Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Por qué te amo [Keo One-shot] por ACKris

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Bueno, este es un one-shot de Keo, una pareja que me encanta *-*

Espero que lo disfruteís^^

Besooos^^

Notas del capitulo:

Taekwon -> Leo

Jaehwan -> Ken

Hakyeon -> N

Hace días que Taekwon no da señales de vida. A penas lo veo en el instituto y ya no responde mis mensajes. ¿Qué le habrá pasado? He intentado hablar con Hakyeon, pero no me dice nada. ¿Qué le está pasando a todo el mundo?

Dejo caer la cabeza encima del libro de matemáticas. No entiendo nada. Es triste que a mis dieciséis años dependa tanto de alguien para entender algo tan simple como las malditas ecuaciones. ¿Por qué demonios tienen que existir? Muevo la cabeza hacia un lado y suspiro. Hoy tampoco ha venido.

Me levanto y guardo los libros en la mochila. Necesito descansar, relajarme. Las paredes de esta biblioteca me asfixian y duele que él no esté aquí. ¿Dónde coño está?

Salgo sin despedirme de la bibliotecaria y conecto los cascos al móvil. Voy directo a la parada del metro y entonces lo veo. Está allí parado, mirando a la nada. Tan alto, tan guapo, tan fuerte... Mi corazón parece a punto de explotar. ¿Por eso se ha alejado de mi? Quizá se ha dado cuenta de que me gusta... No, imposible. No soy tan obvio. No lo soy, ¿verdad?

Empiezo a correr hacia él. Hoy no se escapa.

- ¡Leo!

Recuerdo cuando le puse ese mote. Todavía eramos niños y su padre aún vivía. Lo llamé así por qué se parece a un león de verdad: tranquilo y severo, pero cuando se enfada...

Se gira y me mira sin expresión alguna, pero en el fondo sé que está sorprendido. Lo conozco demasiado bien. Llego jadeando, cansado por la carrera.

- ¿Se puede... saber... dónde... coño... estabas? ¡Te he estado esperando cada día!

Mierda, me quedo sin aire. ¿Enserio tengo una forma física tan baja?

Se gira y se va como si nada.

- ¡Eh! ¡¿Se puede saber que haces?! ¡¡Jung Taekwon, ven aquí hora mismo y dame una explicación!!

Vuelve a girarse. Tiene el ceño fruncido y una mirada de odio. Mierda, está enfadado. Avanza amenazante hacia mi, que me encojo de miedo. ¿Por qué soy tan idiota?

- Ven conmigo. Ahora. Y deja de gritar- ordena.

Bajo la mirada y empiezo a seguirlo. Seguro que me pegará. Aigo... Soy idiota.

Se para de repente y me choco con él sin querer. Miro hacia arriba, esperando encontrarme un puño en la cara, pero no está. ¿Pero qué?

- Sube- ordena.

Me doy cuenta de que estamos en su casa. ¿Cuando hemos llegado? Joder, sí que estoy mal...

Nuestros padres eran amigos. Mi padre diseñó ésta casa y el padre de Leo la construyó. Se hicieron muy cercanos, llegando a acudir al nacimiento de los hijos del otro.

El padre de Taek murió cuando él tenía diez años. Fue muy duro para todos, hasta para mí. Desde entonces Taek no fue el mismo. Se volvió frío y distante con todos. Incluso conmigo.

Oí como cerraba la puerta detrás mío. Supe que no había nadie en casa, ya que todo estaba en completo silencio.

- ¿Por qué me has dejado tirado estas dos semanas?- pregunto mientras empezamos a subir las escaleras.

No responde. Será...

Sigue dándome la espalda. Pasa de mí, como siempre.

- ¿Hola? ¿A caso soy invisible?

- Callate de una vez, Jaehwan.

- ¿Qué me...? ¿Qué-qué me calle? Oh, disculpe usted señor.

- ¿Qué te pasa?- se gira, parándose en mitad del pasillo. Está enfadado.

- ¿Qué qué me pasa? ¡¿Qué te pasa a ti, so imbécil?! ¡¿Quién coño te crees para ignorarme de esta forma, eh?! ¿Quién? Estoy harto. ¡Harto, ¿me oyes?! ¡Harto de tú frialdad, harto de que me ignores, harto de que no me ayudes en nada! He soportado cada una de tus manías todos estos años. TODAS. Y me estoy empezando a cansar. Intento hacerte reír y me miras mal. ¡Me amargas los días! ¿Tú sabes qué es eso? ¿Sabes qué se siente cuando la persona que más amas en este mundo parezca que te odia? ¿Sabes qué es eso de estar enamorado de alguien que sabes que nunca te corresponderá? ¿Tú sabes que es eso?- empiezo a llorar- No, no lo sabes, por que eres un puto trozo de hielo sin sentimientos.

Me mira con los ojos y la boca abiertos. Espera, ¿qué he dicho? He hablado sin pensar... Y me he declarado. Joder no... Tantos años ocultándolo y voy y se lo suelto en mitad de una discusión. Seré idiota...

Seco mis lágrimas con la manga del uniforme.

- Jehwan, yo...

- No digas nada, por favor. Olvida lo que te he dicho. Olvida lo que siento por ti y simplemente olvidame. Será lo mejor para ambos- no puedo mirarle a la cara. No puedo. No quiero que me vea llorando-. Ha sido un honor haberte conocido.

Me giro y empiezo a andar.

- ¡Jae, espera!

Me agarra de la muñeca y me gira. Coge mi cara con ambas manos y se acerca peligrosamente.

Me está besando. Joder, me está besando.

Lame mi labio inferior, como pidiendo permiso para entrar. Abro un poco la boca y dejo que cuele su lengua. Juguetea con la mía y luego muerde mi labio. Pf...

- Esto...- dice mientras se separa un poco. Se ha sonrojado- Yo... Lo... Lo siento. Me separé de ti por esta razón...

- ¿Por qué razón, Taekwon?- pregunto divertido.

- Pues... Por qué... Por qué te amo y no sabía si sentías lo mismo... Y tenía miedo...

- Leo- lo interrumpo-, tranquilo. Yo siento lo mismo, lo sabes- me acerco a sus labios-. Lo sabes desde hace mucho.

Mi intención era la de un beso suave y dulce, pero por alguna razón estoy acorralado contra la pared comiéndole la boca a mi mejor amigo.

- Ken... yo...

Me encanta que me llame Ken, pero me pone más que lo haga por mi nombre verdadero.

- Dime Taekwon- lo miro directamente a los ojos mientras me muerdo el labio, que empieza a escocer un poco.

- No me mires así...

- ¿Por qué?- paso las manos por su espalda y atraigo su cadera hacia las mía- ¿A caso te pone?

Tiene la respiración agitada. Lo noto. Al igual que noto algo un poco grande clavándose en mi muslo. Oh dios...

- Mucho.

Me agarra el trasero y me levanta, obligándome a rodear su cadera con mis piernas. Prácticamente me arranca la chaqueta y empieza a morderme el cuello. Oh, joder... Cargándome, me lleva a la habitación. Me tira encima de la cama con delicadeza y vuelve a devorar mis labios.

Llego a su camisa y empiezo a sacársela como puedo. Termina sacándosela él y la tira a algún lado de la habitación. Siquiera sé si estamos en la suya. Me quito la mía y al instante me abraza. Joder, necesito sentirlo. Tiene las manos frías. Me encanta.

Cuando me doy cuenta estoy sin pantalones y él me está besando el pecho. Muerde mi pezón derecho y no puedo evitar jadear. Joder, como me gusta... Baja hasta mis piernas y me besa la parte interna de los muslos. La erección me está matando.

- Taekwon...

- Dime.

- Hazlo de una vez.

- ¿El qué?

Levanto la cabeza para mirarlo. Está confundido.

- Ya sabes- me sonrojo-. Eso...

Sube hasta mis labios y me besa con delicadeza.

- ¿Estás seguro?

- Al cien por cien.

Sonríe y me besa con pasión. Se desnuda por completo y empieza a bajarme los calzoncillos. Está tan excitado como yo. Lleva tres dedos a mi boca y empiezo a lamerlos con ansias. Vale, estoy desesperado por un polvo suyo.

Saca los dedos de mi boca e introduce uno en mi interior. Duele y sus manos están frías. Hago una mueca rara y me tenso un poco. Empieza a moverlo con delicadeza. ¿Por qué es tan delicado?

- ¿Duele mucho?

- No. Pero tus manos están heladas...

- Oh, lo siento- saca aquel dedo largo de mi interior.

- No, está bien. Me gusta.

Vuelve a meterlo y nos besamos. Si hubiera sabido antes lo que siente las cosas serían diferentes. Pero está bien así.

Introduce un segundo dedo y poco después un tercero. Los mueve tan rápido que no paro de gemir. Parezco una gata en celo.

- Hazlo, por dios...

Leo capta el mensaje y saca los dedos. Puedo notar su sexo en mi entrada. Joder, es enorme. Me penetra poco a poco, despacio.

Lo oigo jadear justo encima mio. No llego a sus labios y el dolor me está matando. Lo abrazo como puedo y nos hago girar en la cama. Sale de mi interior, pero eso no me importa.

- Siéntate.

Él obedece y me siento encima suyo, autopenetrandome. Así me gusta más. Él llega más hondo y yo alcanzo sus labios.

- Taek.

- ¿M?

- A la mierda la delicadeza.

Empiezo a moverme rápido. Él me ayuda un poco, pero yo solo quiero que disfrute. Empieza a gemir. Nuestros gemidos invaden la habitación. Ya no duele, ahora solo siento placer.

Me hace girar y de repente tengo la mejilla tocando las sábanas. Él me penetra desde atrás con fuertes embestidas.

- Joder, joder, joder... ¡Más!

Acelera el ritmo y yo ya no puedo más. Es demasiado. Él es demasiado. Mi mente se nubla y solo puedo gemir y disfrutar, deleitarme con sus gemidos.

- Oh, dios...

Le aprieto como puedo para que llegue. Acelera, creo que está pensando lo mismo que yo. Yo también me muevo. Esto es demasiado...

Empiezo a sentir esa electricidad en mi interior. Es cada vez más potente, más fuerte. Aprieto la sábana que no sabía que estaba agarrando y al fin, me corro.

Él continua un poco hasta que siento como se libera. Sale de mi interior y me ayuda a bajar las piernas. Estoy agotado, ha sido demasiado intenso.

Se tumba a mi lado y me abraza. Me incorporo de tal forma que mi cabeza se apoya en su pecho. Tiene el corazón a mil por hora, como yo. Nos quedamos en silencio, disfrutando. Taekwon me acaricia el pelo de una forma tierna.

- Entonces...- digo rompiendo el silencio- ¿Se supone que ahora estamos saliendo?

Lo oigo sonreír.

- Te quiero- susurra.

- Me tomaré eso como un sí.

Lo beso despacio, disfrutando de sus labios y su compañía.

- Yo también te quiero.

Y, sin darme cuenta, me duermo entre sus brazos, intoxicado por su olor.

Lo amo.

Notas finales:

Bueno, me ha quedado un poco largito, jeje. Pero mejor así, ¿no?

Bueno, mis queridas Starlights, espero que me dejeís algunos reviws elogiando, criticando o dandome los buenos días (?).

Nos veremos en otro one-shot pronto.

Besoos^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).