POV. LAY.
Era una mañana corriente, aburrida, predecible. Mi vida había cambiado por completo al entrar a formar parte de Exo, antes de eso pensaba que no servía para nada, que bailaba de forma decente y que mi voz no era nada maravilloso.
Desde que debutase mi vida se controlaba al milímetro y la agenda que me daban los domingos por la noche me hacía tener una vida bastante aburrida pero segura. Y es que yo era el portador de un peso que mis otros compañeros no podían ni imaginar, yo tenía el poder ser curar a la gente y de saber cuando una persona era mala.
-¡LAY A DESAYUNAR YA O NO TE DEJO NADA!- la voz de mi compañero BaekHyun me sobresaltó, me retiré cual gato y me levanté.
Chen seguía dormido por lo que me acerqué, lo golpee con una almohada y se levantó de golpe.
-A desayunar-gruñó y se tapó la cara con la sabana. Reí y salí quitándole las legañas.
En el salón había el típico saludo de gruñidos, quitando a Baek que parecía no dormir nunca. Abracé a Suho y este hizo un ruido raro a modo de saludo.
-¿qué hay de desayuno?- me aparté husmeando por la encimera.
-si teman dejado algo, hice bizcocho anoche- asentí y fui al salón, los demás estaban sentados.
Después de cumplir con mi agenda volví al piso sólo, no estaba para muchos trotes, mi cansancio me hacía parecer un vegetal el tiempo de descanso. Después de ducharme estaba cenando, llamaron a la puerta, extrañado me levanté y miré por la mirilla. Abrí la boca y me aparté con sigilo.
Al otro lado había dos hombres con traje negro y camisas horteras, sabía quiénes eran y no venían con buenas intenciones.
-Abre- golpearon la puerta y pegué un brinco, eran de la División estaba seguro de eso. Respire hondo y abrí la puerta un poquito.- Buenas noches N°140123 ¿nos dejas pasar?
-¿para qué? No me vais a llevar con vosotros- sentí un golpe en el pecho y salí despedido contra la pared del salón, gruñí por la presión.
-Estamos buscando a un chico de tu edad- me enseñaron una foto de un joven rubio, occidental y con la piel bronceada.- se llama Will.¿no lo conocerás?
-No.- uno de ellos era un rastreador, cogió un mechón de mi pelo y se lo pasó por la nariz, sus ojos se abrieron y cerrar muy rápido.
-Dice la verdad, ahora, andas faltó de cariño.- me colocó una mano en la hebilla del cinturón y rieron, cuando la puerta se cerró caí al suelo con un golpe sordo.
Gruñí y recogí los cristales de un jarrón roto, odiaba a la División. Se dedicaban a matar, experimentar o reclutar a personas como yo, personas que no hacían daño a nadie o que intentaban vivir ocultos. La puesta era interminables, control mental, fuego, fuerza, control del tiempo, cualquier poder web pareciera descabellado. El mío no les servía de mucho ya que no podía curarme a mí y la forma de curar era absorbiendo la herida en mi propio cuerpo. El apodo de unicornio me iba la mar de bien.
Terminé de recoger los cristales y fui al baño, tenía el cuello con sangre suspire y saqué un cristal del cuero cabelludo. Por el cuello empezó a bajar un hilo de sangre, suspire y llamé a Luhan, ya que Kris estaba desaparecido después del escándalo.
-¿Sí?-suspire y pensé en una historia rápida.
-Soy lay...-rió y vi en el espejo que mi camiseta de tirantes blanca se iba tiñendo de rojo.
-me habías asustado porque sólo te oía respirar, ¿quieres hamburguesa para cenar? Es que a Xiumin se le ha antojado y sabes cómo se pone "Don maduro"- mi vista se estaba volviendo borrosa, sudaba y mis fuerzas se estaban yendo a un lugar muy oscuro.
-Luhan... Necesito ayuda...-me deje caer de rodillas, sentí un dolor enorme y eso me espabilo un poco.
-¿Lay? ¡TE ESTOY HABLANDO! -hice un sonido de asentimiento.- se que la casa esta muy tirada pero cuando lleguemos te ayudamos, al fin y al cabo vivimos todos allí.
-Luhan, me estoy desangrado...- oí un gritito, sonreí por experiencia sabía que no tardaría en desmayarme.- me he golpeado con un jarrón... Ven corriendo...
Colgué y suspire cuando mi visión se tornó negra.
POV. LUHAN.
Fui corriendo hasta un taxi, le pedí que me llevara a la calle donde vivíamos, por el camino llamé a una ambulancia y les expliqué que iba de camino. Al llegar todavía no había llegado la ambulancia, subí en el ascensor y entré abriendo la puerta sin tocarla. Fue un error no asegurarme de que no había nadie, gracias a mi suerte así era, normalmente tenía más cuidado ya que nadie debía saber que era.
Entré corriendo y seguí unas gotitas se sangre hasta el baño, abrí la puerta con la respiración agitada. Lay estaba en el suelo pálido, estaba sentado en el suelo con la espalda en la pared y su cabeza hacia delante, su camiseta se encontraba llena de sangre y su pelo rubio manchado.
Corrí al botiquín de la cocina y saqué varias gasas, no había cerrado la puerta así que la deje así, coloqué las gasas en la parte baja de su cabeza y presione, mis dedos se marcharon enseguida de sangre.
Después de que llegara la ambulancia lo llevaron al hospital más cercano, los chicos llegaron justo cuando se lo llevaban, suspire dejándome caer en el sofá que teníamos.
-¿Estás bien?-Xiumin me abrazó con fuerza, asentí y miré las manos aún manchadas de sangre.- este unicornio es más despistado...
-sí... A las dos cosas...- me levanté y él me miró raro- Chicos idea haciendo la cena que limpio el baño.
-vale...- Chen había salido con el coche para ir al hospital, así que sólo quedaban Xiumin y Tao.- pensándolo mejor... Quedaros quietos... Que lo hago yo... No vayáis a incendiar la cocina.
-¡OYE!- me metí en el baño con una sonrisa por la indignación de los dos.
Cogí una bayeta que había detrás del lavabo, llené este de agua y me arrodille para limpiar la sangre de mi amigo, el agua no tardó en teñirse de rosa. Cuando acabé fui ha hacer la cena, mientras los dos parásitos veían la televisión.
POV. D.O.
Nada más bajar del avión encendí el teléfono, tenía trece llamadas de Luhan me extrañó porque lo habíamos visto a las siete de la tarde. Toqué el brazo a Suho y me miró.
-Ha llamado Luhan mira a ver que quiere- asintió y yo me coloqué a la altura de Baek, le sonreí pues iba un poco ensimismado en sus pensamiento.
-¿qué te pasa?- me miró parpadeando y sonrió.
-nada, estoy cansado.- fruncí el ceño ya que se le ponían rojas las orejas cuando mentía.
No le di importancia y seguí andando hasta el coche que nos esperaba fuera, antes de llegar vi a mi derecha a WonRhee, me tensé y seguí caminado rápido. Antes de llegar a la salida sentí un tirón en mi cuerpo y no pude avanzar.
-Buenas...- los chicos no se dieron cuenta de mi ausencia por lo que acabaron en la furgoneta.- vamos a un lugar más privado...
Tragué saliva y caminé en contra de mis pensamientos y deseos más desesperados, me llevaron hasta los servicios. Con Won iba otro hombre estadounidense llamado Steven, este movía objetos con la mente y Won era un rastreador la mar de bueno, encontraba lo que fuera y si hacía falta te cortaba un dedo para no perderte de vista.
-Te escondes bien- sonreí al dejar de sentir tensión en mi cuerpo.
-No hay mejor disfraz que uno a simple vista-el temor me llenaba por completo.- si me lleváis a la división la gente lo sabrá.
-otro igual...- Steven resopló y me miró.-si hubiéramos venido a por ti ya estarías noqueado. ¿Has visto a este chico?
-no- negué diciendo la verdad al ver la fotografía.- ¿qué es?
-vidente, tengo por seguro que si viniera a verte nos avisarías.-metió una tarjeta en mi bolsillo de la camisa. Tragué saliva y corrí hacia la puerta, la atravesé y después seguí hacia el coche. Una vez dentro me sentí seguro, Suho me miró raro.
-¿ha donde has ido?
-al baño-asintió y saco el teléfono.
-Lay está ingresado, al parecer se clavó algo en la cabeza al tropezar. Este chico es más patoso...-me preocupé y lo mire.- está bien, tranquilo.
POV. SUHO.
Al llegar a casa Sehun me agarró del brazo y me arrastró hacia su cuarto, los demás me miraron desconcertados, una vez dentro Suho cerró la puerta. Sonreí y me agarró del cuello basándome, lo abracé por la cintura, sin soltarme ni parar el beso me tumbó en la cama.
-Te deseo Mi líder.- besé su cuello con una sonrisa- me encanta que supliques...
-no suplico.- rió y me besó de nuevo, el aire me empezó a faltar a pesar de que se separó esa maldita sensación no se fue.
Jadee con fuerza cuando me besó el cuello, me quitó la camiseta sin mucho miramientos, lo hice girar y me senté en sus caderas, sonreí al notar su miembro sduro. Tosi por la falta de aire pero volví a besarlo, sujete sus manos por encima de su cabeza. Tosi de nuevo y él se sentó basándome.
-Lo siento.- lo miré frunciendo el ceño.
Volví a besarlo ya que él no tenía la culpa de mi dichoso asma, que siempre me salía cuando estaba caliente. Me tumbó de nuevo y me quitó los pantalones, se bajó los suyos y lo miré alzando una ceja, rio, separé las piernas y se colocó entre ellas.
-quiero intentar algo.- reí acariciando su pecho.- quiero que lo hagamos sentados.
-ummm- tiró de mí y me abrazó por la cintura, besé su cuello y lo abracé, enredé una mano en su pelo y con la otra me sujete a sus hombros. El aire me faltaba, solté un gemido cuando me penetró con fuerza.
Subí y bajé sin parar de gemir en su oído, él hacía lo mismo. Sehun no era fácil de saciar y tampoco sabía como habíamos acabado siendo pareja sexual. Solté un jadeo cuando tomó el control de mis embestidas, me mordí el labio y miré a la pared. Tenía controlarme un vaso de agua empezaba a crecer como una columna de agua, gemí con fuerza entre jadeos ahogados, cuando nos corrimos lo abracé con fuerza. El agua cayó empapando la mesilla, extendí una mano y volví a meter el agua en el vaso.
Sehun salió de mí y me tumbó, seguía tosiendo por la falta de aire. Sehun se vistió y me miró desnudo en su cama, se inclinó para darme un beso suave
-lo has hecho genial, hyung...-lo besé de nuevo pero salió dejándome sólo. Suspiré, me senté y saqué el inhalador de mi pantalón.
-Kris...- por algún motivo su imagen vino a mi mente y suspire, el me había tratado mejor a pesar de ser, también, su pareja sexual.
POV. KRIS.
Caí de rodillas en el suelo, estaba agotado, rápidamente vinieron a por mí unos médicos vestidos de blanco y azul. Me quedé de rodillas y miré mi chándal gris. Recibí una descarga en la espalda, grité y caí al suelo boca arriba.
-ya Sharon.- me tiraron del pelo y clavaron el sedante en mi yugular.- no hace falta que le hagáis eso...
-si escapa de nuevo me meteré en problemas, para evitar eso prefiero romperle las piernas si hace falta.-me deje caer en la tranquilidad de la inconsciencia mientras la imagen de Suho dormido en mi cama venía a mi mente con nitidez.