-----------Narración Deidara----------
-No puedo creer lo que ese maldito acaba de hacer, me besó de la nada y ahora me deja aquí en el bosque, vaya que estoy molesto e indignado, pero si no lo sigo me perderé como la última vez.- comencé a caminar, él iba a unos 10 metros de mí caminado a paso relajado.
-¡Oye maldito, no me dejes atrás!- Le grité para que lograra escucharme.
-Si no quieres perderte camina más rápido.- me dijo en un tono un tanto altanero, lo cual me molestó mucho, así que corrí hacia donde él estaba y sin más lo taclee y ambos caímos al suelo.
-¿Qué rayos crees que haces?- me dijo el Uchiha comenzando a reírse.
-¿Crees que puedes besarme y luego irte como si nada?
-No lo creo, pero es justo lo que tú hiciste ¿No, Deidara?- me contestó y siguió caminado como si nada, él tiene razón, es exactamente lo que yo hice.
-Perdón, te aseguro que no volverá a pasar, primero me muero o te mato antes de permitirlo.- dije un poco nervioso.
-¿A sí?, bien, pues si eso quieres está bien para mí.
-Claro que si- Obviamente lo había dicho solo por orgullo, porque aunque me duela aceptarlo realmente me gustaría que se repitiera, no sé por qué, pero tengo la impresión de que este desgraciado solo está jugando con mi mente, no lo tolero.- No olvides que lo único que quiero de ti es verte muerto, y si soy yo quien te mata mucho mejor.
-Vaya, ¿Aún sigues con esa idea infantil de que puedes matarme?- dijo con un tono notablemente frío- No puedo creer que exista una persona tan obstinada.
Me pareció verdaderamente hiriente el tono que utilizó, pero creo que solo dijo eso respondiendo a mi agresión.
------------Narración Itachi-----------
Ya casi llegábamos a la cabaña, desde esa pequeña discusión ambos habíamos caminado en silencio y se sentía una gran hostilidad entre los dos.
-Sinceramente me sorprendió saber que aún me odia, tal vez una parte de mí esperaba que después de esta misión nuestra relación mejorara, yo no lo odio ni nada, pero él tiene una gran obsesión por derrotarme. Después de lo que ha pasado entre nosotros en los últimos días llegué a pensar que podríamos ser amigos, o tal vez algo más…¿Qué estoy pensando?-La voz de Deidara me sacó de mis pensamientos.
-¿Qué?- le dije, no había escuchado lo que había dicho.
-Que lo siento- me dijo viéndome con sus hermosos ojos azules- En realidad ya no quiero matarte, hasta creo que eres un buen tipo, pero tampoco es que me agrades, ni nada por el estilo.- eso último lo dijo muy nervioso, lo cual me pareció lindo.
-No te preocupes, sé que eres un tipo impulsivo que siempre dice lo primero que le viene a la mente, eres muy torpe.-le respondí mientras le daba un leve golpe en la coronilla con mi puño, como una señal amistosa.
-¡Auch!, ¿Quién te crees para golpearme?- me dijo mi compañero haciendo un puchero muy tierno.
-No exageres, no te golpee tan fuerte.
Después de 5 minutos ya estábamos dentro de la casa, puse a calentar agua en la estufa para que comiéramos sopa instantánea, ya que solo sabemos hacer eso y arroz. Me dirigí hacia la puerta de entrada, ya que había dejado mi capa tirada ahí, y pude ver algo en el buzón, era un pergamino, a simple vista podía deducirse que lo habían enviado de Akatsuki.
-¡Deidara, llegó un pergamino!- lo llamé para que leyéramos juntos su contenido. Casi inmediatamente llegó, su largo cabello rubio estaba mojado, al parecer había tomado un baño.
-¡Pues ábrelo! ¿O acaso planeas que lo contemplemos toda lo noche?- me dijo tan impaciente como siempre.
-Eso es lo que estoy haciendo.
Romí el sello que tenía usando un jutsu secreto de Akatsuki, y lo desenrolle rápidamente. En él podía leerse:
Itachi.
El día de ayer Sasori terminó su misión, y partirá a otra la próxima semana, pero quiere que Deidara venga con él, no me parece coherente que te quedes solo con esta misión de infiltración, pero sé que eres capaz de terminarla sin ayuda, así que les dejo la decisión a ti y a tu compañero, si ambos deciden quedarse pospondré un par de semanas la misión de Sasori hasta que Kisame regrese, para que lo acompañe, por el contrario, si deciden que Deidara abandone la misión, Kisame irá a acompañarte lo más rápido que pueda.
Espero una respuesta lo antes posible.
-Pain.
Me giré para ver a Deidara, estaba muy pensativo, así que me levanté de donde me encontraba sentado y caminé hacia la puerta, quería tomar un poco el aire y aclarar mi mente.
-Parece que al fin te librarás de mí, bien por ti.- le dije antes de salir, realmente no quiero que se vaya, pero si así lo quiere no lo detendré.
-----------Narración Deidara-------------
-Me dolió lo que me dijo, yo no quiero irme no quiero “librarme” de él, pero parece ser que ya no me quiere aquí, tengo solo unos cuantos días para decidir qué hacer, pero después de oírlo decir eso comienzo a pensar que no me quiere aquí después de todo.- Releí el pergamino una y otra vez, intentando encontrar una respuesta, es cierto que tampoco me llevo bien con mi Dana, pero lo extraño, esta es una decisión difícil, porque si me voy ahora puede que nunca tenga otra oportunidad de limar asperezas con Itachi, además me gusta tenerlo cerca.
Después de terminar mi diálogo interior escuché que el Uchiha abría la puerta.
-Buenas noches- Me dijo mientras se dirigía a su habitación.
-Buenas noches- le respondí, mientras me levantaba para seguirlo, necesito saber qué es lo que quiere que haga.
-¿Qué necesitas?- dijo cuando sintió que me acercaba
-No quiero “librarme” de ti, ¿Tú quieres que me vaya?- dije dedicándole una mirada suplicante involuntariamente.
-No, no quiero.- me contestó, al tiempo que rodeaba mi cuerpo con sus brazos en un cálido y tierno abrazo.
Tal vez, después de todo la decisión no será tan difícil.