Cap 12
(Días después del último Cap)
Estaba yo en la escuela, el castaño como siempre no cambiaba su máscara de felicidad, ese día estaba algo preocupada, puesto que en la mañana Ardiett me dijo que se había encontrado con Yujo en la calle hace un tiempo y habían quedado en verse en la feria que se abrió en la ciudad hace poco, cuando Edric se enteró no reacciono de forma negativa, incluso decidió acompañar al su pequeño novio, las cosas volvían a estar como antes de su discusión, pero yo solo quiero que sean como antes de que llegaran sus primos a arruinarlo todo, había un aire de confianza y todo era increíblemente más sencillo.
yo obviamente me cole al asunto que tenían esos chicos entre manos, de forma que adelantando el tiempo hasta el día en que una vez más saldríamos los cinco, puesto que Cecidit no podía faltar ni aunque el mundo se estuviese acabando, creí que todo se repetiría como era de costumbre, pero esta ocasión salí tan decepcionada como enojada, Edric actuó de manera más fría, ni con todo su carisma Cecidit fue capaz de convencerlo, su actitud rosaba la descortesía, mas Ardiett, ese niño era otro cuento, su primo odioso y él parecían mejores amigos de la infancia, aún más que eso, las cercanía excesiva e insinuaciones sinuosas eran atrozmente resaltantes, de manera que yo me encargue de ser la que hablara con el peliblanco todo el tiempo, tratando de distraerlo, Ardiett jamás planeo una “estrategia” para evitar que las cosas salieran mal, el planeo una venganza, maldito mocoso inmaduro.
Es por eso que nos encontrábamos repitiendo la rutina molesta y aburrida de los problemas por tercera vez, joder, ¿Qué le pasaba por la cabeza? ¿no conocen otra manera de atacarse? Al final no pudieron hacer nada para evitar los malos sentimientos, tampoco fueron lo suficientemente fuerte como para hablar de ellos, ¿pude haber hecho algo?
En algún punto de la tortuosa visita en grupo a la feria Ardiett y Yujo desaparecieron entre la multitud, saque el celular con rapidez, y pude ver que el segundo mencionado jalaba a su primo entre la gente a algún lugar, mientras Edric y Cecidit intentaban encontrarlos en las cercanías yo solo me tragaba la rabia, tenía que ir por ellos, pero tal vez lo notarían si yo también desaparecía, aun así, si yo también desaprecia Edric estaría menos preocupado y eso era algo beneficioso, cuando iba a correr hacia donde la cámara me mostraba que estaban apareció Edric tras mío, viendo mi celular y con una cara muy confundida y graciosa.
“¿Qué es eso?” pregunto inocente dando a pensar que podría mentirle y zafarme de ese problemita con facilidad.
“jajajaja no es nada, solo una aplicación rara japonesa que encontré por ahí, mmm iré a buscar a Ardiett si no te molesta” señale la dirección a la que debía dirigirme esperando que el creyera todo, pero puso una mano en mi hombro.
“¿no me digas que pusiste cámaras en la ropa de Ardiett? Interesante, déjame ver donde están” pero no, la gente no es tan tonta como suele parecerlo, puede que a veces esa sea su intención para que la gente los subestime y ganar más fácilmente.
“no, ¿Qué dices? ¿Cómo podría yo hacer algo así?” intente actuar sorprendida, pero era de alguna manera tarde, ni el me creía y solo tomo el celular y salió corriendo a encontrar al menor, lo seguí, aunque él era más rápido, lo alcance tras un rato en la entrada de un callejón vacío, donde ambas personas que estábamos buscando se besaban sin más ni más, Ardiett ni se dio el lujo de rechazar al otro, es más, rodeaba el cuello de Yujo con sus brazos, aunque veía lagrimas caer de sus mejillas.
Edric camino lentamente hacia ellos, tomo las ropas de Yujo lo separo y lo golpeo, luego se fue de allí molesto, yo mire a Ardiett esperando una explicación, pero también esperaba que frunciera el ceño y se fuera de ahí sin decir nada, lo que hizo, pues lo conozco, luego de que quedamos solo Yujo y yo ahí el empezó a reírse, él sabía que había ganado, yo me acerque a él.
“¿ya estas feliz?”
“claro que estoy feliz, pero el trabajo aún no ha terminado” sonrió
“en eso te equivocas, ahora todo ha terminado para ti, no quiero que vuelvas a aparecer cerca de ese par”
“está bien, siempre y cuando tú me hagas compañía muy lejos de ellos dos, cuando les enseñe todas las grabaciones vergonzosas que tengo”
“si, como no, es más, muéstrales todo, cada detalle, oblígalos a ver cada segundo de grabación que poseas, pero hazlo única y solamente sobre mi cadáver” estaba a centímetros de su rostro, era un poco más alto que yo y lo miraba de manera amenazante.
“¿hablas enserio?” se buró de mí, tenía seguridad en que me ganaría.
“yo siempre hablo enserio” cuando estaba a punto de retroceder unos pasos y asestarle un golpe, la mano de Cecidit en mi hombro me detuvo, nos había localizado, no importaba, ya verían que en el tiempo en el cual ellos estaban perdidos yo entrene como nadie para poder tener un chance de acabar con ambos.
(Tras una sangrienta, horrible y reñida luchas, de puños y patadas voladoras…. Los hermanos terminaron en una esquina del callejón tirados, hechos pomada, con narices sangrantes y ojos morados, Sol se marchaba del lugar para dejarlos morir en paz mientras se sacudida el polvo de la ropa)
No pude encontrar a ninguno de los chicos que quería ver ahora, por lo que con mucha frustración me fui a casa, lo primero que hice como rutuna sagrada, fue sentarme en el ordenador y ver donde estaban, por mi suerte estaban en casa de Ardiett, pero por mi desgracia algo se me había escapado, mi celular, Edric se lo había llevado y ahora yo estaba en problemas serios de verdad.
Lo que hice fue esperar a que terminaran la charla y Edric se fuera de allí para revisar la grabación desde el momento en que se encontraron, cuando le di al retroceso de la grabación en los archivos vi que el primero en llegar fue Edric en su auto, durante el tiempo que espero a Ardiett, reviso mi celular, descubrió todo según parece, cuando el dueño de la casa se presentó en la misma, no parecía extrañado de la presencia de su invitado, se conocían lo suficiente como para predecir sus movimientos.
“creo que alguien me debe una explicación” le dijo Edric
“no tengo por qué explicarte nada, yo no te exigí nada ese día tampoco, tu ahora no tienes derecho”
“bueno, creo que estoy seguro de aquella vez yo no tenia a Cecidit abrazada a mi”
“¿eso importa?”
“a mi e importa, las intenciones de ambos estaban claras desde el inicio, por lo que si te encontraba de la misma manera… claro sin colgarte de Yujo, no me hubiese molestado en lo absoluto, pero ahora sí que estoy molesto”
“que pena, es triste estar molesto y que a nadie le importe, porque créeme que no me importa”
“¿en qué momento te enfureciste tanto? Si querías que me arrodillase a llorar y pedirte perdón mil veces tenías que decirlo, créeme que todo este tiempo sentí que debía compensarte de alguna manera, que me sentí culpable”
“eso ya no importa”
“¿es que acaso nada te importa?”
“Tal vez, tal vez me canse de importarme por estas cosas…”
“¿Por qué fingiste todo este tiempo si te había molestado? No logro entenderlo, en ningún momento…”
“te lo dije, dije que solo fue esa vez, que deje que se me pasaran los celos, pero luego… no se si aumentaron al final de cuentas, vivía aterrorizado de perderte y siempre que no estabas yo… siempre que me hallaba solo yo….”
“Ardiett, yo enserio lo lamento, si hubiese algo que pudiese hacer…”
“¡NO! No te atrevas a pedir perdón, ¿no vez que yo soy el malo ahora? ¿Por qué no te enojas conmigo? No quería vengarme de ti, quería recibir mi merecido por haberme molestado contigo un tiempo, tal vez jamás lo notaste, pero me costaba ocultar que en realidad solo quería gritar y… y sabía que era injustificado porque tu jamás tuviste la culpa”
“yo no voy a enojarme contigo, solo quiero que las cosas sean como antes”
“las cosas jamás serán como antes… yo… ahora necesito estar solo”
“digite alguna vez que no volverías a pedirme que te deje solo”
“era en sentido figurado, idiota”
“está bien, si es lo que quieres, pero antes… tengo el celular de Sol… me lo lleve por accidente y ahora tú debes devolvérselo, lamento cargarte estos problemas, te amo, nos vemos mañana, tal vez…” y luego de darle mi celular salido de la casa con una sonrisa sínica en los labios, ¿estaría molesto conmigo? ¿Qué pasaba por su mente en ese momento? Lo vi subir al auto, bajar cuando estuvo en su departamento y luego no tuve más noticias de él, siempre quise poner cámaras en su casa, jamás se me presento la oportunidad, jamás busque tenerla si somos más específicos, ¿Cuántos sueños más serian arrojados a un poso? Mientras sean tontos sueños y promesas mías está bien, pero los sueños y promesas que ese par se hicieron, sería muy triste que terminaran olvidados…
En su casa, Ardiett no hizo más que sentarse frente a su computadora a matar el tiempo, pero tras aburrirse tomo mi celular, él era el único ser humano que tenía mi contraseña, desbloqueo el aparato y empezó a ver su contenido, se paseó por mis juegos, mensajes, mis redes sociales, terminando en la rara aplicación que tenía contacto con las cámaras, pensé en apagar mi computadora, pero antes de poder desconectarla él ya había visto todo, incluso se vio a si mismo revisando el celular, quedo atónito.
“¿hola?” dijo, seguramente para ver si las cámaras tenían audio, al escucharse a si mismo a través del altavoz del teléfono supo que sí.
“¿sol, me escuchas?” me quede petrificada, era horriblemente aterrador, ME HABIAN PILLADO CON LAS MANOS EN LA MASA Y FUE CULPA MIA.
Estando ahí quieta no sabía que más hacer, solo desconecte la computadora, dando por terminada la vigilancia de ese día, seguramente también de días venideros…. ¿Cuánta mala suerte podía tener?