Cap13# No sé qué es lo que siento
Había pasado una semana desde su encuentro con Yen, el rubio había mejorado su salud y todo parecía estar como antes, excepto para el moreno quien, por ratos, se perdía en los recuerdos que había olvidado que aquella casa guardaba
-¡tadaaaaan!- el rubio mostró su platillo orgullosamente, sonreía feliz de que su comida al fin tuviera una presentación “decente”
-hum- Kuro comenzó a comer distraídamente, aun absorto en quién sabe qué pensamientos
-¿¡eh!? P-pero…
-¿qué?- le miró confundido
-… n-no, nada- bajó la mirada, esperaba que Kurogane por lo menos lo notara, pero no fue así, era como si siempre estuviera distraído desdé aquel día, desde que vieron a… esa mujer. Fye se sentó frente al moreno, de pronto el hambre se la había ido, tan sólo miraba al ojis-rojos, éste ni lo notó…
-termine- dijo levantándose para dirigirse al cuarto
-…- el rubio suspiró con pesadez, se levantó y lavó los trastos, se preguntaba por qué aquella mujer había hecho tales estragos en el moreno.
Cuando subió al cuarto abrió la puerta lentamente, vio cómo el moreno observaba aquella fotografía… y a él no le gustaba, no le gustaba la actitud que ahora mostraba Kurogane, no le gustaba que el moreno pensara tanto en aquella mujer y mucho menos le gustaba aquella expresión en los ojos del mayor cundo lo hacía… no soportó seguir viendo aquella escena así que bajo a la sala y se recostó en el sillón, se sentía tan triste en esos momentos, tomó un cojín y se abrazó a él, le gustaría tanto que las cosas volvieran a ser como antes de encontrarse con esa mujer…
-…
Al día siguiente despertó en el mismo lugar, con la diferencia de que estaba cubierto con una manta, en la mesita había un sencillo desayuno pero que lucía muy apetecible, miró el reloj de la pared
-¡¡…!!- se sorprendió de lo tarde que era, Kurogane seguramente ya se había ido al trabajo… dejo caer de nuevo su cuerpo sobre el sillón
El teléfono comenzó a sonar, simplemente estiró el brazo para alcanzarlo
-diga- dijo algo aflojerado
-¿Kurogane?- dijo del otro lado la voz de una mujer
-¿eh? No, él no se encuentra
-oh, y ¿a qué hora podría encontrarlo?
-normalmente regresa hasta tarde- respondió inocentemente sin saber qué clase de persona era la que estaba del otro lado de la línea, sin cruzarle siquiera la idea de que podría, tal vez, tratarse de la misma persona que ahora le tiene tan intrigado
-de acuerdo, gracias- colgó
-¿uh?...- también colgó el teléfono, se estiró y se dispuso a comenzar sus deberes, claro, primero comería el desayuno que el moreno le preparó ^^
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Regrese del trabajo, estaba cansado pero ya me sentía más tranquilo.
-ya llegue- anuncie, el mocoso rubio dio un respingo y me miró angustiado -¿qué te pasa?
-nada ¿por?- dijo nerviosamente
-te ves… raro
-¿raro? ¿yo? ¿cómo?- hablaba atropellando sus palabras
-algo te pasa, dime qué es- pedí a la defensiva
-y-ya dije que n-no me pasa nada
-¿en verdad?- dije irónico
-serviré la cena- dijo yendo a la cocina, yo le seguí observando todos sus movimientos, algo me ocultaba, lo sé –d-deje de mirarme
-¿por qué?
-porque es molesto- dijo poniéndose más nervioso, sus manos temblaban ¿qué estaba pasando aquí?
-Fy…- el ruido del timbre me detuvo y casi al momento el ruido del cristal estrellándose contra el suelo resonó por toda la cocina, a Fye se le había resbalado el plato ya servido con comida que traía en las manos, le mire, estaba de espaldas a mí pero sabía que se había tensado
-…
-no te preocupes- le toque el hombro para que supiera que no me molestaría por el plato roto, realmente no es para tanto, ni tampoco es la primera vez que acaba con mi bajilla
-… mhm- asintió, el timbre volvió a sonar
-iré a…
-¡¡YO VOY!!
-¿eh?
-y-yo iré, ¿puede recoger eso por favor?- señalo en el piso, no me dio tiempo de negarme pues salió corriendo para ir a abrir la puerta.
Comencé a recoger la comida y los cristales ahí tirados. Cuando termine de limpiar mire mis manos -¡mierda!
Fui al lavado, me había cortado y no me había dado cuenta siquiera
-¿¡qué le pasó!?- preguntó el mocoso un tanto alarmado
-nada de cuidado ¿quién era?- pregunte terminando de lavarme las manos
-era número equivocado- dijo rápidamente
-¿qué?- pregunte confundido
-es decir ¡¡número de casa equivocado!! Sí, eso- dijo con cierto nerviosismo
-…- yo le miraba directo a la cara, él mantenía los ojos fuera de los míos
-…
-mientras limpiaba me di cuenta de que la comida tenía pinta comestible, felicidades
-…- me miró a los ojos, lentamente una sonrisa se formó en sus labios –gracias- sus mejillas se habían tornado levemente sonrojadas
-ahora comamos, quiero probarlo- dije sonriendo también y el rubio volvió a servir la comida
-etto, mañana ¿podríamos salir a alguna parte?
-¿eh?
-s-sí, vayamos a-al zoológico o a comer al parque- sus ojos se humedecieron
-si te llevo ¿me dirás lo que te pasa?- pregunte serio
-¡¡…!! N-no me pas…
-… ¡detesto que me mientan!- sin querer levante la voz
-…- él bajo la mirada –no miento- dijo con hilo de voz
-es como cuando te ocultaste de aquel hombre, hay cosas que yo debería saber ¿no te parece?- dije molesto
-…
-¿Fye?- llamé esperando una respuesta
-…
-…- al ver que no obtendría nada me levante y le deje solo, rayos y para el colmo mi estúpido orgullo me impidió probar su comida, me dirigí afuera, subí al auto y puse marcha a algún lugar dónde pudiera comer algo
…
Cuando regrese el mocoso ya estaba dormido en la cama, su respiración era tranquila y acompasada, lucía her… no, ¿qué estoy pensando? Me puse la ropa que usaba para dormir y muy despacio me metí a la cama para no despertarlo pero cuando me había introducido por completo me di cuenta de que me miraba
-…
-… ¿sabes? Que durmamos en la misma cama es extraño- dije, como respuesta solo recibí un parpadeo, sus ojos… tal vez fuese por la oscuridad de la habitación que no pude identificar su mirada
-…
-deberías volver a dormir- sugerí
-lo siento- susurró
-no debí presionarte, si algún día me quieres hablar sobre tu pasado, lo escuchare, si no, lo entenderé, pero, si tienes algún problema me gustaría ayudarte, así que ¡¡…!!- no pude terminar cuando él se me había lanzado ocultando su rostro en mi pecho y estrujando mi playera, le siguió un estremecimiento y luego un leve sollozo
-…
-…
Una de mis manos fue hasta su espalda, la otra fue a su cabeza acariciando sus cabellos, intentando consolarle
-me gustaría snf… me gustaría decírselo snf, p-pero… yo tampoco sé qué me pasa snf… lo siento, lo siento, snf… l-lo sien…
-shh, todo está bien- susurre apretándolo más a mi cuerpo –todo está bien
-snf… ghm… snf
Pasamos un rato así, él estremeciéndose y yo tratando de confortarle. Cuando se tranquilizó un poco pasamos otro rato aun abrazados, hasta que…
-Fye, ¿podrías…?
-¿¿…??
-me gustaría cambiarme
-¿ah?
-está muy húmeda- dije tomando mi playera
-¡¡l-lo siento mucho!!- se apartó apenado
Me incorpore, me quite la playera y busque una limpia y seca
-gulp, supongo que está húmeda no solo de lágrimas- dije limpiando mi pecho que también se sentía húmedo de lágrimas y… fluidos nasales o.O
-p-perdón o///o –dijo avergonzado
-…- suspire mientras me ponía la nueva playera y volví a recostarme
-b-buenas noches- me dijo cansado
-buenas noches- le susurre con una sonrisa, él me sonrió y de apoco a poco comenzó a cerrar los ojos… para que negarlo, es… hermoso…
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Al día siguiente me levante y me dirigí a darme un baño, me encontraba desenjabonándome cuando escuche la puerta abrirse seguida de un grito ahogado y una disculpa apresurada de parte del rubio, luego la puerta volvió a cerrarse…
Cuando salí lo hice con una toalla en la cintura y otra secándome la cabeza, el cuarto estaba solo por lo que me quite la toalla para ponerme un bóxer, en eso la puerta de la habitación se abrió
-¡ahh!- de nuevo sólo alcance a escuchar la puerta cerrarse, al parecer el rubio ya me vio dos veces desnudo en menos de minutos
-ya puedes pasar- le grite cuando termine de ponerme mi ropa interior
-s-sí- entró, sus mejillas estaban rojas, cuando me vio de nuevo toda su cara se tornó de ese color -¡sigue desnudo!- dijo desviando la mirada
-no estoy desnudo, además hoy ya me viste dos veces, andas muy acosador el día de hoy- dije pícaramente por el puro placer de molestarlo
-¡c-cállese! Y-yo O///O …e-el desayuno está listo, m-me iré a bañar
Dijo y se metió rápidamente al baño, yo continúe cambiándome. Apenas termine de ponerme el pantalón el teléfono de la sala comenzó a sonar así que baje para contestar, lo tome descolgándolo pero antes de poder llevarlo a mí oreja
-¡¡¡espera!!!
-¡auch!- me pegue cuando termine en el suelo con el mocoso arriba de mí
-uff- con alivio observó el cable del teléfono en sus manos, ¿lo había desconectado?
-¿y a ti qué te pasa?- pregunte, mira que lanzárseme encima así de la nada para impedir que conteste el teléfono
-¡eh! y-yo…- el rubio estaba húmedo, envuelto sólo con una toalla, siento como la piel de mi pecho (que seguía desnuda) de nuevo se mojaba –etto, des-desde hace mucho llaman preguntando por un tipo, nú-número equivocado, ya se los dije pero siguen llamando, al parecer debe algo
-oh, ya veo
-mhm
-¿y vas a bajarte de mí?
-¿¡eehhhh!? ¡¡lo siento!!- se apartó de prisa, tan de prisa que no notó que su toalla se había atorado en una de mis piernas y…
-¡¡¡…!!!
-…- yo termine quedándome con la toalla
-¡¡ahh!!- se abrazó así mismo y se puso en una posición que cubriera lo mejor posible su desnudes -¡¡devuélvamela!!- dijo sonrojado
-no tienes por qué avergonzarte, tengo lo mismo que tú- le repetí
-¡¡démela!!- pidió aun cubriéndose
Sonreí -no
-¿¡¡¡…!!!?