Era temprano por la mañana y apenas se podía sentir la briza silbar entre los árboles moviendo delicadamente sus hojas. Algunas hojas se desprendían suavemente y danzaban en el aire antes de llegar hasta la orilla de ese apacible lago donde dos jóvenes jugaban dentro de sus aguas, indistintos al mundo que los rodeaba. Ese lugar era uno de aquellos olvidados por la civilización, con una pequeña cabaña y muelle al frente de ella y ese precioso lago de cristalinas y apacibles aguas que incitaban a sumergirse en ellas.
A simple vista se podía ver lo romántico y enamorada que podrían estar la pareja. Los arcos que hacían al nadar en esas tranquilas aguas del lago le daban contorno a tan sublime escena y aunque el ardor en sus ojos le impedía observar con más detalle como sus cuerpos danzaban uno al compás del otro podía entender con toda claridad lo que era más que un hecho.
Pozo sus brazos rodeando los hombros con sutileza de la chica, atrayéndola a él con calidez, pero al levantar la vista lo pudo observar sentado en la orilla del muelle meciendo su pie en la superficie del lago. Su mirada azulina los miraba meticulosamente llena de un rencor e irá indescifrable.
--Que tanto observas dobe_ aparto a la chica que al escuchar el insulto se giró para observar a su compañero de equipo, el cual ya se había parado y les daba la espalda, caminando de nuevo rumbo a la aldea.
--Solo no quería interrumpir_ apenas giro la cabeza para observarlos y empezó a caminar_ Tsunade-sama nos ha mandado a hablar para una misión_ para después avanzar más rápido.
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El sonido de una rama al ser pisada a su espalda, le advirtió que no era el único que estaba en el bosque, y con un movimiento veloz coloco un kunai a nivel de su barbilla a modo de defensa y su mano atrás a listando lo que sería su próximo ataque. Tratando de inspeccionar con la mirada quien era la persona que se acercaba tan sigilosamente.
El atardecer ya había caído dejando embargado al cielo de una delicada tonalidad de azul marino, mientras que los arboles daban sombra a la persona que caminaba en dirección al rubio, con total aplomo sus pies atravesaban la vereda, hasta que la luz nocturna descubrió si identidad.
Con un mal gesto el rubio bajo el kunai y se giró sin esperar siquiera saber cuál era el porqué de que el otro lo buscara.
--Parece que te entusiasmaba más que fuera algún bandido_ comento socarronamente, mientras veía como el otro seguía recogiendo madera del suelo desatento a lo que el otro le decía, rodeado de árboles se posiciona justo en medio de donde las ramas de los arboles no pudieran taparlo, mirando atento como el otro caminaba un poco más a prisa para poder salir de la arboleda.
--Huyes como si algo malo hubieras hecho_ canturrio tratando de molestar aunque sea un mínimo al rubio el cual ni por enterado se daba haciendo exasperar aún más a su no tan calmado compañero de equipo_ No pensaba que te afectara tanto lo de Sakura_ debatió con ironía logrando por fin que el otro parara y girara a verlo, dejando caer todas las ramas que había recogido con esa mirada furibunda que pocos habían podido observar.
--A ti no te importa si me afecta o no… estas bien con ella ¿no? entonces que te importa lo que diga un estúpido como yo_ Sasuke se sorprendió de que fuera su respuesta tan cortante, que estuviera tan molesto por una insignificancia, aunque quisiera o no sabía de los sentimientos que albergaba el corazón del rubio por la kunoich.
--Sakura y yo no tenemos nada, ella y yo solo….
--Sabes que aquí no tienes que ocultar nada lo que vi en el lago fue suficiente para mí y me parece perfecto que hallas encontrado a la persona con la que puedas renacer tu clan, te felicito_ y sin más se giró para seguir recogiendo las ramas de la fogata, dejando un poco shokeado a Sasuke atrás, el cual después de algunos momentos camino hacia el campamento. Naruto suspiro con aflicción mientras veía el cielo volverse cada vez más oscuro.
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--Como te encuentras, estas bien_ regresando al campamento Sakura lo había abordado al instante, lo veía recaído y un poco distante, algo poco normal en él. Hasta el mismo Kakashi se había dado cuenta de lo callado que se había mantenido el rubio en esos momentos.
Acaricio su frente tratando de percibir algún incremento de temperatura en esa zona, caso que no era, ya que todos sus signos vitales se encontraban estables. Pero lo que era su semblante todavía no le acababa de gustar_ Oye Naruto acabo de terminar de cocinar quieres un poco_ su gesto reflejaba la negativa que quería dar pero los ojos de la chica lo obligaron a desistir de ello, pocas veces lo trataba tan bien y ella solo ella podía convencerlo de hacerlo tantas cosas tan estúpidas. Aun en contra de lo que él quería y valoraba.
Se acercó a la fogata y trato de relajar un poco más el semblante. Ella no merecía preocuparse de más por un idiota como él. Miro de soslayo hacia cierto moreno que afilaba con dedicación una de su mortales armas para después tratar de actuar de manera natural aunque sea por algunos momentos.
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--Naruto-kun puedo pasar_ al levantar la cortina busco con la mirada al rubio, el cual estaba sentado sobre su colchoneta alistándose para dormir. La chica lo miro por algunos instantes antes de decidirse entrar y sentarse de improvisto muy cerca del chico.
El rubio se sorprendió al ver esa actitud intrépida de su compañera y aún más al sentir como con delicadeza posaba las yemas de sus dedos en su espalda desnuda. La volteo a ver aún más sorprendido, buscando en los esmeraldas ojos la razón de ese gesto nada propio de ella.
--Naruto, necesito hablar contigo…..Yo en verdad no tengo nada con Sasuke_ sus ojos estaban embargados de una angustia sin igual y la forma con la que le temblaban sus manos le decían que era verdad lo que decía.
--Sakura eso… en estos momentos no importa, no estoy molesto por ello….solo….solo es una tontería mía no te preocupes…y si tú lo quieres no tienes por qué ocultarlo…en verdad_ le sonrió mientras depositaba un casto beso en la frente_ siempre te querré como mi amiga.
--Y si yo no quiero eso, si yo quiero algo más que solo ese cariño_ acerco lentamente su cara a la del rubio y le planto apenas un beso llegando solo a rosarle cuando el rubio hizo la cabeza para atrás moviéndola con negativa_ ¡¡¡Espera!!!_ apenas dijo no creyendo que lo que sucedía fuera verdad, esperando que solo fuera una mala broma.
--Sakura yo sé lo que quieres en realidad y simplemente ese no soy _la separo apenas de los hombros tratando de poder encontrar esos jades ojos_ No pierdas lo que has logrado solo para consolarme… no se…podría ser que él te brinde todo lo que quieras, te protegerá y….
--Pero ¿qué quieres tú?_ la chica lo miro seriamente y ante la atenta mirada del rubio se fue acercando a él hasta el punto de casi juntar sus bocas otra vez_ ¿A quién quieres en realidad?_ y en instantes sus esmeraldas ojos de momento se desvanecieron y unos perla quedaron en su lugar.
La sorpresa de repente embargo al rubio ahora, casi encima de él, se encontraba una pelinegra de piel de porcelana heredera del imperio Hyūga. Simplemente el rubio no lo podía creer estuvo a punto de tallarse los ojos si no fuera porque sus manos estuvieran apresadas por las finas de la chica_ Naruto yo puedo ser quien tú quieras, solo déjame serlo, deja que mis manos puedan acariciar tu piel, que mi boca pueda saborear tu dulce sabor_ se acercó hasta él, hasta el punto de sentarse en sus muslos, provocando al fin fricción entre sus cuerpos_ Que mi cuerpo vibre con tu ser.
La chica rodeo sus hombros y con un leve suspiro libero la ilusión con la que había tenido al rubio en esos momentos, ocultando la cara en su cuello para aunque sea mantener esos instantes cerca del rubio, antes de que se recuperara del shock.
Naruto sintió el cambio enfrente de él, su amplia espalda, su oscura cabellera y su inconfundible aroma.
--Yo no puedo quererla a ella, no quiero necesitarla, no quiero ser nada más que su compañero de equipo ¿porque no lo puedes entender de una vez?_ beso con delicadeza la nacarada piel del rubio, antes de separar su cara y contemplar los confusos ojos del rubio_ Naruto deja que viva aunque sea esta ilusión.
De un brinco el rubio se paró de donde había estado sentado, tratando de no agitarse tanto, su corazón estaba a mil y su nervioso no le ayudaba de mucho, giro sobre sus tobillos para poder ver que en verdad el chico estuviera ahí, que no fuera uno de sus tantos sueños. Pero lo único que pudo ver fue la cortina moviéndose por el aire. Corrió con velocidad hacia la puerta donde vio a Sasuke caminar con un paso un poco más lento a su tienda.
Lo dejaría todo así, maldición en verdad había sucedido, roso sus labios dudoso antes de empezar a correr hacia la tienda de Sasuke_ “No sé si este sea un ilusión, o solo un sueño lo que paso, pero no quiero que termine así”_ Sasuke giro sorprendido al ver como entraba el rubio agitado a su tienda y unía con voracidad sus labios, rosando con fuerza sus lenguas y tratando de no perder ninguna pisca de ese instante.
Sin preámbulos sus cuerpos dieron un golpe seco hacia el suelo y sus manos se empezaron a mover sobre el cuerpo del Uchiha sintiéndolo como se estremecían al sentirlas, dando suspiros por el contacto de sus labios lambiendo la blanca piel y de los roncos que eran sus gemidos.
--Sasuke dime que todo esto es verdad_ toco con desespero el pecho pálido del otro rosando con suavidad esos suaves botones que empezaban a tomar forma bajo el contacto de su lengua_ dime que no me vas a abandonar al despertar_ el moreno sintió que unas finas gotas llegaban a su pecho y resbalaban por su piel.
--Naruto te amo nunca te dejaría escapar_ tomo la mano del rubio entrelazando sus dedos y jalándolo para que sus bocas se volvieran a encontrar. Las gotas que salían de los ojos del rubio, le contaban sobre cuánto tiempo había estado escondiendo su amor. Tanto tiempo por verse no correspondidos pensaron que la felicidad del otro se encontraba en otra persona. Ahora se daban cuenta de lo estúpidos que eran.
El contacto entre ellos se intensificaba con los latidos de su corazón, se deseaban tanto, era el momento exacto de olvidarlo todo, de solo pensar en ellos, de solo sentir el vibrar de sus pieles. Sin vergüenza el rubio emitió un gemido de goce al sentir la mano del moreno acariciarlo en su parte más baja, no reprimiéndose de que alguien más lo pudiera escuchar.
--Naruto….te…. necesito_ sentía que se volvía loco y con cada caricia que sentía del rubio_ Quiero ser tuyo, quiero que tu piel vibre por mi piel.