DÍA I
Pov Luhan
Me encuentro arriba del avión para dirigirme a la Isla Jeju, había decidido vestirme con una simple remera gris y pantalón con leves cuadros del mismo color. A mi lado viaja mi asistente y amigo Chanyeol. Debido a que alguien se ha retrasado, el vuelo también tarda en partir. La persona que ha llegado tarde es un joven de cabello castaño, no más alto que yo pero seguramente más joven, parece no superar los 20 años de edad, viste de manera simple, camiseta negra y jeans ajustados, demasiado ajustados, aunque debo admitir que pronuncian su lindo trasero.
Fuera del pequeño retraso al despegar, el vuelo llega a su fin sin mayores inconvenientes, tal vez con un poco de turbulencia, pero lo normal. Una vez en el aeropuerto de Jeju me dedico a esperar por mi equipaje, el cual había ido a buscar Chanyeol, en ese momento alguien choca conmigo y algunas de nuestras pertenencias –billeteras, celulares y llaves –caen al piso. Iba a lanzarle tremendo discurso pero cuando levante mi vista y veo que se trata del joven de bonito trasero callé.
_Lo siento, de verdad lo siento mucho señor –¿Señor? ¿Tan mayor me veo? Lo vi recoger las cosas y estirar sus manos hacia mi –aquí tiene
_Descuida, no hay problema –No puedo sacar mis ojos de él, no solo tiene bonito trasero, su rostro también es hermoso, redondo, blanco y tierno, de alguna manera, su rostro me recuerda a un Baozi. Quede totalmente embobado.
Luego de aquel accidente y que el chico cara de Baozi se retirara, con Chanyeol, abordamos un taxi, nos dirigimos al hotel Paradise. No solo me hospedaría ahí, sino que también lo compraría, este negocio es de suma importancia para mi, con ello tengo la aprobación completa de mi padre asegurada para dirigir una sucursal de su gran imperio de hoteles acá en Corea Del Sur, y por supuesto ser su orgullo. La verdad, no tengo tiempo de descansar, mi reunión de trabajo es tan solo en media hora. Cambio mis prendas casuales por un traje azul marino.
Si hay algo que me crispa los nervios es la impuntualidad de la gente, y el vendedor llegó con un retraso de una hora, y encima debo de aguantar su asquerosa conversación.
_Los gays son escoria, seres anormales. Deberían desaparecer– Respiro buscando paciencia, debo recordar la razón por la que estoy aquí. La aceptación de mi padre, sólo por eso debo de aguatar a este tipo –yo sabía ¿sabes? –me preguntó directamente lanzando una carcajada- dejó todo por venir a ver el “amor de su vida” –esa última frase la dijo haciendo comillas con sus dedos y luego señalarse a sí mismo –grande fue sorpresa cuando se enteró que yo solo jugaba con él.
¿Qué tiene de malo si te enamoras de una persona del mismo sexo? Al fin al cabo, lo que importa es el amor ¿No?. Para ser honesto, yo jamás me eh enamorado. Ni de un hombre, ni de una mujer. Chanyeol me dice que solo vivo para hacer lo que dice mi padre. A la edad de 12 años me presentaron a mi prometida, y hasta el día de hoy lo sigue siendo. ¿La amo? No, no lo creo, pero es lo que hace feliz a mi padre.
El resto de la reunión la paso apretando mis puños y recordándome la razón por la cual debo ser amable con este sujeto <la aceptación de mi padre; las ordenes de mi padre; mi pase a jefe de un hotel>. Cuando al fin fui libre ya estaba oscuro así que decido bajar a la playa a caminar. Sentir la arena sobre mis pies, la brisa sobre mi rostro… caer por tropezar con una mochila….
_¡¿Qué demonios?! ¿Quién? –miro a mi alrededor, no hay nadie cerca, dirijo mi vista al mar… ¿Eso es una persona? … si, es una persona flotando boca abajo. Con mi corazón latiendo a full me deshago de mis zapatos y me interno al mar frio. Alcanzo a aquella persona y la arrastro fuera, trato de escuchar su respiración, pero no respira, de inmediato le practico RCP. No es el momento , pero sus labios son tan suaves. Siento un gran alivio cuando lo veo escupir agua.
Pov Xiumin
Una vez que dejo de escupir el agua, siento mi garganta arder, como si estuviese irritada ¿Qué es lo que había pasado? ¿Ya estaba muerto? Trato de enfocar mi vista, la cual se topó con otra persona, y supe que no, no estaba muerto, sólo había tenido la mala suerte de ser rescatado por alguien. El sujeto tiene cabello rubio el cual está mojado y le cae en cascada sobre su rostro, demonios, es hermoso, demasiado hermoso, pero esa no es la cuestión, él me había salvado, él no me había dejado morir como yo quería hacerlo ¿Por qué? yo ya no quiero vivir, no tengo nada, lo poco que tenia lo había perdido, lo había perdido todo. Me esforcé por retener mis lágrimas.
_¡¿Acaso quieres morir?! –me pregunta
_Si…-mi voz apenas sale, la garganta me arde – eso es lo que quería… y ahora gracias a usted sigo en este mundo de mierda. –con solo mirarlo, puedo leer sus pensamientos, “eres estúpido” pero ¿Qué sabe él de mi? No tiene derecho a juzgarme. Sigo esforzándome por retener mis estúpidas lágrimas.
_Sígueme –me ordena mientras se pone de pie y me alcanza mi mochila ¿Qué puedo hacer? Por alguna estúpida razón le hago caso, con dificultad me levanto y lo sigo. El clima es frio y yo no puedo evitar chocar mis dientes. No es hasta que estamos frente al Paradise que me doy cuenta, este rubio debe ser multimillonario para hospedarse en un hotel así, entonces ¿Por qué salvo a alguien como yo?. A la luz del hotel, lo observo mejor, y caigo, es el sujeto del avión.
_Disculpe…-le digo –nosotros chocamos hoy en el aeropuerto..-mi garganta me falla
_Sabia que te conocía de algún lado – me sonrojo. Me recuerda. Me sigue hablando mientras subimos al ascensor, pero soy incapaz de escuchar lo que dice. Soy un estúpido. No puedo dejar de mirarlo, su piel blanca, su cabello rubio que aun seguía mojado, observo mejor sus labios, y veo una marca de cicatriz en ellos, pero lejos de hacerlo feo, lo hacen sexy, por dios… ¿En qué estoy pensado? Pero es que es imposible no darse cuenta, este hombre es tremendamente hermoso. Tonto, tonto, tonto Xiumin, deja de mirarlo así , me regaño a mí mismo. De seguro a este le gustan las mujeres.
_Pasa, dame tu mochila. El baño esta por ahí –me señala con el dedo el camino. Miro un poco aquella habitación. Si, este chico tiene mucho dinero, pues el cuarto parece uno presidencial. Cuando estoy por ingresar al baño, el rubio me vuelve a alcanzar.
_Aquí tienes algunas ropas, capaz te sean grandes, pero es mejor que nada. Por cierto mi nombre es Xi Luhan ¿El tuyo?
_Xiumin – le respondo a duras penas llevando un de mis manos a la garganta, pues me vuelve a molestar, está muy irritada, mi voz sale como si fuera de esas personas que llevan medio siglo fumando.
_Bien, te espero en el comedor Xiumin, yo me daré una ducha en el otro baño.
Una habitación con dos baños, si, parece una presidencial.
Por alguna razón antes de desvestirme miro alrededor, con temor a que haya alguna cámara escondida o algo así, lo sé, estoy paranoico. El agua caliente de la ducha relaja mis músculos y mis tiriteos cesan. Las prendas que me había alcanzado no hacían falta, en mi mochila tenía un conjunto de cambio, pero él me la había arrebatado. El aroma impregnado en la simple remera blanca es demasiado atractivo. La bermuda con toques militares increíblemente me queda a la perfección. Salgo del cuarto del baño sin mirarme al espejo, hacerlo solo bajaría mi autoestima, pues el tal Luhan es demasiado bello. Cuando llego al comedor no lo veo por ningún lado, pero si logro escuchar ruidos provenientes de algún otro cuarto, me dirijo allí, es la cocina. Al ingresar mi vista se topa con la más increíble imagen. Luhan viste una musculosa que por alguna razón deja ver parte de su torso (demasiada, ya que expone una de sus tetillas) Inmediatamente sé que mi rosto esta rojo, mis orejas arden y algunas capas de sudor debido a mis nervios aparecen en mi frente.
_Oh, ya terminaste ¡Que bueno! siéntate en la pequeña mesa –me señala una mesita redonda ahí en la cocina –ahora te sirvo un café. Y Por si te lo has preguntado, esta noche dormirás aquí, a menos que te sientas mal y deba llevarte al hospital…-de inmediato negué, un hospital presenta tener que explicar cómo llegue al agua, lo que significa tener que decir que trate de matarme. Lo que menos quiero es un interrogatorio y un turno con un psiquiatra.
.
Pov Luhan
Por alguna razón no puedo dejar de mirarlo, y verlo con mi ropa puesta me pone nervioso, provoca ciertas reacciones en mi que desconozco. Veo como empieza beber su café, sus labios son de un rosa intenso y a la mente se me viene la sensación que me dieron al hacerle RCP.
Algo despierta en mi y esta vez sí soy capaz de saber que es. Deseo. Está noche me costara trabajo dormir.