-Pero para mí sí, porque tú me diste esa galleta, ñé.- aspiré el aroma de su perfume, eso me hace feliz, ñé. –Seré alguien mejor, alguien que tú merezcas.-
-Sólo pórtate bien.-
¡Ah!
Retraje mi cadera e intenté salir de su abrazo porque, me está lastimando.
-Ñé.- susurré tomando con mis manos las suyas que estaban en mi parte privada. –Me duele.-
-Tienes que portarte bien, Taemin.- abrí mis ojos a sobremanera, vi el rostro de Amo Jonghyun cerca del mío.
-Me lastimas.-
Amo Jonghyun tomó mis manos para ponerlas sobre mi cabeza, comenzó a molestarme mis orejitas, me dolían e intentaba quitarlas de sus dedos pero Amo Jonghyun insistía, ñé, me lastima.
-Ñé.- susurré con mi voz entrecortada. –Amo.-
-Vamos.- soltó mis orejitas pero seguía sujetando mis manos, me hizo levantarme de la cama e hincarme al momento. –¿Te sigue gustando la crema batida?-
-Ñé.- sentí como la ponía sobre mi mejilla, yo tenía los ojos cerrados porque nunca me ha gustado su cara cuando me la pone.
-Taemin.- me dio miedo así que los abrí para mirarlo. –Abre la boquita.- sentía temblar mi quijada mientras la abría, Amo Jonghyun dirigió la boquilla de la crema a mis labios, pero de nuevo tenía la lata en su parte privada. –Cómela.-
-Ñé…- presioné los ojos al sentirla, pero esta vez también sus manos estaban en mi hombros.
-¡Taemin!-
Abrí mis ojos y salté un poco sobre la cama, no veo nada, ñé. Pero me senté en la cama, sequé mi frente. Pasé saliva y volteé a ver a Minho, me sentí un poco triste porque me está dando la espalda.
Volteé hacia mi, ¿Minho?
-¿Ñé?- ¿a qué hora vino a mi cama? Espera, aquí huele a papel y a Minho, esta no es mi habitación. –Minho.- susurré moviéndolo, ñé~ no se despierta. Suspiré rendido así que sólo me su brazo y lo levanté para que me abrazara.
-¿Tuviste una pesadilla?-
End Pov’s Taemin
-Perdóname.- susurró comprimiendo sus ojitos, aferrándose al pecho de Minho. –No sé por qué…-
-Todo está bien.- contestó Minho despeinando su cabello. –No me molestó la manera en que reaccionaste con Lee Jonghyun.-
-Pero te pusiste triste, ñé.-
-Estudio la conducta humana, sé por qué reaccionaste así por eso no estoy molesto.- susurró Minho prolongando el abrazo. –Lo bueno ahora es que estés saludable y si en algún momento tú… quieres ir con él… yo lo aceptaré.-
-¡Ñé!- Taemin se separó del cuerpo de Minho para mirarlo a los ojos. –No quiero, él me dejó, tú me diste la mano, ñé.-
-Está bien que lo veas así.- susurró Minho sentándose en la cama para alzar su mano y tomar la de Taemin, luego tiró de ella un poco para que se recostara sobre la cama. –Pero tampoco te negaré que…-
-¿Tú me amas? ¿Minho?-
-Como no tienes idea.- contestó suspirando mientras sonreía. –Pero amar a veces significa hacer sacrificios.-
-Yo no me iré de tu lado.- dijo Taemin girando su rostro para mirar a Minho, pues su cabeza yacía sobre las piernas del mayor. –Si me prometes una cosa.-
-Qué cosa.-
-Que siempre me vas a amar.- susurró sonriéndole.
-No necesitas condicionarme en algo que será para siempre.- susurró Minho correspondiendo al sonrisa, mirando hacia los ojos de Taemin que se rasgaban mientras sus comisuras estaban elevadas.
Minho pasó saliva sin perder de vista esa mirada, sentía que su corazón comenzaba a latir con fuerza e inconscientemente comenzó a inclinarse.
Taemin dejó de sonreí al ver como poco a poco el rostro de Minho se acercaba, relamió sus labios ansioso, sus pupilas se dilataron y escuchó el chasquido de los labios de Minho.
-¡Min! ¡Estoy en casa! ¡Soy Max! ¡Necesito que me prestes el maletín criminalístico!-
…
-Vendré por ti a la hora de la salida.- dijo Minho quitándole el seguro de la puerta de Taemin para que saliera.
-Ñé.- susurró Taemin saliendo del auto con su mochila en la mano. –Nos vemos.-
-Cuídate por favor.- dijo Minho antes de que la puerta se cerrara, pero Taemin regresó sobre sus pasos para mirar a Minho por la ventana pero como seguía cerrada sólo sopló vapor de su boca para escribirle sobre ella un leve “tú también” luego se fue.
Minho sonrió, luego suspiró y negó de la misma manera para salir del estacionamiento. Tomó su celular y le marcó a Max sólo para avisarle que iba camino a esa escena del crimen.
Mientras Taemin caminaba hacia su salón revisaba que llevara todas las cosas que usaría para esas clases, se aseguró de llevar su tarea de todas las materias y al comprobarlo sólo asintió y corrió hacia su salón de clases.
-¿Hicieron la tarea?- escuchó a KwangMin así que se aproximó a saludarlo.
-Claro.- contestó Taemin sonriendo, dejando su mochila en su asiento. –¿Tú no?-
-También.- corearon los gemelos al unísono.
-¡Naeun!- susurró Taemin al ver que entraba al salón de clases, se levantó lo más rápido que pudo para ir con ella y ayudarle a poner su mochila en su asiento tal como él lo había hecho antes. –¿Pudiste entrevistar a mi tío Jonghyun?-
-Sí.- contestó sonriendo. –Pero fue una entrevista corta porque tenía planes.-
-Pero lo hiciste de él.- dijo Taemin, sólo para asegurarse y además, podría conocer un poco más de Jonghyun.
-Sí.- Taemin sonrió de inmediato. -Ya va a entrar la maestra.- le susurró al verla caminar por el pasillo, por lo que Taemin regresó a su asiento antes de que ella entrara.
…
-Mi persona inspiradora es.- dijo KwangMin de pie, frente al salón de clases. –Mi papá.- sonrió mirando a su maestra quien asintió. –Antes era un comerciante pero luego de años de trabajo duro logró ser el director del departamento de Recursos Humanos en una empresa de comida congelada.- terminó por leer en su cuaderno. –Y fin.- sonrió más amplio.
-Muy bien, ¿y qué es lo que te gustaría tomar de él para tu vida, KwangMin?- preguntó su maestra acercándose para tomar el cuaderno y firmarlo.
-Su perseverancia.- contestó recibiéndolo. –Porque nunca se ha rendido.-
-Bien, anotaremos su perseverancia en el pizarrón.- mismo que hizo la maestra. –El siguiente es YoungMin.- quien se levantó para pasar al frente con su cuaderno.
-Mi persona inspiradora es el papá de Taemin, Choi Minho.-
-¿Ñé?-
-Comenzó siendo un estudiante de una licenciatura que nadie creía, luego estudió aún más, prestó su servicio por tres años al hoy desaparecido bufet Croes2, en donde tomó fama de buen asesor jurídico para después formar la conocida asociación Red Dress en donde se desempaña como criminólogo particular.- terminó de leer para mirar hacia su maestra pero no pudo evitar mirar a Taemin, que parecía lucir enojado.
-¿Y qué es lo que podrías tomar de su vida para ti, YoungMin?-
-Él siempre busca tomar ventaja de todo. Eso me gusta, poder analizar mis capacidades y debilidades y sacarle provecho a eso.- asintió lentamente, esperando poderlo tomar para su vida, no sólo por contestarle a la maestra.
-Anotaremos en el pizarrón el análisis también.-
-Yo lo hice de la misma persona.- dijo Taemin mirando a su maestra, que pese a que alzó las cejas sorprendida terminó sonriendo.
-Pero estoy segura de que lo que YoungMin encuentra inspirador no es lo mismo para ti.-
-Pues… ñé.- ni siquiera había pensado en que Minho sería alguien analítico, ¿qué no esos estaban en hospitales usando batas blancas? Minho jamás usó una así. Ni trabajaba para el hospital.
-Pero si traes a la misma, pasa también. Así podremos hacer una retroalimentación con la información que trajo YoungMin.-
Taemin se levantó de su asiento y caminó hacia el frente del salón, tomó su cuaderno y afinó su garganta.
-Mi persona inspiradora también es mi papá, Choi Minho.- leyó. –Minho se define como una persona multiusos. No suele confiaren otras personas para trabajar en equipo y cree que eso es una debilidad, por eso se asegura de que su equipo sea de los mejores. Estudio muchas cosas como la dactiloscopia, en su vida sólo ha hecho una reconstrucción facial y fue para su escuela, no ejerciendo profesión. Le apasiona mucho la criminalística pero definitivamente prefiere la criminología.-
-¿Sabes por qué?- preguntó la maestra. –¿Algún de los tiene el dato?-
-Sí.- contestó YoungMin levantando su mano, entonces Taemin leyó sus apuntes para encontrar esa respuesta. –Porque un estudio de riesgo es más caro que algo de criminalística.-
-Y porque es más rápido de hacer.- completó Taemin. –Yo lo he visto, solo necesita su computador, el expediente y una botella de yogurt.-
-Bien, ¿y qué es lo que te inspira de él? ¿Qué tomarías de su vida para la tuya, Taemin?-
-Ñe~- susurró suspirando pero sonriendo. –¿Tengo que decir sólo una?- miró a su maestra.
-La que sea más significativa.-
-Su corazón.- respondió sonriendo. –Minho es la persona que tiende su mano sin pensarlo dos veces.-
-Bien, anotaremos la solidaridad en el pizarrón.-
…
-¿Cómo se te ocurre ir con mi papá?- preguntó Taemin guardando su cuaderno de la materia para sacar el de la próxima.
-No sabía que ibas a ir con él habías dicho que no.- se defendió YoungMin sentándose sobre la mesa de su pupitre.
-Taemin.- escuchó la voz de Naeun así que dejó de pelear con YoungMin para sentarse bien en su asiento y mirarla. –Me van a hacer una fiesta por mi cumpleaños.- le tendió una cartita con un listoncito rojo, mismo que llamó la atención de Taemin por lo que la tomó. –Me gustaría que estuvieras ahí.- le sonrió y luego salió con el resto de sus amigas.
-Ñam.- susurró KwangMin picándole la costilla derecha a Taemin, quien sólo se rió. –Ya ligaste.-
-¿Ligar?- preguntó Taemin mirando la nota, sintiendo un aroma dulce desprenderse de ella. –¿Qué es ligar?-
-Es cuando una persona quiere contigo.- respondió YoungMin.
-¿Y qué quiere?- volvió a preguntar Taemin, cambiando la carta de su mano derecha a la izquierda para llevar sus yemas a la nariz, frunciendo el entrecejo de inmediato por el aroma a vainilla.
-Estar contigo.- respondieron los gemelos. –Estar de quererse, amarse, tener hijitos.-
-No gracias.- susurró Taemin dejando la invitación sobre la mesa de su escritorio.
-¿No vas a ir a la fiesta de Naeun?- preguntó YoungMin tomando la invitación de la mesa para abrirla. –Es el sábado.-
-No está invitando a todos.- dijo KwangMin extendiendo su mano para tomar la invitación y leerla.
-¿Los invitó a ustedes?- preguntó Taemin mirándolos alternativamente.
-Sí, ayer después de que salimos de aquí.-
-Ñé~- susurró Taemin un poco desilusionado.
-Pero deberías de ir.- YoungMin le regresó su invitación. –Nosotros iremos.-
-Es que los fines de semana… Minho y yo hacemos “actividades en familia” no sé si quiero ir con Naeun, tampoco me agrada eso de quererse y tener hijos.-