o-----o-----o-----o-----o Los días fueron pasando o-----o-----o-----o-----o
El juez le pidió al dios del inframundo que si se podía ir al castillo Heinstein, para pensar un poco sobre lo que ha ocurrido en su vida y cómo piensa ahora vivir de ahora en adelante.
El dios entendía perfectamente que aquel castillo aun no estaba terminado, pero lo dejo ir para que respirada un poco, después de lo ocurrido veía a su juez siempre triste, teniendo pesadillas, casi alucinando, bebiendo de lo normal, entre muchas cosas más, así que acepto su propuesta.
o-----o-----o-----o-----o Castillo Heinstein, Alemania o-----o-----o-----o-----o
El juez llego un poco cansado de un largo viaje, observaba que el lugar seguía en construcción a lo mejor en otra zona, pero sería un buen lugar para olvidar muchas cosas. A veces iba aquel lugar donde estaba antes el castillo, le recordaba la batalla que tuvo con los tres caballeros de Aries, Leo y Escorpión, más con los de bronce, recordó aquellas palabras que le dijo al caballero de Leo, esas palabras que ahora el ya no debía decir más porque siempre estuvo equivocado, unas palabras que:
“He aquí lo que pasa cuando uno se deja invadir por los sentimientos, te voy a decir lo que garantiza la victoria, la fuerza y guardar la sangre fría, si quieres ganar, eso es lo único que necesitas”
Siempre estuvo equivocado porque a lo mejor en ese tiempo pensaba que el amor no servía de nada, pero termino por comprender esas palabras deberían de decir otras palabras porque aunque seas una persona fría llegaras amar, no te darás cuenta lo que tienes hasta que lo pierdes, el perdió al amor de su vida por creer en hechos que nunca pasaron y jamás ocurrirían, las personas que deseo la infelicidad de la pareja lo lograron, rompieron dos corazones y todo por los celos, la envidia, lo obsesión y la soledad.
A veces observaba el cielo, veía al rubio con su pequeño, se imaginaba a ese pequeño, quería conocerlo, pero mejor se dio por vencido, no tenía el valor de pedir perdón, pensando que lo podrá rechazar de la peor manera, le gritaría todas sus verdades y lo que piensa de él, era mejor dejar las cosas como estaban.
A lo menos estaba feliz de haber conocido a Shaka De Virgo, el más cercano a un dios, nunca lo olvidaría, esas lágrimas que derramaba, su sonrisa, su cabello, el aroma que tenia, los besos, caricias, entre muchas cosas más. Ahora solo le toca sufrir a él.
Radamanthys: ¡Shaka!... -calló de rodillas- Espero que logres perdonarme...algún día...no voy a poder vivir en paz...sabiendo que...te hice demasiado daño...a ti...pero también a mi hijo... ¡SHAKA...TE AMO! - grito
o-----o-----o-----o-----o En el santuario o-----o-----o-----o-----o
Los caballeros hicieron una búsqueda para encontrar a su mejor amigo y pedirle perdón, pero evitaron que el caballero de Géminis fuera, no querían que interrumpiera más en la vida de Shaka.
El peli-lila había roto con él, no podía perdonarlo después que solo lo uso para su venganza, le lastimo el corazón, ahora solo quería olvidarlo, pero le era difícil aun así seguiría siendo su compañero, nunca llegaría a odiarlo, lo amaba con la fuerza de su corazón.
Mu: - llorando - ¡Saga yo te amaba! ¡¿Por qué me hiciste esto?! ¡Te entregue mi amor, pero tu preferiste terminar con el!
El caballero de Géminis estaba en su templo, no le importaba que lo hayan encerrado, haría todo lo posible por buscar a su querido Shaka, pero había algo en su corazón que no estaba, le faltaba algo, no era el rubio era otra cosa que no se quería dar cuenta, miro al techo y observo primero la imagen de su rubio, para luego ver la imagen de su corderito, acaso su corazón lo estaba pidiendo a gritos, ¿Que sentía por el caballero de Aries? no le importo decidió dormir un poco más, pero tenía pesadillas y a la vez soñaba con Mu.
Saga: -pensando- ¿Qué me ocurre? ¡Aunque vea la imagen de Mu voy a seguir buscándote mi querido Shaka!
Cada noche fue así, siempre el mismo sueño, la misma pesadilla, el mismo sentimientos, hasta que una noche se dio cuenta de sus verdaderos sentimientos, se había enamorado de el caballero de Aries, no podía negarlo, pero como ocurrió, no fue las noches de pasión, tal vez, fueron sus caricias, besos, el amor que le demostraba, fue un tonto se dejo llevar por otros sentimientos y ahora perdió lo que más quería, se maldecía por seguir sus impulsos, entendía que Shaka solo era obsesión, ya no había amor y cuando lo tenía lo desaprovecho, ahora lo perdió.
Saga: ¡Ahora comprendo todo! ¡No puedo dejarte Mu, espero que cuando regreses me perdones! – dijo desesperadamente
El caballero se dio cuenta demasiado tarde, se estaba arrepintiendo de todo lo que provoco, no pudo más salió del templo de Géminis, necesitaba reparar las cosas del pasado, necesitaba encontrar lo que algunas hizo, necesitaba el perdón de la persona que algunas vez quiso.
Saga: ¡Shaka ahora necesito encontrar para encontrar la paz que se perdió por mis errores!
Lo caballeros que estaban en el santuario vigilando trataron de detenerlo, pero les fue imposible, géminis uso su técnica explosión de galaxias, ningún caballero pudo detenerlo, salió del santuario para ir en busca de perdón, ya no le importaba nada ahora solo quería curar muchas cosas pendientes.
Saga: ¡Necesito tu perdón, Shaka no importa que tenga que hacer para conseguir tu perdón y hacer lo posible por juntarte a Radamanthys y a ti!
Continuara...