Muchas personas no se dan cuenta del valor o la importancia que tiene la persona que está a su lado, hasta que esta se va y no regresara jamás. La verdad yo pensaba que le demostraba a la persona que amaba lo que yo realmente sentía por él. Pero me di cuenta demasiado tarde, que jamás fui realmente sincero y que por culpa de mi actitud termine perdiéndolo… Para ser más claro con todo esto empezare del comienzo
Mi nombre es Onodera Ritsu. Tengo 26 años, Soy de cabello castaño, ojos color verde Esmeralda y de piel algo blanca. Soy de mediana estatura, ya que no soy tan alto pero no me quejo. Bueno ya llevo un tiempo desde que comencé a trabajar en Marukawa como Editor de manga shoujo, en el departamento “Doncella”, la verdad aun me pregunto por qué rayos se llama así. Pero bueno, al tiempo después que comencé a trabajar en este lugar me entere que mi Editor en Jefe era no más ni menos Que Takano Masamune, mi primer amor, y la persona por la cual me jure no volverme a enamorar nunca más. Pero él no se dio por vencido desde el momento que nos volvimos a encontrar y me prometió que no importa cuánto tarde, el volverá a escuchar un Te amo de mis labios. ¿Es una tontera no?, Pero al pasar de los meses comencé a volver a sentir cosas por él, al punto en que realmente estoy seguro de que me volví a enamorar de él. Pero no están fácil ser sincero, realmente aun no sé si deba decirle lo mucho que lo amo.
Ya eran las 6 de la mañana, desperté y me fui a bañar para irme al trabajo. La hora paso volando y antes de darme cuenta se me había hecho tarde.
-.oh no!, llegare tarde… -toma sus cosas y sale corriendo de su apartamento-
Al llegar al metro subí lo más rápido que pude ya que las puertas estaban a punto de cerrarse y con suerte alcance a entrar al vagón del metro.
-por poco y no alcanzo a entrar…. –dice para sí mismo, mientras se calma.
Al llegar a la Editorial me fui directamente hacia el piso en donde trabajo, cuando llegue me fije que Takano no estaba así que me senté en mi escritorio y le pregunte a kisa-san
-Kisa-san ¿sabes dónde está Takano-san?
-mmm…. Creo que está en una Reunión ¿Por qué Ricchan?
-eh? No por nada.
-¿seguro? 7w7
-SI!! –Se sonroja- además para que preguntaría por el jajajja
-si como digas, Ricchan -sonríe.
Creo que lo estoy haciendo demasiado obvio… creo que debería tener más cuidado.
(Horas más tarde) –de ahora hablo en tercera persona-
Takano ya había vuelto de una “reunión”, y estuvo todo el rato revisando manuscritos como todos sus subordinados ya que estaban cerca de la fecha límite. Cuando de pronto llego una asistente social, junto a otra chica. Obligando a todos interrumpir su concentración al sentir la presencia de las dos chicas. La chica que acompañaba a la asistente social era más o menos alta, de piel blanca, cabellos Rojizos y ojos cafés, estuvo viendo a todos los chicos por un momento y después dio un paso adelante haciendo una pequeña reverencia.
-Mi nombre es Sakura Aoki, desde hoy trabajare junto a ustedes, ¡así que por favor tratadme bien!
Todos los chicos quedaron anonadados, (excepto Takano) ya que era extraño que enviaran a una chica al departamento “Doncella”. Hubo un pequeño silencio mientras los chicos procesaban la información, hasta que Takano lo rompió
-Bienvenida Aoki-san espero que puedas estar a gusto aquí para trabajar –Sonríe mientras dirige su mirada hacia ella.
-Muchas Gracias Takano-san.
Aoki fue a sentarse en un escritorio el cual habían preparado para ella, y Takano le paso algunos papeles para que ella revisara y no se quedara sin hacer nada. Al rato después Aoki comenzó a observar a Takano entre los papeles que tenía en las manos, sin que este se diera cuenta, Pero este acto no pasó inadvertido para el castaño el cuál se dio cuenta que la chica no le quitaba los ojos de encima a su Takano. Las horas pasaron, y realmente fueron unas horas bastantes incomodas para Ritsu por el solo hecho que cada vez que dirigía su mirada hacia a Aoki, este la encontraba mirando a Takano, y eso no le agradaba para nada.
-Creo que ya me voy-dice Takano mientras se coloca su abrigo.
-T-Takano-san disculpe… -habla la pelirroja.
-mmm… ¿sí?, ¿Qué pasa Aoki-san?
-Usted tendría algo de tiempo ahora para acompañarme a tomar un café y poder preguntarle algunas cosas sobre cual tengo algunas dudas.
Takano quedo mirando a la chica por un momento y vio su reloj, el cual mostraba que recién eran las 7:38 pm.
-Claro no tengo ningún problema.
-Muchas gracias-Responde muy sonriente- por favor espéreme un segundito que ya termino con esto-ordena unos papeles rápidamente y se pone de pie para colocarse el abrigo.
Takano y Aoki se dirigieron a la salida, pero al pasar al lado de Ritsu, el pelinegro paso su mano por los cabellos de el despeinándolos un poco, para así después salir junto Aoki.
Al momento que Takano salió con la chica, Ritsu se sintió bastante molesto pero intento no darle mucha importancia, pero aun que el intentaba negarlo para sí mismo se le notaba a kilómetros que estaba Celoso de Aoki y varios de los chicos de dieron cuenta de eso.
-Tks… mejor termino pronto y me voy a casa –Dice el castaño para sí mismo.
Continuara