Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

A lo que nos llevó la prueba de valor.~ por anon_kagamine

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

¡Los personajes no son míos pero la historia sí! Sería hermoso que dieran sus opiniones xD

Notas del capitulo:

¡Historia random que hice a lo largo del día, disfrutenla! xD

Cuatro chicos iban caminando hacia un frondoso bosque la noche del 31 de Octubre, uno rubio, otro pelirrojo, otro pelinegro y el último de cabello azabache, entre los cuatro reían aunque los últimos dos eran más reservados pues se estaban ‘mentalizando’ para lo que harían. El rubio y el pelirrojo los habían empujado a hacer una prueba de valor en aquel temible y frondoso bosque.

El grupo caminó hasta que se perdieron en el bosque y entonces lo decidieron, se separarían.

– ¡La prueba de valor comienza! ¡Yo me voy con Sasuke! –Avisó Naruto muy animado por el hecho de hacer eso aquel día, podía asustar a los demás –Pero recuerden, hoy es el día de todos los muertos y más de uno puede venir a molestarnos por entrar al bosque –Dijo completamente serio a la vez que se cruzaba de brazos.

–Bien… Ignorando lo último… ¡Yo me voy con Sai! No hay problema, ¿Verdad? –Preguntó Gaara agarrando del brazo al nombrado, a quien le apareció un muy leve rubor en sus mejillas.

–No hay problema… –Respondieron al mismo tiempo Sasuke y Sai, sonriendo ante el ánimo del rubio y el pelirrojo.

–De todas formas sería lo más normal ¿Verdad? Ya que ustedes son novios… –Soltó Sasuke colocando sus manos en sus bolsillos mientras comenzaba a caminar disimulando su miedo.

–Y ustedes pronto lo serán~ –Bromeó Gaara buscando algún reproche por parte de sus amigos, cosa que obtuvo.

– ¡Gaara! –Gritaron tanto Sasuke como Naruto, la única diferencia fue que Naruto rió y Sasuke siguió caminando, con un leve sonrojo.

–Vámonos, Naruto –Ordenó Sasuke encogiéndose de hombros sin dejar de caminar, a lo que el rubio le siguió de una manera rápida para no perderlo de vista. Ellos se fueron de lo más natural mientras Gaara y Sai se quedaron ahí parados. El pelirrojo sonreía.

– ¿Qué planeas hacer? –Preguntó Sai viendo la sonrisa de Gaara, si sonreía de esa forma de seguro planeaba algo.

–Nada, nada~ Ellos encontraran su destino solos~ –Mintió Gaara mientras se pegaba más al pelinegro hasta lograr abrazarlo melosamente. Y entonces Sai lo dejó pasar, no le daría importancia a la sonrisa de su novio y se limitó a caminar junto con él acaramelados, se abrazaban mutuamente sin saber si se iban adentrando o saliendo del bosque.

Luego de eso, ambos chicos se vieron y sonrieron, dándose un beso esquimal –Me sé el camino para volver –Reconocieron ambos, y ante esa sincronía rieron juntos, comenzando a caminar en otra dirección, completamente seguros de que por allá estaba la salida.

Mientras tanto, Naruto y Sasuke vagaban por el bosque. El rubio con su sentido aventurero por delante y Sasuke con su estilo indiferente, más en su interior crecía un miedo enorme por estar allí, cosa que no pasó desapercibida por Naruto quien se aprovecharía de eso.

Con total precaución de no ser descubierto, Naruto tomó una piedra y la lanzó lejos, haciendo así que muchas ramas sonaran y que Sasuke se sobre saltara. Aguantó la risa.

–Sasuke… Sasuke… –Susurraba casi muerto de la risa Naruto esperando una reacción del nombrado – ¿Escuchaste eso? –Preguntó luego en un tono bajo, obviamente esperando a que el otro lo confirmara… O lo negara.

–Déjate de bromas Naruto, sé que fuiste tú –Respondió Sasuke suspirando y comenzando a caminar, eso hizo que Naruto se pusiese serio e hiciese un puchero.

Igual te asustó… –Pensó Naruto y entonces comenzó también a caminar, siguiendo a Sasuke –Oye… Pero… ¿Sabes a dónde vamos? –Preguntó Naruto dándose cuenta de que sólo seguía a Sasuke, pero no tenía idea de si iban a salir de ahí por ese ‘camino’

–Eh… –Aquella pregunta hizo que el azabache parara, realmente no sabía a dónde iban, sólo había comenzado a caminar sin rumbo fijo –Pero claro que lo sé, hahaha, no soy idiota como tú… –Alardeó Sasuke tratando de parecer seguro, pero eso no convenció a Naruto.

–Si tú lo dices… –Susurró y entonces paró en seco, había oído algo –Sasuke, deja de caminar –Pidió Naruto completamente serio, tratando de escuchar mejor.

– ¿Eh? ¿Por qué? –Preguntó Sasuke volteándose a ver a Naruto, más se sorprendió por la expresión de Naruto.

–Cállate… –Susurró y Sasuke lo hizo, se quedaron por un minuto sin moverse ni hacer ruido, cuando por fin sonó algo – ¿Escuchaste? –Preguntó Naruto viendo en todas direcciones tratando de buscar al causal de aquel crujido de ramas.

–Na…Naruto sé que fuiste tú… –Mintió Sasuke viendo a todos lados con miedo, ya poco disimulado. Y en eso se oyeron más crujidos, cada vez más fuertes, cercanos y numerosos – ¡Esto ya no es divertido! –Gritó Sasuke y entonces vio una mezcla de temor y risa en la expresión de Naruto.

– ¡Corre! –Gritó Naruto riéndose a la vez que aparecían sombras indefinidas de entre los árboles en dirección a ellos, causantes reales de los crujidos de ramas. En ese momento Sasuke creyó en Naruto y comenzó a correr.

– ¿¡De dónde carajos salió eso!? –Preguntó Sasuke corriendo a la par con Naruto, les pegaban ramas, raíces y hojas, más aún así no se detenían, Sasuke completamente sumido en miedo y Naruto riéndose como loco.

¡No lo sé, pero ahí la tierra se acaba! ¡Hahahaha! –Reía Naruto soltando hasta lágrimas de la risa, tenía roja la cara y cerró los ojos, esperando algún impacto.

– ¿Q-? –Sasuke no alcanzó a hacer siquiera su pregunta cuando sintió que ya no había tierra para pisar. Estaban en un acantilado. Caerían quién sabe a dónde, y a Naruto le valía un pepino.

– ¡Waaaah! –Gritaron ambos chicos mientras caían, el azabache aterrado y soltando lágrimas mientras que el rubio reía y también soltaba lágrimas.

– ¡¡Vamos a moriiiir!! –Gritó Naruto sin parar de reír, era mucha la adrenalina.

– ¡Cállate idiota! –Gritó Sasuke y entonces dejaron de estar en el aire, cayendo a un río. Se dieron un buen chapuzón.

~Mientras tanto~

El pelinegro y el rojizo iban caminando cerca de la salida tomados de la mano, con la cabeza del rojizo reposando en el hombro del pelinegro, cuando escucharon uno de los gritos de sus amigos. Eso era sólo señal de dos cosas; Primero, que estaban relativamente cerca de Sasuke y Naruto. Y segundo, a Gaara le había salido todo bien.

–Uhuhuhu~ –Río Gaara y se apegó más a Sai, robándole un beso para luego comenzar a correr, saliendo de aquel ‘espeso’ bosque con éxito.

~Volviendo con los caídos~

La corriente arrastraba a ambos chicos y aún así Naruto reía, pero, apenas pudo se sujetó a una roca, saliendo así a flote completamente mojado. Entonces vio a Sasuke aferrado a otra roca un poco más lejos. Tenía una expresión de trauma.

– ¿¡Sasuke!? –Lo llamó Naruto agitando sus manos en las aguas turbias, pero Sasuke solo lo miraba sin decir nada, o eso creía.

–Me pegué en el pie… –Susurraba Sasuke sin soltarse de la roca, ya no se movería de ahí. No podía ni quería.

– ¡Voy allá! –Avisó Naruto y entonces soltó la roca en la que estaba sujeto, dejándose llevar por la corriente que hizo que se estrellara contra la roca en la que estaba Sasuke. El impacto hizo un sonido hueco.

–Cabeza hueca –Susurró Sasuke viendo a Naruto con indiferencia –No necesito tu ayuda –Mintió desviando su mirada y levantando su rostro, en una muestra de orgullo. Más eso no le importó a Naruto, quien se levantó, se paró encima de la roca y tomó de la mano a Sasuke, haciendo que éste también se parara.

–Mira allá, hay una plaza. De seguro este es el río que pasa por detrás de la plaza más cercana al bosque, vámonos allá –Dijo Naruto y, saltando de roca en roca, llegó a la orilla más cercana a la plaza – ¡Tu turno! –Gritó a Sasuke, quien veía con temor las aguas y a la vez su pie.

Bien… Calladito te ves más bonito –Se dijo así mismo el azabache. Dio un, dos, tres saltos y no pudo más, su pie dolía mucho. En ese entonces ya solo faltaba un salto para llegar a donde Naruto, quien lo mirada extrañado.

–Sasuke, ¿Qué pasa? –Preguntó el rubio viendo con preocupación a su amigo, se había detenido justo cuando iba a lograrlo.

–Me… Me duele el pie… –Reconoció el chico a la vez que desviaba su mirada, cabizbajo. Entonces se le aclaró todo a nuestro despistado rubio.

–Ah, pff, hahaha, lo hubieses dicho al principio –Respondió Naruto y saltó a la roca en donde estaba Sasuke – ¿Te cargo? –Preguntó con una típica pose de héroe, que hizo enojar a Sasuke e hizo que desviara su mirada –Hmm… Tomaré eso como que te da lo mismo –Dijo luego y ante la no cooperación del azabache lo comenzó a cargar al estilo princesa, logrando así que Sasuke se alarmara y sonrojara.

– ¿Qu-Qué haces? ¡Idiota! –Soltó Sasuke agitándose en los brazos de Naruto, pero el agarre que ejercía éste era muy fuerte.

– ¡Uwah! ¡Cuidado! Que nos podemos caer ambos –Dijo Naruto tratando de mantener el equilibrio. Y en ese momento Sasuke se dio cuenta de su posición, era la damisela en peligro, por lo cual calló y se mantuvo quieto con un notorio sonrojo –Así está mejor –Sonrió Naruto y saltó a la orilla, yendo luego, en dirección a donde había visto el parque, en el cual estuvieron a los 15 minutos más o menos.

Ya en el parque Naruto no sabía qué hacer, cargaba en sus brazos a Sasuke herido del pie y no tenía idea de adónde ir. Entonces Sasuke fue su salvador.

–Mi casa está en la calle de enfrente… Es la única roja y está la puerta abierta, llévame ahí –Susurró Sasuke cruzado de brazos con aún un sonrojo, no le gustaba el papel de damisela en peligro.

–Gracias~ –Agradeció Naruto y entonces se dirigió a la calle de enfrente, buscando con la mirada la casa de Sasuke que encontró con facilidad. Se acercó a ella y como el azabache le había dicho la puerta estaba abierta. Entró y dejó a Sasuke en el primer sofá que pilló –Vale, ¿Dónde hay alguna especia de crema? –Preguntó al tener las manos libres.

–Eh… En el baño, ¿Por qué? –Preguntó Sasuke pues no entendía por qué necesitaba crema su amigo.

–Ya verás~ –Soltó Naruto y entonces se adentró más a la casa –Eh… ¿Dónde está el baño? –Preguntó riendo nerviosamente.

–La primera puerta del pasillo al lado derecho –Respondió el azabache con una vena sobresaliente en su cien, para luego darse cuenta que no tenía por qué decirle –Carajos… –Pensó Sasuke y entonces se llevó una mano a la cara.

–Uhuhuhu~ La encontré –Dijo Naruto después de hurguetear entre las cosas del baño de la casa de los Uchiha, saliendo de éste con una crema cualquiera en sus manos – ¿Hay más personas en casa? –Preguntó acercándose con una sonrisa maliciosa a Sasuke, causándole a éste un escalofrío.

–E-Eh… No… ¿Po-Por qué? –Preguntó tratando de alejarse más no podía, el sofá se lo impedía.

–Por… ¡Esto! –Gritó Naruto a la vez que se iba a los pies de Sasuke y los comenzaba a masajear, los dos a la vez.

–Pero qué demo… –Sasuke se quedó boquiabierto, se esperaba cualquier otra cosa, menos eso.

–Te dolía un pie ¿No? Déjame masajeártelo –Dijo Naruto cerrando sus ojos y continuando con su masaje, Sasuke se sonrojó y miró a otro lado.

–Vale… –Susurró ya sin ver a Naruto. Estuvieron aproximadamente unos cinco minutos así y entonces Naruto se cansó, dejando de lado los pies de Sasuke y parándose – ¿Eh? –Sasuke lo vio con una expresión desentendida.

–Ya me voy ¿No? –Dijo Naruto estirándose, ya listo para irse –Nos vemos maña-

– ¡No! –Soltó Sasuke agarrando la manga del chico, para luego arrepentirse todo sonrojado –Eh, bueno… Quiero decir… –Aflojó el agarre Sasuke, siendo tímido de repente, cosa que le dio ternura a Naruto.

– ¿Tienes miedo? –Preguntó Naruto acercándose al chico y agachándose a la altura de su rostro. Entonces apreció a Sasuke sonrojado.

– ¿Sí…? –Respondió a punto de llorar Sasuke, tenía sus ojos cristalinos más no sabía por qué, pero quería estar con Naruto, eso era seguro –Quédate conmigo… –Pidió acercándose más al rubio.

–Sasuke… –Susurró Naruto ya sin comprender la situación. Y se complicó más cuando ambos chicos estaban tan cerca que rosaban sus labios.

–Me gustas… –Susurró Sasuke y entonces se tiró encima de Naruto, besándolo y abrazándolo por el cuello. Naruto no reaccionó, no supo reaccionar; más aún así el azabache no se detuvo, una cadena de sentimientos se cruzaron y mezclaron a lo largo de la noche.

Al final tanto el rubio como el azabache terminaron en el suelo, el último arriba del primero y así, en un beso algo tímido proporcionado por el azabache, quien a falta de aire se separó. En ese momento fue en el que los ojos la mirada atónita del rubio se cruzó con la oscura avergonzada del azabache.

–Naruto… –Susurró Sasuke completamente rojo de la vergüenza – ¿Puedo hacerte entrar en mi?... –Preguntó, y a la nula reacción del rubio hizo lo que quiso. Con delicadeza se sentó en los muslos del rubio y bajó los pantalones y bóxers de éste, acto seguido se bajó los propios y tomó con una mano el miembro del rubio, acercándolo a su entrada. Sólo ahí Naruto, sonrojado, reaccionó.

– ¿Eh? ¡Sa-Sasuke! ¡Espera! –Dijo el rubio alterándose, más lo dijo tarde. Sasuke ya había comenzado a introducirse a sí mismo la masculinidad del de abajo, haciendo que éste cerrara los ojos al sentir como la estreches del interior del azabache aprisionaba a su no muy pequeño miembro –M-Mmh… –Se quejó Naruto, pero no era quien ‘peor’ la pasaba.

–A-Ah… –Soltó Sasuke que intentaba por todos los medios introducir el miembro de Naruto en su interior, cosa que le costaba mucho. Iba metiéndose ya la mitad y el dolor por parte de ambos era demasiado. Naruto, por su parte, en busca de terminar rápido con aquello tan tortuoso, tomó de la cadera a Sasuke e hizo que de una sola todo su miembro entrara en el, logrando así que Sasuke se encorvara y soltara un inaudible ‘ah’ acompañado de un par de lágrimas.

–Perdón… –Susurró Naruto, pero la estreches de Sasuke le estaba volviendo loco. Justamente en ese momento pudo percibir una sonrisa en el rostro del azabache.

–No importa… Ya estás dentro de mi… –Fue optimista Sasuke y entonces miró a Naruto aún sonriendo, acto seguido, el mismo llevó su mano a uno de sus pezones y comenzó a apretarlo y masajearlo, en busca de placer –A-Ah…  –Soltó Sasuke y entonces comenzó a mover sus caderas, causando una sensación dolorosa y placentera en ambos. Soltaba un par de lágrimas más, pero lo soportaba, era por su amor.

En el momento en que Naruto vio a Sasuke moviéndose, mientras el mismo se tocaba y tenía el rostro sonrojado con lágrimas, fue que aparecieron sentimientos encontrados por parte del rubio. Quedó sorprendido por sus sentimientos, y como no sabía qué hacer, hizo lo que el azabache quería. En un movimiento rápido dejó a Sasuke abajo, quien quedó sorprendido.

– ¿Naruto? –Sasuke no sabía qué haría en ese momento el rubio, y a decir verdad, temía.

–Mi mano acá… ¿Verdad? –Preguntó Naruto colando una de sus manos por la camisa de Sasuke hasta llegar a sus pezones para allí apretarlo y masajearlo.

–E-Eh… Sí… –Respondió Sasuke rodeando a Naruto con sus brazos, en un débil abrazo. Estaba sumamente sonrojado y avergonzado por su comportamiento.

–Y me muevo así… ¿No? –Preguntó de nuevo Naruto, pujando su pelvis contra la contraria usando como base el suelo, llegando así más profundo en el interior del azabache.

–Cla-Claro… –Respondió nuevamente Sasuke –A-Ah… Así… –Susurró aferrándose más a Naruto.

–No importa si voy rápido, ¿Verdad? –Preguntó Naruto con un deseo carnal recorriéndolo, ya sabía lo básico, ahora era cosa de llevarlo a algo más placentero.

–Ha-Hácelo… –Respondió Sasuke y aferrándose más a Naruto esperó a que comenzaran a penetrarlo más fuerte, cosa que pasó casi de inmediato.

–H-Hmm… –Musitaba Naruto mientras tenía poca coordinación en apretar los pezones de Sasuke e ir rápido, entonces optó por una sola. Sujetándose del suelo con ambas manos, comenzó a penetrar más a Sasuke, y cuando eso ya no era suficiente, comenzó a sacar y meter su pene en el interior de Sasuke de una manera demasiado veloz, pujaba rápido fuerte y preciso.

–A-Ah… ¡Na-Naruto! A-Así… –Gemía Sasuke con una felicidad invadiéndolo, su amor que creyó imposible alguna vez estaba dando ‘frutos’ a su parecer. Y con ese gemido, Naruto quiso llegar más allá. Sujetó la cadera de Sasuke con ambas manos, y con una fuerza increíble, la pujo contra sí mismo cuando el pujaba para meter más a fondo su miembro. Logró así tocar el punto sensible de Sasuke, haciéndolo gemir más – ¡A-Ahn! ¡Naruto! ¡Ahí! ¡Nng!~ –Gimió Sasuke nuevamente enterrando sus uñas en la espalda de Naruto.

–Vale…~ –Respondió Naruto entre jadeos, aquello los había hecho sudar. Entonces prosiguió con lo hecho unas tres veces más, llegando cada vez más a dentro del punto que volvía loco tanto a él como a Sasuke.

Aquella sala estaba llena de gemidos, jadeos y sudor, ambos ponían de su parte para que llegara lo esperado. El ansiado clímax hizo su aparición cuando en una última embestida, Naruto fue más allá del punto que volvía loco a Sasuke, haciendo que se corriese y conllevando con eso que él mismo eyaculara al interior de Sasuke al sentir más aprisionado a su despertado amigo. Quedaron entonces exhaustos en el suelo.

Sin notar, ambos chicos ya se habían juntado en cuerpo, pero faltaba lo más importante.

–Naruto… Te amo… –Declaró lo obvio Sasuke, rojo de la vergüenza y lo demás, logrando que Naruto sonriese.

–Lo noté –Respondió Naruto abrazando al azabache que había hecho suyo de una manera muy rara.

–Tú… ¿Tú me amas? –Se atrevió a preguntar Sasuke, haciendo que Naruto viera a un punto indefinido con un leve sonrojo para luego responder con una sonrisa. Sasuke se sintió feliz.

–…~ –Naruto llevó sus labios al oído del azabache y entonces susurró algo allí. Algo que hizo que Sasuke quedara boquiabierto, haciendo su sonrojo más intenso. 

Aquella noche, dos cosas quedaron seguras; Uno, a Sasuke le dolería la cadera por una semana, y dos, su amor era real.

Notas finales:

El lemon es demasiado vago, lo sé, intento mejorar, pero hoy hasta una mosca me distrajo de escribir xD Espero poder hacer mejores, aún así dejen sus criticas, ashudan <3

Anon, ¡Juera!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).