Ya estabamos de salida. El departamente quedaría cerrado hasta la próxima vez que volvamos a Japón. Kuroko veía el lugar con rostro melancólico mientras yo agarraba las últimas maletas para subirlas al taxi que nos llevaría al aeropuerto.
-Voy a extrañar este lugar...- Suspiró Kuroko.
-Igual yo.- Dije.
-Nos irá bien?- Preguntó mirándome directamente.
-Si estamos juntos, todo estará perfecto- Sonreí. Tomé de su barbilla y le besé.
Salimos del apartamento, cerrando con llave. Bajamos del edificio y nos subimos al taxi. Todo iba bien, hasta que llegó un punto del camino que estaba trancado. Es decir, no había paso en la calle.
-Lo lamento mucho chicos. No hay paso asi qeu, para ustedes, es preferible que caminen un poco y cojan otro taxi.- Nos dijo el chofer.
-Agh... Vamos~!- Se quejó Kuroko poniendo un puchero un poco infantil.
-No te preocupes Kuroko. Muchas gracias señor, aqui tiene.- Pagué el taxi y nos bajamos, quedando en medio de la calle muy transitada con un sin fin de maletas.
Era momento de recurrir a aquellos que se supone se despedirán de nosotros hoy. Saqué mi telefono y envié un mensaje masivo a la Kiseki. No tenía suficiente valor como para molestar con esto a Seirin.
Minutos mas tarde empezaron a llegar. Seguimos el camino a pie, mientras que las personas pasaban a nuestro lado extrañadas por nuestro aspecto.
El tiempo pasaba y las vias seguian cerradas. Era el día perfecto para que cerraran las calles. Ya estaba frustrándome, asi que iba aumentando el paso a medida que los minutos pasaban, pero de vez en cuando Kuroko me calmaba con sus sermones. Sin embargo.
-A la mierda! Mira la hora!!!- Exclamé. Faltaba menos de una hora para abordar el vuelo.
-Hay que apurarse. Puede que las vias sigan cerradas, pero el aeropuerto no está muy lejos.- Dijo tranquilamente Akashi que llevaba de la mano a Furihata (que estaba sonrojado) mientras que uno de sus sirvientes ayudaba con las maletas.
-Entonces a correr!!!- Gritó Kise halando de Aomine para echarse a correr en dirección al aeropuerto.
Kuroko también me haló al empezar al correr. Reíamos todo el grupo en conjunto, como los propios niños escapando de sus padres, pero más "maduros". Llegamos agotados al aeropuerto viendo como Seirin esperaba enojado.
-Llegan tarde! Saben que su vuelo saldrá en media hora?!- Exclamó Hyuuga con una sobresaliente vena en la sien.
-Lo lamentamos mucho!- Dijimos Kuroko y yo al unísono.
-Ya, no se preocupen. Vayan a chequearse y despues hablamos.-
Rapidamente chequeamos y dejamos las maletas, era hora de despedirnos.
-Bien, nos toca abordar por la puerta 8 en 20 minutos...- Dije.
-Ay chicos... Los extrañaremos~!!- La entrenadora nos abrazó con fuerza Kuroko y a mi.
-Entrenadora... No respiramos...- Dijo Kuroko en un susurro.
-Ah. Lo siento!-
-De verdad te echaremos de menos Kurokocchi!- Habló Kise.
-Pronto nos volveremos a ver. Planeamos casarnos estando en America, y no duden que todos estarán invitados.- Sonrió el mencionado.
-En ese caso, esperamos las invitaciones.- Agregó Akashi.
-Taiga, nos enviarás el paquete de papas para Atsushi?- Me preguntó Himuro.
-Lo haré cuando pueda Tatsuya.- Abracé a mi hermano que me fue arrebatado por el gigante pelimorado.
-Chicos, no les queda mucho tiempo.- Dijo Izuki.
-Ah... Es tiempo...- Suspiré.
-Antes, hagamos una foto de recuerdo. Momoi-san, acomoda la cámara con el autodisparador.- Pidió Kuroko.
-A la orden, Tetsu-kun.-
Y en pocos segundos, todos ya estabamos sonriéndole a la cámara. A excepción de Murasakibara, Midorima, Aomine y Makoto (que fue obligado a venir por Kiyoshi). La pelirrosa prometió enviar a todos la imagen por correo electrónico.
-Nos veremos pronto.- Dijo Kuroko sin ver a nadie.
-Kuroko!!- Se escuchó a lo lejos.
-Tú! Que demonios haces aquí!?- Exclamé al darme cuenta de quien era.
-Ogiwara-kun...?- Miró sorprendido al recién llegado.
-Ah... Disculpa por llegar... Así...- Dijo. Me miró sonrojado y despues volvió hacia donde estaba Kuroko.
-Como te...?- Iba a decir Kuroko.
-Kise me dijo.- Respondió. -Esperaba llegar a tiempo para despedirme.-
-Justo a tiempo.- Kuroko le dio un abrazo que este correspondió. No me molestaba porque son amigos de infancia asi que entiendo como se siente.
-Kuroko...-
-Sí Kagami-kun...- Dijo. -Pero antes... SEIRIN FIGHTING!!!!-
-SI!!!!- Gritó Seirin.
-KISEKI FIGHTING!!!- Complementó.
-Sí!!!!- Exclamaron con menos ganas.
-Hasta pronto chicos!- Les dije.
-Nos vemos después...- Dijeron mas tranquilos.
Kuroko y yo nos sonreímos mutuamente, para luego tomarnos las manos y caminar a la puerta correspondiente.
La hora de dejar Japón habia vuelto a llegar para mí.
—Horas después. Llegando a América.—
El avión estaba a punto de aterrizar. Al momento que empezó a descender Kuroko tomó con fuerza mi mano.
-Tranquilo, cuando el avión toque el piso, el efecto pasa...- Dije sabiendo como debe sentirse.
-No es eso~... Sino que... Realmente me acostumbraré a vivir aquí? Digo... No hablo muy bien inglés, además de que no tenemos las mismas costumbres en ambos lugares.-
-Si yo pude hacerlo, estoy seguro de que tu lo harás más rápido.- Besé su mano.
-Un futuro Taiga, un lindo futuro es lo que deseo.-
-Así mismo es Tetsuya. Tu, yo y nuestro(a) hijo(a)...- Le dije, y cuando le fui a dar un beso, el avión tocó la pista de aterrizaje.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español