-Happy birthday… to you! Yeah!-Dijo mi madre aplaudiendo y sonriente, mientras Anais y yo apagábamos las velas de nuestro pastel-Happy 11 years, girls! You two have grown up so much…-Y nos abraza a las dos, mientras mi padre sacaba fotos con la cámara-I wish you’d still be thouse little 8-years-old girls… I love both of you so much! And I love you too!-Y le da un beso a mi padre, y todos somos tan felices…
Y abro mis ojos en esta habitación, de este nuevo apartamento en un día sábado, ¡es nuestro cumpleaños! ¡Yei! ¿Por qué no estaré emocionada? Hace mucho que no soñaba con mi madre, y de todos los posibles recuerdos, tenía que ser el del último cumpleaños que pasamos todos juntos y felices, ¿verdad? No podía ser de otra cosa, noooo, justo de ése cumpleaños, ¡el pastel era tan rico! ¡Mi padre es muy bueno haciendo pasteles! ¡Es una lástima que me odie y que ya no me haga ninguno!, ¿verdad? :D
Me levanto y veo a través de la ventana, ¡¿Que no hay un puto día soleado en esta ciudad?! Saco debajo de mi cama el regalo de cumpleaños de Anais y camino de puntillas, abriendo con cuidado la puerta de mi habitación, caminando de puntillas, de puntillas… ssshhh… nadie se mueva, nadie haga ruido. Llego a su habitación y abro la puerta en silencio, se reirían de lo silenciosa que estoy siendo. Su habitación está a oscuras y hay un bulto en su cama… ah, no, esa es Anais… En silencio me acerco y cuando ya estoy parada en frente de su cama…
-¡¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS ANAIS!!!!-Grito mientras salto sobre ella y la agito y la hago temblar como loca, mientras ella grita asustada e intenta quitarme de encima-¡¡¡TENEMOS 17 HERMANITA!!!! ¡¡PODEMOS HACER LO QUE QUERAMOS, EL MUNDO ES NUESTRO!! ¡¡¡¡CUANDO UNA CAJITA DIGA ABRA AQUÍ, HAY QUE ABRIRLA EN OTRO LADO!!!!
-¡Gabriela, ya!-Dice tratando de sujetarme los brazos-¡Ya, ya, que estás pesada!-Y yo me bajo y corro a sus persianas y las levanto de un golpe, dejando entrar la luz. Luego corro y me siento en su cama a un lado, extendiendo mis manos con su regalo, envuelto en papel amarillo-Ay, qué linda eres-E intenta abrirlo, mientras lucha con la cinta adhesiva-Tu regalo está en el escritorio, sé que te gustará-Y me sonríe.
Y yo voy corriendo, resbalándome con la alfombra y dándome de bruces contra la esquina del escritorio, pero… I don’t give a shit, porque tengo el regalo entre mis manos, una bolsita simple y con un pedazo de cinta adhesiva con el que lucho por romper o quitar, lo que pase primero.
¡Aaaaaw! ¡Es justo lo que quería, un ponny en miniatura! ¡Ja, la vieron! Es algo parecido, es una caja pequeña con un cartelito que decía “¿el gato está vivo o muerto?” ¡Aaaaaaw, si es tan linda mi hermanita! Ya verá su regalo, Jejeje…
-¡ah, qué lindo!-Lo sabía, perras-¿Cómo lo supiste?
-Tal vez porque me lo vienes pidiendo desde navidad del año pasado…-Y tomo al muñequito de oso y lo abrazo contra mi pecho-Si no me lo hubieses pedido, ahora sería mío y de nadie más, Muajajajajaja.
-Qué pena-Y me lo quita-Ahora es mío.
Y entonces, ¡nanananananana! ¡Aparece una gata en la puerta y corre a nosotras! ¡Se sube a la cama de Anais y le hace cariño! ¡¿Y a mí!? ¡¿Acaso no merezco amor de una gata que se llama exactamente igual que yo?! ¡O sea, cariño, somos gemelas separadas al!… ¿nacer? Y Anais la acaricia detrás de la oreja, y Gabriela ronronea y ronronea. Entonces me mira y casi puedo sentir su mirada irónica y sarcástica. Como. Te. Odio.
-¡¡Feliz cumpleaños!!-Se escucha al unísono y entran Katherine y Catalina, saltando a la cama de Anais y espantando a Gabriela, sacudiéndome a mí Katherine, y a Anais Catalina, felices y sonrientes. Esto es de alguna forma incómodo pero agradable; no he hablado mucho con Katherine desde la gran conversación en mi habitación y el hecho de que ahora esté encima de mí, tomándome por los hombros y saltando feliz de la vida, me resulta entre agradable e incómodo… aunque eso ya lo dije, ¿verdad?-¡Felices 17!-Me dice Katherine, emocionada pero a la vez bajito, como para que las demás no la escuchen.
-Ah… gracias… pero tu rodilla aplasta mi muslo…
-¡Ups, lo siento!-Y se ríe encantadoramente, bajándose de la cama e intercambiando una mirada cómplice con Catalina-Oye… Cata y yo queríamos invitarlas hoy a nuestro apartamento, ¡les tenemos un pastel y todo!
-¡Pero si no vienen!-Interrumpe Catalina-Ni un problema con nosotras, nos sacrificaremos en pos del pastel, ¡auch!-Katherine le da un codazo-Ya, ya, perdón… pero no dejaríamos que ese pastel se desperdiciara si ustedes no vienen, no hay problema alguno en comérnoslo nosotras. Aparte, ustedes ya deberían tener toda una fiesta con su papá, ¿verdad? ¡No hay problema! ¡El pastel es nuestro! ¡¡AUCH!! ¿¡Quieres dejar de hacer eso!?-Le dice a Katherine, que la codeó con más fuerza.
-Pero preferiríamos que vinieran, les tenemos muy lindos regalos-Cómo amo su expresión de: n.n
-Ah… no, yo no tengo nada-Digo y miro a Anais, que está un poco cabizbaja.
-Ni yo…
Después de la muerte de mi madre, los cumpleaños se volvieron un poco… “incelebrables”. Papá estaba muy triste como para hacerlos y, después de mi gran “salida del closet”, casi ninguno de nosotros pensaba siquiera en celebrar cualquier festividad. Creo que eso le duele mucho a Anais, realmente le gustan las fiestas familiares.
-¡Sí!-Dice feliz Katherine-Pueden venir a las ocho si quieren… la verdad es que deben venir a las ocho y no antes, o las mataré a las dos con un cuchillo gigantes, es más o menos de este porte-Y muestras con sus manos una apertura de al menos 20 centímetros, sonriendo inocentemente-De hecho, por favor no salgan de este apartamento hasta que sean las ocho…
-Pero…-Digo, mirando el reloj de mesa de Anais-Son apenas las nueve, ¿qué se supone que hagamos todo el día?
-pues vestirse-Dice Catalina-Y vestirse decentemente, deben verse bien si quieren entrar a nuestro apartamento. También pueden comer, deben tener comida aquí, ¿no? Y ya saben, lo típico: respirar, pestañear, hacer que circule su sangre porque, si se atreven a salir de aquí antes de las ocho, me encargaré de que Kathy les entierre ése cuchillo hasta lo más profundo de su pecho.
-¡Okey, ya entendimos!-Digo molesta-No saldremos, vale. Pero por favor… díganme que no están pensando en hacer una fiesta con mucha gente, la verdad ninguna de los dos estamos de ánimo para eso.
-No, no es una fiesta-Nos explica Katherine-Bueno sí, pero sólo con nosotras, tenía pensado en invitar a Alicia, pero no sé si pueda venir, ¡pero ustedes deben venir!-Insiste.
-¡Ya, ya entendimos!-Gritamos al mismo tiempo Anais y yo-A las ocho, vale, lo captamos-Les digo para tranquilizarlas-Pueden retirarse a hacer… lo que sea que quieran hacer…
9:00 am. El aburrimiento produce peleas de imaginaciones.
Desde las nueve de la mañana a las ocho de la noche hay al menos once horas de espera. Once horas que pasaron lenta, muy lentamente. Me tomé una ducha y después Anais, ambas sin mucho ánimo. Los últimos años hemos pensado que nuestro cumpleaños lo podemos pasar perfectamente bien sin hacer un gran alboroto por ello. Sabemos qué regalarnos y con eso estamos bien. O sea, ¡La caja del gato de Schödringer! ¿Qué más se puede pedir? Y Yo le regalo ése muñeco de osito raro que ella quería y que tuve que ordenar desde Japón, pero ¿a quién le importa? Estamos bien las dos solas, ¿a qué sí?
¡Flash back!
-¡Yo quiero el último trozo de pastel!-Me gritaba Anais mientras yo corría por nuestra antigua casa.
-¡No, maldita gorda!
-¿¡A quién llamas gorda!? ¡Te comiste casi todo el pastel!
-¡Pues será todo!
¡Fin del Flash Back!
Bueno, ha habido veces en que todo salía muy mal, pero vamos, tenemos 17, ¿qué podría salir mal?
-Saca una lista que se hace más y más grande mientras cae y se desplaza por el suelo-Razón #1…
-Cállate consciencia, sólo cállate. En serio, ¿tienes que venirme con eso de la racionalidaaaad y todas esas cosas que son importantes para no acuchillar a alguien cuando lo odiamos? O sea, ¿no debería guiarme por mi instinto?
-¿Acaso quieres escuchar a ése idiota?-Me dice molesta, guardando la lista quién sabe dónde.
-Eh… si me dejaras elegir entre él y tú, creo que no hay dónde perderse. O sea, yo estoy tranquilita volando hacia Júpiter y tú siempre lo arruinas todo.
-¡Esa es la actitud!-Dice mi voz lesbiana.
-¡Dios, cállense las dos! ¡Detesto haberlas creado a ambas!
10:00 am. Creador vs. creación.
Una vez vestida con lo que yo consideraba “formal” me eché en la cama. Admítanlo, ustedes no me amarían ni serían mis fans si yo no me vistiera de negro y la autora no me dejara ser una idiota que no se da cuenta de que tiene sumamente enamorada a Katherine y que debería besarla. Créanme, yo podría darle a todas ustedes lo que quieren, podría darles hasta lemmon si me lo piden. Pero esta tipa llamada “autora” no me deja hacer nada de eso. Nooo, aquí me tiene como una idiota echada en mi cama, esperando a ver a Katherine. Maldita sea esta autora.
-¡Hey!-Y aparece Tomate con Lechuga por la puerta, sumamente enojada-¡No me trates así, yo te creé en primer lugar!-Saca su notebook de su espalda con una sonrisa maliciosa-Y puedo eliminarte si así lo quiero.
-Pfff, no te tengo miedo-Dice Gabriela con indiferencia-Si me borras, mi espíritu te perseguirá por la noche y, lo más probable es que todos averigüen dónde vives para asesinarte por haber dejado un fanfic sin terminar y que más encima mates a la protagonista-Se recuesta en su cama de manera triunfal.
-Sí, tal vez no pueda eliminarte, pero sí puedo hacer que “Gabriela se cae de su cama y se dobla su pie, el cuál le duele mucho”, ¿qué dices a eso, perra inglesa?
-Pfff, ¿y eso qué va a hacer? ¡Auch!-Y Gabriela se cae de su cama y se dobla su pie, el cuál le duele mucho-¡Bien, bien, volveré a mi papel, ya vuelve a tu mundo real y sale del mundo fanficcionario.
-Nos vemos…
¿Dónde estaba? ¡Ah, sí! Bueno, la cosa es que yo no sé qué le pasa a Katherine. Quiero decir, no sé si para mí lo obvio no lo ven los demás, o ella es más lenta que chica rubia en película de terror porque, vamos, indirectas le he tirado hasta por los codos, ¿cómo no darse cuenta? Pues la respuesta a esto es bastante simple, porque la autora, que se acaba de ir hace un par de segundos, le encanta que sus personajes sean igual de despistados y que no vean nada, al igual que ella en la vida real y para no sentirse tan mal por el hecho de estar soltera y que morirá sola y hasta con un gato todo sarnoso y que no la querrá y-
-¡Ya basta!-Y Tomate con Lechuga entra dando un portazo, con el notebook en su mano-¡No hables sobre mi patética vida amorosa! ¡La tuya tampoco es mejor! ¡Y si sigues así, haré que en los próximos capítulos, no aparezca Katherine para nada! ¡La mandaré de viaje! ¡A China si se me da la puta gana!
-¡Ya, ya! ¡Fuera de mi habitación!
-¡Yo creé esta habitación!-Y golpea la pared-¡Yo puedo hacer que esté en llamas si quiero!
-¡Vete de aquí! ¡Ve al mundo real y deja de atravesar dimensiones de un momento a otro!, asustas, ¿sabes?
-Ya lo verás en los siguientes capítulos… mi venganza caerá sobre ti y será terrible…-Cierra la puerta detrás de ella y vuelve a abrirla-¡Terrible!-Y cierra de un portazo.
11:00 am. La caminata espacial.
-Pppgggg, Huston, tenemos un problema, pppggg, cambio.-Digo, con una fuente de vidrio sobre mi cabeza.
-Pppgggg, ¿Qué sucede?, pppggg, cambio.-Me dice Anais, con un walkie tokie, sentada en uno de los sofás.
-Ppppgg, veo extraterrestres a mi izquierda, a unos dos metros. Este planeta contiene vida, repito, este planeta tiene vida, cambio, pppggg, cambio.
-Pppgg, ¿y cuál es el problema?, pppgg, cambio.
-Pppggg, creo que son agresivos, pppggg, cambio.-Digo mientras me acerco a la cocina, caminando como astronauta.
-Okey, Gabriela, esto es ridículo-Dice Anais, tirando el walkie tokie al sofá y recostándose en él.
-Sí, lo sé-Me quito la fuente de la cabeza-Y aparte esta cosa huele a carne.
-Aaaaagh, ¿qué hora es?
-Veo el reloj de la cocina-Las 11:45.
-¡Aaaaagh! ¡No puedo seguir así, necesito salir!
Anais sale corriendo hacia la puerta, pero yo la atrapo justo a tiempo, abrazándola por el estómago y tirándola, mientras ella se sujeta al marco de la puerta. ¡No te rindas tan fácil, el meñique Bob Esponja, el meñique!
-¡Noooo, Anais, nos enterrarán un cuchillo en el pecho!
-¡Las paredes, las paredes están matándome! ¡El espaaaaciooo!-Y empieza a caer-¡El espacio se hace más pequeño! ¡Necesiiiiiiitoooo…!
-¡Noooo!-Pero Anais ya había abierto la puerta hacia la otra dimensión.
Y ahí estaba Katherine sosteniendo un cuchillo de 20 cm. de largo, con una sonrisa inocente, mirándonos a ambas, que nos quedamos de piedra. De acuerdo, la verdad es que no me esperaba REALMENTE, que alguna de ellas fuera capaz de asustarnos de esa forma.
-¡Nosotras ya nos íbamos!-Digo, dando media vuelta.
-¡Sí! ¿Quién necesita salir de todas formas?-Dice detrás de mí Anais, cerrando la puerta.
-Okey, nuevo plan: saldremos por la ventana-Y voy a mi cuarto.
-Gabriela, estamos en un cuarto piso…-Dice corriendo detrás de mí.
-Cieeeerto… Ah… ¿quieres usar el casco y yo el walkie tokie?
-De acuerdo…
13:00 pm. El plan perfecto.
-Muy bien, esto será de la siguiente forma-Le digo a Anais ambas observando el mapa que puse en el suelo-Esta X eres tú… y esa Y soy yo, ambas estamos encerradas aquí-Y se lo señalo-Ahora, este corazón es Katherine.
-Uy, qué sorpresa.
-Sssssshh, no hables, escucha. Bien, este es el plan: primero saldré yo, y ocuparé mis excelentes métodos para distraerla, después tú saldrás…-Y lo dibujo en el mapa-Y entonces…
-Le rompo el florero en la cabeza, lo tengo.
-Exac- ¿Qué? ¡No!... ¿Qué pasa contigo?, ¡Dios! Mientras yo la distraigo, tú saldrás sin que ella se dé cuenta, entonces cuando yo haga esto-Y me rasco la nariz-Le sacarás el cuchillo y ambas salimos corriendo como putas, ¿entendido?
-¡Entendido!
Así que ambas, con pintura negra, nos hicimos dos líneas en las mejillas, como todas unas guerreras, y nos preparamos en frente de la puerta. Pero, ¿a que no adivinan? Vamos, inténtenlo. No esta Katherine ahí, al menos no sola. Estaban Katherine y Catalina, un al lado de la otra, ambas con cuchillos que alcanzaban fácilmente a atravesar mi pecho sin siquiera clavarlo entero, sonriendo felices de la vida.
-¡Retirada, retirada!-Le digo a Anais, cerrando de un portazo-¿¡Leen nuestra mente o qué!?
-Necesitamos un nuevo plan… El tuyo era una basura…
-Estuve casi tres horas haciendo el jodido mapa…
17:00 pm. R U mine?
¿He mencionado que me gusta Arctic Monkeys? Porque a estas alturas del día, estoy de cabeza sobre mi cama, con mi stereo a todo volumen, mientras canto…
-Are you miiiiiineeee???!!!! Are you miiine tomorroooow??!!!! ARE YOU FUCKING MINE, GOD DAMMIT, I HATE SO MUCH FRENCH GIRL, KATHERINE I HATE YOU SO MUCH…! Are you mine?!
-Dios… tú tienes un serio problema-Dice mi consciencia apareciendo frente a mí, pero derecha, no de cabeza.
-¿Qué quieres ahora? Creí haberte despedido.
-No puedes despedirme, siempre he estado contigo, desde que naciste.
-Eso explica por qué siempre he tenido un dolor en el culo desde que tengo memoria…
-Tú en serio no sabes apreciar lo que he hecho por ti-Dice indignada.
-Eh… Si no fuera por ti, ya habría: matado a Melanie, matado a Gabriela, matado a Catalina, besado a Katherine, llevarla a mi cuarto, hacerle cosas malas, pedirle salir conmigo y… bueno, la lista sigue.
-Asesinar es ilegal… violar a alguien también. La verdad, soy la única que evita que vayas a prisión.
-Pppfff… tengo a Anais para e- ARE YOU MINE?! ARE YOU MINE TOMORROW?! ARE YOU MINE?! OR JUST MINE TONIGHT?! TUMTUMTUMTUUUUUM-Y termina la canción-Lo siento, era necesario…
-Eres imposible…
19:59 pm. ¡En sus marcas…!
Estábamos en la puerta de nuestro apartamento. Anais tamborileaba sus dedos impaciente y yo movía mi pierna de un lado al otro, mirando cada tres segundos nuestro reloj de pared, esperando de forma desesperada a que fuesen las ocho para tomar un poco de aire, tocar a otro ser humano, alejarnos de los cuchillos, mirar el atardecer, lo que sea, ¡sólo salir de este desquiciante apartamento!
-Comienza la cuenta regresiva-Le digo a Anais, inquieta-Diez…
-Nueve…-Mientras mira el reloj.
-Ocho…
-Siete…
-Seis…
-Cinco…
-Cuatro…
-Tres…
-Dos…
-Uno…
Y ¡boom! Abrimos la puerta y… ¿adivinen? ¿No? ¿No? ¿Les cuento la historia de mi juventud? Yo nací un dulce día de octubre… un par de minutos después que Anais, mis ojos vieron al mundo y… No quieren saberlo, ¿verdad? Bueno, está bien. Lo que realmente pasó, fue que abrimos la puerta y toooodo el pasillo estaba lleno de globitos, de serpentinas y la música empezó a sonar a todo volumen y un “¡Feliz cumpleaños!” masivo nos atacó a ambas, completamente atónitas. ¡Joder, déjennos tener aire!
-Ah… ¿conoces a alguna de estas personas?-Le pregunto a Anais en un susurro.
-Sólo a la Kathy y Cata… Aunque ahí esta Alicia…
-¿Recuerdas cuando nos dijeron que no iba a ser una fiesta con mucha gente?
-Espero que hayan escondido bien ése cuchillo, o se los clavaré a ambas…
-Démosle un tiempo para explicarlo…
No sé exactamente dónde se metió el padre de estas dos, pero sea como fuere, en su apartamento no estaba, y mi padre estaba trabajando. Había muchas niñas y creo que la mayoría era de onceavo grado, supongo que Alicia tiene algo que ver en todo esto, porque dudo que alguna de ellas conociera a alguien más, a no ser de Melanie… quien dudo seriamente que esté invitada.
Pero bueeeeeno, honestamente, estoy acostumbrada al paseo de luces de distintos colores con gente bailando por aquí y por allá mientras suena la música y todos son felices y todas esas basuras de las fiestas a las que suelo ir. Pero definitivamente no estoy acostumbrada a que sean en nuestro cumpleaños. Y lo peor es que ya no puedo enrollarme con nadie porque, bueno… está mi enamorada aquí presente sonriéndome feliz de la vida… rayos, lo haces más difícil el estar enojada contigo.
-Espero que éste no sea tu regalo-Le digo alzando la voz, ¡maldita música!
-Se ríe y ¡es tan difícil enojarse con ella!-No, mi regalo está en la habitación de Cata… ¿quieres ir?
¿Qué? ¿Qué? ¿Qué?... What? Why? What the hell? Wait, what? No, what? ¡¿Queeeeeeeeeé?! No, no, no, no, no, no, nop, nop, nop, nop, nop… O sea, ¿qué? Naaaaa, eso no pasa, Katherine diciéndome que vaya con ella a una habitación nosotras dos solas en su apartamento mientras todos están ocupados bailando y pasándola bien sin notar nuestra ausencia… eso definitivamente no pasa, NO PASA, ¿¡entienden!?... ¿En serio esto está pasando? ¡Muy bien, no te desesperes! Aprieta suavemente el botón rojo de autodestrucción y ¡desaparece de aquí! ¡No estás tranquila, definitivamente no estás tranquila!
-Claro, me encantaría-Digo tranquilamente y hasta con un toque de indiferencia… Cool… be cool… y ¡boom! Una gata salta del sofá y empieza a acariciar las piernas de Katherine, ronroneando con una expresión de “esto es la puta vida”-Por cierto, le tengo un regalo a esta gata, déjame ver…-Y busco en los bolsillos de mi chaqueta-¡Aquí está!-Y saco un collar verde con una placa de pez-Es… un collar con su nombre y número de teléfono grabados, ya sabes, este año ha incrementado considerablemente el número de robos gatunos-Y entonces me acerco a la gata ésa con mi mismo nombre y ella, extraordinariamente obediente, inclina su cabeza hacia arriba y me deja ponérselo-Bien, ya no pareces una gata sarnosa y callejera-Y me enseña los dientes y hace “¡Ggggg!”
-Su risa es como la risa de Afrodita-Gracias, eres muy linda-Noooo, tú, eres linda-¿Vamos? ¡Sé que lo amarás!
-Mmmh… depende, ¿es un ponny?
-¡Mejor que un ponny!
-Mmmh… ¿Dos ponnys?
-¡Vamos!-Y me golpea suavemente el hombro y yo… quiero… morir…
-Está bien, vamos…
Wiiii, nunca había estado en esta parte de su apartamento… O sea, es un pasillo… y es exactamente igual que mi apartamento… pero, el hecho de que… ¡Es suyo! ¡Y estoy tan cerca de su habitación que puedo sentir su perfume! ¡Aaaah, su delicioso perfume! Creo que me está empezando a caer sangre de la nariz, ¡soy tan pervertida! ¡Tendrán que reservarme un puesto en el infierno! Porque Dios, qué posibilidades de todo con esta niña… a solas… en su habitación… Creo que además de sangrar, estoy babeando… no estoy tan mal, ¿verdad?
La habitación de Catalina es… colorida. Me refiero, es como si un ponny hubiese escupido colores por las paredes y el techo… literalmente. Su cama anaranjada, sus paredes llenas de colores, su librero, con sus libros organizados por colores… Catalina es un ponny en secreto, se transforma por las noches para salvar la ciudad.
-Nanananananananananananananana ¡Ponnygirl!-Digo mientras sigo recorriendo las paredes-¿Por qué hay tantos rainbows en las paredes?
-Re… ¿qué?-Pregunta confundida.
-Rainbows, arcoíris en inglés.
-Aaaah-Expresión de: “todo tiene sentido” mode: on-No sé, papá dijo que las decoráramos como quisiéramos, y a Catalina le gustan esté tipo de cosas. A mí me marean, pero igual se ve lindo… Ahora-Y se me acerca y me toma las manos, poniéndolas sobre mis ojos-Tápate los ojos así, ¡y no los abras hasta que te diga!-Siento cómo se aleja y se abre una puerta, creo que de un closet… esto se está poniendo coqueto-¡Sin espiar!
-Eso depende, ¿te estás desnudando?
-Algo parecido…
-Bien, debes saber que no tengo mucho autocontrol-No muevas los dedos, no muevas los dedos, no muevas los dedos… no espíes, no espíes, no lo hagas… Katherine desnudándose… Katherine desnudándose… Mmmh…
-¡Hazlo!-Me grita mi voz lesbiana, con ése traje de diabla-¡Sabes que quieeeeeeres! ¡Lo veo en tus ojos!
-¿Cómo? Si los tengo tapados.
-¡No la escuches, Gabriela!-Dice mi consciencia vestida de ángel-¡Resiste a la tentación! ¡No sucumbas ante el pecado! ¡Sé fuerte!
-Pero Katherine desnudándose…
-¡Resiste!
-¡Hazlo!
-¡Aaaaaah!
-¡Listo, puedes mirar!
¡Noooooo! ¡No quiero mirar cuando puedo mirar! ¡Quiero mirar cuando no debía mirar! ¡Mi oportunidad se ha ido! ¡Nunca volveré a discutir con mis alucinaciones durante tanto tiempo!
Pero, honestamente, la visión que esta niña me entrega vale más que mil Katherines desnudándose… Oh bueno, mejor no escupo al cielo. Pero Dios… se ve preciosa.
Vestido largo, negro, con sus mangas colgando y un bordado de rosas en los brazos, mostrando un poco de sus piernas, zapatos a juego, negros, con un poco de altura; su cabello recogido… Dios… ¿Cómo logró vestirse tan rápido?.-. me pregunto un poco aturdida, pero creo seriamente que me brillan los ojos como si estuviese viendo a mi cantante favorito. Podría… besarla.
-¿Y qué tal…? Aunque me falta el maquillaje-Dice con un poco de rubor, tal vez porque no dejo de verle la parte de la pierna desnuda. Se ve tan suave, tan delicada.
-Tú… te ves… te ves…-Cortocircuito-Te ves completamente hermosa, Dios… ¿Por qué…?
-Es mi disfraz, ¿recuerdas? Fue un trato y… bueno, ¿te gusta?-Y da una vuelta completa.
-Dios, es hermoso… quiero decir… te queda hermoso, quiero decir… Hey, hey, hey… tiempo… tiempo, tiempo… ¿Y los colmillos?
-Ah-Y sonríe y camina hacia el librero y los saca de una cajita ¿¡Cómo no la vi antes!?-Ahora, estos… son tuyos-Y me pasa unos-Y estos son míos-Y se los pone y me sonríe. Aaaaah… colmillos.
-Aaaaah… colmillos-Digo con voz de excitada. Quiero decir… ¿es normal que la visión de su sonrisa con dos prominentes colmillos me excite? O sea, lo digo en serio… creo que estoy excitada, sobre todo por las hermosas imágenes que me vienen a la cabeza…-Colmilloooooos, tienes colmillos, ¡son tan lindos! ¡Podría morderte!-Dios que podría morderla.
-Me lo imaginaba la verdad… ¡Feliz cumpleaños!-Y va y me abraza. Es tan pequeña incluso con los tacones, ¡bien, ahora me llegas al inicio del cuello!-¿Te gusta tu regalo?
-Eh… depende, ¿mi regalo son los colmillos o verte vestida así?
-Se ríe, ¡deteeeeeente!-Ambos, supongo. Además, no quería ser la única que se vistiera así para una fiesta.
-Ah entiendo, yo hago el ridículo contigo, tranquila…
¡Y el 31 de octubre a las 22:00 pm!
-Sigo diciendo que la escuela da miedo de noche-Digo al lado de Katherine, con mi hermoso traje y mi hermosa corbata negra con mi hermosa capa que me cubre el cuello, mis hermosos guantes blancos de cuero y mis hermosos colmillos y mis ojeras hechas con maquillaje y mi hermosa sangre falsa saliéndome de una parte del labio, supérenme perras.
La música es alta y las luces de colores están everywhere, parejas felices bailando juntitas y con sonrisas de “te violaré” en los ojos de los hombres y sonrisas coquetas en las mujeres. Aaaaaw, estoy de vuelta en mi territorio. En una esquina está “la barra”, claro, ¿cómo no iba a haber alcohol en una fiesta de Halloween para personas de 17 a 18 años? No sé por qué recuerdo instintivamente el sabor a vodka y tengo unas ganas inmensas de tomar un trago. Pero está bien, puedo controlarme, estoy con alguien de 13 años aquí presente, puedo controlarme…
-Si me necesitan, estaré en la barra con mi vodka-Me dice Anais con su disfraz de brujita sexy. Agh, ¡perra suertuda!-Ahora, recuerda: que no vuelva a ocurrir el desastre del 2012-Y se va.
-¿Y se supone que la fiesta es sólo en el gimnasio?-Me pregunta Katherine, ¿les he dicho que… ¡se ve tan jodidamente linda en ése vestido y con la sangre corriéndole del labio y aaaaaaah… tan pálida y sexy!?
-No sé… ¿quieres ir al salón de Emilia la maldita otra vez?-Le pregunta divertida.
-No, en realidad, prefiero sentarme… ¿no te sientes incómoda?
-¿Decías?-Le pregunto ya echada, prácticamente, en uno de los sofás, con un vaso de juguito y bebiendo de lo más normal de la vida-Estoy acostumbrada a las fiestas, ¿tú no?
-No, no me gustan mucho-Dice mientras se sienta en el reducido espacio que deja mi cuerpo echado.
-Ow…-Y me siento como corresponde-Lo siento. Pero… ¡mira!-Y le entrego un vaso-Es juguito de manzana, sano, sobrio, y se va a la cama temprano.
-Aunque-Y le da un sorbo a su juguito-La música me gusta, pero está muy alta. Y me gustan los disfraces de todos, pero hay demasiadas personas. ¡Pero me gustan las luces! Aunque me marean y-
-¡Okey!-Y la paro-Entendí, no sabes qué hacer con tu vida en este momento. Te propongo un trato, ¿porque no esperamos a que pongan una canción que te guste en serio y vamos a bailar un poco?, ¿qué podría salir mal?
-Te podría pisar los pies-Dice avergonzada-O podría chocar con alguien y que comenzaran a pelear… ¡o-!
-¡No seas tan negativa!-Le digo dándole un golpe en su cabeza-Eso de ser un vampiro por una noche te está afectando.
-Pero tú estás extrañamente animada-Dice confundida, ¿siempre debo ser una depresiva compulsiva que quiere asesinar a todo el mundo?
-Es el ánimo de fiesta, hace mucho que no voy a una-Y entonces ponen una canción diferente-¡Wow! ¿¡Conoces esa canción!?
-Eh… ¿Es de Panic!... verdad?
-¡Sí! ¡Perfecta para Halloween! ¡Vamos, vamos!-Y la tomo del brazo y vamos a bailar junto con las demás parejas.
-No, no… te pisaré-Dice mientras sigue mis movimientos.
-No digas eso, sólo déjate llevar. Mira, este es mi secreto-Y carraspeo-… Suaaaaaaaave, exaaaaaaacto-Y muevo mis brazos relajadamente-¡Listo, tu turno!-Y sigo bailando, ¡amo esta canción!
-Suaaaave, exaaaacto-Y mueve sus brazos y se ríe.
-¿Ves? ¡Vamos, sé que te gusta!
Y siento como si se me acercara más y más e, incluso cuando… bueno… ustedes saben que ella es muy baja, ¿no? Es como si hasta se parara de puntillas con tal de estar un poco más cerca de mi rostro y eso me hace sonrojar, ¡y no puedo sonrojarme! ¡Soy un vampiro! ¡Soy un chupasangre! ¡No puedo sonrojarme! Aunque, por otra parte… tenerla tan cerca Dios, tan jodidamente cerca. Okey, no entres en Panic! Y cuenta hasta diez. Mejor aún, suaaaave… ¡Esto no está funcionando! ¡Necesito un nuevo plan! Pero Dios, la forma en que baila tan cerca de mí y me sonríe con esos colmillos y me mira con esos oscuros… ojos… ¿Hola, sí? ¿Un paramédico? Sí, verá, acabo de tener un desmayo a causa de ¡esa hermosa mirada! ¡Esos hermosos ojos negros! ¡La oscuridad detrás de ellos! ¡Aaaaah, colmillos! Y ahí está esta pequeña niña vampiro/francesa bailando feliz de la vida esta genial canción, iluminada por todas las luces y es como si nada más existiese. Hermosa, hermosa niña con sus colmillos, su sonrisa… sus labios. Oh… labios… Hechos para ser mordidos por alguien como…
Yo.
-If it feels good, tastes good… it must be mine-Susurro siguiendo la canción mientras le tomo la barbilla y ella se queda quieta como piedra, ¡claro, ahora no te mueves, ¿verdad?!-So close I can taste it…-¿¡y por qué deja de moverse!? ¡Dime algo! ¡Dime que no lo haga! ¡Que me detenga! ¡No te quedes simplemente ahí callada mirándome con esos ojitos, con esos labios entre abiertos! Con esos colmillos… -Are you sure you’re not going to stop me?-¿¡y por qué ahora estoy hablando en inglés!?
-¡Gabriela! ¿Eres tú, verdad?-Nooooooooo, soy Anais, ahora largo de aquí antes de que te asesine con un cuchillo.
-Perra… Quiero decir, sí-Y con una dificultad enorme, suelto a Katherine y me doy vuelta hacia la persona que será víctima de un asesinato en menos de cinco segundos-¿Y tú eres?
-Soy… Samantha, de tu clase, ¿me recuerdas?
-y la miro de pies a cabeza, ¡joder, tuve un orgasmo! Y lanzo un silbido-Lindo disfraz, ¿qué eres?
-Ah, es de un libro que leí una vez… Eres Gabriela, ¿cierto? Es que tú y Anais…
-Sí, soy Gabriela-Y me río. Dios, esas piernas…-¿Quieres a Anais? Me dijo que estaría en la barra.
-Ah, no, no. Quería saber si… ¿quieres bailar?-Pffff, te hago hasta un masaje en las piernas si quieres.
-Eeeeh…-Y me doy vuelta hacia Katherine, que estaba un poquito… muy roja… Honestamente y sin bromas… ¡Noooo, no quiero bailaaaaar! ¡Sólo quiero besarla!
-Adelante, no me molesta-Y se da media vuelta hacia el sofá en el que estábamos antes. Honestamente, ¿qué esperaba que dijera? No… ¿Qué quería que dijera? Era demasiado bueno para ser verdad…
-Ah… rayos.
Bien, y aquí estoy bailando con Samantha. Ella feliz de la vida y yo con una cara de “pos ni modo” Tampoco es que baile tan mal, de hecho baila tan bien, que sus caderas parecen olas del mar… moviéndose de un lado a otro. Naaa, ni que fuera un gran problema bailar con alguien más. No es que sea algo malo, pfff… ¿por qué me siento tan mal? Da igual, ella es linda, tiene piernas hermosas, un rostro bonito, baila genial… ¿por qué no? ¿Qué podría salir mal?
-¡hazlo!-Dice mi voz lesbiana.
-¿¡De qué lado estás!?-Le pregunto confundida y enojada. Siento que estoy enojada conmigo misma más que con ella.
-¿¡Qué estás haciendo, idiota!?-Me grita mi consciencia-¿¡Por qué eres tan idiota!? Invitas a la niña de la que estás taaaan enamorada a una fiesta, ¿para qué? ¿Qué quieres? ¿Por qué lo hiciste? ¿Para meterte con esta tipa a la que apenas conoces?
-Bueno, taaaal vez Consciencia tenga un punto-Dice mi voz lesbiana-Pero, ¡vamos! Ambas sabemos que tienes más oportunidades de meterte con esta tipa que con Katherine, ¡tal vez ella simplemente no es para ti!
-¡Sí, nunca será para ti si se te ocurre hacer la estupidez que esta idiota te dice que hagas!
-Joder…-Y es como si un piano me hubiese caído en la cabeza-Tienes razón…
-¿Siempre te quedas tan callada cuando bailas?-Es como si volviera a la apestosa realidad.
-Eh, yo…-¿Pero esta tipa por qué vaginas me acaricia la cara? Don’t touch me!-Lo siento, tengo que…-Y miro hacia el sofá, pero ¡oh!, veo a Katherine levantándose y yendo hacia la puerta-Tienes una adicción a irte de improviso, Katherine.
Y bien, ¿será que le gusta hacerme correr detrás de ella? Tal vez, tal vez ella necesite tener algo por seguro. O tal vez simplemente quiere tener lo que quiere, ¿soy lo que quiere? Honestamente, ¿tienes tiempo para pensarlo? ¡Corre! ¡Run Forest, run! ¡Corre como la primera vez que la viste! ¡Incluso más rápido! Y ahí está ella, subiendo las escaleras hacia los salones, ¿en serio?, ¿por qué? Grito su nombre y se da media vuelta y ¡boom! Ella sólo camina más rápido ¡Okey, okey, pero no me odies! Aaaaah, ¡Katherine yo te amo!
Y subo la escalera de dos en dos, ¿sienten eso? Es el sonido de mis pulmones muriendo. Pero, ¿a quién le importa? ¡Porque logré subir! ¡Sí! ¿Un descanso de 5 minutos? ¿No? Bueno… Entonces la sigo persiguiendo hasta que entra a uno de los salones y cierra de un portazo. Auch…
-Pero yo la abro. Es que, ¿cuál es el sentido a correr si igual me dejas la puerta abierta?-Okey… ¿qué rayos pasó ahí abajo?-Y me quito los colmillos que empiezan a cansarme.
-¡Es que no te entiendo!-Explota y sí… está enojada y… sin colmillos-¡Es que tú!-¿Es que yo?-¡Tú eres insoportable!-Auch…-¡Siempre dices que soy yo a la que no entiendes y que hago cosas y luego otras y que no sabes si me gustas! ¡¿Qué tengo que hacer para que entiendas que sí lo haces?!-¡¡¿¿Queeeeeeeeeeé??!!-¡Estoy en una fiesta por ti! ¡Y en serio que odio las fiestas! ¡Catalina me convenció de que les hiciéramos una fiesta de cumpleaños! ¡Y en serio que odio hacer esas cosas! ¡Dios, es que! ¡Es que no te soporto!-Pero, ¿¡por qué!?-¡Odio verte coquetear con otras y decirles las mismas cosas que a mí! ¡Te pones a bailar con ella como si nada!, ¿¡Para qué me invitaste entonces!?-¿Quién eres, mi consciencia?-¡¿Por qué siempre coqueteas con gente cuando estás conmigo?! ¡Porque en serio que duele! ¡Y es frustrante y agotador! ¡Y luego vas y dices que no sabes si te quiero! ¡¡¡Tal vez simplemente yo no sé si tú me quieres a mí!!!-Y termina acalorada, roja de ira y de frustración y mirándome muuuuy enojada.
Y, ¿qué hace Gabriela? Se preguntaran. Pues Gabriela ya se cansó de toda esta comedia. Y Gabriela en dos zancadas se acerca a Katherine que levanta la vista para mirarla al rostro. Y Gabriela la toma por los hombros y se inclina hacia ella y… ¿a que no adivinan? Sería una pena que alguien nos interrumpiera ahora, ¿no? Pero nadie lo hará… Porque Gabriela besa a Katherine en los labios y siente que todo el resto del mundo puede irse a la puta mierda.
Y ustedes están más o menos así…
-¡Siiiiiiiiiií! ¡Al fiiiiiin! ¡Wiiiii!-O algo parecido…espero.
-¡Aleluya! ¡Al fin! ¡Felicidad infinita!-O tal vez estoy exagerando.
-¡Duro contra el muro!-¿O tal vez eso fue pasarme de la raya?
Es como si todo lo demás hubiese desaparecido. ¿A quién le importa la fiesta? ¿O Samantha? ¿O el vodka? ¿Las rubias alemanas o las italianas pelirrojas? ¿Los gatos asesinos o las gemelas divertidas? ¿Acaso algo puede importar más que el dulce… dulce sabor de su boca y la suavidad de sus labios? ¿Acaso algo pude valer más que ver su expresión atónita, sus ojos bien abiertos, la oscuridad de su iris…? ¿Puede haber algo más delicioso? ¿Algo más perfecto? ¿Algo mucho mejor que ver la forma en que cierra delicadamente sus ojos y sentir sus manitas tomándome por la nunca y sus dedos enredándose en mi cabello? ¿¡Acaso algo vale más que el cosquilleo que me da cuando hace eso!? ¿O cómo sigue los movimientos de mis labios contra los suyos de una forma un tanto torpe e infantil? ¿Es su primer beso? ¿Podría esto incluso ser aún más perfecto? Como que ahora esté sonando Stop the World, I Wanna Get Off With You, ¿verdad? Sip, definitivamente este momento no puede ser más perfecto e increíble. Y que con mucho cuidado la rodee por la cintura y lentamente, tan delicada y lentamente la guíe hacia la pared y la presione contra ésta. Aaaah… que deliciosa sensación, ¿podré morder sus labios? ¿O sería demasiado pronto? No, mejor me quedo así, al fin y al cabo… esto es hermoso…
-Espero que… haya quedado claro que también te quiero…-Le susurro a sus labios, a sus ojos, a su mirada…