Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

INNOCENT MAN - HUNHAN por exolovers

[Reviews - 350]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola a tod@s las precios@s lectores, este es mi primer fic y es una adaptación del drama dirigido por Kim Jin Won.

Espero que les guste y nos leemos en las notas finales.

A leer! 

Capítulo 1
SACRIFICO
Por Sehun
Una persona normal, así me consideraba, Oh Sehun un chico de 21 años, practicante de medicina, nada brillante, nada prometedor, lo único que buscaba con mi carrera era sacar adelante a mi hermano y a mi querida Taeyeon. Mientras estaba sumido en mis pensamientos sobre mi futuro no me había dado cuenta que iba sobre el tiempo a mi ronda, caminaba a través del pasillo del hospital cuando escuché su voz angelical y cálida, me detuve en seco al verla en la pantalla, si era ella, mi ángel, lo que más amaba en este mundo junto a mi hermano, quedé hipnotizado ante tanta belleza, siempre pasaba, me quedaba en trance así fuera en la televisión que la viera, era quien me robaba el aliento.
Taeyeon era reportera del noticiero SBS practicante de comunicaciones, habíamos estudiado juntos en la Universidad pero nos conocíamos desde los 10 años, éramos vecinos. Sonreí inevitablemente al verla causar de nuevo problemas, hablando acerca de fraudes y como el gobierno estaba robando a los ciudadanos – ¿Noona pero que haces de nuevo? ¿Qué clase de reportera eres? - Me preguntaba a mí mismo en voz baja.
En ese momento escuché mi nombre, el tiempo me había ganado de nuevo.
-¿Sehun que haces? vamos tarde y es nuestra última ronda- me dijo mi compañero.
Nos encontrábamos en el pabellón de urgencias, era nuestro último día allí y cambiábamos a otra especialidad, eso me emocionaba ya que yo debía continuar en pediatría y era en la que quería especializarme.
Corrí para unirme al grupo que ya había comenzado la ronda. Estaba encabezado por el profesor Moon Jeong Hyuk que aunque era muy joven para su cargo, era toda una eminencia en el ramo de la neurología.
Lo seguí en silencio acomodándome mis gafas, intentando ponerme al día con lo que hablaban, veía que el profesor solo pasaba de habitación en habitación preguntando síntomas, evolución entre otras cosas pero a nosotros no nos hacía ni una sola pregunta.-¿A qué viene todo esto? ¿Qué profesor ignora así a sus estudiantes? ¿Acaso somos tan poco importantes? –preguntaba mentalmente a medida que sentía la impotencia crecer en mi interior, no estábamos para perder el tiempo siguiéndolo como una sombra mientras el solo hablaba dejándonos muchas incógnitas.
Cuando salimos de una de las habitaciones, no pude evitar preguntar en voz alta:
-Profesor ¿Por qué no nos pregunta nada? ¿Acaso siquiera ha notado nuestra presencia? Hoy es nuestro último día de prácticas de rotación y en otros departamentos los profesores nos han realizado muchas preguntas -inmediatamente me arrepentí de haber realizado dicha observación
Me encontraba en último lugar, por lo que todos mis compañeros se giraron a verme incluyendo al profesor, este último observándome con una mirada inquisitiva.
-¿Eres doctor?
-No lo soy… Aún
-Por llevar una bata y sostener una libreta donde apunta todo sobre los pacientes ya cree que es doctor ¿eh?- Me dijo levantando la voz gradualmente.
Yo solo me mire a los pies, a lo que continuó casi gritando
-Su cerebro debe estar lleno con “espero que terminen esta reunión rápido y los casos difíciles se vayan pronto” y sin embargo quiere que haga preguntas ¿Qué quiere que pregunte? ¿Incluso entendería si le hago una pregunta?
Aspiré profundamente y ya que mi mente estaba nublada, solo me limité a preguntar – ¿Acaso por lo menos piensa darnos alguna oportunidad?
-Sabiendo que no darían respuestas útiles ¿Por qué debería yo perder mi tiempo?
-Esto… aun así… - En ese instante escuchamos un ruido estrepitoso a lo que todos corrimos para ver de qué se trataba.
Era un niño de aproximadamente 14 años quien se encontraba forcejeando con la enfermera, cuando esta se percató de nuestra presencia informó al doctor que el niño insistía en quitarse la intravenosa e irse a casa. El profesor pidió el historial médico del niño, a medida que lo leía le informaban que era Lee Hyung Yong, quien había sido encontrado inconsciente en su casa el día anterior, nunca había mostrado síntomas de enfermedad. -¿Cuál es su diagnóstico?- preguntó el profesor – La tomografía computarizada y la resonancia magnética no reveló nada extraño- informó la enfermera - ¿Y su familia? – Tiene un hermano mayor que viene en camino.
Todos veíamos la escena en silencio, yo me preguntaba que tendría aquel joven y las ganas de analizarlo y revisar su expediente iba creciendo en mi interior. En ese momento el profesor giró a vernos y comenzó a hablar con tono irónico.
-El practicante, quien dijo que yo no formulaba preguntas- a lo que todos voltearon a verme
-¿s…si?
-Cuál es la causa de la enfermedad de este paciente.
-¿Qué? Pregunté con confusión real
-¿No es la pregunta que buscaba? Le daré dos horas para su diagnóstico, sin objeciones- a lo que salió rápidamente de la habitación secundado por los demás estudiantes.
-¡E..espere!- Quede paralizado…. ¿Yo? ¿Si tan solo soy un practicante? ¿Cómo carajos voy a diagnosticar a este paciente? Solté un suspiro de resignación, ya que aunque de verdad me generaba atracción este caso, dos horas era muy poco para realizar un diagnóstico y con un niño que además estaba muy asustado e intranquilo.
Me acerqué a su cama leyendo su expediente, amigdalitis aguda, no hay antecedentes de traumatismo craneal sin embargo hay síntomas de traumatismo craneal. –Aghhhh estoy muerto- me dije mientras golpeaba mi cabeza con el expediente. Cuando giré la cabeza me percaté que el paciente intentaba quitarse la intravenosa de nuevo –oye oye oye… yaaaaa… ¿Por qué eres así siendo tan pequeño?-
-No estoy enfermo!! Déjenme salir de aquí!! Mi hermano no tiene dinero!!
-Quédate tranquilo, una persona sana no se desmaya así porque si y has silencio- Le ordené, me estaba colmando la paciencia, la cual era poca o nula normalmente.
-Que le digo que no estoy enfermo, usted no va a pagar mi cuenta de hospital-gritó
Me quedé frío ahora entendía porque quería irse, lo miré con ternura -¿ese es el problema? Yo pagaré la cuenta!- ¿Cómo? No tenía idea ya que mi salario era de practicante y lo justo para mantenerme a mí y a mi hermano, sin embargo no podía evitar sentir que debía proteger a aquel chico, quizás porque recordaba en él a mi querido hermanito.
-No mienta- replicó él
-No miento, ¿acaso no lo puedo hacer? Le dije en broma mientras le daba un leve golpe en la cabeza, a lo que este empezó a toser dejando de respirar
-Yaaaaa cualquiera diría que te estoy lastimando- Pero Hyung Yong continuaba tosiendo, así que me alarmé –ey ey ey ¿estás bien? Hyung Yong!-
-Me duele- dijo entre jadeos empezando a vomitar
-¡Enfermera! ¡Enfermera! ¡enfer.. Así que es eso!- inmediatamente supe lo que le pasaba al chico, lo dejé con la enfermera y corrí a buscar al profesor.
-Hyung Yong… Hyung Yong, tiene hemorragia cerebral- dije intentando recuperar el aliento mientras alcanzaba al profesor en su ronda.
-¿con que evidencia?
-El paciente tenía originalmente una infección en la garganta, también tenía dolores de cabeza agudos, a causa de la tos severa, se originó un aumento en la presión arterial causando daño a las arterias neurales.
-¿Ha mostrado el paciente señales de vómito o dolor de cabeza?
-…l odia preocupar a su guardián, así que dijo a su hermano mayor que se encontraba bien. En realidad debió sufrir los últimos días dolores de cabeza muy fuertes y hace un momento tuvo un ataque repentino severo y también acaba de vomitar.- Dije nerviosamente a lo que el profesor observó como mi bata antes blanca, estaba manchada con el vómito del paciente.
-Entonces está diciendo ¿que un niño de 14 años, esconde su enfermedad para no preocupar a su hermano?
-Si- respondí -Reconozco este comportamiento, porque mi hermano menor es igual, si no es extremadamente doloroso tiende a soportar el dolor para evitar que me preocupe. Opino que el paciente Hyung Yong tiene un tumor cerebral que debe ser pequeño aún, probablemente poco serio a esta altura.-
-Si es como usted dice, ¿Por qué no hay señales de ello? ¿Por qué ni en la tomografía ni en la resonancia hay evidencia de un tumor? ¿Cómo lo explica?
-Es posible que la hemorragia no se haya filtrado todavía- dije nervioso y con la respiración entrecortada, estaba seguro de lo que le sucedía a aquel paciente peroo…-Hyung Yong tiene un temperamento inestable, así que excepto la ira, guarda muy bien sus cambios de humor- Algo parecido a mi temperamento, pensé.
-¿No puede ser también una sobredosis de medicamentos prescritos la causa? Me objetó el eminente Jeong Hyuk.
¿Eminente? Pensé impotente, acaso ¿en condiciones de seguir aguardando mientras nuestro paciente está en peligro? Mi mirada se había vuelto fría e imponente. – ¿Es porque el profesor tiene perjuicios desde el principio y no quiere escuchar el aporte de un interno, así que sugiere alternativas ridículas? – ya no me importaba de quien se trataba era la vida de una persona, de un niño, que disminuía al compás del reloj.
El “profesor” llamó por teléfono mientras yo miraba furibundo – Sí, soy Jeong Hyuk, ¿ya salieron los resultados del angiograma del paciente?- bajó su teléfono –Ellos dicen que los resultados del angiograma salieron hace poco y no hay signos de tumor cerebral.-
No… no puede ser… Sin una palabra quedé, atónito, ¿qué podía decir? ¿Me había equivocado? –Debí haberme equivocado-fue lo único que atiné a hablar mientras hacía una reverencia, apenado y desilusionado.
-Si el paciente no tiene más síntomas, dele de alta- Dijo el profesor pasando de largo sin decir más y con el resto de practicantes detrás de él.
Me sentí humillado, decepcionado, impotente, corrí rápidamente a los baños pues no podía contener mis lágrimas, una vez adentro, me recosté en el lavabo y comencé a llorar sin control, no podía creer que me hubiese enfrentado a uno de los doctores más importantes de Corea y todo por un capricho, sentí que no valía ni como doctor ni como nada, si no fuese por mi hermano, ya habría renunciado a todo, después de un rato desahogándome, limpié mis lágrimas y me lavé la cara y me dispuse a salir para irme a mi casa.
Estaba en la puerta cuando de pronto llegó una ambulancia y para mi sorpresa traían a Hyung Yong convulsionando y vomitando, sentí el terror embargar mi cuerpo por completo, corrí al lado de la camilla preguntándole a los paramédicos que había pasado, a lo que me contestaron que tenía los mismos síntomas que cuando ingresó al hospital la primera vez, solicité que le realizaran pruebas de nuevo, estaba revisando cuando el profesor Jeong Hyuk se paró al lado mío mirando los análisis.
-Inyéctenle una dosis de Vontrol y Comadium –dijo con voz calma, luego me miró –Estaba equivocado, tenía razón, como profesor decir esto es humillante pero creo que dentro dos años tendremos todo un genio en nuestro hospital- se retiró, dejándome en un estado de ¿shock? Algo indescifrable, diez minutos después pude reaccionar a lo sucediso, emocionado y enérgico revisé antes de irme al paciente y regresé a casa con la felicidad a flor de piel.
Toda la vida vivimos en Guryong, uno de los barrios más pobres de Seúl, que aunque quedaba cerca de Gangnam no se relacionaba para nada con ese estilo de vida, vivíamos casi entre la miseria. Entré a mi humilde casa que compartía con mi hermano menor Baek Hyun y con mi mejor amigo Chan Yeol.
-Baekki hyung está aquí… Eyyy fantasma del chocolate, hyung te trajo un chocolate para celebrar.
-Baek!!!! – grite, ¿estará durmiendo?, me lavé la cara, me refresqué, pero algo me inquietaba, Baekki no era de no responder o no esperar cuando yo llegará, su personalidad era todo lo contrario a la mía, era bullicioso y alegre, tan solo se opacaba cuando tenía recaídas – RECAIDAS.- Entré rápido a la habitación y estaba en el piso, pálido, ardiendo de fiebre.
-Baekki… Baekki abre los ojos, vuelve a tus sentidos… Baekki… Baekki – con cuidado lo levante y recosté en mi regazo – yaaaa!!! ¿desde cuando estás así? Si estabas enfermo debiste haberme llamado mocoso. Tome su pulso, el cual se encontraba débil. – esto no está bien vamos al hospital, ponte los calcetines, vamos ya al hospital.
-Estoy bien hyung – decía él entre jadeos, lo miré y sus labios se encontraban de color púrpura.
-¡Cómo puedes decir que te encuentras bien cuando estás ardiendo en fiebre! Pero que sepas de una vez que te castigaré tan pronto regresemos del hospital – le reprendía con la respiración entre cortada, estaba desesperado, hace mucho tiempo no presentaba un episodio así tan fuerte.
Tome su sueter y se lo estaba poniendo cuando comenzó a sonar mi celular –agghhh ¡¿y ahora quien es!? – miré el identificador, era Noona.
-Sí, Noona Baek está enfermo, te llamaré más tarde de nuevo.- De pronto escuché llanto del otro lado de la línea y su voz transmitía angustia.
-Ayúdame, ayúdame Sehun – me hablaba llorando
-¿Qué pasa, Noona? – comenzaba a ponerme nervioso, solo escuchaba llanto y su respiración agitada que demostraba el terror en el que estaba sumida
-Creo que está muerto- susurro - ¡No, él no puede estar muerto, tienes que salvarlo! –decía, yo no entendía nada.
-¿De qué hablas? ¿Qué sucede?
-¡Debiste haber aprendido como salvar personas en la escuela de medicina! ¡Lo tienes que salvar!- la histeria se apoderó de ella y lo que antes eran susurros se convirtieron en gritos ahogados en llanto
-Noona, cálmate por favor.
-Estoy asustada, tengo miedo Sehun- Grito
-¿Dónde estás? Voy para allá ahora mismo.- Me dio la dirección de un hotel de mala muerte que quedaba en el centro de la ciudad, colgué y miré a mi hermano, no sabía realmente que hacer, no sabía que sucedía, entré en pánico, los latidos de mi corazón se habían convertido en zumbidos de lo rápido que palpitaba. ¿Qué debía hacer?
Me levanté sin pensar en nada más que en Taeyeon y cuando me giré para irme, mi hermano me tomó del pantalón, giré hacia abajo y él me miraba suplicante.
-Sehun… Sehunnie por favor no te vayas, no..no me dejes solo – jadeaba –estoy enfermo, no te vayas hyung.
-Taeyeon unnie tiene una emergencia, pero vendré a llevarte lo más rápido posible al hospital, espera un momento.
-Te digo que estoy enfermo hyung, no estoy bien- susurraba -¡de verdad de verdad! ¡Estoy enfermo! Por favor no te vayas- sollozó.
Le tomé la mano –cuenta hasta 500, mientras cuentas te prometo que estaré de regreso-
-Voy a morir, si vas donde Taeyeon unnie, me voy a morir por estar enfermo- dijo ahora llorando y fulminándome con la mirada
-Cuenta hasta 500 y te prometo regresar- Le repetí.
Salí corriendo con todas mis fuerzas mientras dejaba atrás a mi hermanito, a quien tanto amaba, su llanto me rompía el alma, tapé mis oídos huyendo de su sonido que me hacía sentir culpable, a medida que me alejaba sentía un gran peso caer en mis hombros. –No pasará nada, todo estará bien- me repetía a mí mismo una y otra vez en el taxi.
Subí al piso tres donde se encontraba Taeyeon, me sudaban las manos y la frente, tomé una gran bocanada de aire e ingresé a la habitación que tenía la puerta tan solo ajustada, a medida que iba abriendo la puerta iba divisando el cuerpo al parecer sin vida de un hombre, rodeado de sangre, abrí mis ojos como platos, detuve mi respiración y entré lentamente.
Todo el cuerpo me temblaba, miré la habitación de un lado a otro, habían botellas rotas, la cama estaba revolcada y a uno de los lados de la cama en el piso, estaba Taeyeon acurrucada, temblando y llorando, se giró a verme sin siquiera parpadear.
Me dirigí al cuerpo sintiendo un constante escalofrío, mi cara estaba desencajada, con solo acercarme ya se sentía el frío de una persona sin vida. -¿Eeesta muerto?-
-No lo sé- contestó ella llorando.
Tembloroso le tomé el pulso en el cuello, en la muñeca, efectivamente se encontraba muerto.
-¿Está muerto?- preguntó Noona a lo que asentí lentamente -¿Por qué? ¿Por qué murió? Yo no lo maté ¿Por qué? – decía llorando, le lancé una mirada cargada de dudas y a la vez de decepción.
-¿Porque me miras con esa expresión? Yo no lo maté ¡No lo maté! ¡NO LO MATE IDIOTA!
Tomé una sábana de la cama y cubrí el cuerpo, a esta altura no sentía nada, no pensaba nada, tan solo sudaba lleno de terror, me acerqué a ella y noté que tenía un trozo de botella.
-¿Le golpeaste con eso?- Ella negó con la cabeza y rompió el cristal.
-¿Intentó hacerte daño?- a lo que asintió, le tomé sus manos temblorosas
-No podías hacer otra cosa que defenderte, Noona debes entregarte, es un acto de legítima defensa, si te entregas ahora, lo tomarán en cuenta como circunstancia atenuante, puedes obtener libertad condicional, confiesa Noona- Le apretaba las manos con todas mis fuerzas apoyándola y le miré con toda la seguridad posible intentando transmitir todo mi apoyo.
-¡Se terminó para mí! ¡¿Legítima defensa, circunstancia atenuante, libertad condicional!? No necesito nada de eso, si se hace público, mis días como reportera están acabados.- lloraba inconsolablemente.
-¿Qué importa que tus días como reportera acaben? Puedes comenzar de nuevo en otra cosa.- Le repliqué.
-¿Y volver a las alcantarillas?, con tanto esfuerzo que hice para salir de ellas, ¿volver a la suciedad, a mi vida miserable? Prefiero morir antes regresar…! Si morir es mi única opción!-
Se levantó y tomó otro trozo de cristal que estaba sobre la cama.
-Noona, que haces, Noona ¿te volviste loca?- le tomé de los brazos
-Déjame- grito –es mi única opción; por más de 15 años he aguantado esa asquerosa alcantarilla, ¡mi mundo se acabó! ¡Suéltame!-.
Al forcejear, ella me hizo un leve corte en el brazo.
-Sehun, ¿estás bien? Déjame ver ¿estás herido?- me miró asustada
-Eres demasiado- le quité la mano con la que intentó tocar mi herida -¿Acaso soy tan poco? ¿No soy razón suficiente para ti? Por trece años te he seguido, he estado contigo en las buenas y en las malas, también estuve en esas “asquerosas alcantarillas” y todo por quien por ti, ¡tú eras mi esperanza!- vociferé, había llegado a mi límite.
Puso su mirada en blanco y colapsó en el piso, me agaché y la apoyé al lado de la cama, sentándome a su lado.
Me miró y con voz calma preguntó -¿Crees que Dios existe? ¿Por qué me hace esto? ¿Qué he hecho malo? Uno nunca puede cambiar su destino- sus ojos miraban a la nada y su cara mostraba ahora solo resignación. Soltó un pequeño suspiro. –Tengo hambre, voy a ir a la comisaría y ordenaré un tazón de sopa de hueso de buey.
Mantuve mi cabeza gacha, pensando que no podía estar sucediendo esto, negándome a ver la realidad, no podía permitir que la persona que más amaba sobre la faz de la tierra terminara de esta manera, ella era inocente, no merecía todo este dolor, todo este sufrimiento.
Tomó su teléfono, me miró y sonriendo marcó a la estación de policía. -¿Es la estación de policía? Voy a entregar…
No la dejé terminar y colgué el teléfono, la besé con todas mis fuerza. –Sehun- susurró, junté nuestros labios lo más fuerte posible, quedando sin respiración, dejándola a ella sin respiración, fue el beso más apasionado y a la vez más angustioso, nuestras lenguas se fundieron saboreando un intenso dolor.
Me alejé de ella y con un trapo comencé a limpiar todas las huellas de los vasos, las botellas de soju, la mesa, para no dejar evidencia alguna.
-Sehun ¿qué haces?-.
-Yo lo maté, tú no sabes nada de esto- respondí con tono neutral.
-No! No! Lo hagas.-
-Ahora vete- la tiré del brazo hacia afuera de la habitación pero ella se negó
-No quiero, no puedo permitirlo, ¿Por qué debería? ¿Por qué TU?
-Para mí no es importante si no me convierto en doctor, pero Noona para ti tu sueño lo es todo, no quiero verte debilitada día a día, acabarás muriéndote, date prisa y vete… No vuelvas-la tomé de la mano mientras la miraba tiernamente y la llevé a la puerta.

Por Luhan
Frené en seco al ver al desgraciado Director Kim Hee Chul saliendo de la Compañía, en realidad lo tenía planeado, estaba esperando que saliera para hacer mi entrada dramática, soy muy dado a exagerar mis actos y sembrar terror en este sujeto era perfecto para mi plan.
-Director Kim, va para mi casa a hablar con el presidente ¿verdad?, yo voy también camino allá así que vayamos juntos, quiero hablar con un usted por unos minutos.
Le hice espacio en el asiento del copiloto y le sonreí de manera inocente, de esas medias sonrisas de hipocresía que sabía hacer tan bien, el me miro e hizo una reverencia entre asombrado y asustado pero entró al auto ¿Qué otra posibilidad le quedaba?
-Por el medio ambiente y para no hacer usos excesivos de los autos de la Compañía, ¿no es mejor compartir un auto?- sonreí.
-Es un honor para mí subirme a un auto conducido por usted personalmente, joven pero ¿porque no utiliza un chofer?
Lo miré con la misma sonrisa hipócrita y una mirada que denotaba “efusividad” y adrenalina –Mi temperamento es un poco violento, este mes despedí a tres, nadie aguantaría ser mi chofer.
Con una supuesta curiosidad lo mire y continué –Pero…llamarme constantemente joven, ¿me está discriminando?
-¿Qué? Me pregunto realmente confundido
-Solo porque soy el hijo del Presidente y repentinamente me convertí en su supervisor no puede aceptarlo ¿verdad?- esta vez mi sonrisa no era para nada fingida.
-No, por favor, que ocurrencias tiene, como puede pensar eso jov… No jefe de equipo, jefe de equipo- jajaja me encantaba jugar con él, realmente estaba muy asustado y me miraba con esa máscara patética de “buen empleado”.
-Piensa: “¿él es todo eso, solo porque se graduó con un master en administración en Harvard?” “Un niño mimado de 23 años que aunque tenga muchos título ¿acaso si sabe manejar esta importante Compañía? ¿Es esto una broma?- dije acentuando casi gritando en la última frase.
-Ja! Escuché que esto es lo que dice a mis espaldas- hablé suavemente mientras su mirada era cada vez más asustada
-No por favor, como puede creer eso, son solo rumores yo jamás…
Me estaba colmando la paciencia tanta hipocresía tanta amabilidad ficticia, apreté el volante y tomé de nuevo mi risa fingida –No se asuste…. Aunque ahora debería tener un poco de miedo…- susurré – ¿Toma pastillas para el corazón?
-Ehhh… esto… no…- titubeó
-Porque si lo está haciendo, es mejor que lo tome ahora- Gradualmente aumenté la velocidad de mi camioneta a medida que ingresábamos a un túnel.
-El proyecto de adquisición de la cadena de almacenes Itaewon, los activos valían $33.5 billones y los pasivos 15.1 billones, además una empresa que en total costó 12 billones ¿Cómo es comprada por 18.20 billones?- le miré victoriosamente.
A estas alturas el sujeto tenía sus ojos casi fuera de su órbita y sudaba a chorros, yo sonreí maliciosamente y pise el acelerador, con voz ingenua y un aeygo en la mirada manifesté – Si incluyéramos la totalidad del futuro potencial, ¿eso no sería una sobrevaloración del 10% aproximadamente?- endurecí el tono de mi voz y comencé a pasar autos y sigsagear por la avenida –Lo mismo pasó con las empresas Concos, Suwon y Cheonan, desde hace 4 años todas las empresas se han adquirido por más de un 10% del precio del mercado- le lancé una mirada acusadora –¿Talvez el Director Kim ha estado tomando este 10%?
-Jefe de equipo ¿Cómo puede pensar eso?- me decía casi llorando, mientras se tenía fuertemente ya que yo había acelerado al máximo y ya ni los carros que pasábamos se veían.
¡Como amaba el drama, el suspenso, el terror! Algo que había heredado de mi padre, estaba metido en mi papel totalmente, tomé mi voz más aterradora –Lo que dice me está haciendo sentir como que estoy siendo acusado.
En ese momento un carro se nos atravesó a lo que con mis excelentes reflejos lo esquivé haciendo un giro casi de 360° a la camioneta.
-Ashhh este bastardo, imbécil- abrí la ventana del copiloto con el Director mirándome atónito y grité amenazante –yyyaaaa ¡oye bastardo! ¿Quién eres atravesando tu coche?-
Miré al Director de reojo y continué –Basura como está deberían ser barridos y sin rastro, ¿verdad Director?-
-mmmm… estooo..siii- con voz temblorosa pasó saliva con dificultad y yo disfrutaba, mirándolo con los ojos muy abiertos.
Me calme y suavemente lo miré –lo siento, ¿en dónde habíamos quedado?
Llegamos a mi residencia así que detuve el auto diagonal a la entrada, teníamos CCTV y mi padre siempre vigilaba quien entraba y salía por lo no quería que me viera en conversaciones con uno de sus más “preciados” empleados.
-Dígame director Kim, que opción prefiere, ¿entregarse? ¿Ser arrastrado? ¿Tomar el 3% de la ganancia como jubilación dejando el otro 97%? cuál de éstas opciones prefiere.
Me miró resignado, sabía que su opción sería la tercera, pero cuando me iba a responder notó que yo estaba boquiabierto mirando a la entrada de mi hogar.
Una joven de mi edad, quizás tres o cuatro años menor estaba parada en la puerta de mi casa, cabello castaño lacio despeinada, tenía una camisa de hombre, la falda estaba medio rota y al parecer tenía cara de asustada, llevaba un sobre en sus manos.
Abrí poco a poco mis ojos al ver a mi padre salir, la miró de arriba abajo, esta le entregó el sobre con las manos temblorosas, algo hablaron, lo que me intrigó más, luego de unas cortas palabras mi padre la abrazó y ella rompió en llanto, no creía lo que mis ojos veían.
-Lo siento Director Kim ¿hasta dónde habíamos hablado de nuevo?- le miré tajante.
Notas finales:

Hola mis shippers, espero les haya gustado este primer capítulo.

Odiaron tanto como yo a Taeyeon verdad que si?? ahahah!! y Sehun vaya si es todo un héroe.... Quien será la chica que vio Luhan? quien por cierto está medio loquillo.

Quizás les parezca un poco lento pero debía encajar cada personaje en su ambiente :)

Las actualizaciones serían los martes y viernes, depende de si a ustedes les gusta, así que espero sus comentarios, si lo aman, odian o me quieren matar!

Un abracito Huhanesco y love

#exolover 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).