Galletas para ti.
- Solo míralo, míralo y dime como un ser puede ser tan malditamente estúpido y aceptar todas las galletas que le dan a pesar que el odia las cosas dulces, dime como puede haber un ser tan condenadamente idiota para no articular una simple palabra, como no puede solo decir “no” a todas esas estúpidas niñas - Solo una persona podía hablar de esa forma y criticar de esa manera a aquel individuo que se encontraba en la entrada del salón rodeado de chicas recibiendo de ellas galletas de navidad.
Solo Lee Taemin podía criticar de esa manera a Choi Minho porque solo el tenia el derecho exclusivo y único de criticar a el señor cara de rana y cualquiera que se atreviera tan solo a mirarlo mal, Lee Taemin era capaz de estamparle un pastel de chocolate en la cara, o eso era lo que había hecho con un chico que se atrevió a decirle a Choi Minho que era un jirafota, y a pesar de que Minho le había insistido en que solo había sido una broma de mal gusto y no le había afectado para nada, el chico más bajo solo dijo que fuel un lamentable “accidente” y que no lo vio venir, y Minho tras mirarle los ojos inocentes que había puesto Taemin en ese momento no pudo hacer otra cosa más que negar con cabeza y darle un beso en la mejilla como agradecimiento, dejando el corazón del más pequeño hecho un torbellino.
- Cualquiera que te viera y escuchara lo que dices, pensaría que estas hirviendo en celos- Esta vez la persona que hablaba con indiferencia ante la imagen que se desarrollaba en la entrada del salón, era Kim Kibum, más conocido como Key, y el mejor amigo de Taemin.
- Quien podría tener celos de esa cara de rana- Dijo Taemin mirando la escena con desagrado total.
- Pues tus acciones demuestras lo contrario- contra atacó Key acomodándose mejor en esa molesta silla donde se encontraba sentado.
- Pues te equivocas, no estoy, ni estaré jamás celoso de Minho- lo miro con molestia y tras mirar por última vez hacia donde se encontraba el causante del huracán que se formaba en su interior cuando alguna chica se acercaba a él, prosiguió- Además la palabra “celos” no está en mi vocabulario es mas no sé ni lo que significa- trato por todo los medios de que aquellas palabras salida de sus labios se las gravara su cerebro y así poder repetírselas cada vez que la molesta sensación de algo parecido a molestia se instalaba en su pecho cuando veía a alguna chica o chico cerca de Minho, trato de que su razón creyera esas palabras, hizo todo lo posible para callar su conciencia que a gritos le decía que deje de mentir, pero todo fue imposible al voltear nuevamente la vista hacia donde se encontraba Minho y ver que este con sonrisa en sus labios le agradecía a todos las chicas por aquellas galletas y le daba un beso a cada una es su mano, como un verdadero príncipe.
Deseo gritar ante aquella escena que presenciaban sus ojos, deseo que un huracán viniera y envolviera a Minho hasta lanzarlo lejos de su vista, deseo que un mago apareciera y convirtiera a todas esas chicas en popo de perro, deseo torturar Minho de la forma más dolorosa posible hasta provocarle la muerte mas agonizante de la historia, deseo hacer tantas cosas ante tal escena, pero lo que deseo con todas sus fuerzas y por lo que daría todo para que cumpliera fue que su corazón no doliera de tal manera que sentía que se iba a romper en cualquier momento, por una vez en su vida deseo que sus pensamientos no fueran de Choi Minho, por primera vez en su vida deseo con todas sus fuerzas no haber conocido a Minho y no haberse enamorado de él, porque aunque lo trate de negar Lee Taemin estaba perdidamente enamorado de Choi Minho.
- De verdad ellas son demasiado amables- Decía Minho mientras una ligera carcajada de agradecimiento producían sus labios a la vez que se aproximaba a la mesa donde se encontraba Taemin y Key.
- Mira ahí viene el príncipe rana.- Señalo Key apuntando en la dirección donde se encontraba Minho.
- Y a quien le interesa- Reprocho molesto Taemin, mas sus palabras era todo lo contrario a lo que su corazón demostraba el que con cada paso que daba Minho hacia donde se encontraba el, latía cada vez más rápido como el corazón de un colibrí.
- Chicos miren- Taemin rodo los ojos al ver a Minho con esa sonrisa tan estúpida que cargaba- tengo galletas como para un año- Y lanzo una carcajada que a Taemin le llego hasta el alma y un poquito más allá. – aunque no me gustan tanto, ¿Quieren? – Pregunto ofreciendo las galletas.
- No gracias, pueden estar envenenadas- Contesto Taemin bufando.
- Oye no seas grosero- Reprocho Minho molesto por la actitud de Taemin.
- No soy grosero, solo digo la verdad, quizá que porquerías le habrán metido a esas galletas- De verdad taemin no entendía porque Minho las aceptaba, no comprendía porque no podía solo decir no a aquellas chicas y a aquellas galletas si después se las daba a todos sus amigos o simplemente terminaban en la basura porque el señorito nunca se las comía. Si tan solo Minho rechazara aquellas estúpidas galletas él no se sentiría así.
- Taemin- Hablo molesto Minho- No digas eso, las galletas están ricas, además esas chicas se esfuerzan en hacerlas.
- ¡¡¡ENTONCES PORQUE NO TE LAS COMES TODAS Y TE CASAS CON TODAS LAS ESTUPIDAS ESAS QUE TE DIERON LAS GALLETAS, MALDITA RANA ESTUPIDA!!!- si a minho le abrina dicho que aquellas galletas causarían la furia de taemin el simplemente no las habría aceptado, ni siquiera las habría mirado, pero ahora eras demasiado tarde para lamentarse, y aunque debería de estar extrañado por la actitud de taemin por la repentina furia, no podía porque ver a Lee Taemin enojado era la cosa más tierna del mundo, era como ver a un gatito recién nacido, porque Minho amaba la forma en que las mejillas de taemin se inflaban, como el color carmesí de su cara cambiaba a un rojo intenso, amaba como esos ojos brillaban de tal manera que pareciera que ardiera en llamas, adoraba como su ceño se fruncía, pero de todas maneras lo que más amaba era ver como esos labios formaban un puchero casi invisible pero era para minho lo más hermoso de la vida, tan hermoso que podría solo vivir con esa imagen.
- Minho, Minho, ¡¡¡MINHO!!!- Cuando había despertado del hechizo que había causado el hermoso puchero de Taemin, descubrió que Taemin ya no se encontraban en ese lugar y que Key lo había estado llamando es de hace cinco minutos.
- A-a a ¿Qué? - desconcertado miro a Key que lo veía con una ceja alzada y una mirada un tanto extraña.- ¿Y Taemin?- pregunto dándose cuenta que no se encontraba en la sala de clases.
- Se fue furioso mientras tú te perdías en el mundo de “Taemin, el chico más hermoso de la tierra”- dijo Key un tanto molesto por las acciones de Minho.
- Que quieres decir con…. Espera taemin se enojo, ¿Por qué?-
- Tu porque crees- Pregunto Key exasperado por la lentitud de Minho al no darse cuenta de los sentimientos que taemin tenía hacia él y por sus propios sentimientos con respecto a el pequeño.
- No sé, porque no les gustan las cosas dulces- Key estuvo a punto de pegarles en la cabeza para quitarle la estupidez pero para suerte de Minho no encontró nada contundente y lo suficientemente pesado para pegarle.
- Solo ve tras él, quieres.- sugirió Key dándose provenido con hacer entender a Minho.
Y dicho eso Minho fue corriendo tras de taemin para saber la razón por la que el pequeño se había enojado. No sabía porque pero cada año era lo mismo, para navidad si las chicas le daban galletas Taemin se ponía furioso, para San Valentín si las chicas le regalaban chocolates Taemin por alguna extraña razón se enojaba, para su cumpleaños las chicas le daban regalos y Taemin a todos ellos le sacaba un defecto, no lo entendía, definitivamente no entendía porque Taemin se enojaba con el por eso y le dolía, de verdad le dolía que Taemin se enojara con el por ese motivo, le dolía más que cualquier cosas en el mundo, le lastimaba más de lo que debería cada mirada fría que le lanzaba Taemin cuando se enojaba, cada una de ellas era una punzada directamente al corazón que le afectaba a su sistema respiratoria haciéndole imposible respirar por el molesto nudo en la garganta que se le formaba, le afectaba las palabras sin sentimientos que le dedicaba, era como si cayera en un abismo profundo donde en el transcurso de su caída lo hacían pasar por una serie de pruebas dolorosas donde el sufrimiento era el único sentimiento que encontraba para después al llegar al final del abismo se diera cuenta que todo lo sufrido anteriormente no era nada comparado con el vacio que su corazón experimentaba al sentir que aquella persona que tanto quería lo trataba de una manera tan fría que hasta su alma se sentí abatida y sin ganas de seguir.
La duda que siempre lo carcomía por dentro y de la que siempre quería explicaciones era ¿Por qué Taemin se enojaba cada año en esas mismas fechas?, ¿por qué cada vez que las chicas le daban cualquier obsequio, Taemin se ponía furioso con él?, ¿Por qué?, las respuestas a aquellas preguntas se las tratabas de dar el, pero solo a su cabeza llegaba la palabra celos, la cual inmediatamente desechaba y aunque se moría de ganas de que aquella respuesta fuera cierta su razón le decía que no era posible, que como Taemin podía sentir celos e inmediatamente descartaba cualquier suposición que se le parezca a esa palabra pero secretamente y ocultándole a su razón guardaba esperanzas en un lugar donde era difícil de encontrarlas su corazón donde ahí se decía que Taemin si estaba celoso y era el celoso más hermoso de la historia. Porque si Choi Minho estaba completa y absolutamente enamorado de Lee Taemin, donde su alma y corazón solo le pertenecían al chico de mirada dulce y cabellera negra.
Minho busco a Taemin por todo el instituto pero no lo encontró en ninguna parte, hasta que se le ocurrió buscar en el único lugar donde Taemin se calmaba, en ese lugar rodeado de arboles que tenía el instituto, ese donde ambos se conocieron. Fue corriendo hasta ese lugar y ahí lo encontró sentado bajo un árbol, bajo el mismo árbol donde por primera vez intercambiaron miradas. No supo si fue un flecha de Cupido mal acertada que le llego directamente al corazón o si fue como verlo por primera vez porque nuevamente se enamoro de él, se enamoro nuevamente de todo lo que era Lee Taemin porque al verlo ahí sentado mientras sus mechones de cabello oscilaban con el viento fue como una caricia directamente al corazón, fue como un ataque directamente al corazón del que por poco no logra sobrevivir, fue como si un ángel pasara al lado suyo y le dijera “Esa persona que ves ahí es la que te llevara directamente al cielo, la que te hará ver que existe un sentimiento tan hermoso llamado amor, será la que por el resto de tus días te haga sentir el hombre más feliz de la vida y será en la que cada vida que reencarnes quieras a tu lado, el nombre de esa persona será el único que tus labios pronunciaras el resto de tu vida y va hacer el único que tus corazón conocerá y tu alma aceptara ”.
Después de que sus pensamientos, sentidos, corazón, razón, virtudes, imperfecciones, alma, cerebro, cuerpo, en fin después de que Choi Minho se enamorara por segunda vez de Lee Taemin, por alguna extraña razón se sentía con fuerza y una singular valentía, esa valentía que necesitas para decir algo importante, algo que sale de tu corazón, algo como sentimientos, algo parecido a una confesión, porque si se sentía capaz de todo, por alguna extraña razón al ver a Taemin en ese árbol se lleno de valor, y decidió ahí en ese lugar, en ese instante, ese día, decidió sacar afuera todo lo que sentí por ese pequeño, decidió decir todo lo que le provocaba aquel chico de mirada dulce, decidió confesar a taemin todo lo que él le provocaba.
Se encamino con una decisión tomada que tal vez lo haría perder una amistad o ganar a alguien a quien hacer feliz todos los días, con el corazón alborotado y los nervios a flor de piel camino paso a paso cuidadosamente, mirando directamente a su ángel que todavía no se había percatado de su presencia. Solo le quedaban unos cuantos pasos para llegar a su destino, esa sensación de querer lo mas raido posible a un lugar determinado pero cada vez que avanzas siente que el camino se alarga y se hace más lejos, esa sensación era la que exactamente en ese momento tenia Minho pero incrementado por mil y multiplicado por tres mil.
Hay un momento en la vida de cada persona en la que todo parece ir bien, en la que todo se ve tan claro que asusta pero de igual forma sigues adelante en aquel callejón pero de repente algo pasa y todo se derrumba dejándote sin salida y un sentimiento tan amargo que no es posible mantenerlo en la boca y te dan ganas de escupirlo y gritar por el mal sabor. Es como si todo lo positivo se da vuelta y se convierte en negativo. Minho lo vivió en ese instante, en donde iba decir lo que siempre quiso callar, pero en cuanto vio a aquel chico acercarse a Taemin y sonríele sintió celos, unos enormes y feroces celos, pero después al ver como Taemin le devolvía la sonrisa esos celos se convirtieron en furia, al ver como aquel chico le tocaba lentamente la mejilla con su dedo pulgar, quiso asesinar al primer ser humano que se le cruzara en el camino, al ver como taemin cerraba sus ojos ante el toque, apretó sus manos en forma de puño y aunque sus uñas se enterraron en sus palmas sacando sangre de ellas ese dolor no fue comparado al de su corazón al ver como lentamente el sujeto se acercaba a Taemin hasta posar sus labios en su mejilla, la cólera se apodero al observar el sonrojo de Taemin ante aquel gesto, le inundo la rabia al ver como el sujeto hablaba con Taemin y lo hacía reír, su cuerpo comenzó a temblar de pura impotencia e ira, era como si un volcán hubiese despertado, una bomba nuclear estuviera a punto de estallar, un tsunami se avecinara y un terremoto capaz de destruir el planeta tierra completo estuviera en su fase de iniciación. Pero a pesar y aunque suene masoquista quería saber que era lo que ese sujeto le decía a su niño que lo hacia sonreír de esa manera, puede que suene masoquista y tal vez si Choi Minho era masoquista cuando se trataba de Lee Taemin.
Se sentía como si hubiese sido aplastado por miles de elefantes gigantes, era como si todo su sentimiento se hubiese confabulado en su contra y hubieran creado un plan para atormentarlo y hacerlo sentir el ser humano más pequeño del mundo. Aunque no solo le echaba la culpa a sus sentimientos, sino también a Choi Minho que lo había hecho enamorarse de una forma tan malditamente estúpida que jamás pensó enamorarse así, sabía que estaba mal que nunca debió de enamorarse de su mejor amigo pero que podía hacer si cada vez que lo veía el tenia una sonrisa en su cara que lo hacía desfallecer en cualquier segundo, como no enamorase si cada vez que le hablaba el ponía esos ojos que lo enamoraban mas y mas, como simplemente no amarlo con cada célula de su ser si Minho era la persona más perfecta del universo y si veía sus imperfecciones pero eran imperfecciones que lo hacían perfecto. Pero eran exactamente esos sentimientos lo que los tenía ahí con el corazón en la mano, con un dolor en el pecho y furioso, quería calmarse de verdad quería calmarse para así poder pensar con la cabeza fría y aunque en este momento decía odia a Minho extrañamente el lugar donde siempre encontraba la paz y tranquilidad era el lugar donde años atrás había conocido a Choi Minho, porque si, aunque no lo quisiera aceptar la calma para todo sus problemas era precisamente Minho y aunque suene patético, si solo era el lugar en donde conoció a el chico que le robo el corazón, si solo era ese lugar, el podía encontrar la calma porque el recuerdo de ese día que atesoraba en lo más profundo de su ser lo hacía caer en una nube suavecita y blanda donde las imágenes de aquel día se repetían constantemente, en donde Minho se cruzo en su camino y puso su mundo de cabeza. Definitivamente Choi Minho era el causante de todos eso sentimiento que creyó que él no tendría y lo odiaba por eso.
Se recostó bajo aquel árbol grande e impotente que tenia aquel lugar, trato de relajarse y así poder calmarse, cerro sus ojos y respiro profundo dos veces, contando hasta cien pero solo llego hasta el numero 56 cuando alguien lo interrumpió.
- ¡¡Taemin!!- Escucho que gritaban su nombre y al abrir sus ojos vio la silueta de un muchacho acercarse a donde él se encontraba- ah~ que bueno que te encuentro, recorrí todo el instituto y no te pillaba- Decía jadeando aquel muchacho con una sonrisa mientras se sentaba al lado de Taemin. Taemin lo reconoció al tiro era ese chico que conoció una noche en donde él había discutido con Minho, y le había afectado tanto aquella pelea que había terminado llorando en un parque hasta que ese chico se acerco a él derramando un helado sobre su ropa haciéndolo olvidar de la pelea y no sabe cómo pero terminaron haciéndose amigos y por cosas del destino ese chico estudiaba en el mismo instituto que él.
- Eric- Sonrió Taemin al ver como este se encontraba de cansado- Que pasa por que me buscabas.- cuestiono intrigado.
- Necesito que me ayudes con pequeño favor- Taemin quedo extrañado ante lo que le pedía Eric.
- Y en que te puedo ayudar- Pregunto extrañado.
- Bueeeno…. necesito que después de clases me compres galletas de navidad para mi novia, por favor es que me lo pidió a mi pero ahora tengo que ir al club de basquetbol y seguro saldré tarde por favor me haría el favor- Taemin al escuchar la palabra galletas bufo molesto pero al ver la cara de perro abandonado que le puso Eric se conmovió.
- Bueno está bien pero-
- ¡¡¡OH!!! de verdad, gracias pequeño- De verdad le molestaba a veces que Eric no lo dejara hablar.- Bien como tú siempre me ayudas en todo lo que te pido estaré disponible para que me utilices de cualquier forma.- Y tras decir eso sonrió pícaramente- Hasta para sacarle celos a tu sabes quién.- y tras ver como Taemin abría la boca y después la cerraba de golpe sonrojado sonrió porque si Eric sabía que Taemin estaba enamorado de Minho y sospechaba que Minho estaba enamorado de Taemin pero todavía no podía confirmar sus sospechas.
- Y-ya Eric tu- Taemin de verdad se avergonzaba por esos comentarios que decía Eric más bien se avergonzaba con todo lo que tenía que ver con Choi Minho- Deja de decir eso sí- de repente la sonrisa que había mantenido durante toda la conversación con Eric desapareció y el nombrado anteriormente se preocupo por eso- Solo deja de decirlo si, el nunca me va a ver mas como su mejor amigo y nada lo va a cambiar- Eric miro a Taemin que bajaba su mirada paulatinamente y aguantaba las ganas de llorar, bufo molesto porque Taemin no se daba cuenta de que tal vez Minho si sentía lo mismo por él, giro su cabeza a un lado y vio algo que confirmaba todas sus sospechas, vio a Choi Minho ardiendo en celos y solo había una razón por eso, Taemin. Sonrió por la brillante idea que había llegado a su mente.
- Taemin- Dijo Eric al chico más bajo.- Necesito un último favor muy importante- Taemin lo miro extrañado y el solo sonrió ampliamente- Me puedes seguir la corriente y obedecer a todo lo que yo te diga- Taemin dudo por un segundo pero luego solo asintió. Haciendo que la sonrisa de de Eric se agrandara.
- Bien empecemos- Eric llevo una mano a la mejilla de Taemin y le dijo- Ahora cierra tus ojos- Taemin primero lo miro confundido ante lo que le decía su amigo pero luego cerro sus ojos, Eric sonrió triunfante al por el rabillo del ojo la reacción de Minho y quiso seguir con el dulce juego que mantenía. Se aseguro que Minho todavía lo estuviera observando y al corroborar eso beso la mejilla de Taemin y le dijo a su oído- Que pasaría si Minho fuera el que te hubiese besado y no ahí si no en los labios- Y logro el cometido que quería lograr que las mejillas de Taemin se tiñeras de un rojo intenso, sonrió por ello y tras alegarse un poco le dijo- Taemin te acuerdas de esa vez que me caí de una escalera por tu culpa- Taemin lo miro asombrado por el repentino cambio de tema y luego de procesar las palabras soltó una carcajada que era justo lo que Eric quería.
- Jajajajja si qué pasa con eso- Dijo Taemin aun riendo por lo que acababa de recordar.
- Nada que todavía no me he vengado.- Dijo Eric sonriendo, y vio como Minho se acercaba a pasos lentos y se quedaba escondido para seguramente escuchar la conversación que tenían. Eric esperaba esa acción de Minho sonrió perversamente y quiso terminar su pequeño juego con la guinda de la torta.- Taemin puedes cerrar los ojos y acercarte un poco.- Taemin lo miro a Eric con una cara que decía “Que trama este” pero luego hiso lo pedido.
Minho se acerco y se oculto para así poder escuchar lo que conversaban Taemin y el sujeto extraño, pudo oír como este le decía a Taemin que cerrara sus ojos y se acercara, no supo porque le pidió eso pero en el momento de ver como el sujeto raro se acercaba a Taemin lentamente con una dirección que le desagradaba que tocara porque solo él podía hacerlo todo su autocontrol se perdió en un instante y fue directamente a donde esas dos personas se encontraban.
Eric quería que el estúpido Choi Minho aceptara sus sentimientos y si tenía que llegar a extremos como esos lo iba a hacer, es por eso que le pidió a Taemin de cerrar sus ojos porque de otra forma el pequeño se iba a negar a lo que el tenia pensado, entonces cuando vio que Taemin le obedeció él se acerco a el pequeño para lentamente ir en dirección hacia los labios del menor y así solo tenía que esperar a la reacción de Minho.
- ¡¡TAEMIN!!- Taemin escucho como esa voz que tanto amaba pronunciaba su nombre un tanto molesto, entonces abrió sus ojos y vio como Eric estaba a centímetros de su cara por lo que lo empujo fuertemente para que se aleje.
- ¿Tú, que estás haciendo?- dijo Taemin molesto ante lo que había estado a punto de hacer Eric.
- ¿Yo?- Se señalo inocentemente Eric- Solo te ayudaba- Y sonrió mientras le giñaba el ojo a Taemin.
- ¡TAEMIN!- Grito nuevamente Minho llamando la atención de Taemin. Taemin vio como Minho se acercaba a él con el ceño fruncido y los puños fuertemente cerrados. – TE ESTUBE BUSCANDO POR TODO EL LUGAR Y TU NO ESTABAS, DIME QUE MIERDA ESTABAS HACIENDO.- Taemin se sorprendió por ver tan furioso a Minho, porque vamos cuando se ve a el perfecto príncipe Choi Minho gritando a los cuatro vientos y dando pisadas como si fuera a romper el sementó.
- A yo estaba con- pero fue interrumpido por minho.
- Con quien, con este guarisapo-dijo apuntando a Eric- ¿Que hacías con él?, ¿Por que estaban tan juntos?, ¿De dónde lo conoces?, ¿Qué relación tiene contigo?, ¿QUIEN MIERDA ES ÉL?- Okey nunca en la vida había visto a Minho tan alterado y tan malditamente furioso, que le había pasado para que este así.
- Minho creo que te tienes que calamar y no andar insultando a las personas que no conoces.- expreso Taemin molesto por la actitud de Minho.
- A MAS ENCIMAS LO DEFIENDES, PORQUE LO DECFIENDES- grito Minho, es que porque defendía a ese guarisapo.
- ¡¡NO ME GRITES!! Y pídele disculpas a Eric.- Ordeno el menor mirando a Minho directamente a los ojos.
- No- contesto minho
- Como que no- Pregunto Taemin.
- No, simplemente no.
- Si, pídele disculpas.
- No
- Si
- No
- Que si
- Que no
- Que si
- Que no
- Bueno yo creo que mejor me voy- Dijo Eric llamando la atención de aquellas personas que mantenían una discusión muy madura.
- Si es lo mejor, aquí nadien te necesita.- comento Minho mirando molesto a Eric.
- Minho deja de comportarte así, lo siento Eric el de verdad el no es así.- Hablo Taemin dejando de mirar a Minho para prestarle atención a Eric
- No, no te preocupes Taemin- Y para echarle más leña al fuego acaricio los sedoso cabellos de Taemin, sonriendo por el bufido molesto que lanzo minho.- No es nada, bien creo que me voy de aquí, tengo cosas que hacer, ade-
- Porque no te vas rápido- interrumpió Minho
- ¡Minho!- Reprocho molesto Taemin
- Bien adiós pequeño y no olvides mis galletas que sean ricas si- Y se fue dejando a Taemin y minho solos.
- Porque te comportaste así- Reprocho molesto Taemin mirando a Minho que tenía una mirada aun más furiosas que la anterior.
- ¿Le vas hacer galletas?- Cuestiono irritado.
- ¿Qué? no, yo-
- ¿PORQUE MIERDA LE VAS HACER GALLETAS?- grito más que molesto, es que porque Taemin le tenía que hacer galletas a ese tipo, porque no le hacía galletas a él, porque sentía que estaba perdiendo a Taemin lentamente, porque le dolía tanto.
- No Minho yo-
- ¡PORQUE!- Grito- Porque a él – Bajo la cabeza paulatinamente, sintiendo como lagrimas querían escapar de sus ojos y su corazón de estrujaba cada vez mas.- Porque a él, porque dejaste que se te acerque tanto, porque le sonríes, porque te ríes con él, porque te sonrojas con el - Mientras decía todo eso caminaba hacia Taemin y este por instinto retrocedía hasta que se topo con el árbol en el que anteriormente había estado sentado quedando acorralado por Minho.- Por que él y no yo- Dijo Minho mirándolo, mirando a su pequeño ángel que se encontraba sonrojado por la cercanía pero el príncipe rana no se daba cuenta de aquello. Taemin no entendía a que se refería Minho con aquello, no comprendía porque lo miraba de esa manera tan intensa y sabia que la cercanía y la mirada no ayudaban en nada a disminuir las ganas que tenia por besarlo, y definitivamente si seguía así iba mandar a la mierda su autocontrol.
- Explícame porque él, porque le vas hacer galletas cuando todos estos años he esperado que me des unas galletas a mi.- Taemin se sorprendió ante te la repentina confesión que he había hecho Minho, se sonrojo por ello pero su corazón se desboco ante el toque suave que Minho con su pulgar le hacía en su mejilla.- Taemin…..porque…. el- En que momento la mirada de Minho que irradiaban luz demostraba tanta tristeza, en que momento sus ojos dejaron de brillar y en qué momento su sonrisa había desaparecido.- Porque si yo…si yo te he amado desde el primer momento en que te vi, porque si yo te amo más que nada en este mundo, porque me haces esto si he caído por ti que ahora me es imposible salir, porque si cada célula de mi cuerpo vive exclusivamente para ti. Taemin dame el antídoto para no amarte mas porque no se qué hacer con esto, dime como hacer que mi cuerpo no extrañe tu presencia, dime como hacer que en mis pensamientos no estés tu, dime como hacer que mi corazón deje de latir por ti, solo dime como dejar de amarte.- Como no amarlo, como no quererlo, como no extrañarlo, como no necesitarlo, como no querer cada faceta de Minho, como no caer perdidamente en las garras de Choi Minho, como no caer si su sonrisa iluminaba todo, como no caer si sus ojos eran como dos jemas que lo incitaban a querer descubrirlas, como no caer ante Minho si era tan amable, Como no caer si cada cosas que hacia lo hacía perfectamente, como no caer si cuando se enojaba hacia gesto tan hermosos que lo obligaban a memorizárselos para después poder recordarlos en la noche y sonreír por ellos, como no enamorarse si cada vez cuando reía sus problemas desaparecían, como caer ante el si era el chico mas introvertido del planeta y eso le encantaba, como no quererlo era el ser más hermoso que sus ojos hayan visto, como no car si su voz era la luz que necesitaba en un día en donde todo era oscuro, como no caer si todo lo que decía le parecía hermoso y ahora, ahora le decía las cosas que siempre quiso escuchar de sus labios haciéndolo una vez más enamorarse de Choi Minho, haciendo cavar su propia tumba porque nuevamente como un tonto se fue a enredar en las cuerdas que lo tenían sujeto desde hace tiempo y ahora de las que difícilmente saldría y de las que no quisiera escapar.
- Minho- Hablo Taemin llevando ambas manos a la cara de Minho.- Como me pides eso- Minho lo miro extrañado espero atentamente a que Taemin continuara.- Como me pides que te diga como dejar de sentir esto, si ni yo mismo lo pude hacer, como me pides que te diga como dejar de amarme si yo te amo con todas mis fuerzas y seria egoísta para Cupido que no apreciemos su trabajo. Dime tan solo que no te arrepientes de amarme así porque yo no me arrepiento ni por un segundo de amarte tanto que mi única razón de levantarme cada mañana eres tu porque si te amo más que nada en este mundo y no hay nadie que ocupe el lugar que tú tienes en mi corazón porque ese lugar es tan grande que abarca todo mi cuerpo, mi razón, mis pasamientos, mis habilidades, todo Minho, todo. Me he vuelta tan dependiente de ti que no sabría que hacer si no estuvieras a mi lado, sería solo un cuerpo sin alma. Te amo tanto que todo lo que soy lo soy gracias a ti, dime que no te diga cómo no amarme porque soy tan feliz con que me ames que creo tener toda las felicidad de las personas en mi pecho-
Si a Minho le habrían dicho que llegaría un día en el cual Lee Taemin iba a decir palabras que le llenaría el alma y su corazón se sentiría con capacidad de hacer revivir a miles de hombre, el hubiese marcado ese día en su calendario, hubiese deseado encontrar un genio y pedirle mil veces que ese día se repitiera para siempre, hubiese dormido todo los días hasta que aquel día especial hubiese llegado o simplemente hubiese acercado a Taemin hasta sus cuerpo y tras un dulce te amo lo hubiese besado como en este mismo momento, en la que ambos compartían un dulce beso que los llevaba directamente al cielo, los hacía volar entre las nubes, los hacía sentir como si estuvieran cayendo de un edificio, era como el dulce mas adictivo de la vida, algo asombroso que enviaba miles de descargas eléctricas a sus cuerpos, les nublaba los sentidos, era como ver el sol después de un día nublado, como el olor a chocolate caliente, era lo más maravilloso que habían experimentado.
- Entonces seguirás amándome- pregunto Taemin luego de probar aquellos labios que lo llevaron al paraíso.
- Solo si me sacas de una duda- dijo Minho sonriendo y sosteniéndolo aun a Taemin de la cintura
- Cual- cuestiono Taemin.
- ¿Quién era ese chico que te acompañaba? ¿Y por qué le vas a dar galletas?-
- Solo mi amigo, y no le voy a dar galletas le voy a comprar para su novia es un pequeño favor.- Y sonrió por que ahora podía darse cuenta de lo posesivo que era Minho y eso sinceramente le encantaba.
- Y porque te iba dar un beso- pregunto acercando a Taemin más a su cuerpo y rosando los labios de este.
- Seguramente te vio y te quiso poner celoso.- Respondió Taemin sonriendo por las sensación que le producía Minho
- Pues lo logro- Respondió el asaltando los labios de Taemin nuevamente.
- Y bien seguirás amándome.- Pregunto Taemin luego del beso.
- Con una condición.- Respondió Minho.
- ¿Cuál?- cuestione Taemin frunciendo el seño
- Que me hagas galletas solo para mí- Taemin sonrió ante la ocurrencia de Minho y luego contesto.
- Bien hare galletas solo para ti.- A Minho solo se le dibujo una sonrisa aun mas grande en la cara y luego respondió-
- Entonces hazte responsable porque te amare por el resto de mis días mi pequeño ángel.
- Pues me hago responsable de todos los cargos que se me acusas- contesto Taemin y asalto los labios de Minho que ahora era su nueva adicción.
~Fin~