos

 

-          Para qué están los amigos ¿no? – con su clásica mueca me abrió la puerta de enfrente para que me vaya – ¡Suerte! ¡Todo va a salir bien!

 

Durante todo el viaje en autobús, traté de pensar en las palabras correctas, en la manera indicada de comunicarle lo que había callado durante tanto. Desde aquel día que me besó, y quién sabe tal vez antes, este corazón que tenía sólo latía por él y siempre sería así, él tenía que saberlo y se lo iba a hacer saber.

Llegué al estudio como a las cinco, una hora antes de la hora que acordamos. Empecé a sentir ansiedad, caminando de izquierda a derecha enfrente de la gran puerta donde dos hombres fornidos no dejaban de observarme como si sospecharan de mí. Fue entonces que recordé lo que Dominic me había dicho el día anterior: “Si es que llegas temprano puedes entrar, sólo diles tu nombre y que vienes por mí”. Me acerqué al par de sujetos quienes no parecían inmutarse por mi presencia en lo más mínimo debajo de sus lentes negros. Tratando de no usar mi voz que solía ser catalogada como intimidante, les dije exactamente lo que Dominic me recomendó. Ellos sólo cruzaron miradas y uno comunico algo a través del pequeño micrófono en la solapa de su saco y luego de recibir una respuesta me miró de pies a cabeza antes de dejarme pasar.

Una vez adentro, un chico que parecía ser algún asistente de la producción me llevó hasta una sala de esa enorme mansión que estaba siendo usada para el rodaje. Allí todo era blanco y de lo más elegante había una chimenea que estaba encendida, que le daba un toque de color a la habitación junto con el piano que estaba tocando Dominic que era negro. Entré en un trance, verlo tocar trajo cientos de memorias de cuando éramos niños, en las que siempre íbamos al ático para que él pudiera tocar y yo simplemente me contentaba con escucharlo. Sus movimientos eran suaves y estilizados siguiendo el compás de la canción que performaba, sus dedos se veían majestuosos, tocando delicadamente las teclas y moviéndose rápidamente entre las octavas. De repente el director mando a cortar la escena y Dominic no paró hasta haber terminado la pieza, lo que demostraba que no había dejado su amor por la música, sonreí y justo en ese preciso momento sus ojos turquesa se plantaron en mí y él pareció sorprendido, moví mi mano saludándolo y esta vez una sonrisa de oreja a oreja apareció en su rostro iluminando completamente el lugar.

-          ¡TRENT! – gritó entre todo el escándalo de las personas hablando, el equipo moviéndose y la música sonando – ¡Trent! ¡Viniste!

 

-          ¿Pensaste que no lo haría? – pregunté un poco ofendido

 

-          ¡No lo tomes a mal! – me abrazó, tarde un poco en corresponderle pero lo hice, después de unos segundos se separó de mí - ¡Pero estoy muy feliz de verte después de tanto!

 

-          Al menos esta vez no pasaron once años – traté de hacer una pequeña broma a lo que él se rio – lamento haber llegado tan temprano

 

-          No te preocupes, me parece genial que estés aquí – la sonrisa no desaparecía de su rostro

 

-          Sigues siendo tan bueno en el piano como antes – comenté señalando el instrumento en mitad del cuarto, él se sonrojó inmediatamente – vamos que no es para que te avergüences, es sólo un cumplido

 

-          Pero es diferente cuando viene de ti – sobó su brazo por el nerviosismo – cuando éramos pequeños sólo te sentabas a escucharme tocar y cuando terminaba sólo me aplaudías

 

-          Porque me dejabas sin palabras – confesé suspirando – igual que ahora

 

-          Gracias Trent, yo… – el director se acercó, impidiéndole terminar lo que iba a decir – ¿Necesita algo Sr. Sterling?

 

-          Sí, quería hablarte sobre la siguiente toma – respondió seriamente – disculpen que los interrumpa

 

-          No se preocupe – dije tratando de sonar frustrado – soy yo quien está de más aquí, no seré un estorbo

 

-          Muchas gracias chico – volvió a dirigir su mirada en Dominic – ok, la siguiente escena será en diez minutos, tú sólo sigue tocando pero esta vez trata de mirar por la ventana para darle efecto a la toma de Cyrus, te haremos un plano general desde lejos y luego se ira haciendo el acercamiento, después un plano detalle a tus manos y finalmente un plano americano, tú no te preocupes por nada de eso sólo haz lo tuyo

 

-          Está bien – asintió, lo sentía diferente mientras hablaba con ese sujeto ¿cómo describirlo? ¿profesional? – ¿Pero en qué momento se supone que debo mirar por la ventana?

 

-          Cuando llegues a la parte  del coro – respondió y se fue, Dominic suspiró

 

-          ¿Todo está bien? – pregunte preocupado – pareces tenso

 

-          No es nada – sonrió – sólo estoy un poco cansado

 

-          No te sobreesfuerces – le agité el cabello e inmediatamente dos muchachas aparecieron para acomodarle el peinado

 

Nuevamente me encontraba observándolo tocar su maravillosa música, más o menos se demoraron unos veinte minutos en grabar la escena pero al final el director quedó conforme con el resultado y le dijo a Dominic que había terminado. Luego de eso, Dominic me dijo que fuéramos un segundo al jardín para ver la grabación de Cyrus. No me negué, a pesar de que tenía prisa por salir de allí. Cuando salimos estaban en medio de la grabación por lo que le cubrí la boca a Dominic que estaba a punto de decir algo, lo sentí sonreír avergonzado por debajo de mi mano, la removí y el fingió cerrarla con un candando. Cyrus Heart, era un cantante que hace poco había decidido lanzarse como solista después de pertenecer al grupo de rock Death Beats, era bastante conocido y era la comidilla debido a rumores por un supuesto amorío con el cantante de la banda que solía ser su rival en las tablas de records. Este famoso cantante estaba frente a nosotros cantando su nuevo single “Your eyes told me otherwise” cada palabra que salía de su boca sonaba de lo más sincera, la historia que contaba parecía vivida por él, lo que hacía que su representación ser viera genuina. Terminó de cantar y saludó a Dominic desde lejos, él no respondió sólo me jaló fuera del lugar. Quería preguntar por ese comportamiento pero preferí no mencionar nada.

Me llevó al estacionamiento y sonriendo de oreja a oreja me anunció que esta vez conducía él para variar. Oyendo eso, me sorprendí e interprete que por primera vez iríamos a su casa y así fue. Después de un pequeño viaje en el que él hablaba de las grabaciones y yo le hacía cualquier pregunta al respecto al no saber de qué más hablar, llegamos a una gran casa en el área más exclusiva de la ciudad. Con sólo presionar un botón, la puerta de la cochera se abrió y nos dirigimos a un sótano repleto de autos, me reí, alguien tenía una obsesión bastante clásica de las personas con dinero. Él me sacó de allí arrastrándome nuevamente y no me dejó hasta que entramos en la sala, que estaba finamente decorada y los sillones de cuero eran simplemente cómodos y uno podía estar muy a gusto allí. Después de ofrecerme una bebida, se sentó a mi lado con una copa él mismo.

-          ¿Qué tal te va en todo Trent? – preguntó mirándome con curiosidad – bueno, aparte del hecho de haber estado incomunicado con todo el mundo gracias a los fallos de tu celular

 

-          Hablando de eso… – lo miré a los ojos – tengo algo importante que decirte…

 

-          ¿Cambiaste de número? – preguntó anonadado dejando la copa en la mesa para sacar su celular – ¡Dámelo! ¡Necesito saberlo!

 

-          No, no lo he cambiado – respondí soltando todo el aire de mis pulmones – ¿No recuerdas que dije que quería aclarar las cosas contigo en persona?

 

-          Ah… cierto… – apretó el aparato entre sus manos y las miró apenado – es sobre lo que no quieres que haga ese tipo de cosas incómodas contigo y eso porque somos amigos y no podemos a pesar de que yo te quiero y es un poco egoísta que actué por mí mismo cuando esto también te involucra y puede que no te guste y tal vez esté arruinando todo entre nosotros pero sabes que no quiero perderte así que estoy dispuesto a alejarme y mantenerme a raya o lo que tú me… – interrumpí su balbuceo inquieto colocando mis labios sobre los suyos para que dejara de hablar, él se quedó inmóvil, totalmente paralizado por lo que me alejé – Trent…

 

-          Dominic – lo llamé despacio – te amo…

 

 

Notas finales:

Creo que quedó un poco largo... espero que no haya sido tedioso leerlo... bueno, si les gusto doy gracias. 

En el próximo capítulo de Volverte a ver: ¿Cómo reaccionara Dominic a la confesión de Trent? ¿Existe algún tipo de tensión o algo entre Dominic y Cyrus? ¿Aiden acepta del todo el rechazo de Trent? descubralo en el siguiente capítulo, Tensión inicial. 

Nos leemos~ bye :* 

Never made it as a wise man, I couldn´t cut it as a poor man stealing 

tired of living like a blind man, I´m sick inside without a sens of feeling 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).