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Entre leyes y colas peludas por 5kn_akatsuki

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Notas del capitulo:

Hola!!!

Realmente no sé cómo empezar esta nota pero lo resumiré en dos partes. 

1.- Hace un tiempo, cuando ibamos por el cap 6 creo, dije que mi lector favorito era yo y muchas personas se enojaron por pensar de esa manera, Actualmente, a dos años de distancia, creo que ya entendimos por qué decia eso. Hago este fic porque es algo que quiero leer y allá afuera no encuentro, principlamente porque no tengo tiempo de buscar, porque estoy segura que este no es el unico de esta tematica aquí. 

2.- Este es mi primer capítulo egoista, porque es lo que quiero leer y cómo lo quiero leer. Pero verán que nuestros gustos no son tan diferentes y les agradará. Tambien, este es mi primer capitulo diamante, porque toooodo el 2Min anterior habia sido carbón, ahora tras unas puliditas, ha quedado justo como lo quería. Y, este es mi capítulo más largo. El más largo que he escrito en toda mi vida, este desbanca a "Sesión de Doma TopXTae" que eran poco más de 35 hojas, y este fue... me faltaron 3 hojas para llegar a las 100, pero como quedó me encantó. Si le ponia más se perdería. 

Terminaré diciendo que estoy muy feliz con este capítulo y espero que disfruten de esta montaña rusa. 

A leer!

-Taemin.- susurré retrayendo mi mano. Lo que haré a continuación podría ser una mala idea, pero me siento ligeramente tentado. –Ya tuviste tu recompensa, ¿lo has olvidado acaso?- pregunté aun con el tono de voz muy bajo.

-Pero Amo no me tomó.- alcé las cejas sorprendido, Taemin suspiró y se volvió a quedar dormido. Asentí lentamente mientras me retiraba de él para volver a acostarme en el suelo, miré el techo y la araña que casi colgaba sobre mí. Estiré mi mano que estuvo en su rostro y vi que aún estaba húmedo mi dedo, lo miré unos segundos más hasta que decidí levantarme y asearme las manos.

-Eso fue extraño.- susurré. Entonces sí fue cierto que tuve relaciones con él. Mmm… pero ha actuado como si no hubiera ocurrido porque a la mañana siguiente… él estaba un poco molesto. ¡Sí! Ya lo recuerdo, que me despertó diciéndome “te buscan en la puerta” y ni “buenos días Minho” dijo.

Pero si ese fuera el caso, ¿por qué estaba enojado? ¿Porque me embriagué? Seguramente fue porque en todo el día no contesté sus llamadas ni sus mensajes. Normalmente le aviso en dónde estoy y en cuanto tiempo llegaré a casa y esta vez no fue así. Me imagino que por eso estaba enojado.

Pero pensemos un poco más, él no parecía haber experimentado actividad sexual pero… tampoco me daba cuenta de cuando lo hacía con KwangMin, rayos, ya me enojé. ¿Por qué no detecté eso desde hace tiempo? Tal vez cuando se reía más por cualquier cosa era el día en que intimaba. ¡Casi diario! Suspiré porque eso me molestó un poco más.

Cerré los ojos y me giré en el suelo para que el frio me serenara.

-Ah~ Amo…- los abrí de nuevo pero no me moví. –Crema batida.- ¿crema batida?

“Crema batida” tiene que ser algún código o una frase especial que le recuerde algo o sea analogía. ¿Crema? Crema es dulce, antes le compraba dulces cuando se portaba bien así que puede que aun esté pensando en su recompensa, aunque la crema batida también está en los pasteles, y los pasteles se dan cuando se celebra algo por lo que deduzco que en efecto, está pensando en alguna recompensa especifica.

Mañana le compraré un pastel.

Mmm… la abogada no me ha llamado, me pregunto si sí se quedó con mi tarjeta o si la tiró en cuanto me di la vuelta, ¿cómo se llamará? No me acuerdo para nada de su nombre, sólo que alegaba bastante con el profesor porque tenía puntos de vista diferentes. Todavía tengo los apuntes del doctorado, seguro en alguna hoja tendrán que estar los nombres de mis compañeros o en la foto de graduación porque todos me la firmaron por detrás.

-A… amo~- me recargué en mis codos para mirar hacia el jacuzzi en dónde estaba Taemin aun dormido.

-¿Qué?- susurré.

-Amo cómo me tocas.- ¿estará en su fase Rem del sueño? ¿O cuál era en la que podemos hablar dormidos? Aunque como medida preventiva no lo dejaré que esté más de cuatro horas frente a una pantalla que emita luz azul.

-Amo quiere que ya te duermas.- dije sonriendo sintiéndome un poco emocionado por lo que pueda contestarme.

-Ñé~- lo oí acomodarse por el sonido de sus zapatos contra el mármol del jacuzzi.

-Descansa.- susurré volviendo a acomodarme en mi almohada.

-¡Ñé!- fruncí el entrece ¡¡¡ohh!!! ¡Mi espalda!

-Ah~-susurré girándome con cuidado en el suelo para no lastimarme.

-¿Qué haces aquí?- fruncí el entrecejo conteniendo un poco del dolor que sentía en toda la espalda mientras Taemin salía del jacuzzi con todo y la cobija que le puse ayer. –¿Estás bien?- me cubrió con ella pero negué de inmediato para retirármela.

-Ayúdame a levantarme.- susurré. Él de inmediato me tomó de los hombros para hacer que me sentará, mordí mi labio inferior porque el dolor se incrementó en la parte baja de mi espalda.

-Oh, no.-

-¡No! ¡Espera!- Taemin me soltó y casi caigo al suelo de nuevo, a no ser que logré meter las manos, sintiendo de nuevo las punzadas en mi espalda. Me volví a recostar lentamente, quizá si mantengo una buena postura me duela menos y cuando me sienta listo me levantaré.

Sí, ese será el plan.

-Lo siento.- negué lentamente al oír a Taemin.

-Descuida.- contesté.

-¿Qué haces aquí?- preguntó acostándose a mi lado, en el suelo. –Se supone que estaba enojado contigo.-

-¿Que se supone que tenía que hacer?- pregunté mirándolo, notando cómo sonreía y negaba aun con su sonrisa en el rostro.

-No sé.- contestó mirándome, de cerca, sus ojos se ven muy claros. –Pero no deberías de estar aquí, así no funcionan los berrinches.-

-¿Cómo funcionan?- pregunté.

-Deberías de haberme dejado solo y hoy al despertar sólo decirme “¿sigues enojado?” y así, ñé.- se giró para mirar el techo, yo me quedé viendo su perfil.

-Soy criminólogo, ¿recuerdas? No me puedo enojar.- supongo que se sintió presionado con mi mirada, así que también me giré para admirar el techo.

-¿Ni un poquito?-

-Ni un poquito.- afirmé asintiendo, cruzando mis manos por mi pecho.

-¿Con nadie?- me miró por un segundo que sólo pude alzar una ceja antes de que dejara de mirarme.

-No me puedo enojar con Rockhyun porque él tiene haya afuera una segunda opción.- me pregunto si ya se despertó o si sigue dormido. –Tú también la tienes. Me pone de nervios pensar en el día que me dirás “hoy me iré a dormir con YoonGi” o “pasaré el fin de semana con él”, ambos tienen segundas opciones y si me enojo será más fácil para ustedes tomarlas.-

-Hay algo que me gustaría contarte.- susurró e incluso afinó su garganta. –Pero antes dime, ¿quién es la segunda opción de Rockhyun? ¿El Fiscal?-

-No exactamente.- susurré bajando mis manos a mi espalda para intentar aminorar el dolor. –Es Yifan, el policía. Él cree que le entregaré a Rockhyun.- pero la mejor idea es que Rockhyun los visite cada tercer día, luego una vez a la semana, dos veces al mes y eventualmente dejará de ir.

-Por qué sería malo que esté con ellos, ¿ñé?-

-Principalmente porque Rockhyun no es un objeto ni un mecanismo inánime que se puede trasferir de persona  a persona.- asentí por eso. –Es decir, es un humano.-

-Pero Rockhyun sí quiere estar con él.- alcé las cejas por eso. –Me lo ha dicho, ñé.-

-Claro que no.- contesté.

-Porque recuerda que el Estado siempre cuida a los menores de edad, esa es su mayor preocupación, que los niños estén en un ambiente cómodo para ellos.- volteé a mirarlo rápidamente haciendo que dejara de hablar. –Digo, ñé.- sonrió nervioso.

-Incluso si Servicios sociales va a casa a evaluar las tres esferas, y van con Yifan a hacer lo mismo, la mía resultará más saludable.- por el hecho de que no tengo conflictos de pareja, porque en lo económico, el Fiscal gana más que yo.

-¿La social, la psicológica y la económica?-

-En realidad es biopsicosocial, ¿pero quién se fija?- me encogí de hombros sintiendo el dolorcito de nuevo.

-Servicios Sociales se va a fijar.-

-¿Puedo preguntarte por qué escogiste Artes plásticas?- como los gemelos habían tomado criminología, pensé que Taemin también.

-Me gusta mucho lo que haces, ayudas a las personas con sus problemas pero no estoy seguro si sería bueno haciendo eso también. Porque he estado leyendo algunos casos resueltos de Red Dress y hay de todo, desde robos simples hasta homicidios múltiples, lesiones a menores, personas con muertes violentas, y todo en fotos claras y descripciones súper claras.-

-¿Recuerdas la primera vez que las viste? Cuando eras pequeño.- Taemin se movió en el suelo, llevándose consigo la poca cobija que me cubría. –Te asustaste mucho.-

-¿Crees que eso haya causado alguna predisposición conmigo?-

-No.- contesté de inmediato. –Pero sí te pude haber predispuesto a la criminología, aunque eres tú quien toma las decisiones.-

-¿Crees que las decisiones que tomo son correctas?-

-Por supuesto.- contesté. –Aunque en un futuro parezcan malas, en el presente fue lo mejor que pudiste hacer. Por eso no hay decisiones incorrectas.-

-Yo.- no lo miré esta vez para no ejercer presión, pero oí que estaba llenando sus pulmones con aire. –Terminé con YoonGi.- alcé las cejas sorprendido incluso sentí que mi mandíbula cayó un poco, pero dejé mi sorpresa cuando lo oí sollozar. –No sé cómo me siento, no sé siquiera si fue bueno hacerlo, ni sé si fue correcto contártelo… es más, olvídalo.- se iba a levantar pero le tomé de la mano para impedirlo. –¿Me puedes abrazar?-

-Claro.- susurré. –Pero espera un momento mientras me levanto.-

-¿Por qué terminaste con YoonGi?- pregunté tomando la cobija para doblarla y dejarla sobre el lavamanos. –Si me quieres contar, por supuesto.-

-Hablar de eso es sacar temas aparentemente cerrados, ñé.- lo volteé a ver, Taemin estaba sentado en el borde del jacuzzi pero con la mirada baja. –Porque tiene que ver contigo.-

-Te haré una pregunta rápida.- me giré para verlo de frente, pero para no ejercer mucha presión, me recargué contra la puerta. –Me la tienes que contestar en menos de cinco segundos.-

-Ñé.- asintió.

-¿Te gustaría ser mi pareja?- pregunté dudando de mi elección de palabras, y bueno, en el rostro de Taemin había sorpresa.

-Sí.-susurró asintiendo efusivamente. –Sí, sí me gustaría.-

-Bien, gracias.-

-Quizá esto suene raro para ti, pero lo pensé mucho durante estos días, yo puedo ser una mejor versión de Hyuna.- negué lentamente pero con una pequeña sonrisa. –Si me dejas estar contigo, te juro que te demostraré que puedo estar a su lado y no como hijo o lo que sea que éramos antes. YoonGi me enseñó a ser una pareja, y Jonghyun hyung dice que tú estarías dispuesto.-

-No quiero que seas una mejor versión de Hyuna.- contesté mirándolo, haciendo que se sobresaltara. –Porque no hay punto de comparación.-

Taemin cerró la boca, mordió sus labios y lo vi bajar la mirada de nuevo, sólo que esta vez le acompañaba un fuerte puchero.

-Antes de que sigas pensando escúchame.- suspiré para cruzarme de brazos pero seguir recargado en la puerta. –Si yo quisiera otra Hyuna la hubiera buscado hace tiempo.-

-¿Cómo Chany?-

Ahora quién cerró la boca fui yo.

-No exactamente.- susurré. –Pero tienes la idea.- afiné mi garganta. –Lo que quiero decir es que si tú y yo “llegamos a estar juntos” no quiero que te comportes como te dije que era ella porque terminaré amándola en lugar de amarte.-

-Si tú y yo estamos juntos… y con lo que dijiste de Rockhyun, él se quedará a vivir con nosotros, ¿verdad?- asentí firme. –Entonces tendrás que ser la mamá.- asintió sólo que ya no vi las orejas de mapache.

-¿Por qué la mamá?- pregunté irguiéndome para tomar las cobijas porque Taemin se acercó.

-Porque tú lo trajiste.-

-Rocky.- susurré moviéndolo del hombro. -Pequeño necesito que te despiertes.-

-Cinco minutos más.- susurró girándose con la cobija.

-Necesito que tomes una ducha porque tenemos que ir a desayunar. Taemin se está bañando.-

-¿Me bañaré con él?- se sentó en la cama acomodando su cabello.

-No, hay otro baño.- comencé a sacar su ropita de la maleta. –Desayunaremos y para el medio día iremos con mis papás. Creo que ellos hicieron los planes para hoy.-

-¿Qué vamos a desayunar?- tomó las prendas que dejé en la cama y me miró, así que tomé su mano para caminar hacia el segundo baño, que es más pequeño.

-¿Qué quieres desayunar?- pregunté abriendo la puerta para que entrara.

-Yifan me había dicho que él desayunaba cereal con leche.- cerré los ojos un poco molesto.

-Vamos a bajar para desayunar, espero que tengan un poco de cereal.- susurré abriendo la puerta de cristal para que Rockhyun entrara a la parte de la ducha.

-¿Cuál es la caliente aquí?- me detuve antes de salir del cuarto de baño para voltear a verlo, afile la mirada sobre las llaves de agua y en efecto, noté que ahí tenían las letras que indican su temperatura.

-Verás.- susurré regresando sobre mis pasos para ir con él. –¿Notas la letra que está aquí?- debería de identificarla aunque esté en alfabeto occidental porque Key le ha enseñado un poco de inglés.

-Sí.- asintió.

-Es una “H” de Hot, en inglés es “caliente”.- Rockhyun alzó las cejas sorprendido e incluso su boca se había hecho un asterisco. –La otra tiene una “C” de Cold, que significa frio en inglés. Entonces, en dónde veas una H es caliente y en donde esté C, es frio.-

-“Eich”.- susurró. –Interesante. Eich y cí-

-Con el tiempo tu pronunciación en inglés tendrá que perfeccionarse.- susurré desacomodándole el cabello. –¿Tienes otra duda?-

-No.- contestó negando.

-Entonces dúchate, no tardes tanto para desayunar pronto.-

-Está bien~- me giré para salir del cuarto de baño, asentí al oír que la ducha estaba abierta así que Rockhyun saldrá en diez minutos más o menos. Caminé hacia el otro cuarto de baño, en donde Taemin tendría que estar finalizando su ducha.

Llamé a la puerta.

-Ocupado.-

-Lo sé, ¿pero ya terminaste?-pregunté acercándome a la puerta para que mi voz la escuche bien.

-Ñé, si quieres entrar al baño puedes hacerlo.- supongo que todavía no termina.

-No, sólo te aviso que Rockhyun ya se está duchando y que bajaremos a desayunar, para que te des prisa.-

-¡Ñé!- supongo que ahora asintió.

-¿Ya te llamó la Doctora?- abrí una silla para que se sentara Rockhyun, mientras Taemin abría su propia silla.

-No, aun no me ha llamado.- contesté acomodándolo bien para que no estuviera muy presionado pero cerca de la mesa. –¿Quieres pedir de la carta o utilizarás el servicio de buffet?-miré a Taemin.

-Te acompaño.- susurró levantándose pero le paré de inmediato. –¿Qué?-

-Quédate con Rockhyun.- no lo puedo dejar solo.

-¿Es en serio?- me miró un poco molesto y sorprendido que sólo asentí. –Bien.- se cruzó de brazos y miró hacia la derecha, sí se enojó.

-Sólo cinco minutos; iré a buscar su desayuno, no tardaré.- luego de que Rockhyun me volteara a ver por encima de su hombro y sonreírle, me giré para ir hacia el buffet. Bostecé un poco porque me siento ligeramente cansado y me sigue doliendo un poco la espalda.

Tomé una bandeja acercándome a la mesa más cercana, tomé un pequeño plato con cereal y un vaso de leche, me acerqué a los utensilios para tomar una cuchara. Pero es un desayuno un poco corto, debería de comer fruta también así que cogí una manzana. Si tiene más hambre, regresaré por unos hot cakes u otra cosita que se le pueda antojar.

Caminé de regreso a nuestra mesa, Taemin estaba mirando su celular y Rockhyun miraba el resto del lugar, supongo que desde ayer en la noche que se pelearon, se creó una atmosfera incomoda entre los dos.

-Regresé.- susurré dejando la bandeja en la mesa, teniéndole su plato a Rockhyun y vertiendo el vaso de leche, además de darle la cuchara. –Seguramente YiFan también come frutas, así que te tendrás que comer esto también.-

-Fanfan come muchas frutas y verduras.- asintió tomando la cuchara para comenzar a comer.

-Pues si quieres ser tan grande como él, tendrás que comer bien.- asentí despeinando su cabello. –Taemin, ¿quieres del buffet o quieres de la carta?-

-Del buffet.- por supuesto, lo que sea por no estar cerca de Rockhyun.

-Te acompañaré una vez, te mostraré cómo funciona y regresaré con Rockhyun.-

-Sí, sí.- susurró pasándome de largo. –Espéranos aquí, Rocky, si viene un mesero le pides la carta.-

-Sí.- asentí por eso. Me giré sobre mis talones para buscar a Taemin, que sólo me miraba indiferente. –Quita esa postura, Taemin.- susurré pasándolo de largo, asegurándome que siguiera caminando detrás de mí.

No lo oí renegar ni nada, más que sus pasos. Volví a tomar una bandeja, Taemin tomó otra. Me detuve para voltear a verlo.

-Ven.- susurré haciendo que de inmediato caminara hacia mí. –Si quieres ser el papá de Rockhyun tendrás que hacer tu mejor esfuerzo.-

-¿Qué?- me miró sorprendido, negué lentamente mientras pasaba saliva para repetírselo.

-Puedes tomar toda la comida que quieras comer.- repetí.

-Perdón, creí que habías dicho algo diferente, ñé.- se giró acercándose a la mesa de bebidas de la que tomó un vaso con leche de plátano, que colocó en su bandeja. Lo seguí con la mirada, tomó un pan pequeño y una manzana, luego se giró para regresar a mí. –Listo.-

-Bien, ahora vuelve a la mesa con Rocky, si pasa un mesero pídele la carta. Yo iré en un momento más.-

-Ñé.- se giró cuidando de no derramar su leche, suspiré cuando llegó con Rockhyun. Ahora a llevarles más comida.

Tomé un plato con galletas de chispas de chocolate, tomé dos plato con frutas y yogurt, dos platos con hot cakes, dos gelatinas rojas porque las verdes no les gustan, pedí dos homelets con los ingredientes favoritos de cada uno y mientras los hacían, seguí tomando comida como rebanadas de pay de queso, tres panecitos como los que llevó Taemin y finalmente, tomé los cubiertos que necesitarán para comer. Caminé de regreso a nuestra mesa.

-Les traje más comida.- dije poniendo la bandeja en la mesa. –Nos van a traer los homelets, ¿se acuerdan de cómo saben?-

-Sí.- fruncí el entrecejo. –¿Todo eso es para nosotros?- Rockhyun estiró su mano para recibir la gelatina roja.

-¿Por qué ya no dices “ñé”?- desde que lo desperté que lo he estado esperando y nada. Sus respuestas son concretas y nada abstractas.

-Fanfan no me entendía.- terminé de poner lo que les traje para presionar los ojos molesto, suspirar e intentar sonreír para no molestarme más.

-Pero Yifan no está aquí.- contesté relajándome. –¿Vino el mesero?- les acomodé la mesa para que cada quien tomara lo que les traje.

-No es mucha comida, ¿ñé?-

-Aquí es todo lo que puedas comer.- le contesté. –Incluso, puedes tomar un plato e ir a servirte gomitas o llena un vaso con el helado de la maquina.- presioné los ojos de inmediato porque podrían querer hacer eso. –Iré por más.- aun me faltan lo que beberán.

-No te tardes.- susurró Taemin.

-Si viene el mesero le piden la carta.- dije.

-Ya la trajo.- me contestó.

-No me tardaré.- contesté sonriéndoles para regresar por otra bandeja.

-Ahhh~ no puedo comer más.- miré a Rockhyun y terminé por limpiarme las comisuras para dejar la servilleta de tela sobre la mesa. Estaba casi acostado en la silla, sobándose el estómago.

-Eso es bueno.- supongo. –¿Tú? ¿Taemin? ¿Todo bien?- dejó de mirar su celular para continuar comiendo el helado de fresa que en efecto, se fue a servir en un vaso de medio litro.

-Todo bien.- contestó.

Supongo que mira su celular porque está hablando con YoonGi o alguien más, o en su defecto, espera que él le hable.

-Me parece que lo más acertado, sea que conduzcas tú.- mi mamá me tendió las llaves. –Yo me iré con mis nietos.-

Fruncí el entrecejo por eso, pero terminé tomando las llaves.

-¿A la casa de los abuelos?- pregunté abriendo la puerta del piloto para entrar.

-Así es.- contestó mi mamá.

-Bien.- susurré encendiendo el motor.

-¿Qué tanto miras en tu celular, hijo?- miré por el espejo central a Taemin, que bloqueaba su celular para guardarlo en el bolsillo de su pantalón.

-Estaba jugando, ñé.- susurró. –Me está dando sueño después de todo lo que comimos.- se recargó en el respaldo del asiento además de que cerró los ojos.

-Cuando lleguemos podrás dormir un poco.- mi mamá le apretó la mejilla haciendo que Taemin sonriera.

-¿Los abuelos están bien?- pregunté.

-Perfectamente bien.- contestó mi mamá. –Están con tu papá.-

-¿Él va a estar con nosotros?- Taemin se irguió en el asiento un poco asustado.

-¡Ahhh!- Rockhyun salió corriendo del auto directo hacia mis abuelos que estaban en la puerta del hogar para adultos mayores esperándonos. –¡Abuelos~!-

-Cómo es que Rockhyun tiene tanta energía y yo no, ¿ñé?- Taemin se puso a mi costado e incluso sentí que tomó mi mano. –Comimos lo mismo.-

-La comida no tiene nada qué ver.- susurré presionando su mano. –La diferencia es que tú estás deprimido y él no.-

-YoonGi me dijo “buenos días” y no supe qué contestarle.- susurró recargando su cabeza contra mi hombro. –Luego me dijo “si todavía estás enojado te esperaré” tampoco le contesté y ahora me mandó un “me voy a trabajar, cuídate mucho y come bien, cuando regrese te aviso”. ¿Qué debería de hacer?- susurró.

-Contéstale.- dije con mi tono de voz paternal.

-No quiero.- susurró. –Menos luego de todo lo que nos dijimos en el baño.-

-Tú y yo podremos estar juntos en un futuro lejano.- dije haciendo que Taemin me mirara. –Pero ahora no, justo en este momento no. Ahora somos dos personas sin vínculos legales que viven juntas, como el concubinato. Pero no somos pareja.-

-¡Pero tú dijiste!- se separó violentamente de mí.

-Te dije que no imitaras a Hyuna porque volvería a amarla en lugar de amarte. A mí no me gustaría que vieras a YoonGi en mí, y me desagrada bastante la idea de que lo ames. Estás atravesando un proceso de duelo y uno de los errores más grandes cuando se finaliza una relación, es comenzar otra en un corto plazo. Primero, tendrás que vivir tu duelo con YoonGi.- asentí lentamente.

-¿Pero qué tal si conoces a alguien más?-

-Tú has esperado todo este tiempo, ¿no? Un duelo dura entre seis meses a tres años, yo seguiré estando a tu lado. Siempre.-

Taemin hizo un pucherito y terminó por soltar mi mano.

-¿Por qué eso sí te importa?- se paró delante de mí. –Porque todo lo que he hecho mal antes no te interesa o sólo sonríes ¿y ahora que ocurre esto: sí? Eres ironía.- hizo una mueca de desprecio que debió de molestarme pero negué de nuevo.

-Esto es el duelo.- dije acomodando mi saco. –Eso es ira, la primera etapa.-

-Isti is iri, li primir itipi.- me imitó pasando por enfrente de mí. –Ñé.- bufó mirándome por encima de su hombro que sólo negué lentamente. Terminé suspirando para volver a acomodar mi ropa y caminar sobre sus pasos hasta llegar a la puerta del asilo.

Durante la mañana Rockhyun estuvo escuchando las historias que mi abuelo contaba. Se me hacía muy bonito verlo sentado en el suelo, con sus manos sobre sus pies que se tocaban de la planta y mirando atento a mi abuelo. Taemin por su lado, estaba amargado en una de las mecedoras con su celular en las manos y lejos de todos los abuelos.

-¿Qué tiene Taemin?- volteé por encima de mi hombro para ver a mi mamá. –Ha estado portándose diferente desde que llegaron aquí.-

Abrí mi boca para contestarle pero mi mamá negó de inmediato.

-¿Crees que el cambio de ambiente le haya afectado?- cerré mis labios y me limité a asentir. –Pobrecito.-

-Nada de pobrecito.- contesté de inmediato. –Pronto se acostumbrará a estar aquí.-

-Minho.- escuché perfectamente su cambio de tono, eso me alarmó de inmediato. –Investigué un poco sobre la adopción simple y decían que cuando se cumple la mayoría de edad el adoptado decide si sigue o no con esa familia, ¿qué tan cierto es eso?-

-Muy cierto.- contesté. –Pero Taemin me ha dicho que no se irá a ningún lado.-

-Que me dijera que no tenía vínculos familiares contigo… ¿planeaba hacer algo?-

-La adopción simple es más compleja de lo que es la plena.- dije recargándome en la pared y cruzándome de brazos. –Desde su cumpleaños a la fecha, a este preciso momento, Taemin dejó de ser mi adoptado o protegido. Para el Derecho ahora él es una persona independiente que ha decidido vivir conmigo y nada más.-

-¿Por qué no quisiste la adopción plena?-

-En mi imaginación él querría volver con su anterior tutor.- y aunque ahora lo quiera hacer o siquiera visitarlo yo iría con él. Jamás dejaría que esté solo con ese Jonghyun.

-Sólo espero que sepas qué haces.-

-¿Por qué? ¿Le han dicho algo? ¿O ha notado algo extraño?- Aunque sé que me puedo arrepentir por eso último.

-No, pero me pareció extraño que Taemin me explicara que tú y él ya no era “padre e hijo”. Me esperaría esa charla de ti, pero jamás de él.- miré hacia el mismo lugar en donde mi mamá fijaba su vista, que era Taemin. Seguía amargándose con su celular en la mano. –¿Derecho? Seguro que entre todos lo ayudaran con su escuela.-

-¿Derecho?- pregunté extrañado. –Me dijo que había tomado Artes Plásticas.- susurré mirándolo ponerse la capucha de la sudadera y amargarse un poco más.

-¿Taemin?- susurré quitándole la capucha de la cara, haciendo que frunciera el entrecejo. –¿Ya estas mejor?- me incliné para estar a su altura.

-¿Ñé?- susurró tallándose los ojos. –¿Qué hora es?-

-Vamos a ir a jugar cricket, ¿quieres venir con nosotros?- susurré moviéndolo del hombro para que se levantara.

-Déjalo que descanse.- me levanté para tomar el brazo de mi abuelo y ayudarle a acercarse a Taemin. –Puede ir a mi habitación y dormir en mi cama.-

-No estoy seguro…-

-No bisabuelo, sólo me siento muy satisfecho del desayuno, ñé, pero iré al baño y jugaremos cricket hasta el atardecer.- cerré mi boca y alcé las cejas por su repentino cambio de actitud.

-Está bien, hijo, nosotros estaremos afuera.- Taemin asintió por lo que dijo el abuelo, le ayudé a salir hacia el jardín intentando no perder de vista a Taemin pero sólo dejé de verlo.

-Tiene que estar muy cansado, es la primera vez que viaja en avión.-

-Probablemente.- contesté. –Pero iré a buscarlo para asegurarme de que está bien, pueden comenzar ustedes.-

-¿Taemin?- susurré entrando al cuarto de baño. –¿Estás aquí?-

No me contestó, sólo salió de uno de los cubículos para lavar sus manos y acomodar su cabello.

-¿Sigues enojado?-

No me contestó.

-No me gustaría que siguieras molesto porque principalmente hice esto para ti.-

-Jugaré criquet con los bisabuelos y comeré con los abuelos, incluso jugaría con Rockhyun pero contigo no.- me miró por el reflejo del espejo. -Porque para ti sí estoy molesto.- sacudió sus manos tras lavarlas que lograron mojarme algunas gotitas de agua.

-¿Sólo así? ¿Sin derecho a réplica?- pregunté siguiéndolo con la mirada porque estaba a punto de salir.

-Sí.-

Sonreí.

End Pov’s Minho

En Seúl…

-¿Sabes que estaría bien ahora?- preguntó Minsoo subiendo sus piernas a la mesa de centro en la sala de estar, recibiendo un pequeño golpe en el muslo como advertencia.

-Bájalas, por favor.- susurró Jungsoo sentándose a su lado para quitarle el control remoto y cambiarle a la televisión.

-¿Por qué no te bañas y peinas y vamos al teatro?-

-¿Disculpa?- preguntó Jungsoo ligeramente ofendido. –Ya me bañé.-

-Entonces péinate y vayamos al teatro, compré entradas para “Sincericidio”.- bajó sus piernas de la mesa para levantarse del sofá.

-¿Quieres que te acompañé a ver una obra de teatro?-

-No, pero alguien tiene que llevarme palomitas.- dijo sonriéndole. –¡Obviamente quiero que vayas conmigo a ver la obra!-

-Pues no puedo.- contestó Jungsoo. –Estoy ocupado, ve tú solo por tus palomitas.-

-Oh vamos, no te enojes.- susurró Minsoo tomando las manos contrarias para retirarlas de sus piernas y así poder sentarse sobre ellas. –Enojado no te ves bien, di conmigo “vamos al teatro”.- tomó las mejillas de Jungsoo para estrujarlas.

-De verdad no puedo.- contestó ladeando su rostro para que Minsoo no continuara estrujándole. –En la tarde voy a abrir mi consultorio.-

-Vi tu agenda y no tenías nada programado para hoy excepto, “ir a ver Sinceridicio con Soo” anda, yo pago las palomitas y hasta te invito a cenar.-

-Está bien.- susurró abrazando a Minsoo antes de que pudiera salir de sus piernas. –Pero tendrás que ayudarme con el vaciado de un par de entrevistas de la Fiscalía.- apoyó su frente en el antebrazo del contrario. –Mientras yo hago los dictámenes periciales. ¿Estás de acuerdo?- abrió su boca lentamente para que Minsoo no percibiera ese movimiento.

-De acuerdo.- susurró sonriendo ligeramente, pero dejó de hacerlo al sentir como Jungsoo comenzaba a morderle el antebrazo. –Pero primero péinate para ir a ver Sincericidio.-

En Jeju…

Pov’s Minho

-¿Siempre usas saco?- abrí los ojos y me acomodé mejor bajo la sombra del árbol.

-No siempre.- contesté volviendo a relajarme. –Ahora no lo tengo puesto.- lo dejé en el auto.

-Pero traes camisa de botones y pantalón de vestir.- suspiré mientras oía a mi abuela, recordé que ella no puede estar de pie mucho tiempo así que terminé levantándome pero estaba sentada en una mecedora a un costado del árbol.

-Suelo vestirme así.- contesté sonriéndole.

-Quiero hablarte de un tema en especial, Minho.- me acerqué más a ella porque me hizo una ademán, incluso terminé estando de pie a su lado.

-¿Sobre qué cosa?-

-Modifiqué mi testamento, la casa en la que vives ahora está a tu nombre, también dejé dinero a nombre de Taemin y de Rockhyun.- mi boca se hizo un asterisco. –A los niños les dejé partes iguales.-

-Vaya.- susurré aun sorprendido. –Gracias.- hice una pequeña reverencia. –Hace dos meses compré una casa. No le he dicho a nadie porque tengo miedo que piensen que no estoy tomando las decisiones más acertadas pero esa casa la puse a nombre de Taemin.- y la pequeña que ya tenía la cambié a nombre de Rockhyun.

-No creo que te hayas equivocado.- susurró mi abuela sonriéndome, eso me hizo sentir cálido.

-A Rockhyun le otorgué mi pequeña casa, como la que tenía cuando vivía con Hyuna.- la diferencia entre las casas de ellos, vaya, es que la de Taemin es más grande y la arquitectura es más moderna que la de Rockhyun, que viene siendo más tradicional. –También he pensado en comprar un seguro de vida.- más con lo que me pasó el otro día.

-Creí que ya habías comprado uno.- volteé hacia donde Taemin jugaba cricket con mi mamá y el abuelo, sólo para no pensar mucho sobre ese tema.

-Me ofrecieron seguros de vida antes, pero no creí necesitarlos.-

-¿Te pasó algo malo? ¿Minho?- negué de inmediato porque mi abuela se quería levantar de la mecedora, así que la tranquilicé un poco para que no lo hiciera.

-Nada malo.- dije. –Sólo que creo es lo más adecuado ahora que también Rockhyun está conmigo.- eso debería de bastarles.

-Sigue teniendo mucho cuidado, con quienes y para quienes trabajas, por favor.- sentí que mi celular estaba vibrando y por acto reflejo lo tomé para ver qué era. –Deberías de dejar el trabajo ahora, estás de vacaciones.- es un número desconocido.

De inmediato volteé hacia todos lados, ellos dijeron que sabían en dónde vivían mis abuelos, ¿y si ellos están aquí? ¿Y si me están mirando? Me levanté de mi lugar para seguir buscándolos.

Me sobresalté porque mi celular vibró de nuevo, sólo que ahora era un mensaje.

¿Debería de abrirlo?

“¿Te estamos vigilando?” no me gustaría leer eso. Pasé saliva y tomé todo mi valor para abrir el mensaje.

“¿Por qué no me contestas? Soy yo, la doctora”.

Tonta, aunque eso me hizo sentir muy aliviado.

Le llamé.

-Buenos días.- saludé sonriendo.

-¿Tienes tiempo de comer conmigo? Me puse a investigar un poco sobre tu caso y te tengo excelentes noticias.- alcé las cejas extrañado.

-¿Qué clase de noticias?- pregunté.

-Todas buenas, si las quieres saber ven a comer conmigo, por teléfono es incómodo explicártelas-

-¿Son muchas?- o habrá otra razón por la que no quiera hacerlo de esta manera.

-Son complejas.-

-Oh, complejas.- repetí. –No sé si pueda ir, estoy con mis abuelos y Taemin se ha puesto muy caprichoso conmigo.- si ya identifica que “yo estaba con Chany porque me recordaba a Hyuna” no sé qué cosas pensaría o haría si ahora en su viaje de graduación termino saliendo para comer con una chica.

Aunque él conoció a la Doctora, no tendría que sentir intimidación.

-Si hoy fuera tu último día de vida, ¿qué harías?-

-Me quedaría con mi familia, obviamente.-

-“Si hoy fuera tu último día de vida, qué harías, ¿estar con Taemin como tu hijo o estar con Taemin como tu pareja?” no anticipes lo que te quiera decir, corazón.- ¿corazón?

-Ya sé cómo te llamas.- susurré sonriendo. Sólo hay una persona en todo el planeta a la que le permití llamarme de esa manera, que tenía gafas rojas y siempre se quejaba del profesor.

-¿Eso es un sí?-

-¿A qué hora y en dónde?- pregunté.

-Voy a dar una conferencia sobre Reconstrucción de una escena del crimen, si no te incomoda, búscame en el Complejo de Codemi, mi sala es la 746. Terminaré cerca de las cuatro de la tarde, a esa hora búscame ahí, vamos a comer y llévate una libretita de apuntes, porque la necesitarás.-

-Gracias.- susurré sonriéndole. –No sé qué cosas hayas investigado pero sobre ese tema, también tengo nuevas ideas. Hasta las cuatro de la tarde, ten una feliz conferencia.-

-Así será, que no se te olvide la libreta y toda su open mind.- asentí sonriendo por eso. –Nos vemos, cuídate y cuídalos.- asentí efusivamente por eso, y antes de poderle decir algo más ella finalizó la llamada.

Vaya, supongo que lo que sea que ella haya descubierto tendrá que ser bueno.

Bloqueé mi celular y me giré sobre mis talones para regresar a donde mi abuela.

-Te estaba regañando por usar tu celular en vacaciones.- me senté a su lado, en el suelo e inevitablemente me pegó ligeramente con su bastón en la pierna.

-Era un colega.- susurré intentando detener su bastón porque seguía haciéndolo. –Me invitó a su conferencia sobre reconstrucción de una escena del crimen, supo que vendría a Jeju y aprovechó la oportunidad.-

-Cuando sea trabajo, trabaja, y cuando sean vacaciones, vacaciona.-

-Está bien.- susurré sobándome. –No usaré más trajes.-

...

-Nos vemos abuelita.- Rockhyun abrazó a mi abuela, noté que estaba moviendo su colita de zorro hacia ambos lados, como cuando está feliz. –Minho dijo que vendríamos mañana también.- ñé, ¿por qué no dice “ñé” como antes? Lo extraño mucho.

-Nosotros los estaremos esperando mañana también.- mi abuela lo dejó de abrazar y le entregó una caja pequeña, alcé una ceja porque se la deslizó cuidando de que no la mirara, incluso, metió la cajita a las bolsas de la chaqueta de Rockhyun. Afilé la mirada para leer “que no sepa Minho” en sus labios.

Seguro le dio dinero.

-Para mañana seguro les ganaré, ñé.- Taemin abrazó a mi abuelo. –Hoy fue sólo un golpe de suerte.-

-Como las cinco anteriores.- mi abuelo le despeinó el cabello e igual que mi abuela, le dio una caja pequeña pidiéndole lo mismo, que no me enterara de eso. –Cuídense que mañana les contaré más historias.-

Taemin y Rockhyun sólo asintieron, luego de volverlos a abrazar corriendo hacia mí, les tendí mis manos para que las tomaran pero el único que lo hizo fue Rockhyun, seguramente Taemin sigue molesto.

-Vamos a ir a comer a nuestra casa para que se queden con nosotros porque Minho tiene una conferencia en la tarde.- suspiré decepcionado mirando a mi mamá, le pedí que no dijera nada al respecto hasta ser yo quien se los explicara a Taemin y Rockhyun. –Pueden dormir durante la tarde si quieren o podemos dar un paseo por los lugares turísticos, para que se tomen muchas fotografías.-

-¿Vas a trabajar aquí también?- Rockhyun tiró de mi mano para que lo mirara.

-En realidad no.- contesté sonriéndole. –Sólo voy a ir a oír lo que tienen que decirme, no creo tardar mucho.- en especial porque ella tenía un don para la oratoria, seguro lo que me quiere decir me lo dirá de la manera más fácil y romántica posible.

-¿Por qué no nos quedamos en el hotel?- escuché algún tono de miedo en la voz de Taemin. –Dejé mi cargador ahí porque pensé que regresaríamos pronto.-

-Minho va a venir con nosotros, no es como que desde ahora se vaya a ir a la conferencia.- asentí por eso mientras abría la puerta para que entrara Taemin y Rockhyun, mi mamá ya estaba del lado del copiloto. –Porque ustedes no han conocido nuestra casa.-

-Insisto en ir al hotel, ñé.-

-Estaré contigo, Taemin.- lo miré por el espejo central haciendo que me mirara y se sonrojara.

-Yo también debería de ir a dónde vas, ñé.-

-Te quedarás al cuidado de mi mamá.- dije saliendo del asilo y sonando el claxon para despedirnos de mis abuelos. –Si quieres dormir desde que lleguemos hasta que regrese no me parece mala idea.-

-Sólo quiero el cargador de mi celular.-

Llegamos a la casa de mis padres, nos estacionamos y tan sólo al salir del auto Taemin tomó mi mano y la presionó fuerte. No me extraña ni sorprende, siempre se ha sentido intimidado por mi papá.

-Les mostraré la habitación en la que podrán descansar en lo que Minho se desocupa.- mi mamá tomó la mano de Rockhyun para tirar de él y conducirlo por el interior de la casa.

No dije nada, sólo dejé que mi mamá nos guiara a la habitación de huéspedes, sin embargo sentí cómo Taemin presionaba su mano en la mía cuando pasamos por la puerta en donde mi papá estaba dentro. Suspiré y le sonreí para que se tranquilizara.

Rockhyun estaba con mi mamá, incluso quiso ayudarle a prepararla comida por lo que Taemin y yo nos quedamos en la habitación solos. Yo estaba acostado en la cama mientras él sólo miraba hacia la puerta, sé que no está cómodo aquí pero no puedo contradecir a mi mamá e irnos al hotel.

-¿Todo bien?- pregunté.

-Sí.- susurró.

-¿Cómo sabes que todo está bien?- tomé el cojín más cercano para ponerlo detrás de mi cabeza y estar más cómodo.

-¿Mmm?- me miró, palmeé a mi costado en la cama haciendo que guardara su celular y se acercara a mí. –¿Tu papá no se enoja?-

-No tiene por qué.- Taemin se sentó a mi lado, me senté igual que él sólo para tomar sus hombros y hacer que se acostara. –¿Sigues pensando en YoonGi?-

-No ha parado de mandarme mensajes.- susurró, quité el cojín que recién me había puesto para dárselo a que lo abrazara, Taemin de inmediato hundió su cara en el almohadón. –Le contesté como me lo pediste y lo malinterpretó todo.-

-¿Cómo sabes que lo malinterpretó todo?-

-Pues.- dejó de abrazar el almohadón, por sus movimientos diría que está tomando su celular, que en efecto desbloqueó para mostrarme la conversación. –Léelos y dime qué hacer.-

-¿Esto haces con Joy?- ella dijo que le pedía consejos con sus mensajes.

-Tal vez.- susurró riéndose y ese sonido me hizo sentir bien.

-Lo más recomendable es que tú me digas qué ocurre y así poderte aconsejar.- susurré regresándole su celular.

-¿Estás celoso?- me miró sonriendo divertido, porque su tono de voz cambio drásticamente a uno más animado y ya no de ultratumba.

-Tal vez.- repetí sonriéndole. –Y considero que leer tu conversación es invasión a la privacidad.-

-Y eso es un delito.- completo sonriendo. –Le contesté a YoonGi con un “Ten un buen día” y me dijo que estaba en el juzgado sacando copias de un expediente de un caso que estaba llevando, me contó que era de un homicidio culposo, su cliente estaba conduciendo y la víctima se atravesó en su patineta.-

-¿YoonGi está del lado de la defensa?-

-Ñé, él dice que es inocente y que la culpa recae sobre la víctima.- asentí lentamente. –El expediente dice que el occiso usaba la patineta como medio de trasporte, pero que no portaba protección y en el momento del accidente el semáforo estaba en verde del lado del acusado.-

-Interesante.- susurré. –¿Por qué YoonGi te cuenta eso?-

-Bueno, siempre me cuenta de los casos que toma.- volvió a tomar su celular para desbloquearlo, supongo que le llegó un mensaje más. –A veces debatimos sobre el tipo penal o sobre qué cosas puede hacer para mejorar su carpeta de investigación.-

-¿En serio?- entonces no me sorprende por qué de un día a otro Mencuto comenzó a asociarse con bufetes criminológicos.

-Es divertido.- ¡por supuesto que lo es! –Pero también hacemos cosas normales, como ese día en el que te tragó la tierra y no tuviste ni cinco minutos para decirme “estoy en juicio”; él estuvo conmigo. Preparó comida, aseamos la casa menos tu Oficina, jugamos videojuegos y estuvimos charlando de lo que habíamos hecho en nuestros días. YoonGi no se fue hasta al anochecer, porque tenía que ir con el Fiscal a ver si Rockhyun estaba bien.- espera.

-¿YoonGi sabía que Rockhyun estaba con el Fiscal?-

-Cuando me di cuenta de que Rockhyun no estaba en casa, antes de hablarles a ustedes a Red Dress le llamé a él. Junto con Mencuto comenzaron a buscarlo hasta que me dijo “lo tiene el Fiscal” y que no se lo quiso entregar porque decía estrictamente que sólo a ti. Esa noche YoonGi se fue muy tarde casa para ver a Rockhyun. Me dijo que me enviaría un mensaje para decirme cómo estaba él y que yo le contestara cuando llegaras.- vaya, no sólo me metí en problemas con la delincuencia ese día, sino también fue el día en el que Rockhyun salió de casa. Y no lo noté hasta el día siguiente o dos días después.

-Admito que tenía un prejuicio negativo respecto a YoonGi, pero con lo que me has dicho creo que está bien que estés con él. Llévalo a cenar algún día.- asentí por esa idea. –Compraremos comida pero le diremos que yo la preparé.-

-Terminé con YoonGi en la recepción.- lo oía susurrar e intentar reprimir un sollozo. –Luego de bailar juntos fue más difícil hacerlo. Le di lo que compré en Zekluri.- y yo que pensaba que “eso” era para mí. –Le agradecí todo lo que había hecho por mí.-

-Pero no comprendo por qué terminar una relación saludable.- relativamente hablando.

-Yo nunca sentí el abuso que tú decías.- por supuesto, por la predisposición y el amor sexual del que hablaba ese artículo de hace años. –YoonGi siempre estuvo para mí cuando lo necesitaba. Te voy a decir algo pero no quiero que te alteres ni nada, por favor.- se giró en la cama para mirarme, tendiéndome su mano con el meñique alzado. –¿Me lo prometes?-

-Te lo prometo.- susurré enlazando nuestros meñiques.

-En todo el bachillerato, desde Udavano, una persona me hacia bullying.- cerré los ojos mientras suspiraba lentamente e intentaba esbozar una sonrisa. –Comenzó por decir “ñé”, se burlaba de mí y me ofendía con cosas como “ñédete” o “ñeñe de mierda” pero los gemelos me decían “no le hagas caso” y con Krystal en el mismo salón todo era más fácil. Pero cuando pasamos a bachillerato y él también las ofensas verbales pasaron a ser físicas.- ¡¿en dónde diablos estaba yo en ese momento?! –Me empujaba, tiraba mis libros, pegaba basura en mi casillero, me jalaba de la ropa y el cabello. Para tercero y cuarto él comenzó a decirme cosas como “engendro” “fenómeno” me decía “híbrido”, el tono en el que lo decía me humillaba.- presioné las cobijas bajo mis manos para intentar tranquilizarme. –Finalmente en quinto y sexto sus agresiones comenzaron a ser de manera sexual.-

-¿Por qué nunca me lo dijiste?- hubiera deseado que mi tono de voz no fuera tan duro, pero no pude controlarlo.

-No me gusta hacerte perder tiempo y si te decía descuidarías tu trabajo por tonterías de niños, ñé.- volvió a abrazar el almohadón. –Pero los gemelos, Krystal y Naeun estaban conmigo. Azu también llegó a meterse y darle una cachetada a Yongguk. Kana una vez también le regañó pero les pedí que no lo hicieran porque entonces él incrementaba la fuerza de sus abusos y en lugar de ayudarme, me lo complicaban todo un poco más.-

-Si yo no era una buena idea. ¿Por qué no le dijiste a Joy o a ChangMin? - ellos seguramente pudieron haber erradicado esas conductas y hacer que la vida escolar de Taemin fuera menos peligrosa.

-Le conté una vez a Kyuhyun y me dijo “las personas que ejercen fuerza física contra otras para poder sentirse grandes, son aquellas que no tienen autoestima real. Seguramente él tiene conflictos en casa… ¿me entiendes? No me ayudó en nada, porque cuando le dije a Yongguk “yo qué culpa tengo de que tus papás no te quieran” me golpeó el estómago.-

-Por qué, ¿por qué no me lo dijiste antes?- lo tuve que decir lo más lento posible para tranquilizarme un poco.

-Leí un libro.-

-¿Y? Un libro no te da las soluciones para…-

-El libro decía que lo que les gusta a esas personas no es infringir dolor, sino el placer de la sumisión. “Lo que un violador disfruta no es el acto sexual, sino someter a la víctima” y eso hice.-

-¡¿Qué tú qué!?-

-No, no, no te asustes.- susurró asustado sentándose en la cama para mirarme. –Él nunca me tocó.-

-Vaya.- ahora todo tiene más sentido.

El vacío que esta persona le causaba intimidándolo y sometiéndolo se llenaba con el placer sexual que experimentaba con KwangMin y los sentimentalismos de YoonGi. ¿Y yo? Bien gracias.

-Pero cuando se me acercaba yo dejaba que me empujara ya no levantaba mis libros luego de que los tirara, incluso comencé a llamarlo “oppa”.-

-No.- desapruebo todo eso, me desapruebo como su padre.

-Él dejó de ser agresivo, no me pegaba más pero me decía cosas obscenas.-

-¿Por eso los cubre bocas y los suéteres?- usaba cubre bocas al menos dos veces a la semana y siempre aunque estuviera haciendo calor usaba las sudaderas de manga larga, supongo que para ocultar los golpes.

-YoonGi me dijo que “bullying” no es delito e sí, pero que lesiones sí lo son, ñé.- si yo hubiera sido YoonGi, aun en calidad de pareja, hubiera presentado una denuncia penal. –Pero le dije que tenía todo bajo control, que sólo quedaban cuatro meses y luego esperaba jamás volver a verlo.- alcé las cejas sorprendido, ¿entonces sí intentó hacerlo?

-¿YoonGi quería poner una denuncia?- depende de esa respuesta si cambia mi percepción totalmente de él o no.

-Sí.- oh Dios. –Pero seré sincero, Mencuto no da miedo. Todos sabemos que sí ganan casos pero siempre son casos simples. En Larú dejaron de molestarme cuando supieron que mi papá era el de Red Dress, así que con eso en mente, si YoonGi y Mencuto se involucraban Yongguk sólo me molestaría aún más.-

-¿Y tu plan era…?- si no me lo decía a mí, ¿cómo carajo esperaba que le ayudara? ¿O que Red Dress lo hiciera?

-El último día cuando fui a recoger mis cosas del casillero Yongguk llegó a intimidarme. Me dijo que luego de la recepción me llevaría a un motel a preñarme.- suspiré tan profundo que incluso Taemin se asustó. –Me hizo tocarlo pero le estruje el miembro y le advertí que me dejara en paz porque mi papá era el de Red Dress.-

No dije nada, seguía con los ojos cerrados y esperando que mi cólera pasara.

-Ese día, cuando fuiste por mí y por los gemelos él nos vio juntos.-

-¡Dime cuándo algo así te pase!- terminé liberando mi frustración. –Por favor, puedes confiar en mí lo suficiente como para saber tus problemas también, no importa si tengo trabajo tú siempre has sido prioridad para mí.-

-¡Pero Yongguk ya no me molestó más!- apretó el cojín con sus manos. –E ir a la recepción con Joy y que ellas llevaran el auto de la policía fue estupendamente bueno porque creyó más en mis palabras.-

-No me importa.- negué efusivamente. –¿Qué hubiera pasado si te dejó ir solo? ¿Si Joy me hubiera dicho que no podía llevarte?-

-Hubieras ido tú.- me miró y ese fue el momento justo para sentir que mi alma se iba de mi cuerpo, porque sus ojos estaban llenos de lágrimas y su entrecejo ligeramente fruncido. –Por eso te pedí que me acompañaras pero no quisiste.-

Suspiré una vez más para serenarme.

-Hay una razón.- afiné mi garganta. –Por la que no quise ir contigo.- sentí que algo se esparcía por todo mi cuerpo que terminé temblando.

-Tenías trabajo.- negué lentamente. –En la recepción luego de terminar con YoonGi, Yongguk se disculpó conmigo, me dio un tulipán que no tomé y dijo que siempre se había sentido atraído hacia mí, pero que era meramente sexual porque mi actitud le apestaba.-

-¿Y qué pasó?- tuve que comenzar a sobar mi sien para des estresarme de todo esto.

-Joy llegó y me dijo “¿sucede algo, Taemin?” le dije que no y me contestó “vámonos” desde entonces no he sabido nada de Yongguk.- al menos Joy ayudó en ese tema. –Y bueno, cada que él me decía algo ofensivo, YoonGi me decía tres cosas buenas. Si Yongguk me decía “fenómeno” YoonGi decía que yo era el híbrido más bonito que haya conocido, decía que le gustaba como movía mis orejas de mapache y cepillaba mi cabello.-

Tengo que reconocer que tenía a YoonGi en un mal concepto.-

-Tal vez por eso es por lo que se niega que todo entre los dos haya terminado.- Taemin se volvió a recostar en la cama abrazando el almohadón.

-Si todavía quieres rescatar algo de lo que tenías con YoonGi, estoy absolutamente abierto a tu decisión.- parece que lo respetaba y con eso me basta.

-Primero le conté a Key que tenía novio y él dijo “ja, ja, sí” no me tomó en serio. Después se lo dije a Kyuhyun y me preguntó quién era, cómo lo conocí y por qué decidí aceptarlo. Sungmin me dijo que era una relación saludable y como erradicar las conductas toxicas. Después ChangMin me aconsejó no tener relaciones sexuales con él ni nada sexual porque todavía era un delito. Luego Jonghyun me dijo que conocía al sujeto y era buena persona y junto con Key hicieron una perfilación y los resultados fueron positivos y aprobados.- alcé las cejas porque no supe cuándo pasó todo eso, pero Taemin parecía feliz y satisfecho. –Cuando se lo dije a Joy me dijo que aprovechara y aprendiera todo de él. Y todos me preguntaron “¿ya lo sabe Minho?”-

-¿Qué les dijiste?-

-Que no.- sonrió tan travieso que tuvo que esconder su rostro entre el almohadón. –Y les pedí que no te dijeran nada.-

-Bueno, llévalo a casa para terminar de conocerlo.- insisto.

-Estoy intentando dejarlo atrás, quiero vivir mi duelo y seguir adelante para poder estar contigo.-

-Si presionas con el duelo, no lo harás de manera correcta.- el duelo se da de manera natural.

-Pero… yo de verdad quiero estar contigo.- susurró bajando la mirada.

-Lo estás haciendo.- susurré acostándome nuevamente en la cama. –Cuando regresemos a Seúl, asegúrate de hablar con YoonGi sobre todo esto que me dijiste, lo más saludable es aclarar absolutamente todo. Después de eso tú decides si quieres estar con él un poco más.-

-No lo sé.-susurró acostándose también. –Me ha ayudado bastante pero… no lo sé.- suspiró.

-Tranquilo.- puse mi mano sobre su cabello para despeinarlo un poco. –Descansa y luego sigues analizando la situación.-

-¿Por qué tienes que ir a la conferencia? ¿Es de la Doctora?-

-Creo que eres lo suficiente inteligente como para notar las intenciones que ella tuvo cuando nos vio juntos y los anillos en nuestras manos… dice que tiene ideas nuevas sobre nosotros. En realidad no voy a ir a la conferencia, voy a ir a ver al ponente.- pero si lo decía así, mi mamá no me hubiera dejado asistir. Vaya, eso se sintió extraño.

-¿Serán cosas buenas, ñé?- susurró girándose para mirarme, pero con una mano bajo la almohada y con la otra, abrazaba el almohadón.

-Quiero creer que sí.- asentí suspirando. –Ella es abogada, si es quien creo que es, lo que saldrá de su boca tienen que ser buenas noticias.-

-¿Pero tú si quieres estar conmigo?- susurró tan tenue que sentí mi corazón dar un salto. –¿O sólo es por capricho mío?-

-Justo en este momento yo no estoy enamorado de ti.- negué lentamente. –Sin embargo, algunas de tus acciones hacen que mi corazón se acelere.-

-Pero no estás enamorado, ñé.-

-Principalmente porque te consideraba un hijo. Pero ahora con los vínculos disueltos, tú eres Lee y yo Choi… no recuerdo si le dije a Key o si sólo lo pensé pero no sé qué haría si en verdad me enamoro de ti.- no quiero ni pensarlo.

-¿Sería malo?-

-No lo sé.- susurré sonriendo. –Key dice que yo siempre fui homosexual y que estar con una mujer como Hyuna era para probarme y probarle a la gente que me gustaban las mujeres. Le dije que sí porque no me gusta discutir con él pero no lo sé realmente. Una de mis virtudes es la pasión. Realmente me apasiona hacer algo, tú me has visto en los juicios, en los peritajes, me gusta dejar mi alma en lo que hago y si me enamoro completamente de ti, te podrías ahogar de mí.-

-¿Eso quiere decir que sí estás dispuesto a enamorarte de mí?- sentí que la yema de su mano estaba tocando mi mejilla, incluso deduzco que estaba haciendo la forma de los corazones, esos que normalmente se comercializan.

-Eso depende.- susurré. –Depende de lo que diga la Doctora más tarde.-

-Si ella dice que sí, ¿me dejarías entrar a tu corazón?-

-Tú ya estás ahí.- susurré girándome para mirarlo a los ojos.

-Ñé.- susurró desganado pero sin dejar de tocar mi mejilla.

-En la galería de mi corazón, tu foto tiene la inscripción de…- él afiló la mirada, noté el pequeño movimiento de sus labios, mecánicamente llevé mi mano hasta ellos para tocarlos.

Pasé saliva ansioso al sentirlos debajo de mi piel.

-Minho.- susurró. –Ya tengo trabajo.- parpadeé efusivamente, retiré mi mano de su rostro y terminé sentándome en la cama pero dándole la espalda. –YoonGi me consiguió un pequeño puesto en el departamento de Economía, creo.-

Tenía mi mano en el pecho intentando calmar mi corazón al tiempo que suspiraba lentamente.

-No voy a ganar como tú, pero seguro con lo que me paguen podré ayudarte a pagar al menos la energía eléctrica.- sentí que la cama se movió, seguramente se acercaba a mí pero no, me levanté y caminé hacia la pue… ¿qué?

-¿Tienes trabajo?- pregunté mirándolo.

-Ñé.- asintió.

-¿En qué departamento de Economía?- dejé de tocarme el pecho para acomodar mi ropa.

-Del Gobierno.- alcé las cejas. –Tiene que ver con los contribuyentes. Nada muy difícil ni peligroso.-

-¡¿Vas a trabajar con el Gobierno?!-

-¡Entonces nuestro amor es prohibido!-

-¿Qué?- susurré confundido.

-Porque tú eres privado  yo seré público.- sonreí porque me hizo recordar una anécdota reciente. –Sí, voy a trabajar con el Gobierno.-

-Vas a tener Charola.- sonreí acercándome a la cama para acomodar mi lado.

-¿Charola?- preguntó levantándose para acomodarla también. –¿Qué es charola?-

-¿En qué te llevan lo que pides en los restaurantes?- pregunté dejando los almohadones en su lugar.

-¿En bandejas?- me miró confundido.

-En charolas.- contesté. –Las charolas en el Gobierno son las credenciales. Porque los funcionarios públicos tienen acceso a información privilegiada que un ciudadano común no tendría. Se les llama charolas porque abren todo tipo de puertas en personas morales o físicas, además, la charola te da privilegios. Cuando te la entreguen vas a ser más poderoso que yo.- vas a ser intocable por todos los órganos gubernamentales. –Incluso si tienes un problema con tránsito, por ejemplo, le muestras tu charola y fin, te vas así como si nada.-

-¿Todo eso por una tarjeta?-

-Es que no es cualquier tarjeta.- dije mirando el reloj de pared. –Es una charola.-

-No voy a tardar mucho.- susurré poniéndome el saco. –Me regresaré en cuanto termine todo.-

-Cuídate mucho.- susurró Rockhyun abrazándome, así que le correspondí el gesto. –Nosotros te estaremos esperando.-

-Les traeré chocolate caliente.- dije soltándolo. –Quédense con mis papás y hagan todo lo que les pidan, por favor.-

-Sí, no te preocupes.- susurró Taemin sonriéndome. –Pon atención en lo que sea que te vayan a decir.- sonreí por eso.

-Claro que lo haré.-

-Ve con cuidado.- mi mamá también me abrazó. –Les daré leche y galletas para que duerman mientras no estás.-

Alcé la mano para que la abogada me mirara. Incluso tuve que agitarla hasta que me apuntó y sonrió. Suspiré mientras bajaba mi brazo para sostener mejor ambos vasos de café.

Me hizo esperarla veinte minutos mientras ella terminaba de despedirse de sus oyentes, de tomarse fotografías con ellos, de firmar libros o revistas con sus artículos hasta que se acercó a mí.

-Perdón por hacerte esperar.- susurró tomando el café.

-No te preocupes.- contesté.

-En realidad quería que vieras lo exitosa que soy, por eso te dije que ya había terminado.- tronó ambos vasos como si fueran copas para beberlo.

-Pues sí eres exitosa.- contesté dejando que pasara por enfrente de mí. –¿Qué era lo que quería decirme?-

-¿Trajiste tu libreta?- me miró sonriendo.

-Por supuesto.- contesté. –Pero dime qué anotar.-

-Estaba releyendo todos los artículos publicados respecto a la adopción simple, leí absolutamente todo al respecto.- tomó mi antebrazo para jalarme hacia una pequeña sala en la que entramos. –Y cuando digo todo, me refiero a todo.- me miró sonriendo sentándose sobre el escritorio.

-Tú lees con PNL, te he estado recordando de a poco.- asentí sonriéndole.

-Aquí es donde sacas tu cuaderno de apuntes.- afinó su garganta. –Legalmente, no existe nada, absolutamente nada que impida tu matrimonio con Taemin.-

-Eso es…- dejé de sonreír. –No estoy casado.-

-Porque por principios de cuentas, para que se dé la adopción simple; la edad.- negó lentamente mirándome. –Así que pueden ser una pareja normal, pero dime, ¿cómo es tu relación con él? Antes de que sus vínculos se terminaran.-

-¿A qué te refieres exactamente con eso?-

-Tendría que verse si era una autentica relación de padre e hijo o si era más como un tutor. Un tutor es la persona que le brinda Alimentos al menor y no involucra sentimientos. Es decir, que vas a la escuela por sus calificaciones, le compras ropa y juguetes y un papá tiene más compromisos.-

-Déjame pesar un poco.- susurré dejando mi taza de café en el escritorio.

-¿Taemin te llama “papá”?-

-¿Papá?- pregunté extrañado. -No.- susurré. –¡No me llama papá! ¡Siempre me llama Minho!- ¡No me llama papá!

-¿Todo claro, corazón? Taemin no te ve como un papá.- 

-No, espera, ¡tú no sabes lo que significó saber eso!- me levanté del escritorio para poder aclarar un poco mi mente, ¿cómo que no me ve cómo papá? ¿Y luego qué soy?

-¿Tú si lo tratabas como a un hijo?-

-¡Por supuesto!-

-Si él sentía que eras su tutor entonces puedes estar con él de manera romántico sexual.-

-¿Cómo puedes hablar de eso luego de decirme que él no me ve como un padre? ¿y yo todo el tiempo creyendo que lo estaba haciendo bien? ¿Cómo debería de sentirme? No todo tiene que ser…- sentí que mi mejilla estaba ardiendo y mi rostro hacia la derecha. –Gracias.- supongo.

-Siguiente pregunta, ¿cuantos años tenía Taemin cuando lo adoptaste? Porque si era desde pequeñín podría haber algún problema moral más que nada.-

-Tengo recuerdos borrosos de eso.- susurré sobándome la mejilla. –Le pregunté “cuántos años tienes” y él dijo “ñé”- incluso mostré mis palmas justo como Taemin lo había hecho en ese momento.

-¿Ñé?- preguntó y asentí mirando mis manos. -Tenía diez.-

-Supongo, porque dijo “ñé”- imité el gesto de nuevo. –Sí, eran diez.-

-¿Cómo era la relación de Taemin con los otros niños o las mismas personas del orfanato?- mi boca se hizo un asterisco.

-¿Orfanato?- pregunté casi riendo por los nervios. –Verás… yo no saqué a Taemin de un orfanato.-

-¿A qué familia se lo quitaste?- alcé las cejas ofendido porque eso mismo me lo preguntó Key.

-A nadie.- susurré indignándome. –Un día yo iba por las carreteras hacia Ciudad Judicial porque tenía… la primera fase de un juicio en donde se muestra al imputado y se hace la tipificación del delito. No recuerdo cómo se llama pero a eso iba cuando escuché sonidos raros en mi auto. Para esa fecha se cumplía un aniversario más del Exdirector del penal que mandé balear.- sonreí avergonzado por la expresión de sorpresa de ella. –Me habían dicho que me cuidara porque nunca se sabe, así que paré en la carretera para revisar el auto o esperar a quien me seguía, estaba en eso cuando vi la cola de un mapache. Llamé a servicios veterinarios para que acudieran a regresarlo hacia su habitad porque podría causar un accidente, pero luego apareció un niño.-

-No me digas que ese niño era Taemin.- me miró tan consternada que no se lo dije, pero sí asentí. –No puede ser.- su tono de voz me hizo sentir un vuelco en el corazón. –¡¿Era Taemin!?-

-Sí.- susurré.

-¡Qué no me lo dijeras!-

-¡Oh pues!- susurré medianamente divertido y molesto. –Servicios vegetarianos dijo que no atendían mapaches, sólo animales domésticos así que no creí que se hicieran cargo del niño. Para esto había dejado una barra de chocolate o unas galletas, no recuerdo, para que él las tomara. Ahí supe que él era el mapache.-

-¿Ahí comenzó la historia?-

-Sí.- susurré asintiendo lentamente. –¿Me dijo “tienes más chocolates? Mi pancita tiene hambre y Amo no ha regresado, ñé” le di mi saco para que se cubriera, no recuerdo si estaba enteramente desnudo o si tenía ropa muy corta; pero con mi saco puesto subió a mi auto y regresamos a casa. Dos días después inicié el trámite de adopción y en mi imaginación, era más fácil la simple por si él quisiera regresar con su anterior Amo o ser independiente con su mayoría de edad pero fue una mala idea cuando la cumplió.- suspiré un poco estresado. –Porque me preguntaba si se quedaría conmigo o si se marcharía, además de que tenía novio, casi escuchaba decirme “me voy con él” fue muy aterrador.-

-Ya veo.- susurró delineando el vaso con la yema de su índice. –¿Conociste al anterior Amo de Taemin?-

Regresé a sentarme frente a ella.

-Ugh… sí.- susurré desganado. –Pero fue extraño porque él me había contratado para un estudio de riesgo porque su pareja estaba involucrada en un delito, inicialmente le iba a ayudar pero llegó Taemin, lo reconoció y corrió a sus piernas. Le besó las mejillas y dijo “Taemin se ha portado bien” sentí impotencia, cólera, me intoxiqué de frustración y desilusión. Horrible. Que le pedí a Jonghyun que se retirara de mi casa y le dije que no le iba a ayudar.- negué lentamente.

-Tu juicio estaba comprometido.-

-Exactamente.- susurré suspirando. –Ese día lloré.- no esperaba que Taemin reaccionara así, menos que lo hiciera bajo mi techo.

-¿A los cuantos años se forma la personalidad? Esa es una pregunta para ti.-

-Luego de los cuatro años pues comenzamos a ser consientes.- contesté tallando mis ojos. –¿Por qué?-

-¿Y ese Amo fue quien dejó a Taemin en la calle?-

-Correcto.- suspiré intentando tranquilizarme un poco más.

-Entonces… ¿Taemin no había intentado besarte las mejillas o sentarse en tus piernas? Algo, ya sabes, como lo que hizo cuando lo vio.- estiré mi mano para tomar mi taza de café y el calor del mismo hizo que me sintiera un poco mejor.

-Una vez lo sorprendí besándome los labios. Digo “lo sorprendí” porque yo estaba dormido, ese día le dije que los besos se daban en la frente y se llamaban “besos de buenas noches”, luego nada.- cualquier conducta inapropiada la trataba de erradicar por otra más saludable. –¿Por qué?-

-Aquí es donde comienzas a hacer apuntes, Mino.- asentí para sacar la pequeña libreta que tenía dentro del saco. –No puedo creer que en serio la hayas traído.-

-Oh, mi palabra tiene peso.- susurré sacando la pluma también. –Dime.- me reí un poco por todo esta situación.

-Tú puedes estar con Taemin porque A, fue una adopción simple, B los vínculos se han disuelto.- dejé anotar en la libreta para mirarla.

-Dime algo nuevo, eso todo el mundo me lo ha dicho.-

-C, Taemin tenía al menos “ñé” años lo que indica que ya tenía una personalidad formada por lo que D sabemos que su Amo le había educado de cierta manera para que E demostrara o recibiera amor de una forma un tanto diferente haciendo que F, su percepción de amor fuera diferente a la que tenemos tú y yo por lo que G, no dudaría en pensar que Taemin siente algún tipo de rechazo de tu parte porque como decía D, su anterior Amo le educó a su conveniencia y si quieres decirlo aquí es cuando H dice que en efecto, Taemin no te ve como un “padre” porque sabe que eres su Amo, concluyendo que, si consigues a un criminólogo que le haga un estudio de riesgo arrojará datos certeros sobre todo esto que te he dicho. Mi ponencia termina diciendo que, por la historia de vida de Taemin de los primeros ñé años no estaría contra ninguna ley ni ningún “algo” para que su matrimonio no sea real.- parpadeé efusivamente por todo eso.

Abrí mi boca para replicar pero ella me indicó que no dijera nada.

-Una vez en el salón de clases cuando Joe dijo que estaba de novio con una señora diez años más grande y que a mí me molestaba mucho ese tema tú dijiste.- se levantó de la mesa y extendió los brazos mirando hacia el techo. –“Como psicoterapeuta Gestalt, ¡qué haga lo que quiera para ser feliz!”- me imitó a la perfección, incluso, en el tono de voz que me sentí un poco avergonzado. –Mientras no trasgreda ninguna ley, que esté con quien él quiera. Fin de la cita.- tomó asiento delante de mí, acomodando su falda y tomando la taza de café con ambas manos.

-Gestalt.- susurré saboreando esa palabra. –Aunque él tiene razón y me has mostrado argumentos meramente efectivos y ciertos, mi mamá love  como un nieto. Mi papá se molestó mucho cuando supo que Taemin era un híbrido y verdaderamente no quiero perder a mi mamá.-

-Vuelve a preguntarte, si hoy fuera el último día de tu vida, ¿estarías con Taemin como tu familia o como su pareja?- se levantó de su silla y tomó el café. –La gente siempre va a hablar y tú no puedes detenerte a lanzarle piedras a cada perro que te ladre.-

-No lo sé.- susurré recargándome en el respaldo de la silla.

-Antes de irme haré una última cita tuya. “Tuve que elegir entre el amor o el éxito. Dude bastante y por un tiempo me arrepentí de haber escogido el éxito porque extrañaba ser amado.” Ahora que tienes el éxito, ¿qué esperas para ser amado?-

-Tiene que haber un proceso de transición entre…- escuché que la puerta se cerró e inevitablemente bajé la mirada. –Gracias.- susurré tomando aire en mis pulmones.

-De todos modos aplícale un estudio de riesgo para saber si todo lo que deduje es verdad y si aún no le preguntas, tienes que preguntarle a Taemin qué significa tener un Amo para él, porque tal vez, tampoco quiere ser tu pareja sino tu subordinado.-

-Creí que ya te habías ido.-

En Seúl…

-Oye Key, ¿dime qué te parece así?- Jonghyun se cruzó de brazos aun de pie sobre el sofá en la sala de estar.

-¿Terminaste de acomodarlo?- preguntó Key entrando a la sala de estar mirando el cuadro que exhibía a un orgulloso Jonghyun con su uniforme policial y el reconocimiento por sus años de servicio en la Policía. –Quedó bien.-

El cuadro aún estaba inclinado hacia la derecha, pero lucía bien.

-Me parece que todavía no está bien.- susurró volviendo a acomodarlo.

-Yo creo que luce bien.- Kibum se recargó en el marco de la puerta aun secando sus manos en la pequeña toalla que llevaba consigo.

-Parece que todavía está inclinado, pero no importa. ¿Ves lo que dice ahí?- Jonghyun apuntó hacia una parte especifica. –“Por haber participado en 236 operativos antipiratería y 140 operativos antinarcóticos pero sobre todo por los años de servicio a una institución tan respetable como la Policía Estatal.” Dicen que me retiré con honores y en hora buena.- bajó del sofá con cuidado de no caer al suelo. –Te prometí que no me pasaría absolutamente nada y cumplí con mi promesa.-

Kibum asintió lento y sonriendo mientras bajaba sus manos con la toalla para acercarse a él.

-Los años que estuviste en la policía de reacción fueron los más estresantes de toda mi vida, pero me alegro de que todo haya resultado estupendamente bien.- extendió los brazos para ofrecer un abrazo que Jonghyun no negó, por el contrario, incluso le levantó del suelo para girar un par de veces.

-Y ahora que todo terminó, me preguntó qué será de mi vida.- soltó el cuerpo de Kibum para suspirar emocionado y mirar hacia el otro extremo de la habitación, donde había un diploma más, en el que portaba su uniforme de Coronel, el rango más alto que obtuvo en la Policía de Reacción.

-Podemos hacer lo que sea.- susurró Kibum tomando su mano para tirar de él e ir hacia la cocina pues la comida ya estaba incluso servida.

-“Lo que sea” es muy abierto.- entraron al comedor. –Pero lo primero que haré será pintar esta casa.-

-¿Por qué?- preguntó Kibum soltando su mano y abriendo una de las sillas para que tomara asiento. –Estos colores están bien.-

-Pero estos colores los escogiste para que no me sintiera abrumado por mi trabajo, por la terapia que escogiste también para mí y ahora son innecesarios.- las paredes eran rosa tenue para mantenerlo alegre y el techo blanco para despejar su mente y mantenerlo positivo.

-¿Qué colores son los que te tientan ahora?- Kibum se sentó frente a Jonghyun, tomando la jarra de efusión de limón para servir en ambos vasos.

-Rojo no estaría mal.-

-¿Qué tonalidad de rojo?-

-No, rojo no. Dicen que el verde es calmante porque nos recuerda a la naturaleza, así que no estaría mal poner un verde en las paredes. ¿O tú qué opinas?-

-Me gusta mucho nuestro color rosa, pero los cambios no vienen mal, si quieres más tarde podremos ir a comprar la pintura para pintar desde hoy.- Kibum tomó los palillos para comenzar a comer.

-Halando de cambios, ¿qué crees que vaya a suceder con Minho y Taemin luego del viaje que hicieron?- Jonghyun se levantó de su silla para ir hacia el refrigerador, abrirlo y tomar dos latas de soda. –Le dijimos a Taemin que Minho estaba dispuesto a aceptarlo pero que tendría que mostrarle que estaba a su nivel.- regresó a la mesa para deslizar una de las latas hacia Kibum, que sólo la tomó con un puchero en sus labios.

Él quería beber agua y continuar con un régimen alimenticio sano, pero desistió al oír el gas salir de la lata de Jonghyun.

-Creo que Taemin aún no está al nivel de Minho pero con YoonGi tenía un aproximado, así que no les irá tan mal. El verdadero problema será cuando la familia de Minho se entere de todo esto. Ellos no podrán entenderlo como nosotros.- intentó abrir la lata pero se lastimaba la uña.

-Pero Minho ya está muy grande como para seguir muy apegado a ellos. Es decir, tú y yo vemos a nuestros padres dos veces al año, o a veces sólo una.- la mano de Jonghyun rozó las de Kibum que seguían luchando por abrir la lata.

-Gracias.- susurró Kibum sonriendo apenado al recibir su refresco abierto. –Pero Minho lo hace por sus niños, Taemin tenía una buena relación con su mamá y Rockhyun con todo el mundo.-

-Recuerda que el papá de Minho fue el primero en desaprobar a Taemin por ser un hibrido, quién sabe qué cosas dirá la mamá y el papá cuando sepan de toda esta revolución neoliberal.-

-¿Neoliberal?- preguntó Kibum mirándolo.

-Ya que hablamos de temas complicados… ¿tú y yo qué somos exactamente? Y no me digas que compañeros de piso porque últimamente no ha sido sólo así.-

-¿Por qué quieres hablar de temas difíciles ahora?- preguntó Kibum un poco incómodo pero sonriendo. –Yo creí que estábamos saliendo… ya sabes… como una pareja.- se encogió de hombros sin levantar la mirada para continuar comiendo.

-Pero con lo que le hiciste a Minho el otro día, ¿cómo debería de sentirme si eres mi pareja?-

-Tienes razón, te falté el respeto y por eso te pido perdón pero me apegué a todo lo que habíamos planeado antes. Como tú y yo ideamos todo eso, creí que estabas de acuerdo.-

-Sí pero…- Jonghyun comenzó a jugar con las verduras de su plato. –Me molestó un poco verlos, ¿tenía que estar presente? Sí, sí, yo dije que sí, pero no esperaba que fuera tan… así… no sé si me explico.-

-Minho y yo comenzamos a tener tensión sexual por esas noches en las que íbamos a los clubs pero nunca paso nada entre él y yo porque realmente… Minho es para mí un momento, un momento del que me podría arrepentir mucho por mucho tiempo. Además, Minho es muy metódico y criminalístico; eso a mí no me viene.-

-Es eso, ¿o que Minho también puede saber cómo funciona tu mente?- Jonghyun tomó la porción más pequeña de la verdura para ponerla en el plato de Kibum y sonreírle.

-No, nada de eso.- susurró Key tomando la verdura recién recibida. –Porque tú también eres criminólogo.- la llevó a sus labios para comerla. –Y tú no me molestas.- susurró cubriendo sus labios con su mano.

-Eso es bueno.- susurró Jonghyun sonriendo. –Entonces si ya vamos a salir como pareja, ¿te molestaría si te pido que no hables más con el otro policía?-

-¿Con Yifan?- preguntó curioso.

-¡Tampoco lo menciones!- gritó molesto y divertido, pero presionando sus ojos.

-¿Por qué te molesta?- preguntó Kibum riendo ligeramente nervioso.

-¡Yo también era policía!-

-Pero tú eres muy correcto ¡y yo también tengo mis demonios!-

-¡Pero si son los mismos!- replicó Jonghyun cerrando su boca y cubriéndola con ambas manos, mirando lo sorprendido que estaba Kibum. –Porque ya sabes, Jung dice que el inconsciente colectivo…-

-Está bien. Ya no le hablaré más.- susurró Kibum sonriendo mirando atento su plato de comida. –Quién sabe, así tu y yo podremos estar plenos y él salvar su relación con el Fiscal.-

-No puede ser.- susurró Jonghyun recargándose en el respaldo de su silla. –Eres un idiota.-

-¡Hey!- se quejó.

-Pero lo peor de todo es que así te amo.-

Pov’s Minho

-¿Qué te dijo la Doctora?- terminé de quitarme el saco para dejarlo sobre una de las sillas del comedor, pues ya es hora de cenar. –¿Minho?- puse mi índice sobre mis labios para pedirle a Taemin que tuviera un poco de paciencia.

-¿Fuiste a ver a un Doctor?- mi mamá se giró para mirarme asustada. –¿Te sientes mal?-

-No.- contesté. –Un Doctor es aquella persona que tiene un doctorado porque estudio una maestría y una licenciatura, aunque universalmente se le conoce como “doctor” a aquella persona que tiene licencia para ejercer medicina. Mamá, cada que nos vemos le explico eso.- espero que después de todo eso, se le olvidé la pregunta de Taemin.

-Entonces me vas a decir que tú también eres Doctor.- supongo que se molestó porque hasta me dio la espalda para seguir cocinando.

-Desde hace un par de años.- contesté mirando como Rockhyun sólo estaba mirándome, que cuando le descubrí sonrió y cubrió su rostro con sus manos. –Tengo un Doctorado en Hot Cakes.-

-Chistoso.- mi mamá se giró para mirarme y traer a la mesa una taza de café, mi taza de café. –Tus niños ya cenaron.-

-Gracias.- susurré. –En realidad sólo tomaré el café para regresar al hotel, ayer tuve una mala noche y me siento muy agotado.-

-Pero todo está bien, ¿ñé?- Taemin se levantó de su silla para sentarse más cerca de mí. –¿Te dijo cosas buenas?- susurró.

-Tranquilo.- contesté tomando la taza. –Mañana quiero estar con Rockhyun y Taemin, así que no haga planes que nos incluyan. Me gustaría ir a la costa; el Zoo dijo que no habría problemas con que tocaran el agua salada sólo que cuidara de que no la tomaran. Además, quiero tiempo para mis niños.- asentí firme pero dejé de hacerlo cuando mi mamá me miró. –Si no le molesta, por supuesto.-

-Entonces lo que dijo la Doctora ¿fue bueno o malo?- escuché a Taemin y su respiración entrecortada, negué lentamente para que las gotas de sudor salieran de mi cara y volví a subir a Rockhyun hacia mi espalda porque se está cayendo.

-¿Porque el interés patológico con lo que dijo?- pregunté soplando hacia mi frente. No estoy hecho para subir más de cinco pisos por las escaleras.

-Porque de eso dependen muchas cosas, ñé.-

-Aunque ella haya dicho que sí, tú aun tienes asuntos pendientes como el duelo con YoonGi y ya te dije, si quieres estar con él un poco más, por mí está bien.-

-¿Dijo que no?-

-No.- susurré.       

-¡Entonces dijo que sí!-

-Tampoco.-

-Ñé~.- suspiró.

-Mañana usaremos el elevador aunque te dé miedo.- dije sintiendo que mi respiración se entrecortaba.

-¡Pero tú si puedes!- gritó Rockhyun incluso moviéndose aun sobre mi espalda. –¡Un piso más!-

-Decirlo es muy fácil.- susurré volviendo a acomodarlo porque sigue resbalando.

-Yo te cargaré mañana, pero sólo si subes un piso más.- asentí por la idea de Rockhyun. –Dice FanFan que todo está en la mente, si tú crees que puedes entonces podrás hacerlo, por eso te pido sólo un piso más.-

-Aunque eso es cierto, también es saludable saber cuándo retirarse.- contesté girando para subir un piso más.

-Entonces ella dijo que no.-

-No~- susurré cansado. –Luego te diré qué dijo ella.-

-Si lo demoras mucho es porque evidentemente dijo que no.-

-Es hora de dormirse.- susurré moviendo a Rockhyun que estaba sentado a mi lado derecho. –Rocky~-

-Por qué no lo dejas que duerma aquí, ¿ñé?- miré a Taemin para regañarlo pero Rockhyun comenzó a despertar. –El sofá también es cómodo.-

-Porque no.- dije levantándome. –Prepárate para dormir también tú.-

-Ñé~- oí que se quejó pero igual se levantó del sofá, supongo que se fue directo hacia el baño para asear sus dientes.

-¿Fanfan?- Rockhyun entreabrió los ojos pero negué de inmediato.

-Es Minho.- susurré tomándolo entre mis brazos para levantarlo. –Vamos a dormir de una vez.-

Caminé con él hacia la habitación en la que durmió ayer, que pensándolo bien, dormiremos juntos para que Taemin pueda tener su propia cama.

-Voy a dormir contigo, ñé.-

-No.- susurré entrando a la habitación para dejar recostado a Rockhyun en la cama. –Tú vas a dormir en tu propia cama.- acomodé la almohada debajo de la cabeza de Rockhyun y le cubrí con la cobija.

-¿Min?- miré a Rockhyun y el tenue movimiento de sus labios, así que asentí mientras me inclinaba para besarle la frente. –Hummm…-

-Duerme bien.- susurré acomodándole el cabello sobre la frente.

-Es mi viaje de graduación y en mi viaje de graduación decido que quiero dormir contigo.- terminé de acomodar a Rockhyun para que tuviera un buen sueño reparador, luego de erguirme y acomodar mi cabello volteé a ver a Taemin que tenía los brazos cruzados y un semblante muy serio. –Ñé.- asintió.

-Nada de ñé.- susurré. –Ve a dormir a la habitación principal.-

-Sí dijo que no, ¿verdad?-

Fruncí el entrecejo y me giré en la cama.

-¿Ñé?- abrí los ojos notando a Taemin acostado a mi lado. –No puedo dormir.-

-Está bien.- susurré abriendo la cobija para cubrirlo también. –¿Extrañas tu cama?- pasé saliva mientras Taemin se acercaba más a mí. –¿O tu cobija?-

-Quiero saber qué dijo la Doctora, ñé.-

-¿Por qué te importa lo que haya dicho la Doctora?- susurré abrazando mi almohada.

-Porque a ti te importa.- suspiré un poco, logrando que mi exhalación le moviera el cabello. –Ella se veía inteligente y si estudió contigo tiene que ser como tú pero en mujer, y tú siempre te escuchas, ñé.-

-No importa lo que ella haya dicho.- susurré acomodándole el cabello de la frente para descubrirla. –Lo que importa es cómo te sientas.-

-Todo Red Dress me ha dicho que no hay problema con todo esto, menos tú, que aun piensas que no debería, pero ella es como tú, es como la parte de Red Dress que falta por aprobar.- cerré los ojos porque tengo sueño sin embargo, sentí que Taemin se movió en la cama, luego el aroma de su cabello llegó hasta mi nariz. –Hablé con YoonGi antes de que te durmieras y le dije que hablaríamos cuando regrese a Seúl, pero mientras esté aquí, que intentara no hablarme más.-

-Está bien.- susurré pasando mi brazo por sus hombros para pegarlo más a mi cuerpo. –Si así lo quieres.-

-¿Que me abraces así significa que dijo que sí?-

-Ñé.- suspiré.

-¿Qué significa ñé?- preguntó haciéndome reír ligeramente. –Es decir, sé que significa cuando lo digo pero no cuando lo escucho.-

-No importa lo que haya dicho la Doctora o Red Dress, no importa si dijo que sí o sí dijo que no, al final del día, yo tomaré mi decisión y tú también.-

-Pero… sería más fácil si me lo dices, ñé.-

-No te diré nada.- susurré cerrando la boca de inmediato porque quería bostezar. –Deja que mis acciones hablen más que mis palabras.-

-Entonces dijo que sí.- lo apreté contra mi cuerpo para que ya se duerma, pero me sorprendí un poco al sentir que besó el dorso de mi mano, ni menos, pues está a la altura de su pecho. –Buenas noches.-

Suspiré moviéndome en la cama pero terminé abriendo los ojos para sentarme y mirar hacia el reloj de pared.

-Diablos.- casi las once de la mañana. Suspiré de nuevo mientras me levantaba de la cama, seguro Taemin y Rockhyun ya están de pie y no han desayunado aun. Tomé la bata de baño para ponérmela y salir de la habitación luego me cambiaré de ropa, lo que importa ahora es que ellos desayunen.

-¡Niños!- salí de la habitación llamando a la puerta para que se despierten.

-Buenos días.- oí a Taemin pero la iluminación del comedor hizo que cerrara los ojos de nuevo. –Ya desayunamos, tu café está frio pero en un momento te lo calentaré, ñé.-

Alcé las cejas porque Rockhyun ya tenía un cambio de ropa diferente al que recuerdo de ayer, había platos limpios en la cocina y mi desayuno en la barra del comedor.

-¿Cuánto tiempo duré dormido? No escuché la alarma.- caminé hacia Taemin para retirarlo de la cocina, yo terminé de preparar mi desayuno.

-Sí, yo ayer desactivé la alarma.- Taemin me sonrió pero yo no lo hice. –El día de mi graduación dormimos cuatro horas, y ayer te quedaste en el suelo, además de que le dijiste a la abuela “estoy agotado, ayer tuve una mala noche” ¿qué esperabas que hiciera? ¿Que dejara que te levantarás a las seis de la mañana?- asentí efusivamente pero Taemin negó sonriéndome. –Tranquilo, todo está bien.-

-No hagas eso de nuevo, por favor.- tomé la taza de café que me tendía.

-¿Estás cansado, ñé?- Taemin tomó mi mano para llevarme hasta el comedor. –Ayer sí te veías mal.- sentí que puso sus manos en mis hombros, cerré los ojos recargándome en el respaldo de la silla. –Por eso no te quise despertar.-

-No.- susurré levantándome. –No Taemin.- me giré para mirarlo.

-¿No qué?-

-Te dije que no actuaras como Hyuna.- dije mirándolo a los ojos, él desvió la mirada incómodo. -¿En dónde está Rockhyun?-

-No sé.- susurró pasándome de largo para irse hacia la sala de estar, negué lentamente pero igual, es lo mejor.

-Bien.- suspiré para girarme sobre mis talones e ir hacia la habitación en donde están las maletas. Entré y fui hacia mi celular, necesito volver a programar la alarma para mañana despertarme y comenzar a cumplir con la agenda.

Alcé las cejas porque está entrando una llamada, pero es de alguien que no tengo registrado. Intenté recordar quién podría ser. ¿La Doctora? No, ella dijo que no me llamaría de nuevo a menos de que yo lo hiciera y si lo hacía, que fuera sólo para trabajo.

¿Si son “ellos”?

No, no, negué lentamente, tengo que tranquilizarme un poco. Aunque agendaré ir con la psicóloga en cuanto regrese a Seúl, esto me está matando lentamente.

Bien, la llamada se perdió así que no pasó nada. Dejé el celular en la cama para ir por la maleta, pero lo oí vibrar de nuevo, regresé rápido por él, sigue siendo el mismo número. Fruncí el entrecejo, ¿debería de contestar?

No, incluso si es algún cliente estoy en vacaciones y por ahora no tomaré ningún caso ni trabajo.

Suspiré porque sigue llamándome, tal vez sea importante. Alguien importante.

Tomé el celular para contestar la llamada pero se perdió de nuevo. Eso tiene que ser una señal, lo iba a bloquear de nuevo pero llegó un mensaje de ese número. Pasé saliva mientras lo abría.

“Buenos días, soy Kris Wu…” oh, bueno. “Le llamaba para preguntarle por el bienestar de Rockhyun.” Por supuesto.

No terminé de leer el mensaje, sólo le marqué, espero que sí me conteste.

-Bueno días.- lo escuché, como tengo otras cosas que hacer, puse la llamada en altavoz. –¿Cómo se encuentra hoy?-

-Bien, gracias.- contesté. –Buenos días.-

-Quería preguntarle por Rockhyun, ¿él ha estado bien?-

-Por supuesto.- dije. –La hemos pasado absolutamente bien.-

-Me alegro.- lo oí suspirar. –También le llamaba porque se están haciendo investigaciones de su percance.-

-¡Fanfan!- volteé rápidamente hacia la puerta porque Rockhyun había entrado corriendo, logré tomar el celular antes que él lo hiciera y le quité el altavoz.

-¿Qué han investigado?- pregunté alejándome de Rockhyun.

-Nada que usted no sepa, me imagino.- rodé los ojos fastidiado. –Que el auto de los agresores se detuvo por sí solo y que quién inició el fuego no fueron ellos.- ¿no?

-¿Sólo eso saben?- pregunté recargándome contra la pared. –¿Que el fuego no lo iniciaron ellos y que sí se desviaron por voluntad?-

-No, también se investigaron las huellas de derrape en la autopista que son de un segundo auto no identificado.- asentí por eso, pues el auto no identificado es del que llegó Hyorin. –Y balística dice que las balas disparadas por los agresores eran calibre veintidós. Las balas de otra arma no identificada son de un calibre mayor.-

-¿Sí?- no recuerdo haber visto el tipo de arma ni el calibre, aunque la tuve en mis manos.

-Todo califica como homicidio de parte tuya.-

Asentí lentamente.

-Pero no fue así, pues lo que ocurrió fue desaparición forzada con un muy mal final.-

-Gracias.- susurré sintiéndome más aliviado.

-También se ha investigado a la célula delictiva, parece que no era siquiera una célula sino una pandilla.- pandilla es mejor que célula delictiva. –Y bueno, dicen que muerto el perro se acaba la rabia.-

-¿Esa pandilla tenía lazos con otras?- porque si es así, entonces tendría que preocuparme más.

-No.- gracias. –De hecho esa pandilla tenía fricciones con otras más. Aun así, se ha estado investigado y se descartó la posibilidad de un segundo encuentro.-

-Gracias.- susurré. –Por decirme esto.-

-No se preocupe, el Fiscal es quién está haciendo la investigación particular, así que no tiene nada qué temer. Estamos seguros que todo fue sólo un mal episodio.-

-Sí, eso espero.- susurré girándome, encontrando a Rockhyun sentado en el suelo, mirándome y con las orejas de zorro abajo. –¿Tienes tiempo libre? Rockhyun te escuchó hablar y está aquí.-

-Por supuesto.- contestó. –La pregunta sería si usted tiene tiempo, porque es su celular el que ocuparía.-

-Sí, tengo tiempo.- le pedí a Rockhyun que se levantara del suelo. –Gracias por decirme esa información y por investigar de manera particular. Cuando termines de hablar con Rockhyun finaliza la llamada, por favor.-

-Así lo haré.- asentí una vez más y le tendí el celular a Rocky.

-FanFan quiere hablar contigo también.- le sonreí, él comenzó ¿a temblar de la emoción? Vaya, sí que le gusta hablar con él. –No dejes que se caiga el celular.-

-Sí.- susurró caminando hacia la cama para sentarse en ella. -¿Fanfan?-

Suspiré un poco más tranquilo, eso me quita un gran peso de encima aunque de todos modos, estoy esperando lo que sea que pueda investigar Red Dress.

-Se ve mejor que en las fotografías de internet, ñé.- dijo Taemin soltando mi mano y sacando su celular, supongo que le tomará una fotografía. –A KwangMin sí que le dará envidia mi viaje de graduación.-

-¿Cómo se siente la arena?- Rockhyun soltó también mi mano para acercarse más a la barandilla del muelle, sólo que tiré del cuello de su playera para que no se acerque mucho.

-No te recargues, puede ser peligroso.-

-Sí.- asintió alejándose un poco pero aun manteniendo sus manos sobre la barandilla. –¿Por qué el mar se ve azul?-

-Porque los peces hacen “blú, blú”.- miré a Taemin que se estaba riendo. –El Fiscal estaría muy feliz aquí.-

-¿Le faltan vacaciones?- pregunté sintiendo la brisa marina, pero dejé de disfrutarla al ver como las orejitas de mapache de Taemin se movían por el viento.

-Al Fiscal le gusta mucho el agua.- susurró Taemin. –Dijo que cada que tenía tiempo libre se daba duchas muy largas y cuando tenía días libres, iba a parques acuáticos. No lo culpo, su parte híbrida aun es dominante.-

-¿¡Qué!?-

-Eso lo vimos en Larú.- dijo acercándose a mí para tomar mi mano y recargar su cabeza en mi hombro. –Los híbridos podemos tener nuestra parte zoo puede ser dominante o receptiva. La dominante es cuando la mayor parte del día hacemos cosas para satisfacerla y la receptiva es la que se ha urbanizado.-

-¿Eso te enseñaron en Larú?-

-También otras cosas, pero cada que veo al Fiscal digo “ha, a él le falta urbanizarse.”-

-¿El Fiscal es híbrido?-

-Sí.- susurró Taemin mirándome. –¿No lo sabías?- se separó de mí, deduzco que por la impresión.

-Bueno, no. ¿Debería?- no hay nada en él que me haga pensar que lo es.

-Está bien, yo tampoco me había dado cuenta, ñé, lo intuí y cuando lo abracé me di cuenta de que sí lo era. Además, su aroma es muy fuerte, ¿cómo puedes no notarlo?-

-No sé.- susurré nervioso. –¿Cuándo ocurrió todo eso?- tomé de nuevo a Rockhyun porque se sentó en el borde del muelle, haciendo que sus piernas colgaran. –Así no, Rocky.-

-No me caeré.-

-Así no, dije.- Rockhyun se levantó del suelo para tomar mi mano y ponerse en una zona segura. –Gracias.-

-¿Podemos bajar a la arena? Quiero saber cómo se siente.- dijo Rockhyun mirándome, así que asentí sonriéndole.

-Eso sí podemos hacer.- susurré.

-Era de noche y me desperté porque oía ruidos extraños, pensé que algo te estaba pasando pero cuando vi que estabas lastimándolo tuve que atacarte.-

-Oh…- ya lo recuerdo. –Si te explico por qué reaccioné así contra el Fiscal, no lo entenderías. Pero bien, ¿fue ese día cuándo supiste que era un híbrido?-

-Ya soy mayor de edad, creo que podría entenderlo, ñé. Y sí, fue ese día.-

-La mayoría de edad es sólo un número que el Estado declaró para acreditar a alguien como maduro, pero la madurez, es independiente a la edad.- salimos del muelle para girar y tomar las escaleras que llevan directo hacia la arena y el resto de los comercios pequeños.

-¿Este es un mercado de pulgas?- Rockhyun tiró de mi mano para ir hacia esos pequeños comercios. –Yifan dijo que si venía a la costa me los encontraría.-

-Sí, estos son los mercados de pulgas.- contesté caminando hacia el más cercano. –¿Quieres comprarle algo?-

-Sí.- asintió efusivamente. –Pero primero tengo que ver todo.-

-Está bien.- contesté caminando para que pudiera echar un vistazo por los comercios. –¿De qué estábamos hablando tú y yo?- volteé a ver a Taemin, me di cuenta de que ya había soltado mi mano porque miraba lo mismo que Rockhyun. –Oh sí, de la mayoría de edad.-

-¿Era de Derecho?- Taemin tomó un abanico y me lo mostró. –¿O de Medicina Forense? Lo que hablabas con él.-

-Era de nada de eso.- contesté tomándolo. –¿Lo quieres?-

-Ñé.- negó para tomar otro. –Este es más grande.-

-¿Y el Fiscal qué híbrido es?- no lo usaría en su contra, últimamente se ha portado muy bien conmigo pero no me vendría mal un poco de información extra.

-Dicen que no le hagas a otro lo que no quieres que te hagan, y no me gustaría que la gente ande diciendo qué soy, así que tampoco te lo diré.- volteó a mirarme por encima de su hombro, justo en el momento que mi quijada cayó un poco. –Ñé.- me guiñó el ojo.

-¡Corre! ¡Corre!- grité incluso moviendo mis brazos para que Taemin y Rockhyun regresaran hacia mí y que las olas del mar no les tocaran los pies. –¡Bien!- les mostré mis pulgares más una sonrisa de aprobación para que siguieran motivados. –¡Sólo tengan cuidado, por favor!-

Suspiré al ver que de nuevo se acercaban a las olas, y salían corriendo para evitar mojarse. Sonreí satisfecho, hoy ha sido mejor que ayer  espero que así sigan las vacaciones.

-¡Minho! ¡Ven!- miré a Rockhyun que estaba agitando sus brazos. –¡Ven también!-

-Está bien.- susurré caminando hacia ellos, abandonado la comodidad de la toalla y la sombra del paraguas. Toqué la bolsa de mi pantalón, la billetera se puede mojar así que me detuve para sacarla y meterla en la bolsita hermética que conseguí, ahí junto con mi celular, debería de estar a salvo de cualquier daño que el agua pudiera ocasionarles. -¿Qué ocurre?-

-Ven, Yifan dijo que no me mojara en el mar a menos de que estuvieras cerca.- tomó mi mano y comenzó a caminar hacia el agua.

-Creo que Yifan podría ser parte de la familia. Como un tío o como Red Dress.-

-¡Yo también quiero!- volteé hacia donde escuché a Taemin, venía corriendo con las rodillas llenas de arena, e incluso tenía un poco en la mejilla derecha. –Encontré esto, ¿son las conchitas?- me mostró lo que tenía en sus manos, alcé las cejas porque hay caracolas incluso.

-Guardarlas en tu bolsillo y dame la mano.- porque la ola se está acercando. –Sujétense fuerte.- si algo llegara a pasar, que espero que no, Taemin podrá salir por sí solo y tendría que enfocarme en Rockhyun. Rockhyun está a mi derecha, así que recuerda, Rocky, derecha.

-Ha~- bien, la ola no fue tan grande y no ocurrió nada inesperado. –Está calientita.- Rockhyun iba a soltar mi mano pero la presioné para que no lo hiciera. –¡Ohh!-

Sentí vértigo, cuando el agua entró en regresión. Pero me dio más miedo porque Taemin soltó mi mano así que rápidamente tomé a Rockhyun para cargarlo en mi espalda y sostener a Taemin.

-¿Estás bien?- pregunté.

-¿Mmm?- entreabrió los ojos pero la iluminación del sol hizo que los cerrara de nuevo. –¿Minho?-

-Bien, suficiente por hoy.- sabía que cargar ayer ocho pisos a Rockhyun en mi espalda, algún día me daría frutos porque justo ahora, tengo que cargar también a Taemin. –Sequémonos para regresar al hotel.-

-¡Pero no sé qué pasó!- gritó Taemin bajando del auto. –En un momento estaba bien y en otro ya no.- tomé la mano de Rockhyun para ayudarlo a salir también, y una vez en el suelo le sacudí el short. –Para la siguiente prometo no desmayarme o lo que sea que haya hecho, ñé.-

-Lo que sufriste fue la sensación de vértigo por un falso sentido de movimiento.- contesté cerrando las puerta del auto. –Lo vas a sentir de nuevo en el elevador.-

-Pero en el elevador no se siente tan mal, ñé.- entramos al vestíbulo y fuimos directo hacia él, me sorprendí porque fue Taemin quién presionó el botón para hacer que baje. –Nunca me había sentido así.-

-No te preocupes, yo también me mareé pero como es tu primera vez, te asustaste mucho.- las puertas se abrieron y entré junto con Rockhyun, Taemin pasó saliva pero terminó entrando también. –Si quieres puedes tomar mi mano.-

-Ñé.- susurró acercándose a mí, sentí el movimiento del elevador y la mano de Taemin estrujándome.

-Vamos a descansar un poco para pedir la comida. ¿Les parece bien?-

-Me quiero bañar primero, Yifan dijo que lo hiciera inmediatamente después de salir del mar.-

-Sí, ese Yifan ahora será parte de la familia.-

Cerré las llaves del agua, me quedé de pie frente a la ducha un poco más sintiendo como las gotas resbalaban. Suspiré temblando ligeramente por el frio.

-Rockhyun se quedó dormido en la sala.-

-Está bien.- contesté tomando la toalla más cercana para comenzar a secarme o cubrirme si es que Taemin abre la puerta.

Oí sus pasos alejarse así que me tranquilicé. Terminé de secarme el cuerpo y ponerme la ropa, sólo que mi cabello aún estaba húmedo por lo que dejé la toalla en mis hombros. Tomé mi cepillo dental para asearme también la boca y tras hacerlo, salí del cuarto de baño.

-¿Taemin?- susurré secándome el cabello. –¿En dónde estás?-

-Ya casi se te cura lo del lápiz.- volteé hacia mi derecha, Taemin estaba saliendo de la habitación principal con su celular y los audífonos puestos. –¿Quieres que te ponga un parche? Jinki me enseñó cómo.-

Miré hacia mi brazo, en la dirección que apuntaba.

Me sorprendí porque ya está la costra.

-No, no es necesario.- susurré bajando mi brazo. –¿Quieres comer algo? Voy a ver qué hay en la nevera.-

-Espera, ahora que la veo mejor, no parece hecha por un lápiz.- por inercia cubrí mi herida con mi mano contraria. –Tampoco parece que te hubieras caído.-

-O tuvo que ser una caída muy especial para lastimarme así.-

-¿Te peleaste? Parece a lo que Yongguk le dejaba a otras personas.- quitó mi mano para volverá ver pero me giré para que no lo consiguiera. –¡Oye! ¡Tienes brazos! No recuerdo habértelos visto porque siempre usas saco.-

-Vaya.- susurré riéndome ligeramente nervioso. –Sí, sí tengo brazos.- contesté.

-¡También tienes músculos!- dejé de flexionarlos para que no se marcaran. – ¿Cuándo haces ejercicio?-

-Los expedientes suelen pesar mucho.- contesté girándome para abrir la nevera. – ¿Quieres helado?- hay un litro de helado de chocolate. Esto tendrá que bastar para cambiarle el tema.

-¿Por qué no me quieres decir qué te pasó en el brazo?-

-No es el momento.- contesté tomando el helado y cerrando la nevera.

-¿Pero me lo vas a decir en algún momento? ¿O es como lo que había pasado esa noche con el Fiscal?- sentí su mirada seguirme hasta salir a la sala de estar.

-Es como esa noche con el Fiscal.- contesté mostrándole dos cucharas. –Ven.-

-Ñé.- asintió y caminó rápido hacia mí.

-Come conmigo.- le di una de las cucharas.

-Azu me mandó un mensaje.- susurró tomando la cuchara. –Me preguntó cómo estaba porque ella me dijo que todavía se siente cansada por la graduación.- le tendí el recipiente del helado para que comenzara a comer.

-¿Qué le dijiste?-

-Que estaba cansado sí, pero feliz. Le conté que estaba en la playa y que todo era muy divertido, también le dije que le llevaría algo de recuerdo.- Taemin tomó una porción del helado y me embobé al verle comer de la cuchara. –Me tomé una foto donde saliera la vista de la ventana y se la mandé. “Para que recuerdes Jeju”.-

-Creí que le compraríamos algo, no que le mandarías una foto de ti mismo aquí.- clavé mi cuchara en el helado pero sólo conseguí tomar poco.

-Me dijo “te la has de estar pasando de maravilla, más si Minho está conmigo” es más, mira.- me volvió a llamar Minho, lo que dice que en efecto no me ve como un padre. Pero supongo que eso es bueno. De hecho, Rockhyun tampoco me llama “papá”.

Ah~

-Léelo tú.- me tendió su celular con la conversación. Esta vez no le vi nada malo y lo tomé. “Te la has de estar pasando de maravilla, más si Minho está contigo” más un emoticón de un torso marcado. “Dile que tú le pones el bloqueador solar 1313” fruncí el entrecejo un poco divertido y le regresé el móvil.

-No sabía que ya me podía faltar el respeto.- dije. –Normalmente primero los ofendo.-

-¿Estás enojado?-

-No.- contesté. –Pero normalmente primero los ofendo y luego me faltan el respeto.-

-Pero no estás enojado.-

-No, no estoy enojado.-

-Pareces enojado.- susurró dejando la cuchara en la mesa de centro y levantándose, cerré los ojos para suspirar un momento más. –Estaré en la habitación, ñé.-

-No estoy enojado.- repetí. –Normalmente primero ofendo a las personas y luego ellas a mí, pero vaya, ¿cómo quiero decirlo? Cuando me la presentaste ella de inmediato te dijo “tu papá es muy guapo” eso de alguna manera me advirtió el tipo de comentarios que diría sobre mí.- tal vez no fue la mejor elección de palabas que he tenido en toda mi vida. –Pero no estoy enojado.-

-Bueno.- susurró regresando a mi lado.

-¿Qué más te contó Azu?-

-Me preguntó por qué no fuiste a la recepción.- fruncí el entrecejo un poco incómodo que terminé tendiéndole todo el helado. –Y nada más.-

-¿Qué le dijiste?- pregunté.

-Que tenías trabajo o estabas cansado.-

-Sé que esto que voy a hacer no es correcto, pero me has creado la necesidad patológica de hacerlo.- susurré recargándome en el sofá. –Te voy a contar qué me pasó en el brazo y por qué no quise ir contigo a la recepción e insistí en que fueras con tus tías.-

End Pov’s Minho

Pov’s Taemin

-Ñé.-

-No quiero que te asustes ni que desarrolles paranoia.- sentí que mi corazón comenzó a latir con fuerza.  -Te lo voy a decir ahora porque todo está bien. No te expondría ni a ti ni a Rockhyun a alguna situación de riesgo… así que estate tranquilo, ¿lo prometes?- me tendió su mano con el meñique alzado para hacer una promesa.

-Te lo prometo.- entrelacé mi meñique con el suyo, pero me sentí ligeramente más incómodo. 

-El día que dedujiste que me habían atacado con un lápiz…- asentí efusivamente, sintiéndome más ansioso. –En realidad…- dejé de verle los ojos, tal vez eso lo pone más incómodo pero noté que hay sudor en su frente.

-Tienes calor, ¿ñé?-

-No, no.- pasó el dorso de su mano para retirarse el sudor. –En realidad estoy nervioso.- alcé las cejas porque suspiró pero no fue de alivio. –También estoy asustado.-

-¿Te pasó algo malo?- susurré extendiendo mi mano hacia él, para tocarle el antebrazo.

-…- pasé saliva nervioso, sintiendo más ansiedad en todo mi cuerpo. –Sí.- mi quijada cayó un poco e incluso me escuché dar un pequeño grito. –Tengo este debate intenso dentro de mí, una parte me dice “no lo digas, no los asustes” pero la otra dice “díselo para que tenga cuidado”… No sé, esto es muy difícil.- susurró bajando la mirada, relamí mis labios y me animé a levantarme del sofá para tomar su mano y abrir su brazo, así me senté más cerca de él.

-Si no quieres, no me lo digas.- susurré entrelazando los dedos de mi mano con los suyos. –Yo sé que tienes mucho trabajo y algunas veces te consume mucho tiempo, ¿no es así?- puse mi mano libre en su mejilla para que me mirara, pero no fue buena idea porque tuve que ver como una lagrima salía de su ojo, por supuesto me apresuré a limpiársela. –Tranquilo, ¿sí? Sea lo que sea que te haya pasado, ya pasó. Ahora estamos aquí, está Rockhyun y estoy yo, los tres estamos bien.-

-Todas las licenciaturas son peligrosas, de manera directa o indirecta pero están propensas a estar dentro “de un mal momento”.- presioné los ojos un poco, creo que ya sé qué pasó. –Pero hay algunas que son más cercanas a estos círculos sociales peligrosos, la mía por ejemplo. La de Max también e incluso la de Jinki, todas las que tengan que ver con el ser humano de manera directa lo estarán.- sorbí mi nariz y negué cuando me miró a los ojos, fui incapaz de sostenerle la mirada porque él también lloraba. –Yo estuve en ese mal momento.-

Hiperventilé, e incluso bajé la mirada y solté su rostro para cubrir mis ojos.

-No.-

-Estuve… yo estuve…- oí que pasó saliva y eso sólo me asustó más.

-No Minho, para por favor.- sorbí de mi nariz e incluso me levanté del sofá. No quiero oír esto, no quiero pensar qué pudo haberle pasado y tampoco quiero verlo llorar.

-Yo estuve a punto de morir.- me cubrí los oídos y presioné fuerte mis manos para no oírlo. –Ellos… ellos querían que yo favoreciera a cierto individuo que hace poco dejé en la cárcel, me amenazaron con lastimar a mi familia, sabían en dónde vivían mis padres y mis abuelos, sabían sobre Max, Key, Kyuhyun, los mencionaron a todos… “sería una lástima que tu hijo no se graduara”- presioné los ojos y pasé saliva asustado. –Me apuntaron con un revolver, sólo había un proyectil y seis cámaras vacías. Me dijeron que pidiera un deseo, luego accionaron el disparador.-

-¿Te lastimaron?- susurré bajando lentamente mis manos y caminando aun con mis piernas temblando hacia él. –¿Lo del lápiz fue una bala?-

-No.- sonreí un poco animado. –De menos no fue ene se momento.-

-No me digas más.- susurré sonriéndole, y tomando sus mejillas entre mis manos para limpiarle las lágrimas. –Ya entendí porque no quisiste ir conmigo a la recepción. No te preocupes más por eso, tampoco se lo diré a Azu ni a nadie. Todo está bien ahora.- sonreí haciendo que mis ojos se cerraran y al tiempo, se escurrieran algunas lágrimas por mis mejillas.

-Si yo moría ahí… lo único que les pedí…- sentí un hormigueó intenso y terrible comenzar en mi estómago y esparcirse por mi cuerpo. –Lo único que quería era que no te hicieran nada.- hiperventilé tan fuerte que terminé sintiendo una arcada, y antes de salir del sofá Minho me abrazó. –Porque no me perdonaría poner en riesgo tu vida.-

-Basta.- susurré sintiendo que presionaba sus manos en mi pecho. –Minho… entiendo y perdóname por pedirte que me acompañaras. Yo no sabía lo que habías vivido antes y sólo pensé en mí.- hiperventilé y bajé la mirada, cuando abrí los ojos en sus manos estaban dos gotas de mis lágrimas. –Soy un egoísta.-

-No. No te quise acompañar porque tenía miedo de que ellos volvieran a aparecer y algo malo nos sucediera. Su disgusto es conmigo, no contra ti. Y si resultabas herido o algo peor… no sé qué haría.-

-Por eso fui con la policía, ¿ñé?-

-Si te veían rodeado de la policía, no se te acercarían.- puse mis manos sobre las suyas para borrar los restos de mis lágrimas. –Por eso también nos escoltaron hacia el aeropuerto.-

-Pero… ¿todo está bien ahora?- presioné mis manos en las de él. –¿Por eso también vinimos a Jeju?-

-El Fiscal me hizo el favor de que la noticia no se hiciera pública con la finalidad de no afectarnos y él mismo está haciendo la investigación. Me llamaron en la mañana para decirme los resultados y tal parece que las personas que me querían lastimar fueron todas las que murieron ese día.-

-¿Mu-murieron?-

-Red Dress también tiene sus ángeles de la guarda y una de ellas me siguió y comenzó el fuego. Ninguna bala me atravesó no obstante, una que rosó mi brazo.-

-Perdón…- pasé saliva para disminuir el nudo en mi garganta. –Por bromear con el lápiz.-

-No te preocupes.- sentí su aliento chocar contra mi nuca. –Tus bromas hacían que todo fuera menos tenso.-

-¿Pero ahora estás bien?- susurré levantando sus manos para poderme girar y mirarlo a los ojos, él seguía abrazándome, yo me aventuré a tomar sus mejillas para limpiarle las lágrimas. –Nosotros estamos bien y tus papás también.-

-No estoy bien.- susurró mirándome a los ojos. –Pero lo estaré en poco tiempo, te lo prometo.- pasé saliva al ver que aún estaban cristalinos.

-Yo te ayudaré en todo lo que pueda.- susurré soltando sus mejillas para bajar mis manos a sus hombros y abrazarlo.

-Sólo cuídate mucho y cualquier cosa extraña que veas o sientas, dímela.- me separé lentamente de él hasta que nos volvimos  mirar a los ojos. -Y perdóname por no ir contigo a la recepción.-

-No, no, la recepción son tonterías de niños comparado con lo que tuviste que vivir.- sonreí haciendo que él también lo hiciera, pero aun se veía triste. –No me gusta verte mal.- susurré.

-Perdóname.- negué lentamente, subí mis manos con lentitud hacia su rostro para tomar sus mejillas, tuve que ponerme de puntillas sin incomodarlo y comencé a acercarlo a mi rostro hasta sentir su respiración sobre mis labios.

-Hyuna me dijo que ahora es mi responsabilidad cuidarte.- susurré haciendo que mi aliento chocara contra sus labios, y un poco de él, entrara a su boca porque los separó levemente. –Porque ella confía en mí.-

Lo oí hiperventilar y me abrazó más fuerte, enterrando su rostro en mi hombro. Yo también hiperventilé y terminé abrazándolo con la misma intensidad que él lo hacía. Sentí que mi corazón se estrujaba porque sus sollozos eran más fuertes que los míos y las yemas de sus dedos se clavaban en mi espalda.

Abrí los ojos porque sentí que mi celular estaba vibrando así que rápido los qué de debajo de mi almohada para apagarlo, fruncí el entrecejo un poco porque la luz me lastimó pero logré apagar la alarma.

Ñe~

Bostecé un poco pero sin hacer ruido porque Minho todavía sigue dormido, sonreí por eso. Me giré sobre mi costado y ahí estaba él, sonreí porque se siente bonito despertar y qué vuelva a estar conmigo.

Pero, deja de tus cursilerías Taemin, si quieres que Minho descanse levántate de una vez y pide el desayuno, también levanta a Rockhyun y haz que se duche así cuando Minho despierte todo estará listo y podrá seguir descansando.

Así que me levanté lentamente, quitándome sus manos y poniéndole una almohada para que la abrazara.

Vaya, las vacaciones se ponen mejor.

Desacomodé mi cabello y terminé acomodando mis orejas de mapache.

Entré a la habitación de Rockhyun, lo desperté y le pedí que se duchara, mientras lo hacía ordené el desayuno y terminé de acomodar la sala de estar, lavé los platos que quedaron de la cena de anoche y regresé a la habitación de Minho para sacar de la maleta la ropa de Rocky y la mía.

Recién le estaba dejando su ropa a Rockhyun y mi celular vibró, pero era la vibración especial para YoonGi, así que corrí sin hacer mucho ruido a la sala de estar, desde ahí Minho no tendrá que oírme.

-¿Buenos días?- susurré.

-Buenos días.- sonreí al oírlo pero me regañé de inmediato. –¿Cómo has estado?-

-Bastante bien, ñé.- susurré. –¿Y tú?-

-He estado trabajando en un caso acerca de…-

-YoonGi.- dejó de hablar. –¿Mencuto alguna vez ha estado bajo la mirada criminal?- espero que me haya entendido.

-No, de menos no en mi caso. ¿Te pasó algo? ¿O a Minho?-

-No, pero sus trabajos son peligrosos… YoonGi, ¿tú me amas?- no sé si me gustaría saber la respuesta ahora. Pero recuerda Taemin, anoche Minho durmió abrazándote y se sintió realmente bien.

-¿No te lo he demostrado?-

-Necesito respuestas objetivas.- contesté.

-Sí, sí te amo.-

-YoonGi… si me amas, ¿podrías protegerme y proteger a Minho?-

-¿Qué?-

Bloqueé mi celular porque Minho comenzó a moverse, de inmediato lo puse bajo dentro de la bolsa de mi pantalón y dejé de hacer ruiditos con la boca.

Miré por el rabillo de mi ojo como Minho fruncía el entrecejo y terminaba por abrir los ojos. Le sonreí.

-Ñé.- susurré, él se talló el rostro como yo cuando me despierto sólo que de repente estaba sentado y buscando su celular. –Apagué tu alarma.-

-¿Por qué?- me miró por encima de su hombro. –Digo, buenos días, Taemin.-

-Porque merecías despertarte tarde.- contesté sentándome en la cama. –¿Estás mejor?-

-Me duele la cara.- susurró levantándose y buscando su celular, porque fue directo hacia la mesa de noche en dónde ayer lo dejó. –¿En dónde lo dejaste?-

-Vino tu mamá y se llevó a Rockhyun, dijo que la idea era que yo también fuera pero alguien se tenía que quedar a cuidarte, ñé.-

-Bien, ¿pero en dónde está mi celular?-

-Lo tengo en el bolsillo.- contesté parándome de la cama. –Rocky ya se duchó y desayunó, también yo. Tu mamá me dijo que te dejara descansar y si era posible, no dejara que tocaras tu celular.- asentí firme porque me miró incrédulo.

-Eso no suena a algo que diría mi mamá.-

-Pero lo dijo.- asentí de nuevo, sintiendo como mi celular vibraba. –Dijo también que vendría por Rockhyun a las dos de la tarde.-

-¿Qué hora es?- apunté hacia el reloj de pared, supuse que como lo vio cuando despertó, ya sabía la hora. –Ugh… 1:13 pm.-

-Y tú queriéndote levantar a las seis de la mañana, ñé.- volví a sentarme en la cama y a tomar mi celular. –Key y Jonghyun te mandan saludos, y Key añade que quiere que te pongas la camisa de piñas que te compró.-

-¿Estás hablando con ellos?- preguntó tomando la maleta para sacar ropa, supongo que se irá a duchar. –¿Por qué me dejaste dormir tanto?-

-Porque estabas cansado.- contesté con obviedad. –No, ellos me hablaron para saber cómo estábamos. Les dije que todo iba de maravilla, les conté que estuvimos con tus abuelos y luego con tus papás, oh, y que te encontraste con una vieja amiga que te invitó a su conferencia.- todavía no me dice si ella dijo que sí o no.

-¿Y qué dijeron?- preguntó mirándome.

-Nada, sólo que usaras bloqueador solar y la camisa de piñas.-

-No empaqué la camisa de  piñas.- contestó sonriéndome. –Iré a ducharme, si quieres ver la tele o seguir haciendo lo que estabas haciendo antes de despertarme, está bien.- asentí, Minho asintió también y continuó su camino para salir de la habitación, me levanté para seguirlo.

-Estaba hablando con YoonGi.- dije haciendo que se detuviera antes de abrir la puerta del baño. –Ambos acordamos en que hablaríamos sobre nosotros cuando estuviera en Seúl de nuevo.-

-Eso es bueno.- dijo abriendo y entrando, además de que azotó la puerta. Sonreí divertido y caminé hacia esa habitación.

-“Si azotas la puerta, tendré que ponerte una cortina”.- lo imité y no pude evitar reírme.

-¿Minho…?- susurré porque lo oí entrar a l sala de estar.

-¿Qué estás viendo en la tv?- retraje mis piernas para que se sentara en el sofá.

-Uh… se llama “Cenando con Celebridades” pero estaba en mi celular.- lo apunté y antes de que él enfocara qué estoy haciendo, mi pantalla se oscureció. –Estaba hablando con Haruna.-

-¿Qué te dije Haruna?- me tendió la mano así que le puse el control remoto.

-Como este domingo no puedo acompañarla a la Iglesia, tendré que hacerlo la siguiente semana dos veces, ñé.- terminé por responderle con un emoticón, esos siempre funcionan.

-¿Vas a la Iglesia con ella?- Minho, como en casa, terminó por dejarle en el canal Judicial. –¿Desde cuándo?-

-Desde hace un año, cuando comencé a salir con ella los domingos en la noche, ñé.-

-Creí que tenían citas o algo. Haruna me gusta mucho para ti.- dejé de teclear en mi celular para mirarlo. –Es una híbrido muy linda.-

-Pero Haruna tiene novio.-

-Hoy en día todo el mundo tiene novio, ¿Azu también lo tiene?- alcé las cejas un poco impresionado porque de nuevo trae manga corta.-¿Oh? ¿Esto?- él se miró los brazos, supongo que me leyó la cara. –El otro día te sorprendió bastante verme sin saco, pensé en la clase de imagen que tienes de mí y no me gustó la conclusión. Sí soy serio, pero no siempre.-

-Ñé.- susurré volviendo a mirar en mu celular porque sentí las mejillas calientes. –No, Haruna no tiene novio pero me dijo que cuando lo tuviera, quería que fuera un no híbrido.-

-Oh.-

-Los domingos cuando salíamos era por eso, los primeros meses no tendría cuál era la pasión con ir a la Iglesia, le decía “tengo dos horas para salir, el mismo tiempo que dura una película en el cine y están dando El Hombre Maraña” y ella me respondía “Pero justo ahora, justo hoy, no quiero ir al cine, quiero estar aquí contigo.” Ñé.- me encogí de hombros y miré lo que estaban pasando en la tele. –Un día le pregunté cómo funcionaba todo eso porque no le entendía.-

-¿Y qué te dijo?- le bajo el volumen a la tv.

-Me explicó la historia del catolicismo, me explicó “personajes importantes, héroes y villanos, hecho trascendentales” así me los dijo para hacerlo más divertido. Me enseñó a orar y algunas veces leíamos la biblia, ñé.-

-Insisto, cuándo algo te suceda, por más común que tú creas que es, cuéntamelo.- me miró a los ojos hasta que asentí.

-Siempre me pregunté por qué no me hablaste de religiones, luego el papá de Haruna dijo que “actualmente, los jóvenes están renegando de su religión porque fue impuesta, a mi parecer, Minho dejó que tú eligieras cuál practicar” no sé si sea verdad, pero quiero creer que sí.- asentí firme. –Haruna me enseñó a orar, me dijo que cuando ella se sentía cansada lo hacía y en automático, se sentía relajada. Me explicó que toda la gente siempre está orando, así que cuando me unía a ellos me estaba conectando a un pensamiento positivo mundial y el flujo de energía que existe es reconfortante. Me dijo que cuando tuviera una situación de apuro, estrés, miedo o duda, orara.-

-¿Y lo has hecho?- bloqueé en definitiva mi celular para mirar a Minho.

-El día que no llegabas a casa me preocupé bastante.- relamí mis labios esperando no volver a ver a Minho tan vulnerable como ayer. –YoonGi estuvo conmigo y me dijo “¿quieres orar un poco?” no sé si él sea practicante de alguna religión, pero sabe que yo sí.-

Minho sólo me miraba expectante así que le sonreí ligeramente.

-Oramos por ti tres minutos cada hora.- cerré mis labios rápido y fruncí el entrecejo para no llorar. –Y ayer que me contaste lo que pasó realmente… pensé… “Gracias Dios por escucharme y protegerlo.”- hiperventilé porque sentí que Minho me estaba abrazando.

-Gracias.- susurró desacomodando mi cabello. –Algún día lleva a cenar a YoonGi, tengo mucho qué agradecerle.-

-Haruna me dijo que podía orar en todo momento y por todas las personas que yo quisiera. Por ejemplo, cuando tenías un nuevo caso, yo oraba porque fuera bueno, cuando tenías un juicio, oraba porque te fuera bien, cuando tenías entrevistas, oraba porque no te tocara algún loco; esa mañana cuando saliste a trabajar, también oré por ti.- hiperventilé un poco más porque me apretó contra su cuerpo.

-Gracias por hacerlo así.- susurró besándome el cabello para separarnos lentamente. –De verdad, Gracias Taem.-

-Pero no siempre que oro pido algo, a veces suelo contarle chistes a Dios, me imagino que ha de ser estresante escuchar muchas peticiones y me parece bien hacerlo reír para que tenga un buen momento, y luego regrese a trabajar.-

 -¿Estás nervioso por la Universidad?- volteé a ver a Minho, pero sin dejar de abrazarlo, él seguía moviendo mi cabello.

-Ñé.- susurré sintiendo que mi aliento chocaba contra su piel, porque mi rostro está muy cerca de su pecho. –Sólo me da miedo no llevarme bien con mis nuevos compañeros.- apreté mis brazos en su torso.

-Da más miedo los compañeros nuevos que la U en sí, ¿cierto?- dejó de jugar con mi cabello para tocar mis orejas de mapache, ese tacto hizo que todo mi cuerpo temblara ligeramente, sin que él lo percibiera.

-Sí.- susurré cerrando los ojos para seguir disfrutando de esto.

De los dos acostados y abrazados en la cama.

-Lo sé.- sonreí porque el silencio aquí es tan dulce, que los latidos de su corazón se escuchan perfectamente bien. –Te daré un par de consejos para que el primer día sea cosa fácil.-

-Ñé.- asentí.

-Aunque lo único que se me ocurre es la crema de bebé. Úsala el primer día antes de siquiera salir de tu habitación.- ¿crema de bebé?

-¿Es enserio?- Jonghyun me dijo que lo primero que hablara con mis nuevos compañeros tenía que ser algo neutro como el clima. Key me dijo que lo primero era establecer “rapport” y Kyuhyun me dijo “lleva dulces en la bolsa, por si acaso” y Minho, el gran Minho me dice ¿“usa crema de bebé”?

-La crema de bebé, ¿a qué huele?-

-A bebé.- contesté con obviedad.

-¿Y los bebé qué te recuerdan?-

-¿A más bebés?-

-Y los bebés, ¿qué te provocan?- sonreí al recordar a esos bebés de internet, tan tiernos y adorables, pequeñitos y llenos de risas.

-Cosas bonitas.- susurré.

-Todas las personas cuando olemos crema de bebé, instantáneamente sonreímos porque nos recuerdan cosas bonitas, esto hace que todos bajemos la guardia y seamos más sinceros con nuestras emociones, porque recordamos a cuando éramos bebés, en teoría.-

-Por supuesto, porque comenzamos a ser conscientes de los cuatro años en adelante, ñé.-

-Así es, por lo que el aroma a bebé siempre nos suavizará. ¿Has notado que yo tengo artículos de bebé para mi uso personal?- miré hacia su maleta en donde se asomaban las toallita de bebé.

-Sí, usas mucho las toallas y el aceite de bebé.-

-Pues es por eso mismo.- contestó dejando de tocar mi cabello para bajar su mano a mi espalda y seguir acariciándome. –Porque la gente que me rodea se suaviza. Es un truco que uso cuando tengo que litigar, así el abogado de la parte contraria se suaviza. O cuando tengo que cobrar o voy a hacer un trabajo con alguna persona “delicada”. Te aseguro que si usas crema de bebé para el primer día, tus compañeros no te verán como una amenaza e incluso, las chicas que tengan más desarrollado su lado materno te seguirán.-

-Pero no quiero novia, ñé.-

-Pero quieres sobrevivir al temido primer día.-

-Eso sí.- comencé a mover mi mano sobre su pecho, casi tan lento como él en mi espalda. Espero que esto no lo asuste y terminé levantándose como otras veces. –Sungmin me dijo que me sentara en medio, ni frente al profesor, ni tocando la pared de atrás. En medio es un buen equilibrio para tomar apuntes y ser sociable.- repetí.

-Yo me sentaba adelante.- por supuesto, por algo eres el mejor. –Porque estaba más cerca de la puerta.- ñé~

-También me dijo que para el desayuno, comprara algo ligero para no salir de clases al sanitario. Y de ser posible, que comenzara la caza por mi nuevo mejor amigo luego del primer día, ya que evalúe a todos y todas.- pero no sé si me gustaría un “nuevo mejor amigo” creo que con los gemelos podría sobrevivir toda la vida.

-Cuando tengas amigos, llévalos a casa.-

-¿Por qué tu afán patológico con que lleve gente a casa?- me levanté un poco para mirarlo, para ver como sonreía y ponía su mano en mi cabello para volverme a acostar en su pecho.

-Nada interesante.- susurró.

-¿Nada?- pregunté, eso siempre termina funcionando.

-Nada.- respondió. –Es una manera fácil y rápida de saber qué clase de personas integran tu círculo social.-

-Oh~ ¿les vas a aplicar un criminodiagnóstico relámpago?-

-No~-

-Ñé.- sonreí acurrucándome contra su pecho. –Yo te llevaré carne fresca a casa.- sonreí pero dejé de hacerlo al oír que el celular de Minho estaba vibrando, y como está sobre la mesa de cristal el ruido es más intenso. –Te lo traeré.- para que no se levanté, lo hice yo primero.

Me estiré un poco mientras caminaba hacia el teléfono, finalmente lo quité del tomacorrientes, alcé las cejas al ver el contacto.

-Dice “Fotógrafa C”.- le mostré su celular y casi corrí para entregárselo. ¿Será un forense?

-Gracias.- asentí efusivamente mientras me sentaba a su lado, en la cama. –¿Cómo estás? Mamá?-

-¿Mamá?- susurré extrañado.

-No me gustaría pero está bien.- volteé  ver a Minho y como estaba atento hacia su conversación porque miraba hacia el suelo. –Mañana yo iré por él… No, no, no… está bien. Ustedes lo traen pero temprano… ¿al medio día? ¿Está loca? Digo, no… ¡No! Perdón.- sonreí divertido para levantarme de la cama. Mientras él charla con su mamá iré a preparar algo para tomar, tengo un poco de hambre y no me gustaría que él escuchara mi estómago.

Saqué mi celular para ver qué estaba pasando, si alguien más me ha mandado un mensaje o si… oh, vaya. YoungMin me habló, ¡Kana tambien! Baro y YoonGi. Por orden de importancia. Sonreí mientras abría el mensaje de YoungMin.

“Me traes una conchita o un puñado de arena. Compré un libro que te podría interesar, luego te lo prestaré para que lo leas. Mi hermano te manda saludos.”

-Mi mamá dice que Rockhyun va a pasar el resto del día con ellos, incluso que va a dormir con ellos y que mañana muy temprano, a las dos de la tarde, lo traerán de vuelta.- volteé por encima de mi hombro para ver a Minho. –Oh, ¿estás ocupado?-

-Ñé.- negué  bajando mi celular. –Estaba revisando mis mensajes, YoungMin quiere que le lleve arena.-

-Podemos comprarle algo a tus amigos también.- susurró caminando hacia mí. –¿Qué te parece si te cambias de ropa y salimos a comer?-

-¿Salir a comer?- pregunté incrédulo. –Sí, me encantaría.- sonreí.

-Bien, me cambiaré de ropa también para salir.- asentí efusivamente, bloqueé mi celular para caminar detrás de Minho. –Oh espera.- se detuvo antes de entrar a la habitación.

-¿Ñé?- ¿cambió de parecer?

-¿Quieres que use traje?- alcé una ceja.

Si usa traje se ve más guapo que cuando no los trae. Pero tampoco empaqué ropa con ese estilo. Pero tengo una idea.

-Sí.- susurré. –Creo que también traje ropa formal.-

-Con un pantalón negro, los botines que usaste en el aeropuerto y yo te presto una camisa y un saco. Así los dos iremos del mismo tema. ¿Estás de acuerdo?- ¡por supuesto!

-¿Quieres que me peine también?- dejé de cepillar mi cabello para mirar a Minho, se estaba terminando de poner la corbata.

-No.- dije volviendo a cepillarme. –Me peinaré yo, tú no levantes tu cabello.- me gusta más cuando lo tiene hacia abajo. –Pero hazte el librito.-

-¿El qué?- Minho dejó incluso de arreglar su corbata para mirarme.

-¿Cuándo partes el cabello de tu frente en dos? ¿Cómo los libros abiertos?- sólo me miraba incrédulo. –¿Ñé?- eso siempre funciona.

-Bien.- sonreí. –Reserve en Lé Suacab. Ellos mandarán un auto para recogernos y llevarnos al restaurante en media hora, así que date prisa.-

-Pero no estás enojado.-

-No.- contestó tomando el saco y poniéndoselo. –Pero date prisa.-

-Pero no estás enojado.- repetí. Minho terminó de ponérselo para caminar hacia mí, me quitó el cepillo con el que intentaba peinarme como lo hizo Key hace días para deshacerse todo mi esfuerzo y dejar que me cubriera la frente y, hacerme el peinado que le pedí se hiciera él. –A ti se te ve mejor que a mí.-

-Pero no estás enojado.-

-No.- repitió. –Sólo que no deja de sorprenderme cuando dices algo como “hipotéticamente hablando…” “el Estado dice que…” “Es anticonstitucional cuando…” y luego intentas salvar todo diciendo “ñé”. No sé cómo me siento cuando lo haces porque es recordarme que estás creciendo y desarrollándote de manera saludable.- asentí lentamente. –Y no, no estoy enojado.-

-¿Qué auto dijeron que iban a mandar?- pregunté abrazándome, no esperaba que el clima estuviera tan frio.

-Ese.- Minho apuntó a uno con el nombre del lugar que se estacionó frente al hotel. –Vamos.- tendió su mano hacia mí, pero aquí no la tomé porque aun estábamos dentro del hotel y no me gustaría que comenzaran a hablar así de nosotros. Pensé que por ese desprecio Minho no me abriría la puerta del auto, pero sí lo hizo.

-Perdón pero el del lobby…-

-Sí, me di cuenta.- contestó cerrando la puerta. –Gracias, ¿podemos ir al restaurante ahora? Muero de hambre.-

-Sí señor.- contestó el chofer, alcé una ceja porque Minho sonrió disimuladamente mientras acomodaba su saco. –Me di cuenta de lo que estaba pensando el del lobby y le dije “cena de graduación”.-

-Cuando fuimos a Zekluri, además de retirar lo que le había comprado a YoonGi también te compré algo a ti. Pero eso te lo daré después.- sonreí para dejar de verlo y mirar por la ventana.

-¿Qué les ofrecemos para beber?- volteé a ver a Minho, porque él ordenó la comida y supongo que también las bebidas.

-Traiga una botella de su mejor champagne.- alcé las cejas pero no dejé que Minho me viera así. Sentí que mi celular volvió a vibrar así que no le puse atención a si pidió más cosas para beber o sólo eso, en cambio, vi que mi estado en SplashFace ya tenía comentarios.

-¿Con quién hablas?-

-¿Eh?- susurré bloqueándolo antes de leerlos. –Con nadie realmente, sólo quería parecer interesante.-

-Bien, entonces te estaba diciendo qué hacer en la escuela para que tu primer día sea más tranquilo y cómodo.- asentí guardando mi celular, es más hasta lo apagué. –Seguro Key o Kyuhyun ya te dijeron sobre el rapport y te lo repetiré porque es importante que lo comprendas.-

-¿Rapport era hacer sentir a la otra personas cómoda?- pregunté mientras tomaba uno de los tenedores para comenzar a comer.

-No es la definición exacta, pero tienes la idea.- Minho también tomó los cubiertos. –De la manera más simple, se trata de copiar movimientos “imperceptibles” del otro. Como si yo cruzo mis brazos ¿tú…?-

-Cruzaría las piernas, ñé.- contesté. –Aunque también puedo nivelar mi respiración al mismo ritmo que la otra persona.- Minho dejó de comer para mirarme, incluso, se quedó a medio filete en la boca de lo sorprendido que estaba. –¿Ñé?-

-Lo de nivelar la respiración es muy complicado, sólo algunos lo pueden hacer.- ¡oh! –¿Tú lo has hecho?-

-¿Por qué crees que he tenido tantos amigos? Lo de rapport ya es cosa fácil para mí.- asentí orgulloso. –También he leído tus libros de lenguaje corporal, así que es más fácil todavía.-

-¿Entonces de qué quieres hablar?- casi dejó caer los utensilios en la mesa, ahora que lo veo parece que le desilusionó que yo supiera eso.

-No sé, de tu vida.- contesté tomando sus utensilios para cortarle un trozo del filete y tendérselo hasta que lo tomó. –Vivimos juntos pero no nos conocemos.-

-Si lo dices de esa manera…-

-Aceptémoslo, Minho. No tenías idea de todo lo que te he contado, y yo no sabía nada acerca de ti hasta ese día en el que contaste sobre Hyuna, ñé, así que para mí, estaría bien conocernos ahora.-

-Bien… ¿qué quieres saber? Porque si yo te lo cuento puede que no sea algo en lo que estés interesado.- susurró retomando su comida. –¿Has jugado a las doce preguntas?-

-Ñé.- negué lentamente. –¿Cómo es eso?-

-Yo te hago una pregunta, luego tú a mí y así hasta que sean las doce.- ¿por qué no lo supuse antes? –¿Quieres intentarlo?-

-Sí.- asentí. –¿Me toca? Porque ya preguntaste algo.- Minho dejó caer un poco su mandoble, pero sonrió de inmediato.

-Ahora me toca porque has preguntado algo.- alcé las cejas, recapitulé, y terminé inflando mis mejillas. –¿Película favorita?-

-¿De verdad quieres saber eso?-

-Una película favorita me habla de cómo te gustaría que fuera tu vida o de un mundo para escapar.- alcé las cejas un poco sorprendido. –Pero has vuelto a gastar una pregunta.-

-¿Qué?- pregunté. –No, no. Eso es trampa. No he podido hacerte una pregunta importante o interesante.-

-Je, je, está bien, comencemos de nuevo, pregunta tú.- sonreí emocionado.

Incluso dejé todo lo que estaba haciendo para mirarlo, sonreí porque estaba muy tranquilo, continuaba comiendo y mirándome.

-¿Qué te dijo la Doctora?- sonreí una vez más.

-Tienes que olvidar eso.- dejé de sonreír  y él de cortar su filete. –Porque no importa qué haya dicho la Doctora, si yo digo no, es no y punto final.- cerré mis labios e incluso pasé saliva, de repente me siento muy incómodo. –Lo has visto los últimos días, todos te dijeron que sí pero, realmente si yo no quiero, es no y de ese “no” no me van a sacar.-

-¿Por qué no terminas de mutilarme en privado?- retiré mi plato porque ya no tengo ni apetito. –¿Cuál es el placer de hacerlo en público?-

-La Doctora dijo que no hay legislación humana que impida nuestro matrimonio.- alcé las cejas sorprendido por eso y porque me estaba tendiendo su tenedor con filete. –“Legalmente, no hay nada que impida que se desarrolle una relación luego de finalizar los vínculos, moralmente, se tendría que evaluar si él te veía como a un padre o a un tutor. La diferencia entre ambos es que el tutor no involucra emociones ni sentimientos, sólo brindas Alimentos” y luego lanzó su arma letal “¿Él te llama papá?” Tú me llamas Minho, lo que me convierte en automático en tutor, lo que retira el estigma de “padre e hijo”.- ¡OH!

-¡OOOOH!-

-Ni tú ni Rockhyun me llaman “papá” de menos no en mi presencia, lo que los convierte en protegidos, no hijos. Ella además me dijo “aplícale un criminodiagnóstico para confirmar conductas, los híbridos tiene forma de demostrar amor diferentes a los no híbridos” y cuando el estudio esté hecho, no habrá nada, ni poder humano, que diga que no.- tomé su tenedor porque aun lo estaba tendiendo. –Eso dijo la Doctora.-

-Entonces dijo que sí.- susurré sonriendo.

-Dijo que sí.- tuve que morder mis labios para no soltarme a gritar “Ñééééé~~~ ¡ella dijo que sí!~” –Pero.- ahh~ -Lo importante ahora son los duelos de cada quién, tú tienes que arreglar todo con YoonGi y yo con lo que te conté hace poco. Si en este momento nos aventuramos y comenzamos a salir, conoceremos una fase del otro que nos separará. Lo mejor es seguir avanzando y cuando estemos listos, formalizar.-

-¿Es en serio?- susurré mirándolo, pero Minho no parecía estar bromeando.

-Sí.- ¡Ñééééééé~! –A menos de que tú no quieras.-

-¡¿Cómo no voy a querer?! ¡Llevo años! ¡AÑOS! Esperando esto…. Dios, creo que voy a llorar.- hiperventilé y decidí cubrir mi rostro con ambas manos para que no me vea así. Mordí mi labio inferior para evitar hacer más ruido pero no podía controlar por completo mis lágrimas ni los hipidos que esto me causaba.

-Tranquilo.- negué efusivamente sin descubrirme el rostro porque no puedo estar “tranquilo” luego de escuchar lo que llevo años esperando. Oí el movimiento de la silla de Minho, no quiero que se vaya y me deje aquí solo y llorando, así que tomé aire, con una respiración profunda para poder controlarme. –¿Estás emocionado?- presioné los ojos e incluso me encorvé al oírlo a mi lado. –Anda, ponte de pie.-

-Ñé.- negué aun sin descubrirme el rostro, seguro todo mi maquillaje ya se arruinó.

-Tranquilo.- sentí su mano en mi hombro y cómo me daba apoyo, pasé saliva nervioso y decidí pararme, aun sin descubrir por completo mi cara. –Yo también estoy emocionado.- sentí sus brazos rodear mis hombros y finalmente mi rostro estaba a la altura de su clavícula.

-Sé que no debería decirlo…- sorbí de mi nariz para tranquilizarme y descubrir mi rostro un poco. –Gracias Minho, de verdad, gracias por decirme eso.- lo abracé, lo abracé tan fuerte que presionaba mis yemas en su espalda para que sintiera el ritmo acelerado de mi corazón.

-Todavía faltan muchas cosas Taemin, odio mencionarlo ahora pero tienes un asunto pendiente con YoonGi. Si quieres continuar con él por mí está bien. Tampoco estoy en el mejor momento de mi vida para abrirme ante ti.- pero eso es lo de menos. –Luego pensaré en Rockhyun y cómo pueda resultar todo esto con él, pero ahora, límpiate el rostro y reanudemos la cena.- me separé un poco de él, Minho puso sus manos en mis mejillas para limpiarlas.

-Ñé.- asentí dejando que lo hiciera. –Esto fue el mejor regalo de graduación que pudiste darme.-

-Un sabio de la India una vez dictó cuatro leyes espirituales y una de ellas dice así: La persona que llega, es la persona correcta. Creo que haber venido a Jeju y encontrarme con ella era algo que estaba destinado a ocurrirme.- me ayudó a volver a sentarme e incluso acomodó mi silla. –Y no sabes lo inmensamente pleno que me hizo sentir recordar esas leyes.-

-¿Qué dicen las otras leyes?- pregunté para tranquilizarme y no pensar más en el otro tema que me pone emocional.

-Investígalas.-

-Ñe~ así no se puede.-

-Caballeros, su champagne.- me sobresalté un poco que terminé poniendo mi mano en mi pecho.

-Gracias.- bajé la mirada para mirarme en la pantalla de mi celular y acomodar lo que pudiera estar corrido o manchado de mi maquillaje. –Descórchela por favor.- bueno, después de todo el que me recomendó Krystal no es tan malo y sí resiste al agua. –Gracias.-

Suspiré aun con los ojos cerrados para terminar de tranquilizarme, sonreí mientras exhalaba todo lo que mis pulmones resistieron.

-¿Taemin?- abrí los ojos y alcé las cejas porque lo primero que vi fue a Minho tendiéndome una copa. –Brindemos.-

-¿Puedo tomar alcohol?- tomé mi copa que por el color del contenido, debería de serlo mismo.

-Por supuesto, estás conmigo.- sonreí y eleve mi copa.

-Por tu graduación.- me sonrió, eso hizo que mi corazón latiera más rápido.

-Gracias.- tronamos las copas y sonreí por eso. –A KwangMin, a ciencia cierta, le dará mucha envidia todo esto.- después de todo él sólo fue a acampar con su papá. –Por cierto.- miré a Minho que estaba dejando su copa a un lado del plato con aun comida. –Creo que te debo algunas explicaciones sobre él y yo.-

-Por supuesto, pero no me lo digas aquí.- alcé las cejas sorprendido pero Minho seguía sonriendo. –Ahora solo estamos tú y yo, por favor, olvídate de otras personas y disfruta este momento que estoy compartiendo contigo.- cerré la boca e incluso mordí mis labios.

“Demostrarle que estoy a su altura” por supuesto, no cometas más errores, Taemin.

-Perdón si soné muy autoritario…-

-No, no, no, tienes razón. Aquí sólo estamos tú y yo.- dije. –Perdón por traerlo a cenar, ñé, je, je.-

-¿Y… ahora?- pregunté un poco incómodo afuera del restaurante.

Como Minho no tiene auto aquí no tenemos cómo regresar al hotel.

-Espera un momento.- asentí abrazándome porque está haciendo un poco de frio. –Toma, te servirá mientras esperas.- sentí que mis mejillas se pusieron un poco rojas pero recibí el saco de Minho. Sonreí porque su aroma es muy delicioso. –Vamos a tomar un taxi para que vayamos hacia el hotel.-

-Está bien.- susurré poniéndome su saco, estaba cálido pero igual me da un poco la brisa. –¿Podemos tomar leche antes de dormir?-

-Sí, sí todavía tienes hambre podemos tomar leche antes de dormir.- Minho se acercó a mí, se veía un poco decepcionado y no es para menos porque no consiguió trasporte. –Ven, vamos caminando a ver qué pasa.-

-¿Sabes? Esta noche no podría ser mejor, ñé.-tomé su mano para comenzar a caminar. –Esto fue mil veces mejor que la recepción, así que ya estás perdonado, ñé.-

-Es bueno oír eso.-susurró apretando mi mano en la suya. –¿Tienes frio todavía?-

-No mucho.- susurré caminado a su lado, intentando pegarme un poco más a él. –¿Quieres que te devuelva tu saco?-

-No, conozco una tienda de ropa que aún no cierra, si quieres podemos ir a comprar una chaqueta para que no estés temblando.- me sonrió por eso último que terminé con las mejillas rojas y un poco de pena.

-Mejor caminemos hacia el hotel, después de tanto comer me han dado sueño. Además, por mucho que no quiera decirlo, tienes que llamar a tus padres para preguntarles por Rockhyun.-

-Me hablaron antes de la cena, dijeron que cenó yogurt y frutas y que estaba a punto de quedarse dormido.- intenté no bostezar pero terminé temblando un poco más. –Caminemos más rápido para llegar pronto.-

-Minho.- susurré tallándome los ojos con mi mano libre. –Si tú y yo vamos a estar juntos, ¿qué les dirás a tus padres? Es decir, a tu papá no le gustó que yo estuviera desde el inicio contigo, no sé qué cosas pasarían si les decimos esto.-

-Una cosa a la vez, Taemin.- me miró y sonrió, aunque me di cuenta de que él tampoco tiene idea de qué hacer con eso. –No nos saturemos.-

-Ñé.- asentí.

No conseguimos ni un taxi, y gracias al GPS de su celular pudimos dar hacia la tienda de ropa que ya estaba cerrada, pero salvamos la caminata con un pequeño parque cercano, según el GPS tomando ese parque estaría más cerca del hotel, así que ni Minho ni yo nos opusimos a caminar por ahí.

Los parques de Jeju son más verdes que los de Seúl, si es posible. O será porque el toque marino los hace ver así. Pero se sentían diferentes, incluso los árboles y el apto lucía diferente aquí. Mino me estaba contando sobre su vida, de su infancia, la adolescencia e incluso me dijo de su elección de carrera.

Supe que Criminología no fue lo primero que pensó, per aunque fue una segunda opción le satisface mucho más de lo que sería la otra. También me contó de cómo era su relación de amistad con ChangMin y Kyuhyun, me dijo que en algún momento ellos dos intentaron estar juntos pero fue complicado o sigue siéndolo porque aparentemente la chica Red Dress fue novia de ChangMin, pero como murió cuando aún eran novios, siente que le debe fidelidad.

Eso se me hizo un poco tierno y tonto. Pero estoy seguro que m tío Max sabe por qué hace las cosas. Es decir, todo Red Dress es bastante sabio como para resolver sus problemas desde el más pequeño hasta el más complejo.

En momento miraba a Minho para fingir que le ponía atención o comprendía lo que me decía, pero sólo miraba su perfil, cómo se cerraban sus ojos al parpadear y como sus comisuras se alzaban cuando sonreía.

Si así se siente estar con él, lo que viví con Amo Jonghyun se queda cortísimo.

-Y por eso es que las vacas no vuelan.-

-¿Ñé?- susurré parpadeando efusivamente porque ya estábamos frente al hotel. –¿Las vacas?-

-Noté que te había perdido en la conversación y comencé hablar sin sentido sólo para comprobar mi punto.-

-¡Pero sí te estaba escuchando!- solté su mano para que el del lobby no nos mire raro. –Sólo que me distrae un poco, Jeju se ve diferente andando por las calles a ir en auto.-

-Sí, Jeju.- me miró tendiéndome la mano de nuevo, negué un poco para apuntarle al del lobby disimuladamente. –Tomaremos el elevador, ¿estás de acuerdo?-

-Ñé.- susurré tendiéndole la mano para entrelazar nuestros dedos.

-Así no te dará mucho miedo.- ¡Oh! ¿Lo dijo para aparentar otra cosa? –Andando.- asentí y caminé detrás de él hasta estar frente al elevador. –Vamos a pedir leche a la habitación para que duermas bien.- temblé cuando las puertas se abrieron y tras pasar saliva entré.

-Está bien.- temblé cuando el elevador comenzó a subir.

-Ya deberías de haberte acostumbrado a sentir el vértigo.-

-No es eso.- susurré mirando nuestros reflejo en los cristales de la pared. –Cuando iba de compras con Krystal me decía “si se queda atorado, no te asustes y déjame comerte” ya sabes, porque en las películas cuando se atoran lo hacen por días y no quería morir de hambre o morir simplemente.-

-¿Tú crees que te voy a comer?- sentí un escalofrió delicioso recorrer mi cuerpo, desde el centro de mi vientre hasta la punta de mis orejas de mapache, más por la sonrisa que me había mostrado. –Si nos atoramos presionaría el botón de emergencia, si o funciona, abriría la escotilla para usar las escaleras y como última opción, dormiría para tranquilizarme hasta que llegue el equipo de rescate, ¿pero comernos? Nunca.- ñé~

-¿Estás dormido?- le bajé el volumen a la tv y volví a bloquear mi celular antes de que Minho llegara. –Trajeron leche.- retraje mis piernas para que Minho entrara a la sala, pero alcé las cejas al ver lo que traía en las manos.

-Eso no es leche, ñé.- susurré apuntando a la botella de vino tinto en su derecha y las copas de cristal en su izquierda.

-Una de mis fantasías ha sido beber contigo y ahora que no está Rockhyun ni el vividor de Kyuhyun, me parece correcto.- quité el cojín de aun lado para que Minho se sentara. –Además, mañana no trabajo y estará bien si tengo resaca.-

-Así, ni cómo alegarte.- susurré mirando como abría la botella.

-¿Ya habías probado este tipo de licor?- noté el color del líquido cuando comenzó a verterlo en la copa, eso, y el aroma que desprendía.

-No.- susurré tomando la copa que me estaba dando. –Se te ven los brazos.- ya no trae ni la camisa de botones ni el saco, sino una playera blanca de manga corta y muy, muy normal.

-Pensé que así estaría más cómodo.- se recargó en el sofá dejado la botella en la mea de centro. –El día de tu graduación todo dijeron cosas bonitas para ti y lo que dije fue muy simple y generalizado, si recompensé la recepción también tengo que hacerlo de ese momento.-

-Está bien lo que hayas dicho, yo acepté tus palabras, ñé.- vi mi reflejo en la copa y sonreí. –No importó si fue un discurso pequeño, sólo dime que estás orgulloso de mí y eso me bastará.-

-Estoy orgulloso de ti.- sonreí y lo miré. –Por muchas cosas, no sólo porque hayas terminado el bachillerato.-

-Co eso basta.- susurré suspirando. –No me quiero emocionar de nuevo.- tallé mi ojo derecho porque sentía que ella estaba a punto de segregar lágrimas.

-La primera vez que me enorgullecí de ti fue cuando dijiste “la vaca a quién le pertenece” e hiciste esa pequeña huelga. No sé, en ese momento sentí que había hecho algo bien por alguien y me propuse estar contigo hasta el final. Apoyarte y ayudarte en todo lo que pueda para que siguieras delante. Yo sé que he cometido errores como haber estado con Chany y si hubo otro que no percibí, te pido perdón.- me miró y sonrió por dos segundos, dejó de hacerlo porque yo volteé hacia el televisor y mordí mi labio del lado de mi rostro que no ve.

-Cuando la maestra Chany iba a casa, no sabía cómo decirle. “¿Maestra, me puede pasar la sal?” siempre fue incómodo pero yo era una cosa que no tenía derecho a quejarse con la persona que… ya sabes, me salvó.- presioné los ojos sintiendo como mis lágrimas se resbalaban por mis mejillas, de inmediato sentí su mano intentando limpiarlas. –Por eso al inicio no dije nada.-

-Estuve con Chany de esa manera para que se desarrollara su respectivo complejo contigo y tu sexualidad fuera saludable, luego investigué un poco, hice ensayos por aquí, por allá, y terminé aceptando que ustedes los híbridos tienen maneras de expresar amor diferente a los no híbridos.-

-Cómo, según tus estudios, ¿expresamos amor los híbridos?- miré a Minho, estaba bebiendo de su copa por inercia, yo también lo hice.

-Hablar de eso es sacar a flote temas aparentemente olvidados.- susurró. –Porque tiene que ver con Lee Jonghyun.-

-Te quiero hablar sobre eso.- susurré sintiendo que mis piernas temblaban. –El día que fuimos con tus abuelos y me quedé solo, pensé un poco en lo que estaba viviendo. Yo, un híbrido, ¿estoy realmente en Jeju? ¿En medio de una familia que me quiere y me valora? Yo que… ¿que mi mundo se vio reducido a dormir bajo un árbol y ver las estrellas por seis noches?- Minho se acercó a mí por encima del sofá para volver a limpiar mis lágrimas. –No sé las leyes de la vida, pero di son ciertas, tú eras la persona correcta en el momento correcto… y si verdaderamente existe un dios, creo firmemente que ese día te mandó para mí.- sorbí mi nariz cuando Minho me abrazó. –Cuando me hiciste entrar a tu auto me prometí ser mejor de lo que era con Amo Jonghyun porque no… no quería volver a estar ahí.-

Minho no me dijo nada, sólo seguía abrazándome.

-Prometí que cumpliría todas tus órdenes y no me quejaría. Prometí cooperar con todos tus planes para mí y… no ser una carga.- sorbí de mi nariz y Minho me apretó más. –Me he preguntado muchas veces, ¿qué hubiera sido de mí si tú no te detenías? Probablemente hubiera muerto ahí y nadie se daría cuenta, nadie me extrañaría… pero… te conocí, y conocí a personas increíbles. El tío Max, Key, Kyuhyun, Joy y todos fueron muy amables conmigo. Todos me mostraron una versión diferente de lo que era vida, y amé mi vida.-

-Todos nosotros estamos para ayudarte, Taemin.- se separó lento de mí hasta que tomó mi rostro entre sus manos y continuó secando mis lágrimas. –Si yo no te sirvo para alguna cosa, está Max, si necesitas a una mujer, está Joy, si necesitas a alguien fuerte, está Jonghyun o si quieres jugar videojuegos está Kyuhyun. Lo sabes, ¿cierto?- asentí lento porque aún tenía su mano en mi mejilla.

-Cuando estaba con Kyuhyun y Sungmin y regresamos a casa, Amo Jonghyun estaba contigo y yo reaccioné como antes, corrí hacia él y le besé las mejillas porque estaba feliz de volver a verlo, pero no me di cuenta de que te estaba lastimando. Perdón.- presioné los ojos para hacer que las lágrimas se salieran de mis ojos y poder verlo mejor. –Esa noche soñé con mi vida de antes y cómo era ahora. Me di cuenta muy tarde de que no debí de reaccionar así porque esa noche lloraste…. Lloraste por mi culpa.-

Minho dejó su copa en el suelo para estar más cerca de mí.

-Lloré de impotencia y rabia porque yo iba a ayudarlo. Porque estaba en mi casa, porque permití que la persona que te abandonó estuviera frente a mí e incluso estreché su mano. Tenía tiempo que mis emociones no me jugaban mal y terminé… liberando los sentimientos de manera repentina.-

-Cuando vivía con Amo Jonghyun tenía todo, todo lo que un niño pudiera querer. Él me compraba juguetes, pelotas, muñecos… pero yo sólo podía comer de las latas verdes o moradas y beber agua. Me duchaba con agua fría y a veces no era en el cuarto de baño. Dormía con él si estaba contento sino en el sofá. Casi nunca usaba zapatos ni pantalón por mi colita, mi ropa sólo eran suéter de él… a veces cuando dormíamos juntos me tocaba y a mí me gustaba. También nos besábamos. Nunca tuvimos sexo porque yo era muy pequeño y cuando lo intentó me hizo sangrar, pero sí jugábamos mucho, casi diario en la mañana y en la noche…. Con él probé el semen pero como tenía un sabor feo lo combinaba con crema batida.- me asusté y retraje todo mi cuerpo porque Minho suspiró fuerte e incluso se levantó del sofá. –No sé qué hice mal o cuál orden no cumplí para que me dijera “vamos a dar un paseo” y no regresara.-

Minho seguía sin mirarme, respirando profundo y frotándose la sien.

-Cuando estaba en tu casa, los primeros días yo estaba esperando eso y una noche intenté besarte pero me regañaste. Pensé en que otra vez había hecho algo mal y me asusté. De repente todas las formas en las que podría demostrarte que te quería y que siempre estaría para ti no eran correctas. No supe qué hacer.- pasé saliva asustado cuando Minho se giró para mirarme. –Me quitaste una parte de lo que yo era y no supe qué hacer para sentirme completo, me negabas algo que quería, algo que necesitaba. Me enojaba contigo sin razón aparente, me estresaba y te gritaba por eso mismo, luego supe cómo manejar el internet.-

-¿Qué hacías en internet?- su tono de voz era más tranquilo y ya no respiraba tan profundo, eso me tranquilizó un poco.

-Con los gemelos encontramos páginas en donde la gente contaba sus experiencias sexuales, YoungMin decía que no era correcto leer eso, pero eso me satisfacía en algún porcentaje. KwangMin leía lo mismo que yo, cuando me pregunta qué haces y yo te decía “estoy leyendo” era eso.-

-No me voy a enojar, porque los criminólogos no se enojan.- casi canturreó y terminó sonriendo.

-Las lecturas se convirtieron en imágenes y éstas a videos, luego todo se materializó. KwangMin y yo comenzamos a experimentar, nos tocábamos y reíamos, era divertido.- me encogió de hombros un poco avergonzado. –Nunca dejé que KwangMin me penetrara… pero yo a él sí.- susurré.

-Los criminólogos no se enojan~-

-Con YoonGi sólo eran toqueteos inocentes, sólo tuvimos fajes y algunas veces él me hacía sexo oral, otras… yo.-

-¡Los criminólogos no se enojan, maldición!-

Pasé saliva nervioso.

-Yo… yo también involucré a Rocky.-

-¡¿Cómo demonios no me voy a enojar!?- me encogí de hombros. –Puedo pasar lo de KwangMin porque eres joven y estúpido, puedo aceptar lo de YoonGi porque es tu pareja sentimental ¿pero ¡Rockhyun?!-

-¡Puedo explicártelo!-

-¡Tú sabias lo que arrojaron los peritajes de la ropa de Rockhyun! ¡Te expliqué que tenía manías o tendencias sexuales reprimidas y que era fundamental enseñarle que estaban mal! ¡Confíe en ti! te pedí que fueras un ejemplo a seguir para él, que fueras a quien él admirara y dijera “yo quiero ser cómo Taemin cuando sea grande” ¡¿pero en lugar de eso te aprovechas de sus tendencias y fetiches y terminas abusando de él!?-

-¡No es violación si ambas partes están de acuerdo!-

-¿Qué?- Minho caminó hacia mí y por inercia retrocedí. –¡Es violación por el maldito hecho de que es menor de edad! ¡Y tú también!-

-¡Ya tengo dieciocho!-

-¡Que la madurez no se mide por edad sino por responsabilidades!- pasé saliva porque se acercó mucho a mí, incluso escuchaba el latido de su corazón. –Los criminólogos no se enojan.- susurró, abrí los ojos lentamente para verlo sonreír y levantar el cojín que se cayó a mi derecha. –Rockhyun y tú tienen tendencias maniacosexuales y aprendieron a demostrar amor de una manera diferente a los no híbridos, eso fue lo que pasó.-

-¿Pero no estás enojado?- sorbí mi nariz para mirarlo.

Suspiró más profundo con los ojos cerrados e incluso poniendo su mano en el pecho.

-Ahora no.- susurró. –Ahora todo está bien.-

-Si todo está bien, ¿puedes darme un abrazo y decírmelo al oído?- relamí mis labios porque puede de que no lo haga, que sólo levante las copas y se vaya a dormir. Cerré los ojos para no sentir la presión o ansiedad de lo que pueda pasar,  no oía movimiento, eso hizo que presionara mis manos. –¡Ñé!- sentí que me jalaba hasta que su pecho toco el mío y sus brazos rodeaban mis hombros.

-Ahora todo está bien.- susurró cerca de mi oído. Sonreí y correspondí su abrazo. –Pero tú no eres quien condiciona.- abrí mis ojos por completo al oír su cambio de tono de voz.

-Pero no estás enojado.-

-Los criminólogos…-

-Los criminólogos no se enojan, lo sé.- suspiré un poco más aliviado, soltándolo para finalizar nuestro abrazo.

-Es saludable enojarse si sabes qué te causa conflicto y cómo solucionarlo. Me enojé, encontré la causa y lo solucioné. Ahora vamos a dormir que te dije que sólo una emoción por día.-

-Sí.- susurré.

-Ñé~- sentí que los dedos de Amo Minho comenzaban a pellizcar mis pezones, relamí mis labios ansioso intentando no emitir más sonidos.

Sentía su respiración en mi oído y su miembro contra mi espalda baja, sólo que él no se movía, era yo quien tenía que mover las caderas para incrementar el roce.

Pasé saliva temblando porque presionó sus dedos contra mi pecho, haciendo que mis pezones me trasmitieran una corriente eléctrica. Su mano se deslizó por mi abdomen hasta llegar a mi vientre, retraje mi pelvis hacia atrás logrando sentir su miembro contra mi cuerpo. Ni el sonido de la lluvia me impidió oír cuando el botón de mi pantalón era desabrochado, ni la cremallera siendo abierta.

-Amo~- susurré levantando un poco mi cadera para que mi pantalón se deslizara más fácil y descubrir mi cuerpo. Su mano tomó el borde de mis bóxers y tiró de ellos hasta quitármelos, flexioné mi pierna para que me los pudiera quitar al menos de la derecha, pues estamos de costado. –Minho.- temblé al sentir su mano cerrarse en mi muslo y hacer que levantara mi pierna. –Amo Minho~- no me penetró, sólo dejó su miembro entre mis piernas, debajo de mis testículos.

-Apriétalas.- asentí relamiendo mis labios y presionando mis piernas para que se sintiera la estreches que desea.

Suspiré sintiendo su miembro, su glande rozar contra mis testículos y salir de entre mis piernas. 

-Ñé~- susurré bajando mi mano hasta mi miembro para comenzar a estimularme. –A Ñé le gusta cómo se siente, Amo.- sonreí lento mientras disfrutaba de su mano estimulándome.

Minho comenzó a besar mi cuello sin detener el movimiento de su cadera, ni su mano estimulándome. Pero logré sentir su izquierda deslizándose por mi espalda hasta llegar a mis pompis, intenté elevar un poco mi pelvis para que tuviera acceso a mi cuerpo. Relamí mis labios al sentir las yemas de sus dedos rozar con mi entrada.

-Ñé~- gemí, la yema de si índice estaba dentro de mi cuerpo. –A… amo~- comenzó a penetrarme con sus dedos deteniendo su miembro entre mis piernas. También dejó de estimularme para tocar directamente en dónde nace mi cola de mapache, haciendo que sintiera pequeñas contracciones en mi cuerpo. –¡A-Amo Minho!-

Fruncí el entrecejo y suspiré.

-¡Ñé~!- estiré mis brazos y piernas para despertar mejor. Abrí mis ojos y los tallé. –¿Qué hora es?- susurré sentándome en la cama para mirar el reloj despertador. –Más de las diez de la mañana.- eso significa que Minho ya se despertó porque no apagué su alarma esta vez.

Ayer fue un gran día, seguro cuando se lo cuente a KwangMin o a Azu no lo podrán creer, sonreí por eso mientras caminaba hacia mi maleta, lo mejor será darme un baño e ir a desayunar con Minho.

End Pov’s Taemin

Mientras tanto, Minho seguía preparando un poco de café en la cocina de la habitación. Estaba cuidando de que el agua no se calentara mucho porque podría arruinar su momento de café y hacerlo esperar a que ese enfriara, o en su defecto, tendría que sacar hielos de la nevera para acelerar el proceso.

Vio como la pantalla de su celular se iluminaba, por lo que decidió tomarlo y luego de apagar al temporizador, apagó el fuego de la estufa. Terminó de preparar el café, vertiendo agua dentro de la taza que ya tenía previamente arreglada con café en grano y azúcar.

Tomó una cuchara para ayudar al proceso de la disolución e integración de la azúcar, al tiempo que la agitaba dentro del agua revisaba su correo electrónico, tenía algunos mails importantes como El Diario Oficial de la Federación que le avisaba qué leyes sufrieron modificaciones y también tenía esos correos basura, como les llamaba, a las promociones que le enviaban por ser socio de algunas tiendas.

De pronto le llegó el mensaje instantáneo de Max, peguntándole cómo le estaba yendo en las vacaciones y si tenía más polvo de humo y la ubicación de la cinta amarilla preventiva.

-Buenos días.- susurró Taemin entrando a la cocina, secando su cabello con la toalla que aún estaba en sus hombros. –Se me olvidó apagar tu alarma, ñé, je, je.-

-Buen día.- contestó bloqueando su celular luego de contestarle a ChangMin. –Anoche llovió.-

-No parecía que fuera llover, en la noche cuando veníamos caminando habían estrellas.- Taemin le apuntó al café y Minho negó, contrario a lo que pedía, le tendió un vaso y vertió leche caliente dentro. –¿Descansaste?-

-Sí, pero tenemos que hablar.- el híbrido alzó las cejas sorprendido y sintiendo un poco de miedo. –Ayer dijimos y escuchamos muchas cosas.-

-Pero todo está bien, ¿no es así? Hablamos de lo que teníamos y acordamos solucionar asuntos pendientes.- el tono en la voz de Taemin se aceleró, igual que los latidos de su corazón. –Una vez que esté en Seúl hablaré con YoonGi y tú ibas a trabajar sobre lo que pasó antes de mi graduación. En eso habíamos quedado.-

-Sí, lo sé pero… lo que pasó ayer… lo que pasó ayer fue sólo para probar una hipótesis.-

-¿Qué?- Taemin se levantó de la silla frente a la barra que lo separaba de Minho.

-Aún falta muchísimo tiempo para que estemos juntos de manera románticosexual.- afirmó mirando, sin ser fijo, a los ojos de Taemin. –Ayer sólo experimenté contigo para saber…-

-¿Experimentar conmigo?- sintió una punzada en el corazón, de inmediato sus ojos se llenaron de lágrimas. –¿Por qué? ¿Por ser híbrido?-

Minho mantenía su boca cerrada y un semblante sereno.

-Si no tenías intenciones de estar conmigo, ¿¡para qué fue todo lo de ayer?!-

-Estaría contigo pero no de ésta manera.- contestó aun con su tono neutro, reanudando su café.

-¿Es por los vínculos?- Taemin rodeó la barra hasta estar frente a Minho. –Eso ya no existe y la Doctora te dijo que no había legislación humana que impidiera lo de nosotros.- colocó sus manos en los antebrazos del criminólogo, intentando que entrara en razón. –Que no era un padre y su hijo, era un tutor y su protegido. ¡Dijo que estaba bien estar juntos!-

-También te dije que si yo no quería, era no y punto final.- contestó soltándose del agarre de Taemin para salir de su perímetro.

-¿Es por YoonGi? ¿Por lo de mi sexualidad? ¿O por Rockhyun?- caminó detrás de Minho, necesitaba saber por qué el cambio repentino de opinión y actitud. –Por favor, dímelo.- se quedó de pie dejando que Minho se alejara hasta la sala de estar. –Ayer me diste una corona y hoy despierto en un calabozo… dime por qué.- susurró sorbiendo su nariz para controlar su llanto.

-Yo no quiero esto.- contestó Minho suspirando, sin mirar sus ojos sino su frente, así le daría una falsa ilusión de un contacto visual.

-¿Por qué? ¿Qué hice ayer que no te gustara? Puedo cambiar.- intentó caminar lento hacia Minho, pero sus piernas se sentían extrañamente pesadas. –Puedo adaptarme a lo que me pidas.-

Ese es el problema.

-Cómo eres tú es perfecto, sólo no quiero esto.-

-Si soy perfecto así, ¿por qué no?- susurró acercándose lentamente. –Quieres que te dé un masaje en los hombros, te lo doy. Quieres que te pregunte como te fue en el trabajo, ya lo hago, ¿quieres que nos duchemos juntos? Podemos intentarlo… ¿quieres que me corte el pelo? ¿Que lo tiña de rojo de nuevo? Que no pare de decir “ñé” dime lo que quieras y lo haré.- hiperventiló e intentó reprimir el dolor que sentía en el pecho que terminó cubriendo su boca con ambas manos, así mantenía la bilis que intentaba regresar desde su estómago.

-No nos lastimemos más, Taemin.- susurró Minho acomodando su saco. –Termina de desayunar e iremos por Rockhyun.- afirmó, manteniendo la postura por dos segundos hasta que Taemin lo abrazó fuerte, apretándolo contra su cuerpo para que sintiera como su corazón se rompía. –Taemin.- el criminólogo se maldijo al oír su voz temblar. –Por favor, has lo que te pedí.-

-Dime… dime por qué… es mi última pregunta.- sorbió su nariz. –Ayer sólo te pregunté once.- sintió que su corazón se estrujaba al recordar la cena de ayer, cuando todo estaba absolutamente bien. –¿Qué pasó durante la noche que te hizo cambiar de opinión?-

Minho suspiró lento, cerrando sus ojos al mismo tiempo que sus pulmones se llenaban de aire.

-Ayer en la noche.- maldijo ser tan débil. –Te oí hablando dormido.- afinó su garganta. –Si eso no responde tu pregunta, haré la mía.- Taemin apretó su abrazo, intentando que Minho lo correspondiera, pero el criminólogo mantenía sus manos a sus costados. –¿Tú me quieres como Amo o como pareja?-

El corazón de Taemin se detuvo por un momento, aflojó su abrazo y lentamente Minho se separó.

-Si tú no sabes la respuesta, yo tampoco estoy dispuesto a descubrirla.- Minho arregló su corbata. –Me encantaría ser uno, y odiaría ser otro.- Taemin sólo bajó la mirada mientras mordía sus labios. –Termina de desayunar para ir por Rockhyun.- afirmó el criminólogo mientras caminaba para salir de ese incómodo ambiente.

Porque si la Doctora tenía razón, tal vez Taemin no lo quería como pareja, sino como a un Amo. Y ciertamente, repudiaba la sola idea de ser llamado de esa manera por los labios del híbrido. 

Notas finales:

Fin <3

Fin de la penultima parte. 

No diré nada sobre el capitulo, porque espero sus rws~ oh! que muerdan una almohada, golpeen un peluche o griten "Ahhhhhh!!!! cómo la odio!!!!" Con eso me daré por bien servida. 

Sí, sí. 

Espero, la meta es para el siguiente martes publicar el siguiente cap, pero no tengo nda escrito, de todos modos yo avisaré si no puedo o si la cambio al jueves pero ñé, eso lo veremos en la semana. 

GRacias por leer!


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