Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Los ojos del mar por mihana

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Espero que lo disfruten. Este fanfic lo he creado para ustedes, no soy muy buena para escribir, así que si tienen sugerencias pueden decirmelas:) Es un gusto estar aquí, sin más que decir, espero que les guste.

Notas del capitulo:

Hola chic@s, hace mucho no subo un fanfic, ni siqueira termine los otros y no creo hacerlo xD ya no tengo tiempo.

Si tienen sugerencias pueden decirmelas, dejen comentarios si les gusto o no:) espero leerlos pronto. Ojala lo disfruten.

Naruto Uzumaki era un chico verdaderamente hermoso, tenía la piel algo acanelada, unos bellos ojos azules y el cabello del color del sol. Vivía solo en una cabaña a las afueras de un pueblo llamado Konoha, se podía ver el océano y la playa desde  las ventanas de su hogar.

A pesar de haber quedado huérfano, él se las arregló para seguir adelante, ya que ningún familiar quiso cuidar de él y lo abandonaron en el orfanato de Konoha. Sin embargo al cumplir los 16  años tuvo que retirarse debido a que para los encargados de aquel lugar él ya debía  mantenerse a sí mismo.

El joven de ahora 18 años trabajaba cortando y vendiendo leña  a los habitantes del pueblo, así era como él podía sacar algo de dinero para comprar verduras, frutas,  tela, entre otras cosas. Por las tardes, luego de terminar de repartir leña  iba al mar a pescar algo para la cena. Aun así no se quejaba, era alguien muy determinado en lo que hacía y estaba seguro de que con el tiempo aparecería alguna oportunidad para tener una vida mejor… o al menos eso pensó.

Un día mientras estaba por las calles con su leña lista para terminar de ser vendida, observo como muchos soldados corrían de un lado a otro rápidamente, cosa que le dio mala espina. Nunca antes se había visto algo parecido en el pueblo.

-Es raro ¿Verdad Naruto? – Dijo Tsunade, una hermosa mujer de 50 años que aparentaba ser más joven. Ella tenía el cabello rubio pero no tanto como el joven y sus ojos eran color miel. Era una gran amiga suya y la única medica  de ese lugar.

-Sí, nunca antes había visto algo así, parece que algo paso o quizás va a pasar – respondió seriamente.

-Sea lo que sea, seguramente es malo, algunas personas se han empezado a inquietar – Tsunade se acercó un poco al chico – Hace un momento, el panadero le pregunto a uno de los guardias que pasaba, este le dijo de forma hostil que si quería seguir con vida no debía salir de su casa esta noche – dijo levemente la mujer.

-Algo no anda bien – dijo algo preocupado.

-Naru, cariño, no sé qué vaya a pasar pero a juzgar por como actuan los soldados, debe ser grave – Tsunade tomo del hombro al muchacho  y le dedico una mirada de súplica – Vete temprano a casa hoy, quedan 3 horas para el atardecer,  allá estarás más seguro que aquí.

-Gracias por preocuparte por mí – sonrió amablemente – No tienes nada de que temer Tsunade, estaré bien, como siempre lo he estado. Me iré de una vez, por favor cuídate, no quiero que te pase algo – El rubio abrazo a su amiga y luego tomo la leña que le quedaba  para atarla a su espalda.

-Tú también cuídate Naru – dijo preocupada – Nos vemos luego.

-Hasta pronto – se despidió el rubio. La mujer no le quito la vista hasta que su figura desapareció entre los habitantes del pueblo.

 

 --------------------------------------------------------------

 

Ya comenzaba a oscurecerse, había dejado la leña en su hogar y ahora estaba pescando. No podía sacarse de la cabeza lo que dijo Tsunade sobre el guardia y para colmo el mal presentimiento no se iba. Se empezaba a asustar sin saber la razón. Atrapo algunos peces y salió del mar para ir a su cabaña.

 

 --------------------------------------------------

 

-¡POR ÚLTIMA VEZ, YA TE DIJE QUE HAGO LO QUE SE ME DA LA PUTA GANA!  - Un chico de cabellera oscura, piel blanca y ojos negros como el abismo se encontraba colérico, caminando en círculos alrededor de su hermano en el camarote principal...

-¿Quieres calmarte? Pareces un perro rabioso – respondió un joven un poco más alto,  de ojos negros, con grandes ojeras y el cabello oscuro y largo que era atado por un listón delgado.

-¿Cómo quieres que me calme? ¡MALDITA SEA! Llevo semanas planeando saquear ese lugar, todo por culpa de ese maldito traidor que se vendió por un par de monedas – Gritaba a los 4 vientos el menor – si lo vuelvo a ver, lo matare sin dudar.

-Bueno, dejando a ese idiota de lado ¿Qué piensas hacer?  ¿Vamos a buscar otro sitio al que robar?

-¡JA! ¿Quieres que me rinda solo por un obstáculo? – Río sarcástico – Se nota que no me conoces hermano.

-Entonces ¿Si iremos? – El más alto seguía serio y no le prestaba tanta atención a las palabras de su hermano menor.

-¡Oh, claro que sí! Yo nunca me rindo – Sonrió demostrando su superioridad  - Si quiero  algo lo consigo, deberías saberlo. Ese pueblucho tiene una cosa que necesitamos y no podemos darnos el lujo de esperar más tiempo para conseguirlo

-Bien – el joven de cabello largo comenzó a caminar hacia la salida – les avisare a todos que iremos a tierra – El mayor salió dejando solo a su capitán, quien seguramente ya tenía en mente algún otro plan.

 

-------------------------------------------------------

 

Ya eran las 11 de la noche, Naruto aún se mantenía despierto, el sueño lo estaba traicionando, no podía dormir. Sentía una fuerte presión en el pecho, lo inquietaba.

-No puedo más – se levantó de la cama – Necesito salir a caminar.

El rubio salió de su hogar, camino durante al menos 30 minutos, a pesar de estar oscuro, el joven conocía muy bien la zona y con ayuda de la luz de la luna no tenía ningún problema. A juzgar por el tiempo que había caminado y algunas rocas y arboles peculiares que conocía muy bien, debía encontrarse  a unos 20 minutos de Konoha. El joven continúo su camino hasta llegar a lo alto de una colina, desde donde se podía ver toda Konoha. De pronto su cara se transformó a una de miedo al ver que muchas casas y otras construcciones ardían en llamas y el humo que se desprendía se elevaba hasta muy alto.

-¿Qué diablos…? – Naruto no podía asimilar lo que estaba ocurriendo. Sus piernas se inmovilizaron y no podía pensar en nada más.  Finalmente el chico salió de su estado de trance y empezó a correr lo más rápido que sus piernas le permitían en dirección al pueblo.

 

 -------------------------------------------------------

 

Había sangre regada en varios lugares, producto de la batalla que se había desatado una hora antes. Algunos hombres se encontraban robando en las viviendas y negocios, tratando de tomar todo lo que pudieran rápidamente. Otros hombres estaban más interesados en satisfacer sus más bajos instintos, abusando de las mujeres  dentro de sus propios hogares, siendo observadas por sus hijos sino es que ya habían sido asesinados.

Tsunade se encontraba oculta en el sótano de su casa, podía escuchar algunas pisadas de los intrusos  que habían entrado a robar. Sentía que su corazón se salía por su boca, no tenía idea de cuánto tiempo llevaba abajo, sentía que se estaba volviendo loca. Luego de un rato pudo escuchar la conversación de aquellos hombres, parecía que se marchaban.

-Oye Zetsu, ¿Terminaste? – Pregunto un hombre  con el cabello café oscuro, casi del mismo color que su único ojo visible, ya que el otro tenía vendas.

-Sí, señor Danzo – Respondió el que lo acompañaba – Iré al barco ahora, ¿se quedará otro rato más?

-Así es, he visto algo que me llamo mucho la atención aquí – sonrió sínicamente – adelántate, iré en unos momentos.

-Como diga – dicho esto, Zetsu desapareció en cuanto cruzo la entrada.

-Ahora ya estamos solos, sal de ahí o yo bajare, ya sé que estas en el sótano – En ese momento Tsunade sintió  que le daría un infarto, se quedó en shock. La entrada del sótano se encontraba muy bien escondida y de todas formas, ¿Cómo sabía qué estaba alguien ahí?, ya no sabía qué hacer, su mente queda en blanco por ser presa del pánico –Bien, si así lo quieres, entonces bajare yo.

Danzo tiro a un lado una mesita que tenía un florero y después retiro la alfombra, dejando ver la pequeña puerta para ir al piso subterráneo, utilizo su espada para romperla y así tener acceso.

-¡ALÉJESE DE MÍ! – La rubia se puso a gritar en cuanto el intruso bajo - ¡¡NO SE ACERQUE!! ¡LARGO!

-¡Cállate maldita zorra! – Danzo se estaba hartando de los gritos desesperados de Tsunade – Te voy a enseñar a cerrar la puta boca – La mujer quedo más asustada en cuanto miro al hombre empezar a quitarse la ropa – No eres más que otra put… - El pelinegro no pudo terminar de decir nada, ya que alguien le había dado un golpe en la cabeza.

----------------------------------

Cuando Naruto llego al pueblo y observo todos los cuerpos sin vida y  los desastres, tuvo que ir de manera sigilosa entre las calles para buscar a su amiga. Al llegar a la vivienda, vio como un hombre salía por la puerta. Imaginándose lo peor corrió sin importarle ser visto o no por los enemigos, solo quería ver si la médica estaba viva, afortunadamente llego a tiempo para salvarla.

-¡NARU! – La rubia lloro de felicidad al verlo. Naruto se encontraba atrás del hombre desmayado con una tabla en la mano.

-¡TSUNADE! – El chico la abrazo, soltando la tabla – me alegro de que estés bien. Pensé que te había pasado algo horrible.

-Estoy bien, todo gracias a ti – respondió agradecida – Tenemos que irnos, ya no es seguro estar aquí.

-Sí, vámonos – El ojiazul ayudo a subir a su amiga y estaba a punto de subir el también cuando una mano lo estiro hacía abajo.

-¡NARUTO! – Grito preocupada la mujer.

-¡VETE! – Le grito el joven. La rubia tuvo que aguantarse las ganas de quedarse ahí y salió en busca de ayuda.

-Eres un insolente – Danzo golpeo fuertemente la mejilla del menor – ¡TE HARÉ PEDIR DISCULPAS MALDITO!

-¡YA QUISIERAS IDIOTA! – respondió retándolo, ganándose así otro puñetazo pero esta vez en el estómago. Sentía como todo el aire salió de sus pulmones, sin querer había caído al suelo debido al impulso del golpe.

-¿A QUIEN LLAMAS IDIOTA, MOCOSO? – Danzo tomo su espada, lo mataría sin duda alguna.

-No eres más que un cerdo abusador…- dijo el rubio tratando de levantarse, pero fue pisoteado muchas veces.

-¡JAJAJAJAJA! ¿Un  abusador? – Dijo en tono de burla – Tú, maldito... debería violarte también y matarte, pero pensándolo bien  tengo mejores planes para ti – Naruto palideció, estaba asustándose. El otro aprovecho esto para darle un golpe en la cabeza y dejarlo inconsciente – Esto se pondrá divertido – Sonrió satisfactoriamente. 

Notas finales:

Espero que les haya gustado, tratare de actualizar lo mas pronto posible, aunque no creo que pueda hasta dentro de 6 días:( tal vez mañana pueda subir el siguiente capitulo, o quizas esta noche.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).