-¿Y si Jonghyun cambiara de lugar tu consultorio?- pregunté mirándolo, pero no esperé a que me contestara, sólo salí de su casa.
Suspiré y caminé hacia el auto, ahora sólo tengo que ir por Taemin y cenar. Mañana es su fiesta y tenemos que tener energía para todo el día. Lo digo por mí, no por él.
Entré al auto y me puse el cinturón de seguridad, luego salí de la propiedad de Key para dirigirme hacia la de Kyuhyun. Pero me quedé en un semáforo porque estaba en rojo, aproveché para tomar mi celular y mandarle un mensaje a ChangMin, mañana tendremos que ir al hospital a ver a Baekhyun, porque el domingo quiero pasarlo sólo con Taemin.
Puse en marcha el auto pero no fui directo hacia la casa de Kyuhyun, antes hice una parada en la tienda de comida a la que le compraré la que mañana daremos, también pasé a revisar los pasteles y el resto de las cosas que ocuparemos.
…
-Mañana será un gran día.- susurré mirando a Kyuhyun porque no quiero despertar a Taemin. –Los esperamos a las cuatro de la tarde.-
-Ahí estaremos.- susurró Sungmin así que asentí. –Nos vemos mañana.-
-Nos vemos y gracias.- iba a hacer una reverencia pero como estoy abrazando a Taemin porque se quedó dormido, probablemente se despierte al hacerlo.
Me ayudaron a salir de su casa porque era difícil con Taemin como koala en mi pecho. Entré al auto y lo recosté en el asiento trasero, le coloqué mi chaqueta para que no sintiera frío, pero además de eso, ya estaba abrazando su colita de mapache.
Qué lindo.
Pero salí de mi trance para ir hacia la puerta del piloto, entré y puse el seguro en todas las puertas, luego conduje hacia nuestra casa. Es mejor que hoy sólo deje el auto afuera, llevarlo a guardar a la pensión será cargar a Taemin desde allá, y no es que me moleste, sino que podría despertarlo.
Así que lo tomé entre mis brazos y cerré la puerta casi pateándola.
Entré a mi casa y fui rápido hacia la habitación de Taemin, lo recosté y regresé a mi puerta principal para cerrar bien, además de ponerle alarma al auto. Con la entrada asegurada caminé hacia la habitación de Taemin, entré y caminé lento hacia él.
Seguía dormido, abrazando su colita.
Tomé las cobijas para cubrirlo, al hacerlo instantáneamente soltó su colita para aferrarse al borde de la cobija. Despeiné su cabello y le besé la frente.
-Descansa.- según Kyuhyun no pararon de correr hasta que Sungmin preparó la cena, luego sólo estuvieron jugando con las consolas y de repente el personaje de Taemin no se movía ni nada, así que Kyuhyun lo miró, notando que ya se había quedado completamente dormido.
Y a la media hora llegué por él.
Bostecé mientras cerraba su pieza, fui a cerrar las llaves del gas y que las puertas estuvieran completamente cerradas y seguras. Luego caminé hacia mi habitación. Entré y caminé hacia la cama, en la que me dejé caer.
Sentí la suavidad de la almohada y sonreí.
Suspiré y cerré los ojos.
…
-Ñé.- fruncí el entrecejo y abrí los ojos lentamente, sonreí porque Taemin estaba frente a mí, con su colita en las manos.
-Buen día.- susurré sentándome en la cama, Taemin camino hacia mí y terminó sentándose a mi lado.
-Tío Kyu estuvo jugando conmigo.- asentí mientras Taemin se tallaba los ojos. –Y Tío Sung dijo que ya era tarde para seguir jugando, nos prestó la consola y ñé, desperté aquí.-
-Kyuhyun dijo que estuvo muy feliz de estar contigo.- contesté. –Vamos a tomar un baño que hoy será un día agitado.- me levanté de la cama y Taemin me siguió. –Te divertiste mucho con Kyuhyun, supongo.- pregunté caminando hacia la llave de gas para abrirla y luego encender el boiler.
-¡Ñé!- asintió tan fuerte que creí se lastimaría el cuello.
-¿También con el tío Sungmin?- apagué el fosforó. Miré a Taemin que seguía detrás de mí, así que me agaché para abrazarlo y levantarlo del suelo. –Hoy vamos a ir con el tío Max al hospital, también estará Suho.-
-¿Al hospital?- preguntó, abrí la puerta de baño para que entráramos.
-Es por asuntos personales.- contesté bajándolo al suelo. –Ya regreso, iré a sacar la leche del refrigerador para que no esté tan fría.- Taemin asintió y antes de que se bajara el pantalón salí del cuarto de baño.
…
-Quiero estar un momento más.- susurró haciendo berrinche, dentro de la bañera, con un patito de goma en las manos. –Sólo un poco más.- susurró mirándome con sus pupilas dilatadas.
-Nope.- contesté quitándole el patito de goma. –Si sales ahora, más tarde podrás usar la piscina hasta que salgan las estrellas.- susurré tendiendo su toalla.
-¡Ñé!- se levantó y me apresuré a cubrirlo.
-Ve a ponerte ropa.- dije poniéndole la toalla. –Me daré un baño así que cuando termines comienzas a cepilla tu cabello.-
-¡Ñé!- y se fue corriendo.
Suspiré negando, le he dicho que no corra con los pies mojados porque se puede caer, pero bueno, niños.
Sólo para ahorrarme el susto, cerré la puerta del baño y proseguí a ducharme, sonreí a medio champú porque escuché que Taemin quería abrir la puerta, por lo que mi ducha normal se convirtió en una militar, y terminé de bañarme tan rápido que abrí la puerta en dos segundos.
-¿Esto está bien?- Taemin extendió sus brazos para que lo mirara.
-Así está bien.- contesté saliendo del baño. –Voy a ponerme ropa y luego desayunaremos.-
-Está bien~-
…
-El hospital tiene horario de visitas de diez de la mañana a las seis de la tarde.- asentí sacando la cuchara de mi taza de café, noté que Taemin también sacó su cucharita del cereal. –¿Minho?- dejé de mirar hacia Ñé para mirar a ChangMin.
-¿Y a qué hora iremos?- pregunté.
-A las diez, antes de que reciba más visita.- asentí lento por eso. –Suho nos verá en el hospital.-
-Está bien.- contesté antes de beber de mi café.
-¿Qué te molesta?- miré a ChangMin y luego bajé la taza de mis labios a la mesa. –¿O estás asustado?- me miró curioso pero negué.
-Nada de eso.- qué dirán mis papás al ver a Taemin, les dije que adopté a un niño, pero no que ese niño era un híbrido.
Ahora no me parece tan buena la idea.
De invitarlos, claro, no de tener a Taemin.
-Pero es la primera fiesta que se da en la casa de los abuelos que no sea para la familia en especifico.- con algo tengo que ocultarlo.
-Y es la primera que haces para un niño.- asentí, pero la fiesta y su organización es lo de menos. Es decir, ya está todo listo sólo falta que llegue la hora y los amigos de Taemin, aunque ahora que lo pienso, eso también puede jugarme doble.
No sé si Taemin conviva con todos realmente, o sólo con unos cuantos.
-Pero descuida, ¿quién mejor para cuidar de un niño que una mujer?- volteé a ver a ChangMin, creí que ya habíamos hablando sobre la equidad de género. –Vendrán las chicas, Wendy, Seulgi y todas, seguro ellas hacen que los niños se sientan cómodos.-
Aunque con la mujer es con quien tenemos nuestros primer contacto con el mundo, lo que las vuelve un lugar cómodo, entonces no está tan mal decir que como vendrán ellas, los niños estarán más cómodos. Y si sucede que algún niño tenga problemas con su figura de autoridad femenina, estamos nosotros, las figuras de autoridad masculinas.
Así que todo está bien.
-También invité a ya sabes quienes.- dije mirándolo, ChangMin me miró serio, pero levemente triste. –A las Red Dress.- o de menos, las amigas de ella, quien le dio el nombre al bufete.
ChangMin suspiró tan pesado que no fue buena idea invitarlas.
-Son parte del equipo.- susurré. –Ellas también tienen derecho…-
-No es que lo niegue. Sino que no sé si estoy listo para volver a verlas.- sonreí divertido.
-Si se miran todas se van a poner a llorar.- dije sonriendo. –Todas también eres tú.- Max me miró sonriendo pero algo molesto. –Mírame como quieras pero sabes que es verdad.- me levanté de la silla del comedor, tenía mi taza en las manos para ir a lavarla. –Vamos al hospital.-
…
-Habitación 82G.- susurró la enfermera que nos abrió la puerta. –El paciente ya puede hablar, pero intenten no sofocarlo.- los dos asentimos, Taemin seguía mirando el garrafón del pasillo.
Por qué, porque está bocabajo sobre una base y alguien tomó agua, haciendo que salieran burbujas dentro del garrafón, lo que le encantó a Taemin.
-No se preocupe.- contestó ChangMin. –No lo agotaremos.-
-Taemin.- susurré tirando de su mano para que me siguiera. Me miró curioso y le indiqué que pasáramos.
-Buen día.- susurré cerrando la puerta tras de mí, Max ya había ido a abrirle las cortinas para que el sol entrara y Taemin corrió al otro garrafón, dentro de la habitación. –¿Cómo te encuentras?- pregunté acercándome a su cama.
Byun Baekhyun nos miró asustado, supongo que es por el atuendo ya que los dos tenemos el traje negro con corbata.
-Somos de Red Dress.- dije extendiéndole una tarjeta de presentación, je, je, él la tomó y asintió lento, como queriendo comprender todo.
-¿Los abogados?- susurró tan lastimero que terminé asintiendo, espero que el proceso contra la señorita T sea rápido y favorable.
-Somos quienes representaron a Park Chanyeol.- susurró ChangMin acercándose a la cama, yo sólo me quedé en el sofá a un costado de la cama.
-¿Chanyeol está bien?- preguntó asustado, pero se asustó más al ver a Taemin corriendo del otro extremo de la habitación hasta mí. –¿Qué es…?-
-Un hibrido.- contesté antes de que completara su despectiva pregunta. –Queremos saber qué fue lo que pasó esa noche.- Taemin se recostó contra mi hombro y sus orejitas se bajaron, su colita de mapache lo cubrió también. –¿Estás aburrido?- le susurré.
-¿Hibrido?- escuché a Baekhyun pero miré a Taemin, solo asintió.
-Ven, vamos.- me levanté del sofá para ir hacia el garrafón de agua, había una pequeña sala de estar, así que tomamos asientos. –¿Quieres ver las burbujas?- Taemin asintió, incluso sus orejitas volvieron a elevarse.
Tomé un vaso de cristal, lo revisé a contra luz para saber si estaba completamente limpio, sonreí porque no tenía ni una huella dactilar.
Comencé a servirme agua.
-¿Es tu hijo?- el vaso se llenó así que comencé a beberlo, Taemin me veía emocionado.
-¡Lee Taemin!- se levantó por un segundo del sofá para presentarse, luego volvió a sentarse y seguir mirándome, suspiré para poder digerir toda el agua. Volví a servirme un vaso más y las burbujas aparecieron.
-Es una ternurita.-
-Nos estabas contando qué fue lo que pasó esa noche, ¿quién te hizo esas heridas?- preguntó ChangMin, así que asentí, también quiero escuchar su versión.
-Ñé~- volteé a ver a Taemin, estaba mirando un vaso de cristal. Apunté al vaso y él asintió, así que se lo pase, aun tenía un poco de agua si es sed lo que tiene. –Está fría.-
-Taeyeon… ella…- tomé el vaso que Taemin me estaba dando para servirle más agua dárselo, luego me levanté del sofá y fui hacia la cama, poniéndome al lado contrario de Max, sólo para reflejar el sentimiento de seguridad. –Mientras ella se arreglaba para salir a cenar, Chanyeol y yo estaríamos jugando dominó. Estaba preparando panquecitos.- susurró casi llorando.
Lo entiendo, la conmoción de haber vivido todo eso y tener que contarlo a alguien más suele ser difícil.
-¿De qué eran los panqués?-
-ChangMin.- lo miré con obviedad. –¿Qué más sucedió?-
-Estaba en la cocina terminando de prepararlos.- susurró mirando hacia la izquierda. –Quería meterlos al horno pero ella se lanzó contra mí.- sus ojos comenzaron a aguarse, así que asentí y palpe lento su hombro. –Sentí, sentí que me encajaba algo.- ChangMin sacó un paquete de pañuelos desechables. –Olvidé los panqués y corrí para salir de casa.-
Baekhyun tomó el pañuelo pero contrario a lo que esperaba que hiciera, sólo lo presiono en su mano.
-Pero ella me siguió.- hiperventiló y terminó con una mueca de dolor, así que le pedí que parara. –Luego desperté aquí.-
-Tranquilo.- susurró Max.
-¿Se puede?- los tres volteamos a ver quien entraba, sonreí porque es Suho. Pero tienen en sus manos una cajita con papel llamativo y un moño. –Gracias por esperarme.-
-Queríamos ser los primeros.- los amigos de él siempre suelen venir, según el libro de visitas, al medio día. Y si esperamos nos tocará para la fiesta de Taemin.
-Esto es para ti.- se lo dio a Taemin, él dejó el vaso con agua en la mesita de centro.
-¿Lo puedo abrir?- preguntó mirándome.
-No.- contestó Suho. –Lo abres mañana después de comer cereal con mermelada de fresa y leche.- le sonrió hasta que Taemin asintió.
-Ñé.- susurró mirando la caja con detenimiento.
-A nosotros nos contrataron tus amigos.- dije regresando al tema. –La primera noche que Park Chanyeol estuvo en la prisión. Tienes buenos amigos.-
-¿Red Dress es caro?- preguntó mirándome, sonreí porque me dio algo de ternura.