Era un día de lluvia cuando su madre murió.
Solo cinco personas habían ido al entierro. No iba a permitir que un montón de hombres gordos con trajes vayan a despedirla, lanzando lagrimas de conveniencia.
- Kyungsoo, se fuerte.
Baekhyun, su mejor amigo fue el ultimo en despedirse.
En medio de la lluvia vio una figura bajo un paraguas acercándose. Una pequeña mujer elegantemente vestida hizo una reverencia al igual que el.
- ¿Do Kyungsoo, hijo de Do Seung Hee?
- Si.
La mujer con su mano libre extrajo una hoja de su bolso.
Kim JongIn
Carta de tenencia.
Se lo entregó junto con un pedazo de hoja rasgada. Reconoció la dirección escrita.
- En el divorcio, tus padres firmaron un acuerdo - contó la mujer - si algo ocurría con tu madre, tu padre obtendría tu tenencia.
- Pero, mi madre y la empresa...
- Tu padre esta a cargo de la empresa también.
Miro la hoja nuevamente y miro a la mujer.
- Kyungsoo, tu padre te esta esperando esta noche, la policía ira a buscarte si no te presentas.
Con una reverencia se despidió y el miro la lapida de su madre, sentándose en sus tobillos acarició la foto que estaba cubierta por gotas. Dejo una rosa blanca y se despidió sollozando.
No la recordaba, lo único que recordaba es que se perdía cada momento entre los pasillos de la mansión.
También recordaba que su madre y su padre jugaban con él, podía recordar las sonrisas.
*Mansión del Sr. Kim*
La voz distorsionada hablo a través del timbre y se acercó a contestar.
- Soy Kyungsoo.
Las rejas negras se abrieron y vio una delgada figura acercarse a través del jardín. Su piel morena brilló por el sol y sus dientes blancos lo recibieron llenando su sonrisa.
- ¿Padre?
- Hijo, tanto tiempo.
Fue rodeado por los delgados y largos brazos de su padre, su cabeza termino apoyada en el pecho de este y se avergonzó por la diferencia de altura.
- Sabia que serias pequeño como tu madre.
Se separaron y el mayor rodeo los hombros de su hijo llevándolo hacia la casa.
- Pensé que vendrías a la noche, por tu madre, pensé que te quedarías más tiempo.
Tampoco entendía porque vino demasiado rápido, por alguna razón quería ver a su padre. Aunque no lo recordaba como estaba ahora.
Entraron a la casa y una mucama los recibió, por detrás un hombre traía sus maletas y las subía junto a otro por las escaleras.
- Pa... Papá, ¿Porque no fuiste al funeral de mamá?
El hombre saco el brazo de su hombro y se rascó la cabeza mientras se sentaba en el gran sofá. Kyungsoo lo imitó.
- Digamos que fue la voluntad de tu madre cuando nos divorciamos.
Kyungsoo asintió y se produjo un silencio incomodo. La anciana mujer entro e hizo una reverencia hacia el menor.
- Joven, vino la jueza de menores, quiere hablar con usted y con usted Sr. Kim
El hombre se levantó junto a su hijo y lo condujo hacia su oficina.
Kyungsoo aprovecho a observar y recordar aquellos lugares, recordaba las grandes ventanas del pasillo. Tambien recordó la terraza, tenia un recuerdo ahí junto a su padre que hizo sonrojarse.
- Kyungsoo, estás rojo.
Se puso aun más rojo cuando su padre se detuvo y rodeo sus mejillas con sus manos.
- ¿Recuerdas en la terraza? siempre que te ibas enojado o avergonzado te daba un besito para que te calmes, mientras te agarraba asi las mejillas, luego me abrazabas y volvíamos felices con mamá.
Kyungsoo bajó su mirada aun más avergonzado.
El mayor tomó de su mano y siguieron caminando hacia la oficina.
La mujer era pequeñita y muy delgada, pero tenia una mirada muy profunda e intimidadora.
- Buenas tardes Sr. Kim.
La mujer cruzó sus dedos y los miro a los dos.
- Vine por el asunto del apellido Do.
Kyungsoo ya se imaginaba lo que le diría. Pero el había escogido el apellido de su madre desde que tuvo conciencia.
- Sung Hee me pidió que Kyungsoo tenga su apellido, no puedo deshacer eso y dudo que mi hijo quiera deshacerse de su apellido asi como asi.
Kyungsoo sonrió a su padre y este le devolvió la sonrisa.
- Si es asi, no tengo nada que hacer aquí.
La mujer se levantó e hizo una reverencia, salio junto a la anciana mucama y JongIn acarició la pequeña mano en el sofá.
La estadía comenzó bien, a los pocos dias ya llevaban una relación muy cercana. Kyungsoo se sentía protegido junto a su padre y JongIn se sentía vivo junto a su hijo, incluso Baekhyun se sorprendió de la buena relación. Pero a Chanyeol no le gusto.
Sus amigos había ido a conocer su nuevo hogar y quedaron maravillados, incluso se perdieron como él. Su cuarto quedo desecho luego de la intromisión.
El caso es que Baekhyun quedo aun más maravillado cuando vio a un moreno con traje untar mermelada en una tostada.
- ¡Kyungsoo hay un ser muy caliente en tu cocina!¡Estaba untando mermelada en una tostada! ¡Oh, su piel tambien era tostada y tan sexy!
Baekhyun parecía derretirse y Kyungsoo junto a Chanyeol lo miraron extrañados.
- Baekhyun, es mi papá.
El chico abrió los ojos y lo miro bien buscando algún parentesco.
- Claro... ¿Como puedes ser aun tan inocente cuando tienes a alguien como el durmiendo en tu casa?
- Baekhyun... ¡Es mi papá!
- Oh rayos Kyungsoo, no te pareces, eres como la versión femenina de tu madre.
Kyungsoo le lanzo una almohada que chocó contra la pared, su puntería no era muy buena que digamos.
Los tres bajaron al living y se encontraron con el moreno vestido casualmente mientras cambiaba de canal.
- Papá, llegaste.
- Soo, vení a sentarte con papá.
El moreno no había girado a verlo, había encontrado algo entretenido y lo veía emocionado. Cuando sintió el cuerpo de su hijo cerca lo tomo por la cintura y lo sentó en su regazo.
- Papá...
- Shhh, esto esta interesante.
- Papá, mis amigos están aquí.
JongIn giró y bajo su mano de la cintura de Kyungsoo, este se paro rápidamente y le dio una sonrisa incomoda a sus amigos.
- Bueno... el es Chanyeol y el Baekhyun.
El ultimo hizo su mejor cara coqueta mientras que el primero solo alzo una ceja y miro con mala cara al mayor. Este lo miro de la misma manera.
- Un gusto, soy Kim JongIn, el padre de Kyungsoo.
Sinceramente se sorprendió lo bien que participaba su padre en sus conversaciones con Baekhyun, porque Chanyeol había decidido guardar silencio alguna vez por alguna razón.
Su padre era un hombre muy joven, 33 años de edad para ser exactos, por eso su imagen y comportamiento era muy jovial.
Lo extraño comenzó el dia de ayer, fue extraño, incomodo, y por alguna razón le gusto.
Había acabado de bañarse y se estaba cambiando, hasta ahí solo se había colocado los bóxer, y aun las gotas caían de su cabello deslizándose por su cuerpo.
Pegó un brinco cuando vio a su papá detrás suyo a través del espejo, se cubrió con la toalla rápidamente mientras aun se cohibía por la mirada profunda del mayor.
- Papá...
- Kyungsoo...
Se asusto cuando su padre se fue acercando luego de asegurar la puerta, parecía que estaba en algún tipo de trance porque solo estaba observando sus ojos.
Su espalda chocó contra su armario y la respiración de su padre pegó en su cuello mientras sus muñecas eran apresadas por esas grandes manos. Cerró los ojos frunciendo su nariz y forcejeo para ser soltado.
- ¿Papá que te ocurre?
- Kyungsoo... eres la viva imagen de tu madre... eres una imagen perfecta de tu madre, esos rasgos tan delicados e infantiles, tus ojos son grandes, tu piel es tan blanca, tu cuerpo es tan estrecho y curvoso.
- JongIn, suéltame.
- Eres perfecto hijo.
Sus labios fueron atrapados y el gimió en protesta, eso estaba mal, muy mal. Quiso liberarse pero el mayor lo besaba aun con más rudeza.
Lanzo un gritito cuando su cuerpo cayo en el colchón y su padre se coloco encima de el desabrochándose el cinturón, se encogió en si mismo. Cuando su única prenda estaba por ser destrozada pateó en los genitales a su progenitor y se escondió en el baño cubriéndose con una toalla todo su cuerpo.
- Kyungsoo abre.
- Vete.
- Kyunggie...
- ¡Dije que te fueras!
Cerro los ojos al escuchar el fuerte golpe de la puerta de su habitación luego de ser cerrada tan bruscamente.
En estos momentos el tomaba incomodo el desayuno junto a su padre mientras recordaba reiteradamente aquel hecho.
- Hijo, discúlpame.
- No puedes llamarme hijo luego de lo de ayer...
- Lo se.
Un silencio incomodo volvió a surgir, pero un fuerte golpe en la mesa sono por todo el comedor, levanto la mirada bruscamente y vio a su padre quien lo miraba serio. Luego desapareció por las escaleras.
Baekhyun aun le hablaba en el colegio de lo caliente que estaba su padre y bla, bla, bla. Chanyeol solo mantenía un rostro molesto que confundía al bajito.
- Yeol, estas raro.
El alto se levantó y colgó la mochila en su hombro mirándolo desde arriba.
- Kyungsoo, te espero detrás del colegio a la noche.
- ¿Porque?
- Solo ven.
Ahora solo había incomodidad en el ambiente.
Tampoco pensó que debía cuidar su trasero de su propio padre.
- Deja de mirarme.
- ...
- Sal de aquí y cierra la puerta.
- ¿Donde vas a ir?
- No te importa.
Unos jeans negros apretados, una remera con un estampado de Mikey y unas converse negras era lo que llevaba. Su flequillo caía deslumbrante en su frente.
- Sos mi hijo Kyungsoo, claro que me importa a donde vas a las once de la noche.
- Voy a verme con Chanyeol, listo.
- Decime donde, te voy a llevar.
Agarro su celular y salió ignorando a su padre.
Su colegio no era un bonito lugar en la noche, se arrepintió al instante que recordó que tendría que pasar por la arboleda del patio de su colegio.
Sintió unos pasos siguiéndolo y se quedo quieto, ahora si estaba por correr. Apretó los ojos cuando sintió una respiración en su oreja y una mano en su cuello.
- Soo...
Susurró una voz gruesa.
- ¿Chan... Chanyeol?
Volteó rápidamente y su corazón volvió a latir cuando vio a su amigo. Lo golpeó en el brazo esperando una risa idiota, pero esta no se asomo en el otro.
- Viniste.
- ¿Chanyeol que pasa?
- Tengo que decirte algo, no, tengo que confesarte algo.
El alto tomó su mano y la coloco entre las suyas. Kyungsoo se ruborizó cuando la gran presencia del otro casi estuvo encima de el.
- Kyungsoo... Tú...
- Chanyeol...
- Kyungsoo, tú... tú... tú me gustas.
Abrió los ojos ante la confesión y desvío su vista a otro lado. Se alejó un poco del otro, estaba muy sorprendido, estaba casi seguro que Baekhyun era el platónico del que tanto hablaba su amigo. Pensaba que le iba a pedir que lo ayudara o algo asi.
- Chanyeol, yo... Yeol, lo siento, no puedo corresponderte.
- ¿Porque?
- Sos muy apuesto, pero solo podemos ser amigos... siempre lo fuimos Chanyeol, desde pequeños jugábamos junto a Baekhyun.
- Kyungsoo...
- No puedo verte más que como un amigo, lo siento, de verdad.
Se sintió triste por el otro y se acercó para abrazarlo extendiendo sus brazos. El otro lo detuvo a la mitad y lo miro fríamente.
- ¿Es por tu padre verdad?¿Eres el amante de tu propio padre Kyungsoo?
- ¿Que?¡No!
- Debí haberlo sospechado desde que los vi agarrados de la mano en el cine, estaban tan cariñosos en la oscuridad, vos apoyabas tu cabeza en su hombro y el te dejaba besitos en tu nuca, parecían una pareja.
Entonces se preguntó si Chanyeol había estado allí... Claro que había estado allí, cualquier idiota se daría cuenta que parecían una pareja, pero el solo lo tomaba como un comportamiento fraternal.
- Luego cuando te sentaste en su regazo frente a nosotros, tu pudor fue tan escaso, parecía que hubieras echo más cosas con él.
- No es lo que piensas, nosotros solo...
- ¿Sabes que lo de ustedes es imposible no?
- No hay nada entre nosotros, solo...
No pudo terminar porque chilló a causa del impacto de su espalda en el tronco del árbol, sus mejillas fueron tomadas y Chanyeol respiraba en su rostro.
- Me gustas desde que te vi en esa feria Kyungsoo, es un amor de años, conmigo tienes un futuro...
- Chanyeol, ¿Porque te comportas asi?
Ni recibió respuesta porque sus labios fueron apresados por los del otro, se sentía siendo devorado y se oía el ruido de su boca siendo violada por la lengua del otro. Intentaba liberarse, pero por cada intento una mano iba yendo a distintos lugares de su cuerpo.
- Deja de moverte...
Pidió el alto con voz ronca, mientras deslizaba sus pantalones hacia abajo, no llevaba calzoncillos, por lo que su pene quedo expuesto y el bajo no pudo evitar gritar nuevamente cuando una mano se coló apretando sus glúteos y su apretado pantalón caía hacia abajo.
Chanyeol acarició su miembro y Kyungsoo se asustó aun más, el alto nunca se comportaba así. Entonces el sonido de una bolsita impactando en el piso sonó y vio, mientras el otro mordía su cuello, el polvo blanco desparramado.
- Chanyeol, ¿Vol... volviste a consumir?
Su espalda volvió a chocar contra el árbol y su remera fue quitada violentamente al mismo tiempo que era volteado.
- Kyungsoo...
Una mano tomó su miembro y gimió. Su calzoncillo cayó .
- Chanyeol, para, no quiero.
- Kyungsoo, yo quiero que seas mío, vas a ser mío.
Volvió a suplicar, cuando sintió un dedo acariciando su entrada.
- ¿Aun eres virgen Soo?
- Detente Yeol, por favor...
Una lágrima cayó cuando sintió la primer intromisión y apretó los dientes rasgando la madera con sus uñas.
- ¿Te gusta Kyunggie?
- ¡Sueltame Chanyeol!
Volvió a moverse intentando liberarse, su cabeza golpeó en el tronco y gimió por el dolor.
- ¡Quedate quieto!
Entró el segundo dedo y se removió aún más.
- Chanyeol, por favor... ya no lo hagas
Comenzó a sollozar y el otro solo volvió a atacar su cuello mientras le hacia movimientos de tijera para dilatarlo.
De repente ya no había ninguna intromisión en su parte trasera y volteó por el fuerte golpe en el pasto, encontrándose con Chanyeol desnudo limpiando la sangre que se escurría por la comisura de su boca.
- ¡Kyungsoo!¿Estas bien?
Tomó de la camisa a su padre cuando se acercó y su rostro pegó en su pecho sollozando. JongIn se agachó, tomó la remera en el piso y cubrió la desnudez de su hijo.
- Papá... Papá vámonos.
- ¿Este idiota te hizo algo?
Ese idiota aun seguía en el piso mirándolos a los dos con ojos oscuros.
- Papá, vámonos.
El hombre cargo al más pequeño como novia y dio una mirada seca al chico en el piso quien sonrió ladino.
- No te vuelvas a acercar a Kyungsoo... no vuelvas a tocarlo... el es mío
- Son unos putos incestuosos.
JongIn sonrió mientras que Kyungsoo bajó la cabeza avergonzado.
Kyungsoo fue quien tomó la iniciativa dias después.
Mientras re decoraban su habitación, un accidente con la pintura llego a otra cosa y luego de pintar la nariz del moreno con un color rojo chillón, se miraron y el más bajo se puso de puntitas para besarlo. Un ligero rubor cubrió su rostro y sonrió.
Fue cargado hacia la habitación del mayor como aquella noche en el bosque.
- ¿Estas seguro?
- Siempre lo estuve...
Entonces desde esa tarde fueron uno y agradecieron que ese fuera el dia libre de las mucamas, porque las respiraciones y gemidos sonaron por toda la mansión sin perderse un lugar.
Kyungsoo gemía por cada estocada y JongIn gemía por los gemidos del menor, la manera excitante en la que abrían esos gruesos y rosados belfos.
- Eres tan perfecto.
- Soy tu hijo.
- Por eso.
Y rieron.
Chanyeol lo miraba avergonzado y el solo lo esquivaba. Baekhyun estaba cada vez más deprimido y no sabia porque.
Entonces se entero que Chanyeol era el platónico de Baekhyun, y se sintió feliz. Pero preocupado.
Chanyeol recordaba que casi violaba al más pequeño, pero también recordaba la relación padre e hijo. Eso lo asqueaba, pero la vergüenza de lo que iba a hacer era más fuerte.
Contaré esto rápidamente.
La relación incestuosa entre JongIn y Kyungsoo fue descubierta, por la dulce anciana que cuidaba del hombre mayor. Ella ya lo sospechaba.
La Sra. Ji quedó sorprendida cuando escucho los gemidos que provenían del segundo piso y claramente pudo distinguir las dos voces. Lo sospechaba por las sabanas manchadas que entraban en el lavarropa, la cojera del menor y las constantes veces que encontraba al Sr. Kim durmiendo abrazado a su hijo de una manera tan intima.
Pero no hizo nada, no tenia derecho a hacer nada. Era algo mutuo, Kyungsoo no estaba siendo obligado, no era bueno a los ojos de dios, pero no podía hacer nada. Solo entro a la cocina y comenzó a hacer el almuerzo.
Baekhyun también lo descubrió, cuando entro sonriente a la habitación de su amigo y escucho ruidos provenientes del baño, entonces entro para darle un susto. El susto se dio él, porque ahi tras la cortina su amigo estaba de rodillas dándole una mamada a ese moreno caliente.
- Kyung... ¡Kyungsoo!
Kyungsoo perdió un amigo de toda la vida.
Fue trasladado a otro colegio y tiró todos los recuerdos con sus ex-amigos. El sexo seguía siendo bueno.
- Mi nombre es Luhan.
Fue la primera persona que se presento cuando entro al otro colegio. Luego miro a otro chico acercarse y observo como tomó a Luhan de la barbilla y lo beso. Se ruborizó.
- Hyung, tus labios estaban secos.
El joven chico lo miro y le sonrió extendiéndole la mano.
- Oh Sehun, un gusto, el es mi hermano Luhan, es chino.
Kyungsoo abrió los ojos y los apunto titubeante. Pero luego se rio por sus pensamientos, pensaba criticarlos cuando el estaba con su propio padre.
- No hay ningún problema.
Fue lo que dijo cuando Sehun y Luhan lo miraron avergonzados.
Tiempo después Luhan y Sehun descubrieron la relación que llevaba con su padre, y solo se rieron. Se rieron y no entendía porque.
- Tu padre es caliente.
Fue lo único que dijo Luhan en chino.
Le gustaba sentir a la gran anatomía dentro de el, le gustaba como aquellas manos lo recorrían por completo, y amaba cada marca que le dejaba. Tanto como en el cuello y las palmas marcadas en sus nalgas.
Le encantaba gemir de esa manera, y sentir la respiración de su padre recorriendo su cuello.
- Kyunggie ¿Que quieres para tus cumpleaños?
Preguntó el mayor mientras acariciaba sus cabellos.
- Quiero... Quiero ir a... Quiero hacerlo en la playa.
JongIn rió ante las ocurrencias de su hijo y volvió a besarlo. Volvieron a unirse, esta vez la cama rechino.
- Va... Vamos a romperla... Aaah~
Cuando Kyungsoo cumplió sus 20, todos sabían de su relación, y muchos se alejaron mientras que a otros poco les importó.
Esta historia no continua.
Solo puedo decir que Kyungsoo fue separado de su padre a los 17 años. Y cuando cumplió sus 20 años, su padre había sido encarcelado, culpado por abuso a un menor. A pesar de que ya era mayor de edad.
Sin embargo siempre existen las visitas higiénicas.
Por esa razón es por la que las mujeres no deben vigilar las visitas, los presos no pueden tener una relación tranquila. Hoy aquella pareja parece que se había extrañado, porque las demás policías tenían el clítoris parado seguramente.
Aaaah, los casos que hay.
Entonces me aleje de aquel cuarto y fui a repartirle calendarios a los demás presos.