Capítulo 3.- Aclarando la situación
Shaka no podía estar mas complacido, al fin había conseguido un quinto jugador decente para su equipo de básquet, bueno… esperaba que Shun fuera mejor que Alberick, aunque cualquiera sería mejor que Alberick la verdad. Seiya fue hasta la estación de Shun y se arrimó al escritorio cruzándose de brazos, Shun podía oler el perfume de Saga en la piel del castaño y una ira ciega lo llenó por completo, Shun sabía que él no tenía derecho de decir nada, que Seiya era el esposo de Saga, que ellos dos podían hacer lo que les diera la gana pero eso no evitaba que Shun se muriera de las iras especialmente porque él conocía ese aroma demasiado bien
Con los años Saga no había cambiado su perfume, seguía siendo tan atractivo como Shun lo recordaba aunque no tenía razón de haber cambiado drásticamente si solo habían pasado un par de años, un par de años… de los cuales hace uno ya se había casado con Seiya eso dejaba menos de un año de noviazgo, cuándo lo conoció?, o sería que lo engañaba con él?, Saga lo engañó antes???, estas preguntas estaban dándole vueltas a Shun en la cabeza por lo que parecía ido mientras Seiya hablaba de quién sabe qué cosa a lo que revisaba unos papeles
Seiya estaba chequeando los reportes que había impreso Shun en su ausencia y con un lápiz le señaló los errores, Shun ingresó al sistema y los corrigió bajo la atenta mirada de Seiya que le sonrió cuando le dio las nuevas impresiones, el castaño estaba complacido con el trabajo de Shun y pensaba que ahora que él estaba en franco plan de quedar en estado, ayuda extra sería por demás bienvenida
- Esto está perfecto, el truco del sistema es chequear la designación de la Bodega antes de imprimir, pero lo has hecho muy bien y eso que es tu primer día
- Gracias – dijo Shun en un tono algo seco y miró su reloj, eran casi las cuatro y media, su hora de salida
- Así que fuiste alumno de mi esposo eh?, Saga me lo contó hace un ratito, no te dejó suspenso ni nada de eso verdad? – preguntó Seiya con una sonrisa divertida
- No… no me dejó suspenso
- Y qué te dio? – preguntó Seiya haciendo conversación, Shun pensó en ese instante: “Saga me dio los momentos mas dulces de mi vida, aunque también me dio bien duro contra el muro”
- Me dio Derecho Económico en cuarto año, aunque también me dio Derecho Internacional en tercer año, era buen profesor la verdad, nos dio cosas bastante prácticas
- Mmmm… y qué tanto lo trataste cuándo era tu profesor? – preguntó Seiya como quien no quiere la cosa
- No se… lo normal supongo yo – respondió Shun encogiéndose de hombros, no le podía decir a Seiya que Saga fue su novio, su amante, su todo hace algún tiempo, no que no le faltara ganas pero no lo consideró prudente tomando en cuenta que Saga tampoco se lo había dicho
- Ohhh, ok., bueno, que les vaya bien en su juego y nos vemos mañana – dijo Seiya empezando a recoger sus cosas y a cerrar sus cajones
- Shaka dijo que tienes clases, qué estás estudiando?
- Inglés, es una suficiencia que acabo en unos tres meses mas o menos, quería estudiar una maestría en Negocios Internacionales pero… parece que no se va a poder
- Por qué?
- Hay… cosas… no me hagas caso Shun, tu que estás soltero puedes estudiar todo lo que quieras – Seiya se demoró en contestar, era algo muy personal lo que Shun imprudentemente le había preguntado y al ver su respuesta se arrepintió
- Lo siento, no quería ser entrometido
- Está bien, nos vemos mañana – Seiya tomó su maletín y salió de la oficina a paso apurado, Shun se quedó sentado en su silla hasta que salió Shaka y le dio la dirección de la cancha en un papelito y diciéndole un “Mas te vale no llegar tarde”, el rubio se fue, Shun tomó sus cosas y también salió, un partido de básquet sonaba bien pero… Saga estaría allí… diablos…
Shun fue a casa, se cambió de ropa tomó un taxi para llegar a tiempo a la cancha que le había señalado Shaka, al llegar ya estaban todos allí, Shun vio a su amor del pasado boteando la pelota mientras charlaba ausentemente con Shaka, ambos estaban usando camisetas sencillas y pantalonetas con zapatos deportivos, un escalofrío le recorrió entero a Shun, en verdad que Saga se veía mejor que nunca
- Shun… llegaste con las justas, ya estamos casi todos – dijo Shaka levantando la mano para saludar al peliverde que se acercó a ellos respirando profundamente para apaciguar su corazón, Saga lo miró con una expresión algo difícil de leer, Shun no sabía si estaba complacido de verlo o no, ese peliazul fue siempre complicado pero esa era una de las cosas que Shun amaba de él
- No fue problema, me hace falta jugar, hace mucho tiempo que no lo hago
- Aún juegas Shun? – preguntó Saga tomando un trago de su botellita de agua
- No he jugado en mucho tiempo – dijo el peliverde tratando de mantener un tono impersonal, no quería que todo el mundo se enterara de su muy particular situación así que disimuló lo mejor que pudo dejando si bolso junto a los bolsos deportivos de los demás, él también ya estaba vistiendo camiseta y pantaloneta
- Bueno, veamos si sigues siendo tan bueno – Saga le lanzó la pelota a Shun que la atrapó y la boteó
Shaka aplaudió para llamar la atención de los otros muchachos que estaba allí y armaron equipos de cinco, se decidió que el equipo de Shaka, en el que jugaban Shun, Saga, Shyru y Milo, jugarían sin camiseta, el otro equipo estaba formado por Aldebarán, Mu, Hyoga, Shura y Camus, todos ellos trabajan en diferentes secciones del Departamento Financiero, temprano en la noche los chicos del departamento de producción habían cancelado y Shaka había hecho malabares para armar dos equipos, a ese rubio le encantaba jugar básquet, era una muy buena forma de liberar tensiones por lo que jugaban todos los martes y jueves, Alberick siempre se atrasaba pero ahora como ya estaba Shun pues empezaron el partido
El juego estuvo bastante divertido, Saga era muy buen encestador al igual que Shura del otro equipo, su juego no era violento sino que todos ellos se bromeaban mucho y se reían de todo y de todos, el hombre de cabellos lilas que se llamaba Mu era excelente armador, sus pases eran maestros pero Shun se defendía bastante bien para el otro equipo, Shaka estaba contento, Shun era el tipo de jugador que les hacía falta, era pequeño pero ágil lo que se complementaba bien con el resto de los jugadores y eso hacía que todos estuvieran mas equilibrados porque Aldebarán y Milo eran igual de lentos en la cancha
En medio del juego, Shun y Saga corrieron bastante juntos en algunas ocasiones, se chocaron algunas veces, se pasaron el balón y en términos generales jugaron pero de manera impersonal, Shun tenía la impresión de que Saga no lo estaba tomando mucho en cuenta y eso lo tenía molesto, pero de cualquier manera el partido siguió y el equipo de Shaka ganó por un aro de Saga
Cuando todo acabó, Shun estaba volteado chequeando sus cosas en el bolso, se había olvidado su botella de agua y se moría de sed, de pronto una botella apareció frente a su nariz, el peliverde levantó la mirada y vio a Saga que le estaba ofreciendo una botellita
- Buen juego eh? – preguntó el mayor a manera de conversación
- Si, buen juego – respondió Shun y ladeó la cabeza
- El mundo es pequeño, de todo lo que pensé que podía pasarme hoy nunca hubiera pensado que el verte otra vez hubiera estado signado en las estrellas, te vez bien Shun – dijo Saga llegando al punto, ese era el elefante blanco en medio de la habitación, la tensión entre ellos se podía cortar con un cuchillo
- Tu… tu también, Saga… wow… es que no lo puedo creer, tu… tu te casaste… hace cuánto? – como siempre, Shun fue directo y al punto, es que tenía que preguntárselo
- Un poco mas de un año, Seiya es… genial
- Un año?, te casaste hace un año? – preguntó Shun con sorpresa, Saga solía decir que para casarse él necesitaba tiempo para asegurarse de que la pareja escogida sería la pareja de toda la vida, Saga no creía en el divorcio, él había venido de un hogar roto y por eso solía decir que él se casaría una sola vez en la vida, claro que en esa época Shun estaba seguro que ellos dos se casarían, no que ahora el amor de su vida estuviera casado con un aparecido que quien sabía de dónde Saga lo fue a sacar
- Si, hace un año mas o menos, pero… y tu?, qué hay de tu vida?, supongo que acabaste la carrera, cómo está tu hermano? – a Saga le pareció mejor cambiar un poco el tema, podía ver el dolor en los ojos de Shun y eso en verdad lo incomodaba, habían pasado dos años pero al parecer para Shun el tiempo en lo que a ellos se refería se había detenido
- Bien, pero en serio quieres hablar de Ikky?
- De qué quieres hablar tú?
- Déjame pensar… te casaste?, Seiya no es muy joven para ti?, él debe tener más o menos mi edad verdad? – las preguntas de Shun sonaron a reclamo
- Shun…
- No que no querías un compromiso serio?
- Yo no dije eso nunca, tú lo dijiste – respondió Saga frunciendo el ceño
- Eso es lo que me diste a entender cuando me dejaste – reclamó Shun una vez más, Saga meneó la cabeza y dijo con cansancio
- Yo no te dejé Shun, el que se fue de la casa fuiste tú, pero en serio quieres retomar la discusión en donde la dejamos hace tanto tiempo?, no te parece algo infructífera tomando en cuenta que hemos tomado caminos separados?
- Es que no lo entiendo, estuvimos juntos por casi tres años, tuvimos una pelea, una sola, tú te fuiste de mi vida y cuando te vuelvo a ver, tú ya estás casado???, cómo?, cómo fue que pasó?, dónde lo conociste?, cuándo lo conociste? – Shun no quería mostrarse vulnerable pero no lo pudo evitar
- No fue una sola pelea Shun, las cosas entre nosotros estuvieron mal por mucho tiempo antes de que todo finalmente estallara pero… es eso en verdad importante ahora?, Shun… si vamos a trabajar en la misma empresa debemos pasar de esto, es cierto que yo trabajo en otro piso y en otra dependencia pero tu trabajarás con mi esposo todos los días, podrás hacerlo? – Saga tenía eso en mente desde que supo que su ex compartiría la oficina con su esposo, y eso lo tenía intranquilo
- Eso no tiene nada que ver – dijo Shun todo molesto
- No no no, tiene todo que ver, mira… yo no quisiera que las cosas sean complicadas en el trabajo, ni para ti ni para Seiya
- Eso supuse cuando le dijiste que yo solo fui “tu alumno”, él no sabe de mí, verdad?
- Le cuentas a tus novios sobre tus ex? – preguntó Saga tratando de explicar su situación y trivializarlo un poco pero eso tuvo el efecto contrario, Shun se sintió profundamente herido
- Tu ex… solo soy tu ex… vaya, yo pensé que era algo más que eso, vaya… no representé nada en tu vida, es que… no lo puedo creer – Shun meneó la cabeza y bajó la mirada, Saga se dio cuenta de lo que dijo y se acercó al más joven para decirle en voz baja y en tono cómplice:
- Shun… tu… tu no solo eres mi ex pero, no le puedo decir eso a mi esposo no te parece?
- Qué soy para ti?
- Tú fuiste muy importante en mi vida, una de esas relaciones que te marcan, tú… marcaste mi vida Shun, que de eso no te quepa la menor duda
- Pero tú te casaste con otro, no te marqué lo suficiente al parecer
- Shun por favor, en serio quieres abrir esa caja de Pandora? – Saga no quería hablar de ello pero Shun no lo dejaba, él si quería hablarlo, el peliverde se había obsesionado con su relación por años como para aceptar tan fácilmente que Saga lo haya olvidado y haya hecho su vida con otro, es que eso Shun no lo podía creer, mucho menos aceptar
- No… si… quiero entender, es que no lo entiendo – dijo Shun tercamente
- No hay nada que entender, tú y yo terminamos, conocí a Seiya y… me enamoré, yo… no sé cómo pueda explicártelo, él es muy divertido, muy buena persona, me hace reír y lo amo, él me ama, nos casamos y aquí estamos, es simplemente la vida – Saga se encogió de hombros cuando dijo esto, Shun estaba de espaldas a la cancha pero Saga seguía levantando la mano a manera de despedida de todos sus compañeros basquetbolistas que ya se iban
- Él es todo lo que querías?, él es todo lo que yo no fui? – preguntó Shun casi en un susurro con un profundo dolor
- No Shun, no lo veas así, él no es lo que tú no fuiste, simplemente él es… diferente, Shun por favor no te sientas mal, tu eres una de las mejores personas que he conocido, por eso me enamoré de ti
- Si… te enamoraste de mí pero se te acabó el amor, y fuiste y encontraste a Seiya… Seiya?, en serio?, él y yo no podemos ser más diferentes, mierda… Seiya es jodidamente perfecto, antes de saber que era tu esposo me cayó tan bien, es tan buena gente, tan fresco el muy desgraciado, lo odio… - esto dijo Shun y pudo sonreír levemente lo que hizo sonreír a Saga que ladeó la cabeza y le dijo a su ex amante
- Seiya no es perfecto
- Ah no?, y qué tiene de malo?
- Muchas cosas, es temperamental y le encanta lanzarme las almohadas o lo que tiene a la mano cuando se enoja, es el dueño indiscutible del control remoto de la tele y se duerme mientras vemos películas
- Esos son defectos de carácter, dime que tiene un pie deforme o algo – dijo Shun tratando de sentirse mejor, él era sumamente crítico consigo mismo y quería sentirse superior a Seiya en algo, porque de lo que había visto Seiya en verdad era mejor que él en varias cosas, o por lo menos Shun tenía esa impresión
- Un pie deforme?, no… no tiene un pie deforme, pero tiene la manía de robarme las cobijas en la noche y eso me vuelve loco, no sabes las veces que he estado a punto de botarlo de la cama, y tiene los pies helados, satisfecho? – Saga sonrió ligeramente y Shun también cuando dijo:
- Un poco
- Ok., si quieres le digo que tú y yo tuvimos historia – dijo Saga pensando acertadamente que Shun se había sentido como si no representaba nada en su vida, y eso era lo que lo tenía molesto
- No es necesario, es solo que… ha sido… duro verte, no sé, yo pensaba que terminaríamos juntos, que volveríamos a encontrarnos y lo retomaríamos todo pero esta vez lo haríamos funcionar, no pensé que ya hubieras tenido a alguien así de serio en tu vida pero… trataré de que la cosas no seas difíciles en la oficina, ha sido duro no tenerte en mi vida, cuando nos separamos no solo te perdí como pareja, sino que perdí a mi mejor amigo también – dijo Shun con un suspiro, eso era lo que guardaba su corazón y su expresión tan triste conmovió a Saga que preguntó:
- Quieres que seamos amigos Shun?
- Si, creo que si, tú quieres? – Shun se demoró en contestar pero cuando lo hizo, lo hizo en serio, él en verdad que no imaginaba su vida sin Saga y en esos momentos le pareció un buen remedio tener al que fue el amor de su vida aunque sea como su amigo, no se le ocurrió que eso sería como poner una curita a una herida de bala pero… el corazón quiere lo que el corazón quiere y Shun aunque no lo quisiera reconocer, extrañaba mucho a Saga, su ausencia lo había marcado aún más que su presencia lo hizo
- Si, eso me gustaría mucho la verdad
Saga sonrió y Shun también, en eso Shaka se acercó, él si se había dado cuenta que algo estaba pasando allí y prefirió ser prudente y no acercarse, pero eran casi las ocho de la noche así que decidió interrumpir porque ya debían salir
- Vamos?, ya van a cerrar la cancha
- Si, tienes auto Shun? – preguntó Saga, eso no lo sabía
- No, vas al este?
- No, voy al norte pero Shaka va al este
- Claro, yo te doy un aventón, espero que aceptes ser miembro permanente del equipo, hicimos tierra al otro equipo hoy y eso no tiene precio, me encantó la cara de Hyoga cuando mordieron nuestro polvo, este fue un buen partido
- Pues si, y gracias, me gustaría mucho jugar con ustedes – dijo Shun con una sincera sonrisa, había encontrado la excusa perfecta para ver a Saga lejos de la oficina y de Seiya
Shun tomó su bolso y salió con Shaka, Saga se despidió de ellos en la puerta de la cancha, fue directo a su auto y manejó tranquilamente a casa, al llegar se sorprendió al encontrar a Seiya profundamente dormido, así que se dio un rápido baño y tratando de no hacer bulla se acostó junto al cálido cuerpo de su castaño que se volteó y lo abrazó
- Buen juego? – preguntó el menor sin abrir los ojos, estaba más dormido que despierto
- Ganamos – respondió Saga en un susurro
- Que bien – dijo Seiya y se acurrucó en el pecho de su esposo y suspiró, Saga lo abrazó y acarició sus cabellos, en el camino a casa lo vino pensando y decidió que lo mejor sería decirle todo a Seiya, uno de los defectos gravísimos de Seiya era que era muy buen adivino, y Saga pensó que sería mejor si él mismo se lo decía, así que tomó valor y dijo en un susurro:
- Seiya… me acosté con Shun
- Hoy? – preguntó el castaño en tono calmado y sin abrir los ojos
- No… claro que no, te acuerdas que te conté de la relación que tuve con uno de mis alumnos?, bueno… Shun fue ese alumno – Saga se sintió sumamente incómodo cuando confesó esto a su esposo, ellos si habían hablado de sus exes cuando empezaron a salir pero no habían profundizado mucho en eso
- Lo suponía, fue mucha su sorpresa cuando nos encontró en tu oficina y luego cuando bajé, él estaba todo raro – Saga arqueó una ceja, Seiya ya lo sabía…, rayos…
- Eres un brujo
- Lo sé, herencia de familia, y… cómo te sientes al respecto? – Seiya se incorporó un poco y miró a su esposo a los ojos cuando le preguntó esto, Saga besó sus labios suavemente y le acarició la mejilla antes de responder:
- Yo?, pues es una coincidencia la verdad
- Nada más?
- No mi amor, nada más, yo te amo, te amé desde el momento en que te vi, cuando me sonreíste en plena lluvia supe que tu serías el hombre con quien me casaría, el hombre con quien formaría una familia algún día, mi vida es fantástica y no la cambiaría por nada ni por nadie – Seiya sonrió ante esta respuesta especialmente por el tono con el que Saga habló, así que Seiya le respondió:
- Yo también te amo, pero ya duérmete que tengo sueño, no sé por qué estoy tan cansado
- Por el tratamiento seguramente, hoy te tocaban las inyecciones verdad?
- Si, mi culo está todo agujereado, lo sientes? – Seiya puso la mano de Saga en uno de los cachetes de su trasero y Saga sonrió al acariciarlo, a él le encantaba la anatomía de su esposo, su trasero era redondito y firme, provocaba darle una mordida
- Ajá… qué tan adolorido estás? – preguntó Saga mientras acariciaba suavemente la piel de su castaño que se movió en la cama pegándose un poco mas a su esposo, Seiya tenía una forma muy sensual de mover las caderas que enloquecía a Saga que le bajó los boxers para acariciarlo mejor
- No me duele mucho, estaba cansado pero ya descansé, tenía sueño pero ya me despertaste, tú que tan cansado estás? – Seiya empezó a besar el cuello de Saga, metió su mano en su pantalón de pijama y acarició el miembro de su esposo que se endureció rápidamente
- Para esto… nunca podría estar cansado, eres tan sexy… te amo Seiya
- Tu eres el sexy, mmmm… hazme el amor Saga… te quiero sentir… - Seiya le bajó los pantalones a Saga y le palmoteó juguetonamente el trasero, Saga se hizo el indignado y se acomodó sobre Seiya entre sus piernas mientras se acababa de sacar los pantalones
- Te voy a hacer ver estrellas niño – dijo el mayor cuando acabó de desnudar a Seiya y tomó su pierna de la parte de atrás de la rodilla y la flexionó para acomodarse de mejor manera
- Uyyyyy…
Saga besó a Seiya en los labios y lo preparó para recibirlo, a Saga le encantaba ver como Seiya se retorcía de placer cuando lo estimulaba de la manera en la que lo estaba haciendo, el castaño arqueó la espalda cuando su esposo lo penetró y gimió con ganas cuando Saga se empezó a mover en su interior, esa noche fue muy pasional y placentera, la pareja cambió de posición varias veces en la cama mientras hacían el amor, sus movimientos eran acompasados, ellos se complementaban maravillosamente en la cama por lo que esa noche llegaron a la cumbre del placer como usualmente lo hacían, para luego desplomarse juntos y descansar, Seiya se quedó dormido casi inmediatamente, las actividades nocturnas lo habían dejado exhausto así que Saga apagó la lamparita y se acomodó para dormir, el peliazul estaba cansado también pero no pudo conciliar el sueño, la llegada de Shun si lo había impactado aunque él estuviera haciendo sus mejores esfuerzos para ocultarlo