El tiempo había pasado rápidamente sin piedad alguna, la crueldad y brutalidad de la guerra habían quedado atrás, después de semanas de intensa guerra entre ninjas, solo quedaban los estragos de dicha batalla, un sin número de personas habían dado su vida por defender el mundo shinobi y ahora solo quedaba la lúgubre sensación de destrucción que precede a un acontecimiento como este, por fortuna no todo eran desgracias, al final, el ejército aliado había conseguido la victoria gracias a la ayuda de tres sobresalientes ninjas Uchiha Itachi, Uchiha Sasuke y Uzumaki Naruto. Ahora solo quedaba reconstruir a todos los pueblos que habían sido abatidos, y más importante aún, reconstruir la esperanza de un mundo en paz, más allá de ganar la guerra, las 5 grandes naciones habían ganado una unión que sería difícil de romper.
---------Narración Itachi.------------
Estos meses me habían parecido simplemente eternos, no dejaba de preguntarme como se encontraría Deidara, y más importante aún no dejaba de preguntarme si algún día podría volver a verlo, disculparme con él y reanudar lo nuestro, si algún día podría perdonarme, porque si de algo estoy seguro es de que Pain se encargó de destrozar la imagen que él tenía de mí.
-Hermano, ven, la Hokage quiere vernos.- Musitó mi hermanito Sasuke, el hecho de que ahora me hablara de esta forma tan casual no dejaba de sorprenderme, si algo pude alegrarme de haberme alejado de Akatsuki es haber recuperado a mi única familia.
-Ya voy Sasuke.- Contesté mientras me ponía en marcha y lo seguía. Caminamos un poco y llegamos hasta su oficina. Hace un par de días finalmente dejamos de lado el campo de batalla y regresamos a Konoha, todo en la aldea me parecía diferente, y recorrer sus calles me hacía sentir completa nostalgia y a la vez felicidad, regresar aquí era una sensación maravillosa.
-Me alegra que llegaran chicos.- Dijo Tsunade con una expresión maternal.- Siendo sincera no los llamé para nada en específico, solamente quería agradecerles formalmente por su brillante actuación en esta guerra, la cual fue clave para el éxito de nuestra causa.
-No tiene nada que agradecer, solamente hicimos nuestro deber.- Contesté sinceramente.
-Así es, además Naruto también fue una pieza clave.- Comentó mi hermano con lo que parecía ser un ligero sonrojo que me pareció adorable.
-Tengo mucho que agradecerles, a ti.- Dijo Tsunade refiriéndose a mí.-Por qué a pesar de cómo te trató la aldea hace años regresaste, y pusiste tu vida en peligro por nosotros, no todos los días se ve un ninja, y una persona tan íntegra y con principios tan firmes. Y a Sasuke porque también regresó cuando Naruto se lo pidió.
Aunque lo desconocía, mi hermano había abandonado la aldea para ir en mi búsqueda, para cumplir lo que le había impuesto, matarme. Pero antes de poder encontrarme Naruto había salido en su búsqueda para implorar su ayuda, para convencerlo había traído consigo a uno de los ancianos de la aldea, quién en contra de un acuerdo que había entre todos nosotros (Los que participaron en la ejecución del clan Uchiha) relató la verdad sobre este hecho a mi pequeño hermano, esto hizo que mi hermanito quisiera tomar venganza de la aldea, sin embargo, cuando le informaron que yo me dirigía hacia el campo de batalla para ayudar a la aldea decidió ir también para enfrentarme.
---Flash Back----
Llegué al lugar de reunión de las tropas del ejército aliado, para mi sorpresa Sasuke se encontraba ahí esperándome con una mirada llena de reproche-Supongo que quiere asesinarme- Pensé creyendo que para colmo de males después de dejar al amor de mi vida tendría que enfrentarme a último miembro de mi familia.
-Quiero hablar contigo.- Dijo seria, pero tranquilamente, lo cual me sorprendió de sobre manera, realmente esperaba que se abalanzara contra mí para acabar con esto de una vez por todas.
-¿Qué es lo que quieres?- Espeté fríamente poniendo una expresión dura en mi rostro, esa mascara que hacía mucho no usaba volvía a mí por el bien de mi hermano.
-Deja de fingir conmigo. ¿Quieres?- Dijo molesto, no entiendo a qué se refiere con eso.
-¿Fingir? ¿De qué rayos hablas?... ¿Acaso ya eres lo suficientemente fuerte para enfrentarte a mí?- Puntualizé con serenidad pero un tanto amenazante.
-No tienes que seguir con eso, sé toda la verdad, pero quiero oír tu versión, y más importante aún, quiero saber por qué volviste para ayudarlos a pesar de todo lo que te hicieron.
-¿Cómo que lo sabes todo?- Le cuestiono incrédulo, es absurdo que Sasuke lo sepa, se supone que era un secreto que todos los involucrados nos llevaríamos a la tumba.
-Así es, me contaron todo lo que hiciste, realmente no puedo creerlo, no puedo creer que te hicieran hacer algo tan horrible y después te echaran.- Expresó mi hermano a punto de las lágrimas, se veía sumamente afectado por la noticia.- Y no comprendo porque te empeñaste en que te odiara, cuando resulta que eres la única persona que vale la pena en toda esa podrida aldea.
-¿Y Naruto tampoco vale la pena?- Digo tratando de desviar el tema. En la temporada que estuve en mi misión a lado de Deidara pudimos ver que ellos dos tienen, o al menos tenían una relación.
-No estamos hablando de eso Itachi.- Expresa en forma de reproche.- Dame una razón, una sola para perdonarlos, si me la das los perdonaré y pelearé por ellos, pero si no voy a destruirlos por lo que te hicieron, aunque tu estés en contra de ello.
Las palabras de mi hermano eran severas, podía ver la determinación en su mirada, todo lo que está pasando me ha tomado por sorpresa, nunca imaginé que estaría en esta situación, pero de algo estoy seguro, no puedo dejar que mi hermano tome un mal camino solo por lo que ocurrió en el pasado, yo estaba dispuesto a dar mi vida con tal de que mi hermano pudiera continuar con su vida de una forma pacífica y feliz en la aldea, pero ahora tenía una nueva alternativa, en lugar de entregarle mi vida tenía que entregarle mis sentimientos de la forma más sincera posible.
-Sasuke…- Susurré a tiempo que destruía por completo mi máscara de frialdad, dando paso a una expresión de nostalgia, la cual me invadía cuando pensaba en el pasado, y en la aldea.- Yo lo hice simplemente porque soy un ninja de Konoha, puede que no lo comprendas, pero esa es mi principal razón, yo nací y crecí en esta aldea, la cual comenzó como una visión utópica del futuro, un futuro en paz, en el cual las personas pudieran vivir tranquilas, no quiero excusar mis acciones, porque haber asesinado a mi familia no tiene perdón, pero lo hice por ti, y por todos los pequeños niños de Konoha, si hubiese dejado las cosas seguir su curso se habría desatado una guerra civil en la aldea, y yo no quería que tu vivieras esa clase de horrores.- Miré su expresión, la cual era de meditación por mis palabras.- No tengo que perdonarles nada, porque yo tomé la decisión por mí mismo, y estoy aquí en este momento por la misma razón, porque creo en el sueño que tuvo el primer Hokage, su sueño de paz, eso es lo que quiero para los más jóvenes de la aldea, para ti, mi pequeño hermano tonto.-Dije esto con un ligero tono juguetón al recordar que así lo llamaba en el pasado, el correspondió estas palabras con una pequeña sonrisa, la cual tenía años sin ver y me llenó por completo, ver su sonrisa hacía que valiera la pena el hecho de haberme alejado de Dei.- Si quieres odiar a alguien, ódiame a mí, porque yo decidí matarlos.
-No puedo odiarte hermano, y si ese es tu sueño, que haya paz, pelearé a tu lado para obtenerlo, pelearé con todas mis fuerzas por ti Itachi, como tú lo has hecho siempre por mí.- Esas palabras, esas simples palabras que salieron de su boca provocaron en mí una sensación de profunda felicidad, Sasuke, con solo decir esto hizo que todos los años de sufrimiento, que el dolor de haber asesinado a mis seres queridos, a mis propios padres quedaran en el olvido.
-----Fin Flash Back------
El simple hecho de recordar esas palabras me devolvía una sensación de felicidad y me hacía olvidar las cosas malas que habían ocurrido a lo largo de mi vida.
-¿En qué piensas?- Me preguntó Sasuke
-En cuando nos reencontramos.- Dije sinceramente.
-Eres demasiado sentimental Itachi, aunque te esfuerces por aparentar lo contrario.
-Lo sé, y me alegra no tener que usar mi máscara contigo nunca más.- Le comenté con una sonrisa.- Pero tú también lo eres, basta ver cómo te la pasas defendiendo a Naruto.- Mis palabras tuvieron el efecto deseado, las mejillas de mi pequeño hermano se tiñeron de un tenue color carmesí.- Después de todo no eres más que un niño enamorado.- Finalicé revolviendo su cabello.
-No soy un niño.- Dijo irritado, pero antes de que pudiera seguir reclamándome un joven rubio llegó hasta nosotros, era Naruto, el cual a ver a Sasuke se sonrojó aún más que mi hermano.
-Hola.- Nos saludó con una tierna sonrisa, y se acercó a Sasu para darle un fugaz beso en los labios, lo cual me resultó adorable.
-Hola.- Contestó Sasuke después del beso pasando sus brazos por la cintura del ojiazul acercándolo a su cuerpo.
Naruto me recuerda tanto a mi amado Deidara, son igual de tiernos, e igual de inocentes, pero a la vez tiene un carácter fuerte, por desgracia parece ser que mi hermano y yo tenemos los mismos gustos. Deidara, pensar en él me hace entestecerme casi al instante, estar sin él es como estar sin aire, y aunque estar con mi hermano aligera la carga no puedo dejar de extrañarlo ni un momento. Espero algún día poder regresar a donde pertenezco, que es a su lado.