—Key, esto se terminó — trate de mantener la mirada fija en aquellos ojos que me veían con suma tristeza. No había marcha atrás, ya no podíamos seguir con la relación que teníamos. En cierto punto de nuestra relación me sentí feliz de estar a su lado, pero ahora si sigo a su lado es solo porque siento cierto aprecio por él. Desde que éramos niños nuestros padres nos obligaron a tener esta relación, nos hacían que pasáramos tiempos juntos y nos enseñaron que eso era lo correcto. Pero ya no puedo seguir mintiéndole a él ni a mí.
He conocido a alguien que me hace sentir diferente cuando estoy a su lado, no sé cómo clasificar lo que siento por Taemin; pero es algo que me llena de adrenalina y deseo. Ya no puedo seguir engañando a Key, no puedo seguir lastimándolo. Debemos conocer nuevas personas, vivir más experiencias, relacionarnos con personas diferentes y ahora con Taemin quiero vivir esas nuevas experiencias. Quiero descubrir lo que en verdad siento por KiBum.
Alce mi vista para ver el estado de Key y sentí como mi corazón se estrujaba, tenía los ojos llenos de lágrimas que empezaban a bajar por sus mejillas. Y su nariz se estaba poniendo un poco roja, pero aun así me miro con su frente en alto.
—¿Por qué quieres terminar conmigo? — sus ojos estaban llenos de lágrimas, empezó a hipear a medida que pasaban los minutos. Eso me hizo sentir extraño.
—Key, debemos conocer otras personas, darnos un respiro de nuestra relación — baje la mirada ya sin poder soportar aquellos ojos llenos de lágrimas.
—¿Ya no me quieres? — claro que lo quiero, solo que no se si lo que siento por él es amor o solo un sentimiento ocasionado por haberlo conocido desde que éramos niños. Levante mi vista para poder responder su pregunta.
—Si te quiero, pero no es suficiente para estar juntos — me regreso a ver con una mirada llena de ¿odio? ¿Tristeza? Y yo de nuevo baje mi mirada. Me sentía intimidado por sus ojos, además que mi corazón latía fuertemente al verlo.
—Si eso quieres Jonghyun ¡está bien! No te voy atar a una relación sin amor —alce mi vista y mire como tomo su bolso para empezar a caminar hacia la salida de nuestro cuarto.
—Key….— trate de detenerlo porque no quería que nuestra relación terminase así. Quería seguir viéndolo o por lo menos poder hablar con el normalmente cuando nos encontremos por la calle.
—No Jonghyun, está bien. No quiero estar con una persona que no sabe si me ama o no. — paso a lado mío con dirección a la peinadora y tomo un sobre del cajón izquierdo superior. Solo me limite a observarlo en silencio hasta que tomo todo lo que creo necesitaba. Empecé a caminar hasta donde estaba él.
—Yo te quiero, pero…. — no me dejo terminar mi oración y se giró. Estaba enojado, eso lo sabía porque lo conocía.
—Lo entiendo, tú me quieres pero no me amas. — camino hasta la mesita a lado nuestra cama y tomo sus gafas negras para ponérselas y regresarme a ver.
—Lo siento.
—Yo lo siento por atarte a mi lado aun sabiendo que no me amas. — su voz sonó más baja de lo normal, mientras agachaba su cabeza.
—Quiero terminar bien Key, siendo amigos. — de nuevo trate de acercarme, pero él retrocedió unos pasitos para atrás como tratando de que no le toque, eso me dolió.
—No creo que pueda verte como un amigo, lo mejor es cortar cualquier lazo entre los dos. — observe como apretó más su bolso.
—¿Eso piensas? — no me moví de mi lugar, ya que si lo hacia el retrocedería de nuevo y no quiero eso.
—Sí, verte con alguien más me lastimaría mucho, por eso mejor cortar cualquier lazo.
—Key lo siento, sé que hoy querías decirme algo importante y yo por esto no te lo permití ¿Qué me querías decir? — hable antes de que KiBum otra vez empezara a llorar, además por esta situación no pudo decirme la “superhipermaga noticia” que me tenía.
—Nada, ya no importa. Solo era una tontería. — sorbió su nariz antes de arreglarse de nuevo sus gafas y empezar a caminar hacia la salida.
—Key… — lo sostuve lentamente cuando paso por mi lado, pero el simplemente me ignoro saliendo así de nuestra habitación.
—Jonghyun mañana regresare por mis maletas. No podemos seguir viviendo juntos. — se detuvo en la salida de la puerta para regresar a verme.
—Está bien. — fue lo único que podía decir en ese momento.
—Adiós Jonghyun, espero encuentres el amor. — mire por última vez su figura antes de empezar a cruzar la sala de estar para salir de nuestro apartamento. Al escuchar el sonido e la puerta cerrarse me senté en mi cama y suspire fuertemente.
—Lo mismo digo para ti — susurre por lo bajo antes de acostarme en la cama y mirar el techo. Y así deje ir a KiBum sin ninguna otra explicación, más que conocer nuevas personas.
Necesitaba ver a Taemin o este dolor en el pecho no se iba a ir.
::
Han pasado seis meses desde que tuve la estúpida idea de terminar mi relación con Key, y hasta ahora no hay día en el que no me arrepienta de haber tomado esa estúpida decisión. En mi tonta cabeza, pensé que solo quería a Key porque nuestros padres casi nos lo habían impuesto u obligado desde que éramos niños. Pensé que solo lo quería por rutina, pero no sabía cuan equivocado estaba hasta que lo perdí.
Desde el día que se fue, me di cuenta que no lo quería. Que con el tiempo me había enamorado de él y lo había hecho perdidamente ya que después de nuestra ruptura empecé a salir todos los días con Taemin para poder olvidar aquellos sentimientos que tenía muy clavados en el fondo de mi corazón por Key, pero nunca lo logre. Pasaron las semanas y terminamos nuestra relación porque el encontró a alguien que le trataba mejor. No me opuse a eso y más bien terminamos siendo amigos, porque de una u otra forma el me ayudo a darme cuenta de lo que en verdad sentía por KiBum.
Los meses siguieron y yo me sumergí en un mundo de amores ocasionales, de aventuras de una noche. Buscaba de cualquier forma llenar el vacío que KiBum me había dejado por su partida, llenar ese hueco que crecía cada día más en mi corazón. Pero no lo podía, no había día alguno en el que no pensara en Key, en sus berrinches, sus gustos, sus regaños, sus besos, sus caricias, su cuerpo, sus labios. Me di cuenta muy tarde que sin Key mi vida no tenía sentido. Y si alguna vez pensé que una vida con él era monótona y sin sentido, nunca me imaginé del infierno que sería vivir una vida sin él. Era peor que estar muerto en vida. No tenía ganas de hacer nada o si las tenías era de buscar a alguien que me recordara aunque sea un poco a mi gatito.
Nunca más lo volví haber desde que fue por sus maletas. Aquel día estaba tan borracho que no recuerdo muy bien lo que sucedió. Solo recuerdo que cuando el llego yo estaba en la cama con Taemin. Entro al cuarto y solo empezó a recoger su ropa con una mirada llena de dolor.
Quiero olvidar su mirada llena de tristeza y odio pero no puedo. Y aun en mi estado etílico recuerdo claramente lo último que me dijo “Nos abandonaste, por un niño. Espero seas feliz por él” Pero aún sigo sin comprender completamente esa frase.¿Porque Key hablo en plural? Si en eso momento estaba solo. No entiendo aquellas palabras, pero al recordarlas algo en mi pecho duele.
Quisiera regresar el tiempo y no decir todas esas estupideces para que KiBum no se aleje de mi pero eso es imposible, ahora solo ruego por encontrarme con él. Pedirle perdón de rodillas y reconquistarlo de nuevo porque no me imagino una vida sin él. Por eso hoy, estoy en el café al que solíamos acostumbrar venir. Tengo una pequeña esperanza de que algún día lo encuentre aquí.
Salí de mis pensamientos cuando escuche como un nuevo cliente entraba, regrese a ver con la esperanza de que fuera él y al hacerlo mis ojos no podían creer lo que veían.
KiBum. Mi Key estaba parado en la puerta de la cafetería observándome fijamente con esos hermosos ojos que tanto extrañaba. Lo mire bien, pero note algo extraño en su cuerpo. Empecé a buscar algún cambio, tal vez es un nuevo corte, la ropa. Pero bajando mi vista por su cuerpo me topé con un bultito en su vientre, aunque estaba puesto una blusa holgada aun así se podía notar un pequeño bultito en su perfecto vientre. Algo en mí se removió al ver esa imagen de KiBum. Una corriente recorrió mi columna al ver como Key bajaba sus manos hasta ahí tratando de esconder algo que era imposible de hacerlo. Sonreí por esa actitud.
Key estaba embarazado, estaba con una hermosa barriguita que lo hacía ver más perfecto de lo que es. Regrese mi vista a sus ojos y estaba llorando. Odiaba verlo lloras, así que me levante y empecé a caminar hasta donde estaba él para abrazarlo; algo me decía que debía estar a lado suyo y eso hare. Ya estaba casi a su frente cuando un chico le rodeo los hombros. Me quede en shock al ver como KiBum se aferraba a él.
—¿Key, porque lloras? ¿Te sientes mal? — escuche, ya que no estaba tan lejos de ellos.
—No es nada Woohyun, solo son los cambios de humor. — Key trato de para de llorar mientras ese chico le acariciaba su cabello. Mi sangre hirvió al ver esa escena.
—Pensé que ya habíamos pasado por esto. Pero creo que nuestro campeón aun quiere hacerte llorar. — mi mandíbula se tensó cuando escuche aquellas palabras. Entonces Key estaba esperando un hijo de ese hombre. Mi corazón se partió al escuchar eso, pero aun así una voz en mi cabeza me decía que eso era mentira. Que él no podía ser el padre.
Camine hasta estar frente a ellos y poder mirar mejor a KiBum, el cual buscaba resguardo en el cuello de aquel chico.
—¡Key! Conoces a este joven? — susurro suavemente mientras acariciaba su cabello. Mire la reacción de KiBum y empezó a negar para regresar a verme.
—No, no lo conozco. Tal vez me confunde con alguien. — hablo con su vista fija en mí. Tratando de no llorar, pero sus lágrimas seguían cayendo por sus mejillas.
—¡Key no te hagas el tonto! — grite ya exasperado por la situación. Me dolía ver que me negara, que negara nuestra historia. Pero lo que me dolía mas era que todo fue mi culpa.
—¡Oye! Vuelve a decirle tonto a mi prometido y te parto la cara. — regresé a ver al chico con mis ojos abiertos. Ya que escuchar la palabra “prometido” me saco de lugar. Y fue cuando en verdad estalle.
—¿Tu prometido Key? Esto fue lo mejor que te pudiste conseguir como remplazo mío. — hable con dolor en mis palabras. Porque yo era el único prometido de KiBum, desde que éramos niños.
—Jonghyun…. — escuche su voz suave y entre cortada por el llanto.
—Nada de Jonghyun, quiero hablar contigo Key Ahora. — tome su mano para empezar a jalarlo hacia fuera. Necesitaba explicaciones y ahora porque estaba muy enojado conmigo y KiBum, en cierto grado.
—Yo no quiero, por favor vete como lo hiciste hace meses. Déjanos. — Que los dejase, eso nunca. Ahora que lo encuentro necesito hablar con él. Pero por lo pronto quiero salir de una duda que anda en mi cabeza.
—No me iré hasta que me digas de quien es el bebé. — Key abrió los ojos al hacer esa pregunta y me di cuenta que se sorprendió por aquello.
—Si no te has dado cuenta el hijo que él espera es mío. — alce mi dedo índice en señal que se callara. No quería que él me lo dijera, quiera escucharlo de los labios de KiBum.
—Eso quiero escucharlo de Key.
—Jonghyun, por favor no me hagas esto. — lo tome de la mano al ver como retrocedía, tal vez no estaba cuando de la mejor manera en esos momentos, pero no podía ver a Key con otro hombre. Era un estúpido que quería tenerlo de nuevo. Y los celos me estaban cegando.
Sentí como alguien me tomo por los hombros tratando de detenerme. Solté a Key y me gire para darle un golpe a ese bastardo obligándolo a retroceder y dándome tiempo a mí para de nuevo tomar a Key y empezar a arrastrarlo afuera del local. Escuchaba sus sollozos y sus leve tirones pero no le hice caso. Debíamos hablar, debía escuchar que el hijo no era de ese estúpido y aunque lo fuera yo podría hacerme cargo de él y amarlo como si fuera su padre porque amo a Key y no quiero que se aleje de nuevo de mi lado.
Llegue hasta mi auto y le abrí la puerta del copiloto haciéndole señas para que entrase pero KiBum se negaba.
—No quiero. — hablo mientras se topaba su vientre. Y empezaba a retroceder de mí.
—Key no me hagas hacerlo a la fuerza. — mire su mirada de miedo y me sentí como un monstruo.
—Estoy embarazado, no debo tener emociones fuertes, por favor.
—Key entra al auto, por favor. — hable más suave porque lo que decía era verdad. Y lo que menos quería era que se pusiera mal.
—No Jognhyun, no quiero. Quiero regresar con Woohyun, déjame ir. — empezó de nuevo a llorar y yo me desespere, ya no podía imaginarme dejarlo ir.
—Eso jamás. — lo tome del brazo y tire levemente hacia abajo para que entre al auto. Al principio puso resistencia pero después entro en modo automático. Le cerré la puerta y rodee el auto para entrar yo también. Arranque para dirigirnos hacia mi departamento, ahí podríamos hablar más tranquilamente.
En el camino el seguía llorando y yo me desesperaba mas por verlo ene se estado. Era como si yo lo lastimara y eso no me gustaba. Así que algo dentro de mí se rompiera.
Después de veinte minutos de viaje llegamos hasta el apartamento, bajamos para ir al ascensor y quedarnos en el piso 10. Al hacerlo, le abrí la puerta y luego la cerré despacio para no asustar más a KiBum.
El silencio invadió el lugar y yo me sentía incómodo a ver como su espalda daba pequeñas sacudidas por el llanto
—Key… — lo llame para que me regresará a ver y lo logre porque se giró.
—¿Por qué llegas justo cuando estoy empezando a olvidarte? — grito mientras empezaba a apuntarme histéricamente con su dedo índice. Sonreí al ver aquel gesto que no lo hacía desde que éramos más jóvenes. Y me acerque hasta estar frente a él.
—Porque tal vez no tienes que olvidarme. — susurre.
—Sí, lo tengo que hacer — grito mientras empezaba abrazarse a él mismo.
—No Key, escúchame. Cometí un error hace seis meses y te juro que me arrepentido. Dame la oportunidad de demostrarte que he cambiado.
—¡No! — me aparto de su frente y empezó a caminar hasta la salida. Lo seguí para evitar que se fuera aun.
—¡Por favor! — suplique tomándolo por los hombros y haciendo que me regresara a ver.
—¡No! No quiero que nos dejes solos de nuevo. — “nos dejes solo” eso me sonaba familiar, pero aun así lo abrace lentamente. Después buscaría una explicación para aquellas palabras.
—No llores, no le hará bien a tu bebé. Por favor no llores. — seque sus lágrimas.
—Entonces no nos lastimes más. Ya fue suficiente cuando nos dejaste aquel día. — me golpeo en el pecho y al hacerlo fue como si una luz iluminara mi mente. Nos dejaste. Ahora todo tiene concordancia. Aquel día la noticia importante de Key era que estaba embarazado, entonces ese bebé es mío.
—¿El bebé que estas esperando es mío? — sonríe abrazándolo fuertemente. El destino debía querer vernos juntos porque si no fuera así no nos hubiera dado un bebé.
—No, es mi hijo. — grito tratando de zafarse de mi agarre y lo hizo.
—No mientas, mi corazón reconoce que es mi bebé — toque su barriguita y él se estremeció inmediatamente apartando su mano de su vientre. Entonces note su mirada nerviosa, la cual me decía que en verdad el hijo de KiBum es mío. Sonreí.
—No es tuyo, es de Woohyun.
—KiBum no puedo creer que vayamos a tener un bebé. Entonces creo que debemos remodelar el apartamento…o mejor aún debemos conseguir una enorme casa, con un jardín extenso para que nuestro pequeño juegue. — empecé a caminar de un lado para otro, pensando en cómo debía ser la casa para nuestro bebé. Ya me lo imaginaba corriendo por ahí, un niño igualito a Key y a mí; debía ser un ángel.
Estaba tan sumergido en mis pensamientos de padre que no note cuando Key me detuvo y me dijo aquellas palabras que rompieron mis sueños.
—Jonghyun me voy a casar con Woohyun……