"Te quiero. Te quise desde el primer momento en que te vi. Te quise incluso antes de verte por primera vez"
-Un lugar en el sol
A FIRST SIGHT.... 2 TWICES:
3 DE SEPTIEMBRE DEL 2014
Maybe I annoy you with my choices
Well, you annoy me sometimes too with your voice
But that ain't enough for me
To move out and move on
I'm just gonna love you like the woman I love
Una dulce melodía, llegó en forma de una suave caricia a los oídos de Seung Hyun. Al escuchar las primeras letras de la canción, Seung Hyun inevitablemente cerró los ojos y pensó que la canción se adecuaba perfectamente a él. Una leve sonrisa se dibujó en su cansado rostro.
Dos veces.
Iban dos veces, que los cielos le enviaban señales sobre Ji Yong y su relación, lejos de molestarle lo tomó con humor. Constantemente pensaba en él, no necesitaba un recordatorio por parte de alguien o de cosas. Ji Yong vivía dentro de él. Lo extrañaba intensamente y hoy había sido un día particularmente muy tedioso para él.
Estaba feliz de que su película haya sido bien recibida. Anoche se estrenó junto al Movie Talk, que hizo para Naver y hace media hora le informaron que solo en el primer día de estreno superó los 200 mil espectadores. Un número muy bueno, le llenaba de orgullo y bendición. No obstante, ahora venía la parte que mas le costaba, a pesar de los años: Conceder entrevistas, ir a cines y demás cosas para promocionar su película.
Era parte de su trabajo y aunque lo hacía con gusto, no era fan de estar sentado todo el día hablando o en su defecto, parado. Se sentía exhausto y más con los conciertos de la YG Family. Tenía la impresión que estaba por pescar un resfriado y rogaba por todos los cielos no enfermarse. No era conveniente y no quería ser una carga para nadie. ¿Un plus adicional para no gustarle hacer este tipo de cosas? Le hacía estar alejado de Ji Yong y sabía que el menor, no lo tomaba muy bien.
Un suspiro brotó de sus labios.
Hoy hizo diversas entrevistas, por lo tanto tuvo tres cambios de ropa y llevaba tres días haciéndolo. Ahora mismo vestía, una camisa blanca con un traje de color vino. Le quedaba bien, sin embargo en su mente aun rondaba la pregunta que le hizo aquel reportero.
En la película, Daegil se enamora a primera vista cuando ve a Mina. ¿Alguna vez te has enamorado a primera vista de alguien en la vida real?
Él con una media sonrisa respondió:
Creo que tiende a pasarme, si no me enamoro a primera vista de alguien, esa persona termina no gustándome.
Y ahí estaba el punto de todo el asunto, del porqué esa pregunta tenía un carácter especial para él. Quizás algunas VIPs listas deducirían de quién hablaba. Por supuesto, que estaban en lo cierto. Casi se sentía un lector de mentes. Seguro, el nombre Kwon Ji Yong flotaba en sus cabezas. Prácticamente admitió que se enamoró a primera vista de él.
Sin embargo, hay algo que nadie sabía ni siquiera su mismísimo novio. Él se enamoró dos veces a primera vista de la misma persona, en diferentes tiempos y a su manera.
Su secreto más guardado en su corazón, se revelaba ante su mente y fácilmente se sumergió en sus recuerdos.
-FLASHBACK-
En algún mes del 1998
Un muchacho de apariencia robusta con unos kilos de más caminaba por la acera, moviendo su cabeza al ritmo de la música de su mp3 recién regalado. Tarareaba de forma inconsciente una melodía, algo que no era la acción exacta. Sería apropiado decir que básicamente estaba rapeando. Vestía ropas holgadas, a la moda y propias de la onda del hip-hop. Hace un año aproximadamente descubrió su pasión por esa corriente musical y ahora, con tan solo 11 años podía decir que ese tipo de música le volvía loco. La escuchaba durante todo el día y tomaba notas de las letras de rap. Soñaba algún día escribir sus propias letras y reflejar en ellas: sus vivencias, filosofías y mensajes.
Estaba meciéndose al ritmo de Notorious BIG cuando lo vio por primera vez. Tenía los ojos entrecerrados y en ese momento, su prioridad era la música. Por lo tanto estuvo a milímetros de chocar con alguien, a las justas detuvo sus pies. Al estar más consciente de su alrededor pudo ver de primera plana que el muchacho lejos de mostrar facciones severas sonreía ampliamente y le estaba hablando. Él no escuchaba nada. Solo veía el movimiento de sus labios, se encontraba en la calle de su casa y algo en ese muchacho se le hacia conocido. Su visión se conformaba por alguien delgado, piel muy blanca, cabellos castaños, un diente delantero torcido y aquellos ojos de chocolate brillaban como lucecitas de navidad. Tenían vida y eso generó una gran impresion en él. Normalmente la gente se intimidaba ante él por ser alto, gordito y vestir extraño. Ese muchacho no demostraba sentirse incómodo en su presencia y todavía no tenía idea exactamente que le llamaba la atención en él. Puso pausa a lo que estaba escuchando y se quitó los audifonos, por respeto. Su madre le había enseñado a ser educado.
-¿Disculpa, me decías?- Seung Hyun se atrevió a dar el primer paso. Se sentía raro conversando con alguien de su misma edad.
-Te preguntaba por tu música. Me gustó la letra de lo que cantabas- el tinte de emoción impregnado en su voz causó que Seung Hyun sonriera sin proponérselo- Es diferente.
Seung Hyun tocó el puente de su nariz, evaluando si decirle o no. Quizá... a ese muchacho no le gustaría saber la respuesta. ¡Claro que era distinto! No escuchaba algo común y desde luego, él chico denotaba tener inteligencia. Evidentemente quería una respuesta de él. Registró un gran sentido de seguridad en su persona y le admiró por ello.
-Es hip-hop- la soltura dominaba su hablar. ¿De dónde salió? ¡Ni idea! Escaneaba con disimulo su reacción e inconscientemente buscó indagar la razón por la cual atraía su interés. No sabía si captaba al escudriño que era sometido y percibió ningún signo de perturbación en él- El rap es una de sus bases.
-La letra posee fuerza y es vibrante. Así lo sentí- el muchacho le explicó su punto de vista y tenía razón. ¿Acababa de encontrar a alguien que pensaba similar a él? Cada vez mas se le hacia interesante esa persona- Rapeas muy bien. ¿Me puedes enseñar?
Su mirada suplicante con matices de alegría hizo al pelinegro parpadear un par de veces. ¿Hablaba en serio? ¡Eran dos extraños! No podías ir con cualquiera y solicitar ese tipo de cosas. Raro. Él era raro o inocente o tal vez tonto.
-¿Quieres que te enseñe?- le vio asentir con firmeza- No te parece chocante lo que me pides?- aquellos ojos chocolates le miraban confundidos- Chico...
-Ji Yong. Me llamo Ji Yong- no mostró sentirse ofendido. Su voz imponente y apacible a la vez.
-Bien, Ji Yong- Seung Hyun decidió llamarle por su nombre- No nos conocemos y... ¿por qué debería enseñarte a rapear?
Ji Yong soltó una risita y Seung Hyun frunció el ceño ofuscado.
-No diría que no nos conocemos- el castaño dio a entender algo.
-¿Nos conocemos, entonces? ¿De dónde?
-Tampoco es así.
-¿Eh?
-¿No me reconoces? Soy tu vecino. Al menos eso sé- Ji Yong sonrió.
¡Click!
¡¡¡Por eso hace unos instantes se le hacia conocido!!! ¡¡Ahora todo tenía sentido!! Nunca le prestó mucha atención a sus vecinos, pero sabía algunos retazos de la vida de ellos gracias a su madre. Nunca entabló una conversación con Ji Yong y en todo el tiempo que vivía ahí solo lo vió un par de veces. No es que quisiera hacerlo, si no se equivocaba Ji Yong poseía una vida ocupada. El tiempo es lo menos que tenía y sus caminos nunca se cruzaron. Recordó que su madre mencionó que trabajaba en un programa infantil o algo así.
-¿Tú no trabajas?- directo preguntó.
-El año pasado terminó el programa.
-Bueno... ¿tienes una agencia, no? No necesitas que te enseñe.
-Acabo de renunciar hace unos días.
¡Oh!
-No me respondiste mi otra pregunta- Seung Hyun buscaba salirse por la tangente.
-Quiero que me enseñes a rapear porque he decidido vivir de ello para toda mi vida. Al menos, quiero llegar a expresar letras así de buenas- Ji Yong no tuvo inconveniente en decir las cosas. Ese palpito que sentía y su intuición despierta conllevó a fascinarse por unas cuantas letras.
Seung Hyun otra ves detectó el brillo en su mirada. Ji Yong habló con mucha entrega, descolocandolo por un breve momento. Aun la duda bullía molestosa en su interior, pese a todo los pensamientos negativos iban resquebrajandose en su cerebro... poco a poco. Quizá ese... algo que le provocaba curiosidad no ayudaba a quedarse tranquilo. Quizá... era hora de tener compañía. Quizá.... ellos tenían cosas afines. Quizá... no era del todo tan malo su propuesta, aunque no tenía idea de como enseñar. Quizá..... Quizá.... Quizá....
-Todavía estoy aprendiendo. ¿Estás seguro de esto?.
A Seung Hyun no era de gustarle perder el tiempo.
-Yo quiero ser músico y estoy seguro que este camino me llama- Ji Yong no titubeó en su respuesta.
-De acuerdo. Empezaremos el fin de semana, ¿te parece?- el pelinegro extendió la mano. Ji Yong no tardó en corresponder la formalidad. Al sentir el tacto de castaño, una sensación muy cálida cubrió el interior del mayor. Agradable. Tal vez Ji Yong irradiaba positividad. Sonrió- Me llamo Seung Hyun.
Quizá.... era momento de compartir su pequeño mundo con alguien.
Febrero, 2000
El reloj ornamental, situado en el centro de la sala, repiqueteaba en tonos bastante altos. Oficialmente era un nuevo día y los ocupantes de la habitación, se daban por enterados. El horario y el minutero apuntaban un mismo número, el doce. Seung Hyun viró sus ojos a la par que estiraba sus brazos con su amigo. Todavía no entendía porqué su madre insistía en mantener ese enorme reloj, sacado de época antigua y lo peor es que se encontraba al centro de la sala. Ocupaba una buena parte de la pared y Seung Hyun solía pensar que era un desperdicio de espacio.
-Hyung, creo que es tiempo de comer. ¿Qué comemos hoy? ¿¿Kimichi con carne o ramen??- la pregunta no estaba en vías de dirigirse a Seung Hyun. Reflejaba curiosidad creciente por la suerte en esta oportunidad.
Seung Hyun sonrió ante las palabras de Ji Yong y como cada medianoche, dio inicio al ritual desarollado en ese lapso de dos años que llevaban siendo amigos.
-¿Listo?- preguntó más por hábito. Ji Yong enarcó una ceja divertido y asintió- ¡Jan Ke.... Po!
El clásico piedra, papel o tijera era jugado por ambos.
Primer asalto. Ji Yong ganó.
-¡Yay!- gritó emocionado el castaño.
Seung Hyun tuvo gran tentación de molestarlo, sin embargo no lo hizo. Se mordió la lengua y se concentró en el juego.
-De nuevo. Aquí vamos- escondieron sus manos en la espalda- ¡Jan Ken... Po!
Segundo asalto. Victoria para el mayor. Este lanzó un puño, celebrando. Ji Yong rió.
-Otra vez... ¡¡Jan Ken...Po!!
Tercer asalto. Empate. ¡¡Rayos!!
Y así estuvieron un buen momento hasta que se cansaron. La barriga de Ji Yong rugió y fue definitivo para ponerle punto final.
-¿Una tregua, hyung?- inquirió medio avergonzado.
-Está bien, Jiyongie. ¿Las dos cosas y arroz?- Seung Hyun removió sus cabellos.
El susodicho demostró estar de acuerdo. Ellos sabían que hacer. Media hora después sobre la mesa había arroz y ramen, hecho por Ji Yong y kimichi con carne, especialidad de Seung Hyun.
-¡Provecho, Ji!
-Igualmente, Seunghyunnie.
Atacaron la comida con gusto. Grandes proporciones de ella conformaban la cena tardía. Acostumbraban a comer mucho y ellos solían hablar hasta el amanecer. La mamá de Seung Hyun trabajaba en las noches y ellos lo aprovechaban para rapear. Así aprendían el arte de la música urbana y planeaban entrar al freestyle mas adelante. Era una suerte que Hye Yoon dormía como un tronco.
Estuvieron conversando por media hora hasta que Ji Yong sacó un tema importante y urgente.
-¿Hyung?
-Sí.
Empezar era difícil para Ji Yong, inconscientemente comenzó a jugar con su comida.
-¿Jiyongie?
El menor suspiró. Tenía que decirle las cosas de frente.
-Mi madre envió sin mi permiso- recalcó lo último- Un video de mi rapeando a una agencia.
Seung Hyun al escucharlo posó su mirada en su mejor amigo, dejó de comer por el momento. Ji Yong la sostuvo aunque no le gustaba la situación.
-¿Cuál agencia?- Seung Hyun susurró. Un par de ideas rondaban por su cabeza, pero se obligó a continuar.
-YG Entertainment.
Seung Hyun tenía conocimiento de esa agencia. Estaba orientada al hip-hop y al R&B. La agencia era la correcta. El CEO era ex-miembro del grupo Seo Taji Boys. Actualmente Jinusean, debutados bajo esa agencia, llevaban popularidad.
-Capté la atención del CEO- prosiguió- Está interesado en mi.
A ninguno de los dos les gustaba lo que implicaba todo esto. Ellos verdaderamente se convirtieron en grandes amigos durante esos dos años.
-¿Y?
Seung Hyun no tenía ni un pelo de tonto. No todo estaba completo, apostaba por ello.
-Quieren que vaya audicionar a Seúl. Mi madre dice que es mera formalidad. Técnicamente estoy dentro.
Ji Yong lanzó la bomba. Sus manos se aferraban a la mesa. Debería estar contento, pero el sentimiento amargo no le dejaba en paz.
-Hyung.... no quiero ir- su tono de voz sonaba desesperado.
-Te tendrías que mudar, ¿cierto?
Seung Hyun sagazmente dedució.
-Sí- musitó el menor en un hilo de voz.
-Tienes que ir.
-No.
-Jiyongie- Seung Hyun estiró su mano y la puso sobre el mas pequeño.
Entendía como se sentía su mejor amigo, él mismo se encontraba aterrado aunque no lo exteriorizaba. No le gustaba ver las manos Ji Yong apretadas sobre el borde de la mesa. Quería tranquilizarlo y él sabía que esto no se trataba de los dos. Para tener trece años, Seung Hyun adquiría vestigios de madurez. Esto se trataba sobre el sueño de Ji Yong. Se trataba de su futuro. Él no podía cortarle las alas y ni era capaz de hacerle eso. El talento de Ji Yong se comparaba con un diamante en bruto. Él lo admiraba, el muchacho tenía mucho para dar. La agencia era la adecuada para que pudiera desarrollar esa genialidad suya. Él no podía enseñarle mas cosas, eso escapaba de sus manos y no podían mantenerse así. En un momento determinado, pararían por falta de recursos. Ji Yong necesitaría de otro tipo de accesoramiento para ese tipo de talento. Ji Yong era único y tenía que ser en manos personas apropiadas. YG le ofrecía y garantizaba ello. Más obvio no podía ser y seguro que el dueño de la agencia veía lo mismo que él, la gran capacidad de Ji Yong para la música.
-Escúchame- sintió a Ji Yong relajarse ante su tacto- Vas a ir a la audición y sabes que es lo mas sensato. Es tu sueño y necesitas aprender cosas nuevas.
-Pero...- el castaño quería refutarle. Resultaría perdiendo, los dos tenían conocimiento de ello y Seung Hyun ahorró el tiempo de excusas sin sentido.
-Será difícil contactarnos, pero lo intentaremos. No puedes dejar esta oportunidad. Es única y debes aprovecharla.
-Hyung... ven conmigo- gimoteó suplicando, aunque por dentro comprendía que estaba de más.
-Mi situación no es buena, Jiyongie- el pelinegro ladeó una de sus comisuras en una amarga sonrisa.
-Lo sé.... solo...- Ji Yong suspiró abatido y no terminó sus palabras.
-No te preocupes por mi. Soy Choi Seung Hyun y cumpliré una promesa para ti: No importa cuanto me tome, trabajaremos en la misma industria.
Esto pareció apaciguar a Ji Yong porque resultó ofreciéndole un semblante algo alegre.
-Esa cara está mucho mejor- otra vez agitó sus cabellos- ¿Cuando te vas?- preguntó, retomando su comida.
-Una semana y media.
-De acuerdo. ¿Ya sabes la canción con la cual audicionarás?- Seung Hyun se hallaba triste, pero hacía un esfuerzo por Ji Yong.
Su mejor amigo no podía verlo así y no quería que por su culpa desistiera, lo conocía.
-Creo que cantaré That's my name de Lil
Bow Wow- su rostro se tornó pensativo.
-Me parece bien. Te ayudaré a practicar.
-Gracias.
Enseguida se enfrascaron en una nueva conversación y Seung Hyun deseó quedarse conversando para siempre con Ji Yong. Sería una noche larga.
Sí. Sus pensamientos eran acertados. Era lo mejor.
Tercera semana de Setiembre, 2003
La mitad del año para Seung Hyun particularmente fue un asco. Tanto a nivel personal como estudiantil. Cambió de escuela 3 veces y aún las sombras de chico problema le perseguían. Le buscaban problemas y él sinceramente odiaba la escuela. Ver irse a los pocos amigos que le quedaban, fue un trago amargo y duro de tragar. Tampocó ayudó que dos amigos suyos murieran en distintos accidentes de tránsito.
Intentó tomar la perpectiva de su vida y experimentar por un par de caminos. El primero no le generó cosas positivas. Entonces tomó el segundo camino y esta vez fue un éxito. Su pensamiento se limitaba a: "Si una cosa no funciona, pongo mi mejor esfuerzo en otra" Gracias a los cielos, todo marchaba viento en popa, poco a poco.
Ahora era rapero underground y celosamente, en estos últimos meses, empezó a componer letras de rap. Todo se lo debía a su amigo D-Marker. Se inició desde abajo hasta que terminó siendo rapero invitado o ayudaba en las performances de los clubs. Tenía novia y su nuevo mundo le gustaba mucho.
Seung Hyun después de una buena presentación se encontraba agotado y relajarse no le vendría mal. Guardando eso en mente bajó de la tarima.
-¡¡Tempo!! ¡¡Lo hiciste bien ahí!! ¡¡Rompiste escenario, bro!!- Seung Hyun sonrió tímidamente ante el halago. Su pecho se inflaba de orgullo
-Gracias, hyung. Tú también lo hiciste bien- D-Marker le palmeó los hombros afectuosamente.
-Te invito unos tragos para celebrar- convino el rapero.
-Está bien.
Ambos se dirigieron a la barra, Seung Hyun a pesar de tener dieciséis años y ser menor de edad, de vez en cuando tomaba bebidas alcohólicas. Sin percances se sortearon hasta la barra. El club se hallaba lleno, por ser fin de semana y la música estaba a todo volumen.
Todo estaba bien hasta que el llamado de alguien les hizo girarse y pensó que la vida tenía una forma muy torcida de hacer las cosas, a la persona que menos esperaba ver... caminaba directo a él... Kwon Ji Yong.
Desde su posición tuvo el lujo de observarlo con calma. Así como la primera vez que lo vio. Con satifasción vislumbró que el menor se conservó durante estos tres años. Había pegado su buen estirón, por supuesto, pero seguía siendo ese chico delgado, de cabello castaño, ese diente torcido y sobre todo, esos hermosos ojos nunca dejaron de brillar. Sintió un agujión duro en su corazón, pero lo ignoró olímpicamente. Su corazón ya estaba ocupado y quizá era una forma de manifestar su sorpresa al verlo.
-Hyung, ¿conoces al que te está llamando?-susurró Seung, desviando la mirada a propósito.
-Sí. Es un conocido.
Unos segundos más, Seung tuvo a dos personas frente a él. Un conocido y otro no.
-¿Hyung?-escuchó hablar al menor.
-¿Ji Yong?- no se aminaló y respondió en forma de pregunta.
Estaba hecho. Oficialmente daban a entender que se conocían y a sus acompañantes les quedó claro.
-¿Tempo, se conocen?- D-Marker interrogó sorprendido.
-Sí.
-Ji Yong, ¿por qué no me dijiste que conocías a Tempo?- el amigo de Ji Yong se quejó- Y yo quería mostrarte algo realmente bueno y otra vez me ganaste, ya lo conocías.
-Es díficil que no conozca algo- los labios de Ji Yong formaron una leve sonrisa y sus manos descansaban en los bolsillos.
-¿Y de dónde se conocen?- D-Marker seguía con su cuestionario.
Genial. Pregunta difícil de responder.
-Éramos vecinos- Ji Yong rápidamente ofreció una respuesta.
La agilidad de Ji Yong le pilló con la guardia baja a Seung Hyun. También conservaba la inteligencia por lo visto.
-En este caso, no habrá incomodidades entre ustedes y no tendría por preocuparme por dejarlos solos- el alivió fue notorio en su voz- Si me permiten, tengo que arreglar unos negocios con este jovencito. Haremos una presentación.
-No nos extrañen, hyungs.
Ji Yong rodó los ojos ante el comentario y Seung Hyun enarcó una ceja. Una vez ellos fuera del radar, el mayor se dirigió a su acompañante.
-¿Vecinos?
-Ha pasado mucho tiempo, hyung- Ji Yong explicó.
-Tres años- cortó Seung Hyun.
-Cierto- Ji Yong hizo un amago de sonrisa-El contacto entre nosotros solo duró medio año y desde ahí no he sabido nada de ti....
Ellos perdieron el contacto gradualmente y Seung Hyun, reconocía para si mismo, que llevaba parte de la culpa.
-Cada uno tuvo su vida.
Era estúpido que declarara de esa forma. Él lo sabía y Ji Yong también. Nada expiaba sus culpas. La frase sonaba a cobardía.
-¡Claro! Nuestras vidas...- sin querer Ji Yong se oyó sardónico- Creo que respondí bien.
-¿Dices bien?
-Bueno, Seung. Actualmente no somos mejores amigos, ni tampoco amigos. ¿Conocidos? No se aplica con nosotros- Ji Yong mordaz explicó- ¿Tú tienes alguna idea, de la palabra correcta?
-No. La verdad no.
-Lo suponía- dijo en voz baja.
Definir el ambiente en una palabra sería: Tenso. Las cosas entre ellos no se podían arreglar con un: Lo siento o una conversación. Es más ni siquiera previeron este tipo de escenario. Seung Hyun sabía muy bien que el maldito orgullo de ambos se interponía entre ellos. Muy difícilmente darían el primer paso a las disculpas.
-Te vi rapear. Lo hiciste excelente.
Pasado unos minutos de silencio, Ji Yong, de inesperado como solía le reveló aquella interesante información. Seung Hyun, mas tímido de lo normal no podía estar.
-Creí que recién entrabas al club.
-No. Estuve desde el inicio de la función, atrás.
-¿Cómo resultaste aquí?
Seung Hyun no soportó mas el misterio. Tenía que saberlo.
-Hoy terminé mis ensayos temprano y a la salida In Gak me invitó a relajarme- mutismo total. Cara a cara y sucumbían a un abismo cada vez mas denso- ¿Cómo has estado estos tres años?
¿Por qué me pregunta esto?
-Como ves todo va bien.
Mentira! Dos años y medio estuve mal!
Debería tener asco en decir tremenda mentira, sin embargo continúo enlodándose en ella como si fuese natural. ¡¿Que infiernos?!
-Empecé desde abajo y ahora tengo mi lugar en el underground. Para hacer rap real aprendí el arte de hacer el verdadero hip-hop.
-Oh, ya veo...
Mas silencio. ¡Espléndido!
-Ji Yong...
-Seung...
Hablaron al mismo tiempo. Seung Hyun no toleró más el ambiente que los rodeaba. Quería gritar, decirle palabras despectivas a Ji Yong. Las típicas bravuconearías que estaba acostumbrado a decir. Ser rapero underground no era fácil y tenía que defenderse. La extraña fuerza que lo obligaba a contenerse... le estaba matando por dentro. Ellos no se decían todo. Las palabras zumbaban forzadas. ¿En qué se convirtieron ellos dos? ¿Desconocidos y conocidos? ¡¡Oh, jodido orgullo y demás cosas!! Esto tenia que acabar.
-Empieza tú, hyung.
-¿Puedo golpearte?- Seung Hyun abruptamente con un semblante serio hizo la petición.
Ji Yong bufó y rió con sarcasmo, divertido.
-¿Un golpe?
-Sí.
-¡¡Qué coincidencia!! Andaba pensando lo mismo, hyung.
-Demasiadas coincidencias por hoy- entre dientes pronunció- Entonces... ¿un golpe cada uno?
-Excelente. Tú primero, hyung.
-Bien.
Seung Hyun ni corto ni perezoso le tumbó un buen puñetazo en la mejilla. Sintió crujir sus nudillos y terminó tumbando a Ji Yong. Un hilo de sangre corría por la comisura del castaño. Este le dedicó una sonrisa cínica. Medio club tenía los ojos fijos en ellos. Paralizados y expectantes.
-Buen gancho, hyung.
Ji Yong de inmediato se paró.
-Mi turno. Dolerá.
Él bufó por su advertencia y esperó tranquilamente su golpe. ¡¡Pero que fuerza tenía, Ji Yong!! ¡¡Un bello porrazo obtuvo!! Incluso sus dientes se movieron. Él resbaló debido al impacto. La mandíbula ardía y mañana tendría un bonito moretón en aquella zona. Le consolaba que Ji Yong estaría en las mismas. Intentó sonreír al pensar en ello.
Ji Yong le extendió la mano, él con gustó la tomó y en una sola se enderezó.
-Si duele, Ji Yong.
-¿Estás mejor, hyung?
-Sí y ¿tú?
Seung Hyun se colgó de sus hombros y Ji Yong sonrió alegre, no le molestó su contacto. El castaño intentó también colgarse de los suyos, se conformó con pasar su brazo sobre la parte superior de su espalda.
-¡Perfecto! ¿Hielo?
-Sí.
La gente del club les miraba raro mientras caminaban a una mesa. No hubo peleas, ni gritos, ni nada. Faltaba por arreglar las cosas entre ellos, pero comenzaron bien con un buen golpe. Ellos definitivamente eran locos y estúpidos.
Sin embargo, todo estaba bien por un rato.
¡¡Oh, claro que sí!! ¡¡Diablos, lo mejor de la noche!!
Octubre, 2003
Seung Hyun tenía sus manos detrás de la espalda. Se entrelazaban con fuerza. Lo hecho estaba hecho. Frente a él tenía tres pares de ojos observándole. No pecaba de soberbio, pero su presentación fue perfecta. Eso es lo único que tenía seguro. Acababa de terminar y esa molesta sensación le carcomía por dentro. ¡¡Maldita sea!! ¿Por qué se dejó convencer por Ji Yong para presentarse a la audición? Bueno, no era del todo cierto. No estaba seguro al principio, sin embargo le contó a su novia su pasión y tuvo su apoyo. Decirle a la gente su sueño lo convirtió en algo mas realista para él y descubrió que su pasión era mas fuerte cada vez mas. Así terminó grabando varios demos con Ji Yong y consiguió un pase para la segunda prueba.
¡¡Y maldición!! Los susurros no ayudaban a tranquilizarlo. Él durante las últimas dos semanas estuvo aclimatándose a la idea de que quería ser un rapero para televisión y le gustaba. ¡¡Por lo más sagrado!! ¡¡Que hablen de una buena vez!!
-Seung Hyun, ¿verdad?
-Sí.
Firmeza hubo en su voz. No podía flaquear.
-Eres el mejor aspirante que hemos tenido hasta ahora. Perfecta presentación, tienes talento muchacho.
Quizo sonreír, pero se contuvo.
El hombre parecía querer hablar mas. Su sentido de intuición le alertó y no por cosas buenas. No obstante, él no era cualquier chico y esperó pacientemente. Él era fuerte. Una audición no era nada.
-Estamos buscando un grupo que revolucionará el hip-hop y el problema es tu peso, no se adapta a la visión que queremos dar.
¿Problema? ¿Peso? ¡¡Racistas!!
Seung Hyun hervía de furia, sin embargo no les dio el gusto de verlo así. Él sabía lo que valía.
-Tienes 16 años, ¿cierto?
-Los cumpliré el próximo mes- aclaró.
-De verdad queremos tenerte aquí. Ven a la próxima audición dentro de seis meses. Si lo haces bien, entras.
-De acuerdo.
Seung demostró una calma que no tenía y haciendo una reverencia, se marchó. Al salir, vio a Ji Yong recostado en una pared. Los pasillos se hallaban semi-vacíos. Quedaban pocos aspirantes. Su amigo al verlo, corrió hacia él.
-¿Y? Hyung? ¿Cómo te fue?- lucía emocionado. Lamentablemente tendría que decepcionarlo- ¡¡Hyung!!
-No pasé.
-¡¡¿QUÉ??!!- se exaltó el castaño- Tú eres el MEJOR de todos estos aspirantes. No puede ser.
Seung Hyun de reojo observó los rostros de fastidio ante la declaración de Ji Yong y él no se daba por enterado.
-¿Lo hiciste bien, verdad? No me contestes- Ji Yong alzó la mano como signo de stop- Lo sé.
-Sí. Dicen que es por mi sobrepeso- Seung Hyun susurró.
¡¡Indignación!! Decoraban las facciones de Kwon Ji Yong. Su entrecejo fruncido y su rostro escarlata, avalaban su gran fastidio. Como si le hirieran a él.
-¡¡¿ESTÁS BROMEANDO?!!- Ji Yong bramó colérico, alzando los brazos. No le importaba el escándalo- ESPERA. ¡¡YO ARREGLO ESTO AHORA MISMO!! ¡¡TÚ ENTRARÁS AQUÍ A COMO DE LUGAR!!
Ji Yong iba contra todos dispuesto a salirse con la suya, Seung Hyun sujetó su brazo a tiempo. No permitiría que su amigo cruzara la puerta. No quería entrar a base de escándalos. El orgullo no se lo permitía y Ji Yong no estaba siendo racional. No con la cabeza caliente.
-Déjalo, Ji.
-PERO...
-Hazle el favor a tu hyung- aun mantenía a Ji Yong a raya. Lidiar con su fuerza, era un poco difícil.
-NO. NO ME QUEDARÉ QUIETO.
-Lo harás. Si quieres que cumpla la promesa que te hice hace tres años- surtió efecto, Ji Yong no se movió. Todavía no tenía idea como mantenía la cabeza fría porque se encontraba muy cabreado- Te prometí que estaríamos en la misma industria, ¿verdad?- el menor asintió- Confía en mi.
Y antes que Ji Yong pudiese objetar o tratar de entrar nuevamente al cuarto de audiciones, Seung Hyun le arrastró hacia la salida.
¡¡Por supuesto que había entendido la indirecta!! Tenía que bajar de peso. ¡¡Oh, sí lo haría!! Le demostraría a esos bastardos que sería una pena perderle. Él era bueno en lo que hacía y confiaba plenamente en sus capacidades. ¿Querían 6 meses? ¡¡¡Magnífico!!! La cuenta regresiva comenzaba y lo lograría. ¡¡Se llamaba Choi Seung Hyun y una maldita audición no le detendría para nada!!
28 de Marzo del 2004
Semblante serio. Mirada seria. Boca fruncida. La puerta se abrió, revelando a Seung Hyun detrás de ella. Su pose intimidaba. Ni siquiera veía a los demás candidatos y estos temblaban.
Ji Yong caminaba en círculos por los pasillos, sin parar, una y otra vez. Murmuraba cosas que no oía y verlo así, por poco rompe la fachada de Seung. Decidió no alargar más la espera para sosegar el corazón de su amigo.
-Ji Yong.
Le llamó y no le contestó. Uhhh... no se daba cuenta que estaba frente a él. Otra vez, le costó mantenerse en su papel.
-Ji Yong.
Alzó un poco más la voz. Nada. Ji Yong seguía en su mundo. Seung Hyun puso los ojos en blanco. Tiempo de medidas extremas.
-JI YONG!
Su amigo paró asustado, pegando un brinco. El uso de su vozarrón resultó bueno para todos.
-¡¡Por Dios, hyung!!- Ji Yong reprochó. Luego recordó el porqué de su estado y jaló a Seung Hyun hacia otro lado- ¿Y? Tengo que matar gente?
Seung Hyun mantenía la misma expresión.
-¡Seung! ¡¡Habla!! Tengo que matar gente, ¿verdad? ¿Y ahora que fue mal?- la voz de Ji Yong sufrió varios cambios de tono conforme hablaba- No importa. Yo los mato.
-Pasé.
-Son unos inconscientes. Me decepcionan como empresa. Te llevó... - Ji Yong empezaba a divagar y abruptamente se interrumpió- Repite para estar seguro.
-Pasé.
-¡¡Oh, Dios!! ¡¡Eso es tan increíble!! Por fin, hyung!!- Ji Yong se arrojó a sus brazos felicitándolo con verdadera alegría- ¡¡SIIIIII!!
-Cálmate, Ji.
Seguro que el eco del tremendo grito de Ji Yong lo escucharon todos.
-Lo siento. Mucha emoción, ¿sabes?
-Gracias por el apoyo y por tus felicitaciones.
-No es nada, hyung. Amigos, ¿recuerdas?
Ji Yong se soltó del abrazo y vio a Seung Hyun sonriendo. Esa es la cara que quería ver.
-Bienvenido a bordo, hyung. Hazlo bien de ahora en adelante.
-Lo haré. Daré lo mejor de mi.
-Vamos a celebrar. Busquemos a Young Bae.
Seung Hyun asintió y caminó junto al menor. Ya había sido presentado con anterioridad al mejor amigo de Ji Yong, el chico le caía bien.
-Hyung, ¿tienes Cyworld?
-Si. ¿Por qué?
-Más tarde me lo pasas. Tengo uno.
-De acuerdo.
El camino no sería de rosas. Seung Hyun le pondría mucha dedicación a su sueño y que mejor que a lado de buenas personas. Él, desde un punto, empezó a pensar que su vida estaba tomando un buen rumbo. Tenía una novia, amigos y un sueño, en vías de florecer. Deseó en ese momento que el coraje le acompañara siempre. Hoy daba inicio a una nueva etapa. Lo primero que haría era cambiar el tema de su Cyworld a: "Una vida infinitamente hermosa"
Julio, 2007
Doce hombres en un lugar. Súmale música y alcohol, y tendrás un buena fiesta. Seung Hyun aun estaba seguro que conservaba un poco de lucidez. Alguien sugirió en algún momento de la noche jugar "El rey de juego" . Poder ver los números, era un indicio que no estaba completamente borracho.
Se hallaba en una de las tantas reuniones del Nuthang. El grupo creado por Ji Yong y él, en Febrero tuvo buena acogida. Podía distinguir medio brumoso a sus compañeros. Actualmente era el momento de escoger una carta de la baraja. Por favor que le tocara ser Rey!!
1...2....3....
Todos cogieron una carta y su deseo no se cumplió. Un puchero adorable reflejó su estado de decepción. ¿Quién sería el rey?
-¡¡Soy el rey!!
Misterio resuelto. Jung Hyun afortunado!!
-Mi mandato es: ¡¡Quiero que el 7 y 8, se besen!!
¿¿¿Eh??? Seung Hyun achicó sus ojos y con pavor vio un 8 perfectamente impreso. Oh, no!! Y a quién tendría que besar? No. Ni loco. Desistiría.
¡Oh, oh!
Si lo rechazaba tomaría un castigo. ¡¡No quería!! ¡Ah! Que complicadas son las cosas. Preferiría besar la pared. Ahora que pensaba era de un color bonito. ¡¡Amarillo pollito!! ¡¡Significaba felicidad!! ¿Por qué pensaba en pollos? ¿Quería comer pollo? Espera... ¿tenía hambre? Un buen bimbap sería una opción apetecible y el bimbap tenía huevo... ¡¡Y el huevo era amarillo!! ¡¡Amarillo pollito!! ¿Por qué sentía que lo había dicho antes? ¡Ah! ¡Los pollitos salían del huevo!! ¡¡Que inteligente era!!
-¡Hey.... ya sabemos quien es el siete!
La voz de Jung Hyun provocó una distracción del brillante razonamiento que estaba teniendo. ¡¡No era justo!! Frunció el ceño enojado. Concentró su energía en mirarle horrible. ¡¡Se lo merecía por latoso!!
-¿Quién es el ocho?
¿Ocho? ¡¡Ah!! ¿Creo que soy yo?
Cogió su carta con ambas manos y la acercó a su rostro. ¡¡Sí!! ¡¡Ocho!!
-¡¡Soy yo!!
Alegremente blandió la carta. Entonces... recordó lo del beso.... De acuerdo, debió cerrar su boca.
Tenía la ligera impresión que todos lo miraban. Probablemente alucinaba. Escuchó que alguien tropezaba y segundos después le quitaban la carta. ¡Hey! ¡¡La carta era suya!!
-Si es él. El siete es Ji Yong y el ocho es Seung Hyun- anunció Jung Hyun.
¡Oh, quizá besar a Ji Yong no es tan malo! Esto duraría rápido. ¡¡Como pegar un sticker de Pikachu!! Rió estúpidamente e internamente. Al menos creyó que lo hizo.
-Se besan o quieren consecuencias- Jung Hyun le palmeó un cachete. Parecía ido.
Nota mental. Golpearlo después.
-Beso.
-Beso.
Esa era la voz de Ji Yong. Se refregó los ojos y lo ubicó al frente suyo. Cerca! Ji Yong estaba cerca. ¡¡Yay!!
Seung Hyun intentó pararse y cayó estrepitosamente al suelo. ¡Hmnp! Su trasero dolía.
-Sho... iré, hyung.
Bueno, esperaría. Seis latidos más de su corazón, unos labios se estamparon sobre los suyos.
¡¡Eran esponjosos!! ¡¡Sabían a Ji Yong!! No sentía a la acción terminar rápido... ¿y por qué su cuello se inclinaba?
Quizá eran desvaríos...
12 de Agosto del 2007
Ahora todos se encontraban, de alguna forma, celebrando por adelantado el cumpleaños de su querido y estricto líder. Dentro de cuatro días lanzarian su primer mini-album. El presidente decía que tenía un buen presentimiento con el álbum. Prácticamente le habían tomado por sorpresa y con los ahorros que habían obtenido hasta ahora y por supuesto, con la ayuda del presidente Yang le invitaron a comer carne. Es así como se encontraban en aquel sencillo restaurante, pero de buena comida.
Ji Yong se sentía agradecido y conmovido por las muestras de cariño de los demás integrantes del grupo. Todos lo veían y ahora terminaba de abrir los regalos.
-Gracias por los regalos. No tenían que molestarse- con una sonrisa en la boca les agradeció en forma general.
-¡¡Es lo menos que podíamos hacer por nuestro hyung que genialmente escribió una canción futuramente exitosa!!- el maknae como siempre se dignaba en dar alabanzas al líder. Todos rieron un poco, pero sabían que esta vez SeungRi tenía mucha confianza en Yang- Además no somos como otros que ponen sus regalos como secreto de estado- el menor del grupo lo decía por alguien en particular.
-¿Lo dices por mí, maknae?- con su voz gruesa y ronca el mayor del grupo le respondió enarcando una ceja- Hay un término llamado privacidad y yo hago lo que quiero- le miró seriamente haciendo que la valentía de SeungRi se achicara un poco, su hyung daba unas miradas que daban miedo- ¿Algún problema?
-Noo...- rápidamente le contestó. Ganándose un gesto burlón por parte de Young Bae y Daesung- Solo que a veces eres muy reservado. No importa así eres. No hay problema, hyung.
Al final todos rompieron a reír, incluso SeungRi sabía que tenía todas las de perder… solo por esta vez se negó hacer su típico puchero o fruncir el ceño como lo hacía normalmente. Así la velada pasaba agradablemente y para cualquier oyente que se dignara pasar por ahí, hubiesen pensando lo mismo. En un momento en que todos estaban distraídos, Seung hizo un acto de valor y se acercó al líder del grupo.
-Ji Yong… ¿podemos perdernos por ahí?- el menor que al principio le había tomado desprevenido la voz del mayor. Asintió con la cabeza.
No le parecía mala idea caminar un rato con el más grande. No era extraño, la amistad que los unía era muy fuerte y más desde que la ex de Seung le había dejado cuando estaban recién debutado y por dar un gira de conciertos en alguna ciudades de Corea. Solo recordarlo se molestaba. Era buena opción estirar sus piernas en una caminata nocturna, antes de descansar completamente en su departamento, pues al día siguiente tenían que levantarse temprano. Para cumplir el deseo de su hyung tenía que despacharlos a los demás y no era problema, incluso las cosas estaban a su favor. Dentro de una hora seria medianoche.
-Vayan avanzando. Yo saldré a caminar con hyung. Ya es tarde y tienen que descansar- habló en tono un poco autoritario.
-Pero…- SeungRi empezaba a quejarse, pero la mirada de advertencia de Ji Yong lo silenció por completo.
-No te preocupes, bro. Nosotros nos adelantaremos- Young Bae hizo su acto de intervención hablando en modo de apoyo a su mejor amigo.
-Gracias y también gracias por organizar esto para mí. Asegúrense que SeungRi inmediatamente vaya a dormir y no se distraiga en otras cosas.
-Yo ayudaré a hyung. Puedes estar tranquilo- Daesung buscó serenar a su líder y lo pensaba cumplir. Era una ventaja que él y SeungRi compartían la misma habitación.
SeungRi frunció el ceño enojado, pero no osó en hablar más. Era mejor por hoy dejarlo así. Así que caminó junto con los demás en dirección al pequeño apartamento que tenían, no sin antes despedirse de ellos.
Al salir una pequeña brisa tocó el rostro de Ji Yong, él sonrió automáticamente. Era fresca, le gustaba. Seung Hyun lucía pensarivo mientras ponía sus manos en su pantalón. No sabía como empezar. Muy mala idea caminar juntos y la calma de la noche, le asfixiaba. Definitivamente era un desastre.
-¿Ji Yong?
Ahí voy.
-¿Qué, hyung?
-La cosa es esta….aishh no olvídalo. Creo que esto se ve raro- abruptamente Seung Hyun cortó su propio monólogo en un ataque de timidez.
¡¡Rayos!! Palabras equivocadas. Mas curiosidad para Ji Yong.
-¿Me podrías explicar, Seung? Porque no te entiendo nada- aún con una sonrisa le invitaba a sincerarse con él.
-Sé que tengo que darte tu regalo… pero me acabo de dar cuenta que es fuera de lugar- a una velocidad impresionante le explicó el motivo de su tormento.
Si captó su verborrea, era un milagro o Ji Yong era el mejor amigo del mundo.
-Ahh… ¿así que se trata de eso? ¿Tan malo es?- Seung se removió un poco sus cabellos, avergonzado.
-¿Malo? Se podría decir…..- estaba dudoso.
-Yo soy el que recibiré el regalo. Así que… ya diré si tienes razón o no. ¡Vamos!- Ji Yong extendió su mano y levantando un poco sus dedos esperó. Seung Hyun se arrepentía ahora- ¡Dámelo! No puede ser tan malo…
-Pero… pero…-el mayor aún se mostraba inseguro mientras palpaba su bolsillo derecho.
-¿Lo tienes ahí?- la pregunta salió automáticamente de los labios de Ji Yong. Ni dio el tiempo a Seung para responder.
Fácilmente buscó en su bolsillo.
Realmente, Seung Hyun se merecía una corona por su estupidez. Adiós deseo de impedir. Su rostro se tiñó levemente de rosado y un líder sorprendido miraba su mano.
-Ya te dije. No puede ser tan….
Una cajita negra sencilla y elegante sostenía el castaño. El contenido era obvio. ¿Las consecuencias? Ji Yong se quedó sin palabras.
Ji Yong miraba objeto con curiosidad. El pelinegro quería morderse las uñas. Desechó la idea. No se le podía pegar la manía de Ji Yong. Seung Hyun abochornado eligió hablar mientras se rascaba la cabeza.
-Este… es un anillo
Al menos lo dijo antes que abriera la tapa.
-Es mi manera de agradecerte… tu apoyo estos años. ¿Es raro, no?- Seung Hyun rió nervioso.
-¿De dónde sacaste para eso?- apenas Ji Yong musitó todavía en estado de shock.
-Ahh… ¿eso?- Seung Hyun aún estaba cohíbido- Estuve ahorrando durante tiempo. No sabía qué hacer con ese dinero sobrante y se me ocurrió esto. No es oro, no te preocupes- el menor mientras tanto sacaba el anillo y lo examinaba- Solo está bañado en oro. Tal vez dentro de unos años podremos permitirnos ese tipo de lujos.
Sí. Parecía explicación suficiente. Sus neuronas aun funcionaban. Enseguida calló, esperando la respuesta de su líder. Tal vez se había pasado demasiado.
Seung Hyun estaba agradecido por todo lo que Ji Yong había hecho por él durante los años que convivían. Desde el pre-debut Ji Yong como un amigo fiel había estado ahí. Era afortunado y a la vez agradecía a los cielos tener un amigo así. Ji Yon es todo lo que podía pedir de un mejor amigo. Rogaba que la inscripción no le pareciera extraña.
“Gracias por ser mi más fiel compañero. Con amor, Turtle”
¡Estupendo, Ji Yong reía! Fracasó como mejor amigo... ¿y lo peor? Ni idea de que reía el menor.
-¿Qué pasa?- tenía una perfecta cara de poker.
Yep. Su cara no ayudaba. Ji Yong reía mas.
-De lo sorprendido que estoy- naturalmente Ji Yong le respondió- No te preocupes, hyung. Ha sido algo muy bonito de tu parte.
-¿De verdad?- preguntó Seung Hyun. Realmente no se la esperaba aquella respuesta.
-Sí. De verdad. Deberías dejar de ser inseguro, hyung- Ji Yong haciendo gala de burla y reproche a la vez le habló a su hyung- Ahora… ¿nos vamos?
-De acuerdo- al mayor se le había pasado la vergüenza y ahora se comportaba normalmente. Parecía que si había acertado en su regalo para su mejor amigo.
¡¡Gracias, divinidades!!
-Oye, Seung. ¿Sabías que te ves genial aún siendo tímido?- Ji Yong empezó rápidamente a parlotear feliz de la vida- Sigues siendo un genial, hyung.
-¿En serio?- Seung le seguía el juego. No creía mucho lo que decía Ji Yong por más que le repitiese miles de veces.
-¿Quieres una lista?- el mencionado enarcó una ceja- Mira….
Pasar un poco de vergüenza, al final valió la pena. Sí. La noche era mas alentadora.
1 de Noviembre 2007
Si se comparaba con un animal, ahora mismo, Seung Hyun definitivamente optaría por ser un gato. Ellos eran los animales más relajados del mundo, si preguntaran su opinión.
Su estado actual: Perfecta calma y relajación. El ambiente ideal. ¿Y qué estaba haciendo él? Después de unos días ocupados, tomaba su merecido descanso y se traducía a hacer lo que mas le gustaba: leer mangas. Él no era una persona precisamente culta, pero con lo años había cultivado su afición por aquel tipo de entretenimiento. Uno sano y barato.
Entonces leer sentado sobre un cómodo sofá y con Ji Yong descansando su cabeza encima de sus piernas, ayudado por un cojín gritaba por todos lados ser una buena tarde. El menor también leía un manga y las chucherías estaban a la orden de la tarde. Romper de vez en cuando la rutina de comida saludable, no les haría mal. Un pequeño antojo es necesario a veces.
El pequeño departamento se hallaba silencioso y el único ruido constituían ser: las páginas. La razón: sus compañeros de grupo no estaban, exceptuando a Ji Yong. Young Bae hace un par de horas fue a la agencia. Ni tenía idea que haría allí, probablemente bailar. SeungRi aprovechó en ir a visitar a un amigo. Costó dificultad dejarlo ir. Solo logrando arrancarle la promesa que luego regresaría con Young Bae, Ji Yong dejó que se marchara. No podía culpar su actitud. SeungRi era muy movido y tenían que vigilarlo. Daesung se encintaría con su hermana. Ella lo quería mucho y pensó que Daesung terminaba por ser astuto. Citarle fuera para que ella no se descontrolara con sus usuales afectos explosivos... ¡¡Brillante!!
Siguió con su agradable lectura por un tiempo hasta que el sonido del celular de Ji Yong perturbó el silencio.
-¿Sí, Dae?
El manga abierto descansaba sobre el pecho de Ji Yong y él hablaba con pereza mientras jugaba con las chucherías. Tenía su mano en el recipiente y la removía de un lado a otro. Seung Hyun tomó su muñeca regañándolo a través de la mirada. Ji Yong vocalizó un lo siento sin sonido y Seung Hyun sonrió, regresando su vista en la lectura.
-Oh, ya veo. ¡¡Cuídate!! Te veo el Domingo y saludos a todo por allá.
Ji Yong colgó la llamada.
-Dae pasará el fin de semana con su familia. Su hermana lo convenció.
-¡Oh! Hace tiempo que no la ve- comentó Seung Hyun sin despegar sus ojos del manga.
-Hmmm.
Otra sesión de silencio y de lectura, diez minutos mas tarde sonó el celular.
-¿Ri? ¿Qué pasa? Ah! Te quiero temprano, mocoso. Hmmm... Adiós! Entendido. Vale. Suerte.
Seung Hyun era consciente de las pausas en la conversación de Ji Yong. No entendía. No importaba, pronto lo haría.
-Ri no vendrá. Visitará a sus padres.
-¿Estás seguro?
-Sí. También hablé con Young Bae. El presidente nos dio el fin de semana libre. Un regalo antes del comeback.
El 22 salía a la venta el segundo mini-álbum del grupo. Su popularidad aumentó desde "Lies". Nuevo disco + Nuevo estatus popular + Nuevas expectativas= Promociones intensas.
¿Calma antes del torbellino? Buena idea.
Agradecía las mini-vacaciones, pero no entraba en sus planes. De hecho, debería estar alistando maletas para visitar a su familia. No tenía ganas se hacerlo. Vio a su madre la semana pasada y también la modorra hacía mella en él. Sabía que Ji Yong tampoco iría. Él no era de visitar mucho a su familia, aun si tuviera tiempo libre. No es que no le gustara verla, su madre le mimaba demasiado.
-Young Bae tampoco vendrá...
¡Oh, oh! Cero buena comida!
El moreno tenía excelentes habilidades en la cocina y siendo honestos, ellos dos apestaban para preparar cualquier comida.
-Jiyongie...
-Seunghyunnie...
Ambos se miraron. Dejaron de lado sus respectivos mangas. No querían comida de fuera.
-¿Ramen?- preguntó el líder.
-¿Kimichi con carne?- Seung Hyun recordó viejos tiempos- ¿Y...?
-¡¡Arroz!!
Sonriendose el uno al otro, brincaron del sillón.
-¡¡Vamos!!
Ji Yong apuró, tirando de él a la cocina. El reloj marcaba las 6:30 p.m. Un tiempo propicio.
Recordar épocas de antaño, hizo bien al par de raperos. El sentimiento se igualaba a la sensación de estar en casa. Muy confortable. Ni si quiera repararon que llevaban horas hablando y riendo.
-Nunca te he visto puesto el anillo- Seung Hyun dirigió la conversación a este punto, pasando distraído los dedos sobre el dorso de la mano de Ji Yong- ¿No te gusta?
-¡Me encanta!- Ji Yong aseguró, retirando su mano disimuladamente- Lo utilizaré en ocasiones especiales, hyung-sonrió.
-Para ti es especial- dedució el pelinegro- ¿Por qué?
Fijó la mirada en él.
-¿En serio?- Ji Yong rodó los ojos tomando un poco de refresco- ¿Necesito explicar que el hecho de ser un obsequio de mi mejor amigo es suficiente?
-Es cierto somos mejores amigos- le siguió el hilo. Si no le fallaba la intuición Ji Yong se encontraba incómodo- Ji Yong y... ¿lo qué pasó en el club hace un par de meses?
¿Acaso creería que no lo recordaría? No. Más bien Ji Yong pretendía creer que él no sabía y Seung Hyun lo dejó correr. El mayor esperaba que el mismo Ji Yong hablara, sin embargo pasaron los meses y nada.
-¿Por qué haces estas preguntas al azar, hyung?- la inocencia se oyó en la voz de Ji Yong, sin embargo a él no lo engañaba.
-Y me vas a responder con preguntas.
Seung Hyun enarcó una ceja.
-Manifestaba una duda.
-Claro. Déjame hacerte saber algo: Podré estar completamente ahogado en el alcohol, pero mi intuición es buena compañera.
-¿Qué quieres decir, Seung?
-No dejaría que nadie me toque- vio un ligero temblor en la mirada de Ji Yong. Interceptible, pero captado por su ojo águila. Internamente sonrió- ¿Sabes quien es la única persona a la que confiaría mi cuerpo?
-No sé adónde quieres llegar con oraciones sin sentido....
-A ti, Ji Yong- Seung cortó la frase y percibió un ambiente cargado de emociones- Te confiaría mi cuerpo.
-Porque soy tu mejor amigo- Ji Yong explicó imperturbable.
-Los mejores amigos no frotan sus cuerpos bailando en un club nocturno y en un rincón a oscuras, Ji Yong.
El menor escupió el agua que tomaba. Bien. Seung Hyun logró quebrar su máscara. Ser directo funcionaba. A veces solía creer que Ji Yong olvidaba su grado de compenetración. Lo conocía bien.
-¡Jesús, Seung!
-Si nombrar a un ser celestial te ayuda, pues lo agradezco.
-Seung- advirtió.
-No intentes decir que estabas borracho, Jiyongie. Sobrio- recalcó. Había averiguado por lo bajo- Te encontrabas sobrio, a diferencia de mi.
-Bueno. ¿Qué quieres oírme decir?- Ji Yong respiró hondo, tratando de entenderlo- ¿Una disculpa?
-¿Una disculpa?- Seung Hyun rió entre dientes- No. Quiero que lo admitas. No necesito disculpas. ¿Olvidas que yo te dejé tocarme?
-Seung, tú no eres así. No eres tan directo. ¿Qué pasa contigo?- dijo Ji Yong enrrojecido- Si es una broma estás yendo muy lejos. Te aviso.
-Por supuesto que no es una broma, Ji Yong- entre divertido e irritado, más lo último, respondió- ¿Por qué eres un hueso tan duro de roer? Ni se te ocurra decir excusas ridículas. Estoy siendo así porque estoy aplicando extremos contigo.
-Bien. Lo hice por qué quería, ¿contento?- Ji Yong se levantó de golpe, dispuesto a salir de la cocina.
Seung Hyun previendo esto, actuó rápido y en un par de zancadas, impedió su paso.
-No tan rápido, Jiyongie. ¿Por qué querías hacerlo?- Seung Hyun agarró su brazo.
-Quieres avergonzarme- Ji Yong lo encaró furioso y mordiendose los labios.
-Primero: No quiero avergonzarte. Segundo: Deja de morderte el labio. Tercero: ¿Por qué?
- ...
-Jiyongie- el tono de Seung Hyun se dulcificó. Lo sitúo frente a él- Bien. Empezaré yo. No me interrumpas y cero escape, ¿de acuerdo?
Ji Yong asintió contrariado.
-Antes que nada, no planeé esto y normalmente lo haría en un lugar más bonito que la cocina- Seung Hyun se permitió reír un poco- Esto es lo que hay. Te he conocido ocho años. Casi la mitad de mi vida. Has sido mi vecino, mi compañero, mi apoyo y mi mejor amigo. El problema es... ya no eres mi mejor amigo. No te veo como tal y no quiero dejar de verte así. He llegado al punto de que si me pides saltar de un puente contigo, lo haré. Soy un estúpido, pero haría cualquier tontería por tí. ¿Y sabes por qué?
-No- apenas en un hilo de voz ahogado contestó.
-Porque estoy enamorado de ti.
Seung Hyun tragó saliva. Su corazón sufría miles de aguijones. Latía rápido. Sus ojos se centraron en aquellos orbes de chocolate preciosos.
-Bésame- Ji Yong musitó.
Seung Hyun tomó el rostro de Ji Yong entre sus manos y con delicadeza posó los labios sobre los suyos.
Dicen que de un beso nace un mundo. Era incorrecto. Para Seung Hyun nacían miles de mundos, perderse en las diversas texturas que ofrecía la boca de Ji Yong.... era simplemente descubrir cosas nuevas.
Un aliento. Un beso. Un corazón.
Los mundos lo llevaban a un solo camino: el cielo. Quizá si ellos se unian formaban el cielo.
Ojos cerrados. Latidos de colibrí. Lenta respiración.
Compartir un beso con Ji Yong era sentirse libre.
Últimas gotas para saborear. Cero oxígeno.
Este ósculo era la creación de ellos. Dos personas que tenían un mismo sentimiento y cuando Seung Hyun, abrió los ojos vio al cielo brillando sobre Ji Yong. Pensó en ese lugar y momento lo muy dichoso que era.
Ni siquiera se perdió en su bendita y cegadora sonrisa. Abrazó con fuerza y posesividad a Ji Yong. Sus brazos encajaban perfectamente con su pequeño cuerpo. Un ensamble maravilloso.
-¿Y?
Seung Hyun necesitaba oirle de sus labios. Él sabía y sonreía radiante, no obstante sería más feliz escuchándole.
-También estoy enamorado de ti, Seung.
La certeza sacudió con fuerza al mayor.
-Seung.
-Hmmm...
-¿Qué quieres para tu cumpleaños? Es en tres días.
-Nada. Porque te tengo a ti.
-Seung eres cursi.
-Tal vez...- riendo contestó.
Puede que Ji Yong llevara la razón, pero en ese momento no le importaba. Estaba ocupado siendo consciente de su propia felicidad. Hoy tomó el gran y mejor riesgo de su vida.
-FIN DEL FLASHBACK-
Años mas tarde Seung Hyun se dio cuenta que se enamoró de Ji Yong la primera vez que lo vio. En ese entonces, él no lo sabía. Sin embargo el sentimiento puro existía. Su marcha afectó su vida y cuando lo tuvo de nuevo frente a él, Ji Yong se coló muy al fondo de su corazón. Como una semilla muy madura y oculta detrás de muchas capas de tierra. Simplemente cuando se convirtieron en inseparables amigos, la semilla comenzó a germinar poco a poco... infectando su organismo por completo.
Él todavía estaba loco por Ji Yong. Los años pasaban y el amor crecía, aumentaba. Pese a las numerosas tormentas y calmas en su relación. Ahora mismo estaban en un punto intermedio. Cortesía del concierto en Shaghai. Liberar la mayor parte de sus pensamientos ayudó mucho ese día. Aún tenían cosas por resolver, pero lo harían paso a paso. Odiaba pelear con Ji Yong. Por eso a veces ponía distancia, pero tampoco podían durar mucho tiempo separados. Se atraían como imanes. A Ji Yong le costaba más que él.
Suspiró.
En serio!! Hoy lo extrañaba mucho. Como el infierno. Al menos quería escuchar su voz. Suponía que estaba sensible entre tanto ajetreo y Ji Yong le daba fuerza. Le hacía feliz mencionarlo en sus entrevistas.
Decidido lo llamó. Al primer timbre le contestó. Una mínima acción y le reconfortaba.
-Yongie.
-Hyunnie.
-¿No estás molesto conmigo?- preguntó sonriendo- Un poco, pero la parte egoísta de mi quería hablarte.
-Dile a tu parte egoísta, gracias- bromeó.
-¿Estás bien? ¿Tu voz...?- le escuchó preocupado.
-Solo estoy cansado. Tuve muchas entrevistas hoy. Por cierto, ¿dónde estás? Escucho un poco de ruido.
-Deberías descansar, Seung- Ji Yong le recriminó
-Pero necesitaba escuchar tu voz. Te extraño.
-Somos dos. Te extraño también.
Seung Hyun sonrió automáticamente.
-No contestaste mi otra pregunta.
-Quisqulloso!!- Seung rió- Estoy con unos amigos fuera. Ahora veremos una película.
-Entonces diviértete. Iré a descansar a la villa.
-Te veo mas tarde, hyunnie. Iré a verte como sea.
-Te tomo la palabra entonces. ¿Ji?
-Hmmm.
-Te amo.
Seung Hyun sabía que se lo diría de vuelta y no porque lo esperara, sin no por la manera peculiar que tenía de decírselo. Ese hábito de Ji Yong nunca moría y le fascinaba.
Oyó un suspiro mezclado de anhelo y felicidad. Una pausa de exactamente diez segundos mas.
-Te amo más.
Y él siempre respondía.
-Si tú lo dices.
Y Seung Hyun podía jurar que sus corazones reían al mismo tiempo.