KAPITEL FJERDE:
Los grillos cantaban alegremente posados en las ramas de los árboles cercanos, la noche se cernía absoluta sobre aquel bosque, bajo un árbol grande de pino la atmosfera se sentía cargada de pasión y lujuria.
-mm Ahh, Ahh más rápido por Ahh favor- con la espalda recargada en el tronco de aquel árbol se hallaba gimiendo un doncel, un hombre alto y rubio estaba acomodado entre las piernas del chico penetrándolo frenéticamente, de pie con las piernas del menor enredadas en su cadera el muchacho se aferraba a su cuello para no caerse aunque las fuertes manos del hombre le apretaban las nalgas abriéndoselas más y dándole un sostén seguro.
-Eres tan estrecho Ahh- el rubio gemía de placer- Ahh si-
-eres hermoso- dijo viendo la cara sonrosada del doncel.
-Ahh, Ahh mas aki, AKIRAAAAAAAAA- el rubio dio un respingo y un dolor en su espalda y cabeza le hizo cerrar los ojos, al abrirlos nuevamente se encontró con un techo de color crema y sobre una superficie dura que identifico como el piso, giro su adolorida cabeza y se encontró con una cara ceñuda y un poco rosada en la cual unos ojos verdes le miraban con desaprobación, molestia y ¿excitación? No imposible, debió imaginarlo o el golpe le hizo daño.
-¿Da, Daniel?- pregunto el rubio y su cara enrojeció de vergüenza al pensar en sus delirios no aptos para menores y que el muchacho pudo haberlo escuchado.
Pero afortunadamente pareció que no.
--Señor ¿le pasa algo?- dijo el chico de cabellos naranjas mientras ayudaba al hombre a levantarse y al completar su tarea se sonrojó al notar el ENORME bulto en la pijama del mayor, decidió que era mejor no comentarlo desviando la vista a otra parte.
-no nada, ¿Qué haces aquí? Y…-al bajar la vista se topó con su abultado problema, de inmediato subió los ojos hacia Daniel pero este parecía haber encontrado algo fascinante y extraordinario en la pared detrás de él, contuvo el impulso de seguir su mirada y aprovecho la momentánea distracción del chico para sentarse en el borde de la cama y taparse su amiguito o más bien amigote con el primer cojín que agarro.
El chico se volvió a mirarlo para responder- nada en especial es solo que pasaba por aquí y escuche ruidos raros así que me asome para ver qué pasaba y también para advertirle que se le hace tarde para el trabajo- menciono de forma casual mientras señalaba el reloj en la pared.
-¡A! hoy es la junta no puedo faltar-el hombre se levantó de un salto olvidándose de su problema, Daniel retrocedió asustado- oh gracias, me quede dormido- dijo felizmente el mayor para posteriormente tomar a Daniel y besar su mejilla, Akira corrió al baño pero al llegar a la puerta se dio la vuelta y miro atrás avergonzado, la verdad lo golpeo como un bate de baseball ¡tenía una erección enorme y ni se acordó cuando se levantó! Daniel lo vio pero se hizo de la vista gorda y el rubio entro al baño corriendo soltando un suspiro de alivio por lo “despistado” que podía ser el chico.
-JAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA JAJAJAJAJJAJAJ-se carcajeaba el de verdes ojos sobándose el vientre con cariño- ahí amorcito pareciera que odias a tu padre le estas dando guerra jajaja-al parecer reconocer los cambios dramáticos en el humor del rubio se le hizo gracioso aunque al otro no tanto- Ahh benditas hormonas jaja-.
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-Akira, espera- un hombre alto de piel negra se acercó al rubio con un paquete entre las manos -Mery te mando esto-
-¿Qué es?-
-Hey, no nos avías contado pero que mal amigo eres- uno a uno los compañeros se le acercaron lo llenaron de paquetes, inclusive su jefe le entrego uno, Akira los miraba a todos con cara de ¡WATH!
-Pero ¿Qué les pasa?- dijo confuso a manos llenas pues ya no le cabían más paquetes.
-¡FELICIDADES!-
-Cuanto tiene-
Y los apapachos y felicitaciones iban y venían hasta que…
-BASSSSSSSSSTAAAAAAAAAAAAAAAAA- si, Akira se arto- ¡de que hablan!-
-como que no, serás bruto ¿no te has dado cuenta?-
-¿Qué?-
-Sí, tienes los síntomas ¡vas a ser padre!-
-¿Cómo?-
-si tu doncel esta embarazado, tendrás un bebé-
-¿cuál doncel, cuáles síntomas?-
-¿de verdad no sabes?- el rubio negó y el otro varón lo miro como si fuera un fenómeno de otro planeta- cundo un doncel se embaraza el padre varón siente parte de los síntomas además de que en cierta forma ayuda en el parto pues sufre parte del dolor, y tú has tenido esos síntomas ¡entiendes!-
-Pero yo no…-en ese momento lo asalto el recuerdo de su “sueño” y el extraño comportamiento de Daniel el día después “me caí en las escaleras de sentón y me duele un poco el trasero” –no puede ser- casi susurro el hombre y salió corriendo olvidándose de los regalos
CONTINUARA…