-A veces creo que no me quieres…-susurró Yunho sentado en la esquina de su cama mirando a través del corto espacio en que la puerta de su habitación estaba abierta, la imagen de Jaejoong sentado allí en la mesa, cabeza gacha con la mirada fija en sus manos que descansaban sobre la mesa del comedor era desoladora. No sabía por qué estaban sucediendo estas cosas entre ellos dos, por qué Jae se comportaba tan extraño, frío, distante, hacía dos minutos había intentado acercarse a él por detrás para besar su hombro, una costumbre de años, desde que empezaron a ser pareja unos cuantos años atrás, pero últimamente no era lo mismo, cundo se le acercó Jaejoong lo rechazó con frialdad, diciendo que tenía calor y que lo estaba molestando, cuando Yunho quiso hablar del tema Jaejoong se enojó de tal forma que no le quedó más que refugiarse en su habitación. Ahora mirándolo a través de la puerta, allí tan triste, sólo quería acercarse a él y abrazarlo, envolverlo en sus brazos y pedirle perdón, pero era una estupidez ya que Yunho sabía que no era su culpa la pelea ni la razón por la ambos ahora estaban enojados. Esto estaba ocurriendo a menudo desde ya unas dos semanas, cada vez que Yunho se acercaba, Jaejoong se alejaba bajo algún estúpido pretexto y terminaba rompiendo su corazón, sin contar la falta que le hacía a su cuerpo, Yunho estaba acostumbrado a la demanda constante de Jaejoong, sin embargo Jaejoong parecía estar bien al respecto, Yunho no notaba ninguna diferencia de su parte, no notaba ninguna necesidad. Suspiró cansado, con una opresión en el pecho, un dolor tan intenso que lo hizo recostarse para poder aliviarse, allí pensó en Jaejoong, se lo imagino entrando en la habitación, acariciar su rostro, besar sus suaves labios, sentir el peso de su cuerpo, su lengua, el sabor de su boca, de su piel, todo esto lo único que hizo es traerle otro dolor, no sólo el del corazón, sino que ahora, sentía su entrepierna palpitando de deseo. Resopló fuerte desahogando su ira, era un idiota, Jaejoong probablemente ya no lo amaba y estaba buscando la forma de decírselo o que sea el mismo Yunho quien se dé por enterado, el sólo pensamiento hacía que le picaran los ojos con lágrimas contenidas, si Jaejoong le decía que ya no lo amaba, ese sería su fin, nunca más podría recuperarse, sería mejor morir que seguir sin Jaejoong, la mente de Yunho estaba tan ocupada en pensar mal y angustiarse que no sintió la puerta abrirse ni a Jae sentándose en la cama a su lado.
Jae miraba a Yunho allí recostado, la tristeza estaba en sus ojos, cómo podía hacerle esto a él , a su Yunho, cómo podía estar pasando esto con él, no tenía explicación, sus intentos por dejar de sentirse así no funcionaron, y eso sólo estaba perjudicando a su Yunho, esto tenía que detenerse ahora- Yunho ya~ -Lo llamó suavemente y puso una mano en su brazo viendo que el menor tenía los ojos cerrados y parecía no haber notado su presencia, en cuanto lo tocó este enseguida reaccionó abriendo los ojos y sentándose en la cama, la mirada de Yunho estaba en el piso a lo lejos, parecía muy concentrado en algo que Jaejoong no llegaba a entender. Por varios minutos hubo un silencio pesado entre ellos, ambos concentrados en lo que debían, querían y no podían decir, un minuto que parecía decir más que todas las palabras que estaban juntando en su mente para explicarse con el otro- Yunho ya~-Jaejoong fue el primero que rompió el silencio, Yunho sintió un frío atravesarlo-
-Lo sé Jaejoong…-La voz quebrada de Yunho apretó el corazón de Jaejoong dejándolo sin respirar, expectante, no hizo un nuevo sonido hasta que Yunho fue el que empezó a hablar- Sé que las cosas están mal desde estás últimas semanas y creo saber el motivo.
Jaejoong no sabía que decir, no pensó que sus acciones lo delataban tanto como para que Yunho se diera cuenta de lo que estaba mal con él, eso impedía que lo mirara siquiera, si Yunho ya lo sabía entonces no quedaba mucho para decir. Jaejoong trató de volver a respirar con normalidad, no se había dado cuenta de que estuvo reteniendo el aire- Lo..lo siento tanto Yunho yo…
-Lo sé, pero no podemos hacer nada si así te siente ¿no es verdad? –Yunho trató de fingir una sonrisa conformista que no llegó a sus hijos, eso hizo que Jaejoong se sintiese peor de lo que ya estaba, parecía que todo terminaría hoy-También debe ser mi culpa, yo no hice las cosas bien seguramente…
Allí estaba el Yunho que había enamorado a Jaejoong desde el principio, siempre volcándose la culpa en él, tratando de hacerlo sentir mejor, cuando era Jaejoong quién no se podía contener a si mismo.-No, no fuiste tú Yunho ya~, fui yo, todo esto es mi culpa y lo admito…tsk realmente lo arruiné, quise…quise algo que no podemos, nosotros…no
Yunho intentaba con todas sus fuerzas retenerse para no callar a Jaejoong con un beso, uno que evite con todas sus fuerzas que el mayor lo deje solo. Su temor de tanto años estaba frente a él y no estaba preparado para enfrentarlo, en cuanto Jaejoong digiera las palabras que dieran termino a su relación, ese sería el fin de su orgullo, se tiraría a los pies de Jajeoong a rogarle por una oportunidad, probablemente lo retendría contra su fuerza todo el tiempo que fuera necesario para que se enamore nuevamente de él, estaba preparado y dispuesto a que eso pasara, estaba decidido a no perder a Jaejoong. Lo enfrentó con su mirada determinada, él se encargaría de todo. – Lo sé Jaejoong –Su voz reflejaba la firmeza de su convicción y trató de que Jaejoong lo mirara a los ojos para poder trasmitirle aquello que quería decirle- sé que estás cansado de mí, sé que quieres terminar, lo sé todo, pero no me importa, no voy a renunciar a ti Jae, te amo con vida, con mi fuerzas, mi amor por ti es tan grande que no cabe en todas las palabras inventadas en el mundo en todos los idiomas, ninguna es suficiente para describir cuanto te amo.-Tomó al mayor de los hombros haciendo que se enfrente con su mirada.- Te amo y no te dejaré ir, olvídalo, no tienes esperanza lejos de mí, eres de mi propiedad, yo soy tu dueño y tú el mío.
Jaejoong no lo podía creer, lo que Yunho le decía…en verdad pensaba que iba a abandonarlo, que ya no lo amaba? Pero viéndolo así frente a él, escuchando sus palabras, no podía hacer otra cosa que derretirse por él, este hermoso hombre, esta hermosa alma era suya, como bien Yunho lo dijo, ambos se pertenecían, eso sólo logró que Jaejoong reaccionara con todo lo que estuvo guardando en esas dos terribles semanas- Lo siento tanto Yunho –Comenzó a decir y cuando yunho ya estaba abriendo la boca para seguir con su discurso Jaejoong la cubrió con sus y lo probó con ansias, su lengua se entremezclo con la de Yunho forzándola a enfrentarse a la propia, exigiendo de ella todas las posiciones que hacía que los dedos de sus pies se encogieran de placer y una corriente bajara por su espalda, Jaejoong le dio a Yunho ese tipo de beso de final de novela, cuando la pareja ha sorteado tantos obstáculos para estar juntos y finalmente se pierden en las ganas de fundirse con el otro comenzando por sus bocas.- Lo siento Yunho, lo siento..-Seguía repitiendo Jaejoong sin dejar a Yunho un respiro para ubicarse, Jaejoong ya le había roto la ropa que llevaba puesta, le abrió el pantalón, lo empujó por sus piernas y lo siguió bajando por el cuerpo de Yunho con besos en su pecho, en su abdomen, su cara se internó en su entrepierna donde llenó de saliva los testículos de Yunho, los frotó con una mano mientras la otra subió y bajó por el centro de su cola, esto sorprendió a Yunho quien trató de levantarse de la cama donde Jaejoong lo tenía recostado pero no pudo ir muy lejos por que Jae se metió su miembro en la boca e hizo exquisitas succiones que le extrajeron las fuerzas. La boca de Jaejoong hacía maravillas sobre el miembro de Yunho, él conocía sus puntos mejor que nadie, era capaz de nublar su juicio por completo en una mamada.
Jaejoong esperó hasta que Yunho estuviera lo suficientemente desconcentrado para posicionarse entre sus piernas, sacar su miembro y llevarlo contra la entrada del menor perforándolo de una sola estocada, Yunho dio un gruñido de dolor en cuantoentró en el, Jaejoong se recostó sobre el menor, trató de atrapar su mirada dándole besos en el rostro hasta que por fin Yunho lo miró- Lo siento -le murmuró con ternura, al a lo que Yunho estaba indefenso- Esto era lo que me estaba, pasando, esto era lo que quería, hacer, estar así, dentro tuyo, pero no sabía si lo ibas a aceptar y no encontré otra forma de hacerlo –Peinaba suavemente el cabello de Yunho con su voz completamente relajada-Lamento haberte hecho creer que no te amaba más pero la verdad es que te amo tanto y en este último tiempo te vez tan tierno en todo momento que sólo me dan ganas de..-Yunho calló a Jaejoong con un beso, no quería escuchar sus palabras porque sabía que lo avergonzaría, comprendía en parte al mayor y realmente estaba tan aliviado de que esto fuera lo que sucedía con él, hacía unos minutos pensaba que iba a perderlo así que si tenía que hacer esto, realmente no era nada para él, Jaejoong era su amor y confiaba en él con todo su ser, por qué no entregarle esto que tanto quería.
-Hazlo…Te amo Jaejoong-Fueron las últimas palabras de Yunho antes de abrazar a su amado tan fuerte que no le permitía verle la cara. Jaejoong sonrió ante la actitud de Yunho, el que fuera así de dulce sólo hacía que su corazón lo amara cada día más. Sujetándose de sus brazos empezó a moverse, escuchó a Yunho sisear, seguramente por el dolor que Jaejoong tan bien conocía, por eso besó suevamente su cuello, mordisqueó su hombro, su oreja, le acarició los costados de su cuerpo para distraerlo mientras seguía avanzando en su interior con cada pequeño empuje hasta que finalmente estuvo completamente consumido por su entrada, apartándose un poco Jaejoong besó a yunho en los labios de manera tan lenta y romántica que Yunho no notó cuando Jaejoong movía su cadera logrando pequeñas penetraciones, poco a poco los músculos internos de Yunho se relajaron ante el intruso y le dieron la bienvenida masajeando el miembro de Jaejoong en cada movimiento que hacía entrando y saliendo, así fue tomando cada vez más soltura, Yunho se acostumbró y cuando Jaejoong golpeó contra la próstata de Yunho lo hizo gemir y abrir más las piernas para recibir más de esos golpeteos que Jaejoong ajustó en el exacto lugar donde provocaban a Yunho, así tardó muy poco en sentir temblores en su cuerpo que anunciaban el final ,arqueando la espalda y dejándose llevar por las embestidas cada vez más rápidas y certeras de Jaejoong, Yunho cerró los ojos y se dejó ir en un orgasmo que explotó por su cuerpo dejándolo jadeante y extasiado de placer. Unos segundos después era Jaejoong quien terminaba llenado el interior de Yunho con su esencia, para Yunho fue raro pero ver la frente sudada de Jaejoong y su postura cuando estaba encima de él sólo lo reconforto al saber que ese momento era sólo de los dos y que ahora ambos se pertenecían en cuerpo y alma.
Jaejoong estaba recostado sobre el pecho de Yunho, le reconfortaba el latido de su corazón, no sabía cuándo había desarrollado ese gusto pero era una tranquilidad estar así acostado, encima de él sabiendo que estaba vivo y que era suyo completamente. Yunho por su parte disfrutaba el calor de Jaejoong sobre su pecho y peina su suave cabello, le gustaba jugar con él haciendo que el mayor se adormeciera enseguida. –Yunho ya~-Llamó Jaejoong-
-Mhh?-Yunho se estaba adormeciendo también-
-Gracias…por lo de hoy…-Tímidamente Jaejoong dejó un beso en el pecho de Yunho-
-Me alegra que haya sido esto y no que quisieras terminar conmigo…
Jaejoong levantó la mirada para sonreírle- Jamás te dejaría, te amo –Yunho correspondió su sonrisa- además tienes la cola más hermosa que he visto.
-Ya~! –Yunho lo miró entrecerrando los ojos-
-Además ya cambiamos, eres mi uke y jamás dejaría a mi hermoso uke –Antes de que Yunho pudiera defender su hombría Jaejoong le tapó la boca con un beso y entonces ya no tuvo ganas de pelear, después de todo Jaejoong era todo para él, ¿por qué él no podía ser un cambio?-
Fin.