POV. LAY.
Miré agotado, sudado y con dolor de cabeza a Ji, estaba seguro de que me hacía pagar mi acto de hacía dos noches. Miré el cielo estrellado y jadee.
-levanta-negué desplomándome en el suelo.-Lay.
-no puedo más, me va a estallar la cabeza.
-vale-se sentó a mi lado y coloqué la cabeza en su regazo. Me miró y suspiró-Lo siento.
-ah-miré su cara y sonreí-¿te gusto?
-ya me has preguntado antes eso-sonreí mirándolo, se rasco la cabeza e hizo una mueca de vergüenza.-no es... Gustar... Es una conexión a un nivel demasiado personal.
-ah...-fruncí el ceño con desconcierto y él besó mis labio, me tense y se apartó-¿qué?
-nada, olvídalo-me senté y suspiré, agotado, mareado y estresado. -¿por qué me preguntas eso?
-porque, de ser que te gusto entendería porque me has protegido tanto.-Me miró desconcertado.-pero al no gustarte... Pues... Me da pie a pensar que me tienes lástima y por eso me tratas así.
-No te tengo lastima pero no puedo soportar que te hieran de ninguna de las maneras posibles.-lo miré frunciendo el caño por su gesto serio y por su tono de voz, demasiado serio para él.-Y si la forma de que me creas es diciéndote que me gustas pues sí, me gustas.
-¿quieres besarme?-se sonrojo y negó, sonreí mirando mis manos un poco apenado.
-bueno, sí... Pero no...-reí por su desconcierto.
-ya no me importa besar a quien sea... Total… Si no hay sentimiento da lo mismo, es sólo un contacto-me recosté a su lado mirando al cielo.
-Es triste que ahora pienses así
POV. CHEN.
Me dolía la cabeza, tenía hambre, estaba mareado y sin fuerzas para moverme de la cama en la que me habían acostado.
-¿qué tal estas?-la voz de Suho me llegó lejana y apagada. Gemí por el dolor de la cabeza, me ayudó a sentarme y me dolieron los ojos en cuanto estuve erguido.
-me duele la cabeza ¿qué ha pasado?-me frotó la espalda con suavidad.
-te desmayaste y tienes los ojos raros... Dan grima-fruncí el ceño, Suho se inclinó y cogió un espejo.
Miré el reflejo de mis ojos un poco extrañado ya que estaban con radios plateados, me pasé los dedos por el borde.
-¿por qué... Tengo los ojos así?-Suho negó desconcertado como yo.
-¿quieres agua?-asentí cerrando los ojos, me dio un vaso y bebí un poco.-estas pálido.
-todo brilla demasiado-me pasé las manos por los ojos, era verdad todo brillaba mucho y Suho tenía una especia de colores alrededor.-tengo sueño.
Me tumbe de lado, me rasque la cabeza y cerré los ojos. Suho me zarandeo un poco, abrí un ojo, sonreía.
-Tengo una buena noticia-fruncí el ceño, sonreía tímido.-:Lay.
-Cállate, si es que habéis encontrado su cuerpo no me lo digas-negó con una pequeña sonrisa.
-está vivo.-lo miré mal por la broma, me dolía sólo de pensar en cómo había estado en esa mesa de autopsias.-Chen, se lo que parece pero está vivo.
-Suho, no tiene gracia...-sentí un pinchazo en la sien y apreté los ojos.
-no es broma- se levantó y me dio unas telas blancas, me senté con un suspiró y las miré.
Estaban manchadas de barro, sangre y algo verde. Estas estaban rotas y la camiseta, descubrí que era ropa, había un corté en el lateral además del nombre de Lay.
-¿Por qué me das esto?-me limpié una lágrima, él suspiro y se sentó a mi lado.
-lo encontró Chanyeol en el ropero hace dos días... Luhan aseguraba que Lay lo había ido ver pero... Hasta que me lo dio no me lo creí.-solté la ropa y cerré los ojos.-Chen...
-déjame sólo-suspiró y vi cómo se levantaba, cerré los ojos y escuché la puerta.
Sólo era capaz de recordar una imagen de Lay. Él, blanco, frío, sin vida y con una sábana encima.
Era imposible que no llorara, él había muerto, no era verdad, no podía ser que seguía con vida. Eso no era cierto. Seguro que estaba en una pesadilla y ya está, me senté en el borde intentando no caer en un ataque de ansiedad. Respire con los ojos cerrados, quería calmarme.
Sentí paz de un momento a otro, unas manos me acariciaron con delicadeza la espalda, me recosté sobre ese pecho que me parecía tan real. Su aroma dulce a lluvia y primavera me sorprendió. ¿la mente era capaz de recordar cosas como esas? Debía serlo.
-Te amo-caí en la cama y no abrí los ojos por miedo a que desapareciera esa ilusión, podía haberme vuelto loco pero no me importaba.
Unas manos me acariciaron el pecho, suspire con una sonrisa y una leve presión en mis labios me hizo temblar el estómago. Ese roce cálido, suave, húmedo y delicado.
-mírame-con temor abrí despacio los ojos.
-lay...-sus manos acariciaban mis mejillas, sus ojos tenían un brillo de inocencia y a la vez de madurez. Volvió a acariciar mis labios con los suyo.-Estas muerto...
-no, no lo estoy-beso mi frente y me senté apartándolo, lo miré con los ojos abiertos como platos.
-¿no estás muerto?-negó con una débil sonrisa, lo miré fijamente con miedo a que desapareciera.
Fue a tocarme pero me aparte de su contacto, me miró sorprendido y giró tanto la cabeza como la mirada hacia un lado. No sabía por qué pero sentía que me iba a ahogar, me levanté y lo miré sentado en la cama.
-Chen...-mi corazón dio un vuelco cuando oí su voz, miró sus manos y vi que le caía una lágrima.
-¿de verdad estás aquí?-asintió débilmente, me sonrió triste y me acerqué a él. Agarré su manos y pasé sus palma por mis labios.-Lay...
-¿sí?-me miró con sus ojos llenos de esperanza, besé su palma, sonrió débilmente y lo tumbé acariciando su mejilla.
Coloqué mi pierna entre las suyas y pasé el pulgar por sus labios, me calló una lágrima, rió bajito.
-Desnúdate-abrió los ojos y negó.-de verdad eres Lay...
-no lo dudes por favor...-me puso las manos en mi mejilla, suspire y levantó un poco la cabeza para besar mis labios.
-Te amo...-suspiré.-No te separes...
Metí la mano por su camiseta justo cuando me puse a devorar sus labios con fuerza, me abrazó mientras lo arrastraba para arriba y poder acomodarse entre sus piernas. Acaricie sus costados, tiré, le quité la camiseta, besé su pecho. Gimió cuando pasé la lengua por la piel sensible de su clavícula, se sujetó de mis brazos mientras yo mordía con suavidad su nuez.
-Chen... No...-sujeté sus manos a ambos lados, lo miré a los ojos sonrió un poco y me abrazó la cintura con las piernas.-haz que olvide todo... Y sólo te recuerde a ti... Por favor...
-te amo.-bajé sus pantalones con suavidad, me miró, sacó mi camiseta por la cabeza, la tiró y me besó de nuevo.
Subí mi mano hasta sus labios, le metí los dedos en la boca, me sonrió y pasó la lengua por mis dedos. Veía como se nublaba su vista un poco. Frunció el ceño me pasó las manos por la espalda.
-tranquilo...-sonrió, saqué los dedos y lo miré fijamente-Gírate... Te dolerá menos.
-no, quiero que me mires.-asentí.
A la vez que lo besé lo penetre con un dedo, gimió arqueando la espalda, se mordió el labio cuando introduje un segundo y los moví. Se desplomó retorciéndose cuando lo penetre con tres. Suspire al recordar porque necesitaba tan poca preparación.
Saqué los dedos y lo empecé a penetrar lentamente, me miraba a los ojos, sonreí, me incline para besar sus labios. Soltó un jadee cuando comencé a moverme, nuestras caderas chocando fue lo que me hizo estar seguro del paraíso.
-CHEN-tiró de mí y me besó mientras alcanzaremos el clímax juntos, se desplomó agotado cuando se corrió en mi estómago. Reí en su oreja, besé su cuello y me miró con una sonrisa que hacía que su hoyuelo se notase más, lo toqué con el dedo.-¿me crees?
-sí...-salí de él y observé como la sangre se mezclaba con mi semen-¿te duele?
-estoy acostumbrado... Tú has sido el que más delicadeza a tenido...-suspire, me acarició la mejilla y me tumbe.
-¿Dónde has estado?... Te necesitaba...- apoyó la cabeza en mi pecho y me acarició con su mano.
-no lo sé... Yo desperté hace dos días...-solté el aire con lentitud, se sentó y llevó mi mano hasta un costado.-aquí me apuñalaron y ahora no queda ni un mísero arañazo...
-mejor.-tiré de él y lo besé con más fuerza que antes, sus dedos me acariciaron con suavidad mientras yo me ocupaba en devorar sus labios.
Abrí los ojos cuando me zarandearon, Suho me miraba preocupado, me senté extrañado al recordar lo que había sentido.
-¿por qué estas desnudo?-me sonroje y tape con la sabana.
-Lay...-me pasé la mano por el pelo a la vez que suspiraba.-debo de estar loco.
-¿qué paso?-se sentó a mi lado, negué.-vale... ¿por qué no te das una ducha?
Asentí, salió con un suspiro. Había tenido un sueño maravilloso, cerré los ojos cuando el dolor me hizo jadear, ahora no era tan bueno. Ojalá pudiera decir que había sido real, que sus besos eran reales, que seguía vivo, que me había dicho que lo amara... Lamentablemente sabía que no era así.
Cogí ropa al final del pasillo, suspire al ver el armario de Lay, corrí al baño y una vez dentro observé mi reflejo con una sonrisa. Tenía un chupetón en el cuello, arañazos en la espalda y los labios inflamados. Sí que parecía real, la mente debía ser poderosa.
POV. GD.
-Lay, respira hondo-acaricie su pelo echando agua en su cuello.
Estaba demasiado pálido, su pecho no hacía más que subir y bajar, agradecía que estuviera este pequeño remanso de agua entre las pequeñas cascadas. Las piedras cubiertas de musgo me ayudaban a que el agua estuviera templada, Lay empezó a respirar con tranquilidad.
-¿mejor?-asintió, entrelazo sus dedos en los míos y suspire. -te dije que no era buena idea, estas débil.
-Lo sé... Pero me necesitaba...-besé su cuello, la camiseta se le subió cuando me apartó un poco, se puso de rodillas y el agua le llegó por el pecho. -quería despertar con él...
-Lo sé Lay...-extendí la mano pero se apartó-YiXing...
-¿por qué me has traído se vuelta?-estaba triste, lo notaba, su energía había evolucionado y ahora era capaz de sentirlo casi igual que a KangJun. Lamentablemente también sentía su mareo, desorientación y sus ganas de vomitar, tiré de su camiseta apretándolo contra mi pecho- va a dudar...
-Lo sé-apoyó la cabeza en mi hombro, sus dedos acariciaban mi manga por debajo del agua.
-¿estás celoso?-negué con una sonrisa divertido.-lo parece... ¿no puedes dejar que vuelva?-negué de nuevo, Kang me observó en su forma de unicornio, asentí a su pregunta no formulada.
Sabía que aunque le pidiera a Lay que se uniera a nosotros no lo haría, con su trauma era un poquito difícil a pesar que estaba intentado conquistarlo un poco. Me sentía mal por ello pero necesitábamos completar el vínculo si queríamos ayudar para derrotar a la División.
KangJun se metió en el agua lentamente hasta llegar a la espalda de Lay, agarró al pequeño por la cintura, besó su cuello y Lay abrió los ojos de golpe.
-¿QUÉ HACES?-intentó apartarse pero estaba entre los dos, me miró entrecerrando los ojos al notar que estaba sujetando su camiseta.-¿qué...?
-Lay...-sus ojos brillaron un segundo y cayó inconsciente, golpee mi frente contra su hombro.
-la próxima habrá que darse prisa. Yo casi no te siento ya.-suspire, asentí y salió del agua.
KangJun me miró fijamente, teníamos que completar el vínculo o nos debilitaríamos lentamente. Lay boqueaba como si estuviera sintiendo una agonía.
-¿qué narices?-kang rió negando.
-no es él, no lo sientes por eso, el problema es el otro. NO ESTA BIEN QUE SIGA VINCULADO A ÉL.-cerró los ojos y una sombra negra lo rodearon.
-¿qué te pasa?-suspiró cansado, se froto los ojos con fuerza.
-Me cuesta mantener a raya las almas del purgatorio.-Suspire-me duele la cabeza- cogí a lay en brazos y lo llevé de nuevo hasta nuestro pequeño campamento, cuando lo tapó con una manta térmica me miró serio-acaba su instrucción y explícale de que va el vínculo... No podre durar mucho más.
-Comprendo.-suspiré, tiré de él y lo abracé con fuerza. Cerré los ojos y le dio un poco de mi poder, me empujó con fuerza.
-¿ESTAS LOCO? NECESITAS CADA GOTA QUE TENGAS- me miró con los ojos ganados, sonreí y me abrazó con fuerza-gracias...
-no hay de qué hermano.
POV. KRIS.
Besé a Suga con fuerza, no quería apartarme de él pero su amigo era la persona más indicada para mantenerlo a salvo. Me acaricio la mejilla, sabía que esperaba que le dijeran que no se apartara pero prefería mantenerlo lejos antes que perderlo.
-¿seguro que vas a estar bien?-asentí, volví a besarla de nuevo abrazándolo con fuerza.
-No hagas nada... Que pueda hacer que te pierda... Por favor...-asentí respirando su aroma, noté sus dedos en mi cuello, lo aparte y sonrió colocándose mi collar en su blanco cuello.- te lo devolveré cuando vuelvas a mi lado...
-Volveré-cogí su mano y quité su anillo, lo único que yo le había regalado.- y yo te daré de vuelta esto.
-eso espero-sonrió triste, alce su cabeza de nuevo y atrape su labio entre los míos.
-VAMOS-su líder nos separó de forma brusca, suspire despidiéndome de Suga con la mano, esperaba volver a verlo.
Suspire cuando el coche despareció en un giro de la calle, saque del bolsillo la cadena que me había dado Nyle, supuse que sabía que la necesitaría. Coloque el anillo en ella y saqué el pie de mi bota para ponerlo de tobillera. Tras ponerme la bota caminé hacia la cafetería en la que había cenado con Nyle.
Tras pedir me recosté en la silla, miraba las fotografías que tenía de Suga con un nudo en la garganta, se me hacía raro no estar con él.
-Tú debes de ser Kris.-alce la cabeza poniéndome en guardia.
Una joven bajita, de pelo rojo y naranja, con pecas y ataviada con una sudadera roja, pantalones de chándal negros y unas bambas blancas y rojas.
-¿y tú quién eres?-suspiro sentándose, parecía nerviosa.
-soy Carol... Nyle me dio unas series de pautas antes de liberarme...-agachó la cabeza y vi como su cara mudaba a una pena bastante triste.
-oh...-sacó un cuaderno con calaveras.
-me dijo que viniera aquí y os ayudará a luchar...-suspiré y asentí.
-¿cuál es tu poder?-suspiró, me miró y sus ojos se volvieron amarillos.
-Soy un lobo-asentí, volvieron a la normalidad.-según me dijo, estáis en problemas...
-¿viste morir a Nyle?-tragó saliva asistiendo.
-La convirtieron en un colador cuando quería escapar conmigo, no deja de ser humana... No quería morir aunque al final dio su vida para salvar a vuestro amigo.-suspiré, me había olido algo así.
-¿contra quién luchamos?-sonrió y sus ojos se volvieron amarillos.
-Contra la División, el gobierno desconoce lo que están haciendo con nosotros...-asentí con una débil sonrisa.
POV. LUHAN.
-Lu...-giré la cabeza al oír a Chen, sonreí un poco cuando vino a sentarse a mi lado.
-¿qué tal estas?-suspire, vino a sentarse a mi lado, tenía el pelo húmedo pero sus ojos estaban rojos.
-¿has llorado?-asintió mirando sus manos-entonces estamos igual...
-Luhan... Folla con Xiumin, te alegrará un poco-lo miré sorprendido, él pocas veces hablaba así-intenta seguir a delante...
-CHEN SÉ QUE ESTÁ VIVO, VUELVO A SENTIRLO, SU LUZ ME ACARICIA-suspiró negando, se levantó y miró la fotografía que seguía en el suelo.
-No puedo soportarlo...-salió de la habitación, pegó un portazo tan fuerte que resono por todo mi cuerpo.
-estás vivo-me calló una lágrima, sentí una caricia en la mejilla.
-aguanta, pronto volveré-me llegó una imagen de un lugar brillante, plateado y Lay con una sonrisa mientras su túnica turquesa se movía a su alrededor como si hubiera viento.-aguanta.-sonrió haciendo un corazón y volví a ver la habitación.
Jadee poniéndome de pie ¿qué había sido eso? ¿Dónde estaba lay? ¿Por qué parecía un elfo del señor de los anillos? ¿y porque sonreía mientras corría por un bosque plateado?
-MINIE MINIE-no sabía porque gritaba su nombre, ni sabía porque corrí a abrazarlo en cuento entró por la puerta. Mi bollo acariciaba mi pelo diciendo algo. Supuse que me había quedado en Shock por la imagen que había visto, aunque por un momento yo me había sentido liberado, en paz y un poco contento.
-Minie...-sentía que me asfixiaba por el llanto, me acarició el pelo-MINIE... NO ME DEJES SÓLO- tiré de su sudadera y suspiro negando.
-No te voy a dejar, tranquilízate-lo abracé con fuerza, cerrando los ojos.-¿qué pasa?
¿Por qué me comporto así? Oí que suspiraba, me cogió en brazos hasta llevarme a su cama, me tumbó y no pude soltarlo.
-cielo no te voy a abandonar-me acarició el brazo, me besó la mejilla, cogí su su camiseta cuando se separaba de mí, me miró a los ojos acariciando mi mejilla con una sonrisa.-no te voy a dejar sólo.
-minie... Por favor...-tiré un poco más de él-no te vayas... No me dejes sólo.
-LUHAN, ESCUHAME, NO TE VOY A DEJAR-me dio un beso en la mejilla, solté su camiseta y se apartó de mi-respira hondo-asentí y salió corriendo.
-MINIE.
POV. XIUMIN.
-MINIE ABREME-suspire, bajé las escaleras corriendo y tiré del brazo de Suho cuando llegué a la cocina.
-¿qué pasa?-suspiré tirando de él hacia la puerta de nuestro cuarto.
-Minie-oí un débil golpe en la puerta, Suho me miró frunciendo el ceño.
-ha tenido un ataque raro, no quería que me alejara y no para de llorar-otro golpe y suspire, Suho tiró de mi abrazándome.
-Habla con él-negué.
-MINIE COMO NO VENGA TE JURO QUE ME TIRO POR LA VENTANA-aparte a Suho y abrí de un tirón, Luhan tenía el ventanal abierto.-Minie...
-Ven aquí Luhan-me acerqué despacio y el vino corriendo a abrazarme.
-No me dejes sólo por favor... Tengo miedo.-suspire acariciando su espalda, Suho me miró mordiéndose el labio.-minie... Minie mírame.
-¿qué pasa cielo?-me miró fijamente, parecía estar al borde de un ataque.
-yo... Me estoy volviendo loco... Por favor ayúdame... No me dejes sólo-Lo abracé con fuerza, cerré los ojos y oí la puerta cerrarse.
Me besó cuando lo tumbe en mi cama, acaricié su pelo mientras lloraba. Me había contado lo que había visto y no me gustaba nada. Se quedó dormido poco después de que llegaran Kai y Sehun a dormir.
-¿me lo vigiláis un segundo?-asintió Kai sin dejar de acariciar el pelo de Sehun, ellos había juntado sus camas.
Salí pasándome la mano por el pelo, me preocupaba lo que le pasaba a Luhan. Baek Pasó a mi lado y vi que iba con Tao. Sonreí abrazándolo, me acarició la espalda y desaparecieron por el pasillo mientras yo bajaba las escaleras.
Suho estaba tomándose una copa sentado en la mesa, suspire y caminé hacia él. Cogí un vaso del armario, lo puse a su lado y me echó un poco de Soju, me bebí un poco notando el calor en la garganta.
-¿se ha quedado dormido?-asentí apoyando mi cabeza en la mano.
-¿por qué bebés?-sonrió de lado.
-Baek se ha subido con Tao... En menos de diez minutos estarán teniendo una sesión de sexo intensa.-Lo miré sin saber muy bien que decir, movió un poco el vaso y suspiró- no me atrevo a subir y evitarlo... Así que... Yo bebo cuando me lo huelo.
-¿y si lo sabes porque no se lo dices a Baek?-rió.
-Él me lo dijo, se acostara con él y después vendrá a llorar a mis brazos porque no siente nada por Tao.-asentí entendiendo lo que sentía.-Luhan está al borde de un ataque psicótico
-lo sé..-bebí y solté una tos por lo fuerte que era-quiero que... Quiero que esté bien y sonría.
-Quieres a tu ciervo-asentí, se levantó y me sorprendió cuando se tuvo que apoyar en la mesa. Volvió con un botoncito blanco, fruncí el ceño y él suspiró dejando el bote delante de mi.-son somníferos... Dale uno en el vaso de leche y dormirá del tirón... Te levantas como nuevo.
-¿por qué los tienes?-suspiró.
-porque drogábamos a Lay, Chen y yo.-se rió- increíble que éste vivo mientras los niños se preocupan.
-¿cómo?-se cogió la botella y rió bebiendo un trago.
-Está vivo, el unicornio está vivo. Me llegó una carta a través del CEO.-se levantó y observé como se iba escaleras arriba.