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Gangsta Girl por Niiummy Sarang

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Notas del capitulo:

¡Hola de nuevo! Oww he regresado jojo. Y regreso antes de lo esperado pero me moría de ganas por hacerlo.

Gracias a quienes comentaron, por favor no dejen de leer y comentar, y aquellos lectores silenciosos, les invito a dejar reviews, vamos, ¡es gratis! XD

El capi de hoy es algo especial, así que espero que lo disfruten.

No tengo mucho que decir, así que solo les dejaré leer, espero que lo disfuten.

Canción recomendada:

BY2 –When love walked in

CAPÍTULO 2: Nuestra Cita.

POV’s Krystal.

Al día siguiente todo comenzó de nuevo, la protectora de Jessica me acompañó a mi salón para después retirarse al de ella. Esta vez teníamos clase de Historia y la señorita Han Ji Won era una maestra amable, joven y muy bonita, sin embargo, era toda una profesional en lo que hacía y sabía muy bien cómo controlar a los chicos rebeldes de nuestra clase. Dio inicio a su clase, y justo cuando faltaban cerca de treinta minutos para que ésta acabara, dio un anuncio:

–Estudiantes quiero que realicen un trabajo de a parejas para una exposición sobre el tema visto hoy para la próxima clase. Yo elegiré las parejas, y será al azar. No quiero que me pidan cambios, las parejas son definitivas y se quedarán así durante todo lo que queda del año. ¿Entendido?

Todos dimos un “Sí, señorita Han” por respuesta, y la maestra comenzó a elegir las parejas.

–Bien. –Empezó –Lee Changseon con Bang Mir. Ahn Daniel y Rick... Choi Seunghyun y Kwon Jiyong… Park Bom y Park Sandara…

Escuché en silencio mientras esperaba que me nombrara para saber cuál sería mi pareja. Pasaron los minutos y aún estaba en incertidumbre. Finalmente levantó la mirada, me vio por unos leves segundos y pronunció:

–Y Krystal Jung con Amber Liu.

Me congelé por unos segundos, sin estar segura de lo que la maestra había dicho, quizás sin querer creerlo. Entonces miré a la rubia, que ahora se hallaba recostada contra la pared, mirando por la ventana con despreocupación. La campana sonó, haciéndonos saber que la clase había acabado. Vi cómo todos mis compañeros se dirigían a la salida, la mayoría me miraba con curiosidad, los escuchaba hablar en voz baja que se compadecían de mí por haber terminado con la súper gánster criminal a la que nadie se le acercaba porque le temían…

 

La luz del sol me ha dicho “Buenos días”,

Mi yo de hoy será más valiente que el de ayer,

Tropezar y caer, ¿Cuándo seré capaz de dejar de fingir?

 

 

Oh, oh… Amber Liu y yo tendríamos que realizar juntos el trabajo de historia. Sí, probablemente yo era una pobre tonta que había caído en las garras de aquel ser malicioso de mirada seria y distante. ¿En qué me había metido?

Afortunadamente reaccioné a tiempo, y antes de perder de vista a Liu, me le acerqué, algo temerosamente debo agregar. Pero no me dejaría intimidar, debía parecer fuerte, aunque fuera un poco.

–Espera –dije, tocando delicadamente su hombro.

Se giró lentamente y me miró inexpresiva. Era cierto, su frívola mirada era aterradora, sus orbes marrones me escrutaban en silencio, sentí que las piernas me temblaban y por poco no podía respirar.

–Yo… –Balbuceé, sin estar segura de qué decir –yo me preguntaba si podrías venir esta tarde a la biblioteca. –Enarcó una ceja, como extrañada de mi repentina petición –por… –quise explicarme –por lo del trabajo de historia que… –respiré profundo y luché por terminar lo que había empezado –que debemos hacer juntos.

Agudizó la mirada, luego la desvió, se llevó una mano a su oreja por dos segundos y volvió a mirarme.

–No me gustan las bibliotecas –dijo al fin, con un tono de voz profundo y algo… sensual.

 

A la izquierda o a la derecha, siempre haciendo lo contrario

Sin embargo, en mi corazón, aún importa mucho lo que piensas

Somos una pareja incómoda

¿Podemos simplemente apoyarnos entre nosotros de esta manera?

 

 

Debí suponerlo, es una chica rebelde, ¿Qué esperaba…?

–¿Eso es un ‘no’? –Logré articular. –Podemos realizarlo en otro lugar si te parece…

Para mi sorpresa, no respondió. Se dio la vuelta y continuó con su camino, como si nada hubiese sucedido. Diablos… ¿“Realizarlo en otro lugar”? ¿Realmente no se me pudo ocurrir algo mejor? Con pasos derrotados salí caminando al campus, y Victoria y Sulli me esperaban en nuestro lugar de siempre; por sus expresiones de curiosidad podía adivinar que solo estaban esperando mi llegada para bombardearme con preguntas y frases lúgubres.

–De verdad que tienes mala suerte –la primera fue Sulli –ayer te envía a detención y hoy esto…

–Debes tener mucho cuidado –me advirtió Victoria –y estar muy alerta, nunca se sabe cómo pueda reaccionar las personas como ella…

Y así siguieron ese par, dándome consejos acerca de lo que debía y no debía hacer estando con Amber Liu. Yo las escuché en silencio, ¿Qué otra opción tenía? Sí, ninguna. A veces Victoria y Sulli podían tomarse muy a pecho su papel de “hermanas” mayores, y es que siempre fuimos como hermanas, y a pesar de que no era por mucho tiempo, ellas eran mayores que yo. Y claro, Jessica les había pedido que me cuidaran bien, como su hermanita menor, y así lo hicieron.

Más tarde ese día, cuando las clases acabaron, me dirigí a la biblioteca y comencé a buscar libros sobre el tema del que la señorita Han nos había hablado horas antes. Claro, antes de quedarme, les avisé por teléfono a mis padres y a Jessica para que no se preocuparan por mí, el explicar las ausencias era costumbre entre nosotros. En fin… me hallaba leyendo en silencio, ya me había resignado a que lo más probable era que Amber no se apareciera por la biblioteca esa tarde, se notaba que no era su estilo y había dejado claro que no le gustaban esos lugares; sin embargo, como fuera, debía hacer el dichoso trabajo para exposición, la calificación de éste era muy importante en el semestre y definitivamente no acabaría con mi registro perfecto de buenas calificaciones por culpa de esa rubia maliciosa.

Debí haberme sumido demasiado en la lectura, porque cuando detecté que había alguien más allí y puso su mano sobre mi hombro, casi me muero del susto. Rápidamente me giré para descubrir de quién se trataba, y cuál no sería mi sorpresa cuando me di cuenta de que era la mismísima Amber Liu.

 

Simplemente me gusta perder el tiempo contigo

Me gusta nuestra armonía táctica

Cuando el amor llegó y puso los latidos de mi corazón en un frenesí

 

 

–Amber… Liu… –como una tonta, pronuncié su nombre completo y además pausadamente, como si aquello fuera más que irreal.

–Sólo dime Amber –contestó, sentándose en una de las sillas vacías alrededor de la mesa más cercana a nosotros –no hace falta pronunciar mi apellido siempre.

Entonces, fue más fuerte mi deseo de saber qué era exactamente lo que hacía.

–¿Qué haces aquí? –Indagué, cuando comenzó a ojear uno de los libros.

–¿Cómo que qué hago aquí? –Me miró con obviedad –hay un trabajo que debemos realizar.

–Lo sé… pero… creí que no te gustaban las bibliotecas…

–Y no me gustan –se encogió de hombros –pero ya estoy aquí, ¿no?

–Pero… –Yo aun no lo podía creer.

–Basta –ahora me miraba con seriedad y quizás desdén –si lo prefieres… –se puso de pie –entonces me iré.

Estaba a punto de dar media vuelta cuando la detuve.

–No, no, espera –me miró fijamente, como esperando que continuara –lo siento –me froté avergonzada la nuca y desvié la mirada unos segundos, sin ser capaz de enfrentar sus orbes marrones –está bien, me alegra que estés aquí.

–Bien. Gracias. –Asintió con la cabeza –ahora… –Miró todos los libros desparramados por la mesa e hizo un gesto de confusión – ¿por dónde empezamos?

Me sonrojé levemente, habría pensado que yo era una compulsiva y desordenada. Le expliqué cuáles eran mis ideas para centrarnos mejor en el tema y también le hablé un poco acerca de lo que pensaba para nuestra exposición. Pareció estar de acuerdo en todo, puesto que no mostró objeción alguna, y después de discutir ciertos asuntos, comenzamos a leer.

Esta vez, aunque ya no podía sumirme por completo en la lectura dado que estar con ella me ponía de nervios, intenté lo más que pude el concentrarme. Pero sus palabras me sacaron de mis pensamientos…

–Hey, Krystal Jung, ¿Te divertiste mucho en detención ayer?

–¿Qué?

–Espero que tu estadía allí haya sido agradable, pero no debes acostumbrarte, no es un lugar para las chicas buenas como tú.

La miré entre confundida e indignada.

–¿De qué estás hablando, Amber?

–Inesperadamente apareciste en detención, ¿Qué se supone que hayas hecho para terminar allá?

Fruncí el ceño, la había atrapado.

–Fuiste tú, ¿verdad? –Señalé.

–¿Huh?

–Fuiste tú la del mensaje de ayer.

Una sonrisa de lado apareció en su rostro, deslumbrándome de inmediato, cosa que intenté ignorar a toda costa. No respondió, dándome la espalda y ojeando despreocupadamente un gran libro con excelentes ilustraciones.

–Fuiste tú –insistí – ¿Por qué escribiste tal cosa?

Se encogió de hombros y regresó la mirada al libro.

–Será mejor que te pongas a trabajar en nuestro proyecto. –Dijo de la nada –a mí no se me ocurre nada por el momento.

Hice una mueca de descontento y traté de dejar las cosas como estaban, intentando buscar algo útil en los libros que allí teníamos.

Esa chica de temperamento difícil y mala actitud. Pensaba con simpleza pero tomaba acciones drásticas. Y lo más raro era que aunque en ese momento estar a su lado me asustaba, la encontraba malditamente atractiva e incluso tierna mientras leía con aparente interés.

 

Cuando estoy triste, aún te tengo a ti para convencerme, engañarme, burlarte de mí

Entonces me doy cuenta, de que tenerte quejándote, y tu comportamiento juguetón, es lo que hace que mi vida deje de ser monótona

 

 

No supe cómo, pero fue así como la semana transcurrió, y mis encuentros con Amber se hicieron cada vez más continuos, puesto que nos veíamos cada tarde en aquella biblioteca para concretar detalles de nuestra exposición.

El jueves, justo el día antes a la exposición, se puso de pie imprevistamente.

–¿Te vas?

–Nos vamos –increpó.

–¿Huh?

–¿Qué te parece si vamos por algo de comer? –Se sobó el estómago – ¡Tengo mucha hambre!

Dudé por un momento, ¿estaría bien aceptar su invitación?

–Vamos –insistió. –Yo invito –sonrió.

Era oficial, su sonrisa me hipnotizaba.

–D-de acuerdo –acepté al fin.

–Bien, conozco un lugar bueno.

Llegamos hasta un establecimiento en el que se servían helados y ensaladas de frutas de todo tipo, era increíble, había un olor dulce que impregnaba el ambiente también.

Como nunca había estado en ese lugar, esperé a que ella ordenara y pedí lo mismo. Así, ordenamos, y lo último que me imaginé en la vida era que a Amber Liu le gustara tanto el dulce y los helados, pero era así.

 

A mí me gusta la sensación de que te preocupas por mí

Sólo me gusta este tipo de sensación

En realidad, es imposible predecir cuándo el amor llegue.

 

 

–¡Está delicioso! –Exclamé cuando probé mi ensalada de frutas al igual que ella.

–Lo está ¿verdad? Por eso me gusta venir a este lugar –declaró sonriente.

Seguimos comiendo, hasta que de repente me detuvo.

–Hey, Jung.

–¿Sí?

La verdad no me gustaba que me llamara por apellido, pero no me atrevía aún a pedirle que me llamara solo por mi nombre.

–Tienes algo de helado en la comisura de los labios. –Declaró.

Violentamente sonrojada, llevé apresuradamente una servilleta a mi boca y limpié tan rápido como pude.

–¿Ya? –Indagué, aun avergonzada.

–Todavía tienes un poco… –tomó una servilleta –justo… aquí… –Me limpió –ya está –asintió con la cabeza.

–Gra… gracias… –Logré pronunciar.

¡Qué vergüenza! Amber Liu me acababa de limpiar la boca, y casi muero al pensar que lo que acababa de hacer era lo que hacían los enamorados, el simple hecho de haber salido a comer algo y conversar ya lo hacía parecer una cita. Qué tonta era yo, pensando tantas tonterías.

 

Sólo después de que hemos llegado,

nos damos cuenta de que el destino nos está siguiendo muy de cerca

No podemos escapar de él…

Todo lo que puedo hacer es darte mi mano para agarrar con fuerza la tuya.

 

 

Sin embargo, la faceta que ahora me mostraba era distinta. Ya no era la chica frívola y distante, sino una muchacha divertida, fresca y pícara que hacía lo que le placía y que le importaba nada lo que los demás pensaran de ella. Sin embargo, hubo otra cosa que me extrañó mientras comíamos, y es que… por alguna razón, me sentí observada, pero fue algo que preferí no mencionarle a mi acompañante, quien parecía más que feliz con su enorme ensalada con helado chocolate, crema chantillí y frutos rojos.

–Gracias –le dije en cuanto salimos de allí.

Asintió con la cabeza y después miró su reloj.

–Ya es tarde… ¿Quieres que te acompañe a casa?

¡Dios! ¿Podría ser tan linda? Ella era como una princesa que actuaba como príncipe, su voz grave y sus cabellos que a veces llegaban a taparle los ojos, tan hermosa…

 

A mí me gusta la sensación de que te preocupas por mí

Sólo me gusta este tipo de sensación

En realidad, es imposible predecir cuándo el amor llegue.

 

 

Pero tenía que regresar a la realidad, y no podía dejar que se molestara más por mi culpa, no podía abusar de su estado de “buena gente” a pesar de que ni siquiera sabía si aquello duraría.

–No es necesario –negué con la cabeza al fin –gracias.

–Bien, entonces nos veremos mañana.

Mientras caminaba a casa en lo que el sol empezaba a tornarse naranja con la intención de esconderse por el oeste, no pude evitar pensar en lo que acababa de ocurrir, en lo que de por sí ocurría. De alguna manera, me estaba volviendo algo más cercana a Amber, y estaba descubriendo una parte de ella que me causaba curiosidad, me gustaba mucho la sensación que me invadía cuando me miraba con diversión o me sonreía. Esa chica era salvaje y malvada, pero su sonrisa era tan encantadora como la de un ángel.

Aquella tarde habíamos tenido nuestra… para mí había sido una cita, sí, eso había sido; una cita en el que disfruté el mejor helado de mi vida, porque estaba con ella, la chica gangsta que conscientemente o no me hacía sonreír con el más simple de sus gestos.

 

Sólo después de que hemos llegado, nos damos cuenta de que el destino nos está siguiendo muy de cerca

No podemos escapar de él

Todo lo que puedo hacer es darte mi mano para agarrar con fuerza la tuya.

BY2 –When love walked in

 

 

Lo que jamás me pude haber imaginado es que después de aquel día, mi mundo se voltearía al revés, y todo lo que hasta ese momento había conocido, cambiaría para siempre.

 

 

Notas finales:

¿Y bien? ¿Qué opinan? Oww en serio espero que les haya gustado.

Además… ¡necesito su ayuda! ¿Qué pareja quieren? Luna x Sulli, o Sulli x Victoria o Victoria x Luna? Voten y ayúdenme a decidir, la pareja más votada será la elegida, así que por favor ayúdenme en serio!

¡Dejen muchos reviews! Con más de cinco RW’s actualizo!

Por si les interesa el YAOI y las parejas como la KyuMin, la YunJae, la GD&TOP, Soulmate o así... bien pueden pasar a mi perfil a ver más fics míos.

Gracias por leer mis ocurrencias, bye bye!


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