Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Deseo o amor? [MINKEY] por Laualva

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¿Los hice esperar mucho? ¿Verdad? ¿Ansiosos? muy bien, acá esta el capitulo 10, se pueden dar cuenta que me inspiré como nunca, es en realidad el final que esperaba para esta historia que al comienzo empezó con nada más que deseo para convertirse en una historia tierna.

¿Qué pasará con Minho y Kibum? ¿Dejarán el pasado de un lado para convetir su historia en amor? ¿O simplemente se van a dedicar a ignorar sus sentimientos? Acá les dejo el capitulo para que se enteren.

La verdad me da mucha pena que sea el final, suena medio estúpido pero me encariñé mucho al escribir esta historia así como espero que a ustedes igual les haya gustado, sin nada más que decir los dejo que lean el final de esta hermosa historia.

10.  Realidad.

 

 

 

 

*Pov Minho*

 

 

- ¡Changmin! ¿Qué haces aquí amigo? Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos hemos visto.-Lo abrazo.

 

- ¿Cómo no venir a ver a mi amigo de toda la vida? Sabes ya no aguantaba de que me llamaras todas las noches y me dijeras lo que pasaba por tu vida, hace poco me recibí y bueno ya tenía planeado volver a Seúl.

 

- Que bueno enserio, de verdad que estoy muy feliz. ¿Quieres algo de tomar?

 

- Si por favor, un café.

 

- Okey.

 

- Ahora sí cuéntame ¿Cómo van las cosas con el rubio?

 

- Ya no rubio, se tiño de negro cosa que le queda muy bien.

 

- Mm, ya puedo ver en tus ojos que te sigue gustando. La forma en que hablas de él, ya sabes…

 

- No, para nada no es así.

 

- Puedes mentir todo lo que quieras Minho, pero tu cara no dice lo mismo sabes.

 

- Si, también lo creo así…

 

 

De repente empieza a sonar mi celular.-Disculpa hyung tengo que atender.

 

- Bueno, no hay problema.

 

Corto la llamada y voy directamente donde Changmin se encontraba sentado.

 

- ¿Y hyung? ¿Quién era?

 

- Me propusieron para ser modelo en el desfile de la línea de bodas de TH.

 

- ¿Sí? ¿Y qué les dijiste?

 

- Que sí.

 

- ¿Es enserio esto Minho?

 

- ¿Por qué lo dices?

 

- Tú siempre odiaste esas campañas de moda y todo eso ¿Qué es lo que sucede?

 

- Es que últimamente estoy aceptando todas las ofertas que me hacen, ya sabes…me quiero olvidar de todo con el trabajo.

 

- Minho… no puedes estar toda la vida lleno de trabajo, lamento decirlo pero te va a durar poco.

 

- Lo sé.

 

 

 

*End pov Minho*

 

 

 

 

Seguía acostado en mi cama con Comme des a mi lado, tenía el celular apagado, no quería saber nada, tenía muchas cosas de las cuales pensar, ¿Por qué Minho se había comportado tan fríamente después de ese encuentro tan lindo que tuvimos? Ni yo lo sabía, solo quería estar alejado de todo por un momento, me daba la idea que los chicos seguro estarían buscándome por todos lados ya que habían tocado la puerta de mi departamento diez veces en tan solo dos días que estuve alejado de todo, lo necesitaba.

 

 

 

Ya era hora que todo terminara entonces decido por encender mi celular y encontrarme con miles de llamadas así como mensajes perdidos pero también con una llamada de Krystal en este mismo momento.

 

 

 

- ¿Kibum? ¿Estás ahí? ¡Habla! ¡Di algo!

 

- Ah…Hola Krys…

 

- ¿Cómo andas? Kibum me tienes preocupada.

 

- Krys solo fueron dos días.

 

- ¿Dos días? ¿¡Dos días!? ¿Es enserio Kibum? En esos “dos días” como dices tú pasaron muchas cosas por la compañía.

 

- Bueno Krystal entiéndeme no estuve bien.

 

- Cierto…perdona es que no me pude controlar con tanto aquí, si quieres… después hablaremos de ese tema pero ahora tienes que venir a la compañía.

 

- ¿Pasa algo?

 

- No, solo es que Sunggyu te está necesitando para confirmarte el modelo que consiguió.

 

- ¿No sabes el nombre por alguna razón?

 

- Mm, no, él sólo dijo que era sorpresa, ven, ya.

 

- Okey, voy en camino y… gracias Krys.

 

- No hay de que Kibum, solo ven.

 

 

 

 

Corté la llamada y no tuve otra alternativa que levantarme de la cama, mi cuerpo no respondía pero sólo tuvo que hacerlo por obligación al tener que bañarme y vestirme bien presentable.

 

 

 

 

 

- Hola Kibum cuanto te extrañé no sabes.-Venía corriendo hacia mí una Krystal muy emocionada con mi regreso aunque solo haya desaparecido dos días.

 

- Oh gracias Krys por estar conmigo en todas.

 

- Ah de eso… lo hablaremos después, ya sabes.

 

- Después de la reunión ¿Te parece?

 

- Buenísimo, necesito despejarme un poco.

 

- Ahora solo vallamos a la sala que allí esperaremos a Sunggyu.

 

 

 

 

 

 

- ¡Hola Kibum! Traté de todos los medios llamarte en estos días ¿Qué ha pasado?

 

- No es nada Sunggyu, mis máximas disculpas, de verdad, sólo que las cosas se pusieron complicadas en mi vida y bueno, sabe…

 

- Ah suele suceder, no tienes por qué preocuparte, pero bueno, ahora vamos a lo más importante, tengo un modelo que te va a encantar.

 

- Y ¿Dónde está? ¿Ya aceptó la propuesta?

 

-Obviamente que aceptó sino no hubiera venido, ahora mismo estaba haciendo una llamada afuera, espérame un rato lo iré a buscar.

 

 

 

 

 

Sunggyu se fue afuera y al rato volvió a entrar con la puerta entre media cerrada.- Muy bien, aquí tenemos al talentoso modelo actor relevante de todos los tiempos Choi Minho.

 

 

 

“Choi Minho” ese nombre daba vueltas y vueltas en mi cabeza haciendo que mis ojos vean como el nombrado aparecía de atrás mirándome con sorpresa la cual mi reacción era la misma, los mismos se cristalizaron de una forma rápida apenas vi ese rostro que tan malos recuerdos me traía, quería gritar, quería llorar, la idea era no verlo más pero ahí estaba delante de mí, me sentía idiota por ser el único sensible ya que mirándolo me daba cuenta que ningún sentimiento se transmitía ni se podía leer con facilidad.

 

 

 

- Kibum ¿Estás aquí?

 

- Oh si perdona.-Cerré los ojos profundamente evitando que mis lágrimas empezaran a caer-.

 

- ¿Se conocen?

 

- No.-Me digne a decir sin pensar notando una expresión extraña en Minho.

 

- Ah bueno genial, así empezamos desde cero a conocernos.

 

- No tenemos tiempo para eso Sunggyu ¿No Minho? Tengo miles de planes después de esto así que vamos al grano ya.

 

- Bue…no.-Me responde Sunggyu con un tono molesto.

 

- Okey Choi Minho ¿Tienes idea de que se trata esto?

 

- Si, ya me lo ha explicado todo Sunggyu.

 

- Buenísimo entonces ¿Tienes idea que vas a pasar con Luna en el cierre de la línea de bodas? ¿No?

 

- Sí.

 

- ¿Qué te ha parecido el concepto que eligió Kibum? ¿Te sientes cómodo? Perdona por tantas preguntas pero sólo es que es raro que aceptes un proyecto tan rápido y más si se trata de moda.- Interrumpe Sunggyu.

 

- Me encanta.-Responde Minho mirándome de una forma muy penetrante que incomodaba.

 

- Entonces no hay nada más que hablar, me agrada que haya sido de tu comodidad mi concepto, mi línea y todo lo demás Minho…

 

- Para mí también es un placer trabajar contigo Kim Kibum.

 

- Entonces si ya está todo supongo que me puedo ir, muchas gracias por todo Sunggyu y Minho, espero que todo salga a la perfección.

 

- Ojala sea así.-Responde Sunggyu para después hacer una reverencia e irme.

 

 

 

Salí de la sala totalmente mareado, rápido, mis ojos querían llorar ya que no paraban de lagrimear, mi nudo en la garganta no aguantaba más, quería explotar para el colmo el ascensor no llegaba al piso donde estaba Krystal, se hacía eterno.

 

 

- Krys, abrázame.

 

- ¿Q-Que te pasa Kibum? Dime ¿Po-por qué estás así?

 

- No doy más.-Susurro apenas dejándome caer en los brazos de Krystal que es la única que estaba ahí escuchándome, viéndome llorar como nunca antes me había visto, totalmente desarmado.

 

- Kibum salgamos por favor no te puedo ver así.-No asentí, no dije nada sólo salimos y al bajar un par de pisos nos encontramos a Minho, ahí, parado, viendo la escena, viendo mis lágrimas, escuchando mi llanto sin poder calmarlo haciendo por voluntad y orgullo morder mi labio inferior para aguantar que salieran más lágrimas de las que ya eran notorias.

 

 

 

 

- Ki-Kibum… ¿Podemos hablar?-No respondí haciendo que Minho me tomara de la muñeca arrastrándome con él fuera del edificio.

 

- ¿Qué pasa? ¿Por qué estas así?

 

- ¿Por qué estoy así? ¿En serio lo preguntas Minho? ¿En serio?

 

- Sí.

 

- Por ti.

 

- ¿Por mí?

 

- Ya no aguanto más, me siento idiota.

 

- Perdona.

 

- Perdona nada Minho, nada. Me siento mal y tu ni siquiera levantas el tubo para preguntarme como estoy o tan solo como me estoy sintiendo.

 

- Es que yo…

 

- ¿Es que yo que Minho? ¿¡YO QUE!?-Grito haciéndolo asustar ante mi reacción y dejando caer nuevamente mis lágrimas de forma rápida sin poderme calmar.- ¿Es que aún tenías mucho para pensar? Ni siquiera sé que es lo que tienes que pensar, ¿Pensar sobre que Choi Minho? Haber dime.

 

- Sobre ti, sobre nosotros.

 

- Ah ¿Sobre mí? ¿De seguro es sobre mi pasado, no es así? Sólo porque te fuiste fuera de Seúl sin decirme nada ¿Pensabas que yo me iba a quedar aquí de brazos cruzados preguntándome por qué te habías ido? No Minho, lamentablemente no es así. Sabes, perdona por haberme hecho conocer como una puta barata porque es así como me ves ¿Cierto? Por eso que tienes “mucho para pensar” pero sólo lo que estás haciendo es darle vueltas al asunto porque no tienes el valor de darme la confianza que tanto necesito sólo porque te dejas llevar por los comentarios de otros que anteriormente se acostaron conmigo, y si está bien, yo antes era así, no te lo niego, y es más ¡Me hubiera quedado así si hubiera sabido que iba a tener estos sentimientos de mierda que tengo por ti!

 

 

- ¿Sentimientos de mierda?

 

- Sí, sentimientos de mierda, porque eso es lo que son, me cansé Choi Minho, me cansé de que me hayas tenido a las vueltas y ser un juguete para vos, me cansé de la cantidad de dudas que tienes sobre mí, me cansé de ti.

 

- Kibum…

 

- ¿Sólo eso puedes decir no? Sabes que tengo razón, lo sabes pero ya no más Minho, me voy, y olvídate que alguna vez aparecí en tu vida.-Me di vuelta para irme donde se encontraba Krystal esperándome con el auto.

 

- Tú no tienes idea de lo que yo siento por ti, es cierto, tengo dudas y perdona por eso pero por favor, te pido…no llores más Kibum y menos por mí, no me lo merezco, no puedo verte así, sabes lo cuanto que odio que llores, me destruyes.

 

Lo escuché, claro y paré al sentirlo hablar pero seguí mi camino como si no hubiera escuchado nada.

 

 

 

 

 

- Kibum te ves tan irreconocible.

 

- Lo sé Taeminnie…

 

- Me duele el alma verte así Key.

 

- Lo sé Onew…

 

- Ha estado así desde que llegamos.

 

- Ah y gracias por eso, si no hubiera sido por ti Krys ya no sabríamos por donde más buscar.

 

- No se preocupen chicos enserio, ya no hay nada más entre Minho y yo.

 

- Pero no parece.

 

-Te sigue importando.

 

- Lo sé pero ya no puedo hacer nada con eso.

 

- Kibum…siento que te sientes muy incómodo aquí ¿Quieres que te llevemos a tu departamento?- Pregunta Krystal.

 

- Si, por favor.

 

 

 

 

 

Al llegar al portal, saco mi llave, subo al ascensor, al entrar me tiro sobre la cama con comme des a mi lado, como siempre mientras leía el nombre “Minho” en la pantalla con 25 llamadas perdidas, cierto, había olvidado mi celular en el departamento, lo apagué por las dudas que siguiera llamando y me fundí en mi almohada llorando como siempre, como lo estuve haciendo durante todo este tiempo, destrozado, desahogándome mientras comme des se acercaba a mí, acurrucándose mientras lamía mis lágrimas, sabía que su dueño se sentía mal.

 

 

 

 

Al levantarme sirvo la comida de comme des y me preparo un café totalmente cargado, las palabras de sunggyu no salían de mi cabeza “dos semanas” “bocetos” “terminados” aish, no tenía ganas de nada, me sentía terrible pero no me quedaba otra.
Me decido por encender mi celular, las llamadas perdidas de Minho habían aumentado mientras tenía una entrante que era de Taemin.

 

 

 

- Hola Taeminnie.

 

- Uy Kibum, sí que se te escucha arruinado.- ¿Irás a la compañía?

 

- No, no iré por estas dos semanas ya que me dieron plazo para que terminara los bocetos de la línea de bodas.

 

- ¿Cómo te sientes?

 

- Para nada bien.

 

- Lo suponía, ¿Minho? ¿Alguna novedad?

 

- No, sólo sus llamadas perdidas.

 

- Entiendo, queremos estar a tu lado Kibum ¿Nos permites?

 

- Claro mi pequeño pero vengan a la noche por favor ahora tengo que empezar con los bocetos.

 

- Esta bien kibummie enserio, no te queremos ver mal.

 

- Okey, intentaré…y por favor, si llega a dar de esas casualidades que Minho pregunte sobre mi departamento no digas ni una sola palabra, no quiero verlo.

 

- Si Key tampoco pensaba hacerlo, por favor, cuídate.

 

- Tú también nos vemos en la noche.

 

 

 

Finalicé la llamada para empezar con lo que me correspondía en estas dos semanas, sólo trabajo, capaz tenga alguna ventaja de olvidarme del millón de cosas que han pasado en todo este tiempo.

 

 

 

 

 

*Pov Minho*

 

 

- ¿Y Minho? ¿Cómo están las cosas?

 

- Mal, como de costumbre.

 

- ¿Aún no contesta?

 

- No, tiene o pretende tener el celular todo el día apagado.

 

- Menos mal que aunque sea tienes el celular.

 

- Sí eso es lo único bueno porque si no no sabría cómo ubicarlo, aunque tampoco contesta.

 

- Pero y si llegara el caso que contestara, ¿Tienes planeado que decirle?

 

- Sí, lo extraño y mucho, quiero verlo, ya no tengo más dudas o eso supongo, ya no me quiero llevar por comentarios malos de la gente.

- Es que así tendría que haber sido desde el principio.

 

- Lo sé Changmin lo sé, creo que no habrá otro remedio que vernos en el desfile.

 

- En el desfile, no pierdas la oportunidad de decirle todo lo que te estas guardando.

 

- Sí, no veo la hora de desahogarme y acabar con todo esto.

 

 

*End pov Minho*

 

 

 

 

 

Ya pasó una semana y media desde que no voy a la compañía y se sentía bien, sólo estaba en mi departamento con mi perro y de vez en cuando venían Taemin y Onew, al parecer no me equivoque en nada… el trabajo me hizo olvidar muchas cosas lo cual me hacía bien.

Era una tarde tranquila, últimamente mi comida estaba siendo café, solo café y mi escritorio era donde me pasaba sentado las 24 horas del día, ya no quería apagar más mi celular pero lo tenía en silencio debido a las interminables llamadas de Minho, mi celular vibraba mi conciencia decía que era Minho pero al mirar el nombre que se leía en la pantalla, no era Minho, era mamá, me resultaba todo muy raro pero accedí a contestar.

 

 

- Hola ma que…

 

- Kibum ¡Ven ya al hospital tu abuela está muy grave po-por favor ven!-Decía tartamudeando gritando y se escuchaba su respiración entre cortada por el llanto.

 

- ¿¡QUE!? ¿MAMÁ HABLAS EN SERIO?

 

 

Mi madre finalizó la llamada, mis manos temblaban, mis ojos empezaron a derramar lágrimas muy notorias lo cual no me permitía ver con claridad, lo único que pensé fue en agarrar la primera campera que se me cruzara y salir con el auto hacía el hospital. Ni yo sé cómo fui capaz de conducir con la vista totalmente nublada, mis ojos rojos sin poder dejar de llorar.

 

 

Al llegar estaban Taemin y Onew abrazándome con reacción  de que recién se habían enterado.

 

- ¿C-cómo está la abuela mamá solo dime la verdad por favor!-Me dejo caer en sus brazos como un niño pequeño que era hace tiempo sin parar de llorar en sus brazos, exigiendo una respuesta.

 

- N-no lo sé hijo no lo sé todavía no nos dicen nada.

 

- Hijo, todo va a estar bien, tranquilo-Aparece mi padre, abrazándonos con fuerza aguantándose las lágrimas por nosotros.

 

 

 

Mi abuela era una de las mujeres más impresionantes que podían haber en la tierra, eran de esas mujeres únicas que ya no había, para todo ella estaba, me sentía mal y ella estaba ahí aconsejándome como nadie sabía hacer, me mimaba de muchas formas y me apoyaba hasta en lo que mis padres en ocasiones no querían, era como una segunda madre con todas las letras y no se podía estar yendo, no, no podía ser cierto.

 

 

 

Me separo de los brazos de mis padres llorando desesperadamente sin ni siquiera poder calmarme, simplemente no podía, me fui más al fondo de la sala e hice lo que mi corazón me dictaba y llamé a Minho temblando y hablé como pude.

 

 

 

- ¿Q-Qué pasa Kibum? ¿Estás bien?

 

- Mi-Minho…

 

- Di dime.

 

- Ven al hospital por favor te…te… necesito.-Susurro perdiendo el equilibrio sentándome en una pared que había cerca, finalizo la llamada aun temblando sin poderme controlar.

 

 

No pasó ni media hora que Minho llegó totalmente desesperado entre los ojos de todos buscándome, cuando me encontró tirado apoyando mi cabeza sobre la pared corrió hacía mí.

 

- ¡Kibum!

 

- Con que estás aquí.

 

- Cómo no iba a estar en este momento, Kibum, dime, como no iba a estar.-Dice desesperado abrazándome fuertemente.

 

 

Pasaron apróximadamente dos horas para finalmente escuchar el terrible y nada bueno "¿Familia Kim?" de una doctora acercándose hacía nosotros, me levanté rápido con Minho abrazándome de la cintura acercándome donde estaba mi familia.

 

- Si, aquí estamos-Responde mi madre totalmente desesperada-Díganos por favor cómo está mi madre ¡Díganos!

 

- Pues…lo lamento pero su madre…no pudo resistir, mi más sentido pésame familia.

 

 

 

“Mi más sentido pésame” “Mi más sentido pésame” “Mi más sentido pésame familia” no caía de lo que estaba pasando, no caía que mi abuela se había muerto, no caía que mi abuela no pudo luchar más, no caía que me encontraba en esta clase de situación, no podía.

 

 

Me di vuelta quedando frente a frente con Minho que no tardó en abrazarme y haciéndome aferrar a su camisa mojándola de lo que cuanto que estaba llorando.

 

 

Llegamos a mi departamento, Minho condució y de paso supo dónde estaba viviendo, entramos y no hice más que recostarme en mi cama con Minho a mi lado acariciando mi pelo mientras me veía llorar más fuerte y me daba pequeñas palmaditas en mi espalda como si de un nene pequeño se tratase.

 

- Min-minho…

 

- Kibum, solo desahógate, no es necesario que hables por hoy.-Susurró.

 

- Gracias.

 

- No tienes por qué decirlo, te amo, y sabes que estaré en todas contigo, sabes que me duele verte así pero comprendo toda la situación, no es nada lindo verte en este estado de seguro tu abuela fue una persona maravillosa y hasta me da pena no haberla podido conocer, pero tienes que ser consciente de que está en el cielo mirándote, esperando que triunfes como siempre lo has hecho sabes, vas a salir adelante.

 

- Eso espero Minho, eso espero.-Susurro nuevamente para fundirme en sus brazos y no hacer otra cosa más que llorar con Minho a mi lado, era lo único que necesitaba y no me arrepentía de haberlo llamado, sin duda, fue lo correcto.

 

 

 

 

 

 

*Pov Minho*

 

 

Abrí mis ojos después de la noche para nada buena que habíamos tenido, era raro, me había despertado antes que Kibum, observe su rostro, totalmente decaído, arruinado, era obvio que iba a seguir así y me hacía la idea de acostumbrarme a esta situación y más que nada estar a su lado pase lo que pase, tenía que estar ahí, dándole las fuerzas que necesitaba, dándole el mejor apoyo posible. Mentía si dijera que no me destruía la forma en donde sus manos se aferraban a mi camisa así como su rostro se acunaba en mi cuello toda la noche hasta ahora, su rostro totalmente seco a causa de la cantidad de lágrimas que se derramaban sobre éste, parecía un niño indefenso, un niño el cual tenía que cuidar y animar, un niño que necesitaba de mí y que iba a hacer todo lo posible para que no sintiera mi ausencia en absoluto.

 

 

Me levanté despacio, no quería molestarlo ni despertarlo, me encargué de darle la comida a comme des el cual presentía cual era el estado de su dueño y no molestaba para nada. También preparé el desayuno para Kibum, el cual hice con mayor delicadeza y en silencio para no despertarlo hasta que estuviera listo.

 

 

 Fui despacio a la habitación donde se encontraba Kibum todavía durmiendo, fundido en las sábanas, me daba pena despertarlo pero tenía que hacerlo en cualquier momento ya que éste al parecer no había comido nada desde hace bastantes días.

 

 

- Kibummie…es hora de despertar-Susurro en su oído dejando un duradero beso en su mejilla.

 

- ¿Mmh?- Responde confundido tratando de abrir los ojos.

 

- Te traje el desayuno bummie, ya, es hora de abrir esos ojitos.

 

- ¿Min-minho?-Trataba de abrir sus ojos de una forma muy adorable, al parecer todavía tenía demasiado sueño y cansancio.

 

- El mismo-Me siento a su lado.

 

- Gracias.-Deposita un beso en mi mejilla.

 

- Al parecer eres olvidadizo Kibum, ayer me dijiste lo mismo.

 

- No soy olvidadizo… solo es que no tengo palabras para agradecerte lo que hiciste por mí, no tenías necesidad de ir anoche y sin embargo lo hiciste.

 

- Lo hice, sí, pero no porque sea una carga bummie, sólo es que… me importas y sabes lo mucho que me destruye verte llorar.

 

- Gracias, de verdad…Minho.

 

- De verdad no tienes nada que agradecer, cambiando de tema ¿Cómo vas con los bocetos?

 

- Minho… por favor no hablemos de eso.-Exigía mientras untaba un poco de dulce sobre la tostada.

 

- ¿Por qué?

 

- No tengo tiempo para trabajo, ¿No ves cómo estoy?-Kibum me miraba mientras sus ojos se iban cristalizando lentamente.

 

- Pero Kibum…yo te ayudaré.

 

- Minho, no te gustan estas cosas.

 

- Pero yo soy parte de tu proyecto, además no puedes estar toda la vida así delante mis ojos destruyéndote y yo sin poder hacer nada.

 

- Tampoco te lo pedí.

 

- Eso es lo que tú crees, pero tus ojos demuestran otra cosa Kibum, deja ayudarte, déjame…-No asintió, no dijo nada, no podía decir nada.

 

- Sabes…-Seguí-piénsalo tu abuela lo que más quería era que sigas tu sueño, que seas feliz.

 

- ¿Y tú Minho, como sabes? Ella ya no está aquí.

 

- Kibum, estás siendo demasiado duro contigo mismo y esta conversación ya no me está gustando, aunque yo no alcancé el privilegio de haberla conocido te escuchaba, escuchaba cada palabra que salía de ti, con atención y cuando se daba la oportunidad hablabas de ella, las cosas que decía, que soñaba o esperaba de ti, sólo hazla feliz con el deseo que tenía ella, sé feliz Kibum, no te derrumbes.-Salí de la sala sin esperar respuesta alguna y me dejé caer en el sofá de la misma desordenando mi cabello con mis manos.

 

Después de unos minutos por el pasillo se aparece Kibum mirándome mientras se acercaba y se sentaba a mi lado.

 

 

- Intentémoslo.-Me susurra para después abrazarme fuertemente, él nunca lo había hecho, se notaba en el agarre de su abrazo que me necesitaba, más que nunca, que yo era el único, estaba seguro de eso.

 

 

- ¿Estás seguro?

 

- Si Minho, como dices no puedo dejar que esto me arruine, y de verdad quiero conceder el último deseo que tenía mi abuela sobre mí.

 

- Así se habla Kibum, en verdad vas a salir adelante, yo me voy a encargar de que así sea, ahora empecemos que hay mucho trabajo.

 

 

 

 

Han pasado unos días, los cuales fueron de trabajo extremo, bocetos por todos lados, me aseguraba de comprar comida y que a Kibum nada le faltase, de vez en cuando venían Onew y Taemin a hacernos compañía y tratar de animar a Kibum. En algunas ocasiones Kibum se iba a ver a sus padres y tratar de desahogarse con ellos, llorar le hacía bien y eso era lo que quería que se desahogase y no se guardara nada, sabía que el dolor no iba a terminar de un día para el otro, hasta podía durar toda la vida pero yo iba a estar ahí en todas con él, porque sí… lo amaba, además tenía que admitir que todo este tiempo en el cual lo estuve acompañando día tras día lo iba conociendo, iba conociendo cada y una de sus fases, cuando estaba feliz, triste o tan solo cuando no le agradaba algo. Sabía de sus gustos como él los míos y aún seguía siendo esa personita que me encantaba tanto.

 

 

*End pov Minho”

 

 

 

 

 

Han pasado hasta semanas y la verdad le tenía que agradecer y mucho a Sunggyu por tenerme paciencia hasta poder terminar los bocetos.

 

 

 

 

Hoy era finalmente el día del desfile y del lanzamiento de la nueva línea de bodas, estaba nervioso, estaba que se acercaba el momento del cierre con lo nuevo de mi colección, fui hacía la sala donde se encontraban las modelos, mis modelos.  Apenas aparecí todas las modelos venían a mí con una gran sonrisa y comentándome lo cómodas que se sentían con la colección, haciéndome sentir orgulloso mientras ayudaba a las estilistas con algunos retoques en los vestidos, no era mi obligación, pero quería hacerlo.

Salí de esa sala para meterme en la mía, estaba todo tan bien organizado que me encantaba ya que yo también tenía algo parecido a una oficina solo para mí detrás de todo el evento.

Los pensamientos no paraban de rodear y dar vueltas en mi mente, no caía que ya era el día, era el día en donde le cumpliría el deseo a mi abuela de ser ese Kibum que siempre ella quiso, ese Kibum que era feliz, ese Kibum que ya no necesitaba de nadie, el Kibum que era feliz por sus propios medios y seguía sus sueños como de pequeño. Un golpe sobre la puerta me hizo salir de esos pensamientos y concentrarme por quien quería entrar.

Era Krystal con esa sonrisa tan adorable que siempre estaba dibujada en su rostro al verme.

 

 

- Ay Kibum cuanto me alegro que estés aquí-Dice tan dulcemente abrazándome cálidamente.

 

- Yo también Krys no sabes.

 

- Fue un tiempo duro el estar sin ti, aunque fueran semanas, todo se sentía tan silencioso en la compañía, se notaba tu ausencia.

 

- No te das una idea lo bien que me hace escuchar eso Krys, pero ya no más, ahora Kibum vuelve para no irse más.

 

- Ay que emoción Kibum me encanta verte así, enserio ah y venía a contarte que los chicos ya se encuentran en la tribuna observando todo desde ahí.

 

- Que idiotas que son, nunca venir a verme.-Respondo en forma de puchero haciendo a Krys reír pero todo se puso incómodo cuando escuchamos que alguien tocaba la puerta de la sala.

 

- Ah… bueno, creo que es hora de irme…-Me mira Krystal desapareciendo por la puerta.

 

 

 

 

- ¿Me ayudarías con esto?-Mis ojos solo veían a un Minho con cabello muy elegante, sus ojos totalmente delineados, maquillado, un traje de encaje increíble, pidiendo que lo ayudara con la corbata con forma muy provocativa en su rostro.

 

- ¿Lo haces apropósito verdad?

 

- Mm, yo no lo vería de esa forma-Respondía mientras no despegaba sus ojos de mí al acercarme a poner su corbata.- ¿Cómo estás Kibum?

 

- Bien supongo.

 

- ¿Pensamientos?

 

- Si, muchos, no puedo dejar de pensar en ella y en su deseo que se está a punto de cumplir, en mi regreso, en todo, pero bueno… no es momento para tocar el tema así que… ¿Qué te ha parecido la colección? ¿Es de tu estilo?

 

Minho no prestando mucha atención a mis últimas preguntas se acercó más y más abrazándome fuertemente haciendo que mis ojos se cristalicen otra vez…-Kibummie, no tienes que sentirte así ¿Sabes? Tienes que estar orgulloso de alcanzar tu sueño así como el de tu abuela de ser el más reconocido, si antes lo eras ahora eres más reconocido, sé que nada se compara con tener a tu abuela aquí con vida, pero no puedes estar así toda la vida, sé que es difícil y trato de entenderte pero por favor, no decaigas, piensa que aquí estoy yo, siempre a tu lado, el cual no quiere verte mal, te amo y me destruyes de una manera que ni te imaginas, quiero verte feliz y orgulloso de ti mismo-Susurra para alejarse unos centímetros para luego apoyar sus labios sobre los míos en un largo, suave, dulce y lento beso, un beso el cual me demostraba que él iba a estar ahí a pesar de todo, apoyándome en toda situación. Extrañaba besarlo después de tanto tiempo que no lo hacía, extrañaba tenerlo cerca de esa forma, extrañaba que en sus brazos me transmitiera toda esa seguridad que necesitaba.

 

- Gracias Minho-Fue lo único que podía susurrar en ese momento.-Gracias… de verdad gracias, no tengo palabras para poder agradecerte lo mucho que has hecho por mí y el tiempo que me has dedicado.

 

- Perdóname Kibum, por conocerte de una forma en la que no debía, por desilusionarte millones de veces, por dejarme llevar por comentarios de los demás, por huir como un cobarde en su tiempo, por no valorarte.

 

- Te amo Minho.-Fue el último susurro para permitirme besarlo enredando mis dedos en su cabello.

 

 

 

 

 

Era el momento del cierre del desfile, era el momento en donde “Señoras y señores ahora viene la colección de alguien muy especial, un diseñador muy reconocido en su totalidad con su regreso, con su nueva colección la cual genera un concepto muy especial para todas las mujeres, la comodidad en un evento tan especial como lo es para los esposos, por supuesto la boda, las mujeres ya no tienen que sentir incomodidad por llevar un vestido blanco que no es de su agrado, ahora pueden llevar de distintos colores y largos ya que como se dice una verdadera mujer se ve muy elegante y atractiva si lleva un vestido largo que encaje a la perfección. Aquí está Kim Kibum, con su nuevo proyecto, con su nueva idea, con su nueva historia en ToHeart, démosle un fuerte aplauso” las palabras encajaban perfectamente, el discurso había sido lo más perfecto permitiéndome paso a modelar junto con Minho de un lado del brazo y Luna del otro de la mano, dejándome al medio como el centro de la colección porque así lo era con las ocho modelos también modelando atrás de nosotros mis diseños de los referidos vestidos. Me emocionaba en la forma en que las personas se ponían de pie y aplaudían a más no poder, orgullosos de mi vuelta con una maravillosa colección.

 

- Te dije que todo iba a salir bien, estoy muy orgulloso de ti.-Minho se agachó susurrándome al oído.

 

- Y tenías razón-Lo miro con una gran sonrisa como forma de agradecimiento.

 

 

 

 

 

El dolor iba pasando con el tiempo, todo gracias a Minho, a mis grandes amistades, al trabajo que no paraba ya que esa colección había dejado una gran parte, así como Minho no paraba de recibir ofertas de trabajos para dramas o para películas. No podía pedir más, me sentía muy feliz haciendo lo que me gustaba así como estar con la persona que amaba, éramos el tema de conversación y el centro de atención de muchos programas de rumores así como las noticias o muchas tapas de revistas con títulos como “la pareja del momento” “¿Minho y Kibum están saliendo?” y se sentía tan bien el hecho de ya no escondernos, solo nos dedicábamos a vivir el momento.

Entendí que mi abuela estaba en un lugar mejor así como mis padres también, estaba mirándome y de seguro orgullosa por lo que estaba haciendo y por lo que era. Tenía por fin la vida perfecta que siempre quise tener.

Comprendí que el amor que sentía con Minho no era solo una atracción, era amor y se volvió así desde que confesamos que nos amábamos, siendo sincero nunca pensé el enamorarme de una persona, era algo terrible para mí ponerle etiqueta a lo que éramos, pero con Minho no era así y me encantaba, era un amor de verdad, no me cansaba besar, tocar y acariciar a la misma persona por más que cincuenta mil años pasaran, con Minho era todo diferente y por fin podíamos disfrutar de eso, sin más problemas, ni malos comentarios de parte de otros, simplemente nos dedicábamos a ser felices y protegernos.

 

Notas finales:

Nos estamos leyendo con alguna otra historia que escriba, estén atentos ya que no voy a demorar mucho en subirla solo necesito que me comenten si les gustaría que escribiera otro minkey, muchos besos y deseos felices para el nuevo año.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).