Decisión
El lo amaba, ello se amaban, Draco amaba cada cosa de su Harry y Harry amaba cada cosa de su Draco excepto el amor que le profesaba a las manzanas verdes.
Siempre… SIEMPRE tenia una en la mano, las desayunaba, las almorzaba, las cenaba e incluso Harry debía competir con ellas para ver quien le daba mas placer, ya que el rubio siempre cuando las comía soltaba un gemido de placer puro… El ya no podía con esta lucha sin sentido.
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Draco debe escoger.
El rubio cuando se entero que Harry sentía celos de sus preciadas manzanas se horrorizo, el no podía escoger… No, el no debía escoger, Harry es el que debía, lo quería con las manzanas o simplemente el no lo tendría. Después de todo las manzanas son lo único que lo mantenía cuerdo a el lado de Voldemort, y el no las dejaría por nada. Incluso se atrevía a decir que las amaba más que a Harry.
Harry no quería perder a SU Draco así que lo acepto, pero Draco igual le impuso un castigo, tres meses sin sexo. Oh si un largo periodo que aguanto como todo un hombre (masturbándose, con una imagen mental de Draco, mientras se duchaba) y cuando por fin pudo tenerlo entre sus brazos
-oh si-
-mas….ma…mas dame mas….-
-oh dios…. Mas fuerte….hay hay dame mas fuert….-
-Harry…moriré….morire… no sigas-
-kyaa….me vendre y moriré…. –
-Harry esto esta tan bueno…..-
Si horas y horas de sexo retumbando en todas las paredes, que terminaron con un “te amo” o al menos eso quería creer pero… un crujido se escucho y un ligero
-ah…-
Se dejo oír, Harry lo trato de ignorar y se dio media vuelta dándole la espalda a el rubio, si por que el ahora ya no podía ocupar ese simple adjetivo posesivo para identificarlo, si Draco prefería mas a una manzana, el lo entendía con que solo le diera tiempo para el estaría bien, pero otro crujido acompañado con otro suspiro lo hizo abrir los ojos… No, no podía con eso.
Harry se levanto de la cama y se encamino hacia el baño, Draco lo miro y no le dijo nada. El moreno tomo una bocanada de aire para tranquilizar los nervios bien disimulados, tomo agua y se lavo el rostro, se seco con una toalla, salió del baño y avanzo hacia su ex habitación, exacto el se iría, tomo un bóxer, un pitillo negro, una camisa cuadrille y unos botines, se vistió con la mirada curiosa de Draco encima de su cuerpo y salió de hay.
Uno…
Dos….
Tres…
Siete días sin aparecer, Draco se preocupo, escucho la puerta abrirse y vio por ella pasar a Harry, este sin decir nada se encamino a la habitación, Draco espero 10 minutos y al ver que este no bajaba subió, se recargo contra el marco.
-¿Qué haces?- pregunto
-sacar mis cosas- respondió
-¿a que se debe?-
-me voy-
-¿Por qué?-
-terminamos-
-entiendo-
El amaba a Harry y mucho, pero no le rogaría, era su orgullo como Malfoy. Observo como Harry salía con bolsos llenos de cosas, escucho “te amo, pero no puedo con ellas” y luego el sonido de la puerta.
Draco lloro… lloro por horas… le dolía, y mucho. Miro a el frente y vio una repisa. Se paro, se acerco a ella, extendió la mano y saco una manzana de ella.
-si ya hemos enfrentado esto, lo volveremos a hacer- la mordió, sin placer esta vez. Se acababa de dar cuenta que le recordaban a los ojos de Harry. Pero el ya tomo su decisión su único amor serian aquellas verdes y deliciosas manzanas, nada mas.
FIN