Con la idea de que Andrea había dejado de quererme decidí no dejarme vencer… Intenté localizarla pero no lo logré, y su mamá… Bueno, ella no quiso decirme dónde estaba Andy, me dijo que no entendía porque su hija se había ido sin darme explicaciones pero que seguramente sus razones tenía y ella no iba meterse en un asunto que nos concernía sólo a Andrea y a mí.
Yo no lo tomé mal, fui capaz de entenderlo y aunque me dolía en el alma y deseaba con todas mis fuerzas hablar con Andrea decidí que si ella no me quería a mí entonces no iba a “perder mi tiempo” no iba a dejar que el dolor me hundiera como tantas veces me hundí por el amor de Adriana.
Así pues pasaron dos meses. En ese tiempo Adriana se mostró interesada en mí pero… yo la rechacé, fue bastante irónico, fue como si los papeles hubieran cambiado y el tiempo hubiera regresado…
- Sólo te pido una oportunidad –me dijo tomando mis manos con delicadeza- sólo una necesito.
- Adri… ya lo hablamos, no sé… No quiero arriesgarme a hacerte daño.
- El miedo fue lo que me hizo rechazarte tantas veces Isa… No dejes que suceda lo mismo de nuevo, yo quiero correr el riesgo si puedo lograr que me ames… Sé que tus sentimientos por mí siguen vivos… Por favor, no me rechaces…
Adri se acercó a mi lentamente tras su última frase y besó mis labios con suavidad, una lágrima rodó por mi mejilla pues mil pensamientos corrieron por mi mente al tiempo que Adri me besaba… Momentos con Adri, momentos con Andy… Momentos en los que fui feliz con ambas…
Adriana se separó de mí y luego depositó otro suave beso en mi mejilla, secando la lágrima que segundos antes había dejado un húmedo rastro sobre ella, entonces escuchamos una voz que rompió con aquel momento.
- ¡Rayos! Perdón, perdón –dijo Daniella tremendamente avergonzada.-
Al verla entrar al salón de clases Adri y yo nos separamos, yo oculté mi rostro y lo limpié con mis manos.
- Yo.. –comenzó Adri nerviosa- entre Isa y yo no…
- Oh no, no tienen que explicar nada… -dijo sonriendo radiante y luego continuó- yo voy a… salir de aquí.
Y luego salió por donde entró, no sé si fue impresión mía, pero podría jurar que vi la sonrisa de Daniella desaparecer al decir las últimas palabras.
Daniella se había convertido en una gran amiga para mí, igual que Jen y Jade, había tomado el lugar de una confidente y tras el abandono de Andy me había ayudado a controlar mis sentimientos y a no volver a ser la típica imbécil que juega con los sentimientos de las personas como lo fui antes.
- ¿Isa? –escuché la voz de Adri.-
- ¿Ah? ¿Decías algo?
- ¿Estás bien?
- Sí, sólo… me quedé pensando en cosas… -respondí vagamente.-
- ¿Pensarás en lo que hemos hablado? –dijo con dulzura.-
- Lo haré, claro… Mas no prometo nada y por favor, no me presiones…
- No lo haré, sabré esperar como tú lo hiciste antes.
Adri salió del salón no sin antes dejarme un beso en la frente y un montón de cuestionamientos en la mente.
Fuera, en una pequeña terraza de la universidad se encontraba Daniella, recargada en un muro, mirando al cielo, algo estaba pasando con ella, algo que ninguno de sus amigos sabíamos, algo que estaba guardando sólo para sí misma, en aquel momento mientras su mente vagaba y sus ojos se encontraban fijos en el cielo apareció Adri.
- ¿Daniella? –dijo para llamar su atención.-
- Oh, Adri… No me di cuenta de que estabas aquí –sonrió de medio lado.-
- Lamento no haber podido atenderte hace un momento… Bueno, en realidad no sé si me buscabas a mi o a Isabel…
- Pues, en realidad… No lo sé, es que me quedé sola, Jade se fue hace un momento y yo no quería ir a casa así que fui a ver a quién podía encontrarme para pasar un rato.
Dani sonrió nerviosa y se acomodó los cabellos que caían sobre su frente para disimularlo.
- Ya veo, sabes, Isa me había comentado que quería proponerte algo acerca de un proyecto… -dijo Adri para cambiar el tema.-
- ¿Ah sí? ¡Qué bien! Espero que sea para los programas.
- ¿Programas?
- Sí, de radio y televisión… Isa siempre tiene excelentes ideas para ese tipo de cosas, me encanta trabajar con ella en esas cuestiones.
- Sí, es muy buena… Incluso a mí me ha ayudado varias veces, es… una chica muy talentosa.
Adri sonrió casi inconscientemente con la mirada perdida en algún punto de las nubes mientras Dani observaba su perfil con detenimiento y la morena se acomodaba el cabello detrás de una oreja.
- ¿Vas a seguir intentando con Isabel? –preguntó Dani repentinamente.-
- Sí… -dijo Adri en un suspiro.-
- No creo que… eso esté bien.
- ¿Por qué no?
- Porque, Isa no está bien…
- Lo sé, y yo quiero ayudarle a que lo esté, con mi amor…
- No se trata de eso Adriana –soltó Daniella.-
- ¿Qué? –preguntó Adriana molesta.-
- Pues Isa no te quiere –dijo sin pensar y se quedó callada un breve instante- lo que quiero decir… es que Isabel no te ama.
- ¿Ella te lo dijo? –preguntó Adri.-
- No, ella no … No ha dicho nada… Ni siquiera hablamos de ti.
- Entonces no saques conclusiones de asuntos que no te concierten Daniella.
- Ya, está bien, no he dicho nada.
Daniella comenzó a caminar con las manos en los bolsillos un tanto molesta, bastante molesta de hecho, pero había callado su enojo para no comenzar una discusión sin sentido con Adriana, pues sabía que la terca pelinegra no cedería y ella realmente no quería discutir con Adri.
- ¿Qué le pasa? ¿Es tonta? –decía mientras pateaba una piedra que se encontraba en el camino- Si sigue así va a salir herida… Y ni siquiera será culpa de Isa… Carajo.
Y así anduvo hasta llegar a su moto, la cual montó para dirigirse a su casa.
Yo, por mi parte me fui a casa, se sentía tan, tan sola sin la compañía de Andrea… Mi doncella… A cada momento pensaba en ella y me hacía daño, pues para mí su partida había sido un acto de abandono y no de amor… Se había ido así sin más… Incluso no era el hecho de que se hubiera marchado lo que me dolía, sino la forma en que lo hizo… ¿Por qué no me había dicho nada de su traslado a Londres? Yo la habría apoyado sin dudarlo, pues era un gran paso para cumplir su sueño era de esperarse que yo siendo su novia la apoyara siempre ¿no? Pero ella se fue así, sin más, de no haber ido a su casa aquella tarde ni siquiera me habría enterado... Terminamos y no hubo una sola llamada ni carta, ni un mensaje, nada… Desapareció de mi vida… Eso aún me dolía y me hacía sentir un tremendo dolor y furia… Sentía como si Andy hubiera jugado conmigo, pero al mismo tiempo al recordar sus besos, su calor, la ternura de sus caricias… No podía imaginar a Andrea planeando hacerme daño.
Pero finalmente, el punto era que ella me había dejado, me había abandonado sin dejar un solo rastro y la insistencia de Adri por intentar algo me hacía pensar que… Tal vez tenía razón y mi destino era Adri… Quizá todo había sido una prueba que la vida me puso para demostrarme que la persona con la que realmente debía estar era Adriana…
Y sus palabras… Aquello que dijo acerca del miedo, y de todas las veces que yo le pedí que me diera una oportunidad y no lo hizo, y ahora yo hacía lo mismo.
El dar vueltas en mi cama sólo me hizo seguir recordando cosas… Tomé mi celular y escribí un texto. “He pensado las cosas, ya tomé una decisión” fue el mensaje que le envié a Adri antes de dormir.
- ¿Hablas enserio Isabel? –me preguntó Jade.-
- Sí… Lo digo en serio, le daré una oportunidad a Adri… La oportunidad que ella no me dio a mí.
- ¿Estás segura? –preguntó Daniella en un tono sombrío, muy poco común en ella.-
- No, no lo estoy… -respondí sinceramente.-
En el salón nos encontrábamos únicamente Jade, Daniella y yo, nuestra clase había terminado 15 minutos antes de lo normal y yo les había pedido que se quedaran, pues tenía que contarles de la decisión que había tomado. Durante toda la mañana estuve recibiendo mensajes de Adri pidiéndome que le dijera cual era mi decisión pero yo sólo le respondía que eso lo teníamos que hablar en persona, así que cuando las clases finalizaran oficialmente Adri y yo tendríamos que hablar.
- ¿Entonces por qué haces esto? –preguntó Daniella con un deje de molestia en su voz.-
- Porque quiero saber que pasaría… Tú no viste como sufrí por Adriana, no sabes todo lo que he hecho por ella, no sabes nada de lo que pasamos juntas… No puedes entenderlo.
- ¡Pues no, no vi nada de eso pero si vi tu relación con Andrea! No puedes decir que lo que viviste con ella no fue nada… Yo las vi, carajo.
- ¡Hey tranquilas! –intento mediar Jade.-
- ¡¿Por qué te importa tanto?!
- ¡Porque Adriana es….! Es mi amiga… Igual que tú… ¿Crees que quiero ver a alguna de ustedes dos sufrir por una mala decisión?
- Adri está dispuesta a correr el riesgo, y por otra parte, no sabes lo que es vivir esperando una oportunidad.
- Claro que lo sé, de hecho, sé lo vivir esperando una oportunidad que ni siquiera tiene caso que pidas…
No sabía a qué se refería Daniella… ¿Estaba enamorada de alguien y no me lo había contado? Antes de que pudiera preguntarle a qué se refería con esas palabras vi a Adri parada en la entrada del salón.
- Tengo que irme –dije- continuaremos esta conversación después.
Tomé mi mochila y salí del lugar dejando ahí a Dani y a Jade.
CONTINUARÁ...