Cap 3
La semana transcurrió como si nada, puesto que a Feram se le dio por dejar de sermonearme con su palabrería sin valía, en realidad era un chico bastante callado y reservado, pero también me explico en un principio que si me decía todo lo que yo quisiera saber, era porque solo me estaba usando a mí, a mi madre y a Eliot, para acercarse a la escuela en donde iba, luego de que encontrara lo que buscaba se ira, o bien si no lo encuentra, solo se ira a otra parte a buscarlo, es desilusionante, no pienso mucho en eso.. Trae a mí una serie de emociones muy incomodas.
¿Has sentido alguna vez que algo se te escapa? ¿El no poder seguirlo? En realidad… que algo mucho más fuerte que tú te impida, que literalmente te contenga en el lugar donde estas, aunque luches con todas tus fuerzas para librarte, no te es físicamente posible… ¿has sentido que te utilizan con todo el esplendor de la palabra? Pues no es una buena combinación de sensaciones, podría calificarme a mí mismo como un masoquista por haberme enamorado de este monstruo ¿Quién me asegura que estos sientan algo parecido al amor? Ya lo dijo él, los monstruos terminan todos solos, sin amor ni amistad, puede que para ellos este bien, pero para los idiotas como yo que acabamos con el corazón roto ¿Qué es lo que queda? Es que simplemente ahora no quiero resignarme, solo quiero… solo lo quiero a él conmigo… solo quiero enamorarlo… solo quiero ser un monstruo para poder seguirlo.
Actualmente estoy en mi cuarto… o bien el cuarto que comparto, mirando el techo, con música que para mí desgracia era romántica, aunque debería evitar estas cosas, no puedo evitarlo, algo en las tristes emociones que me inyectan directamente en las venas me hace sentir un poco más vivo… me hace reflexionar sobre todo eso que Feram solía decir, que hay otro tipo de vida, me pregunto cómo será.
En ese momento me llega él tan temido ojiazul, atormentándome y complaciéndome con su deliciosa existencia, se ve tan joven a pesar de tener más de cuarenta años… le pregunte también de su historia… ¿querrían saberla?
Nació el 1968 en Estados Unidos, Michigan para especificar, fue se crio con normalidad hasta los dieciocho, el 86 sus padres murieron en un accidente en avión, se quedó con su hermano, Adelfos, es un nombre raro, dijo que era una palabra griega, pero hace unos dos años murió también, admitió que siempre se sentía aburrido, a veces se le daba por escaparse y se metía en muchos problemas, le gustaba la vida al máximo, pero nada de lo malo que hacia le complacía, por eso buscaba emociones de todo tipo, al final le obligaron a entrar en la universidad, la elección fue únicamente de su hermano, a él le dio igual, no es que le gustara ninguna carrera o le disgustara alguna, mientras no tenga muchas matemáticas pues nunca se le daban bien, ahí fue donde encontró su primer amor, me pareció raro que me contara eso, puesto que solo me hablo de los detalles más relevantes de su vida, aunque quizás lo que me molestaron fueron mis inmediatos he inevitables celos locos, dice que ella se llamaba Amelia Castillo una española divina, cabello largo hasta casi casi los pies, de color negro, ojos del mismo tono, grandes, pero tan oscuros que harían palidecer la más cruenta noche sin luna, es así como el me lo dijo, pero no tenía el tono de un amante enamorado, alagando al ser de su atracción, sino más bien parecía hablar de ella con el más profundo de los respetos y hasta miedo, ella era muy bajita, de un metro sesenta, pero tenía una figura algo voluptuosa, usaba lentes gruesos y redondos tapando la mayor parte de su cara, su piel parecía nieve pulida, tenía una personalidad bastante soberbia, graciosa, pero parecía ocultar algo, algo muy raro, dijo al final de cuentas, que ella era el santo grial, un monstruo demasiado peligroso como para que alguien se deba atrever a perturbar su volátil y explosivo estado emocional.
Ella fue quien lo convirtió una noche, pero no me dijo detalles de eso, tampoco es que me quiera entrometes mucho en esas cosas, tras ser un monstruo dijo que se entrenó bajo el cuidado de un amigo suyo, ese mismo del que me habló, el que posee el poder del agrado, fueron los tres años más rudos de su vida, un humano no hubiera podido aguantar todo el dolor que ser uno de ellos requiere, pues hay que saber controlar la fuerza velocidad y los sentidos, también no se nace sabiendo volar y que caerse es muy feo, especialmente de más de veinte mil pies de altura, finalmente tras el incidente del 95 le encargaron buscar a Amelia que desapareció tras convertirlo.
Eso es lo que hace acá, el cree que está estudiando en algún instituto por los alrededores, ya reviso bastantes lugares, tristemente para que nadie sospeche debe estar al menos dos meses en cada instituto donde vaya a buscarla, la búsqueda es larga, puede que tenga que recorrer el mundo entero, dijo también que pronto se cambiaría de instituto, pero prefiero ignorar eso por ahora.
Dice que además de todo eso que me conto su vida humana y hasta ahora su vida en general no es más relevante que la de cualquier ser humano aburrido, pero pronto, cuando por fin encuentre a Amelia y la lleve con los cabecillas, podrá hacer lo que quiera, hacer lo que cualquiera en su condición haría, ver qué vida le queda mejor, luego tomar otra y otra, especialmente porque los de su tipo tienen una especie de facilidad a la hora de hacer esas cosas, dice que el Dios que los creo fue generoso al permitir que jamás se aburrieran, de manera que les dio la habilidad de lucir una edad a elección, dijo que solo con morder su dedo índice derecho y dejar que una única gota de sangre al suelo, su apariencia cambiara a cualquiera de entre los cinco y ochenta y cinco años, pero eso trae consecuencias, puesto que tu personalidad se adapta a tu edad, si luces como un niño mucho tiempo, empezaras a comportarte como tal, si luces como un anciano mucho tiempo será de la misma manera, puede que sea malo o beneficioso si lo vez de distintos puntos de vista.
Yo solo me pregunto qué are cuando llegue el momento de que Feram se vaya… solo me pregunto qué are yo, yo que nunca he tenido el valor de importarme por algo. Mientras tanto me limito a sentirme tanto feliz como incomodado por su presencia callada en la habitación, sentado frente a su computadora, yo lo espió lo más disimuladamente posible, esa prometía ser una noche fría, pero teníamos calefacción en el cuarto, no había mucho problema con referencia a eso, una vez me canse, decidí irme a dormir, Feram en algún momento también lo decidió, como a las tres de la mañana volví a despertar, hacía mucho frio, seguramente se había arruinado improvistamente la calefacción, me envolvía con las mantas tratando de calentarme, al cabo de algunos minutos me veía a la temperatura apta para volver a dormirme, pero de la nada sentí algo raro, unos brazos que rodeaban mi cintura y mi pecho, apretándome fuerte contra el cuerpo que se encontraba a mi espalda, enredaba sus piernas con las mías y respiraba agitadamente contra la piel de mi cuello y nuca, en mi mente busque todas la posibilidades para explicarme esto, pero al final me di cuenta de que era Feram, me sonroje en exceso y no pude voltear a verle.
-¿pero qué mierda crees que haces?
Puede que mi respuesta haya sido algo agresiva, pero no me daría el lujo de que supiera que me gustaba, mucho menos que el hecho que estuviera haciendo eso era realmente placentero.
-cállate, a diferencia tuya a mí el frio me afecta, es una de las pocas cosas que puede matarme y duele demasiado, hasta unos pocos grados bajo 16 Cº son realmente dolorosos, así que no me queda de otra.
Esas palabras claro que me desilusionaron, pero pensándolo más supe que tenía suerte, no siempre se me darían oportunidades tan magnificas, me apegue más a él, sus brazos se enredaban fuertemente al redor mío, sentí su piel en un momento de esos, antes de caer dormido, estaba realmente helada, entonces me gire para verle de frente, estaba preocupado, cuando estuvimos viéndonos a los rostros muy de cerca, el me apego más todavía, estaba viendo a un lado evitando mis ojos, muy avergonzado y también sonrojado.
-oye… realmente estas muy frio… ¿estás bien?
-si… solo duérmete… estaré mejor una vez que recupere una temperatura más estable… no te preocupes.
-pero si me preocupas… esa respuesta fue demasiado impulsiva para mi gusto, no la pensé para nada, él me vio directo a los ojos en ese momento, ese azul me atrapo, profundo como el mar, claro como el cielo en un maravilloso día soleado, me mostraba una ligera confusión hacia mis palabras, supe en ese instante que hacerme el inocente lo arreglaría todo, nada de que se me cortase la vos o dar un paso atrás, de lo contrario sería obvio, mil veces prefiero que me tachen de bobo inocente a que sospeche de todo estos sentimientos raros, demonios, yo que hasta conocerlo me consideraba 100% heterosexual.
-tú… ¿Qué?
-ya te lo dije, me preocupas, perdóname otra vez por ser tan idiota, pero a mí las personas si me importan, no soy como tú, ¿Qué puedo hacer para ayudar? Intente sonar lo más convencido de mis palabras posible, pero me era difícil, más pude convencerle, no es que fuera una hazaña imposible.
-no hagas nada, ya te lo dije, quédate quieto mientras recupero el calor, eso es todo.
Sabiendo que cualquier palabra estaría de más ahora, solo lo abrace del cuello y me quede quieto, intentando volver a dormirme, el sabiendo esto me rodero de la cintura y me pego más a su cuerpo, puede que deba mantener las sospechas inexistentes, pero teniendo en cuenta todo no soy alguien tan idiota como para desaprovechar esta oportunidad, agradezco al cielo no ser una persona que se pone nerviosa o se abochorna, mucho menos llora, pero a la vez me reprocho a mí mismo el hecho de ser tan frio, casi al punto de estar vacío.
Me dormí tras un par de horas, no dejaba de disfrutar el momento, pero teniendo en mente que el objeto de mi afecto obviamente estaba avergonzado y lo hacía puesto que no tenía más escapatoria, se preguntaran ¿Por qué no reparo la calefacción si pudo reparar una pared que estaba hecha pomada en un segundo?
Sencillo, es lo único que lo posiciona debajo de esa Amelia, el santo grial, ella puede “sentir el mundo” más bien, toda la masa hasta un alcance tan infinito como el universo mismo, de manera que puede controlarlo aun cuando no lo ve, a la distancia que sea, puede controlar cada objeto material de la naturaleza que tenga a la hora que quiera, de manera simultánea en cualquiera parte del universo, a nivel atómico, lo que más sencillamente quiere decir, puede tomar un trozo de roca y volverlo un diamante con alterar sus compuestos, sencillamente así, ella controla átomo por átomo, haciendo que la materia en general sea manipulable en cada aspecto, pero Feram no, él puede controlar todo hasta el nivel molecular, no es capaz de cambiar la composición básica de las cosas, él no puede controlar nada que no pueda ver y a diferencia de Amelia él no tiene un acceso directo al conocimiento universal, me refiero, el cerebro humano en su complejidad se reduce a masa, a impulsos eléctricos y composiciones químicas, nuestra memoria y pensamiento racional son controlados por algo muy diferente al alma, que se encarga más que todo de los sentimientos, pero aun así está fuertemente ligada con el cerebro también, entonces Amelia puede, si se le llama así, leer la mente, Feram se resigna a tener una telepatía limitada y sencilla, con solo lo que conoce y puede ver, ella es omnisciente, omnipotente, es todo lo que nosotros atribuimos a un Dios por miles de años.
Un equipo de calefacción tiene piezas pequeñas que no son visibles a simple vista además de que no debe tener idea de cómo desarmarlo y volverlo a armar, puede que lo arregle en un futuro cuando aprenda a hacerlo, ¿les dije que ellos no olvidan? Si, los monstruos no son físicamente capaces de olvidar detalle alguno, pero no es que su mente se sature de recuerdos, se almacenan en una bóveda donde con algo de concentración y practica puedes entrar, de lo contrario es como si hubieses olvidado como cualquier ser humano, eso fue otro don o bien castigo que les dio el Dios que les creo.
La noche paso como si nada en un abrir y cerrar de ojos, cuando desperté el seguía ahí, aferrado a mi como si de ello dependiese su vida, seguía siendo una mañana muy fría, seguramente no le gustaría perder calor otra vez, me quede ahí hasta que despertó, dos horas después de que yo debería encontrarme en clases, podría renunciar a esas cosas por él, al fin y al cabo ¿ustedes sabían el secreto para enamorar a alguien a pesar de que este te rechace? Es fácil, los seres humanos estamos programados para enamorarnos de alguien conforme más tiempo pasamos con esa persona, por eso es típico enamorarse de mejores amigos o de gente que en un principio no nos gustaba, pero con forme más ratos compartimos con ella termine derritiéndonos, ese era mi plan de ataque, simple, sencillo, seguro, apostaría todo a que el aun pudiera enamorarse, aun pudiera sentir aunque sea algo mínimo, de todas maneras, dijo que terminaría solo, no que no pudiera amar.
Cuando despertó alrededor de las tres de la tarde se encontró conmigo jugando con mi celular, aun entre sus brazos, se extrañó un poco, se me quedo viendo un rato.
-¿Por qué no me despertaste?
-no le vi el caso, total no quería ir a clases hoy, además hacia frio en la mañana y se me ocurrió que era una forma de ayudarte. Ahora todos se preguntan ¿Por qué duerme tanto? Joder me canso de explicar cada cosa, maldito bicho más complicado que el sexo femenino… ahora sí, sabrán como Feram ya dijo con su millón de horas explicando varios puntos sobre lo que es y como es, que es fuerte y rápido, además de sus agudísimos sentidos, sabrán también que estos por razones lógicas gastan mucha energía, hay dos formas en las que la recuperan, con la dieta rara que llevan o durmiendo, pueden mantenerse despiertos de la misma manera por días, pero siempre y cuando duerman a proporción, tres días de no dormir una hora equivalen a una semana de sueño ininterrumpido, aunque al final de cuentas necesitan de los dos factores para estar al 100% de rendimiento, ellos solo comen azucares, ósea, dulces, comida chatarra, todo lo que a nosotros nos da una sobre carga de energía y luego nos produce un bajón, lo que nos engorda, todo eso a ellos les funciona porque lo asimilan lento y no pueden almacenar nada de eso en su cuerpo.
Mueran de envidia mujeres del mundo ¿alas? ¿Inmortalidad? ¿Fuerza? No eso no es nada comparado con el don de comer únicamente cosas deliciosas a montones y ser incapaz de engordar un gramo, es gracioso cuando lo piensas de esa manera.
Él se levantó entonces dejándome atrás en mi cama, entonces lo seguí, se fue directo a la cocina a devorarse un recipiente familiar de helado de vainilla, yo desayune como humano normal, a pesar de ser las tres de la tarde, al no haber comido nada para mí era el desayuno, mientras yo me embutía un plato de cereales no hablamos nada, no por el hecho de estar más concentrados en el hecho de comer, sino porque nunca lo hacíamos, ya no cruzábamos mas palabras de lo necesario.
Inmediatamente después de que terminamos nuestro tragadero de comida él se alisto para salir, realmente después de anoche no quería volver a separarme de él, lo seguí de cerca en la casa, hasta que estaba a punto de cruzar el umbral.
-¿Dónde vas?
-¿Por qué de repente tanto interés en lo que hago? Además me ha seguido todo el día.
Me encogí de hombros no tenía respuesta para eso, el suspiro pesadamente, seguramente pensaba que se me estaba saliendo la curiosidad de las manos, seguramente pensaba que me había puesto a pensar en su palabrería loca del principio y se sentía culpable por dejarme confundido.
-sabes… olvídalo, puedes venir conmigo si quieres, pero arréglate rápido, vamos a ver a alguien importante, no debes parecer un tonto frente a él, te recomiendo desde ahora que no debes decir nada, no respondas más que lo más indispensable, no es bien visto que ande con personas normales y poco aptas.
-¿poco aptas? Basta con decir que aquello me ofendió, bastante.
-gente que no tiene las características psicológicas para ser parte de la legión.
-¿Qué te hace pensar que yo no puedo?
-no se aceptan ovejas ciegas, idiotas o depravados ¿adivina en cuál de las categorías entras tú?
-pero… estoy seguro que hasta a una oveja se le puede enseñar…
-¡¡bueno!! Que digas eso es el primer paso, tal vez no seas caso perdido… pero no es que pueda tomar esa decisión, mucho menos que quiera convertirte, créeme, ese privilegio no te llegara del cielo, debes ser especial de cierta manera, aunque admitiere algo, con ese cabello morado que tienes… me da mucha curiosidad como lucirás con las alas… en fin, deberás dejar una solicitud si en verdad deseas convertirte, como ya te dije hay cupos limitados.
Explicación again, solo pueden existir 3000 monstruos a la vez, si se intentase convertir al número 3001 este solo moriría, al igual que el monstruo que lo estaría convirtiendo, de esa manera también se abre el espacio para alguien nuevo, supongo que es así para crear algún tipo de equilibrio, tras sus palabras que me esperanzaron de alguna manera corrí a arreglarme lo mejor que pude, según su forma algo elegante de vestir supuse que era algo bastante formal, estando presentable en pocos minutos baje a buscarlo, partimos juntos en un taxi y llegamos a una casa enorme, una mansión de roca, pero no tenía más de un par de años de construida, aunque lucía un estilo colonial, la forma era algo cubica aunque con una cúpula pequeña en el medio del tejado de dos aguas, tenía un jardín amplio lleno de plantas que cubrían la visión del entorno, una reja enorme que restringía el paso a este jardín, las ventanas de la planta inferior tenían espacio para plantar unos rosales, las enredaderas subían por rejillas de metal delgado en las paredes colocadas especialmente para eso, el piso superior tenía dos balcones amplios, con sillas y mesas de té para contemplar el jardín mientras se disfrutaba de una comida en la tarde, había un ventanal enorme que decoraba un lado derecho del muro enorme que albergaba la totalidad de ventanas y puertas, la principal tenía un porche amplio con pilares de granito o roca y era de metal, caminamos a través del paisaje que ya de verlo te hacía sentir especial, tocamos la puerta y en segundos o menos nos abrió un joven de máximo veintitrés años, cabello negro, ojos azules no tan lindos como los de Feram pero con un color más intenso, era muy apuesto, destructoramente apuesto, traía puesta una camisa color cerezo oscuro, con cuatro de los botones superiores sueltos, unos pantalones de vestir, pero la camisa no estaba acomodada en estos, su apariencia tanto elegante como seductora y desarreglada llamaba la atención, nos recibió con una media sonrisa, puede que parezca un cretino, pero no podía dejar de caerme muy bien, ¿sería ese el sujeto con el poder del agrado?
-hola, Daimon
El tono de Feram al hablarle era algo nuevo para mí, estaba… ¿nervioso? No… pero cuando lo decía lo hacía sonar importante, no como cuando llamaba a todos los demás, incluyéndome, celos una vez más amenazaban con devorarme.
-¿y este quien es Feram?
-es Alex Rechel, Alex él es Daimon Croow
El sujeto me extendió la mano y yo la estreche, no podía evitar de pensar que sería el inicio de una larga amistad, aunque los celos hacia el crecían, mi simpatía también.
-todo un gusto Alex, si mi querido Feram te a traído como compañía a pesar de saber lo importante de esta reunión debes ser importante…
Sus ojos casi emanaban su espíritu seductor, rudo y arrogante, sus palabras eran fluidas y cautivantes, pero sabían a sarcasmo, al del más doloroso y condescendiente de ellos, una vez en la sala de la casa, que era integra de madera, puesto que los muros estaba forrados de estanterías con libros y había un balcón que cumplía el papel de pasillo en el piso superior al que se accedía por la escalera al lado izquierdo de la sala con la chimenea a tres metros, los barandales tanto del balcón como del acenso a este eran de metal pinto de negro con ondulaciones y decoraciones de naturaleza floreal, los sillones de cuero negro y la mesa de café en el centro daban el ultimo toque, junto con un mini bar lleno de licores que parecían costosos, nos sentamos en los sillones, nuestro anfitrión en el individual, mi compañía y yo en el doble, primero un silencio, luego la voz de Feram rebotando en todo.
-bueno, a lo que nos ocupa, creo que ya sé dónde está, intentare contactar con ella esta vez, si no se le da por huir como la última vez, no entiendo por qué no se va más lejos, porque no borra las pistas, sabe dónde estoy y que hago todo el tiempo, lo sabe de cada persona en este miserable planeta…
El otro rio por lo bajo, estaba mirando a un lado de la habitación como si no fuéramos lo suficientemente importantes como para que nos mirase directamente, volteo a vernos antes de responder, manteniendo una sonrisa misteriosa que mantenía la soberbia y algo de malicia.
-ella jamás fue famosa por actuar con coherencia, pero eso la hace más de temer, no te preguntes que hace y ve a hacer lo que te ordeno el mandamás, aunque realmente creo que se está comportando como un imbec…
No le dejo terminar, el castaño respondió molesto cortándole de inmediato la última palabra.
-Daimon, no hables así del cabecilla, mucho menos de tu maestro.
¿Qué? Entonces este sujeto… mejor amigo de Feram… el poseedor del poder del agrado y también como entendí… basándome en las anteriores palabras de Feram… “el cabecilla y su aprendiz, que con el santo grial eran los tres monstruos más antiguos e importantes de toda la legión” este sujeto ¿era el segundo cabecilla de un grupo holocaustico de poder inimaginable de criaturas de origen misterioso?
Bueno el sujeto podía ser lo que se le diera la reverenda gana de ser, todo lo que me importaba eran los ojos con los que le veía Feram ¿creen realmente que a él le importa un sorete como ese sujeto le llama a su maestro? analícenlo por un momento, no tiene sentido, solo que ese tipo… tenía una especie de facilidad para hacerlo enfadar, por una sola y obvia razón, le gustaba, ese maldito Daimon, era mi rival.