-Aah… ¡Draco!
Harry no podía parar de gemir, Draco era demasiado bueno en lo que hacía. Sentí que su cuerpo se quemaba, pero era un calor bueno lo que lo rodeaba. Las manos cálidas de Draco eran muy, pero muy habilidosas.
Harry arquear su espalda para tener más contacto con esas manos que eran su perdición.
Sentía que se iba a venir en cualquier momento. Parecía un sueño, un cruel sueño, en el cual él era poseído por la persona por la que empezaba a sentir algo.
Para la lastima de Harry, había acertado… era un sueño.
Harry ahogo un grito de frustración ante ello mientras se revolcaba en sus sabanas. El últimamente había tenido muchos sueños de ese tipo. Siendo exacto justamente desde que Malfoy lo había casi violado en una polvorienta habitación. Aunque solamente se habían tratado de un par de besos. Pero para Harry los besos eran algo muy importantes, ya que no mas se lo tenía que dar a la persona que amaba.
“Pero a ti te gusta y lo estas empezando a amar. Te gusto mucho especialmente ese beso que te dio en el patio mientras no había nadie” le dijo una vocecita en su cabeza. Esa voz lo estaba atosigando hace unos meses y siempre le hablaba con un tono de picardía. Era el mismo tono en el que hablaban los Slytherin.
Tubo ganas de patear algo cuando esa vocecita le recordó a Malfoy. Después del primer y segundo beso que tuvo con la serpiente, le siguieron otros más, tanto o más intensos. Harry siempre se repetía que había aceptado el trato del rubio porque quería experimentar. Ni siquiera él se lo creía, pero bueno.
Aun se reprendía por haber aceptado el trato de Malfoy, a Harry no lo beneficiaba en nada, según él, ya que Draco era el que decía cuando y donde. Además de que Malfoy quería algo más que solo besos y eso Harry lo notaba, ya que siempre Malfoy lo miraba de manera lujuriosa cada vez que Harry estaba a la vista.
Harry se negaba rotundamente a ser la puta personal de Malfoy, el solamente pensaba recibir besos, no otra cosa.
Harry se puso colorado con tan solo pensar en la “cosa”
Decidió levantarse e ir preparar antes de que lo notaran sus compañeros.
Harry maldijo a su suerte y al estúpido y dotado de Malfoy, que no le dejaban ni ducharse tranquilo.
*******
Una hora después Harry estaba bajando para desayunar junto con sus amigos.
Ron estaba igual que siempre, estaba adormilado y murmuraba cosas sin sentido entre esas cosas se podían escuchar nombres comidas. El, despistado como siempre, no podía darse cuenta del cambio que habían tenido sus amigos en las últimas semanas.
Harry no era el único que tenía un debate existencial, después de todo Hermione también había caído en los brazos de la tentación. Aunque Parkinson ya había adelantado sus clases con Hermione, pero eso no lo sabía Harry. Después de todo a ella le gustaba Pansy, ella no era ninguna ignorante y lo sabía, aunque sabía que la Slytherin nunca la pretendería.
Justo cuando cruzaban por la puerta del Gran Comedor Pansy choco a Harry y siguió su camino sin mirarlo. Típico.
Harry noto el conocido papelito en su bolcillo en donde seguramente estaba escrito el lugar y la hora en la que se encontraría con Malfoy.
Hizo un gesto que no le gustaría nada a su tía Petunia mentalmente a Malfoy mientras se sentaba en la mesa de Griffindor.
Harry se puso a desayunar con desanimo. El planeaba estar con sus amigos todo el día al aire libre, ya que era sábado y había un clima perfecto. Pero Malfoy había oscurecido sus ideas, ya que lo había situado en la tarde en un aula desocupada del tercer piso. Donde convenientemente casi ningún alma pasaba nunca.
El intento ocultar el anhelo que surgía en su interior con tan solo pensar en Malfoy y el solos en una aula en donde nadie los vería con sus hormonas descontroladas sacando a relucir sus necesidades primarias.
Harry miro a su alrededor. No había muchas personas, seguramente el resto seguía retozando en sus camas. Malditos suertudos, ellos podían hacer lo que quisieran en todo el día.
Harry termino de desayunar y fue con sus amigos a biblioteca a terminar de escribir un ensayo con las propiedades de la sangre de Dragón. Aunque, claro, esa idea no fue de Harry sino de Hermione, ya que según ella, ellos siempre dejaban todo para último momento.
Suspiro. Hermione a veces se comportaba demasiado como su madre.
Cuando termino reviso si había cometido un error y se lo paso a Hermione para que viera si a él se le había pasado algo por alto. Hermione lo miro rápidamente y le hizo un gesto aprobatorio.
Harry al ver que a Ron aun le faltaba termina fue a investigar alrededor para ver si encontraba algo. No es que Harry se hubiera convertido en una réplica de Hermione, solamente que él no pensaba dejar a sus amigos solos.
Fue a la parte donde recordó que había visto que había un libro de Defensa Contras las Artes Oscuras. Cuando llego a están empezó a escanear cada lomo para ver si era el que buscaba. Por fin lo diviso en una de las hileras superiores. Harry intento estirarse lo más que puso y ponerse de puntitas para alcanzar el libro, pero aun así no consiguió alcanzo el libro.
Lo intento otra vez pero quedo con el mismo resultado.
Harry estaba tan concentrado en conseguir el libro que no se dio cuenta de la persona que se le estaba acercando. Recién se dio cuenta de que había alguien cuando alguien oscureció la poca luz que recibía y una pálida mano tomo el libro que Harry quería.
Harry soltó un gritito de protesta y se dio vuelta para encarar a la persona que había sacado su libro. Aunque sus palabra quedaron atascadas en su garganta cuando se topo con un viperina mirada plateada.
En vez de despotricar en contra de Malfoy y todos sus antepasados se le subió la sangre a la cabeza y quedo con un adorable color rojo que predominaba en sus mejillas.
Malfoy se le acerco y se relamió visiblemente los rosados labios sin perder de vista los verdes ojos del Griffindor.
Harry paso saliva. Conocía esa mirada.
-Mmm… Potter tendrías que ver lo bien que te vez en este momento. Te vez muy… follable- dijo Malfoy con su típica manera de arrastras las palabras, de una manera tan parecida al siseo de una serpiente. Harry solamente pudo estremecerse ante ello.
Se había quedado sin palabras.
Harry no pudo hacer nada cuando sin previo aviso unos deseosos labios aprisionaron los suyos. Así era la manera de besar de Draco, el no era una persona dócil, por lo cual sus besos eran rudos y bruscos, como si lo quisiera devorar, pero igualmente hacían llevar a Harry al Nirvana.
El volvió a la realidad cuando Draco decidió que quería probar más de esa boca y le mordió el labio para que abriera la boca. Harry de manera instante abrió la boca y Draco empezó una batalla con la lengua de Harry, una guerra que obviamente Draco estaba ganando e iba a ganar.
La saliva de ambos empezó a resbalarse por el mentón de Harry, saliva que Draco se aseguro de quita con su lengua y luego empezó a descender hasta llegar hasta el cuello de Harry. Donde se aseguro de dejar un buen recuerdo, dándole mordiscos suaves y no tan suaves. No le importo que luego todos se preguntaran quien las había hecho, ya que él y Potter sabían perfectamente como habían llegado ahí.
Además esta tarde Harry tendría otras marcas que aunque fueran invisibles serian más preocupantes que unos simples chupones. Draco se iba a asegurar de eso.
*******
Harry empezó a prepararse para su “cita” con Malfoy, aunque esta cita de romántica no tenía ni una pizca, según él. Se decanto por unos jeans blancos y una camisa blanca.
Se fue cuidadosamente de la sala común, siempre atento de que nadie lo estuviera siguiendo. Después de todo lo ocurrido Harry se había convertido en una persona algo paranoica. Llego exitosamente en al aula donde ya estaba Malfoy esperándolo.
Harry se quedo estático, no sabía cómo pero presentía que tal vez no era buena idea estar ahí a solas con Malfoy. Una parte de él le recrimino que era algo absurdo, ya que Malfoy no lo había dañado desde que hicieron ese trato.
Examino a Malfoy de pies a cabeza, se veía imponente ahí vestido totalmente de negro. Parecía un ángel oscuro.
El se mordió el labio algo dudoso de acercársele.
Draco levanto una ceja al notar la duda en Potter. Decidió lanzar un hechizo para que la puerta se cerrara, así de esa manera Potter no huiría.
-¿Asustado, Potter?- dijo Draco mientras se le acercaba.
-¿Por qué lo estaría, Malfoy?- Dijo intentando alejar los pensamiento se le empezaban a crear en la cabeza.
-Tal vez porque planeo follarte hasta que quedes al borde de la locura y el único pensamiento coherente que quede en tu cabecita será mi pene entrando y saliendo de tu linda retaguardia mientras tu boca me pide que te rompa.
Harry se puso totalmente colorado. Tenia que admitir que de alguna manera le gustaba que Malfoy le hablara de esa manera, pero si alguna vez se lo preguntaban el negaría que hubiera pensado eso alguna vez.
-En tus sueños Malfoy- dijo Harry al no saber que decirle.
-En mis sueños estabas con menos ropa-dijo agarrándolo de los hombros y estampando lo en una de las mesas.
-¡Déjame!- dijo intentando salirse de entre los brazos de Slytherin.
-Otra parte de tu cuerpo no está de acuerdo con lo que dices- dijo tocando levemente el bulto que se le había formado a Harry en los pantalones.
Harry no pudo evitar soltar un gemido ante dicho roce. Maldita sea, Malfoy era un completo cabron.
Ese ruido alentó a Draco que empezó a quitarle la camisa a Harry, casi rompiéndola y empezó a besarlo en los labios mientras con una mano empezaba a pellizcar y retorcer uno de los botones rosados de Harry. El no podía más que gemir y retorcerse antes esas sensaciones tan nuevas y placenteras. Estas sensaciones que sentía no se podían comparar ni una pizca con las que había tenido en sus sueños, estas eran mucho mejores.
Cuando Draco sintió que ese pezón ya esta lo suficiente duro fue hacia el otro y procedió a hacer lo mismo.
Draco descendió hasta la clavícula donde le dejo una mordida sangrienta donde el después se entretuvo limpiando la sangre que se deslizaba por la tersa piel del de ojos esmeralda. Tal vez Draco tendría algo de sangre de vampiro corriendo por sus venas, pero descarto ese pensamiento ya que él era un sangre pura.
Draco dejo de eliminar el líquido rojizo para luego ir dejando pequeños beso mariposa en el torso del Griffindor. Paso de largo la urgida entrepierna del otro para descarta su calzado. Luego tironeo los pantalones para poder verlo bien. Aunque dejo sin quitar los calzoncillos que marcaban de una forma un tanto deliciosa el miembro y el trasero.
Se aproximo quedando a unos centímetros de su tesoro donde empezó a lamer sobre la tela torturando al ojiverde.
Harry estaba obnubilado por el gran placer que le prodigaba el rubio, pero quería decirle algo sin embargo no conseguía la manera de enfocar su mente para juntar las palabras por lo cual solamente conseguía soltar puras incoherencias.
El rubio decidió quitarle de una vez por todas es pequeña prenda ya que le urgía ver sin ninguna reserva el cuerpo del Gry.
A Draco por primera vez desde que empujo a Potter a la mesa y lo manoseo como si no hubiera mañana se pregunto por qué Potter estaba tan tranquilo, ya que después de todo el Griffidor nunca fue una persona obediente. Pero desecho sus incógnitas como todas las otras que había tenido antes.
Agarro el miembro que se le presentaba turgente y tieso ante él, Draco pudo evitar relamerse ante ello. Tenía un tamaño perfecto, no ni muy pequeño ni muy grande. Pero si era grueso y el glande de un brillante color rosado y estaba lleno de venas que parecían que estaban a punto de reventar. Primero soplo suavemente la punta e intento tener contacto visual con el Griffindo, ya que quería ver su cara. No hizo falta que Draco hiciera algo ya que Harry ya lo estaba observando.
Por lo cual Draco sonrió cuando se metió de un saque el falo de Harry. Le ardía un poco la garganta ya que nunca jamás en la vida había hecho algo así, pero estaba satisfecho con solo ver las expresiones que el provocaba en el moreno.
Agarro las caderas del moreno para que no las moviera y empezó el mete-saca con un ritmo lento primero para luego acelerar cuando noto que los testículos se le tensaban lo que significaba que era el preludio del orgasmo del moreno.
El moreno tironeo los cabellos platinados mientras él descarga su esperma en la boca del otro.
Draco llevo tres dedos a la boca del moreno. Harry al principio miro los dedos desconcertado pero entendió cuando sintió algo húmedo y caliente que se deslizaba por sus nalgas. Después de todo Draco por obligación tenía que preparar bien a Harry. Harry a regañadientes acepto los dedos del rubio en su boca.
Draco sintió que se iba a correr en cualquier momento cuando esa boca acobijo a su dedos en su interior. Por lo cual saco enseguida los dedos de su interior y procedió a hacer círculos alrededor de la fruncida entrada del moreno para luego ir metiendo despacio el primer dedos, espero unos segundos para luego meter con la misma delicadeza al segundo y empezar a hacer movimientos de tijeras. Mientras empezaba a hacer pequeñas envestidas con su dedos metió el tercero.
Siguió así por unos segundos más hasta que no pudo más y su planto sus dedos con su miembro.
Harry al sentir una intromisión más grande derramo unas lágrimas silenciosas, después de todo aunque Draco lo hubiera preparado bien, su pene seguía siendo muy grande para compararlo con sus dedos.
Draco beso a Harry por toda la cara para que se calmara e intento contenerse mientras el otro se acostumbraba.
Cuando Harry sintió que ya no sentía mucho dolor empezó a mover sus caderas para alentar al rubio a que prosiguiera. Draco no se hizo espera por lo que empezó a embestirlo despacio para luego perder la poca compostura que le quedaba y empezar a embestirlo salvajemente. Capturo sus labios para empezar a darle un beso mortal que aria que todos se desmayaran con solo verlo. De ese tipo que se daban con la boca abierta sin impórtales si la saliva se les caía o no.
Cuando Draco estuvo al borde de su orgasmo empezó a masturbar a Harry rápidamente. Ambos llegaron al climax gritando el nombre del otro.
Como si fueran un par de enamorados se abrazaron para recuperar el aliento, Draco seguía sin sacar su miembro del interior de Harry.
Cuando saco su falo del interior del Harry lo miro con un brillo extraño en los ojos.
-Tendrás que entender que un Griffindor no es una persona de una noche que se usa y luego se desecha, Draco- dijo Harry mientras volteaba a Draco y se ponía arriba del mientras le sonreía con picardía.
Draco le respondió con un gritito ahogado para luego devolverle con la misma sonrisa.
-Lo comprendo Potter… Más de lo que me gustaría aceptar pero lo comprendo
Después de todo ¿Quién dijo que un león y una serpiente no podían ser una buena combinación?
Además existían pociones que puede asegurar que en el futuro habrá un heredero con el apellido Malfoy.
Ellos podrían afrontar los problemas que tendrían en un futuro no importaba que tan graves fueran ellos podrian sobre llevarlos.
Despues de todo Harry supo esperar 6 años para el momento en el que podria por fin estar cerca de Draco como algo mas que enemigos.
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