Antes de lo esperado llegó el día martes, el día del campamento que liberaría a todos los alumnos de las tutelas de sus padres por casi cuatro gloriosos dias.
Aquella mañana Kitty se presentó en la puerta de Kim para ir a buscarla ya con sus cosas preparadas y una enorme sonrisa dibujada en su rostro. La puerta la abrió la mamá de Kim, una señora guapa de cabello negro como su hija pero largo casi hasta la cintura y una sonrisa amable.
Cuando vio quien era que estaba en la puerta sonrió aun mas...
-Kim!! Ya llegó tu novia a buscarte!- exclamó la madre haciendo que Kitty se ruborizara hasta las orejas...
Kim bajó las escaleras corriendo con sus bolsos tambien y saludó a Kitty que casi echaba humo por las orejas...
-Ya nos vamos mamá. Adios-
-Tengan cuidado y no hagan muchas chanchadas eh? Jajaja- respondió la madre con una risa relajada...
Al ver que Kitty no era capaz siquiera de moverse, Kim la tomó de la mano y la arrastró del umbral de su casa casi a la fuerza.
Caminaron una cuadra entera bajó la luz mortecina del amanecer antes de que Kitty se recuperara del todo.
-Cuando entenderá tu mamá que no soy tu novia?? Por que no se lo aclaras?-
-Con ella es mejor dejarlo correr. Tiene la idea de que cuanto mas niega uno algo mas lo afirma- respondió Kim con una sonrisa inocente...
-Humpff!!- se quejó Kitty pero enseguida ese gruñido fue sustituido por una sonrisa de animo
-No puedo creer que mis padres me hayan dejado ir a este campamento!- exclamó Kitty eufórica casi dando saltos de contento.
-La verdad es que yo tampoco...- se sonrió Kim pensativa, todavía estaba con la mente puesta en todos los sucesos del ultimo fin de semana y tambien en Nancy...
Tenia que encontrar la manera de hablar con ella y explicarle que todo había sido un malentendido... Pero definitivamente tenia que hacerlo a espaldas de su mejor amiga por que si no...
-Y bien? En que piensas?- preguntó Kitty curiosamente contemplando la mirada distante de su amiga.
-En nada.. Me preguntaba que cosas divertidas habrá para hacer en ese campamento-
-Ya sabes.. Lo de siempre.. Canciones ñoñas, trabajar con la naturaleza, congelarnos en carpas- enumeró Kitty animadamente.
-Lo dices de tal manera que hasta suena hermoso- comentó Kim riéndose con ganas.
-Me gustan ese tipo de cosas de vez en cuando...-
Las dos chicas siguieron conversando animadamente hasta llegar a la escuela, donde ya estaban esperando los ómnibus y los demás alumnos de su clase y de la clase B.
Kim paseó la vista por todos esos rostros soñolientos hasta por fin dar con uno bien conocido.
Nancy estaba allí, sola por decisión propia y algo apartada como si no deseara ser vista...
Se la veía triste y mas agotada que el resto de los alumnos por lo que enseguida el corazón de Kim se compadeció por ella.. Tal vez debería ir enseguida a hablarle...
-Que estas mirando? Ya van a empezar a subir todos, vamos asi tendremos los mejores asientos- dijo Kitty en ese momento tirando del brazo de su amiga con insistencia.
Kim enseguida despegó los ojos de Nancy y subió al bus con Kitty.
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El viaje duraba 9 horas ya que el campamento era fuera de la provincia, en las cuales la mayoría de los chicos se la pasó durmiendo para recuperar fuerzas.
Kim y Kitty estaban juntas pero no habían conversado mucho y Kim solo se limitaba a mirar por la ventana como el paisaje pasaba frente a sus ojos comenzando a bañarse en oro por el amanecer naciente..
Había visto a Nancy sentarse sola bien lejos de ellas y otra vez se había sentido mal, apenas llegaran al campamento definitivamente hablaría con ella...
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-Bien, hemos llegado al fin- dijo Kitty una vez se bajaron todos del bus. Se estiró con placer y le sonrió a su amiga, pero Kim andaba vigilando por donde andaba Nancy y cual seria el momento propicio para aclarar las cosas.
-Estas bien distraída hoy eh Kim?- comentó Kitty con algo de fastidio.
-Eh?.. No.. No es eso.. Supongo que tengo algo de sueño no dormí casi nada en el bus- mintió Kim volviendo su mirada hacia su amiga.
-Umm.. Bien, entonces vamos-
Las dos amigas siguieron la fila donde estaban sus compañeros hacia donde estaba el guia del campamento, un hombre guapo y joven que enseguida causó furor entre el 95% de las alumnas y tambien entre algún que otro alumno..
Sin embargo Kitty no le prestó ni la mas mínima atención lo cual sorprendió a Kim, incluso ella debía admitir que era bastante guapo..
Pero Kitty parecía absolutamente indiferente.
"Será que en verdad le gusta Tim?... No.. No creo.. Yo he visto como lo trata.. No lo soporta.. Entonces podría ser que le guste alguien mas..?" En ese punto Kim dejó disolverse sus pensamientos en un repentino mar de angustia que la sorprendió y que no supo de donde venia.. Ni siquiera era capaz de concluir ese pensamiento.
Pronto el guia se puso a dar reglas e instrucciones largas y monótonas pero que aun asi la mayoría de las chicas disfrutó como nunca.
-Y para finalizar estas son las listas de quienes compartirán las carpas. Serán grupos de tres, y tendrán que ir a todos lados juntos.-
En un cuadrado de telgopor el guia clavó la lista con los nombres de todos y enseguida todos fueron a ver con quien les había tocado.
Rápidamente se escucharon tanto gritos de alegría como gemidos de decepción.
-Ojala que nos haya tocado juntas!- exclamó Kitty acercándose para ver.
Kitty revisó nerviosamente la tabla y enseguida dio un salto de contento.
-Nos ha tocado juntas!!-
-Si me lo imaginaba por que nuestro nombre empieza con la misma letra-
Kitty hizo un pequeño mohín ante la aparente falta de entusiasmo de Kim y luego suspiró.
-Y bien quien mas estará con nosotras?- preguntó Kim.
-A ver...- Kitty miró otra vez el afiche y de inmediato su rostro se descompuso.
-Nancy-
-Que?- preguntó Kim algo alterada.
-Que Nancy estará con nosotras-
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"Esta tiene que ser una buena oportunidad para hablar con ella y explicarle todo... Lo que no entiendo es por que Kitty luce tan molesta..." Pensaba Kim mientras armaba la carpa con ayuda de una silenciosa Nancy. Por su parte Kitty estaba recostada contra el tronco de un árbol y cruzada de brazos, mirando hacia cualquier lado menos hacia donde sus dos compañeras trabajaban...
-Kitty por que no vienes a ayudarnos?-
-Soy una dama las damas no hacemos esa clase de cosas -
Kim se quedó sorprendida con esa respuesta tan dura pero enseguida se sonrió.
-Pues ni modo dejemos que el caballero se encargue no?- rió Kim regresando a su tarea.
Kitty desvió la vista pero al segundo siguiente volvió a mirarla y después de un profundo suspiro se acercó para ayudar..
Kim la observaba sin dejar de sonreír, se veía tan ceñuda mientras trataba de ayudar y tan mal dispuesta...
No tenia ni idea de por que estaría de ese humor... Sería por lo de Nancy? Seguramente tenia que ser por eso.. Pero supuestamente ya estaba todo claro..
Kim la siguió mirando, la manera en que apartaba su cabello tan lacio y sedoso de color castaño, la manera en que volteaba sus hermosos ojos azules cada vez que algo salía mal...
-Me vas a pasar esa varilla o tengo que estar toda la tarde pidiéndotela?- dijo Kitty en ese momento sacudiendo a una abstraída Kim que recién en ese momento regresó a la realidad.
Una de las varillas se encontraba bajo su pie asi que enseguida se agachó y se la pasó.
Una vez armada la carpa las muchachas metieron sus bolsas de dormir allí adentro y sus cosas. Nancy seguía reacia a decir una sola palabra asi que apenas terminó de acomodar sus cosas se fue a la sala donde les habían dicho que fueran al terminar de armar las carpas.
El campamento estaba rodeado por un bosque y de fondo se veían montañas, no muy lejos se encontraba el enorme hotel donde se hospedaban los profesores y los dirigentes y donde también estaban los baños que usarían esos 4 dias.
Estaba cayendo el sol y el ocaso entremedio de las montañas se veía tan fantástico que Kim no tenia ninguna intención de ir al interior del hotel.
- Y bien? Vamos o no?- preguntó Kitty sin disimular su fastidio.
-Mira que hermoso paisaje. Cuando volvamos será completamente de noche..- respondió Kim estirándose en la hierba y mirando hacia las montañas donde el sol terminaba de brillar..
-Habrán montones de ocasos para ver- replicó Kitty poniendo los ojos en blanco.
-Cada uno es único -
-Asi que ahora eres poeta?-
-Te ocurre algo Kitty?- preguntó Kim buscando los ojos de ella con su profunda mirada oscura...
-No-
-Ese "No" fue bastante seco -
-No me ocurre absolutamente nada...-
-Entonces ven a mirar el ocaso conmigo como hacíamos antes-
Kitty sonrió un poco al rememorar viejas tardes de cuando era niña y lo pasaba con Kim en la azotea de su casa, mirando el ocaso y charlando.
Sin embargo la exasperación le ganaba al buen recuerdo...
-No me acostare sobre esa hierba húmeda, ademas dijeron que apenas termináramos con las carpas fuéramos al salón... Nos vamos a meter en problemas. Mira ya no queda nadie por aqui.-
Kim suspiró y pareció pensárselo.
-Bien.. Entonces al menos ayúdame a levantarme- pidió con una media sonrisa extendiendo la mano hacia Kitty...
-No puedes sola?-
-No te cuesta nada-
Kitty volvió a ponerle los ojos en blanco pero tomó su mano a pesar de todo. Y estaba dispuesta a tirar de ella para obligarla a levantarse, cuando de pronto el tirón vino de la dirección contraria.
Kitty estaba desprevenida asi que a Kim no le costó mucho hacerla caer encima de ella mientras se reía a carcajadas...
-P-pero que haces??!- exclamó Kitty con enojo sentándose de inmediato en el pasto.
-Venga.. Miremos el ocaso.. Solo será un rato...-
-Humpfff!!!-
-Por favoooor....-
Kim intuyó enseguida que Kitty se lo estaba pensando asi que la tomó de la cintura y la hizo acostarse tambien en la hierba a su lado...
Kitty estaba tensa, se notaba a kilómetros..
Que pensaría la gente si las veía en esa situación...
Seguro algo raro...
Y era normal que pensaran algo extraño, Kim la tenia abrazada en el suelo y ella estaba usando su brazo de almohada.. Las amigas normales hacían esta clase de cosas verdad?
Suponía que si. Pero el aspecto de Kim era un problema.. Si ella fuera tan solo como una chica mas.. Entonces nadie sospecharía...
No. No había nada para sospechar.
La gente simplemente podía ser demasiado imaginativa, pero lo importante es que ellas tenían todo bien en claro.
-No es hermoso?-
-Que cosa?-
-El ocaso Kitty-
-Umm.. Si...-
Kitty miró hacia donde el sol terminaba de decir adiós en las lejanas montañas, tiñéndolas con miles de rosas de fuego que se reflejaban en las nieves eternas...
Por algún motivo se sentía extrañamente bien.. Como si su anterior irritación se hubiera esfumado...
¿Como podía ser un simple momento con su amiga de toda la vida, tan perfecto?
Kitty tembló un poco y enseguida Kim la miró.
-Estas bien? Tienes frio?-
-Un poco... Creo que ya deberíamos...-
-Shhh.. Un momento mas.. Escucha...- susurró Kim poniendo un dedo encima de los labios de su amiga que enseguida se silencio...
-Escucha... Ahora que casi es de noche.. Los pájaros se preparan para dormir y se dan las buenas noches entre ellos- murmuró Kim y Kitty aguzó el oído. Por todo el bosque se escuchaba algún que otro suave canto de algún pájaro... Era un sonido musical muy bonito..
-Me encanta la naturaleza.. Este sitio.. Estar aqui contigo- dijo Kim después de unos minutos en silencio hasta que el ultimo pájaro dejó de cantar.
Se volvió hacia su amiga con una enorme sonrisa, provocando que sus rostros quedaran demasiado cerca uno del otro...
Apenas se dio cuenta de eso la sonrisa se fue borrando gradualmente y sus ojos profundos parecieron perderse adentro de los de ella...
Ninguna de las dos parecía poder romper aquel lazo que unía sus miradas... Kim tragó saliva con fuerza.. Por que de pronto su corazón latía tan rápido?
Por que tenia tantas ganas de.. ¿Besarla?
Que extraña locura era esa???!
Solo podía ser la impresión del momento..
Sin embargo no podía despegarse de esos ojos..
Y esos ojos tampoco parecían poder despegarse de los suyos..
Lo mas extraño de todo era que Kitty aun no se hubiera apartado..
Pero ella seguía clavada allí... Casi como si estuviera esperando ese beso.. Pero eso era absolutamente imposible.. O no?