Error por PanquequeS

Error

I erased all of my emotions…

Kyungsoo creyó, creyó que había encontrado la felicidad. Después de muchísimas decepciones, él creyó que por fin había logrado encontrar a una persona que lo respetaría, le daría felicidad, amor, comprensión, apoyo, que estaría con él, amándolo cada día, sin importar que, pero él debió saber que las cosas no eran perfectas.

Nunca lo eran.

Todo había comenzado cuando Kyungsoo había terminado con Minho. Kyungsoo había estado saliendo con Minho por dos años y todo iba de maravilla. Estaba seguro que Minho sería el definitivo pero se había equivocado, como solía ser siempre cada vez que Kyungsoo estaba en una relación.

Al pequeño chico de piel nívea le habían llegado rumores pero no los quiso creer. Baekhyun, su mejor amigo, se lo había dicho pero no quiso creerle y Chanyeol lo secundó pero se molestó tanto con sus amigos que terminó largándose en busca de su novio.

Kyungsoo había hablado con Minho y este último había negado todo, y él, como el tonto que siempre solía ser cuando estaba enamorado, terminó creyéndose todo. Incluso había tenido sexo y no le importó absolutamente nada, porque estaba con Minho y mientras el estuviese a su lado, todo iría bien.

Y hubiera seguido así; Kyungsoo locamente enamorado, haciendo y diciendo todo lo que su novio le pidiera, creyendo ciegamente en todo lo que su novio le decía pero nunca se esperó ver con sus propios ojos la traición de Minho.

Kyungsoo no podía–ni quería–creer lo que estaba viendo. Minho no. De todos aquellos, Minho no podía ser igual que todos sus ex-novios. Rogaba y pedía a gritos que todo fuese una mentira, que su cabeza había creado aquella escena totalmente falsa, que Kyungsoo sólo estuviese imaginando a Minho besándose con un chico de primero. Debía ser una mala jugada de su cabeza.

—Minho…-Susurró. El nombrado se separó del pequeño rubio que tenía en brazos y miró a Kyungsoo. — ¿Qué...?-negó, desesperado.

—Lo siento…-El más alto hizo el amago de acercarse a Kyungsoo pero una figura de su misma altura o quizá un poco más alta, apareció a espalda del pelinegro, así que detuvo toda acción que pretendía realizar. —Kyung, lo siento tanto.

—Tú no.-Sollozó el mencionado. — ¿Por qué me haces esto?-preguntó, sintiendo las lagrimas correrle por las mejillas. —Tú no.-negó desesperado.

—Kyungie…-Sintió un brazo rodearlo y otra persona se interpuso entre él y Minho, evitando que continuara viendo a su ahora, ex-novio. —Vámonos.

—No te quiero ver cerca de Kyungsoo.-Logró escuchar el mencionado. —Jamás te le acerques o juro por Dios que te partiré la cara.

Después de eso, Kyungsoo se la pasó llorando en brazos de Baekhyun, repitiendo una y otra y otra vez lo estúpido que había sido al no creerles a él y a Chanyeol que Minho lo estaba engañando. Sentía en demasía su estupidez y se aborrecía tanto por ser como era.

Kyungsoo era demasiado dependiente de su pareja–cuando se encontraba en una relación–y le hubiese encantado no serlo pero era algo que no podía corregir por más que todo le saliese mal en sus relaciones.

Era un inútil que no podía mantener a nadie a su lado. Primero habían sido sus padres quienes lo habían votado con el tiempo y ahora, todas las parejas que había tenido siempre terminaban engañándolo y era una herida más a su ya marchito corazón.

Kyungsoo se mantuvo deprimido por una larga temporada, hasta que Baekhyun, cansado de toda la mierda que estaba viviendo su amigo,  decidió que era mejor hacer entrar en razón a Kyungsoo antes que fuese más grave la cosa.

—Kyungie…-Le llamó, una vez que ambos se encontraban a solas, en la comodidad del departamento de Baekhyun.

—Hum.-Farfulló.

—Escucha con atención.-Baekhyun cogió la mano de su mejor amigo y este, lo miró. —Todo lo que ha pasado no fue tu culpa.-le aseguró. —Tú eres una excelente persona y no te merecías lo que Minho te hizo pero me preocupas.-Baekhyun lo miró con pesadumbre. —Me duele muchísimo verte tan deprimido por alguien que no vale la pena.

—Le di dos años de mi vida.-Murmuró Kyungsoo. —Creí que sería el definitivo.-sollozó. —y terminó siendo igual o mucho peor que los otros.-Baekhyun lo miró con tanta angustia que terminó envolviendo a Kyungsoo en un abrazo reconfortante.

—Lo sé…-Susurró. —Y lamento tanto que esto haya terminado así, Kyungie.-Baek separó a su mejor amigo y lo miró. —Pero debes entender que la vida sigue. Tú debes continuar y no estancarte. Encontraras a alguien mejor, que de verdad sepa apreciarte.

—No lo sé Baek…-Lloró. —Me han hecho tanto daño que no se si pueda seguir creyendo en algo o alguien, no sé si podré volver a enamorarme.-lagrimas bajan por aquellas sonrojadas mejillas y Baekhyun sintió que su corazón se apretujaba tan dolorosamente. —Tengo muchísimo miedo.

—No digas eso Kyungie.-Pidió Baekhyun. —En algún lugar debe estar el indicado.

—Baekkie…

—No pierdas las esperanzas.-El castaño le dedicó una sonrisa significativa que Kyungsoo, sin poder evitarlo correspondió. —Pronto lograras encontrar la felicidad a lado de alguien que de verdad valga la pena.-Kyungsoo no respondió verbalmente pero se esforzó en asentir. —Ahora, limpia esas lagrimas, mueve tu culo a tú departamento, arréglate que hoy nos vamos de juerga.

—Tú tienes novio.-Le recordó Kyungsoo a su mejor amigo.

— ¡Hey!-Chilló. —Yeol va con nosotros.

•

Eran alrededor de las once de la noche cuando Baekhyun, Chanyeol y Kyungsoo llegaron a uno de los tantos clubs que había en la ciudad. Era viernes, así que Baekhyun había decidido que hoy iba a ser día de tragos hasta sufrir un coma etílico.

Chanyeol, quien lo había oído, frunció el ceño pero no dijo nada porque Kyungsoo y  Baekhyun sabían que el más alto no iba a permitir tal cosa. 

Una vez que los tres habían encontrado una mesa vacía, ocuparon el lugar y Chanyeol fue a la barra a pedir las bebidas, mientras que los más pequeños miraban el lugar.

—Nunca había venido a este club.-Le gritó Kyungsoo a su mejor amigo.

—Este lugar es bastante cool.-Le respondió el castaño. —Hoy vamos a divertirnos como nunca.-rió.  Kyungsoo lo miró no tan seguro. Él todavía se encontraba un poco triste con la ruptura de hace… ¿De hace cuanto?, ¿Un mes? ¿Dos?, Kyungsoo sin darse cuenta lo había olvidado.

Cuando Chanyeol regresó, le entregó a Kyungsoo su bebida y este lo tomó sin preguntar que era. El líquido que bebió le quemó la garganta pero se recompuso en cuestión de segundos.

Kyungsoo comenzó a consumir alcohol como si lo que estuviese bebiendo fuera agua, pero Chanyeol ni Baekhyun lo detuvieron–por ahora–porque sabían que el pelinegro necesitaba, de alguna manera, liberarse.

En algún momento, después de, tal vez una hora de a ver llegado al lugar, Kyungsoo se puso de pie y se alejó de la mesa. Caminó en dirección a la barra y con esfuerzo llegó para luego pedir otra copa de-esa-bebida-colorida-que encontraba agradable para ese entonces.

Cuando tenía planeado regresar a la mesa, chocó contra algo duro. Toqueteó lo que sea que tenía enfrente hasta que se dio cuenta que lo-que-sea-que estaba en sus narices era el pecho de alguien.

Kyungsoo alzó la mirada y sus ojos chocaron con otro par de ojos, que lo miraban, escrutándolo con demasiada atención. Para ese momento, Kyungsoo comenzaba a sentirse abrumado y viendo que todavía tenía sus pequeñas manos en el pecho de aquel muchacho, las retiró, como si aquel pecho le quemase sus blanquecinas manos.

—Lo siento.-Murmuró y el muchacho que tenía enfrente se inclinó hasta estar a casi nada de su rostro

— ¿Decías algo?-Le gritó, sonriente.

—Lo siento.-Repitió, gritando más alto. —No vi por donde iba.-se excusó rápidamente. Kyungsoo sólo quería regresar a la mesa donde se encontraban sus amigos.

—Tranquilo.-Kyungsoo observó cada movimiento que hacía la persona que tenia enfrente. —Tampoco me fije por donde iba.-ambos se quedaron mirando, sin moverse o decir algo. Kyungsoo sintió que todo a su alrededor se congelaba y algo dentro de él se agitaba violentamente y mierda, tenía que moverse.

—Debo irme.-Dijo sin más. Se movió y pasó a lado de aquel chico de piel color canela. Cuando regresó a su mesa, se sentó y le dio un pequeño sorbo a su bebida. Esta vez pensaba tomar con tranquilidad todo lo que sea que fuese a consumir, ya no quería chocarse con alguien más o volver a chocarse con aquel chico que había provocado algo en Kyungsoo.

—Hey Kyungie.-Baekhyun le habló y este le prestó toda su atención a su mejor amigo. —Vamos a sacudirnos un poco.

—Paso, Baekkie.-Respondió Kyungsoo pero él notó el cambio evidente en el rostro de su mejor amigo.

—No te he preguntado.-Le soltó. —Vamos a bailar y se acabó.-Kyungsoo hizo un tierno mohín y no pudo negarse porque Baekhyun lo cogió de la mano y lo llevó a la pista de baile. Kyungsoo se vio obligado en contonear sus caderas por insistencia de su amigo y aunque comenzó tan tieso, sin moverse casi nada, poco a poco su cuerpo fue soltándose.

Minutos después se encontraba bailando sin parar con Baekhyun y Chanyeol–quien cegado por los celos, se acercó a ellos a cuidar a ambos chicos pero más a su pequeño novio–y había consumido más alcohol de lo que ya había estado ingiriendo.

Para ese momento, Kyungsoo ya había dejado–o mejor dicho, lo poco que quedaba–de pensar en Minho y se había dedicado a divertirse, y disfrutar todo lo que fuese posible de la vida. Él estaba seguro que sería así, que por ahora, no tendría que pensar y preocuparse por una relación que muy posiblemente con el tiempo se iría a la mierda y Kyungsoo, sería el único que terminaría llorando y con un golpe más en su corazón, del cual, Baekhyun y Chanyeol se harían responsable en sanar.

El pelinegro se movía de manera sensual sin llegar a lo vulgar, disfrutando únicamente de la música y de pasarla increíble, y hubiese sido así, si no fuese por su torpeza–y todo el alcohol ingerido–nunca habría ido a chocar con Dios sabrá quién, y esa persona lo había cogido de la cintura para evitar que él se cayera.

—Jejejeje.-Rió ya bastante ebrio. —Lo siento.

— ¡Eh, eres tú!-Kyungsoo alzó la mirada, para volver a encontrarse con aquellos ojos color chocolate.

—Ah…-Kyungsoo no pudo decir más porque simplemente no podía articular nada.

— ¿Bailas?-Preguntó y a Kyungsoo se le desencajó la mandíbula. — ¿Hola?-el más alto de piel canela, sonrió divertido. — ¿Eso qué significa?

— ¿P-pe-eerdón?-Los enormes ojos de Kyungsoo parpadearon una, dos, tres, muchas veces.

—He preguntado si gustas bailar…-Dijo y Kyungsoo lo vio dudar por unos segundos pero luego se vio decidido y agregó: —Conmigo, por si no me entiendes.-le aclaró, con diversión.

—Oh…-La mente de Kyungsoo, que ya se encontraba en un estado de letargo, no comprendió las palabras de su acompañante y si no fuese por la intromisión de Baekhyun, él nunca hubiese respondido.

— ¿Le conoces?-quiso saber y Kyungsoo no hizo más que mirarlo. —Disculpa a mi amigo.-dijo Baekhyun–quien no estaba completamente sobrio–al chico de piel canela. —Pero está un poco ebrio y creo que su cerebro se le ha atrofiado.

—Vale, esta bien.-Sonrió. —Soy Jongin pero puedes llamarme Kai.

— ¿Kai?-Preguntó Baekhyun, tratando de hacer memoria. ¿De dónde había oído ese nombre? —Baekhyun.

—Un gusto.-Sonrió Kai y luego dirigió su mirada al otro chico de pequeña estatura. — ¿Él tiene nombre?-quiso saber.

—Él se llama Kyungsoo.-Contestó Baekhyun. — ¿Puedes hacerme un favor, Kai?-el nombrado dudó pero terminó asintiendo. — ¿Podrías llevar a Kyungie a nuestra mesa?, iré en busca de mi novio y nos marcharemos ya.

—Seguro.-Aceptó Jongin, acercándose a Kyungsoo para luego cogerlo de la muñeca. — ¿Cuál es su mesa?-Baekhyun le señaló y Kai asintió, comenzando a arrastrar con él al desorientado Kyungsoo. — Eh, Kyung, ¿te han comido la lengua?-bromeó.

— ¿Q-qq-qué?-Después de varios minutos, cuando ambos ya se encontraban en la mesa donde había estado Kyungsoo bebiendo hace horas atrás, despertó de su letargo. — ¿Qué?-repitió.

—Vaya, si que estas bastante ebrio.-Rió divertido Kai.

—No estoy ebrio.-Se defendió Kyungsoo. Posiblemente no estaba tan ebrio como todos creían o a lo mejor sí, ya no estaba seguro. —Sólo…sólo…-no continuó hablando porque no sabía cómo responder eso, puesto que Jongin fue el culpable de que él entrara en un trance y el alcohol que había ingerido.

—Es tan divertido estar a tu lado.-Habló Jongin, capturando la atención de Kyungsoo rápidamente.

—No me conoces…y yo tampoco te conozco.-El pelinegro frunció el ceño.

— ¿Y?-Arqueó la ceja.

— ¿Cómo que “y”?-Preguntó, enfurruñado Kyungsoo. —No puedes hablar tan a la ligera. No soy divertido, sólo estoy ebrio.-terminó soltando.

—Hace un segundo dijiste que no estabas ebrio.-Rió divertido Kai.

— ¡No sé ni que estoy diciendo!-Chilló Kyungsoo, provocando que se tambalease hacia atrás y estuvo a nada de caerse de culo, si no fuese por aquellos fuertes brazos que lo rodearon.

—Oye, ten cuidado.-Le dijo, cerca de su oído. —Te vas a terminar lastimando si no tienes cuidado.

—Estoy bien.-Farfulló

—No, no lo estas.-Aseguró Jongin. —Siéntate y espera a que tú amigo vuelva.-Kyungsoo no rechistó, es más fue obligado a tumbarse en el asiento y esperar que su mejor amigo regresara con Chanyeol. A los diez minutos, Kyungsoo los vio acercarse y cuando creyó que ya nada más podía dejarlo en blanco, pasó lo más inesperado.

— ¿Kai?-Tanto Kyungsoo–aunque este estaba demasiado ebrio– como Baekhyun, miraron a Chanyeol.

— ¿Chanyeol?-El moreno miró a su amigo y sonrió. — ¿Qué haces aquí?-preguntó.

—He venido con mi novio y Kyungsoo.-Respondió, señalando a cada uno.

— ¿Él es tú novio?-Preguntó sorprendido Kai. —Vaya, que coincidencia.

—Sí…-Chanyeol le dirigió una mirada a Kyungsoo que él no supo entender, para luego volver a dirigir su mirada a Kai. —Gracias por cuidar a Kyungsoo, Kai.-el más alto se acercó donde se encontraba tumbado el pelinegro y lo cogió del brazo. —Pero ahora debemos marcharnos. Kyungie no está nada bien.

—Te ayudo a llevarlo.-Se ofreció Jongin y Chanyeol volvió a mirarlo por largos segundos hasta que negó.

—Puedo encargarme yo solo, Kai.-Le aseguró. Chanyeol miró a Kyungsoo y le sonrió con ternura, como si él fuese un padre enternecido al ver a su pequeño bebé. —Vamos Kyungie, vamos a casa.

—Hum.-Murmuró un muy ebrio Kyungsoo. El pelinegro ya estaba cayendo a la inconsciencia que, probablemente, mañana amanecería con una resaca de lo más mierda y que, tal vez, no se acordaría del chico de piel canela, de esos ojos color chocolate, sonrisa encantadora y de mirada abrasadora.

Kyungsoo estaba jodido porque seguramente sí que se acordaría de ese chico o tal vez no, no se sabría que esperar porque el pelinegro no logra recordar muy bien como es habitualmente cuando esta ebrio hasta la médula, así que muy internamente, con esperanza y añoranza esperaba no acordarse jamás del amigo de Chanyeol.

—Te acompaño hasta que puedan coger un taxi.-Se volvió a ofrecer Kai y Chanyeol frunció el ceño.

—Está bien Kai, traigo auto así que no hay problema.

—Insisto.-Chanyeol sospechaba algo, porque él conocía a Kai.

— ¿Qué estas tramando?-Le preguntó sin rodeos el más alto.

—Absolutamente nada.-Respondió Kai pero Chanyeol no se tragó ni media palabra.

—Déjalo estar Kai….-Chanyeol negó. —Sea lo que sea que estés planeando, déjalo ya.

— ¿De qué estás hablando, Chanyeol?-Le cuestionó Kai.

—Te conozco y lo sabes.

—Me estas juzgando con rudeza.

—Aléjate de Kyungsoo.-Le advirtió el más alto.

— ¿Quién ha dicho que voy por Kyungsoo?-Preguntó con sorna Kai. — ¿Qué si voy por tú novio?-inquirió.

—Date por muerto si vas por mi chico.-Baekhyun, quien no estaba tan lejos de quedar en la inconsciencia, miraba a los más altos con curiosidad pero sin lograr entender media palabra, así que cansado de estar de pie, se acercó a su novio y jaló de su brazo para llamar su atención, que la obtuvo en segundos.

—Channie.-Canturreó Baekhyun. —Channie, estoy muy mareado.-hizo un mohín. —Vamos a casa ya.-pidió.

—Ya Baekkie.-Le aseguró Chanyeol, cogiendo con su otra mano, la pequeña y delicada mano de su novio. —Nos vamos ahora.-Chanyeol miró de reojo a Kai y suspiró. —Hablo enserio. No quiero verte cerca de Kyungsoo.-le advirtió.

—Chanyeol…-Siseó Kai y pensaba continuar pero terminó cerrando la boca y le regaló una sonrisa de disculpa anticipada.

—Ni se te ocurra…-Le dijo mordaz. —Juro que pierdes todo tipo de contacto conmigo si llegas a lastimar a Kyungsoo.

—Yeol.-Se volvió a meter Baekhyun, jalando la mano de su novio. —Vámonos ya.-gimoteó.

—Nos veremos después Yeol.-Se despidió Kai y Chanyeol frunció más el ceño. No, jamás, él no permitiría que Kai se acercara a Kyungsoo.

—Bye.-Canturreó un ebrio Baekhyun, agitando su pequeña mano de un lado a otro y eso provocó que Kai riera divertido y luego, toda su atención cayó en el pelinegro que había estado en silencio todo ese momento. Al parecer sí que estaba muy ebrio porque apenas podía mantenerse en pie.

—Adiós Baek.-Se despidió Kai y luego se dirigió a Kyungsoo. —Adiós Kyung.-el interpelado parpadeó.

—Bye.-Dijo y luego volvió a su estado de letargo. “Lindo” pensó Jongin. Chanyeol no perdió más tiempo y jaló de sus dos pequeños tesoros porque sí, para Chanyeol, ese par había sido lo mejor de toda su vida. Había comenzando con una linda amistad y con el tiempo él terminó enamorándose de Baekhyun y convirtiendo a Kyungsoo en su mejor amigo. Eran un trío inseparable y lo que más odiaba Chanyeol–el chico que siempre sonría sin importar la situación–era que hicieran sufrir a ambos chicos y él ya había tenido muchísimo con todo lo que le había pasado a Kyungsoo.

••

Cuando Kyungsoo despertó, el maldito dolor de cabeza lo hizo volver a tumbarse en la cama y esconder su cara en la almohada. Gimió de dolor porque no había tenido jamás un dolor tan insoportable como el que estaba teniendo o tal vez si pero desde que había comenzado a salir con Minho no había bebido nada pero bueno, su ex-novio ya no era importante.

Lo que era importante en ese momento era quitarse ese dolor de cabeza. La resaca lo mataba lentamente y a Kyungsoo no le gustaba estar con tremendo dolor. Lo odiaba y es ahí cuando recordaba lo que Chanyeol siempre le decía a él y a Baekhyun cada vez que se pasaban de copas: “Se los he advertido, par de cabezotas pero jamás me escuchan”. Dios, Kyungsoo debería aprender oír de una vez por todas.

Volvió a gemir pero puso de toda su fuerza de voluntad hasta que se bajó de la cama y caminó al baño. Se mantuvo de pie por unos largos minutos hasta que las arcadas llegaron y se vio obligado a tumbarse en el piso y vaciar todo en el váter.

Ew, lo que Kyungsoo odiaba de beber es que terminaba con resaca y con su cara pegada al váter. Ugh, lo odiaba mucho. 

Cuando terminó de regresar todo el alcohol que había ingerido la anterior noche, se metió a duchar y sí, hasta ese momento se percató que estaba en el departamento que compartía Baekhyun con Chanyeol. Debió suponer qué el más alto no lo dejaría solo. El agua caliente lo relajó de sobremanera y suspiró aliviado. Sólo quedaba que él tomara algún medicamento para que le cortara el infernal dolor de cabeza que mantenía.

Salió de la regadera y se cambió con unas cuantas ropas de Baekhyun. Bajó las escaleras y caminó hasta la cocina, abriendo la gaveta donde podría encontrar el medicamento que necesitaba urgentemente. Con la pequeña pastilla en mano, cogió un vaso lleno de agua y se llevó la pastilla a la boca para luego beber el agua. Dios, lo necesitaba tanto.

Se sentó en un taburete de la cocina y se apoyo en la barra, escondiendo su cabeza entre sus brazos. Pedía a gritos que el dolor disminuyera porque si no iba a estar de un humor de lo más peor.

Kyungsoo tuvo una escena retrospectiva y Jesucristo, no debió tenerlo, no, no, no, no. Sabía, él muy en fondo sabia que terminaría acordándose de aquel muchacho que había conocido ayer en el bar.

Se acordó de su estado de letargo. Recuerda a Chanyeol cogiéndolo de la mano. Recuerda que Chanyeol llamó al moreno como Kai. Recuerda que vio a ambos hablando pero no recuerda lo que decían. Recuerda a Kai despidiéndose de él y a él aun en un estado de letargo, prácticamente estaba quedándose inconsciente. De verdad no debió beber.

Ahogó un quejido pero sintió arder sus mejillas. Aquel muchacho era definitivamente caliente. Si, esa era la descripción grafica que tenia Kyungsoo de Kai. Gimoteó por largos minutos hasta que Chanyeol junto a su pequeño y quejica novio, entraron en la cocina.

— ¿Te duele mucho la cabeza, Kyungie?-Preguntó Chanyeol y Kyungsoo asintió, aunque apenas las pastillas comenzarían a surgir efecto. — ¿Has tomado la medicina?-quiso saber el más alto.

—Ya, Yeol.-Respondió sin más, volviendo a esconder su cara entre sus brazos. — ¿Cuánto bebí anoche? Dios, estoy muriendo.-y era verdad pero en ese “estoy muriendo” le faltó especificar debió a que. Bien, el dolor entraba en eso pero también la vergüenza que sentía por recordar lo estúpido que se miraba anoche en frente de ese Dios griego.

—Muchísimo, amiguito.-Respondió Chanyeol, cogiendo un vaso con agua para su adolorido novio que lloriqueaba sin parar. —Al igual que mi diva.-rió divertido. —Se los he advertido, par de cabezotas pero jamás me escuchan.-y ahí estaba Chanyeol riñéndolos.

—Para, para, para.-Gimotearon los dos.

—Hablo enserio.-Dijo después de terminar de reírse. —Beben como si el mundo se fuese acabar.

—Lo necesitábamos.-Se defendió Baekhyun. —Kyungsoo lo necesitaba y no lo iba a dejar beber solo.

—Bueno, lo necesitaban y ahora lo aguantan, quejicas.-Riñó Chanyeol y los más bajitos lloriquearon. Chanyeol los ayudaba sí, pero luego los jodía hasta que ellos terminaban gritándole al más alto que jamás volverían a beber pero nunca cumplían eso.

•••

El lunes llegó y terminó tan rápido que Kyungsoo sintió que Dios se estaba apiadando de todo el alumnado de su universidad. Chanyeol y Baekhyun se habían ido pronto y él dijo que los iría a ver dentro de un par de horas porque tenía que terminar de hacer algo, así que se había quedado en la biblioteca de la universidad hasta que terminó y salió de la universidad.

Había caminado muy poco cuando sintió que alguien lo cogía de la muñeca y eso provocó que él se sobresaltara.

—Wow, calma.-Rió y Kyungsoo supo en ese entonces quien era. El toque era familiar y la voz, esa voz era inolvidable. —Kyungsoo, ¿verdad?-el pelinegro volvía a quedar en un estado de letargo pero rápidamente sacudió su cabeza, volviendo en sí.

—Sí.-Respondió en voz baja.

— ¿Me recuerdas?-Preguntó. —Soy amigo de Chanyeol, Jongin, pero puedes llamarme Kai.-Kyungsoo pensó que Jongin sonaba más bonito.

—Te recuerdo.-Respondió. Ambos se quedaron en un silencio sepulcral hasta que la encantadora risa de Jongin rompió el tortuoso silencio.

—Seguro que estuviste con un dolor de cabeza infernal.-Rió divertido y Kyungsoo, se sintió cohibido. El chico tenía un lado tierno y Dios, si no se desmayó fue porque no quería quedar como el idiota que era.

—Hum.-Murmuró.

— ¿Te sientes mal?-Preguntó Jongin y el pelinegro sacudió su cabeza en respuesta. —Te pusiste igual ese día en el club. Creí que era por que estabas ebrio.-rió. —Pero veo que es un hábito para ti.-Kyungsoo pensó en cómo responder eso pero simplemente comenzó a retorcerse las manos.

— ¿Has venido a buscar a Chanyeol?-Preguntó, para luego agregar: —Él ya se ha ido con Baekkie.

—Con razón.-Dijo Jongin. —Si no, ese par estuviera pegado a ti.

—Sí, creo.-Kyungsoo hizo un mohín sin darse cuenta y Jongin lo vio y se guardó esa imagen.

—Y a tú pregunta; no, no he venido a ver a Yeol.-Contestó. —He venido a verte.-aquello sí que dejó anonado a Kyungsoo y lo miró con cara de no entender nada porque realmente no le entendía. ¿Verlo a él? ¿Para qué ese chico-tan-caliente quería verlo?

— ¿A mí?-Preguntó en voz quedita. — ¿Por qué?-quiso saber.

—Ese día en el club…-Comenzó Jongin. —Me has besado.-Kyungsoo abrió y cerró la boca sin decir absolutamente nada. —Y he venido a regresártelo.

— ¡¿Qué?!-Chilló, totalmente sonrojado. — ¡No puedes estar hablando enserio!-negó una y otra vez. —Se que bebí muchísimo esa noche pero no me hubiera atrevido a besarte.-negó de nuevo. — ¡Estas mintiendo!-le acusó, no tan seguro. ¿Y que si de verdad lo había besado y él no lo recordaba? ¡Dios, debía ser una equivocación!

—Hablo enserio, Kyung.- ¡Dios, no! Era imposible. Debía ser una equivocación. Tenía que ser una equivocación. —Mientras que Baek fue en busca de Yeol, nos quedamos juntos y bueno, pasó lo que pasó.-Kyungsoo gimoteó, ignorando completamente a Jongin. ¡Bien, ahí estaba la respuesta que Kyungsoo estaba buscando desde que vio a Jongin esa noche! Le gustaba y mucho. ¿Pero atreverse a besarlo? Debía estar jodidamente ebrio.

— ¡Lo siento muchísimo, Jongin!-Exclamó. — ¡Juro que yo no quería besarte, enserio!-caminó de un lado a otro, tratando de controlarse pero no lo lograba controlarse para nada. — ¡Dios santo, no quería, lo juro! ¡¿Que estupidez estaba haciendo?!-lloriqueó. — ¡Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento!

—Eh, Kyung.-Jongin se acercó y lo sujetó por los hombros. —Cálmate. No fue nada, enserio.-el más alto, muy a pesar de todo disfrutaba lo que causaba en Kyungsoo, enserio que sí. —Pero sí te voy a besar.- ¿Había escuchado bien? ¿Jongin acababa de decir que lo iba a besar? ¿Estaba de coña?

—¡¡¿Estas de coña?!!-Chilló, totalmente sonrojado.

—No pero no te besaré…-Sonrió con diversión. —No ahora.-Kyungsoo se había quedado totalmente frío con la respuesta de Jongin. ¿Qué significaba eso? — ¿A dónde vas?-preguntó el más alto pero el pelinegro no respondió. Aun se encontraba vagando en su cabeza, tratando de comprender todo lo que Jongin le había soltado. —¿Kyungsoo?-el nombrado se sobresaltó cuando sintió la cálida respiración de su acompañante chocar contra su mejilla.

—¿Qué?-Preguntó desorientado.

—¿A dónde vas?-Susurró Jongin, estremeciendo al más pequeño. —Te acompañaré.

—Oh…-Blanco. Kyungsoo no podía pensar en nada porque todo estaba blanco. No podía salir del aturdimiento. Jongin causaba eso en todos y Kyungsoo no fue la excepción y él lo supo y adoro la forma en la que el pelinegro expresaba todo. —Al departamento de Baek y Yeol.-respondió.

—Vamos entonces.-Jongin jaló de Kyungsoo y caminaron hasta llegar a un auto que se encontraba aparcado en la acera. Un increíble Mercedes-Benz. Jongin le abrió la puerta del copiloto y Kyungsoo subió. Continuaba aturdido así que cuando salió de su trance autoimpuesto, el auto de su acompañante estaba en movimiento y escuchó a Jongin llamarlo.

—¿Qué?-Preguntó por fin. Su mente ya estaba funcionando normal, por fin.

—¿Dónde es?-Preguntó divertido. —El departamento de Chanyeol y Baek.

—Oh sí.-Kyungsoo puso la dirección en el GPS y el transcurso fue en completo silencio hasta que el móvil del mismísimo Kyungsoo timbró, haciéndolo sobresaltar. —¿Hola?-respondió el llamado.

—¿Ya has salido de la universidad?-Le preguntó Baekhyun. —Chanyeol y yo estamos esperando por ti.

—Sí…-Respondió.

—¿Quieres que vayamos por ti?

—No Baekkie.-Respondió Kyungsoo. —Jongin esta llevándome a tú departamento.

—¿Jongin?-Baekhyun se quedó en silencio y luego lo escuchó hablando con Chanyeol. —¿De casualidad es el amigo de Channie?-quiso saber.

—Exactamente.-Dijo. Volvió a escuchar a Baekhyun hablando con Chanyeol. — ¿Por qué?

—Uh huh…-Baekhyun no supo que decir por varios segundos hasta que se armó de valor y dijo: —Kyungie, estas en problemas.

—¿Qué? ¿Por qué?-Nunca terminaría de entender a sus amigos. Jamás. —No he hecho nada.

—Tampoco yo lo sé…-Contestó Baekhyun. —Chanyeol se puso furioso de la nada y te lo estoy contando porque se ha largado al piso de arriba. No sé qué le pasa.-Kyungsoo escuchó atentamente y le extrañó de sobremanera la forma de actuar del yoda, como suele llamarle Baekhyun cuando se enfada con Chanyeol. —¿Estas bajándome a mi novio?-preguntó el castaño en son de broma.

—Ew, nunca.-Rió divertido Kyungsoo, ignorando completamente que seguía en el auto de Jongin y sólo se acordó que estaba con él, cuando escuchó el timbre de otro móvil. —Hey Baek, pronto estaré ahí, así que te corto ya.

—Vale Kyungie. Nos vemos en un rato y mientras llegas trataré de controlar a papá Chanyeol.

—Por favor…-Kyungsoo cortó la llamada y aun podía escuchar el timbre del móvil de Jongin. —¿No vas a responder?-preguntó. Kyungsoo obviamente estaba incomodo por todo y si se había subido al auto de Jongin es porque no estaba consciente.

—No lo creo.-Respondió divertido. —Prefiero ahorrarme esa llamada.

— ¿Qué si es importante?-Al menos hablaban un poco pero Kyungsoo no sabría cuánto duraría.

—Sé quién es y te aseguro que no es importante.-Jongin lo miró de reojo y el pelinegro se sonrojó. Demonios, tenía que controlarse. No podía ni debía estar sonrojándose cada vez que Jongin lo mirara. —¿Desde hace cuanto conoces a Chanyeol?-y ahí estaba Jongin tratando de evitar el funesto silencio.

—Cuando entramos a la universidad.-Respondió. —¿Y tú?

—Desde Kindergarten.-Respondió. —Somos vecinos. Bueno, éramos vecinos.

—Oh…-Kyungsoo ya no supo que más decir así que volvió a quedarse en silencio y mejor optó por mirar el paisaje por la ventana. Jongin le dio su espacio, porque tarde o temprano, tendría a Kyungsoo. Eso era lo que quería desde esa noche que lo conoció y Chanyeol lo sabía y eso quería evitar pero para Kai, todo era posible, así que si él quería a Kyungsoo, lo tendría.

Cuando llegaron a la zona departamental donde vivía Chanyeol con Baekhyun, Kai estaba tentado a bajar y subir junto a Kyungsoo pero no iba ser posible. Chanyeol estaba ahí y lo estaría vigilando y no, eso no le convenía.

—Llegamos.-Avisó y Kyungsoo asintió.

—¿Vas a subir?-Curioseó.

—¿Quieres que suba?-Jongin arqueó coquetamente su ceja y sonrió, provocando muchísimas cosas en Kyungsoo y él lo sabía y disfrutaba de ello. Jongin esperaba que el pequeño chico respondiera pero no dijo nada. Lo único que vio Jongin fue a Kyungsoo poniéndose rojo y era tan encantador. Le encantaba, definitivamente le encantaba. —Responde.-demandó.

—Eh, yo…yo…-Jongin vio a Kyungsoo tratando de responder pero el pelinegro se trababa todo y prefirió reírse.

—Está bien.-Miró por la ventana y pudo ver como Chanyeol junto a Baekhyun salían del elevador. —¿Me das tu número de móvil?-preguntó. Tenía que pedírselo inmediatamente y esperaba que Kyungsoo no se pusiera todo torpe porque Chanyeol estaba cada vez más cerca. —Por favor.-agregó.

—Seguro.-Kyungsoo compartió su número de móvil con Jongin y luego, la puerta de su lado fue abierta tan inesperadamente que lo tomó por sorpresa.

—Baja.-Escuchó la gruesa voz de Chanyeol.

—¿Eh?-Lo miró. Su amigo estaba completamente raro el día de hoy.

—Repito: Baja.

—Hey Channie.-Intervino Baekhyun. —¿Qué te sucede?-el más alto ignoró a su pequeño y preocupado novio y cogió de la muñeca a Kyungsoo.

—Que bajes te digo.-Jaló del brazo de Kyungsoo y lo sacó del auto de Jongin. Este miró divertido a Chanyeol porque él sabía, sabía que Chanyeol metería las manos al fuego por Kyungsoo, porque el más alto, sabía qué clase de persona era él. —Suban.-les ordenó a los más pequeños.

—¿Chanyeol?-Kyungsoo lo miró con esos enorme ojos y demonios, quería partirle la cara a Jongin. No, Kyungsoo no.

—Sólo suban.-Dijo, tratando de guardar la calma. —Hablaré un momento con Kai.-informó.

—Está bien.-Asintieron ambos y se despidieron de Jongin como pudieron porque el cuerpo de Chanyeol se interponía. El más alto vio entrar a los más bajitos y se giró para encarar a Jongin.

—Te dije que lo dejaras…-Siseó. —Eres mi amigo, Kai.-le recordó. —Pero Kyungsoo también lo es y no permitiré que juegues con él.

—Sí más te interpones, más me voy a encaprichar, Yeol…-Respondió con calma Kai. —Sólo deja que suceda.

—Jamás.-Ladró. —Kyungsoo no.

—¿Estas enamorado de Kyungsoo?-Preguntó con sorna Kai. —Creí que estabas con Baekkie.

—Estoy locamente enamorado de mi novio, Kai…-Respondió Chanyeol, tratando de controlar su furia. Él era un hombre pacífico, no podía ni debía ponerse agresivo ahora. —Pero Kyungsoo es mi mejor amigo y no quiero que lo lastimes. Él no lo merece y ya ha tenido suficiente de esta mierda para toda una vida.

—Deja seguir el curso de las cosas, Yeol.-Habló Jongin.

—¡No!-Exclamó. —Te lo estoy diciendo desde ya Kai, aléjate de Kyungsoo.-suspiró una, dos, tres y muchas veces. —Es lo mejor para él. No necesita que llegues tú y le arruines la vida. Lo vas a joder…

—Claro amigo, lo voy a joder muy duro que hasta gritara mi nombre…

—¡Mierda Jongin, para de una puta vez!-Gritó. —No me refiero a eso, idiota. Vas a joderle la vida totalmente a Kyungsoo y él ya esta jodido con toda la mierda que lo rodea y si tú llegas y descompones todo lo que a Baek y a mí nos ha costado reparar, te juro por Dios que te pateare el culo y me olvidaré que alguna vez fuiste mi amigo.-sentenció. Jongin pensó, en ese corto lapso, como apaciguar a Chanyeol, dejarlo tranquilo, hacerle creer que quería a Kyungsoo. Como, como hacer para que el más alto le creyese.

—No la voy a cagar…-Susurró. —Me gusta, enserio que Kyungsoo me gusta. Muchísimo.-y bueno, no era totalmente mentira. Claro que le gustaba el pelinegro, le había encantado, le hechizado desde el momento que lo vio ese día en el club. —Kyungsoo puede ser esa persona que he estado buscando, Yeol…-Jongin lo vio. Vio en los ojos de Chanyeol la espinita de la duda.

—Dijiste que lo vas a joder muy duro…-Habló Chanyeol. —Sólo estas buscando follarlo.

—¿Tú no follas con tu novio?-Arqueó una ceja y vio a Chanyeol enrojecer pero ignoró ese hecho y esperó la respuesta del más alto.

—Bueno sí, pero eso es diferente.

—¿Cuál es la diferencia?-Exigió. —¿Cuál es la puta diferencia? ¿Que yo no amo a Kyungsoo? ¡Puedo amarlo con el tiempo!-exclamó. —Puedo enamorarme completamente de él con el tiempo, puedo hacerlo. ¡Maldición Yeol, me gusta, enserio que me gusta muchísimo Kyungsoo!-Kai esperó, esperó a que Chanyeol creyese en sus palabras, porque así daba luz verde para que él continuará cortejando al pelinegro.

—Te daré el beneficio de la duda, Kai.-Dijo Chanyeol, cerrando la puerta del auto del moreno.

—Gracias Yeol…-Susurró Kai y Chanyeol lo miró, lo miró con recelo autentico pero le había dado una oportunidad y esperaba sinceramente que no la jodiera porque perdería su amistad para siempre y terminaría jodiendo muchísimo a Kyungsoo y, posiblemente Chanyeol lo golpearía.

Cuando Kai miró que su amigo entraba al edificio, sonrió. Era como si fuese el gato Cheshire, con esa amplia sonrisa pero esa enorme sonrisa llevaba pintada la victoria. Lo había logrado aunque estaba seguro que Chanyeol le había creído muy poco.

**

Baekhyun se encontraba sentado en su amplio sillón. A su lado, se encontraba un nervioso Kyungsoo. Ninguno de los dos sabia que pasaba con el más alto y les preocupaba muchísimo porque jamás habían visto así a Chanyeol.

—¿Que le sucede?-Soltó Baekhyun. —No lo comprendo.-Kyungsoo se encogió de hombros. —Estaba bien hace rato y luego, ¡Bum! Se pone como loco

—A lo mejor alguien le mandó mensaje o llamó para que se pusiese así…-Trató de apaciguar a su mejor amigo. —Se le pasara.

—Eso espero…-Murmuró y luego, de la nada, el rostro de Baekhyun se iluminó. —¿Que hacías con Kai?-se giró para encarar al pelinegro. Kyungsoo enrojeció completamente y trató de esquivar los ojos de Baekhyun pero en ese momento, supuso que su mejor amigo ya lo sabía. —¡Te gusta!-chilló. —¡Te gusta Kai!

—Oh por favor Baekkie, sólo cállate.-Murmuró Kyungsoo, avergonzado.

—¡No lo estas negando!-Se carcajeó. —Dios, esto es maravilloso. Debes comenzar a salir con él.-le aconsejó. —No lo conozco pero he escuchado a Chanyeol hablar de vez en cuando de Kai y dice que es un buen tío.-y no mentía. Chanyeol decía que Kai era un buen tipo pero nunca dijo que era un excelente novio.

—Sí bueno…-Suspiró. —Creo que hice un gran estupidez el fin de semana pasado…-enrojeció más.

—¿Que has hecho, Kyungie?-Preguntó curioso Baekhyun, dándose cuenta de lo rojo que se encontraba su mejor amigo.

—Kai llegó hoy a verme a la universidad…-Comenzó y Kyungsoo sabía que tenía toda la atención de Baekhyun. —Le pregunte si buscaba a Chanyeol y dijo que no. Fue por mí…-Baek se contuvo de soltar un gritito nada masculino. —¡Ay Baek!-Kyungsoo estaba completamente rojo de la vergüenza. —Lo he besado en el club.

—¡¿Qué?!-Gritó Baekhyun. —No recuerdo mucho.-comentó.

—Tampoco lo recuerdo…-Se sinceró el pelinegro. —Jongin me ha dicho que lo he besado y él quería besarme.

—¡Oh Dios Kyungie, eso es increíble! ¿No te beso?

—No…-Dijo con pena. —Pero Dios mío, Baek, lo bese y si él no me hubiera dicho, jamás me hubiera enterado que lo había besado esa noche.

—Estoy seguro que Kai quiere algo contigo.-Dijo convencido Baekhyun. —Te mira tan…tan intensamente.

—No sé…

—Claro que lo sabes.-Le reprochó. —¡Te dijo que quería besarte!

—¡Pero no lo hizo!

—¡Y eso te molesta!-Rió a carcajadas Baekhyun. —Él te esta cortejando Kyungie.

—No quiero crearme ilusiones, Baekkie…-Kyungsoo suspiró. —Hace más de un mes me han engañado y ahora, ahora no estoy seguro querer que vuelva a ocurrir lo mismo.

—Kyungie, Kai te gusta hasta la médula.-Kyungsoo lo sabía pero tenía miedo. Muchísimo miedo. No quería que lo volviesen a lastimar. Su vida había sido siempre de engaños y él era el único que salía herido y estaba seguro que no soportaría mucho eso. Si Jongin le hacía daño, sabía que sería la última vez que abriría su corazón a alguien y no confiaría más. —Y tú le gustas a él. No te encierres y date una oportunidad.

—Quiero seguir creyendo que pronto encontraré a alguien que no me hará daño, pero Baekkie, es inevitable que no tenga miedo.

—Lo sé, Kyungie, yo lo sé…-Baekhyun lo abrazó y así estuvieron por largos minutos hasta que vieron entrar a Chanyeol. —¿Estás bien, cariño?-lo cuestionó Baekhyun.

—Sí…-Chanyeol miró a Kyungsoo. —¿Te gusta?-el pelinegro entendió de inmediato y volvió a enrojecer pero terminó asintiendo.

—Mucho.

—Antes de todo…-Comenzó Chanyeol. —Conócelo bien.-y fue lo único que dijo y decidieron dejar el tema por terminado. Los tres decidieron que lo mejor sería ver una película de humor para que terminaran meandose en los pantalones. Y ahí estaba el Chanyeol de todos los días; divertido, tranquilo, sonriente, nada preocupado y ese era el Chanyeol que a Baekhyun y a Kyungsoo les gustaba ver.

••••

Kyungsoo se la pasó toda esa semana mandándose mensaje con Jongin. Chanyeol lo miraba con discreción pero Baekhyun había sido el único que lo había notado pero no quiso preguntar, no ahora.

Kyungsoo se veía demasiado ilusionado con Jongin y no había día que se emocionara y que su corazón bombeara sangre cada vez que leía cosas bonitas en los mensajes que recibía.

Lentamente, Kai estaba consiguiendo que el pelinegro terminara enamorándose de él y no estaba tan lejos de lograrlo. Eso era lo malo que tenia Kyungsoo; él terminaba enamorándose rápidamente y al final era el único que sufría las consecuencia de algo que tal vez el se buscaba solo, por creer tan fácilmente en las personas.

El viernes llegó rápidamente y Kyungsoo estaba emocionadísimo. Jongin llegaba a verlo hoy. No se habían visto pero al menos se mandaban textos todo el tiempo y hoy, por fin, podrían verse. 

Preparó Espagueti con Kimchi. Su especialidad y sólo para Jongin y él. Estaba confiando ciegamente en Jongin y esperaba, realmente esperaba que con Jongin las cosas fuesen bien. Estaba enamoradísimo de él y no quería sufrir más. Ya no. No podría soportar otra decepción.

Escuchó el timbre de su piso y corrió a mirarse al espejo antes de ir a abrir la puerta. Cuando lo hizo, se quedo estupefacto al ver lo guapo que se miraba Jongin.

—Hola Kyung…-Saludó el moreno y Kyungsoo sonrió.

—Hola Jongin.-El pelinegro le dio acceso para que pasara y Jongin entendió rápidamente.

—Te eche de menos.-Soltó Jongin y el corazón de Kyungsoo comenzó a bombear sangre con locura. Jongin era una hermosa e increíble locura.

—También yo…-Confesó. Kyungsoo esperaba que Jongin riera pero jamás se esperó que el más alto rodeara sus brazos en su cintura y besara su mejilla.

—Me alegra oír muchísimo eso, Kyung.-Susurró y volvió a besar la mejilla del más bajito.

—Ah…-Kyungsoo no podía estar más rojo. Siempre se ponía así cuando Jongin se encontraba en su entorno. El más alto tenía ese efecto y lo sabía por eso aprovechaba todo.

—Te lo he dicho antes…-Murmuró Jongin, aun abrazando a Kyungsoo. —Me gustas. Mucho.

—Jongin…-Susurró el pelinegro.

—Puedo seguir esperándote porque aun es muy pronto, lo sé…pero me gustas demasiado como para dejarle vía libre a quien sea que quiera acercase a ti.

—Jong…-El más alto no le dio oportunidad de hablar y reclamó su boca del más bajito. Kyungsoo estaba seguro que quería estar con Jongin, porque le gustaba, porque estaba enamorado, porque Kyungsoo podía ver un futuro con Jongin. Lo quería y mucho. Lo quería tanto como nunca creyó querer a nadie. El sentimiento que tenia por Jongin era muy diferente a todos sus amoríos anteriores. Ere más fuerte, más pasional, más agradable. Kyungsoo respondió el beso y quería más. Necesitaba más pero fue Jongin quien separó ambos bocas y sonrió.

—Sé que es pronto Kyung…-Dijo. —Pero me encantaría que fueras mi novio. Si quieres tiempo te lo daré, sólo no mires a alguien más.

—Yo…-Tartamudeó el pelinegro pero luego sonrió tan ampliamente que provocó una misma sonrisa en Jongin. —Sí.-aceptó. —Si quiero ser tu novio.

Sí Kyungsoo fuese una persona precavida, atenta y no creyese tan fácilmente en las palabras, él hubiera se hubiese evitado muchos sufrimientos y daños emocionales pero él necesitaba amor. Nunca lo tuvo y lo buscaba desesperadamente en sus novios pero siempre terminaban dejándolo.

Lo único que Kyungsoo quería es que alguien lo amara de verdad. Era lo único que pedía, no más.

Esa noche, Kyungsoo no dejó de sonreír y estuvo con Jongin viendo películas, dándose besos y miradas furtivas. Esa noche era su día especial. Comenzaba a sentir la felicidad que siempre había pedido, ese amor, ese cuidado, ese sentimiento. Él podía confiar ciegamente en Jongin porque el más alto jamás le haría daño.

**

Ya había pasado un mes desde que Jongin y Kyungsoo comenzaran a salir. Jongin se mostraba feliz y Chanyeol, lentamente comenzaba a creer en las palabras que había dicho ese día Kai.

Podía terminar enamorándose de Kyungsoo. Chanyeol los había estado observando y Kai era asquerosamente encantador con Kyungie y eso, por más que no estuviese muy convencido–aunque Jongin ya lo estaba convenciendo del todo–, le hacía feliz ver tan contesto y enamorado a Kyungsoo.

Baekhyun estaba igual de feliz pero había una espinita ahí clavado que no le dejaba estar tranquilo. El problema radicaba en Chanyeol, cuidando y sobreprotegiendo a Kyungsoo, pero sus problemas podían esperar un tiempo más. Quería disfrutar viendo a su mejor amigo siendo feliz. Como tanto lo había deseado.

—Bebé…-Susurró Jongin, besándole el cuello del más pequeño. —Te quiero tanto.-hace bastante Kai le había confeso a Kyungsoo que nunca lo había besado pero él sí que moría por besarlo esa noche y ahora, los besos eran el pan de cada día para ese par.

—Yo también.-Jadeó Kyungsoo. Le ponía tanto que Jongin lo besara tan fogosamente.

—Te deseo mucho…-Y ahí estaba de nuevo. Desde hace unas semanas Jongin quería más y Kyungsoo por una vez en su vida había hecho caso en las palabras de Chanyeol. Primero tendría que conocer bien a Jongin y luego, tal vez, aceptaría tener sexo con su novio.

—Lo sé….-Dijo y separó a su novio, provocando que Kai gruñera.

—¿Ahora qué?-Preguntó.

—Te quiero y lo sabes.-El moreno asintió de mala gana porque ya se sabía ese cuento. Kyungsoo siempre lo repetía. —Pero aun no puedo dar ese paso, Jonginnie.

—No me quieres lo suficiente…-Murmuró. Jongin lograría lo que se propuso, costara lo que costara.

—Sabes que te quiero demasiado.-Gimoteó. —No me hagas esto Jongin.-Kai lo pensó, no podía pelearse ahora con su novio. Pronto lo tendría donde quería y sería paciente, era lo mejor.

—Lo siento bebé.-Jongin lo rodeó entre sus brazos y lo arrulló, mientras el pelinegro terminaba de llorar.

—Te quiero tanto…-Susurró entre lagrimas Kyungsoo.

¿Jongin realmente quería a Kyungsoo? No, no lo quería tanto así. Sí, le gustaba y mucho, ya lo había dejado en claro. Había comenzado a sentir algo por Kyungsoo pero no, definitivamente no estaba enamorado de él. Jongin tampoco confiaba en personas que juraban amor, porque nadie podía asegurarle cuando hablaban o no con la verdad.

Él ya había sufrido una decepción y se juró que nunca más amaría a nadie. Nunca más confiaría en alguien. Las promesas se rompían con facilidad, la confianza se perdía con el tiempo y era más cruel y doloroso el olvido. Prefirió huir hacia el lado donde es las cosas eran más fáciles, donde él podía causar el daño y no tener remordimiento de ello. Eso, en eso lo habían convertido.

Sonara cruel pero era algo que arraigaba desde hace mucho tiempo y si no pudo extirparlo antes, era imposible ahora. Y aunque se escuchase hipócrita de su parte, realmente iba a detestar ver a Kyungsoo tan triste porque Jongin se dio cuenta que el problema que Kyungsoo tenía era igual al suyo. Falta de amor, comprensión. Habían estado solos y Jongin podía comprenderlo pero no, él no podía estar con Kyungsoo, porque sería más descarado de su parte decir que lo amaba, cuando nunca había llegado a sentir más que atracción por el más pequeño.

Iba a lamentar tanto causar tanto dolor en una pequeña persona que lo merecía todo pero así era Jongin y para desgracia de Kyungsoo, él había sido elegido. Lo quería en su cama, oírlo gemir, lloriquear de placer, pero sólo lo quería para una vez y eso fue lo que Chanyeol trataba de evitar, porque sabía qué clase de persona era Jongin, pero fue tontamente engañado que terminó dejando el camino libre  al moreno para desgarrar y pisotear los sentimientos de Kyungsoo.

Cuando Jongin miró que el más pequeño había quedado dormido entre sus brazos, suspiró y besó la frente de Kyungsoo.

—Voy a lamentar tanto hacerte esto Kyung…-Susurró. —Pero nunca debiste chocarte con este demonio en primer lugar.-acarició la mejilla de su acompañante. —Vas arder y lamentaré, por primera vez, hacerle algo así a alguien pero aprenderás, de una vez por todas, que no debes entregarle todo a una sola persona tan fácilmente.

•••••

Kyungsoo no podía estar más feliz. Había estado estable con Jongin por medio año ya.

Pasaba increíbles momentos con su novio y era feliz, porque recibía todo lo que siempre estuvo buscando tan desesperadamente. Ahora no podía pedir más cuando ya lo tenía todo.

—Bebé…-Kai lo abrazó y le dio un beso en los labios. —Te eche de menos.

—No nos hemos visto por una hora, Jongin.-Rió divertido Kyungsoo. —No seas exagerado.

—Pero te extrañe demasiado en esa hora.-Jongin hizo un mohín que le causó ternura a Kyungsoo y este ultimo volvió a unir sus labios. Habían estado en muchísimas ocasiones en tener sexo pero al final, Kyungsoo terminaba arrepintiéndose así que Jongin, pacientemente lo aguantaba, porque él se propuso darle todo lo que Kyungsoo deseo siempre para luego él recibiera lo que llegó buscando. Era justo, de una retorcida manera pero lo era.

Chanyeol a lo lejos miraba a ese par. Ya estaba casi totalmente convencido que Jongin no le haría daño a Kyungsoo. Lo había demostrado en esos seis meses de relación que llevaba con Kyungsoo.

—Chanyeol, necesitamos hablar.-Y era el turno de Baekhyun de romper el silencio. Se lo guardó durante seis meses por Kyungsoo pero ya había sido suficiente.

—Te escucho.-Dijo el más alto.

—¡Mierda Chanyeol!-Exclamó Baekhyun. —¿Podrías al menos verme a la cara cuando te hablo?

—¡Te estoy escuchando Baek!-Suspiró el más alto pero miró a su encolerizado novio. —¿Así está bien?-le cuestionó ofuscado.

—Deberíamos terminar.-Soltó sin más y eso le cayó como si fuese un balde de agua helada a Chanyeol.

—¿Qué?-Dijo incrédulo.

—Ya me oíste Chanyeol.-Baekhyun mantuvo la calma. No quería llorar. —Sería lo mejor para los dos.

—¿Lo mejor para los dos?-Preguntó Chanyeol estupefacto. —¿Para quienes dos?-exigió saber. —¿Para ti y quien más Baek? ¡¿Para quién?!

—Para ti y para mí.-Sollozó Baekhyun. —Llevo viéndote estos últimos seis meses y no eres el mismo. Ya no es lo mismo.-se a sinceró después de seis meses de silencio autoimpuesto.

—¿De qué estás hablando, Baek?-Chanyeol se puso de pie y encaró de frente a Baekhyun. —Nunca he dejado de amarte, si lo estas dudando.

—¿Así?-Inquirió. —Explícame entonces porque desde que Kyungsoo conoció a Kai te comportaste tan extraño y luego los miras todo el tiempo.-Baekhyun limpió con desesperación sus lágrimas.

—Baekhyun te amo muchísimo y lamento tanto que te hayas llenado de ideas que no son.-Cogió la mano de su pequeño novio. —Pero hay algunas cosas que no te había contado de Jongin.

—¿De qué estás hablando Yeol?-quiso saber el castaño. — ¿Que tiene Jongin que ver en todo esto?

—Todo. Si miró a ese par es porque me preocupa demasiado Kyungsoo.-Baekhyun frunció el ceño y Chanyeol rió. —No es lo que piensas Baekkie.

—Termina de hablar.-Indicó y el más alto asintió.

—Jongin era muy malo para Kyungsoo.-Confesó. —Y aun tengo mis dudas ¿sabes?

—¿Por qué?-Preguntó Baekhyun.

—Jongin nunca tuvo una relación estable. Bueno, sí que la tuvo pero resultó un fiasco total y de ahí radico a lo que era hace seis meses atrás. Kai sólo usaba a las personas para su propio placer, nunca amó a nadie y terminaba votándolos cuando obtenía lo que quería de ellos.

—¿Estás diciendo que tenias miedo que sucediera lo mismo con Kyungsoo?

—Así es Baekkie. Estaba preocupado por Kyungsoo porque sabía qué clase de persona era Kai y Kyungie ya había pasado por tanta mierda que no lo quería ver destrozado, ya no más.

—¡Ay Channie!-Baek abrazó a su gigante novio y luego le dio un corto beso. —Eres genial. Te amo.-susurró y se besaron de nuevo. —Kai está haciendo las cosas bien ¿sabes?

—Me doy cuenta. Con Kyungsoo ha estado durante seis meses y él ni siquiera tardaba en llevarse a la cama a sus parejas. Los follaba y ya estaba.

—Kyungie no ha tenido sexo con Kai.-Comentó Baek. —Me lo ha dicho y no han llegado a eso.

—Entonces deberíamos estar alerta Baekkie…-Susurró Chanyeol con preocupación. —No he caído completamente en todo lo que Jongin me dijo y aunque estén así de bien, ¿Cómo podemos estar seguro?

—Tienes razón.

—Tú lo has dicho…-Comentó Chanyeol. —Ellos no han tenido sexo.

—¿Será posible que Kai deje a Kyungsoo después de tener relaciones?-Baekhyun guardaba esperanza en Kai. Él no podía ser tan cruel, no podía hacerle eso a Kyungsoo. No lo soportaría, Kyungsoo lo había dicho, él no soportaría una decepción más.

—Espero que no Baekkie, espero que no.

**

Esta noche, Kyungsoo estaba decidido. Muy decidido como jamás lo había estado en toda su vida. Tendría relaciones sexuales con su novio, porque Jongin le había demostrado que valía la pena.

Planeó una cita con su novio que se llevaría a cabo hoy. Cenarían y luego Kyungsoo le diría que ya estaba listo y sabía, él sabía que Jongin se pondría feliz, porque estaba reconociendo que Kyungsoo podría creer plenamente en él.

Para cuando el reloj marcaba las nueve de la noche, Kyungsoo terminaba de arreglarse cuando escuchó el timbre y bajó rápidamente a abrirle a su novio. Cuando abrió la puerta se aventó a los brazos de Jongin y lo besó.

Kai lo supo. Supo que ese día, después de seis meses tendría lo que había llegado a buscar desde un principio. Kyungsoo no lo estaba besando con timidez, ese beso estaba lleno de deseo, pasión, lujuria. Estaba listo. Kyungsoo estaba listo para que Kai lo follara.

Así que viendo la oportunidad tendida en bandeja de plata, el moreno la tomó sin arrepentimiento. Cogió a Kyungsoo de las piernas y el más bajito, rápidamente las enredó en sus caderas. Besó cada parte visible del cuerpo de Kyungsoo, lamiendo, mordiendo y dejando marcas. Dejaría las pruebas en el cuerpo del más bajo, lo que había estado deseando tanto tiempo.

El departamento se lleno de jadeos, chasquidos de besos y gemidos tras gemidos. Kyungsoo gozaba de la atención que Kai le estaba dando. El pelinegro pensó que este era el mejor sexo que había tenido en su vida. Jongin sabia como dar placer, uno que volvía loco a Kyungsoo y le hacía perder la razón.

—Tomaré todo de ti, Kyung…-Susurró en cada beso Jongin. —Tomaré lo que tú me diste, sin arrepentirme de nada.-mordió el cuello de Kyungsoo. —Te di lo que más has deseado y tú me estás dando lo que he esperado.

—Sí, sí, sí.-Kyungsoo estaba en un estado de éxtasis. No estaba oyendo verdaderamente lo que Jongin susurraba. Le dio su alma al diablo sin darse cuenta.

—Te darás cuenta, que fui el peor error que pudiste a verte topado en tu camino.-Susurró, mientras envestía a Kyungsoo. —Desearas nunca a verme conocido.-Kyungsoo no estaba en sí, no oía, solo gozaba lo que Jongin le brindaba. Estaba cegado, estaba en el encanto de Kai. —Odiaras este error, porque eso soy…-jadeó, sintiendo ya el orgasmo. —Soy un error y el peor de todos Kyung.-ambos llegaron al clímax y se besaron. Jongin le dio su último beso, porque a partir de ahora, Kyungsoo había recibido todo lo que había deseado y Jongin había conseguido lo que buscaba.

Kyungsoo cayó en un sueño profundo. Jongin lo observó por largos minutos hasta que se acercó y besó su frente con un cariño inexplicable. —Aprende Kyung, que nunca debes entregarle todo a una sola persona y menos tan fácilmente. Aprende de este gran error que tuviste en tu vida, a jamás sentir nada por nadie porque todos son unos mentirosos. Nada es para siempre y el final feliz nunca existió y ni existirá. Esto es así Kyungie y tú, de mala manera lo quisiste aprender.-tal cual como le susurró, le escribió en la carta. Cada una de las palabras las escribió con su puño y letra, remarcando siempre que Jongin fue el peor error que pudo conocer.

••••••

Chanyeol se volvió completamente loco. Mataría a puñetazos a Jongin. Lo sabía, él sabía que esto terminaría así y fue tan estúpido en creer lo que Kai le decía y ahora, ahora tenía que ver como Kyungsoo se hundiría en una tristeza y dolor.

Baekhyun logró –de alguna manera –controlar a Chanyeol y prefirieron ir juntos a buscar a Kai, aunque ambos sabían que le iban a dar una paliza a Jongin por a ver dejado a Kyungsoo después de a verlo follado.

Fue Baekhyun quien encontró a Kyungsoo, desnudo y llorando. Lo supo de inmediato. Jongin había conseguido acostarse con él y ahora lo dejaba. Baek leyó la carta que Kai había dejado y odio tanto en ese momento a Jongin, porque Kyungsoo no era el culpable de lo que él le habían hecho, que Jongin no tenia ningún derecho para convertir a Kyungsoo en alguien sin emociones.

Baekhyun llamó a Chanyeol y cuando el más alto llegó, lo entendió, lo comprendió y sintió tanta rabia hacia Kai y hacia él mismo. Rompió muchísimas cosas ese día pero con ayuda de Junmyeon–quien llegó a pedido de Baek junto a su novio Yixing–pudieron calmarlo.

Mientras Kyungsoo se encontraba en el baño, rodeando sus rodillas y sin dejar de llorar, Yixing lo acompañaba porque no querían que el pelinegro cometiera alguna locura en un arranque de dolor y desesperación, porque todos sabían que él estaba gravemente herido, hablando emocionalmente.

Fue al día siguiente que Baek con Chanyeol fueron a buscar a Kai y se llevaron la sorpresa que él acaba de irse, según lo que una vecina había dicho. Kai había cogido todas sus pertenecías y se había ido, sin más, sin remordimientos, y lo odiaron más y a partir de ese día, el nombre de Jongin, era un tema tabú.

Llorar fue muy poco para Kyungsoo. Había sufrido demasiado después de la partida de Jongin.

Volvió a caer en lo mismo pero esta vez, ese alguien que lo había votado, le escribió y le hizo ver la cruel realidad.

No debía sentir tantas cosas que al final solo te dejaba un dolor imborrable. Uno que era tan punzante que tardaba mucho en sanar. Porque lo más cruel de todo era dar esperanzas y que te las arrancaran sin remordimientos.

Kyungsoo lo aprendió. Lo aprendió de una manera cruel e inhumana pero terminó entendiéndolo al final de cuentas. Jongin le hizo ver que las cosas eran tan crueles, su error favorito y más doloroso, le hizo saber, que las emociones son vánales e inservibles.

¿Para qué te servían? ¿Para que las tenias? Al final de cuentas siempre terminan lastimándote. Te hacían añicos toda esperanza y por eso, de la manera que Jongin le hizo ver su realidad, se dio cuenta que nunca más amaría a nadie. No volvería amar, porque Kyungsoo amó enteramente y le jodieron completamente su vida.

Kyungsoo amó con demasía a ese que hoy día es su gran error de todo su puta vida, lo amó tanto, que esa persona que amó, fue la misma que le hizo ver que era mejor borrar todas sus emociones.