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La Puerta Del Frente por tomateconlechuga

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Notas del capitulo:

Corazón roto, ganas de cortarme con un cuchillo de mantequilla, de tirarme de un edificio... Peeeero! intenté hacer esto con mucho amor y cariño :c 

    Bueno, me levanto tranquilamente de la cama, con música celestial, pajarillos cantando en mi ventana, con el sol entrando suavemente, dándome la bienvenida y deseándome un lindo, lindo día para-

  Sí, sí, la realidad no es esa… digamos que lo que pasó esta mañana fue más o menos…

 

-¡¿Cómo no sabes qué ponerte?!-Me grita Anais, sacando y sacando prenda tras prenda de ropa de mi armario, es prácticamente una tormenta de cosas negras, como siempre. Yo, en cambio, bastante tranquila, me tomo mi tecito caliente, echándole una mirada a la ventana, que muestra un cielo medianamente despejado, pero siento el frío del aire hasta mis huesos.

-Creo que tomaré otro tecito…

-¡¿Sabes qué hora es?!-Se da vuelta con ojos de loca hacia mí.

-Eh… ¿la hora de otro tecito?

-¡Ve a tomar una ducha!

-Anais, vamos a una tienda de mascotas para comprar un gato… sé que es una cita, pero-

-¡Una ducha!

-¡La última vez casi muero haciéndolo!

-¡Ve!

 

  Y pues, ahora estoy duchándome, con agua tibia y tranquilamente. Felicidades Gabriela, no te romperás la pierna hoy tratando de asearte. Mi celular vibra, interrumpiendo la música y apuro un poco la ducha, cortando el paso del agua.

  Oh, wow, un mensaje de Katherine: “Aún sigues en una pieza? n.n” Aaaaw, si es tan linda, de una retorcida forma se preocupa por mí, supongo que con la experiencia de la última vez, más vale prevenir que lamentar.

  “No te molesta que sólo vaya mi mitad izquierda, cierto? Es una larga historia D:” Y dejo el celular a un lado, mientras camino a mi habitación, con la toalla rodeándome el cuerpo, y ahí está Anais, mezclando y combinando toda la ropa negra que pueda existir en este mundo, en serio, si vendiera mis cosas, sería el emporio de lo negro.

 

-Anais, quiero… ya sabes, ropa-Le digo poniéndome unas bragas, mientras busco un brasier.

-¿En qué momento te dejaron comprar tantas cosas negras?, ¿ni siquiera algo… verde?

-Mmmh…-Me abrocho el brasier-Creo que el año pasado, Emily me regaló una blusa verde… ¿recuerdas a Emily?

-Aaah… ¿La niña que te seguía a todos lados?, ¿te regaló una blusa?

-Sí… ya ves porque esa blusa desapareció misteriosamente…-Me acerco a la montaña de ropa-Anais, tengo frío, me pondré estos lindos pantalones y esta linda blusa y ya. De todas formas, debería estar saliendo en unos quince minutos y creo que… ya sabes, quiero m privacidad, así que…-Le hago señas con mis manos-Estaré bien, te llamaré cuando me caiga y me tuerza el brazo o algo por el estilo.

 

 Y después de darse vuelta en mi dirección muchas veces, abandonó mi habitación, mientras me ponía los pantalones y trataba de ponerme las converse, reviso mi celular con el nuevo mensaje: “Preferiría la derecha, ésa puede enseñarme matemática D:” Rayos, ella es tan linda, okey, sécate el lindo cabello por favor, porque en quince minutos irás a una tienda de mascotas con tu linda, linda chica francesa.

 

  Quince minutos después…

 

-¿No vamos a la tienda de mascotas?-Le pregunto mientras ella se pasea por su sala de estar, echando las llaves en su bolsillo de su pantalón azul marino, ¿les mencioné que se ve hermosa?

-Eh, no de inmediato, ¿recuerdas que te dije que fuéramos al Parque Intercomunal primero? Cerca de ahí hay una pizzería, no sé si a ustedes los ingleses les guste la pizza-¿Eso es una especie de insulto?-Ya sabes, es muy grasienta y esas cosas y se come con las manos y nada más y-

-Oye-Empiezo a reírme-Vengo de Europa, no de otro planeta, sé lo que es una pizza y me gustan muchos, sobre todo cuando las yemas de los dedos se me llenan de esa asquerosa grasa, y el queso se estira y estira y…-Me da una especie de arcada-Bueno sí, es un poco asqueroso, pero el sabor es rico. Así que… ¿qué esperamos?

-Ah… debo ir a mi chanchito, así que puedes esperar aquí, siéntete cómoda.

-¿Tu qué?-¿El qué?-¿Eso se come?

-Se ríe-A mi alcancía, me hubiese gustado adoptar un gatito en vez de comprarlo en una tienda, pero papá prefería eso, así que quiero pagarlo con mis ahorros. También, para pagar la comida y el taxi devuelta.

-Creo que ya pasamos por esto-Suspiro, aún de pie-En serio, yo pago la comida.

-Ah… hablaremos esto luego-Y desaparece por el pasillo.

 

  Pues, sin sentarme aún, comienzo a recorrer el mueble de color negro, lleno de fotografías. Aaaaw, tan linda de pequeña, al ladito de Catalina, probablemente en el jardín de niños. Aaaaw, y con su papá cuando se graduó de primaria, si se ve tan linda. Aaaaw, y su primer día en el Instituto, con su típico uniforme, al lado de Catalina, de nuevo. Paso de largo de las fotos y veo un par de muñequitos con los que comienzo a jugar, ¡ah, mi infancia!

 

-¿Divertida?

-¡Ah!-Se me cae una muñeca y la recojo rápidamente, tratando de ponerla donde estaba. Aquí no pasó nada. Catalina me mira desde la cocina cruzándose de brazos, con una expresión divertida-Yo, lo siento…

-Ah, está bien-Le resta importancia-¿Y… cómo han estado las cosas?

-Bien, supongo, la viejita de física me odia, pero en todo lo demás tengo buenas calificaciones, ¿y a ti?

-Me refería a mi hermana.

-Buen trabajo captando indirectas-Ooooh, entiendo. Yo, eh… bien, supongo, ayer la ayudé con matemática y está mejorando.

-Me refería a cómo va su creciente amor.

-¡Dios, dilo desde un principio!-Estallo-Yo… ¿bien?

-“¿Bien?”-Repite arqueando una ceja-¿Sólo… bien?

-Eh… ¿genial?, ¿fenomenal?, ¿ardiente?-Me lanza una mirada amenazante-Olvida eso, nunca dije eso, olvida eso… Esto sería más fácil si, eh… cómo decirlo… ¿ustedes hablan… de… mí?-Y me apunto con el índice en el pecho.

-¿De ti? Naaah, nunca-Dice restándole importancia… de nuevo.

-Me le quedo mirando-¿Escuchas eso…? Es el sonido de mi corazón rompiéndose de nuevo.

-Ay, es broma, ¿no tienes sentido del humor?-Me gustaría tener un arma para matar a esta tipa…-Bien, sí, habla de ti… aunque no frente a papá, prefiere contarme las maravillosas cosas que haces con ella, hasta cuando intento estudiar, es como una radio averiada, siempre en la misma estación… tú-Y me apunta.

-Creo que entiendo por qué te llevas tan bien con Anais… Me refiero, quiero decir… no vas a decirme qué dice, ¿verdad?

-Ay, por supuesto que no, eso arruinaría la magia, ¿a que sí?-Me dice divertida-De todas formas ya no alcancé, porque Kathy vendrá en tres, dos, uno…

-¡Estoy lista!, lo siento, ¿nos vamos?-Dice apareciendo por el pasillo, ¿¡se ponen de acuerdo!?, it’s a trap!?

-Ah… seguro-me acerco a la puerta, me despido de Catalina con un ademán de mi manito y le abro la puerta a Katherine-Después de usted, mi chica francesa.

-Ay, si se sonroja y yo muero-Gracias… Pues, ¿a la pizzería?

-¡A la pizzería!   

 

 

  Odio la pizzería. El olor a grasa, el bullicio, los pedazos de pizza en las mesas, restos de comida en el suelo… ése desagradable olor a salsa de tomate… Katherine Castillo, ¿por qué e de torturarme de esta forma?

  Y, dándole una mordida a mi pedazo, mientras estiro, estiro, estiro y… ah, estiro mis brazos, el queso se estira, y estira, y estira, ¡Dios maldiga el queso derretido! Y mis dedos, llenos de salsa roja y grasa entremezclándose. Por favor, ¡acaben con esta tortura!

 

 

-Ah, grasa, grasa, grasa, grasa, grasa…-Digo, limpiándome apresuradamente los dedos con la servilleta-Grasa, grasa, grasa, grasa, grasa, grasa… ¡Agh, grasa! Maldita cosa, ¡es tan difícil de quitar!, ¡maldita composición química impermeable! Grasa, grasa, grasa…-Mientras me limpio los dedos con el ceño fruncido, veo cómo ella, apoyándose con el codo en la mesa y dándole un sorbo a su coca-cola, me mira divertida-¿Qué sucede?

-Sabía que reaccionarías así si te llevaba a comer pizza…-Dice, dándole un mordisco a la suya, como si fuese lo más normal del mundo.

-¿Quieres decir… que me trajiste aquí sólo para ver cómo sufro por la grasa en mis dedos?-Se los muestro, reprobatoriamente-¡Qué cruel chica francesa!

-Hace un sonido reprobatorio, aún con comida en la boca, tapándosela con un gesto delicado y… muero-Tenía ganas de comer pizza hace mucho, ¡es muy rica!

-¡Es grasosa!

-Okey, okey…-Dice, comiéndose el último pedazo-¿Qué comida te gusta?, así puedo invitarte a algo menos… grasoso.

-Jaja… qué linda, Gabriela te invitará a comer la próxima vez, de hecho, algún día podría invitarte a mi apartamento, encargar pizza y ver una película, luego quedarnos dormidas y…-La ampolleta se enciende en mi cabeza-¡Una pijamada de dos!-Nadie le cuente mis secretas intenciones, es un secreto que ella no debe saber-Por supuesto,  no creo que haya problema, quiero decir… vivimos a tres pasos de distancia, tal vez cinco, ya sabes, eres tan pequeña que… ¡Auch!-Y… un puntapié me llega por debajo de la mesa. De acuerdo, lo merecía-Pero, ya sabes… hasta puede venir tu nuevo gatito si quieres. Hablando de eso, ¿tienes una idea de qué raza será?

-Mmh…-Se vuelve a apoyar con su codo-No conozco muchas, sólo sé que me gustaría con un pelaje pardo, ¡o tal vez negro! Así combinaría contigo-Le echa una ojeada a mi ropa-Para tu cumpleaños, ¿me dejarías regalarte algo de distinto color?

-Seguro, siempre me han gustado los calcetines de color verde-Digo, acabando mi bebida-O bragas de color blanco, soy flexible. Pero ando falta de brasieres, por si te interesa, soy copa c.

-Me refería…-Dice pestañeando-A playeras, blusas, pantalones…

-Oooooh, eso tiene más sentido-Rayos, ¿soy la única lujuriosa aquí?

 

-¡Yo también!-Dice mi voz lesbiana.

-Sí que lo eres, ahora no me arruines esta cita dándome tus extraños y lascivos consejos, esta vez quiero que sea sin sorpresas, sin verla en brasier, ni sangrado de nariz, quiero que sea una cita tierna.

 

 

-Bueno, mi cumpleaños es en un mes, así que tienes tiempo para pensarlo…-Saco mi billetera del bolsillo-Ahora, vamos al parque, déjame pagar… ¿dónde rayos…?-Y comienzo a girar mi cabeza en todas las direcciones, encontrándola en la caja, sacando su dinero del bolsito-Pero Dios…-Y voy corriendo allá, interponiendo su mano con el dinero con la de la dependiente-Eh… sí, verá… ella no pagará, yo lo haré-Y le entrego el dinero, mientras la dependiente nos mira confundida.

-Eh, no, no…-Dice Katherine adelantándose-Yo pagaré…-Y le entrega su dinero. Mientras la dependiente nos mira aún más confundida.

-Jaja, ya en serio, tome mi dinero-Y se lo paso.

-No, el mío.

-Yo soy mayor, tome el mío.

-Yo se lo ofrecí primero.

-Yo nací primero.

-¡¿Qué tiene que ver?!

-Nada, sólo te distraje.

-¡Yo!

-¡Que yo!

 

  Media hora después ._.

 

-¡¿Cómo pudo recibir tu dinero y no el mío?!-Dice molesta, caminando muy rápido por los senderos del gran, graaan Parque Intercomunal.

-Tal vez porque le ofrecí quedarse con el cambio…-Digo por la bajo. Nunca creí tener que correr para igualarla, sí que camina rápido cuando está enojada.  La alcanzo y camino junto a ella a paso veloz-Y… cambiando de tema, antes que me claves un cuchillo en el cuello, ¿tienes una idea de qué disfrazarte para la fiesta?

-Mmmh…-Mira hacia arriba, como si buscara una respuesta en el cielo y camina a paso más lento-No, no he pensado en alguno… ¿Qué tal…?

-¿Duende?-Inquiero-O quizá un gnomo, o un enano, o quizá…-Pero me detengo al ver que de sus ojos literalmente salen dos llamas de enojoso fuego-Me callo…

-Si vas disfrazada de vampiro… ¿por qué no vamos a juego?-Se aferra a mi brazo y se acurruca junto a mí mientras nos dirigimos a unas bancas, casi como un gatito.

-¿Te refieres… yo de vampiro y tú de…?-Lamparita dentro de mi cabeza mode: on-¡Uuuuuh! ¡Ya sé, ya sé!-Salto emocionada-¡Sé mi reina vampiresa!, ¡Soy un vampiro y tú una reina vampiresa! ¡Es perfecto! Llevarás un vestido negro y largo, que mientras caminas una parte llegará al suelo, llevarás una capa encima y, lo más importante-La miro sonriente-Esos lindos y hermosos, sensuales, perfectos colmillos que ya de por sí tienes… ¿estás segura de que no eres un vampiro de verdad?      

-Mmh…-Sonríe pícara y se separa, comenzando a dar vueltas alrededor-Tal vez, ¿quieres averiguarlo?

-¿Implica que me muerdas el cuello para tener un orgasmo?-La lujuria siempre ha sido un dulce pecado…

-Se ríe-Era broma, estaba pensando en disfrazarme de un murciélago, a juego con lo del vampiro.

-¿Murciélago sexy?

-O de un conejo.

-¿Conejito sexy?

-O de un gatito.

-¿Gatito sexy?

-O de una hechicera.

-¿Harry Potter y la hechicera sexy?

-¡Eres tan pervertida!

-Pero… ¿sexy?-Y con una inercia increíble, me muerdo el labio.

 

  Se pone rojita y mi botón de autodestrucción imaginario es activado imaginariamente por una mano imaginaria con la intención imaginaria de decir… “Dios, me la comería viva y hasta sin sal”… imaginen lo mucho que eso me gusta. Es tan linda, no puede ni disimularlo porque es tan, pero tan blanca de piel, que no dudaría de que realmente es un vampiro. Tal vez no proyecte sombra… o no se refleje en los espejos, tal vez necesite permiso para entrar en lugares ajenos… Y esos colmillitos que tiene, por Dios… es que, ¿se la pueden imaginar mordiendo mi cuello con esas cosas? Quiero decir, ¿pueden imaginarse la marca?, ¿pueden imaginarse…?

 

-¿Te está sangrando la nariz…?-Me pregunta pasando un dedo por debajo de ella.

-¿Qué? ¡Demonios!-Y me doy vuelta, poniendo algodoncitos en mi nariz-¡Perfecto!-Digo, con esas cosas que no me dejan respirar.

-Aún no entiendo por qué te pasa eso… Sabes, Alicia planea disfrazarse de un fantasma para ésa fiesta, le pregunté ayer en la noche, ¿te la imaginas?

-¿Con… una sábana blanca con agujeritos para los ojos? Sí, un poco, después de la cabeza de cerdo, me esperaría cualquier cosa. Te has  puesto a pensar en lo que ella quiere estudiar…-Pregunto reflexionando un poco, la verdad no sé mucho sobre Alicia además de lo del terror y esas cosas…

-Una vez se lo pregunté y… bueno, salió corriendo. Nos conocemos desde el año pasado, pero esa es una de las pocas cosas que no me ha dicho, es un poco raro… De todas formas, ¿qué hay de ti?-Pregunta intrigada, mientras nos sentamos en una banquita a la sombra de un árbol.

-¿De mí qué?-Pregunto confundida-¿Ponnys?

-Que qué quieres estudiar cuando termines la escuela…

-Aaaaah, tiene sentido. Eeh… eso es… un… secreto-Digo mirando hacia otra parte, evitando su mirada interrogativa.

 

  No preguntes por qué, no preguntes por qué, hablemos de otra cosa, hablemos de ponnys. ¿Te gustan los ponnys, Gabriela? ¡Oh, gracias cómoda banca en la que estamos sentada. Sí, me gustan los ponnys. ¿Quieres ver ponnys, Gabrielita? ¡Sí, me encantaría, linda banca! Genial, entonces entra a esa furgone-

 

-¿Y por qué es un secreto?-Puta vida, ¿es que el universo me odia?

 

-No-Me responde el universo-La verdad es que yo no odio a nadie, ni molesto a nadie, no me detengo por nadie, sólo sigo mi camino y-

-Ay, cállate, maldito existencialista.

 

 

  La pregunta del siglo que es demasiado complicada de dar. Sobre todo cuando se la dije a un niño una vez y él comenzó a reírse y reírse como un idiota. Y desde entonces no le cuento a nadie, nadie… nadie… nadie… nadie… nadie…

 

-Le dio el cortocircuito otra vez-Dice mi voz lesbiana, apareciendo en mi hombro izquierdo-¿Deberíamos golpearla para que se le pase?

-No.-Dice mi consciencia, en mi hombro derecho-Eso sería un poco descontrolado.

-Agh, consciencias y su sentido de lo correcto…

-Voces lesbianas y su tendencia ninfómana…

 

*Y mientras tanto*

 

  Nadie… nadie… nadie y… no, creo que a nadie. Excepto a Anais, pero eso fue sólo un mero accidente. Ni siquiera es que sea algo tonto, es sólo un trauma por ése maldito idiota.

 

-¿En qué piensas que siempre te demoras más de cinco minutos en volver a la realidad?-Me pregunta, mientras me zamarrea.

-Un poco de todo; ponnys, la inmortalidad del cangrejo, pienso y luego existo… y por supuesto, en lo linda que eres y que deberías disfrazarte de mi reina vampiresa, ¡vamos, será genial!

-Lo haré si me dices qué quieres ser cuando grande.

-Un ponny rosadito con alas que escupe fuego. ¡Reina vampiresa el 31 de octubre! ¡Yeah!

-¡Aish!-Y se levanta y comienza a caminar a otra parte, ¡mujeres!

 

  Es que, ¡Dios! ¿Por qué se enoja cuando no consigue lo que quiere? ¿Qué pasaría si un día de la nada me sale con que quiere a un dinosaurio?, ¿acaso tengo que construir una máquina del tiempo para conseguírselo? ¡Nooo! Porque no se puede tener de todo en esta vida. Cariño, yo te quiero en bandeja de plata, desnuda y con jarabe de miel en tu pecho, pero no ando haciendo pucheros y yéndome sólo porque sé que me demandarían por violadora fetichista. Prioridades, en serio.   

  Pero claaaro, como Gabriela es la mayor, nunca puede reclamar por nada. O sea, esta niña me coquetea como Pedro por su casa y yo no puedo inflar mis cachetes, o sonrojarme ni parecer la inocencia pura, ¿verdad? Nooo, a mí sólo me sangra la nariz, y tengo una ninfómana en mi hombro y una consciencia en el otro, ¿podría el mundo ser más raro?

 

-Vamos, chica francesa-La tomo del bracito, como si fuésemos abuelitas-Sólo porque me dijeras que querías ser doctora, no significa que automáticamente deba decirte qué quiero estudiar-Jaque mate ateos.

-Pero es como si no quisieras que te conozca-Y, como si se enojase mucho más, trata de avanzar, pero Gabriela, hábilmente, utilizando sus sentidos ninjas, la abraza por detrás, es que es tan irresistible-¿Por qué haces eso?

-Porque…es… irresistible. De todas formas, no hay mucho que saber de mí: Gabriela Wotton, 16 años, en un mes cumplo 17, inglesa, loca, lesbiana, en vez de tener un ángel y un demonio en mis hombros tengo a mi consciencia y a una voz lesbiana, te quiero comer viva y… ah… ¿quiero un ponny? ¡Muy bien, tu turno!

-Se ríe, caminamos en esa extraña posición-Eh… Katherine Castillo, 13 años, en dos meses cumplo 14, ascendencia francesa, al parecer tierna, eres muy tierna y… quiero un gatito, te toca.

-Jm… Al parecer Anais mató a mi gato, yo maté a su tortuga, me comí sus dulces y… eh… me visto como gótica.

-Ah… Antes, Catalina y yo teníamos un pececito dorado, y cuando íbamos a limpiar la pecera, lo dejamos al aire y, bueno…

-Ow… que en paz descanse, pobre pez dorado… Si te hace sentir mejor, una vez intenté revivir a una hormiga que accidentalmente pisé… y la aplasté dolorosamente…-Rayos, fue el primer ser viviente que asesiné. Me iré al infierno.

 

  Y en nuestro vagabundeo infinito, llegamos a una especie de fuente, rodeada por grises e irregulares adoquines, y, de forma circular, una larga y delgada banca lo rodeaba, como una especie de círculos concéntricos. La fuente estaba apagada, aunque había agua estancada. Los pajaritos cantaban, los niños corrían por el césped y se caían de cara, lloraban, sus madres corrían y los consolaban, las parejas abrazándose y queriéndose ¡jódanse!, ¡yo estoy en una segunda cita, perras! Yo también la quiero… en mi cama… desnuda… Pero la quiero al fin y al cabo, ¿no? Tal vez con un poco de crema y chocolate encima, pero ñee…

 

-Se suelta y mi corazón se rompe-¿Y qué quieres estudiar?-Me pregunta, subiéndose a la banca, y comenzando a caminar sobre ella, describiendo círculos.

-Yo…-¿siquiera sirve resistirse?-De acuerdo… quiero estudiar física cuántica.

 

  Y… se me queda mirando, se detiene, sus ojos se abren demasiado para mi gusto y me arquea una ceja. ¡Naaaah, tú preguntaste, ahora cierra el portal al mundo de los muertos que acabas de abrir! Pero no. Y me mata, porque ahora sólo sonríe, ni siquiera en burla, me sonríe de forma tan tierna que mi hígado hace ¡boom! ¡Y mis ojos se salen de sus órbitas! ¡Y la cabeza hace boom! ¡Y mi pierna hace boom! ¡Y mi meñique hace boom! ¡Y todo hace boom!

 

-Eres… linda-Dice, y vuelve a girar sobre la banca, paso a pasito-¿Y por qué?, si puedo preguntar, no quiero pasar otros 15 minutos tratando de convencerte.

-Ay, eres un amor… Porque quiero estudiar la teoría de los universos paralelos-Miro su expresión de: “ni puta idea” y suspiro con satisfacción, sólo he podido explicar esto una vez-La teoría de los universos paralelos, afirma que, al presentarse una situación en que pueden ocurrir distintos acontecimientos, se abren realidades paralelas en que ocurre cada uno de manera independiente. Así, por ejemplo, entre tomar el camino izquierdo, o el derecho; si por ejemplo tomas el izquierdo, se crea un universo en que tomaste el derecho, y así-Veo su expresión de: “Okey, tiene sentido”-Sólo quiero probar que es así y tal vez introducirme en uno, ¿te lo imaginas?-Digo emocionada.

-Espera, espera… ¿Eso quiere decir que no crees en el destino?-Imagínense a alguien diciendo: “¿acaso no crees en el tomate con lechuga?” y tendrán más o menos su reacción.

-Eh… no, no mucho. No creo que no tengamos libertad de acción y que la verdad no somos nosotros los que tomamos nuestras decisión, sino simplemente las cosas ocurren… porque deben ocurrir. Creo en… la variabilidad de los factores y en sus constantes cambios… Esta es la parte en que me golpeas y gritas: “¿¡Pero qué te has creído, Juan Antonio?!”, completamente indignada, porque crees en el destino y crees que todo pasa por una razón y que algo mucho más grande nos domina. Y ahora yo digo: “¡Pero espera, María Ignacia!” y…-Me subo a la banca, deteniendo su girar y girar a lo largo de ella, tomándola por los brazos, produciendo un choque de electricidad, de sentimientos, de negro contra gris…-Piénsalo un poco, ¿no te hace sentir un tanto pequeña el hecho de que… en un universo paralelo, tal vez ni siquiera nos conozcamos?, ¿no te hace sentir parte de un todo el hecho de que tal vez en otro universo paralelo tengamos una relación diferente?, tal vez…

-¿Tal vez…?-Le brillan tanto los ojitos que parecen lámparas-¿Tal vez qué?-Pregunta expectante.

-Tal vez… en un universo paralelo… Yo… ¡te tomo en brazos y empiezo a girarteeeeee!-Y la tomo en brazos y empiezo a girarla por todas partes, saltando de la banca, girando de un lugar a otro, subiéndonos al borde de la fuente, girando a lo largo de ella-O bueno, eso ocurrió en este universo, tal vez en otro no…

 

  Se me queda mirando de una forma, mientras la sigo teniendo en mis brazos, elevándola sobre mi cabeza, sólo para darle en el gusto y que se sienta más alta. Poder sentir su pecho tan cerca de mi rostro, sentir su corazoncito haciendo “tum tum, tum tum, tum tum, tum tum” a un ritmo acelerado, es prácticamente estar en el paraíso. Y es que, es tan lindo verla sonreírme desde arriba, es tan lindo ver sus oscuros ojitos brillar desde este ángulo, si pudiese sólo describir lo lindo que es que me tome el rostro con sus dos manitas y… No, esperen tres segundos… ¿qué?

 

 

-*¡ALERTA, ALERTA NÚCLEO DEL REACTOR EN MASA CRÍTICA, NÚCLEO DEL REACTOR EN MASA CRÍTICA, DEBEN EVACUAR ESTA INSTALACIÓN AHORA, NO ES UN SIMULACRO. REPITO: NO ES UN SIMULACRO!*-Se escucha por los altavoces.  

-Está… tomándome el rostro…-Dice la capitana, tocándose su propio rostro, mientras observa por la pantalla, lo que en este momento estoy viendo.

-¡Hay que correr, idiota!-Dice el Oficial, tratando de moverla, siendo completamente inútil-¡Dios, si quiere morir, hágalo! ¡Iba a asesinarla mientras dormía de todas formas! Pero, ¡sáqueme estas jodidas esposas!-Y apunta su mano derecha, que está unida a la mano izquierda de la capitana.

-Ni lo creas pendejo, si me hundo, te hundes conmigo…

-¡Nooooo!  

 

  Es que, ¿esto en serio está sucediendo?, ¿está en serio pasando esto? ¿Ella en serio me toma

 del rostro de esta forma, con sus ojitos brillando y acercando su…? Wow, wow, wow… a ver, a

ver, a ver, calmasión todos, detengan esta máquina, ¿en serio ella se me está acercando…? Por favor piñísquenme…

 

-¡Auch! ¡Idiota-Digo, aguantando no sobarme el brazo, donde mi voz lesbiana acaba de piñiscarme-¿Era necesario?

-¡Bésala!-Me grita.

-¡Waaah, es como si fuese mi primer beso! ¿Qué hago?, ¡¿Qué vaginas hago?! ¿¡Cómo se besaba!?

-¿¡Cómo olvidas cómo se besa!? ¡Es como tener sexo!

-¿No era acaso andar en bicicleta?...

-¡¿Quieren las dos parar?!-Grita mi consciencia.

-Sí, mamá…

-Perdón, mami…

 

 

  Es como si todo lo que he vivido hasta ahora, las parejas que he tenido, los besos que he dado, las veces que he dormido con alguien, toda mi experiencia, todos mis juegos con todas las personas, todo es echado abajo con su simple gesto al acercárseme tan tímidamente, que olvidé cómo rayos funcionaba esto, cómo besar, cómo reaccionar. Es como si mis labios fuese vírgenes otra vez.

 

  *Y en su cabeza…*

 

  Like a virgin, uh! Touched for the very first time! Like a virgin, when your heart beats… next to mine!

 

 

  Bien, aquí voy, no entres en pánico, no lo pienses, no pienses nada de esto. Sabes que cuando piensas demasiado las cosas todo sale mal. Uno, dos…

 

-¡Hey, ustedes dos! ¡Salgan de la fuente!-Nos grita un guardia del parque, acercándosenos.

-Ah… tres-Suspiro molesta, bajándola y saliendo ambas del borde de la maldita fuente-Creo que es tiempo de… bueno, ir a la tienda de mascotas para comprar a ése gato, ¿no?-No pienses en esto, tienes toda una sesión de terapia con tu almohada para pensar en el casibeso que te das con ella, ahora finge que no ha pasado nada-Vamos, chica france… Katherine.

-Y… su cabeza es atraída hacia abajo como si la gravedad le afectara más-Vamos…

 

 

  ¡Aaah! ¡Arriba los ánimos! ¡No hay nada más que ponga de buen humor a un francés como los gatos lo hacen! ¿Cierto? , quiero decir, ¿quién no puede animarse con esas bolas de pelo con patas y cola, que se lamen todo el día, piden comida y luego hacen sus necesidades en una caja de arena que si no limpias se convierte en una caja radioactiva? ¡A que son lindos!, ¿no?

  Además, ¿quién no ama las tiendas de mascotas, con el sonido de los periquitos, con el glu glu de los peces, el… lo que sea el sonido de los conejos y los cuyes o los hámster?, ¡todos son tan lindamente peludos y regordetes y…! Katherine Castillo… me debes una grande.

  Entramos a la tienda y llegaron a mis oídos el sonido de wofs, miaus, pio pio, y muchas otras onomatopeyas difíciles de describir. Sentí en mi nariz el olor de perros, gatos, conejos, cuyes, hámster, y hasta de un hurón. Vi peces, tortugas, peceras, juguetes, comida, cajas de arena, cajas portátiles y otras cosillas en distintos pasillos. Había una musiquita de piano sonando, y en una especie de pantalla, se veían videos de gatitos haciendo tonterías. Agh, sáquenme de aquí.

  ¿Por qué odias al mundo de esta forma, Gabriela? No lo odio, sólo lanzaría una bomba atómica sobre él si pudiera…

 

 

-¡Hola!-Nos dice una dependiente, acercándosenos con una sonrisa fingida, casi pidiéndonos ayuda con la mirada “¡Sáquenme de aquí!”-¿En qué puedo ayudarles?

-Ella…-Y apunto a Katherine-Quiere un gatito lindo y esponjoso… Y yo-Me apunto-Quiero saber si tienen… ¡Oh, ahí están! ¡Muy bien, diviértete!-Y salgo corriendo.

 

  Voy hacia unas estanterías en que hay muchas cajas de plástico y transparentes, pequeñas y con un mango arriba y agujeros a sus costados. Tomo una de ellas y la elevo en el aire, acercándola a mis ojos. Sé que saldrás de ahí, eventualmente tendrás que hacerlo, no puedes engañarme… ¡Ajá! ¡Ahí está! ¡Hermosa y sensual tarántula! ¡Uno de los pocos animales que sobrevivirán una vez que domine el mundo! ¿Cómo estás, pequeño artrópodo?, ¿cómo quieres que te llame, eh? ¿Qué tal Willy?, ¡sí, te queda! Willy el artrópodo, serás un fiel compañero… Pobre Willy, encerrado en esta caja de plástico para ser vendido a estúpidos niños regordetes y babones… ¿Quieres que te libere, pequeño Willy? ¿Liberen a Willy? ¡Bien!, déjame abrir esta caja y…

 

-¿Gabriela, qué haces?-Me dice Katherine, detrás de mí.

-¡Aah!-Y pego un salto, y casi se me cae la caja-Eh… yo… nada, nada-Y dejo la caga en su lugar-¿Ya elegiste un gatito?-Y miro su expresión de aflicción-¿Qué ocurre?

-Es que… ¡Ven!-Y me toma del brazo, y me arrastra hasta el lugar en donde hay muchos espacios separados por paredes de vidrio, formando rectángulos, en los que cada uno hay un gato distinto-¿Cuál elegirías tú?

-Y yo cómo voy a saberlo, tú quieres uno…-Murmuro por lo bajo-Prefiero no pensar en eso, no después del pequeño Jimmy…-Y me salen unas pequeñas lágrimas…-A ver, ¿qué tal ése?-Y le apunto a uno recostado, hecho bolita, de un pelaje muy oscuro y ojos muy amarillos, mirándonos-Se parece a mí, ¿no?  

-Y es tranquilo-Añade la dependiente-No hace mucho ruido y de seguro te dará calor durante la noche.

-¡Jaja! ¡Sigamos!-Digo, tomando por los hombros a Katherine, viendo otros gatos. Si yo no puedo darle calor durante la noche, nadie lo hará.-¿Okey, y este? Pelaje pardo, pequeño, muy peludo y esponjoso, ¡perfecto para ti! Creo que es un Bosque de Noruega, y también son tranquilos… ¿qué tal?

-¡Ah, no lo sé…!-Y mira a todos lados, desesperada. Entonces corre lejos, muy lejos de este mundo, hasta el último rectángulo, y se queda mirando fijamente-¡Gabriela, mira éste! ¡Tiene tus ojos! ¡Sus ojos son grises!

 

  Y me acerco, y me hinco, para ver detenidamente la cara del gato. Sentado en sus cuatro patas, moviendo su cola de un lado para otro, es casi como si tuviese la misma expresión que yo. Me acerco al cristal y, de un modo aterrador, el gato hace lo mismo. Miro fijamente sus ojos, y veo como se contraen sus pupilas. Entonces salto, haciendo un “¡Buu!” Y el gato salta hacia atrás asustado, para luego gruñirme y mostrarme sus colmillos. Jeje… esto es divertido.

 

-Mis ojos no son verdes-Le digo finalmente, poniéndome de pie-Lo siento, pero podemos seguir buscando.

-No, no. En serio, sus ojos son grises, ¡son como los tuyos! ¡Son grises!-Y me hace un puchero, y yo muero-¿Qué raza es?

-¿Ella?-Dice la dependiente-Si mal no recuerdo… tiene dos años y medio y es una Inglesa de pelo cor-

-¿¡Ves!?-Y la interrumpe-¡Es igual a ti! ¡Tus ojos, es inglesa y hasta hace lo mismo que tú! ¡Es tu gemela!

-¡Hey, hey!-La detengo, tapándole la boca-Con una ya es suficiente, no necesito otra… Aaaah… A ver-Me hinco otra vez, poniéndome de frente al cristal, observando detenidamente a la gata, es increíble que de alguna forma me mire con la misma expresión. De acuerdo, esto empieza a ser divertido… Me muevo a mi derecha y veo cómo ella sigue mi movimiento, y luego a la derecha, y ella hace lo mismo, y hacia adelante, y ella hace lo mismo y hacia atrás… Wow, esto es increíble. Miro a Katherine, y a la gata, pasando mi mirada de la una a la otra-Está haciendo lo mismo, ¿verdad?-Y veo que me asiente, emocionada-Oh, está bien, llevémosla…

-¡Siiií!-Y me abraza, ¿les mencioné que muero?

-Las ayudaré a hacer el papeleo…

 

 

  Bueno, aquí debo hacer un alto. ¿Alguien recuerda cuando intenté liberara a Willy? Bueno, hablando de eso… Creo que olvidé cerrar la tapa, porque, verán, ocurrió algo realmente chistoso y… jaja… nos estaremos riendo de esto en algún momento…

 

-¡Quítenmela! ¡Quítenmela ahora!-Dice una señora, ataviada de adornos por la ropa, con el pequeño Willy sobre su cabeza, tratando de afirmarse y no caerse.

-Señora, por favor cálmese…-Le dice un dependiente.

-¡No me diga que me calme!-Le grita histérica.

-La dependiente que nos estaba atendiendo me miró con un amenazante fulgor en los ojos-Jeje…-Río incómoda-Esto, yo…

 

 

 

 

 

-Fue un lindo detalle que nos regalaran la jaula portátil, los juguetes, la comida y… bueno, todo…-Digo incómoda en el asiento trasero del taxi.

-¿Aprendiste algo hoy?-Dice riendo, acercando su dedo a la rejilla de la jaula, dejando que la gata se lo lama, haciéndole cosquillas. ¡Hey, ¿por qué yo no?! ¡Yo también quiero!-Es tan linda…-¡Y le sigue haciendo cosquillas, voy a matarla!

-Sí, sí… muy linda…-Digo haciendo un puchero y mirando para otro lado, ¿en serio estoy celosa de una gata?

-¿Estás celosa de una gatita, Gabriela?-Dice, golpeándome una y otra vez en el hombro, molestándome.

-¿Qué? Pfff… para nada, ¿celosa, yo? Por favor…-Y le tomo la mano y le muerdo el dedo índice, y ella se pone roja, y yo gano, ¡ja!-Sip, me siento mejor, mucho… mucho mejor. Te ves muy linda cuando te sonrojas, no te ves tan pálida y no pareces un vampiro…

-Bueno-Dice el chofer-Ya llegamos.

 

 

  Y subimos con dificultad los cuatro pisos, yo llevando la jaula con esa criatura del demonio bastante parecida a mí y Katherine llevando la comida y las demás cosas. ¡Dios, cómo pesa esta cosa! Sería una pena que a alguien se le cayera de las escaleras  y la pobre gata tuviese un trágico, trágico accidente, y así Katherine será mía…

  No, no, ¿qué estoy diciendo? Katherine me mataría… A menos, que ella no se dé cuenta y…

 

-¿Te gustaría entrar por un rato?-Me pregunta, ya en la puerta de su apartamento.

-¿Cuándo llegamos aquí?-Pregunto confundida, ¡nooo, mi oportunidad!-Eh, claro, cualquier cosa para dejar esta jaula…

 

  Dejo la jaula de la gata en el suelo, y abro la rejilla. Primero se asoma una nariz, olisqueando el aire. Después se notan unos bigotes y un hocico, con esos ojos medianamente grises. Se ve una cabeza, olisqueando el suelo, una patita, otra patita, y de repente una puta bola de pelos sale corriendo y se sube a unos de los sofás, comenzando a olisquearlo. Entonces baja y empieza a caminar por toda la sala, olisqueando por aquí y allá, jugando con una de las hebras de la alfombra, acercándose a los pies de Katherine y comenzando a restregarse sobre ellos. Entonces se me acerca, y se me queda mirando. Eh… ¿qué quieres? Y entonces se acurruca a mis pies. ¡Aaaaaaw! Tienes todo perdonado, no volveré a pensar en tirarte por las escaleras, lo prometo. Cosita linda.

 

-Y me agacho, para comenzar a acariciarle la panza-¿Tienes pensado un nombre para mi gemela gatuna? ¿Qué tal Misifú?, ¿o Fluffy?, ¿o Pussy?

-Mmh… Tengo un nombre mejor-Y se agacha también, para acariciarla entre las orejas, esta gata debe estar teniendo un orgasmo de caricias-Si es igual a ti en todo… ¿por qué no la llamo Gabriela?

-Y me la quedo mirando, con una ceja arqueada, y prácticamente salto sobre ella, haciéndole cosquillas en el estómago, rodando por el suelo-Eres tan linda, que podría comerte, y no siquiera tendría que echarte azúcar encima, porque eres tan, pero tan dulce… ¡Dios, eres perfecta!-Y le sigo haciendo cosquillas en su estómago, y ella se ríe ¡y yo sólo quiero comérmela a besos!

-¿Eso es un sí?, ¿se llamará Gabriela?-Me dice, haciéndome cariñitos en la coronilla de la cabeza, ¡ah… muero!

-Sí, ¡sí, sí! Se llamará Gabriela, es tu gata de todas formas-¿Soy su gata? ¡Sí, soy su linda, linda gatita!-Eres tan encantadora… 

Notas finales:

y qué hay de ustedes? creen en el destino? la verdad es que yo no :// pero no sé :D tal vez me hagan cambiar de opinió 7u7 o a Gabriela 7u7 o a Katherine 7u7 pero bueeee, cuídense! cuidado con el amor, no lo dejen entrar, nunca tengan novia y eso... mucho tomate con lechuga for all of you! <3


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