Prólogo.
Mi nombre es Zhang Yixing, y esta es mi historia.
Aunque mi nombre es Yixing nadie me llama así, desde que comence a trabajar se me conoce como Lay. Casi todos los que estamos metidos en este oscuro mundo tenemos apodos Chen, Xiumin, Suho, aunque mi compañero de faenas Chanyeol pasa de ello. ¿Cómo puedo describir a Chanyeol? Muy fácil. Estúpido gigantón de orejas grandes, enamorado del dinero y un ligón de cuidado, que por cierto yo aun no descubrí que le ven.
A todo esto, os estaréis preguntando ¿en qué trabajas, Lay? Para responder comencemos desde el principio.
Hace 12 años, una calle estrecha, donde no se podía apreciar ninguna figura con claridad, excepto una sombra, un niño de unos 10 años que lloraba amargamente mientras se sujetaba las piernas con sus delicados brazos. Un niño pequeño abandonado a su suerte detrás de un deprimente tugurio. Un niño lleno de golpes y moratones. Sí, ese era yo, mi padre me había abandonado cuando era un bebe, mi madre murió en el parto. Me crié en un orfanato pero me escape, desde entonces tuve que vivir en la calle, robando para poder sobrevivir. Me metía en bastantes problemas y todas las veces acababa igual, en calles solitarias, rodeado de ratas llorando desconsoladamente.
A los 17 un hombre de gran constitución me ofreció un empleo no muy bien visto por la sociedad, pero ya que mas daba, mi alma ya pertenecía al diablo, asique acepté, total no tenía nada que perder. A la mañana siguiente mi nuevo jefe me presento a mis compañeros.
–Lay, este es Chanyeol, trátale como quieras total es un patán. Chanyeol empezó a reírse a carcajada limpia, aplaudiendo como un loco. En ese momento supe que Channie me caería muy bien.
-Hola Lay encantado de conocerte me llamo Chanyeol pero puedes llamarme Channie, a partir de ahora seamos amigos ¿sí?-Tendió su mano hacia mí con una sonrisa de oreja a oreja. Claro nadie puede negar que sea atractivo pero nunca fue mi estilo. Estreche su mano y le sonreí mostrando ese hoyuelo que me salía al reirme. –Vaya vaya interesante, bueno Lay sígueme, te presentare al resto. Este es Luhan, su especialidad es la daga digna de una muerte rápida y silenciosa ¿no crees?- Luhan que estaba apoyado en una columna se acerco lentamente, me sonrió y me dijo –Vaya estará cansado ¿quieres una taza de té? Yo agradecido decline su oferta.
Chanyeol me paso el brazo por los hombros y continúo con otro chico. –Él es Kai, se encarga de traficar con drogas- Kai levantó la cabeza y volvió a lo suyo. –Antes de seguir me interesa saber es que hace un chico como tú en el escalafón más bajo de la mafia-
Y este es el principio de la historia, yo Lay, trabajo como recadero para la mafia.