CAPITULO III
Soy un Hombre, necesito amor.
Kim Kibum, de 15 años, cabellos rubios por propia decisión, tez clara, ojos rasgados, bajo en estatura, cuerpo menudo. Kim Kibum, el chico del grupo B de ultimo ciclo del colegio. Kim Kibum, amigo de Nam Woohyun. Kim Kibum, el mismo chico que alborotaba las hormonas de sus amigos con cada una de sus sonrisas disimuladas, el mismo que asistia a clubes nocturnos en compañia de Heechul, su primo. Kim Kibum, el mismo ser que ahora era besado por Jonghyun. Kim Kibum, hermano menor de Jonghyun.
“SI el amar es un pecado, entonces yo...
Cuando te envuelves en los privilegios de sentir algo que con ansias has estado esperando durante mucho tiempo, tu mente y cuerpo se convierten en una masa de vapor que transpasa las barreras del cielo, llegando hasta las estrellas y mas allá.
EL delgado cuerpo fue recostado suavemente sobre el colchon de la cama, a medida que este se iba hundiendo, los cabellos rubios iban uniendose a las sabanas, haciendolos notar despeinados. Jonghyun en medio del beso, decidio que todo lo que pasara despues de esa confesion seria responsabilidad de los dos, y sea lo que sea, lo afrontarian juntos.
Los ojos de Kibum permanecieron completamente cerrados, divagando en la oscuridad y los diversos juegos multicolores que veia, cada vez que Jonghyun hacia un movimiento dentro de él. Sus labios permanecian juntos, ambos en un baile de sensualidad y pasion que solo se expresa entre dos y puede ser descrito como el comienzo de una entrega.
Las manos traviesas de Jonghyun, desesperado por querer sentir mas de lo que el otro podia ofrecerle, iban y venian acariciando las caderas de Kibum, sintiendo esa estructura solida en el borde de su pantalon negro. Una de sus manos viajó hasta por entre los pechos unidos de ambos, separandolo un poco y tratando de que Kibum abra los ojos.
-Bum...- inclusso el mismo se sorprendio del tono demandadnte de su voz -Kibum .- y otra vez le hizo un llamado a esa persona para que abriera los ojos y le mirara – Mírame, Kibum – le susurro despacio, asustado por encontrar rastros de lagrimas en sus pestañas unidas, siendo sus parpados presionados dolorosamente.
-Eh ...- Kibum apenas pudo pronunciar algo parecido a una palabra, pero no lo era. Jonghyun en cambio solo miraba asombrado como ese par de ojos se negaban a observarle. ¿Habia hecho algo mal? ¿Kibum no queria hacerlo? Quizas esa era una manera de rechazarlo.
Como pudo y con las pocas fuerzas que le quedaban, Kibum levantó uno de sus brazos a la altura de sus ojos, cubriendolos con el antebrazo, negandose a abrirlos, por que todo era tan hermoso, tan fantastico para ser solo un sueño. Por que así es como durante varias noches en sus mas guardados secretos, soñaba con Jonghyun, siempre manteniendo esa constancia de que todo seria un fantasia y nunca sucederia.
-Kibum – llamó otra vez Jonghyun, ahora preocupado por apreciar el comportamiento tan “por favor alejate” de su hermano, mas no lo haria, desde el principio en el que decidio abrir la puerta, confesarle sus sentimientos, solo tenia algo en mente y eso era de aclarar las cosas, si Kibum lo rechazara ahora mismo, él y todos los recuerdos de su tan “Mimoso y desencajado cariño” se irian para Europa en el primer vuelo de la mañana siguiente, sin embargo, si Kibum lo aceptaba y admitia todo esto que, a ambos los envolvia en una sseda de pasion, se quedaría, a luchar por él y su futura relacion. -Oye... si quieres lo dejamos aquí ¿Si?
Analizando todo a lo que dio rienda desde que firmó su propsito, seria una excelente idea dejarlo tal y como estaba, hablarle con cariño y pedirle disculpas.
-Kibum, yo... - y su mano se elevo hasta el brazo delgado y quinceañero. - por favor mirame – le susurró tomando la muñeca y apartandolo suavemente, hasta ver ese par de ojos enrojecidos por tanto lloriqueo.
-No.... no me mires Jonghyun – pronunció suavemente, tenia tanta verguenza de que se burlase de todo aquello con lo que habia fantaseado desde hace tiempo. De sus sentimientos y la repentina aceptacion.
-Déjame verte...
¿Y como resistirse a esa voz?
Poco a poco, y muy lentamente, Kibum fue cediendo. Estaba cayendo frente al encanto de Kim Jonghyun y su experta voz, tan suave y firme, digna de merecer algun premio por transmitir tanto sentimiento y sinceridad con solo palabras. Esa ternura, ese balance perfecto, el color de su voz era algo que nunca, jamas en la carrera de Jonghyun habia oido.
- Así esta mejor...- Jonghyun sonrio y Kibum sintio que todo bajo el peso de su cuerpo desaparecia, como si el techo se desplomara lentamente solo para él. - Queria decirte que, si no quieres esto que te estoy ofreciendo, esta bien. - y con sus delgados dedos iba apartando los cabellos desordenados de la frente de Kibum. - Yo estaré bien y tu tambien...- habló mirandolo directamente a los ojos. - Ahora me iré. - añadió al no recibir algo como respuesta, quizas un “Gracias” o un “NO” rotundo hubiese sido mejor, pero el silencio ¿Que significaba el silencio?
Se despegó despacio, sentandose en la orilla de la cama, arreglando la camisa que ya tenia unos cuantos botones fuera de su lugar, mostrando algo mas de sus pectorales, disimulando la tranquilidad fallando por culpa del nerviosismo.
Y Kibum segui recostado sobre la cama, pensando en las palabras que Jonghyun le dijo. El amor que le estaba ofreciendo, ¿Era amor? O simplemente una relacion por diversion. Y es que a su edad, conocer el amor primero y dar su primer beso le resultaba algo fuera de lo comun, y el tener que entregarse era algo dificil de lidiar, sobretodo por que apenas sabia como era una relacion de varon y mujer.
EL sonido de la puerta abriendose le sacó de sus pensamientos, la espalda de Jonghyun se iba perdiendo a medida que esta puerta se iba cerrando, quizas y solo tal vez tenia esa unica oportunidad para corresponderle. Para decirle aquello que quemaba en su corazon y el calor electrizante qu sentia cada vez cuando estaba junto a él, significaban algo mas de cariño fraterno. Tal vez al cerrarse esa puerta completamente, lo perdería.
Jonghyun habia alargado el tiempo, disimulando arreeglarse las agujetas de la zapatillas, solo para escuchar aquello que le responderia Kibum, aun así no lo hizo, no hubo una respuesta y lo mas claro era tener que asumir aquello que pasó momentos antes. Casi lo tomaba como suyo, unos milimetros mas y ahora estarian sumergidos en el doloroso placer de enntregarse. Salió de la habitacion de sus padres, cerrando la puerta detras de él, mientras que una vaga luz, parecida al faro roto del malecón iluminaba su deseperado corazon, una esperanza que solo llegaria si alguien que estaba recostado, pensativo y seguro llorando, lo decidia.
Mas no hubo respuesta y la pequeña luz se esfumó por completo cuando entró a su habitacion, la esperanza que guardaba celosamente de ver a Kibum salir de la habitacion y abrazarlo por detras en medio del pasillo, se evaporo completamante, ahora era solo él y su cama, solo el y sus almohadas, ademas de esas sabanas que olian a soledad y eran testigos mudos de las consecencias de una desenfrenada pasion.
~*~
Apagó la lampara del velador, sintiendo ese suave vientecillo helado que se adentraba a su habitacion por su ventana y le escarapelaba el cuerpo desnudo. Fue hacia el closet y sacó una ropa interior y el pantalon de la primera pijama que vio. En medio de la oscuridad se sentó sobre el colchon y se dispuso a cambiarse, cuando terminó de ponerse el pantalon y de haber secado bien su antes humedo cuerpo, se recostó, pensando en como justificaria su repentino viaje al extranjero a sus padres y a la compañia.
-Uh...- pero algo o alguien emitio un sonido a su lado derecho, entonces se sentó, encendio la luz de la lampara y entre las sabanas encontró un cuerpo bien envuelto. - Ah, apaga esa luz. Reconoció la voz al mismo tiempo en que vio esos mechones humedos de cabello rubio.
Era Kibum, el... el estaba en su cama, envuelto en las sabanas y quejandose por la luz.
-¿Q-que haces aqui? - preguntó alarmado Jonghyun, observando el cuerpo cubierto de sabanas de Kibum, recibiendo en respuesta la misma nada y el silencio. - Kibum, ve a tu... - las palabras no salian de sus labios, su cerebro habia dejado de dar ordenes a su boca para decir algo.Por que cuando levantó el cubrecama, trantando de destapar a Kibum, se encontro con la espalda desnuda de su hermano.
Kibum estaba en su cama, envuelto en sabanas y ¿Desnudo?
¿Que era quello que lo incitó a meterse en la cama de Jonghyun, completamente desnudo? ¿Era acaso que le correspondia? Ni el mismo lo sabia, por que cuando escucho el grifo de la ducha ser cerrado ya estaba dentro de la habitacion, con el cabello mojado y solo la una toalla cubriendo su cintura. ¿Entonces se confundio de habitacion? No, no se equivoco, por que el tenia su propio baño en su habitacion, solo era un arranque de decisiones sin ser pensadas, tan inesperadas, pero necesarias.
-Estas mojado. Pillaras un resfriado – le advirtio Jonghyun saliendo de la cama como si hubiesen clavos en vez del cochon y caminó directamente hacia el baño.
-Ah~ - suspiro Kibum debajo de las sabanas, reprochandose por no pensarlo dos veces y por ser tan impulsivo, como siempre. Quiso levantarse y aprovechar ese instante en el que Jonghyun entró al baño para no sé que y salir corriendo hacia su habitacion, encerrarse ahí hasta el lunes. Se sentó en la cama, mirando su torso desnudo y cubriendose con las sabanas por los hombros y así salir, pero un par de ojos perrunos y ya con ojeras le miraban sorprendido.
-Se-secate – Jonghyun salió del baño con un par de toallas, pero se quedo observandolo sentarse y mirarse a si mismo, quedandose el embobado al instante. Entonces le lanzo las toallas cuando se dio cuenta de que Kibum tambien lo veia.
-Tu...¿Tu duermes así? - le preguntó Kibum, curioso por ver semidesnudo a Jonghyun frente a él, solo con un pantalon de pijama. Apreciando cada borde del torso musculosos de Jong.
-N- ¡NO! - exclamó nervioso Jonghyun, buscando con la mirada un polo , alcanzandolo a ver sobre la cama y estirando su brazo para levantarlo y ponerselo – solo que necesitaba refrescarme un poco antes de dormir...
-Ah – Kibum habia logrado desviar la pregunta orginal de Jonghyun, poniendolo nervioso mientras tomaba las toallas y las acomodaba sobre su cabeza. -Jonghyun...
-KIbum.. - los dos hablaron al mismo tiempo, quedandose luego callados y nerviosos. - habla tu primero...
-No, dime tu – le dijo Kibum cecandose el torso con la otra toalla.
-¿Que haces en mi habitacion?
-Ah, yo.. es que... - y pensó que antes de que le preguntara eso o le cediera el permiso para hbalar, ahora estarian aclarando “Ciertos asuntos”. EL tiempo pasaba mientras en su cabeza adolescente creaba alguna excusa digna de ser creible. - bueno yo... - Y sintio como un par de manos masajeaban su cabeza sobre la toalla.
-NO te has secado bien – le dijo Jonghyun, por que aunque esten en medio de una situacion extraña, Jonghyun no perdia esa escencia de “Hermano -mayor – sobreprotector” - bien, ahora dime ¿Que haces aqui?
-Jonghyun...- Kibum se puso serio, por el tono seco de su voz – Hace rato, en el cuarto de mamá... ¿Que era exactamente lo que me estabas ofreciendo?
Y ahora el cuadrado ya no era Kibum, sino Jonghyun. ¿Como responderle a esa pregunta? “Kibum, te estoy ofreciendo mi amor, el mas puro, sincero y verdadero” No, claro que no, eso era demasiado cursi y tal vez su hermano menor explotaria en risas luego de oirlo. Entonces... ¿Como?
No sabia como hacerlo, por que cuando uno ama, no siempre encuentra la razon o la causa de estar enamorado, como para explicarla libremente. Jonghyun se lo hbaia dicho muchas veces, pero todas eran tan indirectamente que la cabeza adolescente de Kibum, llena de problemas y asuntos unicos de su edad, no eran faciles asimilarlos, quizas al darle esta respuesta deberia ser mas directo.
¿Directo?
Pero si le habia dicho abiertamente que no lo queria, que LE AMABA ¿NO entendio eso? O es que en medio de aquel beso, todo lo que pasó antes se fue por el desagüe y lo olvidó.
¿Que tan drecto deberia ser?
-Kibum – y cuando por fin su cerebro pensó en una respuesta digna de ser oida, sintio un par de brazos rodeando su cintura, el olor de fresas invadia sus fosas nasales, produciendole alegria como cada vez que lo percibia. - Yo ... yo te estaba ofreciendo mis sentimientos. - y lo soltó, en medio de ese abrazo del menor se lo dijo. ¿Que tan grave podia ser su reaccion? - te lo dije antes, aunque fue indirectamente y no lo captaste – siguió añadiendo, sinserandose con el mismo y con la persona que le humedecia el polo con e cabello mojado - pero no es tu culpa, yo debi decirtelo bien. Y ahora te lo vuelvo a repetir. Yo no te quiero como un hermano, yo te amo como persona.
¿Muy directo? ¿No? ¿Entonces mas directo?
-Yo... yo te amo.
La inmovilidad se hizo presente, Kibum no ajusto mas sus brazos a la cintura de Jonghyun, solo se quedó pensando en lo cierto de las palabras de Jonghyun, entonces era eso, El ya lo sabia. Solo queria confirmarlo.
Se sintió como alguien muy importante, todas las barreras de lazos sanguineos, de tener los mismo padres, de ser hombres del mismo sexo se esfumaron, así como las dudas, se evaporaron y perdieron el lo alto del techo junto a esos suspiros melancolicos y el aire con el olor de jabón. Por fin se sentia amado, correspondido y seguro. Ahora mas que antes, mas que en cualquier momento de su vida se sentia seguro.
Jonghyun esperaba impaciente por alguna respuesta, tenia miedo de que Kibum reaccionase mal y se aparte de el para siempre. El suelo por donde ahora se había arriesgado a caminar era campo minado, cualquier paso en falso y bajo sus pies, la tierra desvanecería o quizás el herido.
Los delgados brazos blanquecinos se separaron de la cintura de Jonghyun, no para alejarse, sino para elevarse y ahora rodear el cuello del mayor. Levanto su cabeza, abriendo despreocupado los ojos y mirando sin pudor a Jonghyun, tan intensamente, como el lo hacia. Se pegó a su pecho y elevó su torso, hasta quedar a la altura de sus labios. Y los pegó, tan inexperto, pero lo hizo.
EL roce de sus labios ... ¿Podían tomarse como un aceptamiento? ¿Estaba aceptando esos sentimientos?
Kibum en medio del beso deshizo el abrazo de su cuello y llevo ambas manos hasta las extremidades inmoviles de Jonghyun, colocándolas encima y presionándolas un poco.
-Abrázame – susurró Kibum moviendo con sus manos, las de Jonghyun, posicionándolas en su cintura y devolviendo sus brazos al cuello del mayor, sellando otra vez sus labios, solo que adentrándose en la cavidad de Jonghyun, disfrutando cada roce y ese vulgar pero apasionado movimiento de sus lenguas.
Fue hasta que el aire les falto, que dejaron de conectarse de esa manera. Kibum se sentó frente aél, aun abrazado y con las mejillas sonrojadas, acomodando sus rodillas entre las piernas de Jonghyun, desucbriendo su cuerpo desnudo.
- Te amo – susurró Jonghyun cerca a la orje de Kibum con ese aliento que transportaba a todo su cuerpo sensaciones electrizantes y completamente nuevas para él.
Solo cinco letras, dos palabras, dos pares de labios, dos personas y dos cuerpos.
EL aliento de Jonghyun viajo por el cuello, llegando hasta el trapecio, en el borde de sus clavículas y la unión con el omóplato. Degustando ese agradable aroma de rosas y fresas producto del Jabón y shampoo. Sus labios no regresaron a los de Kibum, quien desesperado en medio de aquella unión, los buscaba. Sus labios fueron a l espacio entre su clavícula y cuello, dejando largo camino de saliva hasta por detrás de los hombros, hasta su séptima vertebra cervical, inspirando el aroma de ese lugar.
Ahí, justo en ese momento y uno frente al otro, la razón dio un paso atrás, solo para darle paso a la lujuria.
Kibum escondió los gemidos provocados por las exquisitas sensaciones en el cuello de Jonghyun, retorciéndose por mas y arriesgando su cuerpo experimentado. Lanzándose a ese acantilado de emociones y pasión que lo separaban de la realidad y lo correcto. Sus manos recorrieron la ancha espalda, descendiendo hasta llegar a la parte lumbar de Jonghyun, fue ahí que se encontró con el borde de la camiseta y poco a poco fue colando su mano derecha, haciendo cortocircuito en su cabeza al directo contacto con la piel de Jonghyun.
Jonghyun sintió la mano de Kibum en su espalda, devolviendole de manera inexperta e inocente, pero satisfactoria a cualquier precio, los mismos roces que él hacia en su cuerpo. Sabia que no era suficiente, pero dentro de esa habitación, de esa casa, en esa ciudad, ahora todo era valido solo para ellos, fue así que llevó una de sus manos a un glúteo desnudo de Kibum, aventurándose a mas y presionándolo suavemente, sintiendo bajo su cuerpo el respingo del menor.
-Házmelo ...- gimió Kibum con los ojos cerrados y poniendo algo mas sobre la mesa, aparte de su inexperiencia, virginidad.
“...Ahora estoy contigo, frente a ti, disfrutando de las mismas cosas que tú, por favor... se bueno conmigo.... por eso si amar es un pecado, yo prefiero....”
-Hazme el amor... - Kibum fue mas directo con su segunda orden. Sirviéndose el mismo sobre una bandeja de tentaciones, dispuesto a complacerlo en lo que sea necesario y creyese mas de lo usual.
“... yo prefiero amarte y pecar, que no amarte y arrepentirme el resto de mi vida, Soy un Hombre, necesito amor..”
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