Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Phantom help por Nanami Fushikawa

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

 

Hola, aquí estoy con esta historia :D espero que les guste.

Advertencia: contiene Slash (chico X chico) WI…? (que pasaría si..?) EWE (Epilogue? What Epilogue?)

Aviso: "Esta historia participa en Desafíos "Buscando la inspiración" del Foro First Generation: The story before books".  Si xD

Disclaimer: todo es propiedad de J. K. Rowling a excepción de la historia, eso sí es mío xD

Disfruten~

Notas del capitulo:

Si, lo hice por un desafio de fanfiction xDDDD Ojala les guste .3.

“De cómo no entrar al Paraíso”

 

Cedric pensó que después de morir venia el descanso eterno, eso que había escuchado desde que tenía memoria, que las almas descansaban, aunque claro  también estaba la posibilidad de ser un fantasma. Aunque por lo que siempre había oído, gracias a sus clases, eso ocurría cuando las personas  no querían separarse de su vida, simplemente no se daban cuenta que morían, o cuando tenían algo pendiente que debían realizar para que sus almas pudieran estar en paz y poder pasar al más allá.

Diggory sabía todo eso muy bien, además del saber que había muerto, no tenía ningún problema con su muerte ni algo de lo que lamentarse y nada  que tuviera que arreglar para poder estar en paz. Bien, su vida había sido muy buena, corta, pero buena, no tenía nada de quejarse sobre ella. Le hubiera gustado vivir un poco más, pero no por ello se arrepentía de lo que había hecho. Sonrío levemente al pensar en lo de renunciar a la Gloria Eterna, no se arrepentía, él era un Hufflepuff. Sí, tampoco se arrepentía de su casa, la amaba con todo su corazón, su padre, le daba algo de tristeza pensar en que estaría solo, pero sabía que era un hombre justo y de buen corazón, nunca odiaría ni culparía a un inocente, ni mucho menos a Harry que tanto había sufrido. Eso estaba claro, entonces, ¿Por qué?...

-Lo lamento, no puede pasar- ¿Por qué carajos no lo dejaban entrar al jodido Paraíso?

-¿Me van a enviar al infierno?- había un deje de miedo en su voz, mierda, ¿a quién no le daba miedo que lo mandaran al jodido purgatorio?

-Claro que no-el señor de la entrada lo miraba con el ceño fruncido-usted ha sido buena persona-Cedric suspiro aliviado aunque algo cansado, ya llevaba como 20 minutos en la puerta de entrada, más que algo como el Cielo que normalmente se imaginaban las personas, era más como un lugar tranquilo. Un sitio de descanso, sería la palabra adecuada.

-¿Entonces?-Diggory era paciente por naturaleza; sin embargo, la incertidumbre lo estaba matando.

-Por favor, espere un momento más-el señor de aspecto amigable también parecía algo cansado con eso-necesitamos transferirlo con un superior, él le hablará de su situación-el joven de ojos miel asintió para después tomar asiento en una silla que se encontraba por ahí. Después de esperar otros 10 minutos y quedarse dormido en la espera lo llamaron de nuevo.

Cedric se puso de pie algo desorientado, fue guiado, todavía algo adormilado, por una amable secretaria que lo llevo a una oficina. Después de eso, la puerta fue abierta. Un hombre de traje le dio un asentimiento de cabeza cuando entro en el lugar.

-Señor Diggory-lo saludo educadamente el hombre.

-He… Hola-murmuro medio confundido.

-Se parece mucho a su abuela, es una mujer muy amable-menciono el hombre de ojos grises. El de cabello castaño medio cerró los ojos tratando de recordar a su abuela, ella había muerto cuando era un niño de cómo un año, siempre lo consentía. Su padre siempre decía que fue una mujer muy dulce.

Después de pensarlo cayo en cuenta de algo-¿ella está aquí?-pregunto algo emocionado.

-Claro que lo está-el hombre le sonrio condescendientemente. Después de un rato de silencio volvió a hablar-ahora el asunto a tratar es sobre su ingreso.

-¿Por qué no puedo entrar?-pregunto el muchacho algo angustiado.

-Es sobre un sentimiento suyo en particular-el hombre suspiro levemente-vera, el asunto está relacionado con un sentimiento de pesar que no se puede quitar de encima y como sabrá, no pueden entrar las personas que sientan o carguen con sentimientos negativos o tristes, la idea es que tengan una estadía placentera y al estar por tanto tiempo aquí, es normal que recuerden cosas que los hagan sentirse de forma triste, cosa que siempre tratamos de evitar -Cedric alzo una ceja sin entender.

-Pero no siento nada así-murmuro el muchacho intentando sentir un sentimiento negativo en él.

-¿Que siente si le  menciono el nombre de Draco Malfoy?-pregunto el hombre revisando un folder, de lo que parecía ser su expediente.

-Oh…-y Cedric entendió porque demonios no le dejaban entrar.

~

Paseo sus ojos grises por el lugar con cierto tinte de aburrimiento. Otra vez la misma rutina de siempre. Espero a que el rubio saliera del baño, el de cabello castaño torció los labios en un gesto de reprobación, Draco tenía una apariencia cada vez más decadente. Las ojeras surcaban el rostro extremadamente pálido y demacrado del Slytherin. Cedric suspiro  con tristeza en los ojos mientras se ponía de pie.

Siguió al rubio por los pasillos por los que este caminaba. A veces a su lado y otras veces detrás de él, básicamente era su sombra. No se despegaba del lado del muchacho por nada del mundo.

Como lo suponía el Hufflepuff, en lugar de dirigirse al Gran Comedor, Malfoy se dirigió a la Sala de los Menesteres, estuvo encerrado intentando arreglar el armario hasta que las clases estuvieron prontas a comenzar. Diggory permaneció, en silencio, todo ese rato sentado a su lado, viendo como Draco descomponía el rostro en una cara de frustración y miedo, el sentimiento era tan palpable que hasta él se sentía deprimido. 

El de cabello castaño empezó a caminar detrás de Malfoy otra vez más. El ex prefecto suspiro con tristeza y cierta melancolía. Draco caminaba intentando no chocar miradas con nadie, Cedric meneo la cabeza negativamente al ver a Harry observando, por el rabillo del ojo, al rubio. Diggory no pudo evitar pensar que todo eso era una mierda, si le dieran un knut de bronce por cada vez que miraba a Harry viendo incriminatoriamente a Draco, estaba seguro que sería millonario y no, no estaba exagerando. Lo mejor de todo es que ese año, esas miradas habían aumentado considerablemente y con cierta razón. Todavía recordaba el asunto del collar y el hidromiel.

El Hufflepuff se sentó en el piso, justo al lado del asiento del rubio. Recargó su rostro contra el pupitre de madera. Joder, odiaba cuando eran las clases con el profesor Binns, incluso ya siendo él también un muerto se quedaba dormido en sus clases. Cerró los ojos por un momento, con las palabras del fantasma todavía resonando en su cabeza.

Cedric se puso de pie algo desorientado, había dormido más de la cuenta. Parpadeo confundido al notar el aula terriblemente vacía. Oh mierda, ¿Dónde estaba Draco? El de ojos grises salió corriendo como alma que se lleva el demonio. Viraba su rostro en todas direcciones buscando una cabellera rubia platino. Entro corriendo al Gran Comedor y la mala señal se le estrello en la cara, ni Harry ni Draco estaban ahí. Palideció justo en ese instante, tenía un horrible presentimiento y últimamente se estaban cumpliendo sus premoniciones.

Salió corriendo intentando recordar algún lugar donde pudieran estar esos dos. La imagen del baño de Myrtle le llego de inmediato, antes de darse cuenta estaba corriendo como un poseso por todo Hogwarts, un escalofrió recorrió su espalda al escuchar los hechizos volando de un lugar a otro. Justo antes de poder estar al lado de Draco, sucedió.

- Sectumsempra- Cedric abrió los ojos horrorizado al ver toda la sangre que estaba brotando de Draco. Malfoy se encontraba convulsionando sobre un charco de su propia sangre, el aire se le estaba escapando de poco a poco igual que la vida. Se agacho a su lado, sus ojos llenos de angustia, él no podía hacer nada para evitar que muriera. Los gritos de Myrtle le estaban taladrando los oídos al mismo tiempo que aumentaban su desesperación. Todo a su alrededor estaba volviéndose rojo, el olor de la sangre lo estaba mareando.

Suspiró totalmente aliviado cuando el profesor Snape detuvo la hemorragia  y sano las heridas, de en esos momentos un inconsciente Draco Malfoy. Cedric ni si quiera se dio cuenta de cuando había  llegado el hombre o donde se había metido Harry, solo estaba aliviado de que Draco no hubiera muerto. No quería que el muchacho rubio quedara atado.

En silencio camino detrás del profesor Snape hasta llegar a la enfermería, donde suponía internarían al Slytherin por un tiempo. Se sentó en la silla al lado del rubio, el tiempo siguiendo su curso.

Lo aburrido de existir de esa forma era que no podía interactuar con nadie, solo teniendo sus pensamientos como acompañantes, ya  casi nunca decía alguna palabra. No se movió del mismo lugar donde se había sentado por todo un día en el que Draco estuvo inconsciente. Sonrió levemente mientras lo miraba empezar a reaccionar. El muchacho de Slytherin parpadeo confundido acostumbrándose a la  oscuridad de la enfermería. Malfoy se había llevado una mano a la cabeza con los ojos obscurecidos, Cedric suspiro con un deje amargo, por lo visto el rubio había recordado todo.

-¿Quién anda ahí?-preguntó con voz baja el Slytherin mientras miraba en todas direcciones buscando desesperadamente su varita. Diggory alzó una ceja extrañado, en la enfermería solo estaban ellos dos, ni si quiera Madame Pomfrey estaba.

- Y en realidad, yo no cuento mucho como persona…-pensó en voz alta el castaño perdido en sus pensamientos.

Draco abrió los ojos totalmente sorprendido a la vez que daba un brinco-¿D-Diggory?-preguntó el rubio enfocando la figura en la obscuridad.

-¡¿Me ves?!-preguntó entusiasmado el muchacho-¡Genial! Puedo hablar con alguien y así se hace todo más sencillo.

-¿Estoy  muerto?-había un deje de miedo y algo de alivio en la voz del rubio.

Cedric frunció el ceño por eso-no, aunque casi.

-Pero, ¿Tú estás muerto? -medio preguntó con el ceño fruncido Malfoy.

-Claro que lo estoy-el Hufflepuff le sonrío condescendiente.

-¿Eres un fantasma?-preguntó el rubio algo confundido.

-No, y tampoco soy un polgereist, es algo diferente, aunque no entiendo porque ahora me puedes ver, tal vez por lo de casi morir-murmuró pensativo el de cabello castaño con una mano en la barbilla. 

-Entonces, ¿Qué mierda eres y por qué estás aquí?-Malfoy apretó las sabanas con sus manos mientras una cara de fastidio se formaba en sus facciones.

-Soy algo como un ¿alma de ayuda? O algo así… -mencionó no muy convencido de eso-oh y bueno siempre te acompaño-hizo un gesto desinteresado con las manos.

Draco palideció-¿siempre me sigues?-la voz del de ojos grises estaba llena de angustia.

-Claro, siempre estoy contigo-Cedric alzo un dedo como si le estuviera explicando a un niño, cosa que irrito a Draco.

-Ya entendí, no soy estúpido- comentó con sarcasmo.

-Es bueno verte actuando como antes-Cedric le sonrío amistosamente-ahora lo realmente importante-el castaño hizo una pausa dramática-  ¡te ayudare a cumplir el anhelo más profundo de tu corazón!-Cedric se puso de pie con una enorme sonrisa con un aura de superioridad.

-¿Qué?-en el rostro de Draco había pura estupefacción.

-Sí, ya sabes tú más grande anhelo-Diggory parecía completamente emocionando dando vueltas de ahí para allá.

-¡Que no soy estúpido!-replicó irritado el Slytherin.

-¡Lo sé, por eso haremos el mejor plan para conquistar el corazón de Harry!-Diggory alzo un puño al aire completamente emocionado. Y Draco se desmayó.        

 

Notas finales:

Si les gusto dejen review ;D por cierto esto es lo que tengo que cumplir por si les da curiosidad xD

  • Canción: One more night, Maroon 5.
  • Tipo de fic: Slash. *
  • Personaje: Cedric Diggory.*
  • Palabra: Selva.
  • Objeto Mágico: Knut de bronce.*

Bueno bye~

Nanami off~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).