Sus largas piernas parecían escarbar el suelo de baldosas para encontrar apoyo, tratando de empujarse a sí mismo para quedar en una posición lejana al brillo plateado del arma que Kai sostenía.
Se presionó a sí mismo contra una esquina, sus manos arañaban urgentemente la pared detrás de él.
Sus ojos sólo podían ver aterrorizados la mano de Kai.
A pesar de que Kyungsoo odiaba mostrarle al menor cualquier emoción que el bully le causara, saladas lágrimas se deslizaron por las esquinas de sus ojos y recorrieron su rostro.
Kai, por otro lado, casi no mostró reacción frente al cambio en Kyungsoo. De resignado a alarmado, él sólo se mantuvo de pie, suspiró y agarró el hombro de Kyungsoo.
En lugar del esperado golpe, sin embargo, Kai simplemente giró a Kyungsoo, empujándolo para que su pecho quedara presionado contra la pared.
Incapaz de descifrar la falta de violencia, Kyungsoo golpeó por lo bajo a Kai, tratando de quitárselo de encima, cuando sintió el frío metal presionándose detrás de su cuello. Todo movimiento se detuvo, él no respiró ni pestañó.
"Me quedaría quieto, a menos que quieras que tu patético cuerpo pequeño se dañe aún más." Kai silbó contra su cuello.
Kyungsoo continuó quieto mientras Kai bajaba su cuchillo hasta sus manos cortando la cuerda y algo de piel en el proceso.
Sus manos cayeron a sus costados, la sangre fluía por sus muñecas. Kai cortó la tela de la mordaza y la sacó de la boca de Kyungsoo, arrojándola hacia otro costado. Liberó el hombro de Kyungsoo, y Kyungsoo se hundió en el piso.
Kai lo escaneó antes de darse la vuelta y buscar en su mochila. Le arrojó un pequeño tubo a Kyungsoo.
"Usa esto en tu rostro. Y si le dices una palabra a alguien, juro que lo lamentaras." Se giró hacia la puerta, colgando su bolso en su hombro.
"Las clases empiezan en diez minutos. Oh, una cosa más. Ese proyecto no se va hacer solo, perdedor. Realmente deberías empezar a trabajar en él si no quieres que tu padre se entere que estas desaprobando."
Kyungsoo se estremeció. En una oración, Kai había dicho elocuentemente lo que él ya sabía, que él haría el proyecto solo. Más aún, el énfasis estaba en la palabra "padre". Padre. En singular. Él no tenía madre.
Kai se fue, y Kyungsoo inclinó una vez más su cabeza hacia abajo. Él odiaba ser golpeado, intimado y que le recordaran que su madre estaba muerta. Él sabía todas estas cosas.
Pero la sangre goteando de su muñeca era nueva.
No se sentía bien, pero se sentí distinto a un corte normal. Este, él sabía que se lo merecía.
Él se lo merecía por odiar confrontarse.
Él se lo merecía por ser feo.
Él se lo merecía por ser el sujeto de su tortuoso regocijo.
Observó su muñeca antes de atar una tela alrededor de ella.
Sería difícil explicar si alguien veía su corte.
Se levantó y se dirigió al baño más cercano, el cual por suerte estaba libre de estudiantes y profesores.
Por primera vez, desde que se la lanzó, leyó la etiqueta en la botella. Corrector.
Kyungsoo abrió la botella y empezó a pasar ligeramente el líquido frío por su rostro. En segundos, su rostro se veía bastante normal.
Lo que sea que Kai le había dado, era por lejos mejor a la marca barata que él tenía en casa para cubrir sus moretones.
Kyungsoo ubicó cuidadosamente la botella en un lugar seguro de su mochila, para poder examinar mejor la marca luego.
Él no tenía mucho dinero, pero algo para esconder el abuso valía cada centavo.
Se dirigió a su primera clase. Se detuvo justo enfrente de la puerta, temblorosamente, su mano buscó el brillante picaporte.
Era el salón de biología, el mismo de su sueño, y una de las muchas clases que solía tener con Kai.
"Um... vas a entrar algún día al salón?" una voz molesta detrás de él, lo sacó de sus pensamientos. Se giró para ver a Suho, el presidente de la clase, estando detrás de él. La mano de Kyungsoo se movió de la puerta y dio un paso atrás.
Nadie se tomaba el tiempo para hablarle excepto para menospreciarlo o torturarlo. Pero Suho nunca se había burlado abiertamente de él.
Él no se unía a las peleas, pero tampoco hacia nada para detenerlas.
"P-perdón. Pasa tu primero." las sílabas se atropellaron en la boca de Kyungsoo, su mente estaba demasiado exaltada y cansado por la pasada noche.
El guapo chico de cabello color chocolate, asintió con la cabeza y pasó delante de Kyungsoo sin darle una segunda mirada.
"Te ves realmente pálido hoy. Deberías tratar de enfrentarlos." Suho dijo mientras atravesaba la puerta. Kyungsoo miró con los ojos muy abiertos el lugar donde Suho había estado.
¿Alguien acaba de decirle algo agradable?
De hecho, era más una observación que una palabra amable, pero no había sido un desprecio. Había agregado incluso un consejo. Los labios de Kyungsoo formaron una pequeña sonrisa y entró al salón de biología. Él fue a su asiento, que por suerte era un banco que no debía compartir, y sacó sus libros de texto.
La pequeñita sonrisa de esperanza, se desvaneció cuando recordó que no había sido capaz de hacer nada de su tarea.
"Pasen su tarea hacia delante." El profesor le gritó a la clase.
Kai, que se sentaba enfrente de él, apenas se giró para ver el rostro de Kyungsoo.
Kyungsoo sacudió su cabeza y Kai simplemente miró hacia delante de nuevo. Pasando su propia tarea (probablemente totalmente correcta) hacia el frente del salón.
Kyungsoo miró su cuaderno, tratando de no parecer culpable. Podría jurar sentir los ojos del profesor clavándose en él, y sabía que los estudiantes se burlaban de él en silencio.
A diferencia de la señorita Park* el día anterior, el profesor de biología, el señor Choi, no tenía escrúpulos a la hora de gritarle adelante de toda la clase. "Ve a verme después de clases, Kyungsoo." él dijo.
/* Ms: en realidad no es señora ni señorita, lo usan las mujeres que no quieren dar a conocer su estado civil/
Kyungsoo asintió con su cabeza y se hundió en su asiento, deseando que lo tragara y lo llevara a un lugar donde no tuviera que ver a nadie, donde el pudiera ser libre y no tuviera que preocuparse por nada.
Se desconectó de la clase de disección de ranas que el señor Choi estaba dando. Tratando de planear como sobrevivir a ese día.
La hora pasó poco a poco, se sintió como toda una vida. El timbre, agudo y absolutamente espantoso, sonó a través del salón, y los estudiantes rápidamente agarraron sus materiales antes de irse.
Kyungsoo caminó lentamente al frente del salón, cada paso añadía kilos de temor a su ya preocupada mente. El peor de los escenarios se interpretaba en su mente, la mayoría terminaban con Kyungsoo desaprobando la clase y teniendo que llevara casa una F para enseñarle a su padre.
Kyungsoo se acercó al escritorio, su cabeza inclinada hacia bajo sólo mirando sus desgastados zapatos, ni siquiera atreviéndose a mirar el rostro del señor Choi.
"Kyungsoo, cuál es el problema en clases? Eres un chico inteligente. No deberías estar desaprobando. Sé que sabes el tema. Pero necesitas hacer el trabajo. Tus notas han sido malas todo el año. Siempre haces la tarea y tienes correctas todas las preguntas. ¿Por qué no puedes pasar tus exámenes?" El señor Choi miró directo a Kyungsoo, casi como si tratara de diseccionar su mente para propósitos científicos.
Kyungsoo movió torpemente sus pies, y miró hacia un costado antes de abrir su boca.
"Yo... yo sólo... no soy muy bueno estudiando para exámenes. Hago mis tareas en el t-trabajo, entonces puedo concentrarme. Pero yo n-no t-tengo suficiente t-tiempo para estudiar."
Su boca se dejó caer con sus palabras, tratando de decir la verdad mientras evitaba revelar cualquier cosa sobre sí mismo que la escuela ya no supiera. El señor Choi asintió pensativo, parecía haber llegado a una solución en su cabeza.
"No tomes esto mal, Kyungsoo, pero pienso que tal vez hora que dejes tu trabajo. Tus estudios son lo más importante ahora mismo, no un trabajo que no te va a ayudar en la vida."
Kyungsoo levantó la cabeza de golpe, no creyendo lo que había escuchado. Seguro, él no tenía un gran trabajo. De hecho, era otra de las razones por la que los chicos se burlaban de él.
Un ayudante de costurera no era muy bien pagado, y era un trabajo de chica, pero él necesitaba el trabajo.
"Realmente lo siento señor Choi. Pero no puedo hacer eso." dijo Kyungsoo, tratando de forzar a su voz a ser firme.
El señor Choi observó el repentino cambio que se apoderó de Kyungsoo, y miró hacia abajo a una pila de papeles en su escritorio.
"Está bien, entiendo. Pero si tu rendimiento sigue siendo pobre, Kyungsoo, temo que no tendré otra opción que informar a tu casa sobre tus notas.
No puedes desaprobar la clase y esperar ser capaz de pasar de año. Puede irse ahora."
Kyungsoo asintió antes de lanzarse fuera del salón de clases. Lágrimas calientes de frustración brotaron de sus ojos, y corrió hacia el baño.
Se sujetó del frío cerámico del lava-manos, tratando de recuperar el control de su respiración.
Su pecho se sentía como si tuviera un animal tratando de salir, los moretones estirándose dolorosamente mientras sus pulmones rápidamente se contraían y expandían.
Él no sabía por cuanto tiempo iba a ser capaz de mantener su fachada enfrente del profesor.
Él no sabía por cuanto tiempo iba a ser capaz de mantenerla frente a Kai y los otros.
Volvió a pensar en esa mañana, como el cuchillo había desgarrado su muñeca.
Como el dolor era totalmente merecido.
Él lo quería de nuevo.
¿Pero cómo?
Él no tenía nada filoso y no él no podía simplemente ir a pedirse a alguien más que lo cortara.
Tenía que ser Kyungsoo, Kyungsoo tomando el control de su propio dolor.
Luego él recordó el estante que rompió en el closet de abastecimiento. Como todos esos coloridos sacapuntas de plástico estaban esparcidos en el piso.
(*Ese closet es como una especie de almacén)
Él caminó cuidadosamente hacia el closet donde había pasado la noche, tratando de no verse sospechoso. Cuando nadie más estaba en el pasillo, abrió la puerta. El closet estaba en el mismo estado desordenado, nadie lo había mirado dentro desde la mañana.
Rápidamente levantó media docena de sacapuntas- los cuales pronto serían cambiados. Corrió hacia el baño, sabiendo que su tiempo antes de la siguiente clase era limitado.
Tomando uno de ridículo color rosa, Kyungsoo estrelló el plástico contra la pared. Crujió, y él separó la dura cáscara y la arrojó al tacho de basura.
Él sólo necesitaría la cuchilla.
La colocó contra su muñeca (la cual estaba todavía a carne viva), y pasó suavemente la cuchilla por encima de su piel.
Él observaba mientras la sangre burbujeaba en la superficie, empujándose hacia afuera de sus venas.
Sentía que lo merecía.
Cortarse a sí mismo era un castigo que podía soportar.
Un corte por ser un mal estudiante.
Otro más por saber que a nadie le importaría-probablemente ni siquiera lo notaran- si de repente moría y nunca volvía.
Los dos cortes poco profundos en su muñeca eran un nuevo tipo de dolor.
Se sentía como si hubiera recuperado algo de control sobre sí mismo.
La puerta del baño crujió cuando alguien pasó por a través de ella.
Kyungsoo rápidamente escondió la navaja en su mochila y cubrió su sangrienta muñeca.
Su corazón se aceleró, pero sólo era un estudiante de primer año de ojos oscuros y pelo negro, que caminó detrás de él, sin prestarle atención.
Suspiró aliviado, y dejó el baño para ir a la siguiente clase.
A pesar de que él la compartía una vez más con el engendro del diablo, Kai, ellos estaban en extremos opuestos del salón, y raramente Kai tenía la oportunidad de meterse con él.
Se sentó con casi tanto entusiasmo como él se atrevió a sentir, sin parecer demasiado feliz.
Sabía que Kai no era del tipo que dejaba pasar la oportunidad de destruir algo que le pudiera importar.
El profesor, frívolo, del tipo misterioso, Mr. Kim, entró a la clase.
"Buenos días chicos! Hoy continuaremos nuestra charla sobre historia de la música, pero primero haremos un poco de calentamiento vocal!"
Kyungsoo comenzó a leer en voz alta sus partituras, dando cada nota perfectamente con una hermosa y melodiosa voz.
Una vez había soñado ser un cantante, actuar enfrente de sus fans, antes de ser aplastado por las suelas de las botas de la gente a su alrededor.
Y ahora que él había crecido, Kyungsoo sabía que nunca sería posible, que estaba condenado a vivir su vida en una terrible miseria.
Después de Kyungsoo, otros en el salón también trataron de hacer sus "calentamientos".
Baekhyun, otro chico en la clase, hizo un trabajo tan increíble como el de Kyungsoo, pero otros en la clase parecían estar luchando.
El último en realizar el conjunto de notas era Kai, el cual hizo un trabajo admirable también.
A lo largo del bloque restante, Kyungsoo escuchó al señor Kim hablar animadamente sobre la historia de la música y la industria musical, casi sintiendo que era observado.
Él no se molestó en mirar a su alrededor para encontrar un culpable, sin embargo, sabía que cualquiera que se atreviera a mirarlo, lo haría con una mirada de disgusto que él no podría soportar.
********************************************
Después de dos clases duras, historia y gimnasia, era la hora del almuerzo.
Kyungsoo tenía el último bloque para almorzar, él sólo tendría una clase más luego, antes de poder escapar del confinamiento de la escuela.
El almuerzo era siempre un problema para él, porque apenas podía pagar los pegajosos sándwiches que la escuela vendía, y porque una de sus personas "menos" favorita en el mundo, Kai, también almorzaba durante ese bloque.
Juró que la escuela lo odiaba absolutamente. De siete bloques en el día, Kai estaba en cinco. Cinco oportunidades para torturarlo.
Sin incluir las horas después de clases, por supuesto.
Después de estar haciendo la fila por cinco minutos para comprar un sobrevalorado sándwich, de jamón y queso según el empleado, pero parecía más dos trozos de pan con barro y hongo tóxicos, Kyungsoo escaneó la cafetería para encontrar una mesada solitaria en la que poder sentarse y con suerte estar solo.
Desafortunadamente, como si hubiera sido planeado, cada mesa ya tenía un grupo de personas.
Sintiéndose nervioso por estar llamando la atención, dado que había estado parado por dos buenos minutos, empezó a caminar hacia las puertas que conducían de vuelta al pasillo.
Podía simplemente comer en su salón de inglés, donde siempre había terminado cuando ocurría una situación así.
La señorita Park, la profesora, nunca estaba en el salón durante el bloque para almorzar, entonces a menudo podía colarse y simplemente hacer su tarea hasta que los demás estudiantes regresaran.
Cuando eso pasaba, sólo trataba de verse como un "asiento vacío".
"Perdedor! Vení a comer con nosotros!" La voz de Kris cortó el aire como un cuchillo. Kyungsoo miró a sus costados para ver que Kris en realidad lo señalaba a él, y luego señalaba la mesa.
Sentados en la mesa estaba el grupo usual, Kris, Kyuhyun, Jessica, Changmin, Chanyeol, Sehun y- OH SEÑOR- Kai.
Kyungsoo batalló mentalmente consigo mismo, tratando de decidir qué hacer. Él realmente, realmente no quería unirse a los bullies para almorzar, pero sabía que sería golpeado mucho peor sino lo hacía.
Finalmente dio un paso vacilante hacia ellos, su piel se erizó al pensar en ellos encerrándolo en el closet por una segunda noche. Kyungsoo cuidadosamente hizo su camino hasta la mesa y apoyó su sándwich antes de sentarse cautelosamente lo más cerca del borde que le fue posible, tratando de preparar una fácil huida.
“Oh, no, fenómeno*. Necesitas acercarte más que eso. Nosotros no querríamos que te pase nada. No es así?" Kris dijo, empujando a Kyungsoo para acercarlo más a Jessica.
*En el texto original dicen "freak"
Changmin se sentó en el otro costado, atrapando a Kyungsoo en el medio.
"Eso es todo lo que comerás, ojos grandes?" Sehun dijo mofándose, señalando el sándwich aun sin tocar enfrente de Kyungsoo.
"¿Quieres morir de hambre? Sería mejor que vivir como el estúpido que eres, supongo." dijo. Kyungsoo mantuvo su cabeza gacha, no quería mirar a ninguno de ellos a los ojos.
"No seas idiota, Sehun." dijo Kai.
Kyungsoo levantó ligeramente su cabeza para mirar con cautela a Kai.
"Es todo lo que él puede pagar, con su estúpido trabajo, sin madre y con un padre que no trabaja."
Dijo, sonriéndole satisfecho a Kyungsoo.
Kyungsoo tragó pesado, sin permitirse enojarse.
"Oh, pobre bebé." dijo Jessica con una falsa voz tierna, pellizcándole la mejilla con sus largas uñas.
"Supongo que deberíamos ayudarlo entonces, no es cierto?" dijo ella.
Antes de que Kyungsoo pudiera procesar el significado detrás de esas palabras, Jessica derramó leche sobre su cabeza dejándole en claro a lo que se refería.
La leche helada fue toda una sorpresa, tanto que casi se cae del banco donde estaba sentado.
Kris hizo una mueca y tomando su bandeja de espaguetis, la vació sobre Kyungsoo.
La espesa salsa de tomate mezclada con leche, se volvía rosa pálido mientras corría por su cuello, su rostro y sobre sus ropas.
Kyungsoo se levantó abruptamente, saliéndose de la banca para irse por la puerta.
Pero antes de que él pudiera dejar la mesa, su muñeca, la que antes había cortado, fue capturada por Kai.
Kai lo mantuvo en su lugar y agarró un pedazo de pastel, el cual estaba cubierto por una buena cantidad de chocolate.
Sonriendo ampliamente, aplastó el plato contra la camisa de Kyungsoo.
La camisa blanca ya estaba manchada con espagueti y ahora tenía pedacitos de pastel pegados a ella.
Kyungsoo alejó su muñeca bruscamente, haciendo que los cortes comenzaran a sangrar nuevamente.
Kai miró sus manos mientras Kyungsoo salía corriendo de la cafetería, sorprendiéndose por encontrarlas salpicadas de un líquido carmesí.
*****************************************
Durante el último bloque, Kyungsoo evitó hablar y mirar a Kai.
No fue un gran éxito, considerando que tenía que trabajar en el proyecto de inglés que se suponía que tenían que hacer juntos, pero se las arregló para ignorarlos y trabajar en el proyecto.
Decidido a no ser detenido por Kai y su pandilla de nuevo ese día, corrió fuera del salón de clases tan pronto como sonó la campana.
Corrió hasta la parada de autobús más cercana, y pagó rápidamente el boleto que lo llevaría lo más cerca posible de su casa.
Se dejó caer en uno de los asientos, evitando cuidadosamente la atenta mirada de las mujeres mayores en el autobús, todas parecían querer preguntarle sobre las extrañas manchas en su uniforme escolar.
Mientras el autobús se acercaba más y más a su casa, el estómago de Kyungsoo se apretaba, sin saber que esperar cuando llegara allí.
Cuando finalmente se bajó en su parada, levantó su vista hacia la pequeña y gris casa, temiendo por lo que sucedería al entrar.
La casa se veían tan siniestra con el cielo oscureciendo, a pesar de ser pequeña, las persianas colgando, las ventanas sucias, la pintura partiéndose, todo esto la hacía ver siniestra, como si toda la casa le estuviera frunciendo el ceño a Kyungsoo.
"Muévete, chico." Kyungsoo se tambaleó un poco mientras un hombre que sujetaba una caja bastante pesada, lo empujó para abrirse paso.
"Perdón." dijo Kyungsoo.
El hombre dejó la caja sobre la vereda frente a la casa vecina. La casa, era larga y de impecable color blanco. Era exactamente lo opuesto a su desmoronada casa y había estado a la venta hace unos pocos meses.
Kyungsoo supuso que finalmente había sido vendida.
Una mujer bajó de la camioneta detrás del hombre que llevaba la caja, ella lo observó mientras el hombre empujaba por segunda vez a Kyungsoo en su camino de regreso para conseguir otra caja.
"No te disculpes, querido. ¿Estás bien? Pareces estar realmente nervioso por algo." ella preguntó.
El corazón de Kyungsoo se aceleró. No podía dejar que esta mujer-su nueva vecina, asumía- supiera algo sobre él.
"Ah... no señora*. Sólo estoy tratando de pensar en todo el trabajo que tengo que hacer hoy!" dijo con una sonrisa falsa plasmada en su rostro.
* /ma'am es una forma educada de llamar a una mujer como "madame"./
Ella asintió con la cabeza y girando su cabeza hacia él, lo observó de pies a cabeza una vez más.
"Pareces tener la edad de mi hijo! Y vas a su misma escuela también!" dijo, apuntando a su uniforme.
"Hemos vivido aquí por bastante tiempo, pero necesitamos mudarnos a este lado de la ciudad para estar más cerca de mi trabajo. ¿Conoces a mi hijo? Estoy preocupada porque no podrá salir tanto con sus amigos ahora que estamos lejos. Su nombre es Jongin." ella hizo una pausa, luciendo seria por un momento.
"Aunque creo que la mayoría de los estudiantes con lo que me encontré lo llaman Kai."
El corazón de Kyungsoo se detuvo.
¿Kai? ¿Como su vecino? ¿Realmente el universo lo odiaba tanto? La mujer-la madre de Kai- todavía esperaba su respuesta y Kyungsoo se las arregló para mover su cabeza. La mujer sonrió.
"Me alegro tanto, él tendrá un amigo cerca!" dijo con una gran sonrisa.
"Hablando de eso, él estará pronto en casa." Ella miró su reloj. Justo en ese momento, el convertible rojo brillante de Chanyeol se detuvo enfrente de ellos.
Kai saltó del asiento de pasajero, y agradeció a Chanyeol antes de caminar hasta su mamá. Frunció el ceño cuando vio Kyungsoo.
"Corazón, este es nuestro vecino! Dice que te conoce de la escuela. Así que creo que tendrás alguien con quien salir!" ella dijo, empujando a Kai gentilmente hacia Kyungsoo.
"Ma, él es Kyungsoo. Nosotros en realidad no hablamos mucho." dijo Kai.
Kyungsoo miró a Kai sorprendido, no pensaba que Kai pudiera referirse a él por su verdadero nombre y sobretodo no pensaba que Kai tuviera la capacidad de ser así de educado.
La madre de Kai no parecía notar el tono forzado.