- Luffy es imposible que Sanji se convierta en un androide por esto no digas idioteces - le regaño Nami,- ni un monstro marino, porque le dices eso Usopp - el hombre con la nariz larga y pelo rizado levanto los brazos en inocencia, los ojos de Luffy parecían estrellas, brook se había despedido temprano diciendo algo sobre ir a una gira esta semana y que tenía que partir, no sin antes agregar un discurso sobre las bragas que lo hizo recibir una paliza de parte de la Peli naranja, las enfermeras se habían llevado a sanji de nuevo pero esta vez solo junto a unos doctores para ayudarlo a cambiarse, por fin podría retirarse, los truenos centelleaban en los cristales del edificio.
- ¿ya es tiempo? - un hombre moreno con tres coligues titilando de su oreja y el pelo mojado apareció tras de ellos haciendo que Usopp se llevara las manos al pecho alegando un infarto.
- no asustes así, mi vida corre peligro por culpa de ello - Usopp no era miedoso o almenas ya no tanto pero la forma de zoro de aparecer de la nada no era buena para el corazón de nadie.
- si, en unos momentos nos lo podremos llevar - contesto la peli naranja
Zoro llevaba puesta una chaqueta negra abrochada dejando ver el cuello de una playera roja y unos jeans, algo casual pero elegante de alguna forma; su apariencia viril lo hacía sobre salir más estando junto a Luffy, más de una de las chicas que salían del hospital pasando la gran entrada donde estos de encontraban esperando se les quedaron mirando, siendo olímpicamente ignoradas por ambos.
- dime Zoro, ¿te tardaste tanto porque te perdiste? - pregunto a su lado Usopp inocentemente
- cállate - contesto fulminándolo, era cierto que para llegar a la planta baja había tenido que recorrer media hora todo el hospital pero no lo quería admitir, la madurez de los años no habían cambiado esa parte en su conducta u/o orientación, Robín y Franky se despidieron Iceburg le había llamado al peli azul por un contrato y Robín estaba sumamente cansada la chica abrazo a Nami y con un saludo de mano se despidió de todos adelantadle a Franky, este paso a un lado de zoro.
- Estaras bien, tomate el tiempo que necesites, yo me encargare de tus trabajos mientras tanto no te presiones
- el mayor sonrió apretándole el hombro
- gracias amigo, solo me ausentare unas semanas en lo que Sanji se adapta, cualquier cosa llámame - sonrió de medio lado
- oí eso lo debería decir yo - el mayor rio y abrazo rápidamente al peli verde - pasaremos en cuanto podamos, suerte - y con eso y una palmada en la espalda para el moreno se dirigió a alcanzar a su esposa.
Tiempo después un hombre grande de raza afroamericana traía a Sanji bajando el elevador en una silla de ruedas su pelo levemente mojado decía que le habían hecho darse una ducha para luego ponerse el conjunto de chamarra negra idéntica a la de Zoro lo cual el chico ignoro, Nami lo había hecho a propósito, su sonrisa la delataba <<arpía>> pensó el peli verde fulminándola lo que a esta no le afecto, Sanji traía unos tenis y un pantalón de mezclilla negra nada de trajes por ahora, demasiado ajustados según chopper, el hombre grande que empujaba la silla les entrego al rubio haciendo firmar unos últimos formularios que para sorpresa de Sanji los lleno Zoro tranquilamente antes de voltear a verlo.
- ¿nos vamos? - pregunto al chico en silla de ruedas, podía caminar perfectamente solo le dolían los músculos pero había sido obligado a ir ahí al menos hasta su casa.
-¿a dónde marimo? - pregunto con desconcierto
- a Narnia - respondió sarcásticamente; a lo que nami volvió a intervenir, la tensión era tanta que podría cortarse con un cuchillo.
- Zoro te llevara a casa
- hehehe ¿Porque tengo que ir con la marmota? - pregunto, sacando una vena en la frente del moreno, y es que podría ser lo que quisiera pero Sanji era el único capaz de cambiar la expresión de su cara.
- no te quejes, lo entenderás cuando llegues
- si es que llegamos con su sentido de la orientación - se quejo
- te callas, que tu no recuerda así que te quedas quieto y dejas llevar - sanji cerro la boca, se despidieron de los chicos en el estacionamiento, Usopp corrió como rayo, Kaya lo esperaría para cenar, Nami se despidió de Sanji y Luffy se acercó a Zoro pidiéndole ir unos pasos más haya.
- Zoro, cuídalo
- Lose
- y cuídate
- Lose - suspiro-
- también evita que te mate cuando se entere shishishi - rio
- hare lo posible
- Los recuerdos del amor olvidados están ahí, no te rindas - palmeo su hombro antes de irse junto a Nami, los observo alejarse en su auto
- marimo… ¿algaaa? - el llamado volteo fastidiado.
- ¿qué?
- ¿te quedaras ahí a hacer fotosíntesis? o ¿nos vamos? - pregunto
- ya - fue la única respuesta, se acercó a empujar la silla, el ruido de las piedritas brincando contra las ruedas era el único
- Marimo - su llamado fue ignorado
- Marimo
- (...)..
- Marimo
- ( ...)
- CON UN CARAJO MARIMOOO!!!-grito el rubio ante la falta de atención.
- ¿qué quieres cejillas?
- no, nada solo intentaba ver si mi vos hacía eco en tu cabeza de lechuga - dijo con sarcasmo zoro gruño
- ¡¡PUES NO ES QUE ME QUEJE PERO AL MENOS QUE TODO EL MUNDO TENGA LA MISMA PLACA Y AUTO, YA HEMOS PASADO 10 VESES POR AQUÍ!! - levanto la vos
- intento encontrar el auto si - contestó al grito - no recuerdo donde esta
- caminado en círculos nunca saldremos marmota verde
- Sanji no estaba del mejor humor, había perdido 10 años de memoria, lo habían revisado en todos lados y quería dormir sin contar el hecho de que quería empezar a llover
- al menos dime que auto o si no me hare viejo
-no te quejes cejillas, es un Impala color negro del 67 - respondió al fin alzando la cabeza y tratando de orientarse en el lote de autos el mar se veía furico a lo lejos igual que su conciencia.
- mmmm - medito el rubio alzando la mano hacia una dirección - es por haya
- he
- QUE ES POR HAYA ANIMAL - grito moviendo la mano en manera de señal - ¿O A CASO HABLO EN GRIEGO?
- Ya entendí cocinero no te erices o todo tú se volverá una ceja - contesto dirigiéndose hacia la dirección encontrando por fin el auto
- todavía que te ayudo bastardo - rechisto
- ¿cómo supiste? - hablo el peli verde
- el auto me llamo la atención cuando lo vi a lo lejos en una de tus vueltas en círculos - contesto, zoro asintió pensativo regresando las manos a los costados parándose frente a la puerta del copiloto y Sanji apoyándose al auto sin avisar se paró recibiendo con esto un mareo
- Idiota no te pares así - zoro corrió a sostenerlo de la cintura, el rubio sintió escalofríos, el tacto de algún modo se le hacía familiar, antes de que pudiera siquiera objetar Zoro lo levanto con un brazo abriendo la puerta con la mano libre
- bájame bestia que no soy una mujer - intento alejarlo
- lose Sanji solo quédate tranquilo por un puto minuto - sanji paro en seco esa respuesta le sonó un poco extraña y en la confusión Zoro lo metió al auto cerrando la puerta, para cargar la silla a la cajuela y dar la vuelta hacia el volante, El rubio observo la tapicería y esculco la guantera encontrándose con dos cajas de cigarrillos, curiosamente de su marca favorita, busco un encendedor
- ¿qué haces? - Zoro había subido ya al carro poniendo las llaves en el arranque
- busco un encendedor - contesto moviendo en la mano la cajetilla de cigarros
- en la parte de atrás - señalo el peli verde, Sanji se volteo encontrando un encendedor familiar, era el mismo que traía desde niño, uno viejo de metal; anteriormente de Zeff.
- ¿qué hace esto aquí? - pregunto
- ¿qué cosa?
- ¿esto? –
- ¿El encendedor?
- no, la linda tapicería, obvio que el encendedor animal-
Dijo esta vez agitándolo en frente de la cara del peli verde,- con sarcasmo- de haber estado conduciendo habría logrado que chocaran en caso de Sanji por segunda vez en la semana.
- imbécil no hagas eso o harás que nos maten - Zoro empezó a mover el vehículo hacia la salida.
- ya, ¿pero porque está en tu auto mi encendedor? ¿Y los cigarros?- dijo mientras encendía un cigarrillo y abría la ventana, el humos se deshilo en la húmeda noche ascendiendo por el manto negro iluminado por farolas recién encendidas, el cielo tronaba.
- ha eso, - por fin contesto zoro mientras salían del estacionamiento - este no es mi auto
- como marimo? - sanji se desconcertó, tirando la colilla del cigarro por la ventana, lo aspiro tan rápido, hacia dos días que no lo fumaba, la sensación fue única.
- ¿qué cosa? - pregunto el peli verde viendo al frente la carretera la noche se adentraba y las nubes tapaban la luna, la única luz era la de las tiendas y farolas del caminó
- ¿cómo que no es tu auto? Por si no recuerdas tengo amnesia y todavía no leo mentes, explícate - bramo el rubio
- Hahn - suspiro sabía que en algún punto tendría que dar explicaciones- no es mío, este es tu auto, por eso tus cosas están aquí - zoro evito decir que aunque el auto si era de Sanji, él se lo había dado como regalo hace unos años, el rubio estaba ya confundido como para recibir más <<que no estoy amnésico por un accidente de auto?>>
- ¿pero yo estrelle mi auto no? - estaba confundido, ¿el impala era suyo?
- estrellaste el mío, el tuyo es este - contesto zoro viendo hacia la carretera, su cara imperturbable seguía presente.
- no entiendo una mierda - Sanji agitó sus manos resonando contra sus piernas - ¿porque tienes tu mi auto?
- pensó y reformulo la pregunta- mejor aún ¿porque me estrelle yo con tu auto? marimo?
- zoro suspiro, con la mirada fija en la carretera- ciertas cosas pasaron - respondió -
- ¿qué cosas?
- cosas,-murmuro- no es fácil explicarte cuando estas amnésico - sentencio con fastidio y apretó el volante, pasaron un tiempo en silencio, pasaron justamente enfrente de un Oxxo antes de doblar la esquina, Sanji hablo.
- marimo, sé que algo raro pasa aquí no soy idiota...
- lo dudó - respondió el peli verde por inercia, el rubio lo fulmino
- bastardo, lo que te decía es que no entiendo una mierda y si no me explicas menos!! - se alteró un poco, zoro no sabía qué hacer, no era fácil soltarle la bomba así como así cuando solo recordaba sus días de adolescente, y no eran muy amigables en ese entonces.
- ya casi llegamos solo cierra la boca y promete no alterarte, lo entenderás cuando llegamos cocinero - sentencio el moreno suspirando, apretó los puños al volante dejándolos blancos, Sanji asintió con la cabeza y se recargo hacia atrás volteando a ver la ventana, las pequeñas chispas de lluvia llenaban el cristal, zoro prendió el parabrisas cuando la tormenta se intensifico << que es lo que este marimo está ocultando, que olvide>> la cabeza de Sanji vagaba en confusión, vio entre la oscuridad la entrada a la zona residencial casas y más casas de tamaño inmenso volteo la cabeza viendo hacia el frente, casi llegaban a su casa Zoro no tenía una puta idea de cómo explicar algo que nunca pensó en tener que explicarle al Rubio << que mierda hago>> bajo la velocidad, unas rejas enormes se abrieron frente a él dándole el paso, sanji abrió los ojos la casa era gigantesca, no se veía muy bien por culpa de la lluvia pero era hermosa y el jardín inmenso la casa que Sanji siempre quiso para pasar sus días, la decoración de la fachada tenía su marca imborrable, un hombre encapuchado se acercó al auto cuando Zoro freno, el peli verde bajo la ventanilla.
- somos nosotros Yousaku - dijo el moreno
- Zoro- aniki respondió el hombre bajo el impermeable
- ya te retiras - pregunto el peli verde
- sí, Johnny fue a reparar unas cosas Nami-Nesama llamo diciendo que regresaban hoy así que espere un poco - la lluvia incrementaba, y sanji no entendía quien era ese sujeto
- que descansen te veo mañana Yousaku
- Si, espero se recupere pronto Sanji-aniki - sanji solo asintió con la cabeza y el hombre corrió perdiéndose en la noche, Zoro avanzó hacia la entrada de la casa.
- ¿quién es él?
- ¿Yousaku? - preguntó zoro y Sanji asintió.
- es un empleado y amigo, lleva años trabajando aquí
- ohm - sanji trataba de recordar algo sabía que estaba ahí como piezas rotas sin lugar todos sus recuerdos pero no podía conectarlos, cerró los ojos en fastidio.
- y porque mi casa es tan grande?
-(...) - no contesto y el coche paro de bajo de un tejado, zoro apago el auto y murmuró con miedo en su voz, por primera vez sentía un miedo acojonante pero estaba decidido - Pronto sabrás todo - dijo y bajo del auto la lluvia era más fuerte pero ahí no los alcanzaba, dio la vuelta para abrir la puerta de Sanji este estaba en shock, y un mierda su entendimiento se había ido de vacaciones.
- puedes caminar o bajo la silla? - preguntó preocupado desde la puerta abierta, Sanji salió del estupor la lluvia azotaba contra el pavimento creando un eco estridente.
- puedo caminar marimo solo ayudante a salir - guardo las cajetillas y el encendedor en su chamarra, zoro de acerco a ayudarle, este lo detuvo.
- solo dame tu hombro, ni se te ocurra cargarme de princesa bastardo,- sanji rechino los dientes, zoro asintió y lo ayudo a salir apoyándolo con las manos, hasta que el rubio agarro estabilidad.
- ya, ¿estás bien príncipe de los idiotas? - dijo zoro agarrándolo por la cadera, ahí estaba de nuevo la sensación electrizante en el rubio, jalo su chamarra antes de contestar y pararse recto
- cállate, marmota verde de mierda - zoro rio ante la cara del rubio y lo dirigió a la entrada, abriendo la puerta pequeña. Conectada a la puerta más grande, le cedió el paso al rubio que entro expectante antes de cerrar de nuevo, la decoración era agradable modernista sin perder lo ambiguo, muy ostentosa para el peli verde pero al rubio le gustaba el espacio.
- es grande - murmuró
- ni que lo digas,- el peli verde tiro las llaves en el tazón junto a la puerta y colgó su chaqueta en el perchero, dejando ver su camisa roja en tallada de manga mediana.
- ¿qué haces marimo? -Pregunto el rubio,
- me acomodo - el rubio siguió al peli verde por la casa hasta la sala acogedora y con una chimenea recién encendida se sentó en el sillón, por el gran ventanal siguiese notaba la tormenta recién desatada, sanji se paró frente a el espaldas a la chimenea sin prestar atención al decorado o algo más miro firmemente al marimo.
- porque te acomodas Alga? - pregunto el rubio con deje de fastidio, esto de no saber una mierda lo estaba cansando - no tienes que irte a tu casa o algo? - el moreno suspiro-
- esta es mi casa - respondió calmado con los dedos entre lazados, leve mente inclinado hacia delante, único ojo color negro observaba con atención al rubio.
- ¿y porque me trajiste a tu casa? - pregunto el rubio incrédulo.
- porque también es tu casa - sus miradas seguían fijas.
- ¿y es así porquee? - la duda en la cara rizada de sanji era de película - ¿qué motivos tendía para vivir con un alga parlante y bebedora? - Zoro mantuvo la calma cada movimiento del rubio era captado por él, su respiración, todo, de pronto recordó las palabras de su amigo, "has que no te mate"- sonrió de lado-, eso sí sería difícil - aparte por lo que comprendo yo estoy casado, ¿porque viviría contigo? Y mi esposa? - Sanji no quería conectar las ideas, tenia miedo, miedo de lo que muy en el fondo sabia que era verdad...