ORGULLOSA TRAGEDIA
Morir hubiera sido una opción más seductiva que despertar del estado inconsciente de Kyungsoo solo para sentir el dolor y la agonía que se disparaban por su cuerpo como un tiroteo constante. Se sentía roto y el estado inconsciente en el que se había inducido previamente por la caída interfería con su visión, creando un ambiente oscuro durante minutos sin terminar a pesar de saber que podía parpadear. Podía escuchar voces a su alrededor, distorsionadas y vagas, y aun así su oído era mejor que la vista.
Los segundos pasaron sin piedad desde los nervios antes de que Kyungsoo sintiera a alguien poner su brazo detrás de su cuello y piernas para levantarlos, pero después, un grito penetró sus oídos y el intento de sostenerlo se detuvo. Sus labios crearon ruido sin sonidos hasta que el primer signo de luz atravesó sus ojos y finalmente pudo ver a aquellos a su alrededor borrosamente, pero no fue hasta que se pudo escuchar así mismo jadeando y llorando que se dio cuenta que tenía gotas formándose alrededor del borde de sus ojos.
Baekhyun estaba inclinado sobre él con una apariencia de miedo y pánico puro, y era una expresión que Kyungsoo nunca había visto antes. Trató de levantar una mano para alcanzar el rostro del castaño, pero el movimiento le causó más dolor, provocando que llorara de dolor, sollozando. Se sentía paralizado, adolorido, y roto. La sensación del suelo duro y mojado era la única cosa que sentía además del violento fuego que se expandía por su cuerpo quemando todas sus terminaciones nerviosas hasta destrozarlas.
El ruido en sus oídos comenzó a cesar y las voces distorsionadas se aclararon. Su visión borrosa y empañada se detuvo y lentamente logró regresar a su estado normal, lo cual no lo hizo sentir mejor de lo extra consciente y sensitivo que lo hizo sentir sobre su situación.
“Baek…” La sílaba escapó de sus labios, pero se perdió en los sollozos que le siguieron y anularon todo sus intentos para hablar.
El castaño intentó tocarlo, para confortarlo, pero cuando vio la falta de beneficio, mordió sus labios y dejó que el gigante lo sostuviera por los hombros, jalándolo a su lado. Los ojos de Kyungsoo se enfocaron en la pareja y apretó sus dientes con más fuerza. La razón para sentirse sofocado se volvió borrosa entre sus heridas por el hecho de que las manos de Chanyeol descansaban en su mejor amigo.
La atención del presidente herido solo regreso cuando de repente fue levantado en los brazos de la última cara que vio antes de su caída. Cerró los ojos y mordió sus labios fuertemente para evitar gritar. Poder inhalar bonches de aire era un alivio, pero su respiración era difícil y por pausas.
“Llévalo con la enfermera, pero se cuidadoso.” Los ojos de Kyungsoo viajaron en la dirección del maestro presente. “Kyungsoo, estarás bien. Jongin solo te cargará a la enfermería, ¿De Acuerdo?”
Mirando alrededor, vio la forma en que Baekhyun estaba teniendo un conflicto entre sí debería seguirlo o no, y en silencio, Kyungsoo rogaba que el castaño dejara el lado del gigante, pero mientras los pasos de Jongin los reparaban más y más lejos, la vela de esperanza del presidente se apagó cuando Baekhyun decidió quedarse con el atleta.
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Se les llamó a los padres de Kyungsoo, y a él, mismo, se le recomendó fuertemente que se marchara con finales médicos como una revisión para saber si tenía una contusión a pesar de lo poco probable que era a ese punto. Le dieron pastillas para el dolor, pero no fueron suficientes para entumecerlo de sentir los sádicos disparos de dolor que aún quedaban. Luego, debido a lo hinchado de su pie derecho, era obvio que se había torcido el tobillo, lo cual no era algo sobre lo cual alegrarse.
Acostado en la cama en su cabaña, en la cual se la había ordenado permanecer mientras sus padres llegaban al campamento, Kyungsoo fulminaba con la mirada al cielo oscuro, de madera, quemándose de odio como un fuego salvaje al que no se le prestaba atención.
Jongin estaba sentado al lado de él, y eso era parte del acto de aversión de no mirar a nada más que el techo de la cabaña. Cuando sintió la bolsa de hielo en su pie derecho crujir, miró hacia abajo y vio al capitán de fútbol moviéndola.
“Déjala en paz” gruñó, mirando nuevamente al techo.
“Se estaba cayendo” Jongin se justificó, colocando fuertemente la bolsa en el tobillo hinchado, pero no tan violento. Fue suficiente para hacer a este último tensarse del dolor.
“Me importa un carajo si el estúpido techo se colapsa sobre mí, “Kyungsoo espetó. “Preferiría morir debido a la estructura débil de esta cabaña a que tú acudieras a mi rescate”
Burlándose, Jongin se movió, sentándose en la silla que unos de los adultos había traído para él. Se cruzó de brazos y estudio el perfil del presidente, la única parte de él que podía ver aparte de su actitud mordaz que desprendía las vibras del joven. Luego, a pesar de saber que haría que el otro se enojaba, Jongin colocó sus pies al borde de la cama de Kyungsoo.
Al sentir el hundimiento en su colchón, y aun con su fuerte persistencia de mantener el contacto visual al mínimo, Kyungsoo frunció el ceño “¿Es en serio?”
Ignorando la pregunta, Jongin frunció el ceño. “Pesas como una ballena, y aun así todavía no me has agradecido por haberte cargado hasta aquí”
“En primer lugar te agradecería si te hubiera pedido que me cargaras a cualquier parte” el presidente espetó. “Te agradeceré en mis propios términos, pero ¿qué bien haría para mí el agradecer a la persona que tuvo la culpa de todo lo que paso? Nada. Es estúpidamente contradictorio.”
Lanzando su cabeza hacía atrás, Jongin se ría antes detenerse abruptamente para darle un efecto dramático. “Eres graciosísimo” dijo con despecho. Antes de que pudiera echarle más sal a la herida, un golpe vino de la puerta, atrayendo la atención de ambos. Mientras se levantaba de su asiento, Jongin bufó. “En caso de que no lo supieras, de lo que estoy seguro si lo sabes que ya pareces un tipo listo a pesar de tu personalidad horrible, hay una razón por la que el orgullo es enfatizado en las tragedias griegas”
Kyungsoo mantuvo sus labios cerrados y sus ojos viajaron a un lado hasta que escuchó una voz familiar llamarlo por su nombre como un agradable rayo de luz pasando por gruesas nubes de color gris que había estado a su alrededor por horas. Moviendo su atención, se encontró con Baekhyun acercándose lentamente y poniendo una rodilla en el suelo para nivelarse uno con el otro.
“¿Cómo estas aguantando?” Baekhyun preguntó suavemente como si estuviera consciente de los otros dos individuos en la habitación. Como deseaba Kyungsoo que estuvieran solos, pero no había nada que pudiera hacer. “Tu tobillo…. ¿Está bien?”
“No está roto si es lo que preguntas” Kyungsoo murmuró. Alcanzó y rozó la mejilla del castaño suavemente con su mano “No estés tan triste”
“Solo estaba preocupado. No te movías y pensé que habías muerto”
“¿Realmente piensas que voy a dejar que unas estúpidas escaleras me maten?” Bufando, Kyungsoo sonrió. “Estadía malditamente molesto, Baek. No he estado soportando imbéciles y la mala organización de la escuela solo para morir en un estúpido viaje. Si muero ahora, no soy mejor que mi embaraza, Ex-VP”
Sonriendo, Baekhyun asintió. “Yo me molestaría mucho contigo, también”
“Lo merecería”
Los dos atraparon los ojos del otro e inició una pequeña, silenciosa risa entre ellos. Por un momento en el tiempo Kyungsoo se olvidó temporalmente de las otras entidades paradas al fondo hasta que ese pequeño momento pasó y se convirtió en memoria ante el sonido de Chanyeol aclarándose la garganta. Inmediatamente después, la sonrisa en los labios de Kyungsoo se borró. Su ceño se acrecentó cuando Baekhyun volteó su cabeza y se paró, dejando el lado de Kyungsoo para regresar con el gigante.
“Baek—”
El castaño no pudo escuchar el pequeño gruñido, ni tampoco vio el añoro en los ojos de Kyungsoo mientras colocaba una mano en la espalda de Chanyeol. “Soo, iremos por tus cosas y las dejaremos frente a la oficina”
“El Sr. Kim dijo que tus padres deberían estar aquí en un par de horas,” Agregó Chanyeol, labios fruncidos y expresión neutral mientras lo decía. “Por lo que se ve, estas muy bien. ¡Oh! Ten” Alcanzó profundo en su bolsillo y se inclinó sobre Kyungsoo para ofrecerle una pequeña envoltura de plástico en su palma. “El enfermero dijo que te quedaras esto en caso de que se acabe el efecto de la última pastilla que te dio”
Le dio una simple mirada a la pastilla antes de que Kyungsoo colocara su mirada de hielo en Chanyeol. Luego, si palabras, volteo su rostro al lado opuesto, creando una situación incómoda. Su rechazo causó que el gigante se preguntara qué debería hacer hasta que Jongin tomo la pastilla y asintió.
Baekhyun suspiro después de ver a Chanyeol mirarlo inseguro. “Está bien” Dijo, señalándole a Chanyeol que lo siguiera. Agachándose en el suelo, el castaño alcanzó debajo de la cama y jalo el equipaje negro de Kyungsoo. “Soo, ¿hay algo más que necesites que no esté en esta bolsa?”
La respuesta tardo, y fue apropósito. “No”
Sintiendo el tono amargo, Baekhyun no dijo nada más y se giró a Chanyeol. “¿Puedes tomar la bolsa?”
“Por supuesto que puedo” Rápidamente, Chanyeol tomó el equipaje, deslizando la correa alrededor. “¿Algo más que quieras que me lleve?”
“No hay nada más aquí abajo” Baekhyun contestó, levantándose. “Va a necesitar sus zapatos…. creo que eso todo” Se giró hacia el joven ceñudo en la cama una vez más y momentáneamente le tocó la mano. “Regresaré cuando pueda”
Kyungsoo no dijo nada audible, y Baekhyun lo tomo como una despedida. Miro a Jongin - consciente de su relación con Kyungsoo - y asintió antes e que Chanyeol comenzará a reconfortarlo con una mano moviéndose arriba y abajo en su pequeña espalda hasta que salieron de la cabaña.
Las diferencias divididas en el comportamiento de Kyungsoo eran claras y limpias como la luz del día para Jongin quien vio cada aspecto del añoramiento y las pequeñas indirectas que Baekhyun fallo en notar y tendía a. En su pequeño encuentro el uno con el otro, Jongin había visto caer a Kyungsoo dos veces. La primera siendo la que involucraba las escaleras., y la segunda cuando Baekhyun escogió al gigante por encima del permanecer al lado del joven herido.
Comentarios malévolos y burlones se encontraban en la punta de su lengua, pero Jongin contuvo todo ellos, ahorrándole al presidente quien había regresado a su mirada en blanco enfocando sus ojos en el techo sucio. Luego, en la esquina de sus ojos, Jongin vio como la bolsa de hielo se deslizaba, y se movió para arreglarla otra vez.
Kyungsoo no puso objeción.
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Después de hablar con los maestros, Baekhyun salió de la oficina frontal. La lluvia había aumentado, lloviendo más fuerte y rápido que antes. Aún mojado de su viaje del campamento hacía la parte principal, Baekhyun estaba temblando de frío mientras caminaba hacia donde Chanyeol se encontraba sentado, en los columpios. De antemano había tomado la decisión de permanecer de pie, pero la manera en que el gigante palmeo el espacio a su lado hizo que su resolución sucumbiera. Sin embargo, nada lo detenía de sentarse lo más lejos que podía del atleta.
Chanyeol lo notó, y se debatió consigo mismo durante un rato antes de moverse más cerca. “¿Qué dijeron?”
La forma en que el gigante indiscretamente acabo con el espacio entre ellos era algo que Baekhyun notó, pero no podía encontrar en sí mismo las ganas de debatir la decisión de este último. “Lo mismo de siempre. No se va a quedar y que en unas horas sus padres llegarán aquí”
“Espero que este bien….” Mirando a su derecha, Chanyeol observó la lluvia golpear el techo de la oficina y deslizarse hacia abajo, creando charcos marrón en el suelo. “Kyungsoo dejó muy claro que no aprecia mi existencia”
A pesar de que el joven lo dijo en forma burlona, Baekhyun tomó nota de la pequeña mancha de decepción escondida bajo la máscara. “Lo siento”
“No es algo por lo que te tienes que disculpar” Dijo Chanyeol, sonriendo mientras daba golpecitos a la rodilla de Baekhyun. “No me sorprende mucho”
“El solamente odia a todos”
“Lo sé, pero aún sí.” Rápidamente cambiando el tema con la finalidad de alegrar el ánimo, Chanyeol sonrió, inclinando su cabeza en la dirección del castaño. “¿Qué hacemos ahora? ¿Lo visitamos de nuevo?”
Sacudiendo su cabeza, Baekhyun suspiro. “Me dijeron que tenemos que reunirnos con el resto de la escuela y participar en las actividades planeadas. Ellos se ocuparán de Kyungsoo, dijeron”
“¿Estás de acuerdo con eso?”
“Está bien” Dijo Baekhyun asintiendo. “Ahora están en el edificio recreativo”
“Eso está un poco lejos…”
“Lo sé”
“Creo que deberíamos correr” Chanyeol resoplo, poniéndose de pie. Luego se dio media vuelta, estirando su mano hacía el castaño.
No había absolutamente nada de mano con aceptar la mano, excepto por el hecho de que implicaba contacto físico. Baekhyun se dio cuenta de que había permitido que más contacto y conversaciones entre ellos dos de lo que hacía a diario, y no se había percatado hasta ese momento. En lugar de rechazar fríamente como si no hubiera visto la mano, Baekhyun agito su cabeza rechazándolo, parándose del columpio solo.
Rebasó al gigante, súper consciente de la expresión en el rostro de este último acerca de su rechazo para tomar la mano. Sin esperar, Baekhyun salió de la protección del porche de la oficina y hacía la lluvia sin molestarse en colocarse la capucha. Sus manos estaban enterradas en los bolsillos delanteros de su chaqueta, y a pesar de que la lluvia caía a cántaros, su paso era el de un individuo caminando en un clima soleado. No pasó un segundo sin preguntarse qué es lo que hacía Chanyeol detrás de él, y por un suceso extraño, su curiosidad inquisidora fue respondida cuando de repente la lluvia dejó de golpear su cabeza de una vez por todas.
Mientras continuaba caminando, Baekhyun miró hacia arriba, para descubrir que Chanyeol había desabrochado su chaqueta para así poder hacer un pequeño techo protector contra lluvia sobre sus cabezas. Debajo, Chanyeol usaba una playera blanca, y por sus brazos, Baekhyun podía ver que tenía frío.
Baekhyun tenía protestas contra los esfuerzos de Chanyeol, pero el gigante solo sonreía. “No queremos cultivar plantas en tu cabeza con toda agua. Sin embargo, si eso alguna vez pasa, comenzare a llamarte brote y siempre te acordarás de este día— el día en que ignoraste mi insistencia en que te mantuvieras seco”
“Deja de hablar y ponte tu chaqueta, Chanyeol” Baekhyun murmuró. “Tienes frío”
“No, no tengo”
“Los cabellos en tus brazos están noventa grados hacia arriba”
Riéndose, Chanyeol agito su cabeza burlándose. “No, no lo creo. Están inclinado treinta grados al este como siempre lo están” Bromeo.
Girando sus ojos, Baekhyun murmuró algunas cosas bajito antes de ponerse la capucha mojada de vuelta sobre su cabeza. Jalo los cordones hacia abajo para satisfacer al hombre a su lado. Una vez que terminó, era consciente de su apariencia, pero en ese momento, estaba mucho más preocupado por el congelado, descuidado deportista.
“Apresúrate y ponte tu chamarra” murmuró el castaño, cruzando los brazos. “Te vas a enfermar”
Sonriendo, Chanyeol trabajo rápidamente para poner sus brazos dentro de su chaqueta y subirle el cierre aprisa antes de también apretar la capucha sobre su cabeza. “Oh, eso sería terrible” dijo dramáticamente. “Si me enfermo, ¿Quién te haría compañía? ¿Kris? No, eso es demasiado molesto para siquiera pensarlo. Lucharía contra la fiebre solo por celos desde que aún no supero que hayas apostado por él y no por mí. Eso aun lastima mis sentimientos en estos días. Ahora, veamos… ¿Quién más hay?”
“Chanyeol” Baekhyun interrumpió, gruñendo. “Yo no quisiera tener la compañía de nadie”
“Eso es un poco solitario ¿No lo sabes?” Chanyeol dijo con un tono gentil. Estuvo en silencio por unos segundos antes de tronar los dedos. “Oh, ya se. Luhan”
“Prefiero a nadie”
Golpeando suavemente su codo con el del castaño, Chanyeol inclinó su cabeza. “¿No crees que yo puedo ser la excepción a eso?”
“No”
El gigante tomó el rechazo con un bueno humor, lanzando su cabeza hacía atrás y dejando que gotas de lluvia recorrieran su rostro. Sonrió, era un fenómeno que Baekhyun no soportaba no comprender; Para él era raro cómo alguien podía aguantar tanto rechazo y aún así tener la capacidad de sonreír y dejarlo pasar. Antes de que el castaño pudiera quitar la mirada del hombre que caminaba a su lao, Chanyeol niveló su rostro otra vez y atrapó los ojos de éste último, sonriendo con su cabello y rostro mojado en una forma tonta.
“En la salud y la enfermedad, yo esperaré”