Hay una brecha extensa entre la paranoia y el temor. ¿En qué punto me encontraba yo? En el punto central de ambas con un pie a cada lado. En algún momento debía correr a uno de los dos puntos sino quería volverme loco. Quizá es porque aun soy demasiado joven como para saber qué actitud se debe tomar en una situación como ésta.
Sentir el tembloroso cuerpo de Luhan a mi lado rozando su codo con el muslo de mi pierna, viendo como el sudor brota por los poros de su frente y el cabello húmedo en sus puntas se adhiere a ella y la almohada, me enloquecen poco a poco. El calor que emana su piel me quema, puedo sentirlo tanto como si estuviera abrazándolo.
Yixing entra en la habitación, lo sé porque se ha parado junto a mí, sosteniendo un bol con agua tibia y un paño blanco en su hombro. Se inclina y deja el bol sobre la mesa de noche e introduce el paño humedeciéndolo. Lo exprime y coloca en la frente de Luhan.
– Te he dicho que le dieras la pastilla.
– No he podido, cuando llegue ya estaba en ese estado y me paralice.
– Muchacho cobarde. Haber dame eso. –Me arrebata la pastilla y el vaso–. Siéntalo. No importa si está dormido su cuerpo reaccionara y tragara la pastilla.
Yixing le abre la boca a Luhan e introduce la pastilla hasta su garganta y luego le da el agua. Por muy extraño que esto pueda parecer, un Luhan medio inconsciente traga la pastilla y el agua. Volvemos a acostarlo y Yixing tira de mi brazo para sacarme de la cama y continuar poniendo el paño húmedo en su frente.
– No podemos retrasar la actividad de hoy. –Anuncia Suho irrumpiendo en la habitación–. He hablado con el manager y acordamos que todos debemos presentarnos.
– ¿Pero y Luhan?
Suho vuelve su vista a mi desencajado rostro y suspira.
– Alguien vendrá a cuidarlo.
– Esto es demasiado.
– Solo será una vez, no hay de qué preocuparse.
*****
El Fasting’s se lleva acabo, algunas fans pregunta por Luhan y nos vemos obligados a mentir. Hay un breve descanso y me levanto de mi asiento. Abordo al staff y pido una botella con agua, mi mano esta acalambrada y debo estirarla y encogerla para que se pase el dolor. A veces firmar autógrafos es sumamente agotador.
Observo mi teléfono móvil no hay mensajes ni llamadas y temo por la salud de Luhan. Anoche estaba bien y hoy se levantó completamente enfermo, solo espero que no se le haga costumbre porque terminare arrancándome el cabello, no tolero la sola idea de tener que dejarlo solo en casa.
– Tranquilo estará bien.
La voz reconfortante de Tao no me ayuda en lo absoluto. Me quito la gorra y peino mi cabello. Tao pasa su brazo por sobre mis hombros y me lleva de regreso a la mesa de firmas.
*****
De regreso en los dormitorios me encuentro con un Luhan más animado y con mejor semblante, vestido con un mono ajustado y una camiseta ancha mientras come una taza de cereal con leche frente a la tv.
– Creí que estarías en cama –digo con brusquedad.
– La enfermera me ha dicho que ya estoy mejor, todo fue producto del cambio de clima. China no es tan frio en invierno como Corea.
Ruedo los ojos y Luhan se levanta del sofá para ir a la cocina y volver con las manos vacías se tumba a mi lado recargando su cabeza sobre mis piernas con una sonrisa bastante infantil y tonta en su rostro.
– Te extrañe.
Fin del Relato de Sehun
– He analizado la situación con mucho cuidado últimamente y llegue a una conclusión. Espero que ambos pongan de su parte con respecto a este asunto porque realmente no creo poder tolerarlo más.
Suho habla con tono seguro y veraz en el interior del ascensor. Tao rueda los ojos y niega un par de veces. Sehun observa a los acusados y yo no sé si reír o llorar.
– Y me estoy dirigiendo a ustedes dos.
– Hyung, ¿qué esperas que hagamos? –pregunta Chanyeol.
– Las pases, eso es lo que espero.
– Misión imposible~ –Canturrea Tao.
– Pondré de mi parte. –responde Baekhyun.
– Solo espero que no hagan ninguna otra escena y cumpla sus deberes como es debido. Hoy grabaremos el episodio ocho.
Salimos del ascensor y edificio. Despues de una larga grabación matutina nos informan que cuatro de nosotros no grabaran hoy. Baekhyun suspira y exclama ¡AMÉN!, Yixing me sonríe con complicidad y Kyungsoo aplaude en una reacción bastante fuera de lugar.
– Lo hiciste bastante bien. –le dice Kyungsoo a Baekhyun mientras caminamos a nuestro apartamento.
– No estaba fingiendo durante la grabación.
– Solo eras tú. El mismo Baekhyun de siempre.
Introduzco la llave en la cerradura de la puerta del apartamento cuando la conversación de Baekhyun y Kyungsoo acaba. Abro la puerta y Kyungsoo corre hasta el sofá y toma el oso de peluche que Kai ha dejado sobre él, esta mañana, y lo abraza. Baekhyun se sienta a su lado y Yixing me observa.
– Creo que Kyungsoo está muy enamorado de Kai. –sugiera Yixing.
– No lo sé.
– Ashh lo sabes pero no vas a decirme. Tú siempre sabes cosas que el resto desconocemos y a veces te las guardas.
– No mientas, no mientas. Yo siempre te digo todo y no puedo decirte nada ahora porque no lo sé.
Estoy mintiendo muy descaradamente pero le hice una promesa a D.O y no voy a confesarle nada a nadie, ni siquiera a Yixing. Las horas transcurren lentas entre la pantalla de la tv, bocadillos y bostezos perezosos soltados en seguidilla. Yixing duerme sobre mis piernas y Baekhyun en el otro sofá, mientras que Kyungsoo está en la cocina preparado palomitas para ambos.
Me levanto con cuidado dejando bajo la cabeza de Yixing un cojín y entro en la cocina por un vaso con agua. Kyungsoo tiene música puesta en el reproductor de su celular, está cantando a todo pulmón mientras saca una barra de chocolate de la encimera.
– Te ves hermoso~
– ¡Hyung! –lleva su mano a su pecho y me observa asustado.
– No era mi intención asustarte. Lo siento. ¿Qué haces?
– Voy a preparar chocolate caliente. El clima en este país es tan cambiante. Había un sol radiante y hermoso esta mañana y ahora esta nublado.
– Hmm…
– Hyung sobre la otra noche. Solo olvídalo. Actué como un tonto.
– No es la primera vez que te lo dice ¿verdad?
Kyungsoo muerde su labio inferior y abre el paquete de chocolate partiendo las barras para luego ponerlas en el agua hirviendo. Abre su boca para responder y el “Pi” del microondas avisa que la bolsa de palomitas esta lista. Kyungsoo cierra la boca y toma un bol, saca la bolsa de palomitas y la destapa agregando el contenido al bol, evitando quemarse.
Vuelve a pararse frente a la olla del chocolate y comienza a moverlo con la ayuda de una cuchara. Como veo que no está dispuesto a contestar vuelvo sobre mis pies para partir a la sala.
– Lo dijo en año nuevo –espeta– antes de la cena con sus padres. No pude decirle nada, incluso intente por todos los medios ignorarle y olvidar el tema pero cuando estuvimos a solas en su habitación no pude evitarlo. Jongin volvió a abordarme mientras se desvestía delante de mí. Estaba a punto de salir de la habitación pero él me lo impidió. Fue más rápido que yo.
– ¿Qué hizo?
– Se atravesó en medio de la puerta y yo, llevaba solo su bóxer puesto. Era una locura, lo es aún. Ver su moldeado cuerpo desnudo frente a mí, fue una tortura. Creí que me volvería loco –toma asiento en el taburete de la barra con la cabeza agachada despues de apagar la cocina–. Tenía miedo hyung, creí que Jongin haría una locura pero solo volvió a preguntar “Hyung ¿te gusto?”. No iba a decirle que sí, todo este tiempo él se ha expresado de una forma bastante extraña hacia Taemin, como si estuviera enamorado.
– ¿Mentiste?
Niega moviendo la cabeza sin mirarme y suspira.
– Le dije que no entendía mis sentimientos. Que no me presionara. Que yo lo quiero pero que no puedo describir que es lo que siento exactamente hacia él. Una parte de todo eso es cierta, la otra… no tanto. En realidad yo estoy muy consciente de que lo amo. Pero no puedo ser honesto hasta que él demuestre que no está enamorado de Taemin –suspira–. Algo sumamente imposible.
– Pero le gustas.
Levanta la cabeza y sonríe con ironía.
– Es atracción sexual.
– ¿Cómo lo sabes?
No responde mi pregunta y vuelve a agachar la cabeza mordiendo su labio inferior.
– ¡Estuvieron juntos! –exclamo.
– No hyung, no. ¿Qué cosas dices? No, claro que no. Casi.
Relata Kyungsoo
Jongin me abraza con fuerza, el calor de su cuerpo me invade y siento que voy a derretirme como cubito de azúcar en el interior de una taza de café. Me cuesta tanto corresponderle que temo se aparte y no vuelva abrazarme, pero contrario a mis ideas tontas, los minutos transcurren demasiado lentos entre sus brazos y el aire espeso que se puede respirar en el interior de esa habitación llena de animaciones y dibujitos.
Jongin desliza su boca por mi cuello y una sensación fría y cálida me invade, la piel se me eriza y mi corazón se acelera. Jongin comienza a desabrochar los botones de mi camisa y deslizar su boca sobra la piel que va quedando expuesta. Mis ojos están cerrados sintiendo la ásperas de las manos de Jongin deslizarse con delicadeza sobre mi torso y pecho.
La camisa cae al suelo y Jongin me besa con fiereza, delineando el contorno de mis labios con su lengua. Un gemido se escapa de mi boca y eso es suficiente para que Jongin introduzca su lengua; su mano se desliza por mi espalda hasta mis glúteos apretándolos. Soy inexperto y no sé qué debo hacer y al parecer Jongin lo nota pues susurra en mi oído “Tócame”, su voz es mucho más profunda y sexy ahora.
Jongin vuelve a besar mi cuello con ternura y yo subo mis manos a su pecho, sintiendo el constante latido de su corazón, donde el “bum, bum, bum” es mucho más agitado. Doy un paso atrás inconsciente, Jongin uno hacia adelante sin dejar de besar mi cuello. Bajo mis manos hasta sus caderas y las deslizo por sus muslos, para volver por ellos hasta sus glúteos.
Vuelvo a dar un paso y tropiezo con la frontera de la cama cayendo sobre está trayendo a Jongin conmigo, pero es precavido y sostiene su peso con sus manos. Sin embargo, la posición no es muy alentadora. Su erección esta sobre mi muslo y la mía presionada contra el suyo. Jongin mueve su pierna provocando más fricción y gimo. Sonríe y vuelve a besarme, sosteniendo su peso ahora con una mano mientras la otra está desabrochando mi pantalón.
Jongin se levanta abre mis piernas arrodillándose entre ellas, rosando la parte externa de su muslo con el interior de mi rodilla. Besa mi torso y mis huesudas caderas e incluso mi ombligo. Toma el borde mi pantalón y levanto mis caderas para facilitarle sacarlo. Ni siquiera yo sé, a donde vamos a llegar pero la sola idea de hacerlo parar me atemoriza. Jongin desliza su índice por la liga de mi bóxer y humedece sus labios.
– ¿Puedo?
Afirmo moviendo la cabeza y Jongin comienza a bajar mi bóxer. Se levanta para terminar de quitar las prendas y retirar la suya. Vuelve a sentarse sobre sus rodillas y pasa sus manos sobre mi pecho acariciando mis pezones con sus pulgares, contorneándolos un poco.
– Eres hermoso hyung.
Me besa una vez más y yo acaricio su espalda dándome un poco más de libertad. Jongin toma su hombría en conjunto con la mía y comienza a mover su mano estimulándonos a ambos. Muerdo mi labio inferior para reprimir los gemidos y Jongin hunde su rostro en el hueco de mi cuello, mordiendo mi hombro. Su cuerpo tiembla sobre mí, el cosquilleo en mi estómago me avisa que también estoy cerca. Jongin lo hace primero sobre su mano y poco despues lo hago yo.
Pierde la fuerza de su brazo y cae sobre mi cuerpo, su respiración agitada choca con mi cuello haciéndome cosquillas e intento distanciarme. Pero me sujeta con fuerza y dice–: No hyung, quédate asi un rato más.
Fin del Relato de Kyungsoo
Mi boca está ligeramente abierta y debo suponer que mi cara es toda una revelación extraña pues Kyungsoo explota en carcajadas y golpea mi hombro.
– Hyung te ves horrible.
– Esto… yo… bueno no sé qué decir.
– No digas nada hyung es un alivio poder contárselo a alguien.
– Oh bueno. Que te puedo decir. Debí haber estudiado psicología.
*****
En la sala Yixing aun duerme plácidamente sobre el sofá y Baekhyun se está despertando. Kyungsoo y yo estamos sobre el suelo devorando el tazón de palomitas con nuestras tazas de chocolate caliente viendo Stuart Little. La puerta se abre y un Suho sudado entra seguido por Chanyeol, Tao y Kris.
Kai entra poco despues con una sonrisa en el rostro y una pequeña cajita fucsia en sus manos, Sehun entra detrás también sonriente y lleva en sus manos de igual forma una cajita pero color azul. Un poco más tarde entra Minseok y Chen muy sonrientes. Suho los observa detenidamente y pregunta:
– ¿Esas son camisas de pareja?
– Se la obsequie a Minseok hyung en año nuevo y decidimos estrenarlas hoy.
– Me encantan –exclama Baekhyun con una voz sumamente ronca y adormilada e inconsciente dice–: Chanyeollie debemos comprar unas.
Múltiples exclamaciones se escampan de los labios de los miembros y Chanyeol abre los ojos como platos, sufriendo de un breve tic. Baekhyun se muerde los labios y levanta del sofá echando a correr al interior de su habitación. Kyungsoo se levanta y lo sigue, detrás de él Jongin.
Sehun se sienta a mi lado y los miembros se dispersan. Extiende la cajita a mis manos y sonríe, observo el detalle incrédulo y abro la cajita. En el interior hay una flor de loto de arcilla color rosa.
– Sehunnie…
Relata Kris
Ensayo tras ensayo. Hoy ha sido un día sumamente agotador, nuestro coreógrafo ha venido a visitarnos para instruirnos en la nueva coreografía para el performance de este año. Pero he logrado colarme con la excusa de ir al baño exactamente como lo ha hecho Baekhyun hace unos minutos antes que yo. Aunque a decir verdad si necesitaba venir al baño.
Voy de regreso a la sala de ensayos y noto que la puerta de la sala contigua está ligeramente abierta, es probable que otro grupo este ensayando. Curioso, me acerco a la puerta y observo el interior pero todo lo que logro ver es a Baekhyun, serio, parado frente a Taeyeon.
– ¿Entonces estas terminando conmigo? –pregunta Taeyeon.
– Sí.
– Debí suponerlo. Ese Chanyeol te está volviendo loco y tú dejas que lo haga. ¿Cómo puedes preferirlo a él?
Baekhyun guarda silencio y desvía la mirada.
– Solo vete, pero si cruzas esa puerta espero puedas enfrentar las consecuencias.