Llevaban diez minutos de camino, Naruto estaba preocupado, era su primera vez, si bien es cierto tenia diecinueve, estaba muerto de miedo, miraba de reojo a Itachi y se imaginaba todo, le encantaría hacerlo con alguien tan altivo, con su profesor de relaciones industriales, y que relaciones tendrían…
Naruto – pronunció Itachi, el pequeño encerrado en su mundo de fantasías y de nervios.
Si dime – contestó vagamente
Itachi sonrió y se le acercó, el rubio sintió el aliento rozándole la oreja en forma de palabras, agrandó los ojos de forma exagerada y sonrojándose ante su imprudencia, no se había dado cuenta que ya estaban en la casa de Itachi. Se bajaron del automóvil y sacó las llaves dándole el paso caballerosamente al menor.
Itachi, es bonita tu casa –dio un paso adelante y disfrutó la vista. Itachi rodeo su cintura y empezó a darle besitos en el cuello, lamidas, Naruto poco a poco empezaba a excitarse, es que el peligro le encantaba, le gustaba la idea de atraerle aunque sea físicamente a un hombre como Itachi.
Se volteó y lo besó con mucha pasión, sus lenguas danzaban ardientemente, Itachi recorrió con sus manos la espalda de Naruto, bajando poco a poco a su trasero, Itachi apoyó su cabeza en el cuello del menor, aspirando todo su olor produciéndole cosquillas, Itachi le encantaba lo que hacía, lo que le producía, sin lugar a dudas le excitaba.
Ven, vamos a la cama – le susurró seductoramente, Naruto se dio a la tarea de investigar la compatibilidad entre Itachi y el, Itachi era géminis y el libra, perfectos, ambos signos de aire, pero Itachi poseía ascendencia en leo, lo que hacía que fuese completamente pasional
Itachi lo arrastró con besos hasta la cama, tumbándose en el acto, encima de él estaba el chico a quien poseería todo el día, eso lo volvía loco ya quería “darle con el muñequito” como le decía Itachi por mensaje al estar muy excitado.
Naruto disfrutaba a lo mucho de su relación secreta, eso le traía ideas morbosas a su cabeza. Pronto Itachi desabotonaba la camisa de su amado poco a poco, detuvo hasta la mitad y tomó la mano del chico y la dirigió a su miembro mirándolo lujuriosamente todo esto es para ti mientras que el rubio muriéndose de los nervios sentía el calor pasional que emanaba ese pedazo de carne. No había música, no había amor, solo hormonas de deseo y pasión.
Itachi pasó la lengua por la mitad del torso, se detuvo en los pezones, lamió el derecho agitando la lengua rápidamente, el rubio arqueó le espalda en honor al placer que sentía, Itachi sonrió, su sinvergüencería era bastante grande, a sus treinta años hacerlo con un niño once años menor que él y mas siendo su primera vez, esas cosas no eran de él eran de su hermano Sasuke. No quiso indagar más, se dedicó a darle placer al jovencito debajo suyo.
Lamía el pezón derecho ágilmente, mientras manipulaba con la izquierda el otro pezón, restregaba su miembro con el del otro. Itachi desabotonó su camisa y Naruto tembló, vio con lujuria aquel torso, tragó fuerte, se estaba excitando, le gustaba lo que veía le encantaba, Itachi lo besó salvajemente, mientras Naruto imitó la acción de Itachi y se deshizo de la camisa.
Itachi acomodó mejor al virgen se quitó el pantalón los zapatos, quedó completamente desnudo ante Naruto quien se sonrojó e inmediatamente apartó la vista.
Desnúdate – pidió Itachi – Naruto lo hizo lenta y torpemente, al finalizar, se cubrió con la sabana sacándole una sonrisa juguetona a Itachi
No te rías – se ocultó entre la sábana – me da vergüenza que me mires de esa manera, pareciera que me fueras a comer – aseguró mientras veía a los ojos a Itachi, éste se le acercó y lo acorraló, no hay escapatoria. Lo besó dulcemente para deshacer el miedo que lo envolvía, apartó calmadamente la sábana que lo cubría, dejando ver su cuerpo dorado, Itachi no pudo evitar enternecerse por la imagen, Naruto estaba sonrojado mirándolo solo a los ojos.
Naruto mira mi cuerpo –sonrió suavemente – tócame – tomó su mano y la paseó por todo su cuerpo, sabía que el rubio no daría paso, estaba muy avergonzado y asustado como para moverse. Itachi lo besó y tocó, lamió todo su cuerpo, llegando a la entrada, introdujo un dedo, moviéndolo suavemente, no podía ser rústico, era la primera vez de su estudiante, Naruto soltó un quejido de dolor, lo besó en los labios tiernamente. Introdujo otro seguido del tercero, los movió lentamente, luego empezó con un movimiento que simulaba penetraciones, Naruto lloraba, le dolía demasiado, Itachi dudaba en si parar, Naruto no lo estaba disfrutando y por ende el tampoco.
Naruto, ¿me detengo? – preguntó besándole los labios
Si, no aguanto – Itachi se alejó un poco de él, mientras que tomaba la sabana y se cubría, Itachi miró lo asustado que estaba, sentía en su interior que si quería estar con él, pero todavía era un niño, no sabía cómo deshacerse de esa barrera que no le permitía expresar sus sentimientos.
Naruto lo miró de reojo y lloró de la pena, de la vergüenza y de la impotencia, pensó que era más fácil, se dio cuenta que le gustaba realmente Itachi, quería hacer las cosas bien, anhelaba con su alma sentirse amado, Itachi intentó abrazarlo, Naruto se opuso totalmente rechazando con un manotazo el abrazo, Itachi se sintió culpable, parte de esta reacción es su culpa.
Naruto, perdón – se acercó a él y repartió besitos que le ocasionaban cosquillas al rubio, se reía a carcajada, se limpió las mejillas y los ojos mostrándole a Itachi una gran sonrisa.
Lo siento Itachi, pensé que sería mejor, yo me asuste – se excusó infantilmente
Oye, ¿que te parece si dormimos? – le ofreció Itachi recostándose en la cama
Me parece bien – lo miró tiernamente, se acurrucó en el pecho de su amado, sintiendo ese olor que le encantaba – Itachi, quiero que sepas que te quiero – cerró sus ojos, había vivido emociones fuertes, sonrió y se quedó dormido.
Lamento no poder decirte eso – pensó decepcionado de sí mismo