Capitulo dos: Preparaciones para Navidad
"De nada me sirve estar entre tus brazos cuando me abrazas, si no estoy en tu corazón"
Una mueca se hizo presente en su rostro, eso era una de las cosas que más detestaba; La Navidad.
No lograba entender por que a todas las personas les hacia ilusión esa festividad, mucho menos podía entender tanta felicidad. La Navidad para el sólo era tener que comprar inútiles regalos excesivamente caros, ir a una cena mortalmente aburrida, fingir que se la pasaba bien y por ultimo esforzarse por que no notarán su incomodidad.
¿Era el un Grinch? Posiblemente, ¿Le importaba? No, para nada.
Por enésima vez estuvo a punto de estornudar, oh si esa era otra de las cosas que más odiaba de la Navidad, ¿por qué la tenían que poner en fechas tan frías? ¿Por qué no mejor en verano o en cualquier otra estación? ¿Qué le veía la gente de divertido al estar todo el santo día afuera, congelandose, gastando su dinero? ... Su dinero...
Si, en definitiva Sasuke Uchiha era todo un Grinch.
Pero ahi estaba el -vaciando su cartera-al lado de Sakura comprando inútiles regalos, derrochando SU dinero en las sugerencias que inocentemente la pelirrosa le daba, aunque todo mundo sabe que sus amigos seguirían siendo sus amigos y sus enemigos seguirían siendo sus enemigos, sin importar los regalos que Sakura seleccionara.
¿Por qué estaba ahí? ¿Qué eventos del destino lo llevaron ahí? El se lo continuaba preguntando.
Volteo a ver el peluche en manos de la chica, sabía que no le quedaba más remedio.
Un peluche de oso polar para Karin, otro peluche para Karui, otro peluche para Hinata, otro peluche para Tenten, otro peluche para Ino, otro peluche para Tsunade, otro peluche para Suigetsu, otro peluche para Itachi, otro peluche para Deidara...
–Sakura- la llamo, pero la pelirrosa no le hizo demasiado caso- Sakura, ya no caben los peluches...
Entonces la chica si volteó a ver el carrito, después de evaluar seriamente la situación del espacio-sin tomar en cuenta la billetera del moreno- fue dejando uno por uno los peluches con cara de desepcion y así hasta dejar la mitad.
–¿Si cambiamos esos peluches por otra cosa?
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–Una cartera para Suigetsu, una cartera para Shikamaru, una cartera para Karui, una cartera para Bee, una cartera para Neji, una cartera para Lee, una cartera para Naruto...– "¡Shanaron! ¿Pero que acabo de decir?" la pelirrosa se tenso "No, Naruto no debería de aparecer en esta lista"
–Mh... No, espera ese ultimo ya lo compre– Dijo el moreno defendiendo sus ahorros. Se quedo pensativo, eso a Sakura no le gustó ¿En qué estaría pensando?
"Aunque en estas circunstancias no se sí sería apropiado darlo..." pensaba el moreno
Las palabras se quedaron flotando en el aire, Sakura no quería escuchar eso, no era posible que le estuviera diciendo aquello.
Dejo las compras a un lado y volteó a verlo con una mirada reprobatoria, no no dejaría que todo el esfuerzo que hizo fuera en vano.
Entre Sasuke y ella no había pasado gran cosa hasta el momento. El chico se empeñaba en ocultar sus sentimientos y lucir como si todo fuera normal y a la perfección. Sakura por su parte se había alojado en su casa sin permiso, y pretendía ganarse un lugar en su vida.
Cuando el pelinegro despertó de su ensimismamiento pudo notar la cara de tristeza reflejada en la ojijade. Tenía que admitirlo, nunca fueron muy cercanos a pesar de todos los esfuerzos por parte de ella para asercarse, siempre la considero una total molestia, y para que mentir aún lo era.
Pero, aunque nunca lo fuera a aceptar esa chica tan molesta, ruidosa, fuerte, tan parecida a Naruto... Posiblemente aún extrañaba a ese rubio sacándolo de sus casillas día tras día, el único que lograba sacarle aunque fuera una mínima sonrisa, pero... ¿De quién era la culpa?
Bueno, también esa pelirrosa aunque era molesta, se esforzaba por hacerlo feliz y eso no lo iba a negar.
–Bueno, apúrate con eso– el Uchiha se dio la vuelta, con ese mínimo gesto la chica pudo notar que al menos le importaba un poco, no se demoró más tiempo y lo siguió.
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[Naruto Pov]
Comiendo un tazón de ramen, la comida que más me gusta, la comida que suelo comer luego de cada agotador día, la comida que adoró.
Pero hoy me sabe diferente, el estar aquí sólo, sentado comiendo un humeante tazón de Ramen en mi restaurante favorito significa sólo una cosa; Derrota.
Ayer no pare ese buscarlo, calle tras calle, hasta que me dijeron unas piadosas personas que lo habían visto en su casa,me considere un idiota por no haberlo buscado allí desde el primer momento.
Por más que toqué la puerta, por más que grite para recibir una explicación, por más que los vecinos se quejarán para que me callara... El, aún así, no salió.
Incluso llegue al extremo de considerar colarme en su casa por una de las ventanas, dicho plan que nunca llegue a ejecutar. El clima era frío, nevaba, pero nunca me moví de dos metros cuadrados.
Basta con decir que me quede a dormir allí, pero otra vez por mala suerte al despertar me dijeron que ya había salido... Y no sólo...
Agite la cabeza para sacar los malos pensamientos de mi cabeza, posiblemente no era más que uno de los rumores que la gente inventa para pasar el rato, o al menos eso quería creer.
Una corriente helada recorrió mi espalda. Por Kami ¿A quién se le ocurre dejar la puerta abierta? Con cierta inconformidad voltee para reclamarle a la persona en cuestión.
Pero las palabras no salieron de mi garganta, mi pecho dolía y yo me quede paralizado por la escena ante mis ojos. Cualquiera diría cosas como "Oh Kami, que hermosa pareja" todos menos yo.
Nuestros ojos hicieron contacto visual en una milésima de segundo, el aparto la vista y volteó la cara fingiendo que yo no estaba allí, eso creo que fue lo que dolió más.
–Oh, aquí estabas– Si, en definitiva nadie conoce a mi prima ya que es nueva en la ciudad. Su nombre es Ino Yamanaka, para mi que es una loca excéntrica que a veces da miedo.
–Oh ¿ya acabaste? ¡menos mal, ya sabes que odió el Ramen!– la chica se dirigió a la salida energéticamente, yo la tuve que seguir.
Fueron sólo unos momentos pero note la mirada asesina que Sasuke le dirigía a mi prima. ¿Cómo debía interpretar eso? ¿No fue el quien cortó nuestra relación, después de todo? Pero incluso con eso... Lo seguía amando.
El dolor de verlo con otra persona -sobre todo Sakura- me invade por completo. Pero no por nada me considero una persona paciente, no por nada lo espere por mucho tiempo y nunca me rendi. Al principio darme cuenta de que lo amaba fue muy duro, tarde años en aceptarlo, pero cuando me confesé, bueno quizás no como la mayoría pero lo hice ... Ese si fue un día para recordar...
Una sonrisa se hizo presente en mi rostro al recordarlo, una sonrisa sinceramente melancólica.
**Flash Back**
Hoy de seguro lo iba a lograr, hoy se lo iba a decir, hoy era el día. Lo voltee a ver; Un chico de aproximadamente 15 años de edad, su rostro tan inexpresivo como siempre, sus obscuras orbes llenas de un sentimiento llamado soledad y resentimiento con el mundo, su cabellera azulada ...
El era mi rival, mi mejor amigo y justo por eso sabía que la infancia de este no había sido precisamente buena y por esto el se cerró a todos, se volvió receloso, le dio la espalda al mundo y el mundo le dio la espalda a el.
Se que cometió un montón de errores, se que aún hoy en día muchos desconfían de el, pero también se de la persona que se esconde detrás de ese duro exterior, se que es una persona desconfiada que teme ser herido.
Y por eso mismo prometí protegerlo, en definitiva no voy a fallar, no dejaré que vuelva a sufrir...
–Teme- lo llamé lleno de dudas.
En respuesta sólo volteó a mirarme esperando que continuará, pero en realidad no sabía que decirle, después de todo no era como si habláramos de algo tan simple como el clima... ¿O si? ¡Estoy tan confundido, ttebayo!
No me puedo concentrar en las palabras que quiero decir, al menos no cuando soy observado por ti, aún así trato de dar lo mejor de mi y confesarte mi amor al fin. ¿Pero cómo? Las dudas me carcomen, tengo miedo de que me rechaces pero más aún temo que me odies.
–Teme– volví a comenzar. A pesar de la situación me divertía ver ese rostro molesto. Me gusta pensar que soy la única persona que le puede sacar emociones, incluso si es de molestia.
–Sólo di lo que tengas que de-
Me imaginaba lo que iba a decir pero simplemente no me importaba precisamente en ese momento, nunca se me ha dado muy bien el pensar antes de actuar por que soy una persona muy impulsiva.
Demasiado impulsiva.
Antes de darme cuenta de lo que hacia ya había acortado la distancia entre nosotros a una distancia nula, podía percibir su aroma tan real como ficticio, la calidez de sus labios unidos con los míos era una sensación totalmente nueva.
Sentí como el cuerpo de Sasuke se tensó, ame eso, lo encontraba divertido, ver a una persona tan fría como el, tan calculadora como el, tan serena como el, tan arrogante como el tensa por esa acción era de lo mejor.
Tome fuertemente su muñeca; con la suficiente fuerza para evitar que se fuera, con la suficiente delicadeza para no lastimarlo.
Claro que el instante sólo duro el tiempo que el se tardó en reaccionar- lo que vendrían siendo 15 segundos- se separó rápidamente.
Su rostro tenia un pequeño pero notorio rubor, su pulso acelerado, sus ojos sorprendidos.
Entonces me golpeo, mejor dicho, me pateo en el estómago. Puede sorprender la fuerza con la que lo hacia, en definitiva si ve la posibilidad me va a matar.
Nunca ha sido una persona con un muy buen humor, eso en definitiva iba a ser un problema.
**Fin del Flash Back**
En lugar de dirigirme a la salida del lugar camino justo al sitio en donde esta Sasuke, al principio el no nota mi presencia, no hasta que estoy lo suficientemente cerca de el.
Mis manos tiemblan incontrolablemente, noto el sudor frío recorriendo mi frente. Me pregunto que va a pasar... ¿Estarán en una cita? ¿Quizás siempre se estuvieron viendo? ¿Sakura lo obligo? ¿El en realidad siempre estuvo enamorado de ella?
Ya no puedo huir, estoy demasiado cerca.
Continuo acercándome, no voy a aceptar aquello sin una muy buena explicación, tendrá que explicarme muy bien que paso, ttebayo.
Me mira sin ninguna expresión pero noto en sus ojos la incomodidad. Tomó su brazo viendo reproche reflejado en su cara, en definitiva si no actuó ya no va a dudar en patearme o peor aún matarme.
Lo llevó a rastras ignorando sus palabras, igual que el decidió ignorarme anoche. Esta iba a ser mi... ¿Venganza? Que cosas, pasa mucho tiempo con una persona y algo de ella te acabara pegando.
Ahora a ver que hacia.