Near ya estaba cansado de seguir escondido, decidió levantarse y darse una ducha, solo esperaba que Keddie no hiciera alguna estupidez.
Después de ducharse, se sintió un poco mejor, y le pareció extraño que Keddie no hiciera nada, al parecer él también se siente mal, que bien, al menos no molestará en un tiempo.
Near estaba aburrido de rondar por su habitación, decidió salir, por suerte la puerta estaba abierta. La abrió lentamente, sabía que a Stephen le molestaba que saliera sin permiso, pero técnicamente no lo tiene prohibido, puede salir cuando quiera, es sólo que Stephen se preocupa mucho por él, lo trata como si fuera su propio hijo, cosa que a veces le irrita a Near.
Caminó por el largo pasillo, algunas personas le saludaban, se dirigió hasta una ventana y vio desde abajo, a Stephen yéndose en su auto, ¿a dónde iba? Se devolvió a su habitación y se encontró con Daniels.
-Oh hola Near ¿Que haces por aquí? -Preguntó alegremente.
-Hola Daniels, sólo andaba por ahí.
-Ya veo.
-Oye, ¿a dónde se fue Stephen? acabo de verlo subir en su auto -Preguntó Near.
-Oh, Stephen se fue a... -Daniels paró un momento-... No lo sé -Dijo con una falsa sonrisa.
Near entrecerró los ojos y lo miró con curiosidad, sabía que estaba mintiendo.
-¿Estás seguro de que no sabes a dónde se fue?
-Sí, sí, Near por supuesto.
-Muy bien.
Near se dio la vuelta y se dirigió a su habitación, pero no se iría con las manos vacías, sabía perfectamente que Daniels estaba mintiendo, y haría lo que fuera para saber que oculta.
<<Síguelo, Keddie>> Dijo Near dibujando una sonrisa maliciosa en sus labios.
Aunque Keddie estuvo inactivo últimamente, aún seguía por ahí, también le pareció interesante saber que tramaban Daniels y Stephen, así que decidió seguirlo.
Near se dirigió a su habitación como si nada hubiera pasado; y Keddie se fue siguiendo a Daniels.
Keddie fue detrás de Daniels, lo siguió por el angosto pasillo y fue detrás de una puerta, a una especie de laboratorio, estaba solo, ¿que pensaba hacer? Keddie se acercó más a él y vio que sacó algo del bolsillo, un celular.
-¿Hola? ¿Stephen? -Susurró Daniels, al parecer entró en esa habitación para tener privacidad- ¿ya está todo listo? si, no sabe nad... -Daniels paró, sintió una mala sensación- Espera, te llamaré luego.
Daniels sintió el ambiente frío, en ese lugar había una extraña atmósfera, sabía que Near sospechaba algo, así que supuso que Keddie rondaba por ahí, ese albino si que era insistente, ¿ahora que haría? Keddie lo seguiría hasta que tuviera una respuesta, tendría que idear algo.
Keddie por el otro lado, sabía que Daniels había descubierto su presencia, así que no tenía alternativa, él ahora ya no diría nada, así que tendrá que irse. Se devolvió hacia la habitación de Near en dónde este lo estaba esperando con una pequeña sonrisa aún en sus labios; Near levantó la vista y sintió la presencia de Keddie al frente suyo.
-¿Tan rápido supiste que tramaba? -Preguntó Near.
Keddie no tenía la respuesta que él esperaba, y se sintió mal por lo de la fiesta, así que decidió no mentirle esta vez.
...
Near borró la sonrisa de sus labios.
-¿Enserio? ¿Daniels te descubrió?
...
-Al parecer ya te conocen más de lo que pensé -Dijo mientras ladeaba la cabeza algo exasperado- Diablos, bueno, supongo que sería mala idea arruinar lo que sea que estén haciendo.
Near suspiró y se tumbó en su cama, se quedó mirando el techo sin hacer nada, estaba aburrido, no tenía nada que hacer, y se sentía algo extraño, reflexionó sobre lo que pasó en el día, primero Stephen le preguntó sobre el rosario, después la extraña amabilidad de los demás, después Stephen se fue sin dar aviso, y después Daniels se portaba de manera extraña. ¿que será lo que tienen escondido? sea lo que sea, a Near le daba una mala sensación, y por alguna razón, ya no quería saberlo.
Decidió olvidarlo y para no aburrirse fue a leer uno de sus libros, se sentó en el suelo y se quedó leyendo por horas, no pudo evitar recordar su niñez cuando estaba en la escuela y se mantenía escondido en la biblioteca sin ir a clase, soltó una pequeña risita y se volvió a concentrar en el libro. Unas horas después, sólo le faltaba media página para acabar el libro cuando escuchó que abrían la puerta, levantó la vista y vio a Stephen entrando.
-Hola Near -Dijo el hombre alegremente.
-Hola, ¿dónde estabas? -Preguntó Near sin quitarle la vista a Stephen.
-¿Porqué preguntas eso? -Dijo un poco nervioso.
-No te hagas, te vi salir en tu coche, ¿a dónde fuiste?
-¿Es que ya nadie puede dar un paseo?
Near lo miró de reojo, tanto Stephen como Daniels no saben mentir, suspiró y se hizo el tonto fingiendo que sí le creía.
-Lo que digas -Dijo Near rodando los ojos- ¿y que es lo que quieres?
-¿A que te refieres?
-¿Para que viniste? siempre entras a mi habitación para algo.
-Ah, eso... Nada, acompáñame Near, es hora de otra tarea.
Near chasqueó la lengua, se levantó y miró a Stephen de la manera más fría que pudo.
-¿Y ahora que ejercicio haremos?
-Ya verás.
Stephen se llevó a Near a la sala de prueban en dónde ya estaba Daniels, Near se sentó en una silla frente a una mesa, en la mesa habían tres objetos, una foto, una caja musical y una moneda. La misión de Near es ver si esos objetos le producen algún recuerdo de algo o alguien, y Daniels estaba ahí para grabar, mientras que Near se pone una especie de diadema con cables, seguramente para medir las reacciones de su cerebro o algo así.
-Muy bien, ¿estás listo? -Preguntó Stephen sentado junto a él.
-Sí -Respondió Near sin apartar la vista de los objetos.
Primero tomó la moneda, no sintió nada, después tomó la foto, tampoco. Sólo le quedaba la caja musical, la tomó con cuidado, sintió en ella un sentimiento de tristeza.
<<Keddie, ¿Puedes ver algo?>>
El espíritu hizo un movimiento y centró la mente de Near con los sentimientos residuales de la caja, pudo ver a una niña, una niña pequeña, con la caja entre sus brazos, en ese instante Keddie se detuvo, y Near quedó perplejo.
-Near, ¿viste algo?
-S-sí, vi a una niña, esta caja era suya.
Stephen se quedó callado, estaba sorprendido, antes de que pudiera hablar Daniels lo llamó, se dio la vuelta y se dirigió hacia dónde él.
-Near, ven aquí -Dijo Stephen haciéndole señas con la mano.
Near dejó la diadema en la mesa y se dirigió hacia dónde Stephen y Daniels.
-¿Que pasa?
-Near, ven a afuera, necesito que conozcas a alguien.
El albino asintió y se fue detrás de Stephen, se dirigieron al pasillo y se encontraron con un pelinegro de ojos carmesí, recostado contra la pared de brazos cruzados, los estaba esperando.
-Near, él es Beyond -Dijo Stephen señalando al pelinegro que lo miraba de reojo, le incomodaba.
-Un placer, Nate -Dijo el pelinegro aún de brazos cruzados.
-Hola -Dijo Near algo aburrido.
-Near, irás con Beyond.
-¿A dónde? -Preguntó Near un poco preocupado.
-Te llevaremos a la CIA -Dijo Beyond, mientras sacaba un frasco de mermelada de su maleta.
-¿Perdón? -Preguntó Near algo asustado y enfadado.
-Ya me oíste, te llevaremos a la CIA -Dijo el pelinegro lamiendo sus dedos cubiertos de mermelada.
Near ladeó su cabeza rápidamente hacia a Beyond y después hacia Stephen, estaba alterado.
-¿Stephen?
-Near, la agencia, quiere que te unas a la CIA, Beyond se encargará de ti ahora. Tienes que irte hoy con él.
Near abrió los ojos al escuchar eso.
-¿Acaso se volvieron locos? ¿porqué quieren llevarme ahí? -Preguntó Near casi gritando mientras retrocedía un poco.
-Ese no es asunto tuyo -Dijo Beyond mirando con frialdad a Near.
-Lo siento Near, pero así lo quiere la agencia, yo no puedo hacer nada, sólo vete con él -Dijo Stephen haciendo un gesto de disgusto.
Near sacudió su cabeza quería explotar, estaba furioso, no quería irse, se quería quedar ahí, no quería irse a la jodida CIA, ¿para qué se lo quieren llevar? Near no podía hacer nada, suplicó y suplicó pero no pudo hacer nada, suspiró con la vista nublada por unas lágrimas y decidió no desistirse, dio media vuelta y se dirigió a su habitación, a recoger sus cosas.
Entró a su habitación y tomó sus objetos más preciados, para que pudiera recordarlo, cuando cerró la maleta y se levantó, sintió que algo se cayó, bajó la vista y vio que era el rosario, se le había soltado, no pudo evitar recordar cuando se le cayó a Mello, ese recuerdo hizo que sus lágrimas crecieran más hasta que comenzaron a caer, lo recogió del suelo y lo abrazó con fuerza, se lo volvió a colocar y salió de su habitación, en dónde estaban esperando Stephen, Daniels y... Beyond.
-Te vamos a echar de menos -Dijo Daniels abrazando a Near.
-Adiós, Near -Dijo Stephen.
Beyond los miró con asco, sacudió su camisa negra y tosió para que le prestaran atención.
-Es hora de irse, Nate -Dijo Beyond dando media vuelta.
Near le dio una última vista a Stephen y a Daniels, se dio media vuelta y siguió al pelinegro...