Capítulo 7
-¿Por qué tan serio Ri?- me pregunto Suk acercándose con una caja en las manos.
-Por nada en articular, solo que no hay mucho trabajo y por lo tanto no mucho que hacer.- dije, en cierta forma era verdad, sin embargo esa no era la razón que mantenía mi rostro apagado. Desde la noche anterior en que nos quedamos encerrados juntos, Ji se ha comportado de una manera fría, distante, arrogante y en cierta forma grosera conmigo, la verdad no entiendo el porqué, he procurado no molestarlo, me he mantenido alejado y aun así su actitud me lastima. ¿Acaso realmente me odia?
-Pues no importa Ri, he venido aquí para distraerte un poco, mira..- Suk hablaba animadamente sacándome de mis pensamientos.
-¿Qué hay dentro?- mire la caja extrañado
-Pues ábrela- y sin dudarlo comencé a sacar todas las cosas de su interior, eran objetos de utilería pero en la mayoría se trataba de cosméticos y pelucas.
-Oye y yo para que quiero todo esto- lo mire, esperando una respuesta pero el solo sonreía.
-Pues veras, ya que hay bastante tiempo libre decidí mejorar tu apariencia, ese maquillaje no es muy bueno y ni hablar de la peluca, es espantosa- No tenía ánimos de hacer ese tipo de cosas, pero Suk era un chico muy amable y alegre, era difícil negarle algo con esa cara tan angelical que tenía.
-Muy bien Suk, pero no me vayas a ser cosas extrañas, no vayas a arruinar mi belleza-
-Hay Ri tu siempre tan ególatra, por eso me gustas- apretó mis mejillas mientras movía mi rostro de un lado a otro. Este chico decía cosas extrañas a veces.
-Bueno, bueno hay que empezar, antes de que llegue la gente.- Comenzamos a hacer combinaciones de todo tipo, nos probábamos esto y aquello, nuestros rostros parecían todo un circo y yo me divertía, me gustaba mucho pasar tiempo con él, de alguna u otra forma lograba siempre animarme, sacaba una sonrisa de mi rostro, hacia todo lo posible por no verme decaído, y era algo que yo le agradecía.
Transcurrieron un par de horas y nosotros seguíamos metidos en nuestro juego, Suk tomo una bufanda y la coloco alrededor de mi cuello, comenzó a jalar de ella, cada vez retrocedía un paso, hasta que accidentalmente resbalo con la montaña de ropa y pelucas tiradas y por consiguiente terminamos en el suelo, las risas invadían el lugar, ni siquiera habíamos notado en qué posición habíamos terminado, yo arriba de él, con nuestros rostros tan cercanos que podíamos sentir la respiración del otro, a mí no me importo era divertido sin embargo para Suk fue diferente, lo mire a los ojos en cuanto terminamos de reír, no dije nada solo sonreí, sus mejillas se tornaron de un color rojizo y desvió la mirada. Estaba centrado haciéndolo sonrojar cuando una voz apareció en la habitación provocando un escalofrió por todo mi cuerpo.
-Si tienen tiempo para estar haciendo demostraciones amorosas, también deberían tenerlo para limpiar este lugar, es todo un desastre- Ahí estaba el con ese tono despectivo y ahora enfurecido, me levante precipitadamente y trate de explicar pero simplemente dio la vuelta.
-Seung Hyun en cuanto termines con todo este desastre y de sacar la basura, Top te quiere ver en su despacho, así que por favor deja de jugar y ponte a trabajar- sin mirarme salió de la habitación con los brazos cruzados. No podía ser posible, cada día buscaba la forma de cruzar tan solo una frase con él y ahora que lo había logrado solo conseguí enfurecerlo. En realidad no era diferente a todas las ocasiones anteriores, me evitaba todo el día, y cuando me dirigía la palabra solo era para reprenderme.
-Vamos Seungri no pongas esa cara, yo te ayudare a levantar, esto fue cosas de dos, además así terminaremos mucho más rápido- asentí y nos dispusimos a levantar, no había pasado ni 5 minutos cuando volvió a aparecer Ji.
-Por cierto a ti te quiero en la planta baja en este momento, los del cementerio están teniendo problemas y necesito que lo soluciones de inmediato- diciendo esto desapareció de nuevo.
-Perdóname Ri, perdóname, pero tengo que arreglar este asunto antes de que Ji Yong se enfurezca y nos corra a los dos.- haciendo mil reverencias se dirigió al cementerio. No había de otra tenía que hacerlo solo.
El cuarto era más que un desastre, algún pie grande tenía que haber pasado por ahí para dejarlo tan mal. Estaba recogiendo la ropa cuando mi celular sonó. Era Daesung, al parecer venía a recogerme, le dije que no lo hiciera que aun tardaría en salir pero como siempre tampoco me hizo caso, así que opte por decirle que me esperara en la recepción hasta que saliera de trabajar. Limpie aquí y haya, levante todos los accesorios y tendí la cama de la habitación.
-Que bien, no me lleve más de una hora en hacerlo- estaba tan feliz cuando recordé que aún tenía que sacar la basura, me dirigí hacia la sala de mantenimiento y tome las bolsas depositándolas en el contenedor. Regrese a la habitación para recoger mi cosas y por fin irme, pero inesperadamente me encontré con él.
-¿Qué haces aquí Ji?-tartamude un poco.
-Veo que ya terminaste, pues no quedo tan bien pero siendo tu no puedo exigirte mucho- torció su boca y se dirigió a la salida. No de nuevo, ya no podía seguir teniendo este tipo de conversaciones con él, me dolían.
-¿Por qué me odias?- solté sin siquiera pensarlo, se detuvo y me miro.
-No te creas demasiado importante para mí como para pensar que tengo un sentimiento tan grande hacia a ti.- contesto desinteresadamente.
-Pero entonces porque, ¿Por qué me tratas de esta manera?, sé que solo soy un trabajador más en este lugar y por lo tanto no deberías darme un trato especial, pero Ji ya no guanto, cada desplante, indirecta, y menosprecio que me haces me duelen, me lastiman, y tal vez eso no te importe, pero yo no quiero que seas así….- mis ojos se cristalizaron, no podía permitirme llorar.
-Tu, ttu sola presencia me asfixia- grito. Lo sabía, no quería aceptarlo pero ahora que lo dijo no había marcha atrás.
-Lo entiendo, siento mucho haberte causado gran malestar, haber arruinado la reputación de la casa, siento todos los errores que he cometido, y sobre todo disculpa mi presencia tan fastidiosa, pero ya no causare más problemas, esta misma noche…. Pediré mi renuncia- no levante la mirada, no quería que viera mis lágrimas recorrer mi rostro. Era patético, lo sé, pero lamentablemente esa era mi forma de ser. Enamorarme a primera vista solo podía traer este tipo de resultados y aun así me arriesgue, pero entonces ¿Por qué lloraba?
-Todo sería más fácil si tan solo recordaras- dijo en un hilo de voz, que escuche con claridad.
-¿A qué te refieres?- No entendía, porque de la nada tenía que decir algo como eso.
-Si aún me recordaras, si tan solo hubiera significado algo en tu vida… si tan solo nunca me hubieras abandonado- mi corazón se detuvo, ¿Acaso era el, mi amigo de la infancia, mi alma gemela que había perdido hace 13 años?
Ji no levantaba su rostro, su tono era frágil y cortado, estaba sufriendo…. Y por mi culpa.
-¿Acaso?- quise preguntar pero el corrió hacia la salida, gritando que ya no importaba, que me fuera de una vez, entonces mis labios hablaron solos.
-GD, ¿Eres tú?... ¿mmi GD?- se detuvo en seco
-Hacia tanto tiempo que no me llamaban así- dejo caer sus brazos a sus costados y su mirada permanecía en el suelo. Yo simplemente no puede aguantar y corrí hacia él, lo toma de la cintura y lo abrace por la espalda.
-En verdad eres tú, GD, mi GD, pensé que nunca más volvería a verte, sentí que te había perdido por completo, cada mañana despertaba con el mismo sueño del día en que nos separaron y lo único que pedía era volverte a ver, saber que estabas bien, que regresaras a mi vida, que desde que te deje no ha sido la misma; y ahora te encuentras frente a mi sufriendo por mi culpa, lo siento, lo siento, soy un idiota por no reconocerte, pero sabes… volví a enamorarme de ti por segunda vez en mi vida y de nuevo no necesite más que una mirada tuya para saber lo especial que eras- mi felicidad era tan grande que no pude contener mis lágrimas, me recargue en su hombro y comencé a llorar.
-Seungri perdóname por decirte esas cosas tan hirientes, pero era la única forma en que reaccionaba cuando me encontraba frente a ti, quería decirte lo cuanto te había extrañado, que todos esos años mi vida fue dura sin ti, pero no podía, si tú te habías olvidado de mi era por algo y yo no debía intervenir-
-No Ji, nunca te olvide pero el tiempo paso y crecimos, tu imagen viva de ti a los 7 años sigue en mi mente, pero era claro que tú ya no serias el mismo, aun así lo siento- fortalecí mi abrazo juntándolo más a mi cuerpo.
-Seungri… ¿Me querías?- su voz tembló, pero aun así no dudo y se aferró a mis brazos.
-¿Por qué me preguntas esto Ji?, claro que te quería, eras la persona más importante para mí, te cuidaba demasiado, tenía miedo que te lastimaras, era muy sobreprotector, Ji tu… siempre fuiste como una joya para mí-
-Entonces ¿Por qué me abandonaste cuando más te necesitaba?- alzo un poco su voz y se soltó de nuestro agarre.
-Yo nunca quise abandonarte, pero la tarde en que me separaron de ti, estaba muy confundido, mis padres habían preparado todo sin decirme una palabra y tan solo me subieron al auto, hacia un camino desconocido, dejándote atrás, solo y vulnerable, simplemente no resistí y no mire atrás, no de nuevo- Esto último me hizo sentir culpable, no me había puesto a pensar lo egoísta que había sido, comenzar una vida sin él, tratando de ser feliz, sin pensar cómo podía sentirse. – Lo siento, por favor perdóname- suplique de nuevo.
-No importa ya, todo es pasado, lo que importa es el presente en el que tú y yo estamos sobre el mismo camino-
-Tienes razón GD, tu y yo volveremos a ser los mejores amigos, seremos felices juntos como hace 13 años- lo tome de la mano y lo mire a los ojos- Nadie podrá separarnos de nuevo-
-Tú lo has dicho, ya han pasado 13 años, el tiempo nos ha cambiado y nuestra amistad se ha deteriorado , no creo que podamos volver a ser esos niños inseparables, lo siento pero no estoy seguro si quiero volver a ser tu amigo- Mi mano soltó la suya, cayendo precipitadamente a mi costado. ¿Eso significaba, que ya no me quería?
-Entonces ¿Por qué querías que te recordara?, pensé que…- interrumpió con ese tono frio y despectivo de nuevo.
-Tan solo quería saber la razón de nuestra separación, acepto que hace 13 años significabas mucho para mí, hasta el punto en que tu ausencia reprimía mi felicidad, pero ahora es diferente, yo ya no dependo de nadie para ser feliz, así que no creo necesaria tu amistad- mi pecho dolía de nuevo, y mis lágrimas amenazaban con salir una vez más. – Además, he encontrado a alguien que me brinde felicidad, que este a mi lado por siempre y que jamás me abandonara- dirigió una vez más su mirada a mi rostro y salió de la habitación.
-Me niego a perder para siempre tu amistad, esta es la primera vez que no escuchare tus palabras Ji, así que sin importar que tú no me quieras en tu vida de nuevo, yo me esforzare cada día, te demostrare que nada ha cambiado y que mi amor por ti no se ha ido… si solo puedo recuperar tu amistad, entonces me esforzare para que al menos me regales un poco de ti- Mis lágrimas inundando mi rostro no fueron obstáculo para decirle aquellas palabras, ya lo había perdido una vez y no me permitiría volver a hacerlo, aun así si eso significaba soportar sus deprecios y arrogancia.
-Pues haz lo que quieras, pero simplemente no cuentes conmigo- dijo esto dejándome solo en la habitación.
Limpie mis lágrimas, ya no lloraría de nuevo, no volvería a mostrarle mi lado débil, era hora de que recordara mi verdadero carácter, el que después de tanto tiempo seguía siendo el mismo.
Mire la hora del reloj ya eran las 10 de la noche, de seguro Daesung llevaría horas esperándome, así que cerré la puerta y fui hacia el despacho.
Al llegar al módulo, la puerta se encontraba abierta, entre y ahí se encontraba Daesung, sin embargo no estaba solo el jefe Seung y GD también se encontraban, el ambiente se sentía extraño, pesado, Ji miraba molesto a Dae y el solo lo evitaba, Seung trataba de calmarlo un poco sin mucho éxito.
-Vaya Ri hasta que te apareces, llevo bastante tiempo esperándote- dijo Dae rompiendo aquel silencio.
-Te dije que iba tardar en salir, y aun así decidiste esperarme, por eso no puedes reclamarme nada-
-Sí, tienes razón, pero ya estás aquí así que ya podemos irnos- tomo mi mano y me jalo hasta la salida, no sin antes despedirse de ellos- Fue un placer conocerte Hyung… y a ti también Ji Yong, con su permiso me llevo a Seungri-
-Con permiso- fue lo único que dije, el jefe Seung nos despidió con una sonrisa y volvió a mirar a Ji, quien ni siquiera se había inmutado.
Salimos de la feria y tomamos un taxi – Esta noche dormiré en tu departamento, espero que no te importe-
-Dae sabes que no es así, además esta noche necesito compañía, no me siento muy bien- mi pecho dolía de nuevo y mis ojos otra vez se cristalizaron.
-Ri ¿Te encuentras bien, que te pasa?- genial ya había preocupado a Daesung.
-No es nada Dae, mejor cuéntame ¿Cómo está eso de que le llamas Hyung a mi jefe?- dije con mi mejor sonrisa dejando el dolor aun lado.
-Está bien Ri te diré, solo si prometes contarme que es lo que te sucede- estaba sonrojado, su rostro se mostraba feliz, estaba seguro que algo increíble le había sucedido.
-De acuerdo Dae- asentí.
Fue un día largo y que mejor manera de terminarlo, que con una charla con tu mejor amigo.