Era realmente hermosa, Junmyeon lo había notado desde la primerísima vez que la miró de reojo. Tenía el cabello largo y sedoso, y aquél día lo había rizado, y cada vez que daba la vuelta para atender a otros clientes en el trabajo, le hacía creer a Junmyeon que éste bailaba. Ella tenía los ojos cafés - y no aún entendía cómo había logrado hacer a un color tan simple su favorito, y es que brillaban, y sonreían y lo miraban con esperanza y travesura y amor todo el tiempo, y a pesar de las ojeras debajo de ellos, de las pestañas sin maquillar y el delíneador corrido, Junmyeon nunca había visto ojos más bellos.
Ella era casada. Y aquélla relación le había estado robando el brillo a sus ojos y la sonrisa a su boca desde hace ya un tiempo, pero ella era hermosa.
Hermosa, hermosa, hermosa...
Y a Junmyeon nunca le importó realmente su relación o su hijo, que una que otra vez lo acompañaría al trabajo, sentado en una mesa cercana a la de Junmyeon con dos panqueques y un jugo de naranja enfrente de él, de ojos tímidos y cafés - inocentes, como los de su madre.
Ella era mayor que él - el castaño siendo a penas un graduado de preparatoria de 18 años en aquél tiempo, pero eso no quitaba el hecho de que Junmyeon estaba enamorado de ella, desde la primera vez que la miró, y desde que cayó en sus brazos (literalmente).
Pero se había marchado, había dejado a Junmyeon, y ya habían pasado algunos (bastantes) años desde aquéllo, y Junmyeon no podía hacer nada pero evitar su nombre y su recuerdo. Aquella mujer había sido el amor de su vida - lo era aún, y lo sería por bastante tiempo. Y por más que no la culpaba de lo sucedido, de su abandono y de su vacío, no podía recordarla con una sonrisa en el rostro.
Debió de haberlo sabido cuando los platos cayeron al piso y ella cayó encima de él hace todos esos años, de cualquier manera.
(No que no valiera la pena).
Junmyeon no quería recordarla. Ni ahora ni nunca. Aunque los ojos curiosos de Baekhyun aún se preguntara sobre Kris, y aunque Luhan siempre lo veía con simpatía cuando creía que Junmyeon no lo observaba.
Junmyeon evitaba su recuerdo, y lo había estado haciendo perfectamente... hasta aquella mañana. En donde todo había dado un giro de ciento ochenta grados y cambiado su vida para peor (¿verdad?)
Aquél chico... era muy joven, más de lo que ella había sido cuando la había conocido. El chico era joven y tenía una sonrisa suave en el rostro antes de haber caído, y sus ojos brillaban y su voz era angelical y una canción pegadiza que Junmyeon había escuchado en la radio hace muchos años. Una persona normal en la calle pensaría que el mesero estaba normal, feliz, pero Junmyeon sabía mejor. Ya había pasado por algo parecido, de cualquier manera. Y no sabía realmente si su interés por el mesero era porque sus ojos le recordaban a alguien que realmente no quería recordar, y lo hacían querer saber todo sobre él, o el simple hecho de que parecía realmente un ángel caído entre todas las personas. ¿Quizás era sólo el hecho de que había ocurrido de la misma manera en la que su difunta esposa y él se habían conocido? Junmyeon no lo sabía. Pero no podía hacer nada pero cubrirse la cara con las manos con frustración mientras pensaba una y otra vez lo sucedido.
¿Por qué?
Junmyeon suspiró hondo. Aquél joven... aquél joven se había levantado en un apuro: mordido su labio inferior y pedido disculpas un (probablemente) millón de veces. Había sido... un accidente, algo normal, que pasaba todos los días en todas partes. Pero, ¿por qué seguía en su mente, después de dos días completos?
¿Por qué?
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Junmyeon rió una vez más al escuchar a Baekhyun pelear con Kyungsoo sobre el programa que veían en la televisión por el momento - algo sobre ídolos y no importarle sobre el L de dibujo pero el de la vida real, y luego Kyungsoo levantando la mano con el control y pidiéndole que repitiera lo dicho.
Junmyeon, por supuesto, no intervino. No que no le preocupara - porque las amenazas de Kyungsoo cada vez eran más gráficas y creíbles de su parte, pero sabía bien que ninguno de sus hijos se lastimarían entre sí a propósito.
Además, nunca compartía tiempo con ellos, ¿por qué hacerlos cambiar de ser nada más cuando estaba con ellos? No le harían caso, de cualquier forma.
Junmyeon sacudió su cabeza ante los dos menores de la casa, a punto de arrebatarle a Kyungsoo el control, porque, realmente, eso de ahogar a Baekhyun con el control remoto sonaba terrible y tan Kyungsoo de su parte, que temía que lo haría enserio - sin mencionar el hecho de que quería ver el drama de las seis de la tarde, también.
Pero como siempre, el (verdadero) ángel que tenía como hijo lo interrumpió de sus acciones antes de hacerlo.
Luhan tenía un tazón de palomitas en su regazo y estaba sentado a un lado de Junmyeon, rodando los ojos al ver a sus dos hermanos pequeños pelear de nuevo.
''¿Quieres?'' Luhan preguntó, estirando su brazo con pereza para que tomara un puño de las palomitas, pero Junmyeon se negó con la cabeza.
Luhan asintió, ''¿Qué hacen estos demonios ahora?'' Preguntó, acomodándose en su lugar en cuanto Baekhyun tomó poder el control remoto y cambió el programa de televisión.
''¿Algo sobre L's y libretas infinitas?'' Junmyeon dijo, entrecerrando los ojos y haciendo que Luhan soltara una risita.
''Realmente estás viejo, hombre...'' Luhan rió, mientras se llevaba un puño de palomitas a su boca.
''Mhm...'' Junmyeon murmuró, mirando fijo a Luhan cuando se dio cuenta de que no había preguntado nada sobre el incidente de la cafetería aún.
''¿Cómo está el chico- el mesero del Sábado, por cierto?'' Preguntó, interés notable en su rostro.
Luhan alzó una ceja, ''¿Hablas de Yixing? Está bien, supongo. Eso... ha estado sucediendo desde ya hace mucho tiempo... se sorprendió de cómo lo trataste, por cierto. Yo le dije que trataste de coquetear con él.''
Junmyeon casi se ahoga con el aire.
''¿Disculpa?''
Luhan sólo rió de nuevo, evadiendo el tema.
''Cuando Yixing tira cosas o comida... no lo sé, normalmente es tratado mal por las personas. Yo no entiendo cómo pueden ser tan malos con él... ¿lo has visto? ¡Es un bebé!'' Y Junmyeon rodó los ojos, nada sorprendido con la mentalidad de su hijo sobre una persona años mayor que él.
Por eso se había disculpado tanto, entonces... Junmyeon decidió.
''¿Entonces pasa seguido?''
''Más de lo que debería...'' Luhan contestó, pensante, ''¿Por qué el repentino interés, eh?
Junmyeon sólo se encogió de hombros.
''Curiosidad, supongo.''
No era importante, realmente - o eso al menos le gustaba pensar.
Por lástima Luhan sabía eso, por lo que rodó los ojos y se llevó otro puño de palomitas a la boca.
''Mmmm... curiosidad... lo que digas.''
Junmyeon fingió no haberlo escuchado.
Y Luhan pretendió no saberlo, parpadeando dos veces y enfocando su vista en la televisión.
''Me temo que si sigue así... Yixing pueda perder el trabajo... ¿sabes? Eso de desmayarse encima de clientes y rompiendo platos cada dos días no es muy bueno para el café...'' Luhan dijo, un poco interesado en lo que tenía que decirle Hyun Wook a Se Na antes de marcharse.
Junmyeon alzó una ceja, ignorando por completo el quejido de Baekhyun, que estaba a unos metros de él.
''¿Huh?'' Junmyeon nada más articuló, estaba confundido... ¿entonces se desmayaba seguido? Junmyeon sintió un nudo en su garganta, las circunstancias le recordaban tanto a...
Su pasado... ¿otra vez? ¿por qué?
''Mmmm, sí... O sea, ya ha tenido problemas con el dueño del café porque siempre parece estar enfermo o algo - tiene dolores de cabeza y se desmaya y todo eso, pero él dice que no lo está...''
''... Y aunque lo esté, necesita el trabajo, de cualquier manera... entonces eso de días libres no suena bien para él ni su cartera.''
La atención de Junmyeon estaba ahora al completo en lo que Luhan estaba diciendo, y Luhan soltó una risita por ello.
''Sé que no debería de hablar de esto contigo... porque, digo... ¿no es que te importe, ni nada, cierto? Pero tiene problemas con el dinero, y aparentemente como, veinte hijos también.'' Luhan rió, y Junmyeon lo fulminó con la mirada.
No es que nosotros seamos una familia pequeña tampoco.
''¿Y no ha buscado un trabajo más? No lo sé... ¿que pague más?''
Luhan rodó los ojos.
''Sí, pero, papá... más dinero significa más horas fuera de casa, y, por más que supongo y le suena tentador, más horas trabajando para él lo llevarían a una muerte segura,'' Hizo una mueca, ''Lo juro. Aparte, tiene otros trabajos más.''
¿Trabajos? ¿En plural? Junmyeon frunció el ceño. Realmente a veces olvidaba que la tenía fácil a comparación de muchos...
''¿Por qué tiene tantos hijos?'' Junmyeon preguntó, y Luhan rió de nuevo, ''¿No es como, de tu edad?''
Luhan se encogió de hombros.
''No, creo que es menor que tú... pero ¡no tanto! Y... bueno, ¿por qué tienes tantos hijos tú? Realmente no lo sé.''Luhan contestó, con un puño de palomitas en su boca, que hizo que Junmyeon cambiara de tema y lo reprimiera sobre los modales que le había enseñado y probablemente olvidado ya hace mucho tiempo, Luhan sólo rió más, y Baekhyun le lanzó un gajo de naranja, diciendo que necesitaba escuchar la voz de L y que la risa molesta de Luhan no ayudaba en nada.
Junmyeon sólo sacudió la cabeza y terminó comiéndose el gajo de naranja, viendo a la televisión pero no observando - delante de él, personas y colores y cosas ocurrían de manera borrosa pero lo único que tenía en su mente era Yixing.
Yixing... te quiero ayudar.