Stiles se petrifico, podía oír perfectamente al ser que se hubiera adentra en su habitacion caminar en su direccion, pero el no se sentía con los animos de voltear a ver que o quién era. Tenía el corazon destrozado... hasta que escucho una voz:
-Stiles-
Ya no hay lugar a donde huir
mi ardiente amor me consumió.
De todas las personas a las que hubiera esperado escuchar, esa era la ultima en su lista ¿Qué hacia Scott en su casa? Aunque pensandolo bien, un vago recuerdo en el fondo de su cerebro le decía que Scott estubo presente cuando Derek... bueno, en ese preciso momento eso era lo unico que quería recordar.
Stiles se volteó para poder encarar a su mejor amigo, sin embargo, la imagen que encontro delante de sí no fue muy alentadora.
Las nubes grises son un monocromo telón
sombras nacen de la luz
el anochecer acabo con su brillo.
Los ojos de Scott brillan con una intensidad que nunca antes había percatado, desbordaban, rabia, ira, caos y una emoción que Stiles nunca pensó en encontrar en su amigo: Celos. Scott estaba celoso.
-¿S...Scott?-
-Él... ¿te hizo llorar?-
Stiles se quedo perplejo, si su estado de animo hubiera estado como siempre, hubiera hecho alguna broma tonta, pero el hecho de que Scott, emanara rabia y desesperación por todos sus poros no se lo permitía. Scott se acerco a él y con la mayor delicadeza posible, acarició la mejilla izquierda de Stiles, haciendo que este ultimo se sonrojara levemente
-¿Él te hizo esto?-
La voz de Scott cambio de manera casi inceible, de una llena de rabia a una tierna y comprensiva. El contacto de la piel de Scott con la suya era tan cálido y ¿Cuál era esa emoción que sentía emanando de él?
Ah... el mundo parece acabar
pero hasta el fin yo no dejare de amarte
lo sabes tu... pero como puedo conseguirlo?
-Pu...pues yo...- La voz de Stiles comenzó a fallar, sintiendo que los recuerdos lo invadia junto con unas horribles ganas de llorar de nueva cuenta. Fue entonces cuando lo sintió. Una sensación calida. Llena te comprensión. Ternura... y amor.
Scott estaba besando a Stiles.
La batalla comenzó en la guerra y el amor
todo vale pues no puedo ver que tengas otro amor.
Antes de que pudiera darse cuenta, el había comenzado a correspoder el beso de Scott, sintiendo como su lengua jugueteaba dentro de su boca. Nunca imaginó ver a su mejor amigo de esta forma, se sentía muy extraño, pero al mismo tiempo era muy reconfortante. Después de todo, eso significa que le importaba ¿no?
Dejarme sin tu amor será tu perdición
veras lo que se siente y esta es mi declaración.
Las manos de Scott se enredaron en la cintura de Stiles, empujando a este ultimo sobre su cama, dandole la oportunidad de colocarse rapidamente entre sus piernas.
Stiles intento detenerse, pero no pudo. La parte más primitiva de su ser estaba saliendo a flote en estos momentos. Y la parte más primitiva de su ser solo tenía en mente olvidar todo.
El dolor. La humillación. La vergüenza...
-Stiles- los labios de Scott abandonaron los suyos por un momento, solo para besar su cuello de abajo hacia arriba hasta llegar a su oido, en el cual, susurro algo:
-Dejame reemplazarlo. Dame una oportunidad-
De tanto protestar mi megáfono se rompe y quedo sin voz
tanto esfuerzo por llegar arriba
y aun así tu no quieres voltear a verme.
Stiles se detuvo en seco ¿había escuhado bien? ¿su mejor amigo, su mejor amigo de toda la vida, se le estaba declarando? Stiles quizo contestar, pero no pudo hacerlo, ya que de inmediato, los labios de Scott atraparon a las suyos de nuevo, exhigiendoles que se entregaran a él, que le permitieran entrar en su ser.
Poco a poco, Stiles dejo de oponer resistencia, pues sabia que era algo inutil sabiendo la fuerza y las capacidades sobre-humanas de su amigo.
Lo único que podía hacer era dejarse amar por él.
Y sin darse cuenta una mira carmesí lo seguía desde la ventana...
Al ataque ahora voy
aunque se muy bien que con tu amor en desventaja estoy
por que ciego es el amor
por uno de tus besos yo seré tu dictador.